UNIVERSIDAD RURAL DE GUATEMALA

FACULTAD: CIENCIAS JURDICAS Y SOCIALES

CURSO: METODOS DE INTRODUCCION

TEMA: CASO SIEKAVIZZA

No.NAMESCODE

1SIOMARA MAGALY SAJCHE MOLINA14000-0543

2CLAUDIA KARINA CAMPOSECO SIERRA14000-0864

3YANIRA MONTEPEQUE OROZCO14000-1033

4KATERIN ANDREA AGUSTIN JUAREZ14000-1034

5JUAN MORAN ANAVISCA14000-1081

CRISTINA SIEKAVIZZAQuien es Cristina Siekavizza?

Cristina Siekavizza Molina de Barreda naci el 9 de diciembre de 1977. Sus ojos almendrados es la caracterstica fsica que ms resalta. En su adolescencia, fue campeona nacional de natacin.Se cas el 15 de marzo de 2003, a los 25 aos, con Roberto Eduardo Barreda de Len. Mujer dedicada a su esposo y a sus hijos.Su primer hijo, Roberto Jos Barreda Siekavizza, naci el 5 de julio de2004. Actualmente tiene 6 aos de edad. Su hija naci el 20 de octubre de 2007 y la sac adelante, ya que naci prematuramente, de 6 meses y pes 2 libras 15 onzas. Mara Mercedes Barreda Siekavizza, actualmente tiene 3 aos de edad.

Cristina Siekavizza no era una mujer que tuviera libertad de actuar. Dedicada a su familia, era muy reservada y cariosa con sus hijos, se dedicaba a sus labores domsticas, siempre mantena una rutina estricta, ordenada y planificada; porque se levantaba a las 7:30 de la maana les daba el beso de buenos das a sus hijos y se iba a realizar sus ejercicios.

Cristina, desapareci inexplicablementeel 7 de Julio de 2011. En el transcurso de los das se han hecho investigaciones que dan base para sostener que Cristina Siekavizza era vctima de violencia intrafamiliar. El da que desapareci aparte del esposo, nadie ms da razn de haberle visto.

Joven madre de 33 aos, de tez blanca, complexin delgada, un metro 60 de estatura, y ojos caf almendrados. Sus familiares y amigas la describen como una mujer de familia dedicada al cuidado de sus hijos, inteligente y capaz.

Stephanie Klussmann, quien le conoce por espacio de 15 aos y quien le califica como una de sus mejores amigas, dice que ella es: centrada, amable, educada, sencilla, servicial y muy catlica (iba a misa regularmente).

Stephanie fue la ltima amiga que se comunic con ella. Un da antes, a eso de las 18:50 horas, hablaron por telfono por lapso de 4 minutos. Todos los das nos chatebamos y nos llambamos unas dos veces a la semana. Al da siguiente no respondi mis mensajes por el BlackBerry, ni siquiera los ley (esa terminal permite ver cuando un mensaje fue ledo).

>Lo ltimo que Cristina le dijo a su amiga fue: Te dejo porque ya vino Roberto (esposo de la vctima) y vamos a cenar con los bebs. Cristina se gradu del Colegio Monte Mara y en 1996 se inscribi en la Universidad Francisco Marroqun (UFM) donde obtuvo el grado acadmico de licenciada en Administracin de Empresas, 5 aos despus.

>Su ltimo trabajo fue en Bancaf, donde renunci para dedicarse a su hogar. Tena 8 aos de casada, tiempo en el cual procre a sus hijos Roberto de 7 aos y Mara Mercedes de 4. El martes 5 de julio celebr, en su casa, el cumpleaos de su hijo, algo que la tena muy contenta.Dnde est Cristina?!... El silencio estremecedor de la impunidad respondeAnte el desesperado grito de impotencia, la impunidad responde con su estremecedor silencio.

El 7 de Octubre se cumplen 3 meses de su desaparicin, y hasta el da de hoy se desconoce lo que pudo ocurrir con ella. Su nombre:

Cristina Siekavizza.

El presente artculo est escrito en base a fuentes de informacin digitales de medios cibernticos conocidos por todos. Es una recopilacin de datos, desde el inicio de la desaparicin de Cristina hasta el da de hoy. Pretendo ser objetivo, claro y real al presentar una compilacin de los hechos que se han presentado a lo largo de este tiempo dos aos y ocho meses (32 meses).

La informacin est estructurada para contar la historia de Cristina La que ella jams podr contar.Norma Cruz, Directora dela Fundacin Sobrevivientes, y familiares de Cristina Siekavizza, indican que Roberto Barreda de Len, (su esposo), es una persona violenta y con aires de superioridad. Hay antecedentes de una serie de problemas con vecinos del condominio Los Manantiales, donde residan. En tanto que la desaparecida siempre se reserv los problemas que la aquejaban.

Segn Cruz, la hiptesis que se maneja es de un Femicidio:

Para nosotros es un femicidio, porque no es posible que una persona pueda desaparecer solo por s, creemos que todo estos hechos se dieron por la violencia con la que viva la pareja, hasta el hecho que ni los propios padres saban la situacin familiar de Cristina.

CRISTINA, UNA MUJER MALTRATADA:

Juan Luis Siekavizza Girn, padre de Cristina, afirm que su hija era sometida a maltrato psicolgico y econmico por parte de su esposo, Roberto Eduardo Barreda de Len.

Segn Siekavizza Girn, quien se present a la audiencia de primera declaracin de Petrona Olga Say Velsquez, empleada de la familia Barreda Siekavizza, en el Juzgado Dcimo de Instancia Penal, afirm que su hija era vctima de agresiones.

Respecto de la violencia psicolgica, Siekavizza Girn refiri que a Cristina le eran restringidos los movimientos fuera de su vivienda, ubicada en la carretera a El Salvador.

En ocasiones solo le permitan movilizarse al centro de la ciudad, una vez por semana. Si ya fuiste una vez, por qu vas a volver a salir? Es mucho gasto de gasolina, le deca Barreda de Len a su hija, expuso.

Agreg que tambin tena restringida las visitas de sus amistades.El padre de Cristina cont que a ella le daban muy poco dinero para asumir los gastos de la familia. Le daba Q500 como gasto para adquirir las cosas de la casa, cada mes, dijo.

El esposo le entregaba esa cantidad a Cristina, ya que estaban en un plan de austeridad porque, segn l, estaba ahorrando para comprar una casa.Sin embargo, en una ocasin compr unos boletos para viajar en un crucero.Eso gener una discusin, cuando ella se molest con l y le reclam que si estaban ahorrando, por qu haba programado ese viaje.

Al parecer, Barreda de Len le respondi que no era tan caro.

Ella fue a buscar a internet y se dio cuenta de que el valor que le dijo era tres veces ms caro de lo que le mencion, cont Siekavizza Girn.

Lo que descart el padre de Cristina es que haya sido sometida a maltratos fsicos. Ella en ningn momento se quej de una situacin de esas, afirm. Agreg que la relacin que ellos mantenan con Barreda de Len era distante y de respeto.

l mantena mayor relacin con sus padres, por lo que mi hija se mantena con ms frecuencia con la familia de su esposo, manifest Siekavizza Girn.La farsa del esposo...Roberto Barreda exigi la aparicin de su esposa Cristina Siekavizza, el 8 de agosto pasado.

l relato que Cristina tuvo un aborto natural en diciembre de 2010, lo cual la hizo entrar en depresin, pero asegura que la etapa ms crtica ya haba pasado. En abril, cuando se supone nacera nuestro tercer hijo, fue cuando a ella ms le afect, comenta. De hecho, estaba bajo tratamiento psiquitrico y el mdico les haba recomendado a ambos que viajaran juntos para superar el duelo del beb.

Nos fuimos solos a Belice, relata Roberto, quien muestra un lbum fotogrfico con momentos de ese periplo. Mis hijos se quedaron con mis padres, aade.

Beatriz de Len, madre del esposo de Cristina, dice con voz entrecortada:Estamos muy afectados. Ella y su esposo se encontraban en Mosc, cuando fueron informados de la noticia y tuvieron que regresar de inmediato.

Una semana despus de que desapareciera Cristina, el 7 de julio del 2011, el padre de ella discuti con Barreda de Len por telfono. En esta conversacin, Siekavizza Girn le habra dicho que si no le entregaba a sus nietos, de 4 y 7 aos, se los quitara por la va legal.

Esa situacin motiv que Beatriz Ofelia De Len, madre de Barreda de Len, presentara medidas de seguridad a favor de su hijo, en un Juzgado de Paz.

El juzgador resolvi que el abuelo materno no poda acercarse a los nios por un perodo de seis meses. En casode incumplircon esa disposicin, sera procesado por el delito de desobediencia.

Sin embargo, Barreda de Len desapareci junto con los menores, pocos das despus.

Ante esa situacin, el Ministerio Pblico ha efectuado ms de ocho allanamientos en su bsqueda, pero hasta ahora han sido infructuosos.Informaciones de prensa aseveran que desde el viernes 6 de agosto los hijos de Cristina estn con paradero desconocido, igual que el esposo. Esto motiv que se activase una alerta Alba Kenneth, para poder dar con los menores.Petrona Say, pieza clave de la investigacin:

PetronaOlga Say Velsquez, de 24 aos, empleada de la familia Barreda Siekavizza por 6 aos, fue capturada y qued vinculada a proceso, el cargo: encubrimiento.

El proceso fue declarado en reserva por Vernica Galicia, Jueza Dcima Penal.Segn el Ministerio Pblico, Say Velsquez conoce el paradero de Roberto Eduardo Barreda de Len y sus dos hijos.

Ella estaba con ellos el mircoles, el ltimo da que fueron vistos.Afirma que su jefe slo le dijo que iba a cenar con sus hijos, pero ya no regres. Say Velsquez seal que ha trabajado con la familia Barreda Siekavizza por ms de seis aos.

En la bsqueda de Siekavizza se han cateado 14 viviendas y cinco ms, en bsqueda de los menores, quienes habran sido sacados del pas el viernes ltimo por Barreda de Len, quien estaba arraigado.

Actualmente se hacen todos los esfuerzos posibles para conocer lo que sucedi con Cristina as como establecer la ubicacin de los nios y su bienestar.PERFILES:

Es importante dar a conocer quin es la vctima en cada hecho de violencia que se da contra la mujer y evitar las estigmatizaciones de la afectada. Es necesario conocer los perfiles de cada uno de los involucrados (vctima y agresor).

En este caso, conocer quines eran Cristina Siekavizza y Roberto Barreda, es esencial para identificar el tipo de violencia que afectaba el hogar y los hechos de la vida diaria que indicaran que Barreda es una persona misgina.

La violencia intrafamiliar no tiene estatus social, porque vemos que ahora una joven mujer est desaparecida. Es difcil identificar la violencia, ya que Cristina era una mujer reservada, dedicada a su familia, pero, cuando algo no le pareca o le molestaba se lo deca a su esposo, pero en tanto jams se supo que ella Cristina- era objeto de violencia por parte de su esposo, dijo Norma Cruz, directora de la Fundacin Sobrevivientes.Cristina:La informacin que se tiene sobre el perfil de Cristina Siekavizza, indica una dinmica de mucho control en su vida, no era una mujer que tuviera libertad de actuar, dedicada a su familia, muy reservada y cariosa con sus hijos, se dedicaba a sus labores domsticas siempre mantena una rutina estricta, ordenada y planificada. El nacimiento de su hija Mara Mercedes, que fue prematura, ocasion una lucha constante para lograr salir de la crisis. Desde entonces, Cristina trabaj en fundaciones de nios prematuros.

Susana Siekavizza record que su hermana era una mujer alegre y dedicada a sus hijos, un nio y una nia.

Sus amigas comentaron que la ltima vez que se reunieron con Cristina, en abril del 2011, la notaron distinta. Afirmaron que en esa ocasin les coment que su esposo le exiga que se embarazara, pero por recomendacin del mdico, se negaba.

Roberto:En tanto de Roberto Barreda de Len se dice que es una persona misgina, ya que tena preferencia por su hijo Roberto Jos; era violento con su esposa, ya que la tena en una dinmica de opresin, de violencia psicolgica, de violencia sutil, que cualquier persona podra estar viviendo y no identificarla.Barreda tiene aires de superioridad, tuvo una serie de problemas con vecinos del condominio Los Manantiales, donde residan. Tuvo conflicto con un Polica Municipal de Trnsito al cual le sac el arma, as tambin amenaz a los jardineros y a los que cuidan el sector, ya que habran colocado veneno para matar ratas y les responsabiliz por si algo les pasaba a sus perros.Adems, Barreda siempre se mantuvo bien vestido con ropa cara, en tanto Cristina, mantena la misma ropa y zapatos, dndole un gasto mensual de 500 quetzales, para la comida.

Segn Rodolfo Daz, abogado de la familia, Barreda trabajaba en una empresa de telefona celular, que por mantenerse en reserva el caso no dara mayores datos.

La infancia de RobertoSu da comenzaba muy temprano, cuando el autobs del colegio lo pasaba a recoger por su casa, en pleno Centro Histrico, en las cercanas de la Hemeroteca Nacional. Corran los aos ochenta.

Era un nio risueo, muy noble, admiraba la cultura alemana y era amante de los perros. Una niez sin preocupaciones, con viajes frecuentes y acompaado a todos lados por su gran amiga: Sandy, una perra Collie (pelo largo), a la cual quera ms que a nada. As era la vida de Roberto Eduardo Barreda de Len, esposo de Cristina Siekavizza.

l haba comenzado el knder en el Colegio Metropolitano, pero sus padres creyeron que la colegiatura era innecesariamente elevada, y optaron por trasladarlo al Liceo Javier, otro prestigioso colegio guatemalteco.

Una bandera de Alemania colgaba en su habitacin. Su crculo familiar, conformado por su hermana menor, Laura, y sus padres, Beatriz Ofelia de Len y Roberto Barreda Valenzuela, ambos juzgadores con una larga trayectoria judicial, era poco carioso y distante, pero a la vez unido.

El ftbol era su juego preferido por las tardes. Como estudiante superaba al promedio, muy ordenado y meticuloso.

Al pasar los aos, 2 cualidades destacaban y persistan en la personalidad de Roberto: era un nio tan ambicioso que a los 14 aos, ya se haba trazado una meta: ser millonario antes de los 30. Con los aos, las personas que lo conocieron dicen que el dinero era su obsesin.

La segunda: era un nio muy devoto de la religin catlica, las procesiones ocupaban gran parte de su vida. Esta ltima cualidad era quiz la ms fuerte, porque en una ocasin pag con su dinero los turnos para que sus amigos acudieran a levantar andas. Mientras sus compaeros ya adolescentes tenan discos de rock, l escuchaba marchas de procesionales.

Segn el crculo estudiantil que conoci a Roberto, no era un adolescente violento; al contrario, era un poco miedoso. Solo una vez sorprendi a sus compaeros cuando le devolvi un manotazo a un maestro de ingls que le peg con una regla.

Su relacin con Cristina:Roberto Barreda se enamor de Cristina desde el primer momento. Cuando la conoci, como ella tena novio, l, muy inteligente, se hizo muy amigo de su hermano Juan Carlos. Frecuentaba la casa de los Siekavizza como su gran amigo; sin embargo, su objetivo era ver a su hermana. Roberto esper que esa relacin terminara para declararle su amor.

Fueron novios durante un perodo menor de 6 meses y se casaron. Sus familiares estaban felices, porque el primer novio de ella no los convenca. Estaban contentos porque ya era amigo de cristina y su espera (de casi un ao) para obtener una respuesta de amor positiva, haba demostrado que realmente la quera.Sin embargo, en la bsqueda de respuestas, en una reunin familiar, los seres queridos de Siekavizza cuestionaban que nunca vieron a Roberto ofrecerle alguna expresin de cario a su esposa, detalle que ahora cobra relevancia. El crculo de la vctima no duda de que Roberto Barreda es culpable de su desaparicin y posible muerte.

Una fuente cercana al crculo de la familia Siekavizza confirm que hace algunos meses Cristina ya estaba decidida a ingresar una demanda de divorcio, solo estaba esperando que una amiga suya que era abogada, quien se encontraba en Costa Rica, regresara al pas para asesorarla.Algunos vecinos del Condominio Los Manantiales lo describen como una persona conflictiva, ya que afront diversos problemas mientras vivi en ese lugar hasta antes de la desaparicin de su esposa.

Amigas de Cristina aseguran que la empleada domstica Petrona Say Velsquez declar en el juicio que la mujer muri la noche del 6 de julio de 2011 debido a golpes propinados con un bate. Esto no ha podido confirmarse, porque el caso se encuentra en reserva.

Roberto, el padre y esposo tacao:No solo los familiares de Cristina Siekavizza afirman que Roberto era un hombre tacao.Cristina usaba una camioneta ltimo modelo, pero no tena gasolina para echarle, porque Roberto le restringa mucho los gastos, dijo un familiar.

En su juventud, en la Universidad Rafael Landvar (URL), mientras cursaba la carrera de Administracin de Empresas, con sus compaeros fueron a tomar algo en El Reducto, un lugar que queda cerca de la U. En esa oportunidad Roberto los acompa, pero se fue sin pagar su cuenta. Esa actitud le vali algunos enemigos y muchos se alejaron de l.

En su juventud, le deca a sus amigos: No me gusta ir a gastar al cine, para eso estoy pagando cable.

Personas allegadas a la familia cuentan que Roberto no tena mucha paciencia con los nios. Con demasiada frecuencia se vea que les jalaba las orejas o les daba de pellizcos. Una persona que prefiri no dar su nombre y que le conoce, dijo: Yo no crea que l hubiese hecho algo as, no era una persona violenta, pero desde el momento que se fue, se ech demasiado color de que l haba sido el responsable de la desaparicin de Cristina.

Segn Norma Cruz, representante de la Fundacin, se determin que Barreda de Len desprecia a las mujeres y que estaba acostumbrado a llevar un ritmo de vida por arriba de sus posibilidades econmicas. Adems, lo identifican como una persona violenta, que en una ocasin amenaz con una pistola a un agente de la Polica de Trnsito.

HECHOS:La discrecin con que se ha manejado el proceso permiti a los fiscales obtener informacin de cmo ocurrieron los hechos y efectuar varias capturas.

Uno de los detalles obtenidos por los fiscales es la confirmacin de que la noche del 6 de julio de 2011, vecinos de Siekavizza escucharon una fuerte discusin entre ella y su esposo, Roberto Barreda.

Las pesquisas establecen que ella sali al balcn de su habitacin a pedir ayuda, a gritos.

Cobarda colectiva.Es el trmino que viene a la mente ante la inaccin de los vecinos y testigos que escucharon o vieron gritar desde su balcn a Cristina Siekavizza la noche de los sucesos que acabaron con su vida.

Cmo puede cualquiera permanecer impvido ante una situacin similar?...Por cobarda.

Somos agresivos y abusivos para insultar a los dems; pero si se trata de auxiliar a otro, entonces mejor no me meto. Me puede pasar algo.

Excusas. Carecemos de la ms mnima solidaridad. A quienes no quisieron intervenir pudiendo haberlo hecho, podra sealrseles de corresponsabilidad o hasta silencio cmplice?

Desaparecida y sin pistasSegn la investigacin, basada en el testimonio de Roberto, el jueves 7 de julio de 2011, la vctima sali de su residencia, ubicada en el condominio Los Manantiales, carretera a San Jos Pnula, a eso de las 6:45 horas. Nunca regres a su casa.

Su esposo fue el ltimo en verla. Los videos de la garita de seguridad del condominio registraron el ingreso de Cristina un da antes, a eso de las 14 horas, pero no registran ningn egreso. Oficialmente el residencial tiene un solo lugar para entrada y salida, aunque Roberto dijo haber identificado un punto ciego y otro portn donde no hay controles. La garita es monitoreada las 24 horas por cmaras de vigilancia.

Nos vemos, fueron las ltimas palabras que Cristina le pronunci a su esposo. Las dijo sin mucho afn y sin mayor entusiasmo, con la actitud de quien regresar a casa minutos ms tarde. Pero tal cosa no sucedi.

Los guardias de seguridad patrullan en bicicleta desde tempranas horas (el recorrido lo inician a las 5:30 horas), no le vieron. El condominio cuenta con 400 casas, 200 lotes baldos y un rea verde de 43 mil metros cuadrados. El residencial est compuesto nicamente por 7 avenidas y 10 calles.

Sus hijos tampoco le vieron esa maana. Susana asegura que habitualmente ella se despeda de sus hijos, previo a que se fueran a estudiar. La empleada domstica, responsable de preparar el desayuno de los infantes tampoco le vio.

Cmo se desaparece una persona a plena luz del da, sin ser vista por nadie en un lugar tan reducido? Esa es la pregunta que deben responder las autoridades.

Su padre Juan Luis comenta que a diferencia de lo que se ha publicado en los medios de comunicacin, la conducta de Cristina, de ese ltimo da en que fue vista con vida por su cnyuge, no responde a su verdadera rutina. Tal teora es respaldada por su hermana, Susana, quien afirma que la vctima no sola levantarse antes de las 7 horas y mucho menos salir a caminar. Su esposo sin embargo comenta que por recomendaciones mdicas ella recientemente haba decidido salir a meditar a las reas verdes de la colonia.

Segn datos recabados por el MP, Cristina supuestamente visit las reas verdes del condominio durante esa maana. La caminata de Cristina desde su casa a ese lugar debi haber durado unos 10 minutos a juzgar por la distancia. Lapso de tiempo que hubiese permitido que alguien la viera, pero eso no ocurri.

Otra situacin establecida por las pesquisas es que el cuerpo de Siekavizza fue sacado de su vivienda, en San Jos Pinula, el 7 de julio de 2011, y se presume que fue en el momento en que Barreda llev a sus hijos al colegio. Durante la reserva se localiz el automvil utilizado para el traslado del cadver.

El Sistema de Posicionamiento Global (GPS, en ingls) demuestra que Barreda se moviliz por varios lugares, con la finalidad de deshacerse del cuerpo de su esposa, pero finalmente lo pudo haber lanzado en la ribera del ro Motagua, cerca del departamento de El Progreso, en donde un grupo de buzos contina la bsqueda.INVESTIGACIN:El da que Cristina desapareci, su hermano mayor, Juan Carlos, se aperson a la Fiscala de San Jos Pinula a presentar una denuncia verbal por la desaparicin. Dicha queja consta en el expediente MP-001-2011-66170, el cual fue remitido a la Fiscala contra el Crimen Organizado.

Preliminarmente, segn comentan investigadores, se haba manejado la tesis de que Cristina tena problemas emocionales. No obstante, dicha teora resulta ofensiva para la familia Siekavizza, pues aunque reconocen que la vctima acuda al psiquiatra tambin indican que ella se encontraba emocionalmente estable.

Mi hermana no es de esas mujeres que seran capaces de abandonar su hogar. Es una mujer de familia dedicada al cuidado de sus hijos, dice Susana.

Algunos medios de informacin, intentaron consultar al mdico tratante; sin embargo, este se neg a proporcionar informacin, aduciendo que no era tico trasladar datos sin el consentimiento de la paciente. Lo hara solo por medio de orden de juez, dijo el galeno.

Limpian evidenciasLos investigadores establecieron que Barreda contrat a una empresa especializada para limpiar la escena del crimen.

Adems, cambi las alfombras al vehculo que utilizaba, propiedad de la empresa en que laboraba.

Negligencia de la fiscalaPese a que las primeras 72 horas son vitales para esclarecer un caso, el MP solicit 3 semanas despus de la desaparicin de Cristina la prueba de Luminol (utilizada para buscar rastros de sangre u otros fluidos) en el interior de su casa.

Cuando nos apersonamos a la fiscala para apoyar en la investigacin el 20 de julio de 2011, el MP no haba pedido nada, critic Norma Cruz, presidenta de la Asociacin Sobrevivientes.

Los resultados de la prueba de Luminol fueron contundentes: haba rastros de sangre en uno de los cuartos. Adems, un edredn haba desaparecido y el esposo de Cristina no pudo explicar la razn de la ausencia. Cruz indic que la fiscala no ha solicitado las pruebas de ADN de los padres de Cristina para establecer si la sangre localizada en uno de los cuartos es compatible con la de ella.

Primeras hiptesis: Desde el 7 de julio de 2011, da en el que se presume fue vista por ltima vez, la vida de la familia Siekavizza dio un giro de 360 grados. Uno nunca se imagina que pueda pasar por una situacin as, dice Susana, su hermana menor del mismo apellido. Juan Luis, padre de la vctima, luce agotado pero an guarda fuerza y esperanza de encontrar a su hija con vida.

El progenitor hace un esfuerzo por mantener la calma y describe con detalle todas las acciones emprendidas, por l y su familia, para localizar a Cristina. Durante la investigacin l y su esposo Roberto Barreda, contrataron a dos investigadores privados. Adems contactaron a 10 psquicos e impulsaron una serie de campaas mediticas a travs de medios electrnicos y alternativos, como distribucin de volantes, para localizar a la joven madre.

A criterio de familiares, el primero de los investigadores result ser un charlatn y en contra de toda lgica, mont su base de operaciones en la habitacin de Cristina, lugar donde durmi, comi y hasta se ba. Los resultados obtenidos:

Una tesis sin fundamento referente a la vinculacin del crimen organizado y el narcotrfico en el secuestro de Cristina. El segundo detective tuvo que retirarse del caso por descontento con el primero.

El investigador entreg toda la informacin al Ministerio Pblico (MP), institucin que deber determinar qu es til y qu no. No obstante la tesis del detective privado fue rechazada por la Fiscala, pues a criterio de los fiscales no existe ningn elemento que pueda sugerir que detrs de la desaparicin de la vctima se encuentren capos del narcotrfico.

De hecho, segn elementos de la Polica Nacional Civil (PNC) la tesis original de que la desaparicin de Cristina responde a un secuestro fue descartada, casi en su totalidad. As como la idea de que Cristina haya sido raptada por guardias de seguridad de un presunto narcotraficante, que se supone habita en el residencial donde desapareci.

Ante la pregunta de la posibilidad de que Cristina se encuentre sin vida, a Juan Luis, su padre, se le entrecorta la voz, desva su mirada al suelo y visiblemente afectado admite que contempla ese escenario, pero reconoce que vislumbra una esperanza al final del tnel.

Lo cierto es que no hay ni una sola prueba que apunte a que la joven madre se encuentra viva.

Pistas falsasMientras la familia Siekavizza busca desesperadamente tener noticias de Cristina y reparte volantes con datos de ella y organiza campaas a travs de medios electrnicos para dar con su paradero, otros buscan lucrar con el dolor ajeno. En ms de una oportunidad personas que han asegurado tener informacin de Cristina han presentado datos falsos e incluso han cobrado por la errnea informacin.

Se dijo que ella (la vctima) se encontraba detenida en una casa. Nos pidieron una reunin y determinada suma de dinero para dar con mi hija, pero result ser un engao. Ni siquiera fue necesario allanar, pues el inmueble se encontraba desocupado y el propietario permiti voluntariamente que se inspeccionara, narr Juan Luis. De las 300 llamadas recibidas posterior a habilitar la lnea para pedir informacin, el 80 por ciento era para molestar e incluso extorsionar....Y no aparece...Hoy, Cristina Siekavizza es el nombre no slo de una mujer sino de cientos que han sido vctimas del maltrato intrafamiliar.

Cristina Siekavizza era una mujer joven de poco ms de 30 aos que haba sido campeona nacional de natacin y se haba graduado como administradora de empresas. Era tambin la madre de dos nios, Roberto y Mara Mercedes, de 6 y 3 aos respectivamente. Era una mujer, como tantas otras en nuestro pas, de la que un da se perdi todo rastro. Ese da fue el 7 de julio de este ao, nadie la vio salir del condominio. Nadie.

Los familiares desde el primer momento manejaron la hiptesis del secuestro, contrataron a un investigador privado y se quedaron a esperar la llamada en la que se pedira el "rescate". El telfono no son.

Si no hubiera sido porque en los das siguientes tanto familiares como amigos se movilizaron para poner anuncios en los diarios solicitando informacin sobre su paradero y organizando manifestaciones para exigir de las autoridades rapidez en las investigaciones, su caso, como tantos otros, hubiera quedado archivado.

Todos parecan estar conformes con la hiptesis del secuestro. Con los prejuicios de nuestra idiosincrasia pareca ser lo lgico, as que era fcil concluir que los Siekavizza-Barreda era una familia de buen apellido y como la madre de Barreda haba sido parte de la CSJ probablemente alguien se quera vengar.

Era fcil pensar en esto y difcil creer que alguien de ese estrato fuera vctima de violencia intrafamiliar, eso es comn de las clases medias poco educadas, pensar alguno.

Tan seguros estaban todos de la hiptesis del secuestro que pas casi un mes para que el MP realizara la prueba de luminol en la casa y se encontrara con rastros de sangre. Todos seguros hasta que de repente el esposo de la "secuestrada", Roberto Barreda, desapareci llevndose a sus dos hijos

Hasta ese momento las cosas cambiaron. Norma Cruz, de la Fundacin Sobrevivientes, denunci que el caso tena todos los rasgos de un feminicidio y Siekavizza de ser otra vctima de violencia intrafamiliar.

Entonces fue que se hicieron las pruebas que de oficio debi hacer el MP desde el primer instante. En consecuencia se dieron cuenta que la madre de Roberto Barreda, Beatriz de Len, ex presidenta de la CSJ podra estar influyendo en el proceso y facilitado el escape de su hijo.

Entonces todo mundo saba de qu forma Siekavizza era vctima del maltrato que le propiciaba su esposo.

Tena restringida la cantidad de salidas porque "la gasolina estaba cara". Tena que mantener el hogar con Q.500 semanales y no pedir ms por que su esposo se poda "enojar".

Haba perdido un hijo y casi muere por un aborto natural mientras que su esposo se negaba a que se sometiera a una intervencin quirrgica de matriz. Cuando Siekavizza estaba encerrada por "depresin" en realidad lo estaba para que la gente no viera los moretones producto de los golpes de su esposo.

Ahora todos sabemos que Siekavizza era vctima y nos golpeamos el pecho ante su desaparicin y ms que probable asesinato.

Por qu para las autoridades Roberto Barreda no fue el principal sospechoso desde un principio? Para que hoy se agilizara el proceso, el caso de Siekavizza tuvo la suerte de haber acaparado la atencin meditica y an as los resultados son pocos.

Otras tantas "Siekavizza" no han contado con la misma suerte y su caso se pierde en la memoria de familiares y amigos y en los cientos de expedientes apilados en el MP o la Corte Suprema de Justicia.

ROBERTO BARREDA, PRFUGO Y PRINCIPAL SOSPECHOSO:Roberto Barreda de Len se convirti en el principal sospechoso de la desaparicin de su esposa, Cristina Siekavizza, vista por ltima vez el 6 de julio de 2011. Aunque el conyugue haba declarado ante la fiscala que la vio por ltima vez el 7 de julio por la maana, hasta la fecha no hay otro testimonio que indique que esa tesis es verdica.

Segn Barreda, Cristina sali ese da a eso de las 6:45 horas rumbo a las reas verdes del residencial Los Manantiales, lugar donde supuestamente iba con frecuencia a meditar.Rony Lpez, Jefe de la Fiscala Contra el Crimen Organizado, indic que el comportamiento de Barreda lo convierte en el principal sospechoso de la desaparicin de su esposa. Eso nos hace pensar que l est involucrado en alguna situacin oculta, dijo.Segn el informe elaborado por miembros del Escuadrn Guatemalteco de Perros de Rescate (EGPR), en un rea verde del residencial se localiz un punto caliente, un sitio donde presume que pudo haber estado Cristina o alguna prenda de ella, pero no fue posible ubicar un rastro de continuidad. Esto quiere decir que la perra que realiz la bsqueda no pudo identificar el recorrido que llev a Cristina hasta ese punto. Se conoce que Cristina habl con una amiga el 6 de julio a las 18:50 horas y que posterior a ello, nadie, excepto el esposo, da testimonio de haberle hablado o visto. Los infantes sern buscados por medio del sistema Alba Keneth (por medio del cual pone en alerta a los funcionarios de migracin en todo el pas), para evitar que sean sacados al extranjero.

Desaparicin de Roberto BarredaLa familia de Roberto Barreda, esposo de Cristina Siekavizza, acudi al Ministerio Pblico (MP) para denunciar su desaparicin. En su declaracin, los familiares indicaron que se desconoce el paradero de Barreda y de sus dos hijos. Los menores de 4 y 7 aos de edad haban sido citados por el Juzgado Dcimo del Ramo Penal para declarar en el caso.

Supuestamente el MP haba montado un operativo de vigilancia permanente a Roberto, esposo de Cristina, y los nios, por lo que no comprendo cmo es posible que l se haya escapado, cuestion Cruz. La activista dijo que el MP haba evadido realizar otras diligencias. Ejemplific el hecho de que la fiscala no se efectu operativos de bsqueda en los lugares donde Barreda estuvo un da despus de la desaparicin de su esposa. Las ubicaciones fueron proporcionadas al MP por la empresa donde labora Barreda, pues esta le daba al sospechoso un vehculo con dispositivo GPS.

Del mismo modo, seal que los familiares de Roberto Barreda estn en su derecho de presentar tal denuncia. Sin embargo, a Cruz le llama la atencin que la familia de Barreda haya dejado pasar 15 das para denunciar legalmente su desaparicin.

Esta reaccin judicial de la familia Barreda, se da en el contexto planteado por la Fundacin Sobrevivientes, en el cual, luego del anlisis de diversos documentos (fotografas familiares, testimonios, etc.) se plantea que la desaparecida Cristina sufri violencia intrafamiliar, provocada posiblemente por el cnyuge, quien ahora tambin est desaparecido.

FAMILIA BARREDA DE LEN... CMPLICES?Un detalle nico es que el acusado, Roberto Barreda de Len es hijo de los abogados Roberto Barreda y Beatriz Ofelia de Len, ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), quien puede ser acusada de obstruir el proceso y de no brindar informacin sobre el paradero de su hijo y sus nietos.

Beatriz de Len, madre del sospechoso, ex magistrada de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), dijo no tener conocimiento de donde se encontraba su hijo. Su padre, Roberto Barreda, tambin fungi como magistrado de una sala de apelaciones del ramo civil. El MP lo busc tambin en la casa de la hermana, Laura Barreda, en otro inmueble a donde se haba mudado recientemente y en otras dos casas en el condominio Los Manantiales, pero no fue posible ubicarlo.

En las ltimas semanas, se ha incrementado la cobertura de prensa sobre la desaparicin de Cristina Siekavizza y la creciente certeza de que ha sido asesinada por su esposo, Roberto Barreda de Len, hijo de la ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ)

Beatriz de Len consigui que un tribunal le otorgara medidas de restriccin contra su suegro, a fin de evitar que los abuelos maternos de los hijos de Cristina tuviesen contacto con los nios y pudieran tener la versin de esto sobre lo ocurrido la madrugada del 7 de julio en su vivienda.Barreda de Len tambin logr que oficiales de migracin hicieran caso omiso de la orden de arraigo que haba sobre ste y le permitieran salir del pas para evadir, en principio, declarar sobre los hechos y ahora eludir la accin penal ante la sospecha de su responsabilidad. Logr tambin que la alerta Alba-Keneth, basada en la ley del mismo nombre y que genera acciones de proteccin para infantes en peligro, fuese suspendida en la primera oportunidad, situacin que le permiti sacar del pas a sus dos hijos.

En esta operacin de impunidad, la familia de Barreda de Len, cuyo padre tambin est ligado al sistema de justicia, ha sido pieza clave para generarle anillos de impunidad ante un hecho de femicidio.

Muchas hiptesis se generaron y, debido a que el caso est bajo reserva de investigacin. Sin embargo, uniendo datos y testigos se conoce que el esposo de Cristina, Roberto Barreda, es el principal y nico sospechoso de esa desaparicin de Cristina.

Roberto Barreda es hijo de ex - magistrados de la Corte Suprema de Justicia, su madre fue Presidente de la misma Corte; tienen familia trabajando dentro del sistema de justicia, tribunales y Ministerio Pblico; la escena del crimen fue manipulada desde el principio y los investigadores debieron de callar los hallazgos por fuertes presiones polticas.

La jueza que estuvo a cargo del caso en su inicio hizo lo justo pero fue desligada del proceso y hasta humillada por parte de la misma Corte de Justicia cuando inici las medidas oportunas para que Barreda no huyera de la justicia y Barreda gan tiempo, huy con sus hijos.

El caso est lejos de concluir, hay mucho por investigar, muchos cmplices por descubrir y desde luego conmociona a toda Guatemala y a la justicia en general, es un ejemplo de cmo podra quedar impune un crimen por el manejo de influencias. Muchos casos como el de Cristina suceden todos los das y casi todos quedan en el olvido.

Ahora es distinto, la necesidad de justicia, el dolor y la tenacidad de los padres y familiares de Cristina Siekavizza hacen la gran diferencia; toda la sociedad exige respuestas y debern llegar.

Situacin de la trabajadora domstica:

El Juzgado Dcimo de Instancia Penal autoriz al Ministerio Pblico (MP) un mes ms para investigar a PetronaSay, trabajadora de la familia de Cristina Siekavizza, quien despareci desde el 7 de julio.

Petrona Olga Say Velsquez, de 24 aos empleada en la casa de la familia Barreda Siekavizza, es capturada por agentes de la PNC por ser sospechosa.

El MP realiz la peticin al juzgado debido a que es necesario realizar otras diligencias de investigacin que lleven al esclarecimiento del caso de Cristina y la pronta aparicin de sus hijos Roberto Jos y Mara Mercedes Barreda Siekavizza, de 7 y 4 aos respectivamente.

Say Velsquez, es sindicada de obstruccin a la justicia y encubrimiento propio, y fue dejada en libertad bajo custodia del MP despus que proporcionara informacin.Actualmente, la trabajadora ha permanecido en vigilancia de la oficina de proteccin a testigos del MP y maana venca el plazo para que la fiscala presentara acusacin formal contra ella, ahora se tendr un mes ms para verificar el grado de participacin en el caso.RELATOS DEL PADRE Y COMO INICIO TODO.El progenitor hace un esfuerzo por mantener la calma y describe con detalle todas las acciones emprendidas, por l y su familia, para localizar a Cristina. Durante la investigacin l y su esposo Roberto Barreda, contrataron a dos investigadores privados. Adems contactaron a 10 psquicos e impulsaron una serie de campaas mediticas a travs de medios electrnicos y alternativos, como distribucin de volantes, para localizar a la joven madre.

A criterio de familiares, el primero de los investigadores result ser un charlatn y en contra de toda lgica, mont su base de operaciones en la habitacin de Cristina, lugar donde durmi, comi y hasta se ba. Los resultados obtenidos: Una tesis sin fundamento referente a la vinculacin del crimen organizado y el narcotrfico en el secuestro de Cristina. El segundo detective tuvo que retirarse del caso por descontento con el primero.

El investigador entreg toda la informacin al Ministerio Pblico (MP), institucin que deber determinar qu es til y qu no. No obstante la tesis del detective privado fue rechazada por la Fiscala, pues a criterio de los fiscales no existe ningn elemento que pueda sugerir que detrs de la desaparicin de la vctima se encuentren capos del narcotrfico.

De hecho, segn elementos de la Polica Nacional Civil (PNC) la tesis original de que la desaparicin de Cristina responde a un secuestro fue descartada, casi en su totalidad. Lo nico que falta por definirse, y de lo que apenas se tienen ciertos indicios, es la posibilidad de que Cristina haya sido raptada por guardias de seguridad de un presunto narcotraficante, que se supone habita en el residencial donde desapareci.

La luz al final del tnel

Ante la pregunta de la posibilidad de que Cristina se encuentre sin vida, a Juan Luis, su padre, se le entrecorta la voz, desva su mirada al suelo y visiblemente afectado admite que contempla ese escenario, pero reconoce que vislumbra una esperanza al final del tnel.

La familia de la vctima contact a diez psquicos de los cuales nueve han asegurado que Cristina se encuentra con vida.

Algunos de los expertos en el control de la mente fueron contratados y otros ms se ofrecieron voluntariamente.

Lo cierto es que a casi un mes de su desaparicin no hay ni una sola prueba que apunte a que la joven madre se encuentra viva. No es una prueba cientfica, pero es a lo nico que me puedo aferrar, comenta el progenitor. Roberto, su esposo, tampoco pierde las esperanzas y asegura que por su mente jams ha pasado la idea de que su cnyuge ha sido asesinada.

Pistas falsas

Mientras la familia Siekavizza busca desesperadamente tener noticias de Cristina y reparte volantes con datos de ella y organiza campaas a travs de medios electrnicos para dar con su paradero, otros buscan lucrar con el dolor ajeno. En ms de una oportunidad personas que han asegurado tener informacin de Cristina han presentado datos falsos e incluso han cobrado por la errnea informacin.

Se dijo que ella (la vctima) se encontraba detenida en una casa. Nos pidieron una reunin y determinada suma de dinero para dar con mi hija, pero result ser un engao. Ni siquiera fue necesario allanar, pues el inmueble se encontraba desocupado y el propietario permiti voluntariamente que se inspeccionara, narr Juan Luis. De las 300 llamadas recibidas posterior a habilitar la lnea para pedir informacin, el 80 por ciento era para molestar e incluso extorsionar.

Acerca de la investigacin

El da que Cristina desapareci, su hermano mayor, Juan Carlos, se aperson a la Fiscala de San Jos Pinula a presentar una denuncia verbal por la desaparicin. Dicha queja consta en el expediente MP-001-2011-66170, el cual fue remitido a la Fiscala contra el Crimen Organizado.

Preliminarmente, segn comentan investigadores, se haba manejado la tesis de que Cristina tena problemas emocionales. No obstante, dicha teora resulta ofensiva para la familia Siekavizza, pues aunque reconocen que la vctima acuda al psiquiatra tambin indican que ella se encontraba emocionalmente estable.

Mi hermana no es de esas mujeres que seran capaces de abandonar su hogar. Es una mujer de familia dedicada al cuidado de sus hijos, dice Susana. Con esa declaracin coincide Roberto eso sera imposible, sostiene.

l relata que Cristina tuvo un aborto natural en diciembre de 2010 lo cual la hizo entrar en depresin, pero asegura que la etapa ms crtica ya haba pasado. En abril, cuando se supone nacera nuestro tercer hijo, fue cuando a ella ms le afect, comenta. De hecho, estaba bajo tratamiento psiquitrico y el mdico les haba recomendado a ambos que viajaran juntos para superar el duelo del beb.

Nos fuimos solos a Belice, relata Roberto, quien muestra un lbum fotogrfico con momentos de ese periplo. Mis hijos se quedaron con mis padres, aade. Beatriz de Len, madre del esposo de Cristina, dice con voz entrecortada:

Estamos muy afectados. Ella y su esposo se encontraban en Mosc, cuando fueron informados de la noticia y tuvieron que regresar de inmediato.

Roberto y sus hijos esperan a Cristina. Aunque se mudaron de residencia por motivos de seguridad, l y su primognito, quien lleva su mismo nombre y Mara Mercedes, la menor, se convencen de que ella regresar. Abren una pila de ms de 5 lbumes con fotografas de sus viajes a las playas y a Disney. Ah estamos en la playa, dice el mayor. Pero en qu playa? Indaga su padre. En El Salvador, se responde a s mismo.

Para los infantes de 7 y 4 aos respectivamente, su madre se encuentra en el mundo fantstico de Mickey Mouse. Para ellos su retorno no es incertidumbre sino certeza.

Anoche so a la Cristi, so que regresaba, dice Laura Barreda, cuada de Cristina, mientras sus lgrimas resbalan por sus mejillas. Todos los das rezamos en San Martn de Porres (templo catlico ubicado en la zona 15) por ella, aade el padre de Roberto, quien tambin tiene el mismo nombre.

Este matutino, trat de consultar al mdico tratante; sin embargo, este se neg a proporcionar informacin, aduciendo que no era tico trasladar datos sin el consentimiento de la paciente. Lo hara solo por medio de orden de juez, dijo el galeno.

Desaparecida y sin pistas

Segn la investigacin, basada en el testimonio de Roberto, el jueves 7 de julio, la vctima sali de su residencia, ubicada en el condominio Los Manantiales, carretera a San Jos Pinula, a eso de las 6:45 horas. Nunca regres a su casa.

Su esposo fue el ltimo en verla. Los videos de la garita de seguridad del condominio registraron el ingreso de Cristina un da antes, a eso de las 14 horas, pero no registran ningn egreso. Oficialmente el residencial tiene un solo lugar para entrada y salida, aunque Roberto dice haber identificado un punto ciego y otro portn donde no hay controles. La garita es monitoreada las 24 horas por cmaras de vigilancia.

Hay nos vemos, fueron las ltimas palabras que Cristina le pronunci a su esposo. Las dijo sin mucho afn y sin mayor entusiasmo, con la actitud de quien regresar a casa minutos ms tarde. Pero tal cosa no sucedi.

Los guardias de seguridad patrullan en bicicleta desde tempranas horas (el recorrido lo inician a las 5:30 horas), no le vieron. El condominio cuenta con 400 casas, 200 lotes baldos y una rea verde de 43 mil metros cuadrados. El residencial est compuesto nicamente por 7 avenidas y 10 calles.

Sus hijos tampoco le vieron esa maana. Susana asegura que habitualmente ella se despeda de sus hijos, previo a que se fueran a estudiar. La empleada domstica, responsable de preparar el desayuno de los infantes tampoco le vio.

Este matutino hizo un recorrido por el residencial en busca del testimonio de algn vecino que diera cuenta de que ese da la haba visto, pero el resultado fue contundente: nadie le vio, ni los guardias, ni los vecinos, ni en las tiendas.

Cmo se desaparece una persona a plena luz del da, sin ser vista por nadie en un lugar tan reducido? Esa es la pregunta que deben responder los investigadores.

A la fecha el caso se encuentra bajo reserva. Norma Cruz, presidenta de la Asociacin Sobrevivientes, quien apoya a la familia en el proceso, indica que de momento no es prudente hablar acerca de los avances de la investigacin, pues hacerlo podra entorpecer el proceso. Solo queda hacer un llamado a la poblacin para que proporcione datos acerca del paradero de Cristina.

Su padre Juan Luis comenta que a diferencia de lo que se ha publicado en los medios de comunicacin, la conducta de Cristina, de ese ltimo da en que fue vista con vida por su cnyuge, no responde a su verdadera rutina. Tal teora es respaldada por su hermana, Susana, quien afirma que la vctima no sola levantarse antes de las 7 horas y mucho menos salir a caminar. Su esposo sin embargo comenta que por recomendaciones mdicas ella recientemente haba decidido salir a meditar a las reas verdes de la colonia.

Segn datos recabados por el MP, Cristina supuestamente visit las reas verdes del condominio durante esa maana. La caminata de Cristina desde su casa a ese lugar debi haber durado unos 10 minutos a juzgar por la distancia. Lapso de tiempo que hubiese permitido que alguien la viera, pero eso no ocurri.TESTIMONIO DEL NIO (HIJO) CIUDAD DE GUATEMALA El procedimiento se efectu en una cmara de Gesell, aislado de las partes procesales, y demor una hora y diez minutos.El menor fue entrevistado por una psicloga del MP y sin la presencia de un psiclogo sugerido por la defensa de Barreda. Con este procedimiento, la Fiscala intent obtener informacin de lo sucedido a Siekavizza el da de su desaparicin. El contenido de la declaracin del nio no fue revelado porque est bajo reserva. Se tena previsto que el testimonio se transmitiera por videoconferencia, pero por problemas de comunicacin, la jueza del caso Carol Patricia Flores se traslad a la cmara de Gesell y la diligencia se realiz despus de cuatro horas.

La organizacin Voces por Cristina reclam que el nio tuviera que esperar cuatro horas debido a los problemas para efectuar la diligencia.

Horas antes al llegar al juzgado, el padre del niorepudi que se escuchara el testimonio de su hijoy asegur que es una medida ineficiente porque ha sido manipulado.El Ministerio Pblicopidi que el menor no fuera enfocado por la cmara de videoque transmitira su testimonio hacia el juzgado. La fiscala pidi que las palabras del niosean un anticipo de pruebaen el proceso. Barreda es el principal sospechoso de la desaparicin de Cristina Siekavizza, ocurrida en julio de 2011.l huy del pas con sus hijos en agosto de ese aoy fue capturado en Mrida, Yucatn, Mxico, en noviembre de 2013.Cmo funciona la cmara de Guesell?

La Cmara se divide en dos ambientes, separados por un vidrio especial y con sistema de audio. En la primera rea se ubica la nia o nio con el psiclogo, quien se encargar de formularle las preguntas que haga el juez, el fiscal o el abogado, quien estar al otro lado del vidrio y no ser visto por la vctima.

La diligencia empez a las 12.30 horas y tard una hora con 10 minutos. El lugar donde se ubica la cmara de Gesell fue custodiado por guardias del MP, quienes impidieron que los medios de comunicacin se acercaran al nio.

Testimonio

La versin de Say Velsquez, que fue proporcionada el 19 de octubre del 2011, indica que hubo violencia por parte Barreda De Len hacia su esposa.

Expuso que la discusin de la pareja empez a las 19 horas y habra terminado a eso de las 21 horas del 6 de julio del 2011.

En ese lapso, segn Say Velsquez, Siekavizza gritaba y peda ayuda, por lo que sali al balcn del segundo piso, pero todo fue infructuoso, por los constantes golpes que le propinaba su esposo.

Say Velsquez supone que para que los nios no escucharan, Barreda de Len subi el volumen al televisor.

Barreda de Len lleg ayer a la Torre de Tribunales a las 8 horas, y 30 minutos despus ingres en la sala de audiencias del Juzgado A de Mayor Riesgo. Durante la jornada permaneci sentado a la par de su abogado, Alfredo Vsquez.

El inicio de la audiencia estaba programado para las 8.30 horas, pero se dio a las 9.15 horas, porque fue hasta ese momento cuando lleg Juan Luis Siekavizza, padre de Cristina y querellante adhesivo en el caso.

La jueza Carol Patricia Flores refiri que, debido a que el querellante adhesivo es el encargado de sus nietos, tena que preguntarle si estaba de acuerdo con que se escuchara el testimonio del menor.

Otro atraso se dio porque tcnicos en audio y video no lograron establecer una conexin entre la cmara de Gesell del MP y la sala de audiencias del Juzgado. Haba imagen y se vea a las personas que se encontraban en la Fiscala, pero no se escuchaba lo que decan.

Tras el segundo intento infructuoso, Flores decidi trasladarse a la sede de la Fiscala y escuchar de manera directa la entrevista que la psicloga Mara de la Luz Ivette Melgar Paz hizo al menor.

Integrantes del grupo Voces por Cristina estuvieron atentas a la audiencia. Por las redes sociales repudiaron que no se estableciera la seal que permitiera escuchar al nio.

Barreda, su abogado, los fiscales y el querellante adhesivo tambin acudieron al edificio del MP, en el barrio Gerona, zona 1, para presenciar la diligencia.

Se deneg una solicitud para que una psicloga propuesta por la defensa tambin pudiera hacer preguntas, dijo Lizrraga.

Otros implicados en el caso Siekavizza

El inicio del juicio contra tres vinculados con la desaparicin de Siekavizza ser en el 2015, segn el programa del Tribunal Primero B de Mayor Riesgo.

Se trata de scar Humberto Celada Cuevas, investigador contratado por la familia Siekavizza para localizar a Cristina Siekavizza.

Tambin est Joaqun Flores, cuado de Roberto Barreda de Len.

Javier Mendizbal Ruiz, quien es sindicado supuestamente de haber ayudado a Barreda de Len a sacar de la casa el cuerpo de Siekavizza.

La madre de Roberto Barreda, Ofelia Beatriz de Len, tambin est pendiente de que se fije inicio de juicio en su contra y es acusada por amenazas contra Petrona Say Velsquez.

El prximo 20 de febrero vence el plazo para que el MP presente la acusacin contra Barreda de Len.QUE RESULTADOS SE ESPERAN?....

Ante tal controversia los investigadores del Ministerio Publico aun no tienen ningn resultado en las investigaciones y todos los esfuerzos por encontrar a Cristina han sido fallidos, motivo por el cual no se descarta que Barreda solicite ante el Juez competente su libertad derivado a que no existe ningn cuerpo del delito, por lo que se teme que saldr bajo la cancelacin de una fianza, no se descarta que el seor Barreda recupere la custodia de sus hijos al momento de salir en libertad ya que el afirma que no tiene nada que ver en la desaparicin de su amada esposa y que le pide al cielo para que ella vuelva al hogar donde eran muy felices Ustedes como lector colocndonos en la situacin de un jurado Que opinara al respecto?...Las arteras viales que dan acceso al Obelisco, Avenida Las Amricas, carretera a El Salvador y Vista Hermosa estn repletas de listones rosados, mismos que fueron colocados el sbado 23 de julio y en das anteriores. La razn: impulsar una campaa en repudio a la desaparicin de Cristina Siekavizza, joven madre de 33 aos, y motivar a las personas a que proporcionen informacin acerca del posible paradero.

Desde el 7 de julio, da en el que se presume fue vista por ltima vez, la vida de la familia Siekavizza dio un giro de 360 grados. Uno nunca se imagina que pueda pasar por una situacin as, dice Susana, su hermana menor del mismo apellido. Juan Luis, padre de la vctima, luce agotado pero an guarda fuerza y esperanza de encontrar a su hija con vida.

El progenitor hace un esfuerzo por mantener la calma y describe con detalle todas las acciones emprendidas, por l y su familia, para localizar a Cristina. Durante la investigacin l y su esposo Roberto Barreda, contrataron a dos investigadores privados. Adems contactaron a 10 psquicos e impulsaron una serie de campaas mediticas a travs de medios electrnicos y alternativos, como distribucin de volantes, para localizar a la joven madre.

A criterio de familiares, el primero de los investigadores result ser un charlatn y en contra de toda lgica, mont su base de operaciones en la habitacin de Cristina, lugar donde durmi, comi y hasta se ba. Los resultados obtenidos:

Una tesis sin fundamento referente a la vinculacin del crimen organizado y el narcotrfico en el secuestro de Cristina. El segundo detective tuvo que retirarse del caso por descontento con el primero.

El investigador entreg toda la informacin al Ministerio Pblico (MP), institucin que deber determinar qu es til y qu no. No obstante la tesis del detective privado fue rechazada por la Fiscala, pues a criterio de los fiscales no existe ningn elemento que pueda sugerir que detrs de la desaparicin de la vctima se encuentren capos del narcotrfico.

De hecho, segn elementos de la Polica Nacional Civil (PNC) la tesis original de que la desaparicin de Cristina responde a un secuestro fue descartada, casi en su totalidad. Lo nico que falta por definirse, y de lo que apenas se tienen ciertos indicios, es la posibilidad de que Cristina haya sido raptada por guardias de seguridad de un presunto narcotraficante, que se supone habita en el residencial donde desapareci.

La luz al final del tnel

Ante la pregunta de la posibilidad de que Cristina se encuentre sin vida, a Juan Luis, su padre, se le entrecorta la voz, desva su mirada al suelo y visiblemente afectado admite que contempla ese escenario, pero reconoce que vislumbra una esperanza al final del tnel.

La familia de la vctima contact a diez psquicos de los cuales nueve han asegurado que Cristina se encuentra con vida.

Algunos de los expertos en el control de la mente fueron contratados y otros ms se ofrecieron voluntariamente.

Lo cierto es que a casi un mes de su desaparicin no hay ni una sola prueba que apunte a que la joven madre se encuentra viva. No es una prueba cientfica, pero es a lo nico que me puedo aferrar, comenta el progenitor. Roberto, su esposo, tampoco pierde las esperanzas y asegura que por su mente jams ha pasado la idea de que su cnyuge ha sido asesinada.

Pistas falsas

Mientras la familia Siekavizza busca desesperadamente tener noticias de Cristina y reparte volantes con datos de ella y organiza campaas a travs de medios electrnicos para dar con su paradero, otros buscan lucrar con el dolor ajeno. En ms de una oportunidad personas que han asegurado tener informacin de Cristina han presentado datos falsos e incluso han cobrado por la errnea informacin.

Se dijo que ella (la vctima) se encontraba detenida en una casa. Nos pidieron una reunin y determinada suma de dinero para dar con mi hija, pero result ser un engao. Ni siquiera fue necesario allanar, pues el inmueble se encontraba desocupado y el propietario permiti voluntariamente que se inspeccionara, narr Juan Luis. De las 300 llamadas recibidas posterior a habilitar la lnea para pedir informacin, el 80 por ciento era para molestar e incluso extorsionar.QUE RESULTADOS SE ESPERAN?....

Ante tal controversia los investigadores del Ministerio Publico aun no tienen ningn resultado en las investigaciones y todos los esfuerzos por encontrar a Cristina han sido fallidos, motivo por el cual no se descarta que Barreda solicite ante el Juez competente su libertad derivado a que no existe ningn cuerpo del delito, por lo que se teme que saldr bajo la cancelacin de un a fianza, no se descarta que el seor Barreda recupere la custodia de sus hijos al momento de salir en libertad ya que el afirma que no tiene nada que ver en la desaparicin de su amada esposa y que le pide al cielo para que ella vuelva al hogar donde eran muy felices Ustedes como lectores y colocndonos en la situacin de un jurado

Que opinara al respecto?...

CASO CRISTINA SIEKAVIZZA DESDE EL PUNTO DE VISTA COMO ALUMNOS DE LA CARRERA DE DERECHO DE LA UNIVERSIDAD RURAL DE GUATEMALA.Un hombre ha sido acusado por el Ministerio Pblico (MP) de los delitos de femicidio, obstruccin a la justicia y violencia contra la mujer porque presuntamente asesin a su esposa, desapareci su cuerpo, huy llevndose a sus hijos y evadi a la justicia durante ms de dos aos. Su madre ahora est acusada de amenazas al suprimirse el delito de obstruccin a la justicia por lo que supuestamente hizo, valindose de sus influencias y relaciones, para evitar que su hijo fuera encarcelado, enjuiciado y castigado de resultar culpable.

A lo largo de ese tiempo, los padres, la hija e hijo y el crculo ms cercano de Cristina Siekavizza han sufrido los terribles efectos de su desaparicin en vista de que se desconocen su paradero y las circunstancias de su casi segura muerte. Esta es una situacin de incertidumbre entre la esperanza de que ella est con vida y las conjeturas terribles sobre su destino final.

Este caso, es uno de los miles en Guatemala en los que hay una mujer violentada en su integridad fsica y despojada de su dignidad y de su vida por un hombre, no es la primera vez y, tristemente, no ser la ltima que algo as suceda.

Lo que lo hace particular es que el presunto femicida es el hijo de Beatriz Ofelia de Len Reyes de Barreda, ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia.

En el pas en el que se ven muertos acarreando basura, no deja de asombrarme que una abogada que form parte de las altas cortes del pas haya transgredido la ley para ayudar a su hijo, un presunto asesino y desaparecedor de evidencias al sustraerse de la accin de la justicia.

La cultura de la impunidad y la violencia no se queda en un esquema de pensamiento, una retorcida visin del mundo y las relaciones sociales, sino que propicia y favorece una serie de prcticas legales, pero no legtimas -como el abuso del amparo, las recusaciones, la renuncia de los abogados defensores y otras maniobras dilatorias e ilegales, entre ellas la amnista (ilegal desde que la Corte Interamericana de Derechos Humanos sentenci en el caso Barrios Altos que las leyes de extincin de culpabilidad de las violaciones a los derechos humanos son violatorias de la Convencin Americana sobre Derechos Humanos), las amenazas, atentados, intentos de soborno y compra de voluntades judiciales.

En ese pantano es donde hunden su races las Cortes Suprema y de Constitucionalidad, los tribunales y el MP, una instancia que muy recientemente ha sido sometida a un proceso de institucionalizacin sobre la base de principios democrticos que est seriamente amenazado de ser llevado a una va muerta y hasta de retroceder por circunstancias conocidas.

Con la impunidad prevaleciente, vctimas y victimarios conviven da a da en una relacin social txicamente desigual. Estos siguen imponiendo decisiones y manipulando al sistema a su antojo. La garanta de impunidad tambin ha hecho posible que presuntos criminales sean elegidos para cargos pblicos, de all que siga siendo cierto lo que una vez dije, con pena y con vergenza, ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos: en Guatemala a los asesinos y a los ladrones se les llama seor presidente, seor diputado, seor ministro.

Por eso considero que el caso de Cristina Siekavizza es una leccin dehistoria viva[i]y de memoria de hechos, actitudes y comportamientos encarnados en personas que lamentablemente no estn en el pasado. No debera de extraarme que la antiguamente encumbrada abogada haya actuado de la manera en que lo hizo, un hecho que me parece indignante y que me lleva a reclamar en manos de quines est la administracin de justicia en Guatemala?

Este caso es un claro ejemplo de cmo la gente poderosa cruza la lnea que separa la legalidad de la ilegalidad cada vez que les conviene para resguardar sus intereses, una frontera que debera estar ntidamente trazada para todos los guatemaltecos/as ya no digamos para las y los profesionales del Derecho, sobre todo los jueces/as y magistrados/as de quienes esperamos una tica distinta, de servicio y acatamiento de la ley y basada en principios democrticos y de derechos humanos.

Sin embargo, hay esperanza. En Guatemala se libra una batalla entre lo nuevo y lo viejo, entre la decencia y el cinismo, la razn y la fuerza, el abuso de poder y la igualdad en el acceso a la justicia, el imperio de la ley y la impunidad, entre el olvido por decreto y la memoria amorosa a nuestros seres queridos violentados. En un terreno, an desnivelado, se enfrentan jueces/as y fiscales decentes, insobornables, fieles defensores de la legalidad y de la independencia judicial junto a defensoras y defensores de los derechos humanos, las familias y las agrupaciones de las vctimas contra los operadores/as de justicia y los sectores de poder entindase el CACIF que siguen manteniendo que esta es como las culebras, que solo muerden los pies de quienes van descalzos.

Por Cristina Siekavizza, sus hijos y todos los que han sufrido en carne propia esta tragedia, espero que este proceso sea llevado con apego a las leyes y que prevalezca la justicia por encima de las maniobras dilatorias que ya empezaron a darse. Eso contribuir sin duda al fortalecimiento de las instituciones y abonar el terreno para que se cumpla nuestra demanda de justicia igual para todos y todas y para todos los casos.PUNTO DE VISTA

Desde nuestro punto de vista tomamos la defensa de cristina ya que la versin de Petrona Say y la de su hijo muestran que el responsable es Roberto Barreda por obstruccin a la justicia y violencia contra la mujer con el delito de femicidio tipificado.

Por otra parte aunque todos sepamos que el seor Roberto Barreda es responsable de la desaparicin de su esposa porque as lo apuntan los hechos segn la ley este seor no puede ser juzgado culpable por la muerte de Cristina Siekaviza en virtud que no hay cuerpo del delito que indique que Cristina est muerta.BIBLIOGRAFIA

http://noticias.emisorasunidas.com/category/etiquetas/caso-siekavizzahttp://www.prensalibre.com/noticias/justicia/crimenes-rodean-caso-Siekavizza_0_1044495559.htmlhttp://www.prensalibre.com/noticias/justicia/cristina_siekavizza-roberto_barreda-hijo_declara-camara_gesell_0_1074492657.htmlhttp://www.lahora.com.gt/index.php/nacional/guatemala/actualidad/186520-maria-mercedes-pregunta-por-su-madre-cristina-siekavizzahttp://www.todanoticia.com/s/?q=%22cristina+siekavizza%22