El Popular N° 208 - 16/11/2012

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    Viernes 16 de Noviembre de 2012

    N 208

    Edicin 20 pgs.

    16 de Noviembre/20123 poca - Uruguay

    $25

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    Viernes 16 de Noviembre de 20122

    Ao IV TAo IV TAo IV TAo IV TAo IV Tere re re re rcera poca cera poca cera poca cera poca cera poca DirectDirectDirectDirectDirect or Ror Ror Ror Ror Responsableesponsableesponsableesponsableesponsable: Gabriel Mazzarovich Consejo EditConsejo EditConsejo EditConsejo EditConsejo Editororororor Lylin Firpo,,,,, Juan Landaco

    El PEl PEl PEl PEl Popular Ropular Ropular Ropular Ropular Redaccin y Aedaccin y Aedaccin y Aedaccin y Aedaccin y Adminis t rac in:dminis t rac in:dminis t rac in:dminis t rac in:dminis t rac in: Batov 2079 Tel . 29291191 Fax: 29247056 Correo elec t rnico:[email protected]. ImImImImIm presinpresinpresinpresinpresin: Microcosmos SA. Cuareim 2 05 2. Tel. : 29 2470 00 Telefax 292412 20Permiso de MECPermiso de MECPermiso de MECPermiso de MECPermiso de MEC. Exp. 21 83 08Admitida la reproduccin total o parcial de los artculos indicando la fuente. Las notas firmadas pueden no ser compartidas por

    la lnea editorial y son responsabilidad de sus autores. Semanario de circulacin nacional.

    Querido viejo, admirado camarada d e siempre:Podra recordar hermosos momentos compartidosms de 30 aos atrs, pero me remito a una entre-vista en los 90 aos del Partido publ icada en Estu-dios 125 y cuyo contenido completo atesoro en su

    versin sonora.El ttulo de a quella en trevista es No digam os quin .N o f u e u n t t u l o c a s u a l n i t e n a r a z o n e s d eautodefensa. Recoga u n carcter que acompasiempre al herrero com unista de ley: no imp ortan nilos nom bres ni los ttulos. Eso que nos dijo lo tra du-ce nuestro conocimiento de su vivir como importa elquehacer humano permanentemente l igado a lasconvicciones revolucion arias que lo suste nta n. Y aslo tomam os, porque pareca lo ms justo.Fue una entrevista descarnada que nos dej la hue-l la profunda de u na vida que transit tod as las vicisi-tudes y contradicciones profundas que una organi-zacin revolucionaria puede a travesar. Pero qu trn -sito! Inclaudicable frente al d olor de si tuaciones in-ju st as Ped ro fu e sie m pr e l , fr en te a s m ism o y asus compromisos, no importaran incomprensionesdolorosas e injustas. No dej nunca de compartir ymultipl icar esos compromisos en su labor diaria ensu agrupacin, su com it, el barrio entero, sus veci-nos y amigos y su fam il ia tambin- y en los ltimostiempos aun superando dificultades fsicas.Esa entrevista compartida con su compae ra Beatriz fu er za Be at riz !- n o no s de ja ba du da de lo m s im -portante: la donacin de s mismo que nunca aban-don el viejo Pedro.Nos cost mucho d espedi r lo en esa cond ic in demuerte qu e por supuesto no es la ltima pero duelepro fundamente.Querido Pedro viejo, vivirs siempre, porque entre-

    gaste lo ms preciado de tu vida, lo compartiste conlos mejores que a tu lado estuvieron hasta el l t imomom ento, no pretendiste reconocimiento alguno perotuviste la gal larda de reconocerte a ti m ismo y a tusconvicciones. Grande, q uerido cam arada, seguirs

    siempre fiel y aunq ue resulte d ifci l , lo mejor ser imi-tarte, porque nos en seaste que fci l no es, pero simprescindible para transformar revolucionariamentela vida de la humanidad ! Y grande tambin es eseabrazo a Beatriz, Pablo, Pedro, los incondicionalesnietos y los compaeros que hicieron el aguantepara que tu ida d e esta vida fuera rodeada del amorque los comunistas tenemos por el ser humano fiel ala justa vida de la naturaleza.

    TTTTT. B .. B .. B .. B .. B .

    Nota a l p ie : En la reunin de la regional C de losseccionales Di Pascua, Luis Pisano y Lber Arce, coin-cidente con el da siguiente a la muerte de Pedro, sedecidi darle su nombre a la sesin. Fue conmove-dora la intervencin de un viejo camarada que porsu conocimiento directo destac el significado de lassituaciones dif ciles vividas por compa eros como Pe-dro en el trnsito decisivo del PCU desde la pocaanterior al 55. Haban dado en esa etapa destaca-da entrega comunista joven superando visionessaludablemente crticas y Pedro fue uno de los quesufriendo consecuencias negativas, nunca dej deser comunista entregado a la lucha revolucionaria ysiempre de masas.Un homenaje sencillo que seguramente se multipli-car en el Partido que tuvo el honor de contar con sumilit ante d e siemp re, el Pedro viejo, reconocido p ormuchos que lo quisieron a lo largo de aos.

    Muri Pedro Balbi Piano (Pedro viejo)

    El martes 1 3 se rea liz el Co-

    loquio Anlsis y significacin dela crisis del ao 2002 organi-zado po r el PIT-CNT en el salnde actos Enrique Iglesias delBanco Central del Uruguay.La actividad fue abierta por unabreve presentacin del coordi-nador de l PIT-CNT, FernandoPereira y luego se real iz unamesa donde expusieron: el mi-nistro de Economa y Finanzas,Fernando Lorenzo; el ministro deDesarrollo Social, Daniel Oleskery el economista y catedrtico dela UDELAR, Jorge Notaro. En elmarco de esta mesa tam bin hizouna breve intervencin del pre-

    s idente de l Banco Centra l de l Uruguay, Mar ioBergara.Posteriormente realizaron comenta rios a las ponen-cias presentadas la econom ista del Insti tuto Cues-ta-Duarte, Alejandra Pico y el contador y analistaeconmico Carlos Lupi.Cerr la actividad con una breve sntesis el coordi-

    Hemos pasado situaciones que no conocemos, quede ahora en adelan te es lo que nos proponem os, cono-cerlas.

    Hay un chico que estuvo preso, que hoy trabaja en laconstruccin, que en la entrevista ya sabamos que sufamilia tena una enfermedad en la piel por la que nopueden salir a la calle; no s cmo se llama, pero ade-ms de av ergonzarlas, se les deshace con el aire, no seatienden p orque les pasa eso, se avergenzan . Este jo-ven, al que no le ped autorizacin para escribir suhistoria, apareci un da en nuestro lugar y por elmagnfico vnculo, que lo llamara una sensibilidadespecial, que no todos ten emos, solo los o las elegidascuentan con ella, vino a buscar ayu da, dijo : no pue-do, porque quiero fumar bazoooko, no quiero otra cosa,y me gasto la plata y despus me siento culpable; pien-sa, total para que voy a ir, se la tengo que dar a mimadre y a mis hermanas, y me quiero olvidar que mivida es esta.Y nos deca esto delante de tres personas, as, sencilla-mente, y tamb in dijo: no les quiero fallar a ustedes,

    a vos Mnica que me hiciste el aguante, y ustedes, yyo s qu pasa despus, termino robndole a mi ma-dre, solo pafumar.En mi barrio est lleno, que te invitan por nada ycuando te das cuenta, ya n o podes salir, yo quiero pa-rar ahora.Vinieron las preguntas: lo primero - quers curarte?-S claro, no quiero ver a mi madre sufrir. Yo ven-dindole las cosas.El equipo se puso a trabajar, consiguieron todo contres escarba d ientes. Y as llegamos a l Portal Amarilloy ah hoy creo que hace como 6 semanas que lleva untratamiento para adicciones. No fue ni es fcil, hayque vigilar si va, y las primeras veces fue acompa adopor compaeros del equipo.Hubo que remontar en el trabajo, porque haba faltado,porqu e la disposicin al trabajo n o es el mismo. Cuandohablamos del mund o laboral, nosotros pedimos que los

    tomen con las mismas reglas, deberes y derechos de losdems trabajadores, pero sabemos que no siempre esigual y hay algn caso que definimos plantearlo desdeotro lugar. Remontar esto no es como imaginar unacometa, sino como un repecho del Cerro.Pero lo remontamos, explicamos, pedimos otra oportu-nidad y nos la bancaron y vino el tema de la vivienda,y recurrimos al Plan Juntos, que fue en tres das, quevio las condiciones en las que estaban y ya iban a man dara que fueran los compa eros del SUNCA, para que h i-cieran un estimativo de materiales y ver cuando pode-mos construir solidariamente su casa.Y ah toco la Salud, porque estas mujeres no estabanatend idas, y si bien no correspon da la invasin en suhogar ya qued registrada en la policlnica del barrioy van a ser atendidas a la brevedad.Lo primero que hizo la arquitecta fue preguntarle cun-to ganaba y pedirle los recibos. Esto no se trata de

    asistencialismo. Se trata de un a experiencia mara villosade participacin popular, de la cual debemos ser parte.Quisimos compartir esta historia real, de las que haymuchas y quizs bastantes ms complejas, porque es-tamos invo lucrados varios actores sociales distintos yde diferentes ministerios que abarcan las polticas so-ciales.Sigo repitiendo lo que me dijo alguien que ojal pue-da ser un compaero de ruta: n o hicimos la revolu-cin, apenas intervinimos en una familia, pero si conellos logramos que su vida mejore, eso solo alcanza,porque tienen el mismo derecho que todos nosotros atener la p osibilidad d e elegir y capaz, de ser felices.

    Un da vaa venir lo mejor

    Por Alicia Bello

    Coloquio del PIT-CNTy la cobertura de EL POPULAR

    nador del PIT-CNT, Marcelo Abdala.EL POPULAR brinda a sus lect ores en esta e dicinlas intervenciones completas de los ministros Fer-nando Lorenzo y Daniel Olesker. Por razones deespacio queda p ara la prxima edicin la interven-cin de Notaro y un resumen general.(Ver pginas 4, 5 , 6 y 7)

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    Recordar, deb atir y entender a laprincipal crisis de la sociedad uru-guaya en los l t imos 50 aos escentral para entender m ejor el pre-sente, y sobre todo, para asum ir aplenitud la construccin de un fu-turo dist into.La derecha acepta a regaadientesdebat ir sobre el 200 2, sobre cmose lleg a la crisis, qu procesoseconmicos, pol t icos , soc ia les ,culturales nos condujeron a el la,qu decisiones se tomaron y sobretodo, claro est, quines las tom a-

    ron.

    En estos meses desde la prensa y desde al-gn que otro distinguido foro empresarial seha planteado la tesis oficial de la derecha quetiene tres componentes bsicos: la crisis fueprovocada desde el exterior, fue esencialmen-te bancaria y financiera, toda la sociedad fueperjudicada por igual. Es una tesis m uy conve-niente, di luye las responsabi l idades, m inimizasu d imensin y encima d is imula sus conse-cuencias.Esa tesis es falsa. No fue eso lo que ocurri yno fueron esas las razones.Por eso es tan im portante el coloquio organiza-do po r el PIT-CNT el martes e n el Ban co Central

    del Uruguay.

    El debate .El debate .El debate .El debate .El debate. El coloquio del PIT-CNT fue tras-cendente por varias razones. Primero porquetiene una dimensin simbl ica muy importan-te: es la primera vez que la central obrera orga-niza un debate en el Banco Central del Uru-guay, y nada menos que sobre la cr is is de2002, que tuvo en e l s is tema f inanciero uncomponente central, no el nico, como vere-mos. Es signo de los cambios que el BCU reci-ba en su seno a los trabajadores y que al l seexpresen visiones tan d istintas a las que alber-g en el 2002 .Segundo porque m uestra una vez ms al PIT-CNT como actor central de la real idad nacio-nal, capaz de colocar ejes de debate, de gene-

    rar espacios de reflexin y de construir pro-puestas con una mirada hacia toda la socie-

    dad .

    Tercero por la calidad lograda en la convocato-ria. Participaron del coloquio el ministro de Eco-noma y Finanzas, Fernando Lorenzo, el minis-tro de Desarrollo Social, Daniel Olesker; el pre-sidente del Banco Central del Uruguay, MarioBergara; e l economista y catedr t ico , JorgeNotaro ; la economista de l Inst i tu to Cuesta-Duarte, Alejandra Pico y el contador y analistaeconmico Carlos Lupi.

    A lgunas conc lus iones po l t i cas .A lgunas conc lus iones po l t i cas .A lgunas conc lus iones po l t i cas .A lgunas conc lus iones po l t i cas .A lgunas conc lus iones po l t i cas . Es impo r -tante rescatar a lgunas c laves po l t icas paraasumi r l as co lec t i vamen te . Fe rnando Lo ren -zo comenz su exposic in rechazando la te-s i s de l a de recha de que todo l o buen o y l omalo v iene de a fuera . Para deci r lo ms c la-

    ro , e l d i scu rso dominan te q ue sea la que l ac r i si s de 200 2 fue causada po r l a heca tom-be de Argent ina y la deva luacin de Brasi l yque l a recupe rac in ac tua l de l Uruguay esf ru to , so lamen te , de una coyun tu ra ex te rnafavorab le .La cr is is de Uruguay no empez en e l 2002.Como bien se seal en el coloquio Uruguayvena con recesin econmica, es deci r concada de su PBI, desde 19 98 , cuatro aos con-secut ivos. Acumulaba adem s ms de dos d-cadas de polt icas neol iberales, durante el go-bierno de Luis Alberto Lacal le se privatiz todol o q u e s e p u d o , s e g e n e r u n a a p e r t u r aindiscriminada y uni lateral de la economa, sedesmantel la produccin industrial a nivelesnunca v is tos, se perd ieron 1 00 mi l puestos de

    trabajo, se desregul el mercado laboral y seel iminaron los Consejos de Salario. Todo estounido a crecient es niveles de dfici t f iscal, au-mento de l endeud amiento en d lares y reduc-cin al mnimo del pape l del Estado, en regula-cin y en inversin p bl ica. Era el Uruguay pla-za f inanciera reg iona l y de serv ic ios. Era e lt i e m p o d e l d i o s m e r c a d o y e l f a n a t i s m oneol iberal, el del ir io del f in de la historia, elreinado de los Chicago Boy, las relacionescarnales con EEUU.Esas decisiones polt icas, continuadas bajo elsegundo gobierno de Sanguinetti y l levadas alextremo en el gobierno de Batl le dejaron al Uru-guay con muy poca capacidad de respuestaante los impactos negativos de la devaluacinbrasi lea y de la crisis argentina.

    La mejor demostracin de la influencia de lasdecisiones polt icas nacionales es que en el

    resto de los pases de Amr ica Lat ina los

    efectos estuv ieron muy le jos de ser tan dra-mt icos, es ms, hubo pases que hasta cre-c ieron mientras Uruguay se hunda y Argen-t ina vea desmoronar e l sueo faran ico deMenem y Cava l lo de ser un pas de l pr imerm u n d o .Pero adems en las decis iones en medio dela cr is is hub ieron errores y gruesos: hubodos a justes f isca les, se sa lv a los bancos yse bajaron los salarios y las jubi laciones, semul t ip l icaron la pobreza y la ind igencia , 100mi l u ruguayos emig ra ron , se abandona ronlas po l t icas socia les, se redu jeron dramt i -camente los recursos para educacin y sa-l u d .En e l ao 2 002 se hund i un modelo de pas,

    la crisis era del ap arato productivo, de las rela-ciones sociales, de las ideas y tambin banca-ria y financiera. Ese proyecto de pas no es hu r-fano, es el modelo d e pas neol iberal, el de laderecha, el de las clases dominantes. Es cier-to que h ay iconos de esa crisis como los Rohm,los Peirano y el Grupo Moon. Pero no es me-nos cierto que ellos aprovecharon o fueron partede un modelo que instrument y defendi laderecha y las c lases dominantes: Laca l le ,S a n g u i n e t t i , B a t l l e , De P o s a d a s , B r a g a ,Cambn, Davrieux, Zerbino, Bensin, la Cma-ra de Comercio, la Asociacin de Bancos, laAsociacin Rural, El Pas, Bsqueda, El Ob-servador y un conjunto de anal istas econmi-cos y consultores, que ahora juegan al yo nofu i .

    Y tambin es cierto que el Uruguay sal i deesa postracin nacional y se puso de pie conel acceso al gobierno del Frente Amplio, conpolt icas distintas, que apuntaron a aten der laemergencia social, a hacer confluir el crecimien-to con la distr ibucin del ingreso, a aumentarla presencia del Estado como regulador y comoactor poltico y econmico.En ese marco polt ico es imprescindible sea-lar el papel del movimiento pop ular y en parti-cular de los trabajadores organizados y su lu-cha, tanto para enfrentar las peores conse-cuencias de la debacle como para generar unaalternativa.Estos elementos son claves para el presente ytambin para el fut uro. El ministro Lorenzo lodi jo con todas las letras, estamos en otra si-

    tuacin, f ru to de la acc in de l gob ierno de lFrente Amplio y de la lucha popular, para en-frentar los efectos externos negativos, pero noestamos inmunes a el los. Entre otras cosasporque en el capital ismo sigue siendo plena-mente vigente la ley del desarrol lo desigual ycombinado.P o r e l l o e l n i c o c a m i n o p o s i b l e e s l aprofundizacin de los cambios y como ta mbindijo Lorenzo abordar los cambios estructura-les que Uruguay necesita.No hay atajos, ni camino del medio, la nicap e r s p e c t i v a r e a l p a r a n u e s t r o p a s e s l aprofundizacin del proyecto de cambios, conms gobiernos de l Frente Amplio y ms luchapopular. El otro camino, el de la vuelta de laderecha, el de la restauracin neol iberal, yasabemos donde l leva. Alcanza con mirarnosa nosotros mismos hace 10 aos o s i no, mi -rar hacia Europa ahora mismo, en este ins-tante .

    Por qu hablar del 2002

    El viernes pasado fal leci, a los 86 aosde eda d, Pedro Balbi Piano, afiliado al Parti-do Comunista de Uruguay en 1946 y mil i -tante de toda la vida.Herrero de profesin, pas en su vida y ensu mil i tancia, por todas las peripecias.

    Organizador obrero, constructor de Partido

    en las tareas ms comprometidas y abne-gadas, vendedor de Justicia y luego de ElPopular.Protagonista del viraje poltico e ideolgico

    del PCU en 1955 en el XVI Congreso, delproceso de unidad sindical y polt ico en elFIDEL y el Frente Amplio. Resistente a la dic-tadura y comprometido con la lucha popularhasta sus ltimos das.El Comit Ejecutivo del PCU expresa su do-lor ante su deceso y hace l legar al compa-ero Pedro Balbi miembro de esta direccin

    y a toda su fam il ia y compaeros un abrazomilitante.

    Comit Ejecutivo d el PCU

    Ante e l fallecimientode Pedro Balbi Piano

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    EL POPULAR publica la interven cincompleta del ministro de Economa yFinanzas, Fernando Lorenzo, en el co-loquio del PIT-CNT sobre la crisis del20 02 real izado en el Banco Central delUruguay.

    Es un verdadero gusto participar deesta instancia convocada por los com-paeros de la central de trabajadoresen varios oportunidades nos ha toca-do op inar tempranamente cuando lacrisis se estaba gestand o y en los mo-mentos posteriores a lo mas lgido dela crisis. Pero en este ao en particu-lar, en las diversas instancias y en lasd i s t i n t a s c o n m e m o r a c i o n e s a d i e z

    aos de la crisis esta es la primera ynica oportunidad en la que me h a to-cado hablar. Agradezco a los trabaja-dores, que le permitan al ministro deEconoma y Finanzas hacer una mira-da en retrospectiva y en perspectiva deacontecimientos que tu vieron y tienenenorme significacin para el pas, laeconoma, la sociedad y la poltica.Voy a tratar de reflexionar desde miposicin actual, que estoy a cargo delministerio de Economa y Finanzas. Lareflexin necesariamente la t engo queenfocar desde las claves que quienesestn a cargo de la conduccin de lapoltica econm ica del Uruguay hoy tie-nen acerca de lo que ocurri, y sobretodo para pon erlo en paralelo con lo quese est haciendo y lo que se debe ha-cer en el pas. Pretendo evitar cualqu ieracademicismo o cualquier abordaje delt e m a q u e n o t r a t e d e a s u m i respecficamente cual es el papel en elque hoy nos toca jugar.

    En segundo lugar , qu iero adver t i r lodesde el principio, quiero alejarme porcomple to de una idea que por momen-tos ha tratado de calar hondo en nues-tro pas. La idea de que todo lo buen oy lo malo v iene de a fuera , por tantoasumindolo as hay una forma de pre-sentar y discutir sobre este evento, que

    es una especie de ejercicio carente dea c t i t u d e s , d e r a c i o n a l i d a d e s , d eposicionamientos y de responsabi l ida-des .Voy a tratar de si tuarm e en las antpo-das de este razonamiento. En el sen-tido de que lo que ocurri y las cosasque nos pueden ocurrir, nos tienen atodos los actores de la sociedad, comoprotagonistas y no como alguien quepuede de jar le esa responsabil idad aotro. Creo que estas precisiones im-portan, unas sobre la posicin desdela que pre tendo rea l izar mi presenta-c in, y en segundo lugar , que abor-daje pretendo desechar completam en-te. Eso va a tener im pl icaciones sobre

    las reflexiones que tengo hacia el pa-sado y el futuro, que es el nico apor-te que puedo rea l izar en esta instan-cia.

    La gestacin de la crisis

    En primer lugar mi reflexin tiene u nad imensin tempora l que nos co locahacia algo ms de diez aos. Voy a si-tuarme en lo que voy a l lamar: el pro-ceso de gestacin de la crisis. Luegovoy a atravesar la crisis y proyectarmehacia adelante pero no pretendo hacerun an l is is acabado de todo lo quehemos hecho desde que somos go-bierno; si quiero hacer alguna s reflexio-nes sobre que aprend imos de eso ycual ha sido el enfoque con el que he-

    mos trabajado.Hay dos dimensiones que voy a tenerque estar haciendo interactuar cons-tantem ente: una tiene que ver con fra-gi lidades y debi l idades, durante m uchotiempo pusimos nfasis en las vulne-rabi l idades, y en otro plano hay queh a b l a r d e l o s a c t o r e s y l o sposic ionamientos de estos actores,para entender la fo rma en que esasdebilidades y esas acciones convivie-ron para expl icar los hechos y sacarlecciones hacia el fu turo.En el terreno de las debi l idades y fra-gi l idades, quiero hacer una pequead i s t i nc in desde e l pun to de v i s tametodolgico y es que cuando nos re-

    f e r i m o s a u n e p i s o d i o c o m o e s t einteractan al men os tres tipos de vul-nerabi l idades: unas que estn activasy son pre-existentes a los problemas;otras que los problemas gestan y lasvuelven emergentes, y otras que sonsimplemente debi l idades latentes, quetampoco hay que ocultar.Quiero si tuarme en el perodo en quese agota el perodo de crecimiento dela economa uruguaya, me sito a fina-les del ao 1998. Es un perodo quetiene dos cal i f icativos desde el puntode vista econmico: es un perodo deestancamiento econm ico y de fuertesdesequ i l ib r i os fundamen ta les en l aEconoma. Desde el momento en quese inicia este estancamiento hasta elepicentro de la crisis quiero decir cua-les eran las vulnerabi l idades hasta esemomen to, l istarlas, para que no qued e

    ningn lugar a dudas de qu e l legamosa enfrentar problemas en unas condi-ciones que nos retaceaban y nos l imi-taban la capacidad de accin porqueesas si tuaciones estaban activas.Primero, l levbamos casi cuatro a osde recesin econm ica, cada sistem-tica del nivel de actividad. Segundo,muy magras por no decir nulas pers-pectivas de crecimiento, no es solo queUruguay tena cuatro malos a os, sinoque quienes anal izaban la economauruguaya y quienes tomaban decisio-nes, prcticamente miraban al futurosin ninguna perspectiva. Tercero, alto

    desemp leo previo a la crisis, subempleoy emigracin, caracterizando un fun-cionamiento de la econom a y de la in-tegracin de los trabajadores al mun-do del trabajo qu e es indisociable comoelemento de contexto. Todo esto t rajopauprrimos niveles de inversin pro-ductiva, pbl ica y privada. Un sectorprivado desalentado y un sector pbl i-co que hab a dec id ido que muchosaspectos, entre el los los energticos,haban dejado de ser un factor de pre-ocupacin.Esto convive con dos elementos fun-damentales: Uruguay viva en el ao2002 e l cua r to ao consecu t i vo dedficits fiscales crnicos superiores al

    4% anual, esto genera deuda, como encualquiera de nuestras casas, los d-fici ts se pagan con ahorro o con deu-da; Uruguay ahorro no ten a entoncesse endeudaba. Y una deuda pb l icaabso lu tamente do lar izada s in que anadie le preocupara, se nos daban ar-gumentos financieros, nos decan: sies mucho ms barato endeudarse endlares que en pesos por qu vamosa endeudarnos m s caro? Adems unadbi l regulacin y a una supervisinbancaria absolutamen te frgi l . Porquetampoco es que enfrentamos los pro-blemas en un contexto de fortalezasinsti tucionales de quienes tenan queponer a resguardo a la comunidad delos avatares del exterior o del interiorprovocad os por la crisis bancaria. Quie-ro recordar que el m odelo de supervi-s in y regu lac in era funciona l a u n

    esquema de lo que se pretenda quesignificara el sector ban cario en la eco-noma uruguaya, era parte de los in-gredientes principales de nuestra in-sercin internacional.Por otra parte, desde bien temp rano delao 2001 sabamos que la s i tuacineconmica argentina era capaz de em-peorar, deteriorarse y afectar al Uru-guay. No estamo s hablando de algo queocurri de la maana a la noche por-que alguien se tom u n hel icptero, searm un gran l o y un buen da a al-guien se le ocurri el default y termi-nar con la convertibi l idad de un dlarun peso en Argentina. No es justo de-cir que esta fue la si tuacin.

    En este contexto, yo dira y afirmo, erainminente que podan ocurrir efectosnegativos sobre nuestro pas, y los ba-mos a enfrenta r con un marco de pol-ticas que en lo fiscal y lo financiero yaacabo de dar mi opinin sobre cualeseran, pero le agrego una cosa, con unrgimen ban cario sin suficiente flexibi-l idad, como para absorber o ayudar aabsorber esas dificultades.Este es un marco de polt icas y de ac-ti tudes de los actores propicios paraque si ocurran dificultades estas tu-vieran un efecto potenciado.Aqu dos afirmaciones sobre las acti-tudes y las respuestas po l t icas. Uneconomista que anal ice ese proceso,hasta l legar a los momen tos ms d ifci-les, debera decir que ac hubo unaprioridad absoluta y una subordinacinabsoluta en el manejo de los instrumen-tos de la polt ica econmica a la estab i-l idad de precios. Era el nico elem entoa preservar y todas las otras fragilida-des o hechos de la economa que es-tuv ieran en juego no se tomaron encuenta, se actu con ceguera, no selos quiso ver. Se decidi priorizar algoy no priorizar otras cosas.Quiero poner estos elem entos y hacerun segundo e jerc ic io , no hab lar de lep icentro de la cr is is , entre enero yagosto, porque no ayudaramos al de-

    bate en perspectiva de discutir lo quea mi entender fue la poca de este pasdonde m as veces se jug a un ajedrezde nica jugada; en el cual se iban l i -mitando cada vez ms las posibi l ida-des de a ccin y cada vez ms las res-puestas de polt ica econmica apare-can tan condicionadas, tan guiadas poruna real idad tan abrumadora que ter-minaba siendo un movimiento dondelos mrgenes de maniobra eran esca-sos.

    La crisis y las medidas

    del gobierno

    Qu pasa con al crisis y hacia el futu-ro? En este momento las debi l idadespre existentes empiezan a convivir conlas nuevas de carcter latentes y agra-vadas. Es un cambio muy grande de

    Fern an do Loren zo recha z q ue la crisis de 2002 y su supe racin ob ed ezcan a cau sas externa s.

    Lorenzo: La agenda del Uruguayes el cambio estructural

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    escenar io e l que la cr is is provoca anuestra economa.La situacin fiscal es insostenible. Sel lega al epicentro de la crisis con unasi tuacin f isca l insosten ib le , porque

    aqu hay una mxima: los problemasfiscales se pueden m anejar siempre ycuando uno tenga como financiarlos.Uruguay l leg a esa si tuacin con unn i co con jun to de ac to res que nosp r e s t a b a d i n e r o : l o s o r g a n i s m o smulti laterales de crdito, no haba msnadie. Ya no ten amos a m s nadie, yestos actores son especiales porquetienen opinin sobre lo que hacemos.Adems de prestar dinero y poner con-diciones como cualquier prestamista,tienen opinin sobre lo que hacemos.Alguno podr decir me hubiera gusta-do que me trataran con la misma in-dulgencia que con la que estn tratan-do a otros, pero lo concreto es que nostrataron como nos trataron, son otrasdimensiones y no quiero entrar en eso.En ese momento la deuda trepa a nive-les insostenibles, una deuda maneja-ble convive con dfici t f iscal insosteni-ble y adems estaba dolarizada, enton-ces trepa a niveles increbles.A eso se le agrega la crisis y la con-traccin del sistema bancario con to-das las repercusiones sobre el siste-ma de pago. A esto hay que agregar laperdida instantnea del control de lainflacin. Lo que haba sido hasta esemomento el tesoro ms preciado por-que era el nico element o de estabi l i -dad que se haba manejado se pierde

    el control.Se plantean desde el punto d e vista delas polticas pblicas una convivenciad e p r o b l e m a s d e s o l v e n c i a y d eiliquidez, Uruguay era un insolvente ei l quido. En este escenario se a gregauna fuerte cont raccin de la actividadeconmica, aumento de l desempleohasta los niveles ms altos que cono-cemos histricos, fuerte estmulo a laemigracin, cada d el salario real muyimportante, aument os de los niveles dela pobreza y la indigen cia hasta nivelesdesconocidos para el pas.A m entender el gobierno de ese mo-men to camb ia de en foque y dec idecorregir algunas de las vulnerabi l ida-

    des y el ige su agenda ; lo que hace esun drstico ajuste fiscal, establece laflotacin cambiaria y produce un cam-bio de rum bo en la supervisin y la re-gulacin que es al p rincipio incipientepero es de las transformaciones msimportantes que se empiezan a gestarah. Empieza un cam bio de enfoqu e enmateria de regulacin, de algo que has-ta ese momento no tena ningn res-guardo ni previsin.Los problemas de insolvencia y l iqui-dez nos l levan inexorablemente a unepisodio que qu iero comentar especial-mente: la propuesta de reestructura-cin de deuda, que se material iza enel canje que se real iza a principios delao 2003. Creo que este episodio esmuy importante, porque algunos de losque estam os hoy en el gobierno, tena-mos posiciones diferentes acerca de

    como m irar esa si tuacin. Esto es im-portante decir lo en perspectiva, porqu?, porque todos reconocamos laconvivencia del problema de insolven-cia y de liquidez y la pregunta clave e rasi era un problema que se arreglabafundam entalmente postergando venci-mientos. Yo estaba de un lado, pero elrespeto intelectual y polt ico que ten gopor todos los que crean que esa noera la solucin y que el involucramientodel sector privado que le prest al pasdebi ser m s grande, es esencial. Estonos puede servir hasta para entenderlos dilemas qu e hay en otros pases hoy.Cuantos pases hay que creen qu e suproblema es d e l iquidez y estn hacien-d o a j u s t e s y r e f i n a n c i a c i o n e s q u ecreen que maana se podrn pagar.Es tal la visin de xito de la opera cinde canje y se le pone tan en el epicen-tro de todas las m aravi llas que ocurrie-ron a continuacin, que a mi lo nicoque me provoca es discrepancia. Nome provoca otra cosa. Creo que fue unelemento que ofreci a futuro una op-

    cin que im plicaba jugarla y ver comosala y no era un xito seguro. En micaso creo que los elementos tcnicosno gobernaron sobre otras considera-ciones que hice de porque cre que lomejor era intentarlo. Esto no se algoque se pueda evaluar con el diario dellunes. Con el diario del lunes p odamoshaber sido insolventes un poqu ito msadelante y podamos estar en una si-tuacin de endeudamiento con los or-ganismos mu ltilaterales de tal nivel quepodamos no haber sal ido nunca de esasi tuacin. Lo que para un pas connuestro nivel de desarrol lo poda ha-ber sido dramtico.

    El FA y las diferenciasde actuacin

    Qu cosas ocurren cuand o l lega nues-tro gob ierno para hacerse cargo deestas circunstancias. Creo que ocurrencosas muy importantes. Esto no es unproblema de cuantos aos estuvimosen e l gob ierno, no es que nosotrosestuvimos siete aos en el gobierno ydesde la crisis hasta que nos entrega-ron e l gob ierno pasaron dos aos ymedio, tres cuarto de lo bueno y lo malonos corresponden a nosotros, un cuar-to de lo bu eno y lo malo le correspon-den a los otros. No se trata eso, hay

    un cambio m uy importante. El cambioms importan te es que la l ista de vul-nerabi l idades a resolver, no era la qu ese nos haban planteado. Ampliamosnotab lemente la v is in sobre donde

    estaban las fragi l idades y las vulnera-bi l idades de nuestro pas, de nuestraeconom a, de nuestra sociedad . El Fren-te Amplio ampli esa agenda e h izo deldebate de las vulnerabi l idades un de-bate mucho ms amplio y mucho msr i co . Po r supues to que h i zo suinternalizacin de lo importante que estener finanzas pblicas sanas, estabili-

    dad de precios, estabilidad financiera,seguro de depsitos, hacer del cl imaeconmico y financiero algo saludable.Recuperamos para la sociedad urugua-ya el valor de los equilibrios al serviciode solucionar las otras vulnerabi l ida-des ahora reconocidas explci tamente:vulnerabi l idades sociales ineludibles.El Plan de Emergencia, no creo quehaya una experiencia de discutir conlos organismos multi laterales de crdi-to, en particular con el FMI, con unasola premisa: la decisin polt ica delPlan de Emergencia para empezar aatender una de las vu lnerab i l idadesms importantes de nuestra sociedadfue priori tario.

    Pero adems a partir de ese momen tofue priori tario atender un conjunto devulnerabi l idades sociales a travs dereformas estructurales tremendamen-te importantes. No las l istemos pero laspusimos por delant e, las hicimos con-vivir con las otras, conseguimos apo-yar la construccin posterior sobre labase no de negar una agenda de fun-damentos econmicos buenos, equi l i -brios deseables, pero con el comple-mento y la simultaneidad de atend er alas otras vulnerabi l idades y hacer re-formas estructurales.Nosotros hicimos las polt icas que al-gunos di jeron que haba que hacer ynunca hicieron. Cuidados fiscales no

    los tenan, manejos cuidadosos de ladeuda pbl ica, no los tenan. El canjede l ao 2003 est mot ivado porquehaba una torre de vencimientos dedeuda p bl ica que no se poda pagar yesa torre se construy mucho antes.Nuestros gobiernos trabajaron todos losdas, para que a nadie, ni a nosotrosni a nadie, le caigan problemas comoles que le cayeron al gobierno en el20 03 y a nosotros cuando asumimos.Se acab lo de emitir deuda en dla-res, se acab lo de pagar barato el en-deudam iento, se acab lo de priorizara los organismos multi laterales paraque las recetas de p olt ica econmica

    no fueran responsabi lidad nuestra sinoque fueran de otros.Asumimos una agenda de que el Uru-guay Productivo conviva con el Uruguayde la Igualdad, no hay posibi l idad de

    construir un pas justo, una econom acapaz de prestarle a sus ciudadanosel ejercicio de sus derechos, si no hayuna estructura productiva que sea ca-paz de ofrecerles a quienes trabajan y

    se esfuerzan, las posibi l idades d e pro-gresar y hemos hecho convivir el cre-cimiento econmico con los objetivosdistr ibutivos sin drama.Esto es u n deb ate polt ico ideolgico yno lo neguem os. La convivencia de unproceso de crecimiento y prosperidadcon preocupaciones distr ibutivas es lan u e s t r a . O t r o s d i c e n q u e e ssecuencial, no es que son ms ma los,no, son diferentes, piensan distinto.Para algunos las reformas en el apara-to productivo, son cosas que hacen tansolo el mercado y que las haga comopueda. Para nosotros es eso, que es-tam os en niveles mximos de activismopor parte de ese sector privado, perocon nuestras responsabi l idades. Lasque ejecutamos a t ravs de las empre-sas pbl icas, de nuestras decisionesy de todo e l con junto de cosas queponemos al servicio de modelar unasociedad en lo productivo diferente.No hay un Uruguay prospero y justo,s ino hay en la misma estructura deproduccin capacidad de generar jus-ticia, es imposible no lo vam os a lograr.

    La agen da del cambio

    estructural

    Y por ltimo, y a cuenta de una elabo-racin mayor porque es una idea que

    estamos trabajando y que vamos a in-sistir. La agenda del Uruguay hoy en elque se recupero la confianza, en el quela crisis la m iramos con la perspectivade hecho ocu r r i do y de sus conse -cuencias pero no de la inminencia deque vuelva a ocurrir, es una agendaque tiene que estar guiada con el con-cepto de cambio estructural.Qu es esto? No es la a dministracinde la realidad tal cual ella es. Por qu?Porque todava quedan muchas vulne-rabi l idades, de las que existen, de lasque estn emerg iendo y de las queestn latentes que pesan sobre la cer-teza de que solo nos espera un futuroventuroso. Estamos construyendo unfuturo que no va a ser venturoso bajocualquier contexto, solo va a serlo sinosotros hacemos todo el esfuerzo ycon la precisin y la pericia que m ere-ce, con responsabi l idad.A diez aos de la crisis hemos logradoalgo muy importante: Ya en este pasno se discute si la econom a es capazo no, de ofrecerle una oportunidad deporvenir a la gente, la desconfianza enla viabi lidad del pas ha cedido ahora auna discusin de otro orden, tan inte-resante o m s que aquel la. Pero noso-tros somos parte de este proceso quenos trajo hasta aqu .Ahora de nosotros depende que nun-

    ca ms vuelva a ocurrir lo que ocurri,que actuemos con responsabi l idad,pero que sigamos teniendo los mismossueos y motivaciones que tuvimos enaquellos momentos ms difciles.

    Lore nzo : La ag en da de l Urug ua y es el cam bio e stru ctu ral

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    EL POPULAR reprodu ce textua lmen -te la intervencin del ministro de De-sarrollo Social, Daniel Olesker en el co-loquio organizado por el PIT-CNT en elBanco Central del Uruguay.

    I) Las Tesis principales

    para int erpretar la crisis

    La crisis de un pas en el marco deldesarrol lo del sistema capital ista es elresultado de una combinacin de fac-tores externos y factores internos d eri-vados del proceso de acumulacin yde la man era que este se real iza.Por ende el an lisis de la crisis en Uru-guay 19 99 20 02 debe ser ana l izadaen su gnesis, en su desarrol lo y den-

    tro de dicho desarrol lo sus principalessntomas y la distr ibucin de sus cos-tos y finalmente sus consecuencias enel futuro.Dada es ta m i rada te r i ca de cmodebe ana l izarse una cr isis , nuestrastesis sobre la crisis en Uruguay 1999 2 0 0 2 so n la s sig ui en te s:

    * El problema fundam ental de la eco-noma uruguaya reside en el modeloLACE (liberal, apertu rista, concent radory excluyente) de crecimiento econmi-co operado entre 1990 y 1998 que l le -v a la crisis actual y a potenciar suampli tud,* La recesin, provocada por el mode-lo de crecimiento excluyente, am pli f iclos problemas produ ctivos, laborales ysociales (que ya eran trascendentes enlos 90 ) y gener una restriccin fiscaly una del icada si tuacin financiera queconllev a la crisis de credibilidad. Porlo tanto la polt ica econmica producti-va y distributiva es la cau sa de la crisisglobal y la del icada si tuacin financie-ra y fiscal tan slo la consecuencia.* La resolucin de la crisis se hizo so-bre la base de una fuer te reduccinde salarios, destruccin de empleo yconcentracin empresarial , lo que im-plic optar por salir de la crisis por lava de la social izacin de sus prdidas

    a las m ayoras trabajadoras.II) El modelo Liberal,

    Aperturista, Concentra dor y

    Excluyen te (LACE)

    Este modelo tuvo como sus p i la res,fundam entales a efectos de esta inter-pretacin: la reforma d el sector exter-no sustentada en la aper tura comer-cial y financiera con fuertes comp onen-tes desregulatorios; la reforma laboralsus ten tada en l a des regu lac in de lmercado de trabajo y el mantenimien-to de niveles bajos de inversin y est-mulo al crecimiento a travs de fuerteliberalizacin del crdito.Este modelo que se inici con la l lega-da de Vegh Vi l legas al Ministerio deEconoma en 1974 en la dictadura, sep r o f u n d i z a e n l a m i s m a l n e a

    desreguladora y liberal a partir de 19 90 .En dicha dcada se apuesta a un mo-delo de crecimiento cuyas caractersti-cas son:Un in ic io de dura concentrac in de lingreso con un ajuste fiscal que se dasobre la base de un shock tr ibutarioque implica mayor gravamen al consu-mo y la reimplantacin del impuesto alos sueldos, es decir que el ajuste fis-cal impl ica mayores costos para los tra-bajadores y concentracin de la r ique-za (recordemos que en 1995 el nuevogobierno de Sanguinetti real iza el mis-

    mo ajuste fiscal).Una apertura comercial i rrestricta.La desregulacin en materia laboral,retirnd ose el Estado de la negociacincolectiva, dejando de fi jar incrementossalariales y reduciendo d rsticamenteel salario mnimo nacional.Una polt ica anti inflacionaria sustenta-da en la l lamada ancla cambiaria, esdecir una evolucin del t ipo de cambiopor debajo de los precios internos, loq u e g e n e r u n p r o f u n d o a t r a s ocambiario respecto a los costos inter-nos. El lo, complemen tado con la a per-tura externa gener una destrucc inde produccin nacional y un boom im-portado.Entonces lo que nos mostraba la d-cada de los 90 que a l l legar a 1999,luego de 8 aos de crecimiento econ-mico el pas asista a u na fuerte exclu-s in, a pesar de su crec imiento conconnotaciones en lo econm ico y en losocial.

    Econmicas:- Exclusin del sistema mismo, es de-cir un proceso de marginal izacin desegmentos de poblacin que quedanfuera del proceso de produccin, dis-tr ibucin y consumo en el seno de lasociedad capital ista.- Exclusin del m ercado de trabajo que

    implica la dificultad perman ente de in-sertarse laboralmente, con alta inesta-bi l idad laboral y zafral idad.- Exclusin del acceso a los medios deproduccin de sectores que los ten an

    y que el proceso de central izacin decapitales los deja fuera y genera alter-n a t i v a d e s u p e r v i v e n c i a e n e lautoempleo.

    Sociales:- Exclusin de las p olticas sociales pro-piamente dichas, es decir del accesoa la edu cacin, la salud y la vivienda.- Exclusin de los mbitos de sociali-zac in t rad ic iona les de las fami l ias,como e l esparc imiento , los c ines, e lftbol, las p lazas.- Exclusin de los mbitos de consu-

    mo tradicionales.- Y en su expresin ms fuerte exclu-sin de la propia legal idad en la que sedesenvuelve la sociedad.

    A lgunos da tos que fundamen tan e lpunto anterior

    En primer lugar, en 19 99 ya se coloca-ba en si tuacin de pobreza a casi lamitad de los nios entre cero y cincoaos. Lo que es ms, al observar laevolucin durante la dcada de la po-breza por edades, puede verse comoes en el tramo de la infan cia donde lapobreza no slo no disminuye sino quese incrementa en trminos porcentua-les (tomand o como base 10 0 los valo-res de 1991). Incide en particular eneste resultado la reduccin del gastosocial destinado a infan cia y adolescen-cia y por ende el traslado al mercadode las princip ales polticas sociales (so-bre todo salud y vivienda para estossectores).En segundo lugar y como factor queagrava claramente la si tuacin de lainfancia, se produce durante los 90 enUr u g u a y u n m a r c a d o p r o c e s o d eprecarizacin de las estructuras f ami-liares.En tercer lugar, ha sido anotado consuficiente claridad y documen tacin el

    creciente proceso de segregacin re-s idencia l de la p ob lac in urbana de lpas, contribuyendo con el lo a la des-i g u a l d a d c o n a u m e n t o d easenta mient os notorio y la expulsin de

    buena parte de los sectores ms po-bres a las peri ferias urbanas.En cuarto lugar, la exclusin del mer-cado de trabajo fu e un fa ctor decisivodel crecimiento desigual y por ende dela gestacin de la crisis. En la dcadad e c r e c i m i e n t o t u v i m o s 1 5 0 m i ldesempleados y ms de 200 mil pre-carios Hay un importante aumento dela desigualdad que se manifiesta tantoen los salarios de sectores bajos conel resto y en las tasas de desempleode los diferentes sectores. Los secto-res con a l ta educac in (secunda r i acompleta y ms) logran mantener tasasque rondan e l 8% hasta 19 99 . En cam-b i o l o s s e c t o r e s d ebaja ed ucacin (ciclo bsico y men os) y

    med ios (secundaria incompleta), llegana 199 6 a tasas de casi e l 14 y 12%. Ycomo la visin de l mode lo LACE es uni-taria este deterioro se completa con laimportante aper tura comerc ia l en laprimera mitad de la dcada que mani-fiesta su impact o regresivo en la segun-da mitad, afectando negativamente lasfuentes de emp leo de los trabajadoresmenos cal i f icados, as como sus n ive-les de remuneracinLa exclusin econm ica y social no sonproducto de la crisis econmica. Sonparte sustant iva de l funcionamientoeconmico y social de un Uruguay quecreca.Y en ese sentido, 25 aos de modelo

    LACE construyeron un crecim iento eco-nmico que inevitablemente l levaba auna cr is is pro funda destruyendo lasbases econmicas t rad ic iona les de lpas, con niveles de concent racin dela riqueza inditos en el pas y destru-yendo por la propia conviccin del mo-delo l iberal, las bases histricas conlas que Uruguay construy su pacto deconvivencia: el barrio, los centros edu-cativos que congregaban desiguales ,las formas de social izacin de las fa-mil ias y sobre todo el trabajo y la fabri-ca como ejes estructuradores de la in-tegracin social.

    III) Las dimensiones de la crisis

    y sus interrelaciones

    La cr is is 199 9 20 02 t iene a l menosc i n c o d i m e n s i o n e s q u e s ein terre lac ionan: Product ivo , labora l ,distr ibutivo social, f iscal y financie-ro .S u s i n t e r r e l a c i o n e s : a ) L a c r i s i sdistr ibutiva social, impl ica un dete-rioro de las condiciones de vida de lagente y el lo, una vez agotada la fasefcil del crdito al consumo, redu celas ventas en el mercado interno (700mil lones de dlares de cada en tresaos), lo cual implica crisis de ventasen el segmento de las empresas que

    trabajan para ese mercado (comercios,mutu al istas, etc.), lo que l leva a la re-duccin de em pleos y luego reduce losingresos fiscales por IVA y otros tribu-tos y los aportes a la seguridad social

    Daniel Olesker: La crisis 1999-2002La cau sa principa l fue el mo de lo libe ral, ap ert urista ,

    concentrador y excluyente

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    aumen tando los gastos por seguro dedesempleo.Primer efecto: la crisis distributiva em-puja a la crisis productiva y laboral ycon ello a la crisis fiscal y al mismo tiem-po por el peso del endeudam iento ace-lera la crisis bancaria por el problemadel pago de los crditos.b) Las crisis distr ibutiva y productivaestn en la base de la crisis laboral, yaque la primera gesta un desempleo yprecar iedad estructura les ( recordarque en la dcada de crecimiento tuvi-mos 15 0 m i l desempleados y ms de20 0 m il precarios) y la segunda agravaestos problemas con el d esempleo y laprecar iedad coyuntura l der ivada de lcierre de empresas. Segundo efecto:la crisis laboral est en la base de lacrisis fiscal por la baja de aportes a lasegur idad socia l (por recesin y pordesregulacin laboral) y el aument o delgasto en seguros de desempleo.

    c) La crisis productiva gestada por lacr is is d is tr ibu t iva (1990 a 1998 a te-nuada y postergada por el crdito alconsumo y por las luchas sociales queganaron salarios y jubilaciones), por lapolt ica camb iaria que sustent el cre-c imiento (a traso cambiar io) y por e lshock externo de 1999, gener unacada de la recaudacin y provoc pro-blemas en el sistema finan ciero, dadoque una buena parte del impulso a laproduccin se haba sustentado en elacceso fci l al crdito, fruto de uningreso continuo de capital externo alpas. Tercer efecto: la crisis de la pro-duccin acelera la cada d e los ingre-sos fiscales y con ello hace explosivo

    el dficit fiscal y repercute sobre la es-tabi l idad bancaria dadas las dificulta-des que se generan en los pagos y enlas deudas (efecto agravado por la de-valuacin real izada para contrarrestarel atraso cambio del modelo de creci-miento).d) Todo este proceso de crecimientoadems, como di j imos, se sustent enun acceso fc i l a l endeudamientoexterno, lo que increment notablem en-te la deuda externa igual que el dfici tf iscal permanente y estructural de losao 90 que ob l ig a l f inanciamientoexterno va emisin de bonos, todo el lotransform la deuda externa en un pro-blema central del Uruguay pos 2002.

    Cuarto efect o: La crisis produ ctiva y fis-ca l aumentaron notab lemente e l en-deudamiento (que ya era estructura lpor el mod elo de crecimiento) y gene-raron desconfianza en su pago, dadoel lento crecimiento econm ico del pasy el lo abon en la crisis bancaria.

    IV) El diagnstico de la crisis

    por parte del gobierno

    El equ ipo econmico uruguayo tuvofuertes desaciertos de diagnstico, elprimero se refiere a la d evaluacin bra-s i l ea de ene ro de 1999 , a l a quese consider que slo tendra impacto

    en variables nominales y que la infla-cin interna rpidamente anulara losefectos reales de la d evaluacin.El segundo error de diagnstico se re-fi r i al t ipo y duracin de la crisis que

    se inici en 19 99 . Argentina y Uruguaydejaron de crecer en ese ao y no vol-vieron a hacerlo en los tres siguientes.Pero de manera reiterada, ao tras ao,se insista en el carcter coyuntural del a c r i s i s y s e e s p e r a b a q u e l areactivacin argentina arrastrara tam -bin, al alza, a la produccin urugua-ya. Nada de eso ocurri y tampoco fueadoptada m edida correctiva alguna.El tercer error de diagnostico, relacio-nado con e l anter io r , se re f i r i a laconvertibi lidad argentina: todava a fi -nes de 20 01 el equipo econmico uru-guayo estaba convencido de que Ar-gentina mantendra la convertibi l idad

    razn.Pero al mismo tiem po hub o graves erro-

    res para pensar la reactivacin.La manera d e pensar la sal ida a la cri-s is de l gob ierno fue e l a juste f isca l(como s iempre en 1990 Laca l le , en1995 Sanguinetti y como hacen siem-pre blancos y colorados y basada en elfundamenta l ismo fondomonetar is ta)para que las cuentas cerraran con msimpuestos y menos gasto pub l ico.El resultado fu e que, real izado el ajus-te, la produccin se fue deprimiendoaun m s en el periodo siguiente, lo queconduca al equipo econmico a unacuriosa reflexin: el ajuste anterior nohaba sido todo lo profundo qu e las cir-cunstancias requeran y haba que in-sistir con un nuevo ajuste.

    Finalmente cuando la crisis se expre-sa en su final (no es su causa sino ensu consecuencia) que es la crisis ban-caria se muestran notorios problemade mala regulacin, de fal ta de contro-les y de incapacidad para evitar proce-sos de deterioro notorios desde tiem-po atrs. Por el contrario la acti tud pre-dominan te fu e apoya r esos p rop iosbancos que luego fueron la base de lacrisis ba ncaria.

    V) Los impactos de la crisis

    Siendo coherente con todo lo anteriorlos impactos o sntomas de la crisis se

    expresaron en la cada de la producciny en la concentracin de la riqueza.Primero la cada del nivel de riquezadel pas: la produccin nacional cay16,63 acumulado en los 5 aos.

    Segundo: los sectores ms afectadosfueron la industria manufacturera, laconstruccin y el comercio. Esta situa-c in es par t icu larmente grave en e lcaso de la industria, ya que en los aosprevios a la crisis era un sector que nohaba crecido que ya estaba en crisis.Tercero: esta crisis productiva se haexpresado en la reduccin de tod os loscomponent es de la produccin, es de-cir de la inversin, el consumo p rivadoy las exportaciones. En el caso de lainversin su reduccin es a la mitadde lo inver t ido en 199 8, quedando pordebajo del 1 0% del PBI, por lo cual lainversin ni siquiera est reponiendo

    el capital consumido en este perodo ymenos an generando nuevas inver-

    siones. En el caso del consumo inter-no son 2 mil mil lones de dlares me-nos que ha movido el mercado inter-n o . L a s e x p o r t a c i o n e s c a y e r o nabruptamente hasta un 33 % de su va-lor de 1998.Cuarto: mercado de trabajo. Sin dudael resultado ms palpable de esta cri-sis econmica ha sido el impacto so-bre el mercado de trabajo profundizan-do la desigualdad y recayendo sobrelos hombros de los trabajadores y susfamil ias del peso d e la crisis.La tasa de desempleo se eleva de 1 0 a17% en 20 02 , lo que significa que parat o d o e l p a s l a c a n t i d a d d edesempleados y desempleadas aumen-

    t en un orden de 100.000 personas.Quinto: El otro factor donde la crisisha impactado con gran fuerza ha sidoen los n iveles salariales. El salario real

    cay casi un 25 %, lo que significa unacada ms ace lerada que e l ingresonac iona l , que como v imos cay un16,33%.Por ende si juntamos las prdidas porsalario y los menores puestos de tra-bajo podem os construir la evolucin dela masa salarial , es decir el dinero quese destina a la clase trabajadora.

    Y los trabajadores y trabajadoras h anperdido un 30% de su ingreso en es-tos 5 aos, siendo los principales per-ju di ca do s de la cr isi s..Sexto: el endeudamiento del pas. Ladeuda creci de manera muy importan-te en un orden de l 50% en 4 aos ypas a representar de l 40,8 a l 113,56 % del PBI. Adems mientras en 1 99 8se pagaron 372 mil lones de dlares deintereses de deuda y el lo supuso gas-tar el 7,96% del presupuesto en esetem, en e l ao 2003 se pagaron unorden de 650 mil lones de dlares, loque implic dedicar el 22,43 % del pre-supuesto a ese tem. Es decir uno decada 4 pesos que gast el estado fue

    para pagar intereses de la deuda p-bl ica.

    Las herencias del modelo LACE ysu crisis

    Al finalizar la crisis la sociedad uru gua-ya se encontraba sumida en una pro-funda deses t ruc tu rac in soc ia l con40 % de pobreza, 5% de pobreza exter-na, 14% de desempleo, casi la mitadde los ocupados fuera d e la seguridadsocial, prdidas salariales superioresal 20%, un sistema de salud al bordedel colapso, un sistema edu cativo sinrecursos y as todo.

    Por ende la ta rea principal del procesoposterior a la crisis estuvo ligada a re-construir el pas, recuperando su cre-cimiento econmico, con un Plan Na-cional de Emergencia Social (PANES),con una fue r te recupe rac in de l ainsti tucional idad destruida por un es-tado deser tor (conse jos de sa lar ios,regu lac in de sa lud y de educacin,seguridad social, etc.).S in embargo no debemos pensar laherencia s lo en estos aspectos. E lmod elo LACE (dictad ura y gobiernos delos aos 90 ) transform los valores dela sociedad generando una profundamarginalizacin de sectores sociales yquebrando reglas de convivencia ciu-

    dadana trad ic iona les, a l romper consus polt icas de fragmentacin los ejeses t ruc tu rado res t rad i c i ona les de l asocializacin de los uruguayos.

    Dan iel Olesker: La crisis 1999-2002

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    Este sbado culminan, por este ao,las labores de la br igada so l idar iaAgustn Pedroza, del Sindicato Unicode la Construccin y Afines (SUNCA).En 2012 real izaron ms de 12 mil ho-ras de trabajo voluntario en escuelas,l iceos y asentamientos (colaborandocon el Plan Juntos) en todo el pas. Aeste trabajo se han sumado t rabajado-res de otros gremios y tambin estu-diantes m ilitantes de la FEUU.

    En la escuela Horizonte

    La Brigada Solidaria Agustn Pedrozaviene desarrollando tareas en la Escue-la Horizonte; dicha escuela es un cen-tro de recuperacin de personas conparlisis cerebral en grados severo ygrave, que atiende a una poblacin to-tal de 10 5 alum nos, entre nios, jve-nes y adultos de todo el pas.Este 11 de octubre cumpli 50 aosde vida, su local se encuentra en Ave-nida Agraciada 359 1, entre Buschentaly Enrique Turini.EL POPULAR dialog con su directora,Marianela Lebrini, quien coment quecuando los trabajadores del SUNCA seenteraron que la Escuela Hor izontehaba recibido una donacin de mate-

    riales por medio del programa del Ca-nal 10 Yo y 3 ms, para el arreglo to-tal de 3 baos de la escuela, inmedia-tamen te se pusieron a las rdenes pararealizar la obra.La directora valor el esfuerzo del sin-dicato y resalt: el sindicato en un ges-to muy noble enva a trabajadores queintegran la Brigada Solidaria AgustnPedroza, que estn desde hace dasconviv iendo con nosotros mientrasdesarrollan sus tareas de refaccin dela escuela, y agreg, los trabajado-res que estn aqu trabajando son muyrespetuosos, muy atentos, y han esta-

    do viniendo todos los das desde quecomenzaron a trabajar en la escuela.Y remarc noso t ros es tamos muyagradecidos, y ojal estas prcticas semultipliquen, ya que gracias a la soli-daridad de algunas instituciones o desindicatos como el SUNCA es que laescuela se mantiene y sigue crecien-

    do y mejorado para br indar le mejoratencin a los cientos de jvenes quepasan p or la escu ela.Para finalizar subray, en nom bre detodos los nios, la comisin directiva ytodos quienes trabajam os en la Escue-la Horizonte, querem os darles un agra-decimient o eterno a estos compaerosdel SUNCA que han asumido un com-promiso digno de ser resaltado.

    Trabajo solidario

    El SUNCA por medio de algunas insti-tuciones pblicas colabora con mano

    de obra voluntaria a escuelas pblicas,instituciones o familias en situacionesmuy difciles, en lo que tiene que vercon tareas de refaccionamiento, pintu-ra, albailera o elctrica.Al mismo tiempo la brigada AgustnPedroza sigue l levando adelante lasjor na da s s oli da ri as en el Plan Junt os

    en distintos asentamientos de Monte-video, y el interior del p as.Como ya informara EL POPULAR, enestas jornadas ya se han realizado msde 12 mil horas de trabajo voluntario yparticiparon ms de 1 .200 trabajadores.Cada sbado se llevan adelante inten-sas jornadas de trab ajo, junto a los ve-cinos del lugar y cientos de compae-ros del sindicato que vienen participan-do dispuestos a colaborar con su tiem-po y esfuerzo voluntario, dedicando unode sus das de descanso a rea l izarestas jornadas, en un esfuerzo por re-solver el problema habitacional de un

    Obreros y estudiantes confluyenen las brigadas solidarias

    La Agu stn Pedro za t am bin con tribuye e n la Escue la Horizon te

    Por Alexei Caballero

    sector de la poblacin totalment e olvidado porla sociedad y sin posibilidades de integracinsocial y al mismo tiem po busca generar mejo-res niveles de conciencia, en un proceso deprofundizacin de la democracia.

    Obreros y estudian tes

    En este camino se han sumado organizacio-nes juveniles, como Jvenes en Peligro y deestudiant es como la FEUU.En una de estas jornadas Tania Rodrguez,estudiante de la Facultad de Medicina, y mili-tante de la FEUU dijo a EL POPULAR, nos

    enteramos por compaeros de la FEUU queya estaban participando en el plan, pero nossumamos cuando vimos que las brigadas delSUNCA estaban desplegando el traba jo de for-ma organizada todas las semanas.Otra estudiante que part icipa de las jornadas,Sabrina lvarez, estudiant e de la Facultad d eHuman idades, nos cont, nos pareci impor-tante sacar al estudiante universitario del micromundo en el que se encuentra, para poderver otras realidades y al mismo tiempo cola-borar con el trabajo solidario dando una m anoa otras personas que estn en si tuacionesms difciles que las de uno.Otro de los jvenes que participa de las jorna-das solidarias es Eduardo Fallo, estudianteen la Facul tad de Humanidades, nos d i jo ,

    nunca ha ba agarrado una pala, pero est abarodeado de trabajadores de la construccinque me orientaron en las distintas tareas quehicimos, y agreg, tam bin t rabajam os jun-to a los vecinos del barrio que en el futurovan a vivir en ellas.Para finalizar, los estudiantes re marcaron, que-remos que esto t enga ms visibilidad y que sesepa que hay gente que est dispuesta a sersolidaria, porque hay compaeros que quierencolaborar y muchas veces no saben desde qulugar o dnde hacerlo; esta es u na experienciaque los estudiantes universitarios queremostransmitirle a otros para continuar trabajandojun to a las br igadas sol ida ria s d el SUNCA.

    La Mesa Zonal Oeste del PIT-CNT convoc a una reunin pa ra debat ir lasituacin d el Polo Tecnolgico Industrial del Cerro. La actividad se desarro-llar este sbado, 17 de noviembre, desde las 9 horas en el local de laFOICA, en Grecia 368 1 esqu ina Holanda.

    En la convocatoria, enviada a EL POPULAR, se seala que ante los hechosque han venido sucediendo en el PTI por una sucesin de desencuentrosentre los miembros del equipo mu nicipal, redundando en un funcionamien-to no del todo eficiente, donde sectores patronales, aprovechando la situa-cin salen en una ofensiva poltico-empresarial a querer camb iarle el rumboal parque. Entendiendo que esta situacin involucra a ms de 700 trabaja-dores, a decenas de medianos y pequeos emprendimientos productivos ya los contribuyentes del departamento. La Mesa Zonal Oeste del PIT-CNTresuelve realizar una am plia convocatoria para discutir entre tod os la situa-cin planteada y buscar un clara salida que respon da a los intereses de losmont evideanos todos.

    Convocan discusinsobre e l PTI en e l Cerro

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    Viernes 16 de Noviembre de 2012 9

    / Ig n a c io M a r t n e z/ Ig n a c io M a r t n e z/ Ig n a c io M a r t n e z/ Ig n a c io M a r t n e z/ Ig n a c io M a r t n e z

    El Gobierno debe reactivar m s los motores. Se vuelve imprescindible con-cretar avances significativos, bien visibles e incontrastables en varias reas de

    la vida del pas: salud, vivienda, educacin, convivencia ciudadana, salario

    mnim o de 14 mil pesos, entre otros. Para eso tenemos que apren der a consultar

    a la gente desde todas las esferas de gobierno. Debemos tener la capacidad de

    decidir siempre reposando en la tranquilidad de haber consultado y haberle

    dado participacin a quienes va a afectar, de uno u otra manera, esa decisin.

    Esto es vlido siempre, salvo excepciones, para el Presidente, los Ministros y el

    ltimo director del ltimo escaln d e la escala del poder. Y esa consulta n o debe

    caer en saco roto. Si se consulta es para poner el punto de acuerdo y luego

    trabajar sobre lo acordado. Esta es una primera aproximacin a la meta pre-

    ciosa de que nosotros, la gente comn, vayamos hacindonos del ejercicio de

    goberna r. El anh elo es que la participacin llegue a tal grado, que algn da los

    representantes hagan lo que sus representados les ordenan y si no, que venga

    otro. En Uruguay h emos ordenado un Programa. Hay que avanzar en l. Hay

    que dejar de ponerle palos a la rueda y avan zar en la creacin de un frigorfico

    nacional, por ejemplo, en que todas las compras del Estado se hagan a la in-

    dustria n aciona l (los uniformes, por ejemplo). Hay que ha cer como hicimos en

    el Banco Central el pasado martes 13, conversando francamente sobre la eco-

    nom a del pas, su historia reciente y su presente. Hay que hacer como vam os a

    hacer dentro de un os das, el 29 de noviembre, donde nos encontraremos con

    Pepe Mujica desayunando con los trabajadores y hablando sobre las perspecti-

    vas para el 2013. Esto se debe constituir en una prctica permanente. Los mi-

    nisterios, los organismos del estado, deben operar con m ecanismos de conver-

    sacin y consultas perman entes con los trabajadores y el pueblo organ izado,

    mecanismos a los cuales, quiz algn da, podamos darles estatus constitucio-

    nal y todos los rganos de conduccin sean soberanamente colectivos. Con el

    ejemplo se educa y se conduce. En estas instancias se pueden or las mejores

    propuestas de la gente como uno, que sabe de qu estamos hablan do cuando

    hablamos de la vida cotidiana de la gente. Hoy largo una propuesta que me

    parece bien sencilla de instrumentar y puede contribuir a h acerle frente a la

    violencia. Antes de cada partido de ftbol, antes de cada partido de bsquetbol,

    (si son tran smitidos por TV y radio, much o mejor) creo que se debera emitir un

    mensaje claro, brevsimo, con un a voz bien conocida o un a persona previa-mente identificada con fuerte arraigo popular, que convoque a la convivencia,

    a la no violencia. Podran ser, incluso, jugadores de los equipos que se van a

    enfrentar. Estoy escribiendo esto el domingo pasado. Ya termin el clsico, y

    pienso qu bueno hubiera sido que ese mensaje lo hubiesen dicho el Chino

    Recoba y Danubio Zalayeta, por ejemplo, desde varios das antes, desde a ntes

    de la violencia que se origin en el partido preliminar. En esto se pueden com -

    promet er los personajes de la televisin y del carna val y de la msica de hoy y

    de ayer y de siempre. Tambin podemos pen sar en gente comn, en jvenes y

    madres y m ayores grabando esos spot. Hay que pensarla bien. Hay que definir

    a quin va mos a dirigir esos mensa jes y qu se va a decir, arriesgand o, sin caer

    en didactismos n i en frases soberbias ni en m etforas. Derechito y al pie: juga-

    mos, perdimos, pero igual nos divertimos o jugamos, ganamos; con el otro

    disfrutam os o, incluso, por ejemplo, el que pega es un cobarde por qu no?

    Hay que convocar a los mejores creativos y elaborar y em itir esos spot como u n

    hbito permanen te, con el desafo de que sean mensajes entradores, que lle-

    guen a la fibra de cada uno de nosotros y conmuevan hasta el tutano. Hay

    que convocar a los medios de prensa, a las AUF a las autoridades del bsquetboly ponern os de acuerdo en la frecuencia y el mejor lugar para la emisin. Deben

    ser como el himno, antes de cada partido. Si ands pensando en pegar, o

    lastimar a alguien, borrate bo, ac no tens lugar. En fin, para pensarlo no?

    Propuestasy concreciones

    A partir de la expe-ncia realizada por bri-da Agustn Pedrozaivel nacional, en elrco de una coordina-n de l as acc ionesdarias que ya infor-ra EL POPULAR setrument la propues-

    para colaborar de for-solidaria con el pue-

    cubano luego que elacn Sandy azotarasla, dejando 200 mili endas des t ru idass su paso.

    POPULAR dialogn el Secretario Nacio-

    de Organizacin delNCA, Daniel Diverio,n explic como sera participacin.erio comenz expli-

    ndo el sentimiento dedaridad con Cuba y

    bl de lo que el pue- c u b a n o b r i n d a

    estro pueblo. La solidaridad no se agra-

    ce, sino que se retribuye, la solidaridad deleblo cubano con el pueblo uruguayo per- que m iles de pobres volvieran a recupe-la visin por medio de las operaciones dearatas que se realizan en el Hospital des Jos Mart , estas o peracion es en e l Uru-

    ay slo existan a nivel privado y a costosy elevados. Este no es el nico caso, Cubamuy solidaria con los trabajadores y los

    guayos perseguidos por la dictadura.b r e l a f i n a n c i a c i n d e l v i a j e d e l o sgadistas dijo: Los compa eros que viajanfinanciarn el 20 % de los gastos para queos compa eros puedan viajar en los prxi-s meses y agreg, el PIT-CNT colabor

    n pasajes, tambin lo hace el Frente Am-o y Ancap, y el Ministerio del Interior agilit

    plazos para sacar los pasaportes y sintos para los brigadistas, esto nos permite

    viar una primera brigada el 21 de noviem-, volviendo el 18 de diciembre. En esta

    Solidaridad con Cubapara enfrentar

    daos del SandyBrigadas solidarias de l SUNCA levan ta rnvivien das en Cub a

    primera brigada van 15 trabajadores.Coment que hay condic iones para

    mantener este aporte sol idario en eltiempo, por lo cual se proponen enviarbr igadas de trabajadores todos losmeses hasta el mes de mayo.Sabemos que las condiciones en lasque los compaeros van a trabajar enCuba son duras, los compaeros seofrecieron a dar una mano sin pregun-tar cuales eran las condiciones, solici-tando l icencias s in goce de sueldo,pasando al seguro de paro o renun-ciando al trabajo para ir a colabora r enesa tarea afirm.Como reflexin fina l agreg: Para no-sotros es natural que los trabajadoresde la construccin estemos dispues-tos a dar una mano solidaria al pueblocubano, y aunque esto s ign i f ica ungran sacr i f ic io estamos con muchoentusiasmo y lo hacemos con una ale-gra inmensa.

    El martes la Cmara de Diputados home-naje a Pedro Aldrovandi. La iniciativa partidel diputado de Claveles Rojos, Frente Am-plio, Oscar Groba, quin comparti con Pe-dro varios aos de militancia sindical a la sa-lida de la dictadura. Dirigentes sindicales ymilitant es del PCU y el FA se hicieron presen-tes en el hemiciclo as como famil iares dePedro. Pedro Aldrovandi falleci recientem en-

    te a los 92 aos de edad, fue dir igente delsindicato del dulce, organizador de los traba-jado res ru ra les , secre ta rio de l in te rio r de laCNT y luego del PIT-CNT, pres o pol tico y m ili-tant e y dirigente del PCU.

    Diputados homena je a Pedro Aldrovandi

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    Viernes 16 de Noviembre de 201210

    En el marco de la estrategia definida por el PIT-CNT contenida en el d ocumen to de 27 puntos Reto-mar la iniciativa que fu era publicado ntegro por ELPOPULAR, se realizar este ju eves 22 de noviem breuna jornada nacional de movilizacin de la centralsindical. En Montevideo se realizar un paro de 9 a13 horas con una concentracin a las 10 de la ma-ana en Plaza Libertad y posterior marcha hasta 18de Jul io y Andes, donde serealizar el acto. En cada de-partamento el paro se adaptaa las condic iones loca les ytam bin los actos, pero en to-dos habr al menos, una acti-vidad central.EL POPULAR d ia log conMarcelo Abdala, secretario ge-neral de la UNTMRA y coordi-

    nador del PIT-CNT para cono-cer los detalles de la jornaday las iniciativas que ha des-plegado la central obrera enel marco de su estrategia y dell a n z a m i e n t o d e l aConcertacin Nacional para elDesarrollo Productivo.Entre otras cosas Abdala ade-lant q ue el PIT-CNT manten-dr reun iones con la UDELARy con el presidente de la Re-pblica, Jos Mujica.

    Concretar la estrategia

    Estamos inm ersos ahora en un proceso que im plica

    tanto la discusin en cada lugar de trabajo como todauna serie de mecanismos de difusin de los planteosdel PIT-CNT que implican la conquista de una seriede realizaciones programticas. Esta discusin y ladifusin de este material t ienen un punto muy impor-tante en la movilizacin del da 22 en la que aspira-mos que part icipen miles de trabajadores, comenzsealando Abdala.En cuanto a la jornada del jueves indic: El 22 nosmovilizamos p ara Concretar la esperanza, esto esgenerar las condiciones para una inflexin en la vidanacional que permita implementar una serie de as-pectos programt icos concretos que lleguen a la gen-te y que pauten a su vez vas de aproximacin a loque entendemos que es una necesidad: abrir unadiscusin sobre una estrategia de desarrol lo, queno se agota en una serie de medidas concretas peroque tiene que empezar por ellas, y supone un cami-no democrtico avanzado en beneficio de las gran-des m ayoras nacionales y populares.El dirigente sindical adelant dos propuestas qu e serealizaron al gobierno hemos planteado al Poder Eje-cutivo la necesidad de implementar dos m bitos dedilogo. Uno es una interaccin en tre el Gabinete Pro-ductivo y el movimiento sindical para concretar losaspectos programt icos que tienen que ver especial-mente con el desarrollo industrial. El otro es un di-logo entre el Gabinete Social y el PIT-CNT paraimplementar medidas para la expansin de los dere-chos de la gente y la redistribu cin de la riqueza.Adems agreg- venimos trabajando para que enlos primeros das de diciembre, con los mismos ac-tores que confluyeron con la central obrera para sa-

    l i r de l a c r i s i s de 2002 ba jo e l pa raguas de l aConcertacin para el Crecimiento y con otros posi-bles interesados, para la conformacin de un espa-cio que permita trab ajar para una estrategia de largoplazo para el desarrollo integral en el pas.

    Podramos decir que la fase de crecimiento de laac tua l ma t r i z p roduc t i va con componen tes deredistribucin ya fue desarrollada por el primer y elsegundo gobierno progresista. Desde la perspectivadel movimiento sindical no se trata ahora del creci-miento sino de una estrategia de desarrollo que vin-cule transformaciones de la matriz productiva en unsentido de industrializacin genuina, con ms valor

    agregado y principalmenteconocimiento incorporado alos procesos de produccin.Esto unido a procesos queapunten a una mejor distr i -bucin de la riqueza, lo cualsupone intervenir en la eco-noma poltica por parte de lossectores populares de modoque lo que hoy son bienes

    mercan tiles se conviertan enla prctica en derechos de lagente. Ah hay planteos enmateria de salud, de educa-cin, de vivienda, de salario,de segur idad socia l . Todoesto basado en la ms am-plia participacin de los tra-bajadores y el pueblo, sin-tetiz.Abdala destac especialmen-te que el viernes tenemosuna reunin, para nosotrosmuy relevante, con la planamayor de la Universidad de

    la Repblica, de modo de tirar lneas para generarun gran encuentro de la UDELAR con los intereses

    populares. Que impacte en la agenda de investiga-cin y que permita poner todo el saber hacer univer-sitario a disposicin del desarrollo de un programade transform aciones. Esto objetivament e es parte deese camino para la concertacin de actores mlti -ples con el inters supremo de promover el desarro-llo nacional.Finalmente confirm que se m antendr una reunincon el presiden te de la Repblica, Jos Mujica, paraimplementar estos dos mbitos que sealbamosantes, uno que se encargue de los aspectos produc-tivos e industriales y otro de la igualdad y de la distri-bucin de la riqueza. A ms tardar en los primerosdas de diciembre tendremos un encuentro con elpresidente de la Repblica, l ya est en conocimientode la estra tegia plantead a por el PIT-CNT y con segu-ridad tendremos una charla larga con la direccin

    de nuestra central para que tambin se conozcanlos nfasis que se van a plantear en el ao 2013,para marcar tambin una agenda de realizacionesconcretas.

    Concretar la esperanzaMovilizacin nacional de l PIT-CNT el jueves 22 d e

    noviemb re con p aro de 9 a 13 horas

    Recibimos la invitacin de los ex trabajadoresdel diario EL POPULAR (1957-1973), para el al-muerzo de fin de ao, que se efectuar el domin-go 25 de noviembre. El mismo se realizar en elRancho del Buceo, Rambla Armenia frent e a lacalle msterdam, junto al club ACAL a partir delas 11:30 horas. Segn sealan en la invitacin,

    participarn d el almuerzo legisladores y ediles, in-tegrantes del Secretariado del PIT-CNT, el presi-dente del BPS, Ernesto M urro y los directores ArielFerrari y Sixto Amaro.

    Almuerzo de fin de ao de extrabajadores de EL POPULAR

    La visita de Uruguay a Polonia arroj indiscu-tibles seales de mejora. El equipo de Tabrez ganpor un m erecido 3 a 1 y cerr un ao duro, que logolpe con crueldad en los ltimos cuatro partidosoficiales. El amistoso disputado en Gdansk fue unbanco de pruebas para una serie de variantes conproyeccin de futuro, que generan la ilusin deque lo peor haya pasado.El tcnico abri el partido con algunas variantesenraizadas en los ltimos m inutos del doloroso par-tido an te Bolivia, jugado h ace un m es. Lodeiro partidel doble cinco, para soltarse como enganche. Lomismo haba h echo desde que salt a la cancha enLa Paz. Cavani fue tan delantero como Surez. Ya

    lo haba sido en el Hernando Siles, cuando sobre elcierre se adelant t ras la salida de Forln . El equi-po presion arriba, tuvo la pelota, fue rpido y pre-ciso. Sin embargo, el discreto nivel del rival impo-ne cautela. Queda pendiente el exam en defensivo.En los ltimos cuatro partidos oficiales, la selec-cin recibi 12 goles. Pero el ataque de Polonia n oes medida como para pen sar que esos problemas yapasaron.Antes de la vuelta de las Eliminatorias, el futuroposiblemente incluya otro amistoso. Se necesitapara consolidar los cambios y, tambin, para saberqu tan dispuesto a sostenerlos est elMaestro. Esque seguramente se produzca el retorno a la con-vocatoria de algunos au sentes de relevancia, comoForln y elRuso Prez. Estar dispu esto a sacrifi-car a algun o de ellos para darle continuidad a loensayado en Gdansk? En cam bio, otras incgnitas

    parecen irse despejando. El juego contra los pola-cos marc la vuelta a la seleccin de dos delante-ros, el Chori Castro y Stuani. Pero jugaron pocosminutos. Ingresaron cuan do el encuentro ya esta-ba cerrado. La seal le da solidez a la idea de q ue elproceso es decir, la base de jugadores preex istenteal amistoso de este mircoles- es due o de casi to-das las soluciones a sus problemas de los ltimostiempos.

    Por Martn Rodrguez

    Mejorandopo r el este

    Pelotazos

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    Viernes 16 de Noviembre de 201211

    El 30 de noviem bre comienza el XVCongreso de la Federac in Uruguaya deEmpleados de Comercio y Servicios(FUECYS). EL POPULAR dialog conDaniel Delgado y Mario Amestoy, miem-bros del Consejo Directivo Nacional yde la Lista 3, sobre las propuestas deesta corriente gremial hacia esa instan-cia.

    - C u l e s l a s i t u a c i n d e - C u l e s l a s i t u a c i n d e - C u l e s l a s i t u a c i n d e - C u l e s l a s i t u a c i n d e - C u l e s l a s i t u a c i n d e FUECYS y que temas abordar e l FUECYS y que temas abordar e l FUECYS y que temas abordar e l FUECYS y que temas abordar e l FUECYS y que temas abordar e l p r x i m o C o n g r es o ? p r x i m o Co n g r e s o ? p r x i m o C o n g r es o ? p r x i m o Co n g r e s o ? p r x i m o C o n g r e so ?

    -Es el XV Congreso de FUECYS y serealizar el 30 de noviembre y el 1 dediciembre y es elector y programtico.All vamos a resolver la plat aforma a lle-var a los Consejos de Salario el ao qu eviene donde discutirn todos los gru-pos qu e com ponen la FUECYS y se ele-gir la direccin para los prximos tresaos. Es muy importante, porque fina-lizado el mismo vamos a estar de caraa los Consejos de Salario. Hoy, que hayun avance muy fuerte de los sectoresempresariales y de la derecha, qu e lostrabajadores discutamos nuestra pla-taforma es de vital importancia. Ms allde la eleccin de la direccin, para no-sotros es clave la definicin del p rogra-ma de la FUECYS y la plataform a para

    los Consejos de Salarios.

    - Cun tos g rupos t i ene FUECYS- Cun tos g rupos t i ene FUECYS- Cun tos g rupos t i ene FUECYS- Cun tos g rupos t i ene FUECYS- Cun tos g rupos t i ene FUECYSen l os Conse jos de Sa la r i os? en l os Conse jos de Sa la r i os? en l os Conse jos de Sa la r i os? en l os Conse jos de Sa la r i os? en l os Conse jos de Sa la r i os?

    -Son 58 mesas de negociacin.

    - S e h a r e g i s t r a d o u n c r e c i - - S e h a r e g i s t r a d o u n c r e c i - - S e h a r e g i s t r a d o u n c r e c i - - S e h a r e g i s t r a d o u n c r e c i - - S e h a r e g i s t r a d o u n c r e c i - m i e n t o m u y i m p o r t a n t e d e l a o r - m i e n t o m u y i m p o r t a n t e d e l a o r - m i e n t o m u y i m p o r t a n t e d e l a o r - m i e n t o m u y i m p o r t a n t e d e l a o r - m i e n t o m u y i m p o r t a n t e d e l a o r - g a n i z a c i n d e l o s t r a b a j a d o r e s g a n i z a c i n d e l o s t r a b a j a d o r e s g a n i z a c i n d e l o s t r a b a j a d o r e s g a n i z a c i n d e l o s t r a b a j a d o r e s g a n i z a c i n d e l o s t r a b a j a d o r e s d e l s e c t d e l s e c t d e l s e c t d e l s e c t d e l s e c t o ro ro ro ro r. . .. . .. . .. . .. . .

    -S, la ley 17.94 0 posibilit la organi-zacin de ramas de actividad que an-tes resultaban impensables. No es f-cil la organizacin porque las patrona-l e s s i g u e n s i e n d o l a s m i s m a srepresoras de antes de la Ley, pero s

    tenemos ms herramientas para la or-ganizacin. FUECYS tena unos pocosmiles de trabajadores organizados yahora andamos en un porcentaje cer-cano a los 25 mil trabajadores y ensectores que eran impensables comola seguridad privada, la limpieza, lasempresas t ercerizadas, los propios su-permercados, donde los compaerosestn reivindicando cosas bsicas to-dos los das, que ni siquiera tienen qu ever con reclamos sindicales sino conel cumplimiento de la normativa labo-ra l . Hemos crec ido en nmero y ensectores que se abarcan, y es muyimportante . Ahora nos queda crearmsculo , for ta lecer la organ izacin,para poder enfrentar la embestida pa-tronal. Hay que recordar que la Cma-ra de Comercio ha sido siempre unade las ms duras con los trabajadores.

    - E n e s te m a r c o , c u l e s s o n - E n e s te m a r c o , c u l e s s o n - E n e s te m a r c o , c u l e s s o n - E n e s te m a r c o , c u l e s s o n - E n e s te m a r c o , c u l e s s o n l a s p r i n c i p a l e s p r o p u e s ta s d e l a l a s p r i n c i p a l e s p r o p u e s ta s d e l a l a s p r i n c i p a l e s p r o p u e s ta s d e l a l a s p r i n c i p a l e s p r o p u e s ta s d e l a l a s p r i n c i p a l e s p r o p u e s ta s d e l a L i s ta 3 hac ia e l Congreso? L i s ta 3 hac ia e l Congreso? L i s ta 3 hac ia e l Congreso? L i s ta 3 hac ia e l Congreso? L i s ta 3 hac ia e l Congreso?

    -La Lista 3 es minora en la direc-cin de FUECYS; del ltimo Congresosal imos con aproximadamente un ter-c io de l Consejo Di rect ivo Naciona l .Nuestra propuesta es una continuacinde lo que propusimos en el XIII y XIVCongreso, porque se ha m ejorado pero

    queda mucho por hacer. Es ms, en elXIII Congreso la plataform a que se lleva los Consejos de Salarios fue la quepresent la Lista 3 y fue aprobada. Laplataforma que presentamos consta detres e lementos fundamenta les: unaparte dirigida hacia las patronales y elEstado, porque entendemos que hayvarios aspectos de la vida laboral en losque tenemos que tener el concurso deesos dos componentes de la sociedad;otra parte que va dirigida directamentea las patronales, que depender mu-cho de la organizacin sindical y de lafuerza que tengamos para que se lapodamos arrancar; y la ltima dirigidaa los trabajadores, especialmente a los

    sindicalizados, para fortalecer la orga-nizacin, reafirmar la estructura inter-na con representacin directa de lostrabajadores de las distintas ramas quecomponen la Federacin, conformar sin-dicatos por rama. En este ltimo puntotambin conformar comisiones como lade Salud Laboral, capacitar a los com-paeros en negociacin colectiva, tene-mos 58 mesas de negociacin pero tam-bin infinidad de negociaciones concre-tas y particulares. En este punto tene-mos una propuesta concreta que escrear en FUECYS la Secretaria de Nego-ciacin Colectiva para realizar una ta-rea ms eficaz. Proponemos tambincrear una Secretara de Empleo queaborde una cuestin muy importanteque son l as Bo l sas de Traba jo deFUECYS. Nuestra Federacin tien e porestatut o la posibilidad de gestionar bol-

    sas de trabajo, nosotros venimos plan-teando que esa gestin sea transito-ria, por un plazo no mayor a un ao.Hasta el momento no lo hemos logra-do. Entendemos que si bien la situa-cin de los trabajadores que depen-den de FUECYS es m ejor que la de losque son empleados de un patrn ca-pitalista, en los hechos nuestra Fede-racin funciona como patronal de ungrupo de trabajadores. Esta situacin

    es estatutaria, viene del estatuto de193 0, buscamos modificarla, que seaun perodo de transicin, para que lospropios trabajadores tomen las rien-das, ayudndolos en la autogestinpero no gerenciando eso como si fue-ra una empresa.Tambin generar mbitos de integra-cin que permitan la participacin det o d o s i n d e p e n d i en t e m e n t e d e s uorientacin sexual, religiosa o poltica.Participar ms activamente en el PIT-CNT, integrando orgnicam ente tod aslas comisiones, cosa en la que porahora FUECYS est en falta. Tambinparticipar, junto al conjunto del movi-miento sindical, en la defensa de las

    empresas pb l icas, en e l enfrenta-m i e n t o a l a b a j a d e l a e d a d d eimputabilidad.

    -Hac ia l os Conse jos de Sa la - -Hac ia l os Conse jos de Sa la - -Hac ia l os Conse jos de Sa la - -Hac ia l os Conse jos de Sa la - -Hac ia l os Conse jos de Sa la - r i o , c u l e s l a p r o p u e s ta c e n t r a l r i o , c u l e s l a p r o p u e s ta c e n t r a l r i o , c u l e s l a p r o p u e s ta c e n t r a l r i o , c u l e s l a p r o p u e s ta c e n t r a l r i o , c u l e s l a p r o p u e s ta c e n t r a l d e l a L i s t a 3 ? d e l a L i s t a 3 ? d e l a L i s t a 3 ? d e l a L i s t a 3 ? d e l a L i s t a 3 ?

    -La propuesta b sica es que el sa-lario mnimo del sector sea un cuartode la canasta bsica, lo que a juniode 201 2 sera de 15 mil pesos. Noso-tros siempre afirmam os que el trabajodigno tiene que ser con salario digno.Por eso tambin promovemos la reduc-cin de la jornada sin prdida de sa-lario. La vida moderna nos brinda po-sibilidades de vivir mejor, pero parapoder hacerlo hay que tener tiempopara ello. Mediante la reduccin d e lajo rn ad a t a m b i n se ge n e ra n m spuestos de trabajo. Para nosotros es

    clave tambin combatir la jornalizacinque en muchos sectores de actividades un tema muy difcil, promovemos lamensualizacin. Es muy difcil, porquede acuerdo a la normativa que an estvigente, los patrones pueden dar la can-tidad de jornales que les parezca. En-tonces tenemos traba jadores que s ibien tienen u n laudo bsico en los Con-sejos de Salario, hasta interesant e parala media, luego en la cantidad efectivade jornales que los trabajadores tienenen el mes eso se ve sensiblemente re-ducido. Queremos conformar la Comi-sin Tripartita de Salud e Higiene, exigirque eso se haga en un plazo no mayorde 180 das. Ampliacin de los dere-chos en lo que tiene que ver con el pe-rodo de lactancia materna. Estableceren los convenios sanciones para el aco-so moral. Exigir el cumplimiento de laley de acoso sexual. Tambin incorpo-ramos otro aspecto muy sentido en elgremio que es lograr que los segurospor accidente protejan al trabajador unahora antes y una hora despus del in-greso a su lugar de trabajo. El Bancode Seguros del Estado se ha transfor-mado hace tiempo en una cuestin bienproblemt ica, no depende esto necesa-riamente de las m ximas autoridades,

    pero quienes a la hora de recibir a untrabajador definen si lo ampara el Ban-co o no las terminan rechazando mu-chas veces. Por ejemplo, en el comer-cio tenemos un problema extendido yserio que es la tendinitis, las cajerasde supe rmercado l a su f ren mucho .Est afeccin no es considerada enfer-medad laboral por el BSE, los trabaja-dores pierden jornales y no son ampa-rados. Rechazamos los contratos a tr-mino. Reclamamos que los trabajado-res tercerizados, tanto sea por el Esta-do como por empresas privadas, ten-gan los mismos salarios que la empre-sa que los cont rata. La tercerizacin esuna real idad que padecemos los traba-

    ja d or es , qu e p rec a r iz a el t ra b a jo yprecariza el salario.

    Las propuestas de la Lista 3hacia el Congreso de FUECYS

    Avan zar e n conqu ista s en los 58 gru po s de l Con sejo de Salarios

    y fortalecer la organizacin.

  • 7/30/2019 El Popular N 208 - 16/11/2012

    12/20

    Viernes 16 de Noviembre de 201212

    El viernes pasada a la hora seala-da llova y haba un fuert e viento sobreMontevideo. Despus par, pero antescostaba pegar la vuelta por Ejido y SanJos para llegar a la sede de la Asocia-c in de la Prensa Uruguaya (APU).Adentro una veintena de ex presos po-lticos esperaban. Haba conferencia deprensa. EL POPULAR fue el nico me-dio de prensa escri to presente. Esta-ban los canales 5 y 12 y no haba nin-guna radio. Dicen que los viernes noson buenos das para este tipo de acti-vidades.El ambiente estaba pintado de alegra.

    La equivocada decisin tomada por elm i n i s t r o d e De f e n s a E l e u t e r i oFernndez Huidobro el 27 de setiem-bre al prohibir tomar fotos haba sidorevertida. El abogado Federico lvarezPetrag l ia , e l per iod is ta denuncianteRodolfo Porley y sus seis testigos nobajaron la guardia y siguieron para ade-lante luego del primer tropiezo.Igua l act i tud tom la jueza Mar ianaMota. El juicio se retras poco ms deun mes, pero ahora en lugar de sieteex presos polticos entraron 16 al 30 0Carlos o Infierno Grande. Diez deellos estn en otras causas y tambinfueron torturados en el centro clandes-

    tino. Y ahora aportaron ms datos ypruebas. Dicen que no hay mal que porbien no venga.EL viernes pasado la jueza MarianaMota, los 16 ex presos polticos y elabogado patrocinante de la causa lle-garon en la maana al Batalln de In-fantera No. 13 sito en Avda. de lasInstrucciones y Casavalle, donde fun-cion el 300 Carlos Infierno Gran-de y acompaados por efectivos dela Polica Tcnica se tomaron las im-prescindibles fotos para completar unainspeccin ocular. Y no slo eso: todala recorrida fue filmada con celulares.Por la noche se la pudo apreciar en lapantalla gigante de APU.

    Entre los ex presos polticos de la cau-sa estuvieron presentes el denuncian-te Rodolfo Porley y sus testigos M