66
Confíe en nosotros Confíe en nosotros tabacalera la industria Somos tabacalera la industria Somos Campaign for Tobacco-Free Kids (USA) • Action on Smoking and Health (UK)

Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

  • Upload
    others

  • View
    0

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

Confíeen nosotrosConfíeen nosotros

tabacalerala industria

Somos tabacalerala industria

Somos

Campaign for Tobacco-Free Kids (USA) • Action on Smoking and Health (UK)

Page 2: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo
Page 3: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

1

Campaign for Tobacco-Free Kids (U.S.A.) Action on Smoking and Health (U.K.)1400 I St. NW, Suite 1200 102 Clifton St.Washington, DC 20005 London EC2A 4HW

compilado y redactado por Ross Hammond y Andy Rowellagradecimientos especiales a Liz Freund y Anne Landman

Abril del 2001

Confíeen nosotrosConfíeen nosotrostabacalera

la industriaSomos tabacalera

la industriaSomos

Page 4: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

2

Índice

1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32. Adicción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 53. Publicidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 84. La agricultura y la Asociación Internacional de

Productores de Tabaco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 135. Países en desarrollo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 186. Economía, impuestos y comercio . . . . . . . . . . . . . . . 217. Humo de segunda mano o humo de tabaco

ambiental. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 258. Etiquetado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 299. Cabildeo de la industria tabacalera . . . . . . . . . . . . . 32

10. Relaciones con los medios de comunicación . . . . . . 3511. Diseño del producto: Cigarrillos “Suaves” y

“Bajos en alquitrán” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3712. El contrabando de tabaco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4013. La Organización Mundial de la Salud y otros

enemigos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4414. La mujer . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4715. Jóvenes fumadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49

Epílogo: ¿Ha cambiado la industria tabacalera? . . . . . . . . 55Anexo I: Índice por país y región . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 59Anexo II: Búsqueda de documentos de la industria

tabacalera: Información básica, procedimientos y consejos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .60

Aviso: Las citas en esta publicación se han traducido delinglés original.

Page 5: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

3

¿Se puede confiar en laindustria tabacalera?Últimamente, la industria tabacalera seha enfrascado en una costosa cam-paña de relaciones públicas destinadaa presentarse como una industriareformada. Debido a que se ha refor-mado, dice la industria, no se ladebería juzgar por su pasado. Dejandode lado el hecho de que la industriatabacalera desea recibir absolución por50 años de mentiras y engaños sinasumir responsabilidad de su compor-tamiento, ¿cuánto ha cambiado real-mente esta industria? Lamentable-mente, no ha cambiado en absoluto.

¿Cómo deberían considerar losgobiernos, los medios de difusión y lasociedad en general a la industriatabacalera? ¿Deberíamos creer en lasafirmaciones de reforma de las taba-caleras? ¿Son buenos aliados en lascampañas para la salud? ¿Su dineropodría cumplir una función útil en lafinanciación de programas de preven-ción dirigidos a la juventud o de inves-tigación científica? ¿Qué seriedaddeberían atribuir los políticos y losperiodistas a los argumentos científi-cos y públicos de las tabacaleras? Perosobre todo, ¿alguien debería confiaren la industria del tabaco?

En este documento demostramosque la negación, el engaño y la ofus-cación son las principales herramientasdel comercio del tabaco. En casi todaslas áreas que han tocado, las taba-caleras han dicho una cosa al públicoy a los gobiernos, mientras que en laintimidad de sus salones de juntas,laboratorios, y oficinas de relaciones

públicas, dicen todo lo contrario. Lagran controversia pública en torno alconsumo de cigarrillos no es el resul-tado de opiniones diferentes de per-sonas honestas, sino una campañacuidadosa y costosamente orquestadade las tabacaleras que están determi-nadas a anteponer sus beneficioseconómicos a la vida misma.

Gracias a los juicios que se hanllevado a cabo en los Estados Unidos,la publicación de millones de páginasde documentos internos de las taba-caleras ha ofrecido las revelacionesmás asombrosas sobre lo que real-mente ocurre dentro de la gran indus-tria tabacalera, especialmente en lasgrandes multinacionales Philip Morrisy British American Tobacco (BAT).Creemos que cualquier ciudadano quese tome el tiempo de hojear lapequeña muestra que hemos elegidopara este informe se sentirá asqueadoal enterarse de lo que hace la granindustria tabacalera.

¡Hemos cambiado! Adiós a la

Bienvenida la

El tabaco ya es la mayor causa demuertes prematuras en todo el mundo,y se proyecta que el número de vícti-mas aumentará a 10 millones por añoantes del 2030. Contra este trasfondo,las tabacaleras multinacionales estántratando, con diversos grados de con-vicción, de reubicarse como parte de lasolución, o como dice BAT, ofrecerán“una conducta responsable en una

industria tabacalera.nueva

tabacalera,gran industria

industria que a menudo se percibecomo controvertida.”

Este informe demuestra que lastabacaleras no son responsables y noson dignas de confianza, digan lo quedigan sobre un cambio de dirección.Las pruebas demuestran que no hancambiado. Creemos que las falsasdeclaraciones de cambio de las taba-caleras tienen como fin interceptartodo cambio real y por lo tanto nodeben desempeñar un papel en lapreparación de una solución, incluidaslas negociaciones para un ConvenioMarco para la Lucha Antitabáquica dela Organización Mundial de la Salud(OMS). Los antecedentes indican que elinterés principal de la industria taba-calera ha sido el de echar por tierratodo intento de contener el daño cau-sado por sus productos, y promo-cionarlos tan agresivamente que sólopuede caracterizarse como una guerracontra la salud pública.

Quienes dicen que la industriaahora sí ha cambiado, ignoran el com-portamiento actual de ésta y la largahistoria de invasiones troyanas de lagran industria tabacalera.

Estas empresas no han cambiado ypor lo tanto no pueden borrar décadasde engaños con una nueva estrategiade relaciones públicas, por más costosay astuta que ésta sea. No debe dárselecrédito alguno por aceptar ahora lasverdades básicas del consumo de ciga-rrillos y la salud—como el hecho deque fumar produce cáncer—cuandoesto ya se había establecido en la liter-atura científica legítima desde hace 40años. Aún hoy, algunas tabacaleras

1. Introducción

Page 6: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

4

todavía lo niegan. No tiene ningúnmérito admitir que la nicotina es adic-tiva, y decir después que es adictiva enel mismo sentido en que pueden serlola Internet o la afición a las compras.Nadie debería aplaudir las campañascontra el tabaco que la misma indus-tria tabacalera dirige a los jóvenes enun intento cínico para lograr quefumar parezca privativo de los adultosy de ese modo aún más atractivo paralos jóvenes. Como se demuestra en elcapítulo final, las tabacaleras siguenpeleando por cada milímetro de terri-torio en la batalla por la verdad sobreel tabaco. Han abandonado las posi-ciones absurdas e insostenibles que lasexponían cada vez más al ridículo y alos peligros de los tribunales, y no hanconcedido nada más.

Después de examinar en el año2000 todas las nuevas posturas adop-tadas por Philip Morris, BAT, JapanTobacco, Imperial Tobacco, y Gallaher,la Comisión de Salud de la Cámara delos Comunes del Reino Unido resumióasí el presunto cambio de enfoque:

Nos parece que las tabacalerastrataron de socavar el consensocientífico hasta que llegó elmomento en que su posiciónresultó ridícula. Ahora, las taba-caleras aceptan por regla generalque fumar es peligroso (pero pre-sentan argumentos que distraenpara sugerir que la epidemiologíano es una ciencia exacta, de modoque las cifras de las víctimas fatalesdel tabaco podrían ser exageradas);se equivocan con respecto a laadicción a la nicotina; y todavíatratan de socavar el argumento deque el tabaquismo pasivo es peli-groso.1

¿Por qué no aceptar que la

ha cambiado?Las tabacaleras no sólo no han cambi-ado, sino que ni siquiera han comen-zado a rehabilitarse. Las medidas desaneamiento adoptadas no son sufi-cientes ni convincentes para borrar losantecedentes de 40 años de engaños.

gran industria tabacalera

Esto es lo que sabemos ahora:

• Los objetivos centrales de lastabacaleras—vender más tabacoy ganar más consumidores detabaco—no han cambiado,solamente han variado sus pre-sentaciones y la estrategia derelaciones públicas.

• Las tabacaleras siguen actuan-do para debilitar las medidasde salud pública basadas enpruebas legítimas en todo elmundo.

• Las tabacaleras siguen hacien-do declaraciones engañosas yevasivas concernientes al con-sumo de cigarrillos y las enfer-medades, la adicción a lanicotina y el tabaquismopasivo.

• Las tabacaleras se han limitadoa aceptar a regañadientes unpequeño número de datosselectos, sobre los que ya noquedan dudas razonables. Yaun éstos se han aceptado connuevas reservas y advertenciasdestinadas a distraer.

• Mientras afirman haber cambi-ado sus prácticas de comercial-ización, las tabacaleras en real-idad están aumentando estosgastos, a menudo en formasmás eficaces para llegar a losjóvenes.

• Las tabacaleras siguen promo-cionando campañas ficticiaspara la salud que no danresultados.

• Las tabacaleras siguenoponiéndose a la regulación desus productos de una manerasimilar a la regulación de otrosproductos de consumo.

• Nadie en esta industria hadesmentido ninguna de lasdeclaraciones anteriores falsasy engañosas.

• Nadie en esta industria hapedido perdón, ha renunciadoo ha sido despedido.

• La industria tabacalera está enun “juego de suma cero” con lasalud pública: cada fumadorque deja de fumar es un clienteperdido. ¿Por qué habríamos deesperar que la industria taba-calera trabaje constructiva-mente en contra de sus propiosintereses comerciales?

La realidad es que la industriatabacalera no ha cambiado en absolu-to; sólo ha mejorado su maquinaria derelaciones públicas. La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco entodos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo acerca dela industria tabacalera, es que sólocambiará si se ve forzada a cambiar, yese cambio ocurrirá solamente si esimpuesto desde afuera. El ConvenioMarco para la Lucha Antitabáquicapodría ser ese vehículo para el cambio.

1 La Comisión Selecta de Salud de laCámara de los Comunes (Reino Unido),en el Informe de su Segunda Sesión de1999-2000. La industria tabacalera y losriesgos de fumar para la salud. The Sta-tionery Office, junio de 2000, apartado54, http://www.parliament.the-stationery-office.co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/2702.htm.

Page 7: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

5

Durante más de 40 añosla industria tabacalera

ha sabido que lanicotina en los

cigarrillos es adictiva.

Internamente, las tabacaleras hanreconocido desde hace mucho tiem-

po que la adicción a la nicotina es larazón principal por la que gente siguefumando. En público, las tabacalerashan negado este hecho, o, más recien-temente, han tratado de confundir ladefinición de adicción. La industriamantiene, sin embargo, que nunca haactuado en forma engañosa sobre eltema de la nicotina y la adicción:“Nunca hemos ocultado, así como noocultamos ahora ni ocultaremos nadaen el futuro…. [N]o tenemos ningunainvestigación interna que demuestreque fumar…es una adicción.”2

(BAT, 1996)

Los documentos de las tabacalerassugieren lo contrario:

“Tenemos, entonces, como primerapremisa, que la motivación principalpara fumar es obtener el efecto far-macológico de la nicotina.”3

(Philip Morris, 1969)

“Distintas personas fuman pordiferentes motivos. Pero la razón prin-cipal es suministrar nicotina a suorganismo. La nicotina es un alcaloidederivado de la planta de tabaco. Esuna sustancia fisiológicamente activa,que contiene nitrógeno. Otras substan-cias químicas orgánicas similares son lanicotina, quinina, cocaína, atropina ymorfina.”4

(Philip Morris, sin fecha)

“Enfrentemos los hechos: El humodel cigarrillo es una sustancia biológi-camente activa. La nicotina es unagente farmacológico potente. Todo

toxicólogo, fisiólogo, médico y la may-oría de los químicos lo saben. No es unsecreto.”5

(Philip Morris, 1982)

Más que en el negocio de ventade cigarrillos, la industria tabacalera seve a sí misma, al menos en privado, enla venta atractiva de nicotina:“La nicotina es adictiva. Por lo tanto,estamos en el negocio de vendernicotina, una droga adictiva eficazpara liberar mecanismos de estrés.”6

(Brown & Williamson, 1963)

“En un sentido, la industria taba-calera puede considerase como un seg-mento especializado, altamente ritual-izado y estilizado de la industriafarmacéutica. Los productos con taba-co se caracterizan por la exclusividadde contener y suministrar nicotina, unpotente fármaco con una variedad deefectos fisiológicos.”7

(R.J. Reynolds, 1972)

“Podría resultar útil, por lo tanto,considerar a la industria tabacalera, engran medida, como administrador denicotina (en el sentido clínico).”8

(BAT, 1967)

“…BAT debería aprender a consid-erarse a sí misma como una compañíafarmacológica más que como unatabacalera.”9

(BAT, 1980)

Aunque la industria tabacalera hacombatido los esfuerzos del gob-

ierno para reglamentar los cigarrilloscomo dispositivos suministradores dedroga, en privado así es exactamentecómo consideran su producto:

2. Adicción

Page 8: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

6

“El cigarrillo debería concebirse nocomo un producto sino como unenvoltorio. El producto es la nicotina….Consideremos el paquete de cigarrilloscomo un envase para almacenar elabastecimiento diario de nicotina….Consideremos al cigarrillo como el dis-positivo que suministra una dosis denicotina. Consideremos una bocanadade humo como el vehículo de lanicotina…. El humo es indudablementeel mejor vehículo para la nicotina y elcigarrillo el dispositivo más optimizadopara suministrar humo.”10

(Philip Morris, 1972)

“…[L]a principal motivación parafumar es obtener el efecto farma-

cológico de la nicotina. En el pasado,en R&D hemos dicho que no estamosen el negocio de los cigarrillos, sino enel negocio del humo. Sería más especí-fico observar que el cigarrillo es elvehículo del humo, el humo es elvehículo de la nicotina, y la nicotina esel agente de una respuesta corporalplacentera.”11

(Philip Morris, 1969)

“El cigarrillo como sistema deadministración de una ‘droga’ para usopúblico tiene ventajas muy, pero muysignificativas: velocidad. Diez segundosdespués de comenzar a fumar, lanicotina llega al cerebro. Antes deesto, hay un impacto que da un picoinstantáneo que significa para elusuario que el cigarrillo está ‘activo’. Elsabor también es algo que se percibeinmediatamente para complementar lasensación. Otras ‘drogas’, como la ma-rihuana, las anfetaminas y el alcoholson más lentas y suelen depender delestado de ánimo.”12

(BAT, sin fecha)

Los experimentos con animales men-cionados en la información y en los

documentos de las tabacaleras confir-man el conocimiento por parte deéstas de las propiedades adictivas de lanicotina:

“…[S]e puede entrenar a losmonos para que se inyecten nicotinapor el sólo gusto de hacerlo, delmismo modo que se inyectan otrasdrogas que crean dependencia, por ej.,narcóticos, cafeína, anfetamina, cocaí-na…. La absorción de la nicotina através de los pulmones es tan rápidacomo el ‘pinchazo’ de undrogadicto.”13

(Brown & Williamson, 1973)

Además, Philip Morris realizóestudios en ratas que demostraron quela nicotina es autoadministrada por lasratas y que tiene otras propiedadescaracterísticas de las substanciasadictivas.14

Las tabacaleras saben que reduciry/o eventualmente eliminar la nicotinade los productos tabacaleros hará quelos fumadores dejen de fumar:

“Si, como se propone anterior-mente, la nicotina es la razón parafumar, y si aceptamos dócilmente losreclamos de nuestros críticos y ten-demos a reducir o eliminar la nicotinade nuestros productos, entonces lle-garemos a la liquidación de nuestronegocio. Si nos interesa seguir en estenegocio y nuestro negocio es la fabri-cación y venta de formas dosificadasde nicotina, entonces, en algúnmomento debemos adoptar unapostura.”15

(R.J. Reynolds, sin fecha)

Las tabacaleras siguen negandoque pueden manipular los niveles de

nicotina en los cigarrillos, o que enefecto lo hacen. Sus documentosinternos indican lo contrario. El nivelde nicotina de los cigarrillos

“…no se obtuvo por accidente….[P]odemos regular, con bastante pre-cisión, los niveles de nicotina y de azú-car de acuerdo con prácticamentecualquier nivel que se nos indique.”16

(BAT, 1963)

Las tabacaleras reconocen que siadmiten públicamente que la nicotinaes adictiva, debilitarían su argumentode que la decisión de fumar de las per-sonas es una “elección libre”:

“…[T]oda la cuestión de la adic-ción es el arma más potente quepuede usar un fiscal en un caso decáncer de pulmón y cigarrillos. Nopodemos defender el consumo detabaco como ‘elección libre’ si la per-sona era ‘adicta.’”17

(Tobacco Institute, 1980)

“En cierta medida, el argumentoen torno a la ‘elección libre’ se invalidaal aducir que hay adicción. La ame-naza es que este argumento aumen-tará considerablemente y llevará amayores restricciones sobre las especi-ficaciones del producto e incrementaráel peligro de los pleitos.”18

(Brown & Williamson, 1973)

“Se ha sugerido que fumar ciga-rrillos es el más adictivo de loshábitos—que la nicotina es la drogamás adictiva. Está claro que una grancantidad de personas seguirá fumandoporque no pueden dejar el cigarrillo. Sipudieran, lo dejarían. Ya no se puededecir que toman una decisiónadulta.”19

(BAT, 1980)

Entonces, en público la industriaafirma que la nicotina es importantepara el gusto o el aroma y que lanicotina no es adictiva:

“La afirmación de que fumarcigarrillos crea dependencia física essimplemente un intento no

BAT debería aprender a conside-rarse a sí misma como una com-pañía farmacéutica más que comouna tabacalera.

Page 9: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

7

demostrado de encontrar alguna ma-nera de diferenciar el acto de fumarde otros comportamientos…. Lasafirmaciones de que los fumadores son‘adictos’ desafían el sentido común ycontradice el hecho de que la gentedeja de fumar todos los días.”20

(Tobacco Institute, 1988)

“Quienes definen el acto de fumarcomo una adicción, lo hacen pormotivos ideológicos, no científicos.”21

(Philip Morris, 1996)

Estas negaciones culminaron en lasaudiencias ante el Congreso de

EE.UU. en 1994 cuando los directoresejecutivos de las siete tabacaleras másgrandes de Estados Unidos testificaronque la nicotina no es adictiva:

“No creo que la nicotina seaadictiva.”

—Thomas Sandefur (Brown & Williamson)

“Creo que la nicotina no esadictiva.”

— William Campbell (Philip Morris) 22

A fines de la década de 1990,cuando estos documentos internoscondenatorios se hicieron públicos, lasempresas respondieron tratando deesquivar la cuestión y cambiar ladefinición de adicción, que ahora apli-can a actividades tales como ir decompras o visitar la Internet:

“La definición de adicción esamplia y variada. Las personas sonadictas a la Internet. Otras son adictasa las compras, al sexo, al té y al café.Yo adoptaría la línea de que el tabacono es adictivo sino que crea unhábito.”23

(Tobacco Marketing Association,1998)

2 T. Stevenson, BAT Denies SmokingClaims, The Independent, 31 de octubrede 1996.

3 T. Osdene, “Why One Smokes, First Draft,1969,” http://www.tobacco.new.edu/mn_trial/, Trial Exhibit 3681, Número deBates 1003287836-48.

4 Philip Morris, primera versión de informeen “Table”, sin fecha pero usando datosde 1992. http://www.gate.net/~jcannon/documents/951208m1.txt.

5 J.L. Charles, Nota al Dr. T.S. Osdene,Comentarios sobre “Future Strategies forthe Changing Cigarette”, National Con-ference on Smoking and Health, 23 defebrero de 1982, Minnesota Trial Exhibit10,523, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Número de Bates1003171563-67.

6 A. Yeaman, “Implications of BattelleHippo I & II and the Griffith Filter,” 17de julio de 1963, Documento Número1802.05, http://www.library.ucsf.edu/tobacco/docs/html/1802.05/.

7 C. Teague Jr., “RJR Confidential ResearchPlanning Memorandum on the Nature ofthe Tobacco Business and the CrucialRole of Nicotine Therein,” 14 de abril de1972, http://www.rjrtdocs.com/, Númerode Bates 500898378-8386.

8 S. Green, Nota a D.S.F. Hobson, 2 demarzo de 1967, http://www.library.ucsf.edu/tobacco/docs/html/1227.06/.

9 BAT, “Brainstorming 11, What Three Rad-ical Changes Might, Through the Agencyof R&D, Take Place in This Industry bythe End of the Century,” 11 de abril de1980, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Minnesota Trial Exhibit 11361,Número de Bates 109884190-91.

10 Dunn WL. Motivos e incentivos parafumar cigarrillos. Resumen de la confer-encia patrocinada por CTR en St. Martin.1972 Philip Morris Research Center,Richmond, VA (el resumen de enero de1972 de la Conferencia de St. Martin semenciona en el prefacio de Dunn WL,ed. Smoking Behavior: Motives andIncentives. Washington, DC: VH Winston& Sons; 1973.) Citado en la Adminis-tración de Alimentos y Drogas de EE.UU.,Reglamentación de cigarrillos y deltabaco sin combustión al amparo de laLey Federal de Alimentos, Drogas y Cos-méticos. 60 Fed. Reg. Página 41314,41617 7881 (11 de agosto de 1995).

11 T. Osdene, “Why One Smokes, First Draft,1969,” http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Trial Exhibit 3681, Número deBates 1003287836-48.

12 C.C. Craig, “Structured Creativity Group,”BAT R&D, sin fecha, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/ Minnesota Trial

Exhibit 10683, Número de Bates100515899-5910.

13 Brown & Williamson, “Secondary SourceDigest,” 1973, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Minnesota Trial Exhibit13809.

14 Philip Morris Tobacco Company, Unpub-lished. DeNoble Manuscript: Nicotine asa Positive Reinforcer for Rats: Effects ofInfusion Dose and Fixed Ratio Size. Cita-do en Administración de Alimentos yDrogas de EE.UU., Reglamentación decigarrillos y de tabaco sin combustión alamparo de la Ley Federal de Alimentos,Drogas, y Cosméticos. 60 Fed. Reg. Pági-na 41314, 41641 (11 de agosto de 1995)

15 Citado en Report of Special Master:Findings of Fact, Conclusions of Lawand Recommendations Regarding Non-Liggett Privilege Claims, Minnesota TrialCourt File Number C1-94-8565, 8 demarzo de 1998, Minnesota Plaintiff’sExhibit 43 (1), R.J. Reynolds, 500915683,p. 688. http://www.stic.neu.edu/MN/specialmaster2-10-98.html.

16 Citado en Report of Special Master:Findings of Fact, Conclusions of Lawand Recommendations Regarding Non-Liggett Privilege Claims, Minnesota TrialCourt File Number C1-94-8565, 8 demarzo de 1998, Minnesota Plaintiff’sExhibit 56 (1) BATCo 1026303333, p.336; B. Griffith, Letter to John Kirwan,BAT, 1963. http://www.stic.neu.edu/MN/specialmaster2-10-98.html.

17 Memo de Knopick para Kloepfer, Tobac-co Institute, 9 de septiembre de 1980,http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/Minnesota Trial Exhibit 14303.

18 E. Pepples, Memo para J. Blalock, 14 defebrero de 1973, http://www.library.ucsf.edu/tobacco/docs/html/1814.01/.

19 Dr. S.J. Green, Transcripción de nota porS.J. Green, 1 de enero de 1980,http://www.library.ucsf.edu/tobacco/docs/html/1192.03/.

20 The Tobacco Institute, “Claims That Ciga-rettes Are Addictive Contradict CommonSense,” 16 de mayo de 1988,http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/Minnesota Trial Exhibit 14384,Minnesota Plaintiff’s Exhibit 22(1),TI 00125189, p. 189.

21 Philip Morris, “Position Statement on aWide Range of Issues,” posiblemente de1996, citado en http://www.gate.net/~jcannon/documents/pmpos961.txt.

22 Audiencia sobre la Reglamentación delos productos tabacaleros, Cámara deRepresentantes de EE.UU., Comisiónsobre Energía y Comercio, Subcomisiónsobre Salud y el Medio Ambiente, 14 deabril de 1994.

23 Citado en una entrevista en la revistaPunch, 11 de abril de 1998.

Page 10: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

8

reducir el consumo de un productolegal que es consumido por adultos.”26

(1997)

De hecho, la industria está ate-rrorizada ante la idea de no poder usarpublicidad. Según Philip Morris:

“La publicidad es crucial paranuestra capacidad de ampliar la pre-sencia geográfica de nuestras marcas ysostener su imagen privilegiada.”27

(Philip Morris, 1993)

Un documento de Philip Morris de1990 comenta los peligros que con-fronta la industria:

“La presión que se ejerce contranosotros está aumentando a unavelocidad que asusta…. Es muy posibleque, salvo que cambiemos todo nues-tro enfoque muy rápidamente, ycomencemos a emplear nuestrosrecursos de una manera mucho másinteligente, comprobemos que en unplazo de 12 meses podríamos perdernuestra publicidad y patrocinio, y unagran parte de nuestra comercializacióny libertades en la mayoría de nuestrosprincipales mercados…. La derrota,como el miedo, es contagiosa. Unavez que la gente perciba que hayclaudicación en el aire, toda laoperación podría venirse abajo conenorme rapidez. El colapso de Vietnamdel Sur ilustra esta situación.”

Los documentos sugieren un “plande acción para ganar esta guerra”,

incluido:

“Pasar a la ofensiva medianteimaginativas campañas publicitarias defomento, utilizando personajesdestacadas de todo el mundo, quienes

Clive Turner, del Consejo Asesor delTabaco reitera la opinión de la

industria:

“Es cierto que ninguna publicidadsobre el tabaco tiene como fin incitara los no fumadores a empezar a fumarni a los fumadores a fumar más, yparece perfectamente obvio que, amenos que uno sea fumador, la publi-cidad o el patrocinio del tabaco noinfluencia en absoluto la persuasión omotivación de una compra.”24

(1986)

Pero según el ejecutivo de publici-dad Emerson Foote, ex director ejecu-tivo de McCann-Erickson, que hamanejado millones de dólares de cuen-tas de la industria tabacalera:

“La industria tabacalera hasostenido ingeniosamente que la pu-blicidad de cigarrillos no tiene nadaque ver con el total de las ventas. Estoes completa y absolutamente absurdo.La industria sabe que es absurdo.Siempre me hace gracia la idea de quela publicidad, una función que hademostrado incrementar el consumode prácticamente cualquier otro pro-ducto, de alguna manera milagrosa noha tenido ese resultado con los pro-ductos tabacaleros.”25

(1988)

Gareth Davies, director ejecutivode Imperial Tobacco, apoyó estaopinión sin darse cuenta, cuando alcomentar una propuesta para prohibircierta publicidad en el Reino Unido,dijo:

“Obviamente me opongo firme-mente a cualquier cosa que trate de

La industria tabacalerasiempre ha dicho que la

única función de lapublicidad es persuadir

a los fumadores paraque cambien de marcas,

y que la publicidad noafecta el consumo total.

3. Publicidad

Page 11: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

9

presentarán los mejores argumentossobre una serie de cuestiones….Fortalecer y ampliar la gama decoaliciones para oponerse a las pro-hibiciones tanto de publicidad comode patrocinio.”

La razón de que la publicidad seatan importante es que

“Si se adopta el punto de vistapesimista de las tendencias actuales, laindustria tabacalera podría perder casitoda su garra política en cuestión dedos años. ¿Una exageración? No deltodo. Si se nos quita la publicidad y elpatrocinio, perderemos la mayoría denuestros aliados políticos y de losmedios de difusión, sino todos ellos….Podríamos encontrarnos en estasituación en tan solo dos años, oincluso menos, si se mantiene el ritmode las restricciones actuales en todo elmundo. No se necesita mucha imagi-nación para ver lo que significaría parael precio de nuestras acciones, sinmencionar nuestra reputación…. Com-parado con los miles de millones quepodríamos perder, nuestro compromisoactual para recuperar nuestra basecomercial, política e inclusive moral es,para decirlo abiertamente, lamentable.Ahora es el momento de tomar lasriendas de esta situación deteriorada.”28

(Philip Morris, 1990)

Fritz Gahagan, que trabajó comoconsultor de comercialización para laindustria tabacalera, ofrece una pers-pectiva que ilustra cómo esta industriaha resuelto uno de sus dilemas másinextricables:

“El problema es ¿cómo vender lamuerte? ¿Cómo vender un veneno quemata 350.000 personas por año, 1.000personas por día? Se vende con losgrandes espacios al aire libre…las mon-tañas, los lugares abiertos, los lagosllenos de agua hasta la orilla. Se logracon gente joven y saludable. Se logracon atletas. ¿Cómo pensar que unabocanada de cigarrillo podría causardaño alguno en una situación comoesa? Imposible, hay demasiado aire

puro, demasiada salud—demasiadaexudación de juventud y vitalidad—asíes como lo logran.”29

La mayoría de los anuncios pub-licitarios tabacaleros no tienen absolu-tamente nada que ver con los cigarri-llos, como lo demuestran estasdirectrices creativas para Marlboro, lamarca de mayor venta en el mundo:

“Cada aviso de Marlboro debe juz-garse según los siguientes criterios:valor del argumento, autenticidad,

masculinidad, a la vez que se comuni-can esos perdurables valores de liber-tad, oportunidades ilimitadas, autosu-ficiencia, dominio del destino yarmonía con la naturaleza.”30

(Philip Morris, sin fecha)

Los patrocinios deportivos handemostrado ser una herramienta útilpara los intentos de la industria taba-calera de relacionar el consumo decigarrillos con la salud y las proezasatléticas. Como dice un ejecutivo deR.J. Reynolds:

“Estamos en el negocio de los ci-garrillos. No estamos en el negocio delos deportes. Usamos los deportescomo medio para publicitar nuestrosproductos…. Podemos ir a un áreadonde comercializamos un evento,medir las ventas durante el evento ymedir las ventas después del mismo, yobservar un aumento de las ventas.”31

(1989)

En todo el mundo, las tabacaleraspatrocinan eventos y equipos

deportivos:

“La copa de fútbol Marlboro enHong Kong y China, vinculaciones conla Copa Mundial y la copa inaugural

de la dinastía Marlboro son excelentesejemplos de la manera en que asocia-mos a Marlboro con el deportefavorito de Asia y ubicamos a Marl-boro como el principal contribuidorpara el desarrollo del fútbol en Asia.”32

(Philip Morris, 1990)

También han demostrado sersumamente astutos para encontrarformas de burlar las restriccioneslegales:

“La otra promoción importante enTurquía se hizo alrededor de la CopaMundial. El fútbol es el deporte másimportante de Turquía y el Mundialdio una oportunidad que no podía serdesaprovechada. Sin embargo, debidoa consideraciones de propiedad inte-lectual y legales, Marlboro no pudoparticipar en una promoción delMundial. Entonces, nos dirigimos a unaeditorial para sortear el problema….Esta vez, la idea era…producir unaGuía del Mundial de 36 páginas decalidad, creada por el periódico ypatrocinada por Marlboro. Este méto-do evitó los problemas legales y almismo tiempo logró nuestro objetivode vincular la marca con el Mundial….Para abrir el apetito del público y crearpublicidad que se difunde de boca enboca, los promotores de PM [PhilipMorris] llevaron a cabo una campaña,distribuyendo 10.000 ejemplares de laguía frente a los estadios en los princi-pales partidos de fútbol y en bares ycafés cuando la gente les mostraba unpaquete de Marlboro.”33

(Philip Morris, 1990)

La vinculación con el Mundial deFútbol se ha ampliado a otros lugarestambién:

Si bien los deportes son lamejor manera de atraer, muestreare influenciar a nuestros fumadoresmás fieles, esta no es la únicamanera.

Page 12: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

10

“Al igual que en Turquía, el fútboles el deporte que despierta más entu-siasmo en el Medio Oriente. Por esonos vinculamos con una de las princi-pales revistas deportivas de Kuwait, Al-Riaydhi, para producir una guía de ca-lidad de la Copa Mundial—unsuplemento especial de 30 páginasdirigido a árabes adultos jóvenes, queincluía una promoción. Los primerospremios eran viajes VIP al Mundial deItalia, y los segundos premios eran losúltimos modelos de televisores de pan-talla grande…. La presentación de laguía era colorida y muy gráfica, convínculos a la marca Marlboro en cadatitular. Y en el centro había un presti-gioso anuncio promocional de 6 pági-nas que apelaba al patriotismo árabe….Se produjeron en total 260.000 ejem-plares de la guía. Fue la impresión másgrande de una revista en el Medio Ori-ente.”34

(Philip Morris, 1990)

Las carreras de autos y motos hansido otra área clave donde las taba-caleras ejercen su patrocinio. El objetivoprevisto del “Marlboro Superbike Show”de 1990 en Taiwán era

“…fortalecer la imagen de lamarca Marlboro en relación con laemoción, la vitalidad y la masculi-nidad, especialmente entre los con-sumidores adultos jóvenes.”35

(Philip Morris, 1990)

“En Malasia, las restricciones a lapublicidad local impiden usar la ima-gen del vaquero americano en losmedios de difusión. Entonces, decidi-mos utilizar el mundo de los deportesde Marlboro como vehículo publici-tario en TV, al aire libre y en periódicospara crear la imagen de Marlboro entorno a su participación mundial enlos deportes motorizados…”36

(Philip Morris, 1990)

Barrie Gill, director ejecutivo deChampionship Sports Specialists Ltd.,una compañía patrocinadora deldeporte, explica por qué las taba-

caleras están tan interesadas en lascarreras de autos:

“Es el deporte ideal para patroci-nar. Tiene glamour y cobertura mun-dial por televisión. Es una actividad de10 meses con 16 carreras en 14 paísesy conductores de 16 nacionalidades.Después del fútbol, es el deportemultinacional número uno. Tieneexposición mundial total, hospitalidadmundial total, cobertura de mediostotal y 600 millones de televidentescada quincena…. Es masculinidad, esemoción, es color, es internacional, esglamour…. Están ahí para tener visibi-lidad. Están ahí para vender cigarri-llos.”37

(1984)

Un documento de R.J. Reynoldsrespalda esta opinión:

“Malasia, asunto Camel clave1989: Siembren la marca con imá-genes de la contemporaneidad, elglamour y la emoción de las carrerasde autos Fórmula Uno.”38

(R.J. Reynolds, 1989)

Las tabacaleras también patroci-nan federaciones deportivas cuandoles conviene a sus intereses:

“Para mejorar nuestras alianzasdeportivas hemos patrocinado laAsamblea Deportiva de Asia Pacífico yOceanía, y hemos establecido unarelación con su presidente para exami-nar oportunidades de patrocinio eidentificar los contactos deportivosclave por país. Recientemente, estaasociación dio acceso a las principalesasociaciones deportivas de Corea.”39

(Philip Morris, 1989)

Además del intenso patrocinio deeventos y equipos deportivos, la indus-tria tiene otras posibilidades paraatraer a los jóvenes:

“Mientras que los deportes son lamejor manera de atraer, muestrear einfluenciar a nuestros fumadores másfieles no es la única posibilidad. Laspelículas y los videos internacionalestambién tienen un enorme atractivo

para los consumidores adultos jóvenesde Asia.”40

(Philip Morris, 1990)

“[En Suiza] la música es el segun-do de los temas de promoción especí-ficos, y Marlboro tiene una gran par-ticipación…. El beneficio real delconcepto es la calidad del contactopersonal que garantiza que Marlboro yla música están firmemente vinculadosen la mente de nuestro grupoobjetivo.”41

(Philip Morris, 1990)

“Cada región realizó literalmentecentenares de promociones locales yregionales que abarcaron desde arte ymúsica hasta premios y competenciasacadémicas. Son demasiado numerosospara mencionarlos aquí. La másnotable de las promociones interna-cionales fue la de los músicos de laSuperbanda de jazz Philip Morris quese presentaron en Australia, Filipinas,Japón y Canadá, y una SuperbandaMarlboro especial que actuó en cuatrociudades de España. Las Superbandasrecibieron una cobertura excepcionalde los medios de comunicación encada mercado, incluidos programas‘especiales’ de televisión y radio enAustralia, Japón y España.”42

(Philip Morris, 1986)

Debido a que la publicidad es tancrucial para mantener la expan-

sión de la industria tabacalera, lasempresas han combatido con todos losmedios a su alcance los intentos derestringir o prohibir la publicidad:

“En Ecuador se aprobó una leyque prohíbe la publicidad de los pro-ductos tabacaleros, pero después deuna movilización de periodistas detoda Latinoamérica y de numerosasorganizaciones internacionales, la leyfue vetada por el Presidente.”

“…En Costa Rica está pendienteotra legislación para prohibir lapublicidad de cigarrillos, pero creemosque también será derrotada. Ahorapodemos, sin embargo, patrocinareventos deportivos. Hemos recibido la

Page 13: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

11

aprobación tácita del gobierno costa-rricense, y actualmente patrocinamosvarios eventos.”

“…En Venezuela, logramos detenerun perjudicial código de publicidadautorregulada, y ahora estamos nego-ciando uno nuevo. Nuestra labor enSenegal produjo un nuevo decretopublicitario que invalidó una prohibi-ción publicitaria total.”43

(Philip Morris, 1986)

Las tabacaleras usan sus cone-xiones políticas para combatir las pro-hibiciones a la publicidad:

“A través de la Asociación deMedios Panarábicos estamos cabilde-ando a Tihama (la principal casa edito-rial y agencia de publicidad en AS[Arabia Saudita]) para frustrar la pro-puesta de prohibición de la publicidad.Estamos usando los contactos deSurrey/Morse para comunicar los men-sajes de PM a sus amigos de AS y acontactos especiales del gobierno delos EE.UU. basados en AS.”44

(Philip Morris, 1985)

Cuando se enfrentan con pre-siones, las tabacaleras a menudo ofre-cen implementar medidas a medias ycódigos voluntarios:

“…abriendo un diálogo seguidopor algunas concesiones menores, laindustria puede lograr salvarse de unalegislación intensa durante al menosdos o tres años más.”45

(Philip Morris, 1976)

“Se está redactando un códigopara la industria [para Pakistán]…demodo que se pueda usar tanto comopalanca para iniciativas de cabildeo ycomo argumento en contra de laintroducción de una legislaciónformal.”46

(Philip Morris, 1994)

“…[C]oncluir la remoción de carte-les de anuncios de cigarrillos (vallas depublicidad) a lo largo de las carreterasde Dubai-Abu Dhabi y aprovechar estaconcesión mínima como ejemplo de

una autorregulación voluntaria de laIndustria.”47

(Philip Morris, 1992)

Durante las últimas dos décadas,las empresas tabacaleras han respondi-do a las crecientes restricciones a lapublicidad de sus productos mediantela estrategia de “estiramiento demarcas”:

“Todas las tabacaleras deberánexplorar oportunidades de encontrarproductos y otros servicios no taba-caleros que puedan usarse para comu-nicar la marca o el nombre de la casa,junto con sus identidades visualesesenciales. Ésta será probablementeuna operación a largo plazo y costosa,pero el principio es garantizar de todosmodos que las líneas de cigarrillospuedan anunciarse eficazmente cuan-do se nos nieguen todas las formas decomunicación directa.”48

(BAT, 1979)

BAT ha contemplado explorar

“…las oportunidades de cooperarcon las demás mediante la emisión depublicidad de TV y radio en un paísdonde está prohibido.”49

(BAT, 1979)

Mientras tanto, en Líbano, PhilipMorris ha planeado algunas for-

mas novedosas para hacer la publici-dad de Marlboro:

“Presencia de la marca Marlboroen la entrada a túneles: Colocación deanuncios con la marca Marlboro a laentrada de dos túneles importantescon carteles que recomiendan ‘Con-ducir con cuidado’. PM [Philip Morris]proveerá el sistema de iluminación delos túneles a cambio de la colocaciónde las señales mencionadas anterior-mente.

Presencia de la marca Marlboro enun puente peatonal: Renovación de 5puentes peatonales dentro del áreametropolitana del Gran Beirut a cambiode lo cual se colocarán carteles de lamarca MARLBORO con los anuncios‘Camine con cuidado’…. Bancos

Marlboro en el ‘Paseo Marítimo’:Colocación de bancos con la marcaMarlboro en el paseo marítimo másfamoso de Beirut…. Señales de tráficode Marlboro: Colocación de señales detráfico en el área metropolitana delGran Beirut en las principalesautopistas que conducen a lugaresclave/centrales. Las señales tambiénpresentarán la marca Marlboro.”

Bajo el titular “Programa deDiversificación” la empresa propone

“Estudiar la presentación de lalínea de ropa clásica Marlboro enLíbano. Esto ocurre en momentos enque se implementan con mayor inten-sidad campañas y actividades en con-tra de fumar.”50

(Philip Morris, 1993).

24 C. Turner, “Cigarette Ads: The Aim IsBranding,” Campaign, 14 de marzo de1986.

25 Citado en L. Heise, Unhealthy Alliance,World Watch, octubre de 1988, p. 20.

26 Citado en B. Potter, “Tobacco Chief toFight Advert Ban,” Daily Telegraph, 15de mayo de 1997.

27 W. Webb, Presentación de cierre ante elConsejo de Administración en 1993, 19de octubre de 1993, http://www.pmdocs.com, Número de Bates 2500157095.

28 Philip Morris, Discussion Paper Not to BeCopied, “Some Reflections On Our Pre-sent Discontent—Or Why We Are Losingthe Public Affairs War on Tobacco?” Pri-vate Confidential, 1990, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500057725/7729, Número de Bates2500057725-29.

29 Citado en la revista británica de noticiastelevisadas World in Action, Secrets ofSafer Cigarettes, 1988.

30 Philip Morris, “Marlboro World-wideCreative Issues and Guidelines,” sinfecha, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501174579/4584,Número de Bates 2501174579-84.

31 J. DeParle, “Warning: Sports Stars MayBe Hazardous to Your Health,” TheWashington Monthly, septiembre de1989, pp. 34-49.

32 Philip Morris, “Marlboro 1990,”http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504034844/4875, Númerode Bates 2504034844-75.

Page 14: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

12

33 Philip Morris, marzo de 1990,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501260425B/0425Z, Númerode Bates 2501260425B-25Z.

34 Ibid.35 E. da Roza, “Marlboro Superbike Show

’90,” Inter-Office Correspondence, 18 deseptiembre de 1990, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504016566/6567, Número de Bates 2504016566.

36 Philip Morris, “Marlboro 1990,”http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504034844/4875, Número deBates 2504034844-75.

37 Citado en P. Taylor, Smoke Ring—ThePolitics of Tobacco, 1984, Bodley Head,pp. 101-103.

38 R.J. Reynolds, “Camel Advisory CouncilPerformance Update,” 1989, http://www.library.ucsf.edu/tobacco/mangini/html/s/096/otherpages/allpages.html.

39 J. Dollisson, “1989 2nd Revised ForecastPresentation—Corporate Affairs,” 15 dejunio de 1989, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500101311/1323, Número de Bates 2500101311-23.

40 Marlboro, 1990, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504034844/4875, Número de Bates 2504034844.

41 Philip Morris, marzo de 1990, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501260425B/ 0425Z, Número de Bates2501260425B/0425Z.

42 A. Whist, “Memo to Board of Directors,Philip Morris International CorporateAffairs,” 17 de diciembre de 1986,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406, Número deBates 2025431401-1406.

43 A. Whist, “Philip Morris InternationalCorporate Affairs,” 17 de diciembre de1986, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406,Número de Bates 2025431401-1406.

44 J. B. Robinson, “Developments in theGCC,” Telex to Geoff Bible, 17 dediciembre de 1985, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2044440393/0396, Número de Bates 2044440393-0396.

45 M.P.D. Falconer, Memo interno de PhilipMorris Asia, 1976, concerniente a unareunión de Harry Paul, el entoncesDirector Gerente de BAT-Hong Kong, conel jefe de la dirección de Televisión deHong Kong; citado en Thomas Hedley yJason Gagliardi, “The Cigarette Papers: AStrategy of Manipulation,” South ChinaMorning Post, 19 de enero de 1999.

46 Philip Morris, “Pakistan—Meeting inLondon,” 1994, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504024765/4767,Número de Bates 2504024765-67.

47 B. Baroudi, “GCC Marketing Freedoms,”Memo para Harald Schedel, 12 de agostode 1992, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501052285/2293,Número de Bates 2501052285-93.

48 BAT, “Post Jesterbury Conference, FutureCommunication Restrictions in Advertis-ing,” 10 de julio de 1979.

49 Ibid.50 Philip Morris, “Projects for Future

Exploitation,” Julio de 1993,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501261910/1926, Número deBates 2501261910-26.

Page 15: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

13

Durante años, laindustria tabacalera ha

procurado alinearse conlos cultivadores de

tabaco y con los paísesproductores de tabaco

en un intento parafrustrar las iniciativasde control del tabaco.

La industria ha adoptado unaestrategia doble: por un lado

(a) exagera la importancia económicadel tabaco y el impacto de las activi-dades de control del tabaco sobre lademanda mundial, y por el otro lado,(b) desvirtúa las metas y los programasde la OMS. Para llevar adelante estaestrategia, la industria ha trabajadodirectamente con políticos y empresa-rios favorables e, indirectamente, através de organizaciones pantalla queha creado y financiado. Una gran partede la estrategia ha sido coordinada porlas tabacaleras a través de organiza-ciones tales como ICOSI (InternationalCouncil on Smoking Issues), INFOTAB(International Tobacco InformationCenter) y Agro-Tobacco Services.

Hacia fines de la década de 1970,la industria tabacalera sostenía que

“Los países objetivo deberían serconscientes de…la amenaza a largoplazo que representan para suseconomías las medidas contra el taba-co…. Deberíamos acercarnos a los paí-ses cultivadores a través de nuestrasconexiones con los compradores dehoja de tabaco y no a través de nues-tros intereses en la industria de fabri-cación de cigarrillos en los diferentespaíses. Esto tiene la ventaja de [que] elacercamiento se hace a través de lasfuerzas agrícolas de la región respecti-va, por la misma gente que perteneceal Tercer Mundo, y no por una indus-tria que ya se encuentra bajo ataque,por empresas multinacionales que sólose preocupan de sus gananciasexcesivas.”51

(BAT, 1979)

La industria dijo que una “movi-lización del sector agrícola de la indus-tria tabacalera, especialmente en paí-ses en desarrollo” es uno de dos“puntos de presión viables” para“responder a la OMS”52 (R.J. Reynolds,1981). Los documentos de la industriaregistran que fue necesario “movilizara los aliados más eficazmente en lasáreas de: Cultivo de hoja, Publicidad yMedios de comunicación”53 (B&W,1983) y “movilizar el cabildeo agrícolamundial.”54

(INFOTAB, 1989)

Se propuso un plan de acción parala IV Conferencia Mundial sobre elTabaco y la Salud para adoptar medi-das “preventivas”. El plan sugiere:

“…comunicarse en formaoblicua/indirecta con los dirigentes dela OMS de países del Tercer Mundopara sugerirles que una posiciónextrema contra el tabaco por parte dela OMS podría ser perjudicial para elbienestar económico de sus países.”55

(ICOSI, 1979)

Amediados de la década de 1980, laindustria celebró una reunión con

representantes de los comerciantesinternacionales de hoja de tabaco parapedirles que ayudaran a “neutralizar”las actividades de la OMS. Uno de lospresentadores de la industria observóque quería

“…volver brevemente a la pre-sentación revisada que haremos a ungrupo de Ministros de Agricultura yotros Ministros. En cada una de laspresentaciones resaltaremos las ame-nazas que representan para sus propias

4. La agricultura y laAsociación Internacionalde Productores de Tabaco

Page 16: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

14

industrias tabacaleras las iniciativas dela OMS y de otros organismos de laONU, como UNCTAD y UNIDO… Recal-caremos que será difícil detener lacontinuidad de los ataques contra unaindustria tan importante para laeconomía de sus países. También hare-mos hincapié en la naturalezaevangélica y tendenciosa de estosataques y en el hecho de que hacencaso omiso de muchos de los proble-mas que el Tercer Mundo deberíatratar como problemas prioritarios,tales como la pobreza, la desnutricióny la vivienda… A nivel internacional,¿estarían preparados para controlar,

con la asistencia de sus agregados agrí-colas acreditados ante las organiza-ciones intergubernamentales (UN, EEC,etc.) y embajadas de los países princi-pales, las diversas actividades contra eltabaco que se planean o ya se llevan acabo…[y] comprometer su asesoría yasistencia para crear estrategias ymedidas acertadas para neutralizar omoderar dichas actividades?”56

(INFOTAB, 1984)

Philip Morris estaba obviamentecomplacida con los resultados queobtenía la industria:

“También hemos ayudado a orga-nizar a los cultivadores en una serie depaíses. Con su asistencia, por ejemplo,la industria jugó un papel decisivopara desviar a la Organización de lasNaciones Unidas para la Agricultura yla Alimentación (FAO) de su posturacontra el tabaco. De hecho, la FAO hadado una vuelta de 180 grados sobre

este punto. Los países donde traba-jamos en estrecha colaboración con loscultivadores, y que son especialmenteimportantes para conseguir este cam-bio de postura, incluyen a Malawi,Zimbabwe, Tailandia y Argentina.”57

(Philip Morris, 1985)

Y en Turquía, Philip Morris explicóque:

“…reclutaremos y capacitaremos aun Gerente de Asuntos Corporativos.Esta persona se concentrará inicial-mente en identificar y desarrollar rela-ciones con los líderes ‘desde la semillahasta el mercado’ en la industria taba-

calera turca, conocer el proceso detoma de decisiones del gobierno yfomentar relaciones con los encarga-dos de tomar decisiones, y buscaroportunidades para cultivar discreta-mente una imagen corporativa positivapara Philip Morris. Se prestará particu-lar atención a fomentar relaciones conlos líderes de los cultivadores de taba-co.”58

(Philip Morris, 1987)

La AsociaciónInternacional deProductores de Tabaco

Hacia fines de la década de 1980,cuando los cultivadores de tabaco

todavía no tenían una voz coherentepara la industria, las grandes empresastabacaleras procuraron “movilizar elCabildeo Agrícola Mundial”59 (INFOTAB,1989). El vehículo que concibieron,que todavía está muy activo, es la

Asociación Internacional de Produc-tores de Tabaco, o ITGA (por sus siglasen inglés):

“Los fabricantes, a través deINFOTAB, ‘controlarían’ la financiaciónprimaria de la organización, y de esemodo podrían garantizar que no sedesvíe de su línea política. La ITGAtendría la influencia necesaria paracombatir los tontos programas desustitución de cultivos. La ITGA podríaactuar como ‘pantalla’ para nuestrasactividades de cabildeo del tercermundo ante la OMS, y ganar el apoyode las naciones hostiles a las grandesempresas multinacionales. La ITGA(impulsada por nosotros) podría activarlos grupos de presión de agriculturaregional que actualmente están muydébiles y se resisten a la presión de laindustria.”60

(BAT, 1988)

“Al brindar los recursos necesariospara transformar a la ITGA de una aso-ciación comercial introspectiva y ma-yormente ineficaz en una organizaciónproactiva y políticamente eficaz, laindustria creó la oportunidad deadoptar una postura moral elevada enrelación con una serie de cuestionesfundamentales sobre el tabaco…. Losprincipales puntos de la plataformaagrícola de los cultivadores de tabacoson (a) los beneficios económicos de laproducción de tabaco, particularmenteen los países en desarrollo, (b) los be-neficios sociales, tales como empleo enzonas rurales, y (c) los beneficios ge-nerales del desarrollo agrícola queofrece el cultivo de tabaco. El principalenfoque del esfuerzo de cabildeo delos productores de tabaco se ha con-centrado en la OMS y en la FAO.”61

(BAT, 1991)

El nivel de control que quisieronejercer las tabacaleras sobre las activi-dades de la ITGA se revela en unmemo sobre el número piloto deTabaco Forum, que iba a publicarse“trimestralmente bajo la bandera de laITGA.” La publicación

...[abordar] a los dirigentes dela OMS de países del Tercer Mundopara sugerirles que una posiciónextrema contra el tabaco por partede la OMS podría ser perjudicialpara el bienestar económico de suspaíses.

Page 17: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

15

“…tiene como objeto ser la ‘voz’de los intereses de los cultivadores detabaco. La lista de circulación incluiráa los funcionarios de la OMS y de laFAO, ministros nacionales de SaludPública y Agricultura, y unos 2.400contactos con los medios de comuni-cación clave en todo el mundo. ‘Taba-co Forum’ es producida en un 100%por Infotab, y por lo tanto garantizaun contenido editorial aceptable paranuestras empresas patrocinadoras.”62

(BAT, 1990)

Un documento de BAT donde secomenta que “el problema había

sido la falta de organización mundial yciertamente la falta de fondos” afirmóque

“…el apoyo de los cultivadoresserá inestimable para nuestra batallacontinua con los críticos de la indus-tria. De hecho, ya los hemos usadopara ayudarnos a informar a los dele-gados de la WHA [Asamblea Mundialde la Salud] y de la FAO. La únicaesperanza de que puedan operar efi-cazmente es la ayuda financiera.”63

(BAT, 1988)

Los documentos muestran queBAT financió a la ITGA:

“Se me ha hecho llegar su carta aUlrich Herter debido a que el finan-ciamiento de la Asociación Interna-cional de Productores de Tabaco esmanejado por British-AmericanTobacco Company. Nos complacemosen aportar la suma de 30.000 librascon una serie de condiciones:

a) BATCo aprueba los objetivosdel programa para 1993

b) El Sr. Oldman no visita gobier-nos donde BATCo tiene unaempresa operativa sin nuestroconsentimiento

c) El avance de los objetivos seexaminará después de unperíodo de seis meses

d) Esperamos la producción deuna publicación substancialdurante el año.

Siempre que se sientan cómodoscon estas condiciones, sugiero queDavid Bacon comente con Martin Old-man cuál será el programa para 1993,de modo que podamos tener un acuer-do previo.”64

(BAT, 1992)

La ITGA ha sido una herramientamuy útil de la industria para ejercer

una influencia indirecta sobre losgobiernos:

“…en cooperación con INFOTABcoordinamos la publicación de unacarta de la Asociación Internacional deCultivadores de Tabaco junto con elestudio del impacto económico deltabaco, de la FAO en junio, que se dis-

tribuirá en forma anónima a partici-pantes clave en la reunión del ConsejoEjecutivo de EMRO…en Teherán,Irán.”65

(Philip Morris, 1989)

“A través de la ITGA se entregó un‘paquete de cabildeo’ a los ministrosde salud pública latinoamericanos y alos participantes en todas las seisreuniones regionales de la OMSdurante el mes de septiembre. El

paquete contiene el informe de la FAOsobre la ‘Importancia económica deltabaco’, y otros datos de impacto. 66

(Philip Morris, 1989)

“La ITGA preparará un programade cabildeo dirigido a determinadosparlamentarios del Reino Unido que, sibien no están específicamente vincula-dos a los últimos acontecimientos dela ODA [Administración para el Desa-rrollo de Países de Ultramar], procu-rarán ampliar los conocimientos de losMP [Miembros del Parlamento] acercade los intereses de los cultivadores detabaco, particularmente en los paísesen desarrollo.”67

(BAT, 1991)

En 1991, Martin Oldman aban-donó su cargo de subsecretario generalde INFOTAB para asumir el de jefe deAgro-Tobacco Services, la organizaciónque coordina una gran parte de lasactividades de la ITGA:

“La función principal de la nuevaconsultoría será la de controlar la vozinternacional de los cultivadores detabaco a favor de sus clientes, garan-tizando que la ITGA sea aprovechadaal máximo como vehículo de activi-dades de cabildeo específicas. En par-ticular, la consultoría proporcionará lacoordinación, facilitación y moti-vación necesarias para realizar elpleno potencial de cabildeo de loscultivadores de tabaco…. Hasta lafecha, se ha avanzado bastante en elobjetivo de dar a conocer la voz delos productores en los foros interna-cionales esenciales, tales como laOrganización Mundial de la Salud y laOrganización de las Naciones Unidaspara la Agricultura y la Alimentación.Por ejemplo, la consultoría ha redac-tado una resolución que se debatió enla 44ta. Asamblea Mundial de la Saludque ha logrado el apoyo de una seriede países productores de tabaco paraun enfoque más equilibrado de losaspectos socioeconómicos y ambien-tales del tabaco. En 1989, el intensocabildeo que tuvo lugar en Roma llevó

La ITGA podría actuar como‘pantalla’ para nuestrasactividades de cabildeo deltercer mundo en la OMS, y ganarel apoyo de naciones hostiles alas multinacionales.

Page 18: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

16

a la FAO a publicar, a pesar de la vi-gorosa objeción de la OMS, informessignificativos sobre la importanciaeconómica del tabaco y de las proyec-ciones comerciales de este producto….A través de la ITGA se crearán y ges-tionarán oportunidades de cabildeo.Actualmente revisten particular impor-tancia la Organización Mundial de laSalud, la Organización de las NacionesUnidas para la Agricultura y la Ali-mentación, el Consejo Económico ySocial de las Naciones Unidas, y elBanco Mundial. Otra serie de sucesosinternacionales próximos, tales comola 8va Conferencia Mundial sobre elTabaco y la Salud, la 45ta AsambleaMundial de la Salud y la Conferenciade las Naciones Unidas sobre MedioAmbiente y Desarrollo también sonobviamente importantes…. Junto conla ITGA, Agro-Tobacco Services desa-rrollará e implementará planes deacción para cada una de las organiza-ciones miembro de la ITGA, prepararánuevos argumentos y establecerá vín-culos con aliados externos. Al mismotiempo que se reconocen las circuns-tancias locales, se coordinarán planesde acción individuales para satisfacerlos objetivos generales de las iniciati-vas de cabildeo particulares.”68

(BAT, 1991)

Acomienzos de la década de 1990,la ITGA cumplió “una serie de

objetivos” según los documentos. Porejemplo,

“en la 45ta Asamblea Mundialsobre la Salud logramos que se apro-bara una resolución que mantiene lapresión sobre la OMS para reconocer yresponder a los efectos socioeconómi-cos negativos en los países productoresde tabaco que induciría el éxito de unprograma de tabaco o salud. La resolu-ción liderada por Malawi ganó elapoyo de una serie de países y refutóla afirmación anterior del ConsejoEjecutivo de que la presentación delDirector-General sobre temas del taba-co ante ECOSOC en 1991 fue una

respuesta inadecuada a los problemasplanteados en la 44ta. AsambleaMundial de la Salud…. Con la adopciónde la “Resolución Malawi”, pareceríaque hemos logrado un reconocimientopleno y correcto de las inquietudesque venimos expresando desde hacevarios años. En este sentido, nuestrocabildeo de diplomáticos clave enGinebra jugó un papel importante, sibien no cuantificable.”69

(BAT, 1992/1993)

“Este acontecimiento es impor-tante por al menos dos motivos. Enprimer lugar, amplía formalmente elalcance del debate sobre el tabaco enlos organismos de la ONU que notienen un prejuicio inherente a la per-cepción de problemas de salud… En lamedida en que podamos llevar nuestroaporte efectivo al debate en un frentemás amplio, podrían frustrarse, o almenos modificarse, las ambiciones delprograma “Tabaco o Salud.”70

(BAT, 1992/1993)

En 1995, Oldman estaba preocu-pado acerca de la continua finan-ciación y administración de la ITGA:

“Hay…dos cuestiones que es nece-sario resolver: (a) ‘la cuestión de laadministración’, es decir, cuál es lamejor manera de mantener un controleficaz sobre el interés de los fabri-cantes en la ITGA y en sus actividadesrelacionadas con un programa corrien-te de producción de tabaco, y (b) ‘lacuestión financiamiento’ es decir,cómo garantizar que se pueda man-tener la ITGA a largo plazo a la luz delas considerables reducciones de finan-ciamiento en 1996 y 1997 y a laausencia de un financiamiento directodespués de 1997.”

En cuanto a la “Cuestión deadministración,”

“Los suscriptores del programa decultivadores de tabaco querrán cercio-rarse de que existe un control adecua-do de las actividades de la Asociaciónen la medida en que estén rela-

cionadas con la realización de losobjetivos del programa…”

“Hasta la fecha, [Agro TobaccoServices] ha cumplido esta función,actuando como agencia de fabri-cantes/comerciantes en hojas de taba-co y participando activamente en lasactividades del programa. Se consideraque al menos tendrá que afianzarse dealguna manera la función directiva,aunque sería posible una interrelaciónmás directa pero discreta entre la Sec-retaría de la Asociación y los fabri-cantes/comerciantes. Puede afirmarsecon certeza que hoy no se necesita‘dar tanto apoyo que cuando se ini-ciaron los arreglos actuales. Dichoesto, no sería prudente que en elfuturo haya mucho menos contactoentre los fabricantes/comerciantes quelo que existe actualmente.”71

(BAT, 1995).

51 J. M. Hartogh, Carta a todos los miem-bros del Grupo de Trabajo ICOSI, con unMemorándum adjunto del Dr. E.Bruckner, 26 de junio de 1979, BATGuildford Depository, Número de Bates100433043-47.

52 R. Marcotullio, INFOTAB, Reunión delConsejo de Administración—30 de marzode 1981, http://www.rjrtdocs.com,Número de Bates 502741855-1859.

53 R.L.O. Ely, Infotab Board Meeting 30 y 31de octubre, 18 de noviembre 1983,http://www.bwdocs.aalatg.com, Númerode Bates 680404650-53.

54 INFOTAB, Appendix I, enero de 1989 Dis-cussion Paper, 30 de enero de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501045258/5268, Número deBates 2501045258/5268.

55 Plan de acción propuesto por el Grupode Trabajo ICOSI para la 4ta Conferen-cia Mundial sobre el Fumar y la Salud, acelebrarse en Estocolmo los días 18 a22 de junio, 30 de enero de 1979,http://www.ctr-usa.org/ctr, Número deBates 10395689-95.

56 INFOTAB, “Meeting With Representativesof International Leaf Dealers,” 4 de mayode 1984, http://www.bwdocs.aalatg.com,Número de Bates 690155210-33.

Page 19: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

17

57 Philip Morris, “Issues Raised in Hamish’sMemo” 29 de marzo de 1985,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023268329/8337, Número deBates 2023268340.

58 Philip Morris, “Draft Corporate AffairsPlan,” 25 de noviembre de 1987,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501254715/4723, Número deBates 2501254715-4723

59 INFOTAB, Appendix I, enero de 1989 Dis-cussion Paper, 30 de enero de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501045258/5268, Número deBates 2501045258-5268.

60 J. Bloxcidge, fax a los miembros del Con-sejo, 11 de octubre de 1988, BAT Guild-ford Depository, Número de Bates502555416-7.

61 M. Oldman, carta a G. Pedlow sobre elPrograma Agro-Tobacco, 13 de marzo de1991, BAT Guildford Depository, Númerode Bates 502555357-63.

62 J. Bloxcidge, Carta a B. Bramley, BAT, 23de agosto de 1990, BAT GuildfordDepository, Número de Bates502555387.

63 B. Ely, Carta a B. Bramley, 19 de octubrede 1988, BAT Guildford Depository,Número de Bates 502555415.

64 B. Bramley, Carta a W. Staby, 27 deoctubre de 1992, BAT Guildford Deposi-tory, Número de Bates 502552567.

65 Philip Morris, “EEMA Regional AnnualReport Regarding PMI Corporate AffairsAction Plan,” 16 de octubre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500019962/9976, Número deBates 2500019962-76.

66 Philip Morris, “Boca Raton Action Plan:Status Report for the Period Ending Sep-tember 30, 1989”, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501204997/5021, Número de Bates 2501204997-5021.

67 BAT, Reunión, 14 de marzo de 1991 enInfotab, BAT Guildford Depository,Número de Bates 502555340.

68 M. Oldman, Carta a D. Bacon sobreAgro-Tobacco Services—Una propuestade contrato de consultoría, 1991, BATGuildford Depository, Número de Bates502552645-54.

69 Agro-Tobacco Services, Program ReviewNumber 1, 1992/1993, BAT GuildfordDepository, Número de Bates502552606-11.

70 “ITGA, The Way Ahead,” 1992/1993, BATGuildford Depository, Número de Bates502552621-7.

71 M. Oldman, Carta a D. Bacon de BAT, 29de marzo de 1995, BAT Guildford Depos-itory, Número de Bates 502555220-6.

Page 20: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

18

Como dijo en 1996 Geoffrey Bible,el director ejecutivo de Philip Morris:

“Todavía estamos en el umbralcuando se trata de explorar las oportu-nidades máximas de muchos de nues-tros nuevos mercados.”75

En las palabras del jefe de la sub-sidiaria de BAT en la India:

“Nuestro principal objetivo esampliar el mercado de los cigarrillos.Por ser los líderes del mercado, te-nemos la responsabilidad de hacerlo.”76

(1997)

Los niños de los países en desa-rrollo presentan un blanco sumamenteatractivo para las tabacaleras:

“Este es un mercado con unenorme potencial. El índice de cre-cimiento demográfico es 2,2 por cien-to por año y el 40 por ciento de lapoblación es menor de 18 años.”77

(Philip Morris Turquía, 1997)

La mano de obra barata es tam-bién, indudablemente, una atracción,como lo indica un gerente de opera-ciones de R.J. Reynolds:

“Turquía es muy atractiva desde elpunto de vista del fabricante. La se-mana laboral es de 45 horas, compara-do con las 37 horas en Alemania. Uti-lizando tres turnos, podemos poner atrabajar nuestra fábrica seis días, 24horas, sin horas extras.”78

(1999)

Asia ha sido un foco importantede expansión para las tabacaleras. “Yasabemos lo que queremos”, dice unejecutivo del tabaco. “Queremos aAsia.”79

(1988)

Según un informe de la revistaTobacco Reporter:

“El consumo de tabaco en lasnaciones desarrolladas seguirá unatendencia descendente hacia el finaldel siglo, mientras que en los países endesarrollo el consumo podría aumentaraproximadamente en un tres por cien-to anual. ¡Un cuadro verdaderamenteprometedor! No habrá una sociedadsin fumadores, sino un crecimientosostenido para la industriatabacalera.”72

(1989)

Un ex ejecutivo dedicado a lacomercialización del tabaco lo expresómás claramente:

“Tienen que encontrar una manerade alimentar a los monstruos que hancreado. Prácticamente lo único que lesqueda es aumentar las ventas en lospaíses en desarrollo.”73

(1991)

Un documento de BAT resume porqué eso es así:

“No deberíamos sentirnos depri-midos simplemente porque el mercadototal del mundo libre parece disminuir.Dentro del mercado total, hay áreas desólido crecimiento, particularmente enAsia y África; se abren nuevos merca-dos a nuestras exportaciones, talescomo en los países del área Indo-Chinay del Comecón; y hay grandes oportu-nidades de incrementar nuestra partici-pación en el mercado en áreas comoEuropa…. Esta industria es sistemática-mente rentable. Y hay oportunidadesde aumentar aún más esa rentabili-dad.”74

(BAT, 1990)

Frente a la disminucióno estabilización de los

índices de fumadores enel Norte, las tabacaleras

multinacionalesrecurren a ampliar sus

operaciones en lospaíses en desarrollo.

5. Países en desarrollo

Page 21: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

19

El país principal de Asia al que lastabacaleras quisieran tener acceso esChina, con más de 300 millones defumadores y centenares de millones dejóvenes y mujeres:

“Ningún análisis de la industriatabacalera en el año 2000 sería com-pleto sin tener en cuenta lo que posi-blemente sea el rasgo más importantedel panorama: el mercado de China. Entodos los respectos, China confunde laimaginación.”80

(Philip Morris Asia, 1986)

“Pensar en las estadísticas de con-sumo de cigarrillos de los chinos escomo tratar de pensar en los límitesdel espacio.”81

(Rothmans, 1992)

“El mercado de cigarrillos chino yaes tres veces más grande que el merca-do estadounidense, y representa másdel 30% de los 5.4 billones deunidades del mundo. Como el segmen-to internacional total asciende amenos de 1% de este enorme merca-do, tenemos un lugar amplio para uncrecimiento extraordinario.”82

(Philip Morris, 1993)

“La industria tabacalera internachina es una importante frontera paralas tabacaleras internacionales.”83

(Philip Morris, 1994)

La industria tabacalera también seha estado expandiendo en Europa

del Este y en la antigua UniónSoviética. Según el director de fomen-to comercial de BAT,

“Obviamente existe un enormepotencial en todos estos países. Yodiría que la demanda de cigarrillosoccidentales es insaciable. Es unaoportunidad fantástica para todos, yvamos a incluir todos los paísesposibles.”84

(1992)

Al igual que en los países desa-rrollados, la industria procura socavarlas actividades de control del tabacoen los países en desarrollo:

“No es prudente presuponer uncrecimiento substancial considerableen los países en desarrollo en vista dela rápida intensificación de las pre-siones internacionales que ejercen losorganismos contra el tabaco sobre losgobiernos y los consumidores…. Parapoder maximizar el crecimiento a largo

plazo en los países en desarrollo, debe-mos procurar neutralizar la presióncontra el tabaco dando la impresión deque:

A) “Actuamos en forma respon-sable en vista de la cantidad deopiniones acerca de los efectosde fumar sobre la salud.

B) Preparamos nuestros métodosde comercialización parademostrar esa responsabilidad.

C) Somos un huésped aceptableen el país anfitrión, dondenuestra presencia aporta be-neficios económicos conside-rables.

D) Somos contribuyentes, más queexplotadores.”85

(BAT, 1980)

A finales de la década de 1970, lasprincipales tabacaleras multinacionalesformaron un grupo de trabajo sobre“países en desarrollo” para minimizarlas “amenazas” a la industria en el Ter-cer Mundo.86 Una de sus misionesprincipales era

“impedir, detener o desacelerar laimplementación de las recomenda-ciones del Informe de la Comisión deExpertos de la OMS en esos países.”87

(Philip Morris, 1980)

El objetivo más amplio era obvio:

“Debemos tratar de detener losprogramas dirigidos a un compromisodel Tercer Mundo en contra del taba-co. Debemos tratar de lograr que todoso al menos una gran parte de los paí-ses del Tercer Mundo se comprometancon nuestra causa. Debemos tratar deinfluenciar la política oficial de la FAO

y de UNCTAD para que adopten unapostura a favor del tabaco. Debemostratar de mitigar el impacto de laOMS, forzándolo a adoptar una postu-ra más objetiva y neutral.”88

(BAT, 1979)

Parte de la estrategia de la indus-tria para mantener y crear un mercadoen los países en desarrollo ha sidocombatir las restricciones contra elconsumo de cigarrillos y seguir plante-ando dudas acerca del impacto defumar sobre la salud.

“…establecer un proyecto centra-lizado para identificar especialistas enpaíses menos desarrollados quepudieran tratar los aspectosmédicos/científicos de fumar en públi-co. Fortalecer la posición pública de laindustria respecto de este tema.”89

(Philip Morris, 1981)

La industria también se ha intere-sado mucho en las características par-ticulares de sus nuevos clientes en lospaíses en desarrollo:

“En cuanto a la cuestión de lasalud, estamos evaluando la docu-mentación sobre las poblacionesasiáticas en busca de posibles especia-listas. Las comparaciones entre pobla-ciones asiáticas y caucásicas presentapruebas positivas interesantes sobre lacontroversia de fumar y la salud.”90

(Philip Morris, 1989)

¡Un cuadro verdaderamente prom-etedor! No habrá una sociedad sinfumadores, sino un crecimientosostenido para la industria taba-calera.

Page 22: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

20

“Existe una gran coincidenciaentre fumar y la longevidad en unlugar en Ecuador, pero resultó ser queno inhalaban el humo.”91

(Philip Morris, 1980)

Mientras la gente fume sus ciga-rrillos, las tabacaleras no se preocupandemasiado por las tasas de mortalidad.Según el representante de Rothmansen Burkina Faso:

“La expectativa de vida mediaaquí es de unos 40 años, la mortalidadinfantil es alta: los problemas de saludque algunos dicen son causados porlos cigarrillos realmente no sepercibirán como un problema aquí.”92

(1988)

Las empresas tabacaleras se pre-ocupan, sin embargo, de que la gentepiense que ellas venden cigarrillos conmás alto contenido de alquitrán en el“Tercer Mundo”:

“Últimamente, durante aproxi-madamente 10 días me han contacta-do periodistas de Canadá y Japónsobre el tema de ‘la comercializaciónde cigarrillos en el Tercer Mundo’. Lasconsultas se centran en la afirmaciónde que comercializamos Marlboro conun contenido de ‘alquitrán’ más altoen Filipinas. Efectivamente así es poruna serie de razones que ya ustedesconocen. Hasta la fecha, he podidosalir de la situación, empleando ciertolenguaje poco ortodoxo. La consultade Japón vino de Wyatt Andrews, re-presentante local de CBS, que dijo queestaba preparando un reportaje paraDan Rather. Creo que logré disuadirlode salir al aire con el programa. Perono hay garantías de que podamos con-tener el dique.”93

(Philip Morris, 1984)

Cuando se le preguntó si no esinmoral comercializar cigarrillos almundo en desarrollo, un representantede Rothmans dijo:

“Sería estúpido ignorar un merca-do en crecimiento. No puedo contestarsobre el dilema moral. Estamos en estenegocio para complacer a nuestrosaccionistas.”94

72 “Growth Through 2000,” TobaccoReporter, febrero de 1989.

73 R. Morelli, “Packing it in,” MarketingWeek, 28 de junio de 1991, Vol. 14,Número 16, pp. 30-34.

74 BAT, Talk to TMDP, Chelwood, agosto de1990.

75 Philip Morris, 1996 Annual Report.76 K. Ramnath, CEO de la Indian Tobacco

Company, en propiedad parcial de BritishAmerican Tobacco, 1997, citado en ChrisGlass, “The Multinationals are Coming,”Tobacco Reporter, enero de 1997.

77 S. Arkayin, Director de operaciones paraPhilip Morris Turquía, 1997, citado enChris Glass, “They Smoke Like Turks,”Tobacco Reporter, febrero de 1997.

78 P. Blickisdorf, Director de Operaciones deR.J. Reynolds, 1999, citado en TacoTuinstra, “Making Inroads,” TobaccoReporter, febrero de 1999.

79 Citado en L. Heise, “Unhealthy Alliance,”World Watch, octubre de 1988, p. 20.

80 R. Scull, “Bright Future Predicted forAsia Pacific,” World Tobacco, 1986,Number 94, p. 35.

81 D. Ibison, “Rothman’s Joint Deal OpensHeavenly Gates,” Window Magazine, 16de octubre de 1992, Número 4.

82 J. Nelson y H. Storr, observaciones deHans G. Storr en la Conferencia sobreConsumidores de Prudential Securities, 8de septiembre de 1993, en Boston,Massachusetts (será seguida por separa-do por observaciones de Jack Nelson), 8de septiembre de 1993, http://www.pmdocs.com/, Número de Bates2501109020.

83 PM Asia Inc. PRC Market briefing, abrilde 1994, http://www.pmdocs.com/,Número de Bates 204575631.

84 Citado en M. Macalister, “Making aPacket—The New Tobacco Gold Rush,”The Observer Magazine, 8 de noviembrede 1992.

85 BAT, Appreciation, Re: Aim—To BecomeStronger in Tobacco, As a Sound Basisfor Further Diversification, 16 May 1980,TDO-7000347 Minnesota Trial Exhibits-TE11338, Número de Bates 109881322-109881331.

86 J.M. Hartogh, “Developing Countries AdHoc Group (DCG) Progress Report Cover-ing Events Since the ICOSI Board OfDirectors Meeting on February 18,1980,” http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501017385/7391,Número de Bates 2501017385-7391.

87 “Terms of Reference of DevelopingCountries Group (DCG),” Agosto de1980; http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501017396,Número de Bates 2501017396.

88 J.M. Hartogh, Carta a todos los miem-bros del Grupo de Trabajo ICOSI, con unMemo adjunto del Dr. E. Bruckner, 26 dejunio de 1979, BAT Guildford Depository,Número de Bates 100433043-47.

89 Propuesta de proyecto: Identificar y ori-entar a los expertos en materia de fumaren público en los países menos desarro-llados, 28 de diciembre de 1981,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2024987102/7103, Número deBates 2024987102-7103.

90 J. Dollisson, 1989 2nd Revised ForecastPresentation, Corporate Affairs, 15 dejunio de 1989, http://www.pmdocs.com,Número de Bates 2500101311.

91 J. Lincoln, 24 de noviembre de 1980,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2024258054/8055, Número deBates 2024258054-55.

92 Citado en J. Sweeney, “Selling Cigarettesto the Africans,” Independent Magazine,29 de octubre de 1988.

93 Citado en H. Thomas y J. Gagliardi, “TheCigarette Papers: The Plan to KeepAsians Addicted,” South China MorningPost, 20 de enero de 1999.

94 M. Pavitt, Director de Asuntos Públicosde Rothmans Exports Ltd, citado en J.Sweeney, “Selling Cigarettes to theAfricans,” Independent Magazine, 29 deoctubre de 1988.

Pensar en las estadísticas deconsumo de los chinos es comotratar de pensar en los límitesdel espacio.

Page 23: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

21

La industria tabacalerareconoce que elaumento de los

impuestos sobre losproductos del tabaco

representa una de lasmayores amenazas a la

viabilidad de laindustria:

“Entre todas las inquietudes, hayuna—tributación—que alarma más quenada. Si bien las restricciones a lacomercialización y a fumar en públicodeprimen el volumen, en nuestra expe-riencia la tributación lo deprimemucho más intensamente. Nuestrapreocupación por la tributación es, porlo tanto, una parte central de nuestraconcepción sobre fumar y la salud.Históricamente ha sido el área a la quehemos dedicado más recursos y para elfuturo previsible, creo que esto seguiráasí casi en todas partes.”95

(Philip Morris, 1985)

La razón es simple:

“El problema de los aumentos deimpuestos es que reduce el consumo,tal como…lo quieren los ingenierossociales que plantean estosaumentos.”96

(Philip Morris, 1987)

Entonces, la industria a menudotratará de cambiar los términos deldebate sobre los impuestos:

“Por último, trataremos de cam-biar el enfoque sobre los problemas. Elimpuesto al cigarrillo se convierte enuna cuestión de imparcialidad y políti-ca fiscal efectiva.”97

(Philip Morris, 1993)

Mantener el precio del tabacobajo es esencial para los intentos delas empresas tabacaleras de retenerfumadores actuales y atraer otrosnuevos:

“Latinoamérica:…Marlboro Rojotiene mucho atractivo entre losfumadores adultos jóvenes y los prin-cipiantes. La publicidad por imágenes

por sí misma es importante, y la cam-paña actual de Marlboro es bienrecibida…. Un elemento clave para elcrecimiento de Marlboro Rojo enLatinoamérica es el bajo precio. Esnecesario vigilar cuidadosamente elprecio real del Marlboro, así como lasdiferencias de precio con las marcas dela competencia.”98

(Philip Morris, 1994)

“En los mercados que están suje-tos a control de precios de facto, comoen Suiza, los mercados escandinavos yparte de África, nuestro objetivo esmaximizar los precios, de modo quesobrepasemos la base de aumentos decostos, a la vez que evitamos escruti-nios inoportunos de márgenes porparte de las autoridades siempre quese nos amenace. En el caso de ciertosmercados selectos, aplicaremos preciosflexibles para retener la asequibilidad yla competitividad de nuestros produc-tos, como en el CCG [Consejo deCooperación del Golfo] y en el Levan-te, o para establecer una presencia enmercados de crecimiento, como porejemplo en las exportaciones a Iraq yEAU [Emiratos Árabes Unidos].”99

(Philip Morris, 1989)

En sus esfuerzos por mantener bajoel precio de los cigarrillos, la indus-

tria procura proteger el extremada-mente lucrativo comercio libre deimpuestos:

“También trabajaremos enestrecha colaboración con la RegiónCEE para orientar a las asociaciones decomercio libre de impuestos perti-nentes a fin de garantizar quecualquier prohibición posterior a 1992

6. Economía, impuestosy comercio

Page 24: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

22

sobre las ventas libres de impuestosdentro de la CEE no se difunda a losmercados vecinos. En efecto, nuestroobjetivo es elevar la concesión libre deimpuestos para los cigarrillos, dondesea posible.”100

(Philip Morris, 1989)

Por otra parte, las empresas taba-caleras se han tomado mucho trabajopara derrocar propuestas de aumentodel impuesto al tabaco en todo elmundo:

“Gracias a los esfuerzos de PhilipMorris, el gobierno holandés revisó susistema fiscal para reducir la diferenciaentre los cigarrillos para enrollar y losya fabricados.”

“…En el Medio Oriente se anuncióen octubre que los ministros de finan-zas del CCG [Consejo de Cooperacióndel Golfo]…‘pospondrían indefinida-mente un aumento del impuesto alcigarrillo que afectaba a todo el CCG.’”

“…El gobierno de Hong Kongrespondió a la presión de Philip Morrisreduciendo el diferencial entre losimpuestos sobre la hoja importada ylos cigarrillos…beneficiando conside-rablemente a Philip Morris.”

“…En Australia se estableció unaComisión de Tributación, que represen-ta a los fabricantes de cigarrillos y alInstituto del Tabaco de Australia (TIA).La comisión operó eficazmente en lapreparación de entregas a los gobier-nos estatales y federales que resul-taron en no aumentar los impuestos altabaco al nivel federal o en cinco delos seis estados.”

“…En Quebec, Benson & Hedgesejerció presión para que el gobiernoanulara su sistema de tributación a losproductos tabacaleros ad valorem. Estose logró mediante representacionesprivadas al gobierno y una campaña

de petición que acumuló el mayornúmero de firmas que se haya logradohasta la fecha en la provincia. Ylogramos que el gobierno de la IslaPrince Edward aboliera su impuesto

minorista de 10 por ciento sobre losproductos tabacaleros.”

“…En Brasil, logramos una impor-tante reducción del impuesto….”

“…En los países nórdicos, nuestrared de recursos inició un esfuerzo con-tinuo para convertir el sistema tribu-tario finlandés en uno completamenteespecífico.”

“…En Marruecos…iniciamos unestudio de los impuestos que espe-ramos conduzca a cambios estruc-turales en el futuro. Y en Guatemala seinició una campaña destinada a evitarcambios en la estructura deprecios/impuestos existente en elpaís.”101

(Philip Morris, 1986)

“Nuestras estrategias prioritarias ymedidas de acción incluyen…cooperarcon Rothmans y Gallaher en unesfuerzo por aunar fuerzas en los EAU[Emiratos Árabes Unidos] que seresisten a los aumentos impositivos delCCG [Consejo de Cooperación delGolfo], e impedir así un convenio con-sensuado del CCG para unificar losimpuestos al tabaco. Seguir apoyandoa nuestro distribuidor en los EAU y asu socio comercial, el Ministro delExterior, con argumentos y estudios.”102

(Philip Morris, 1987)

“Se han preparado y presentadopropuestas tributarias detalladas a lasautoridades de Finanzas en Turquía yYugoslavia, y en ambos casos se está ala espera de la evolución de los acon-

tecimientos. También se han preparadoargumentos y documentación a fin demodificar el sistema tributario enCosta de Marfil y Egipto, y parareducir los aranceles a la importaciónen Nigeria y Guinea.”103

(Philip Morris, 1989)

“En Filipinas hemos logradodemorar la aprobación de una legis-lación nacional y últimamente unalegislación local. PM también ejercepresión para que la reforma tributariasuspenda la discriminación de las mar-cas de propiedad extranjera y apruebeuna estructura tributaria específica.”104

(Philip Morris, 1989)

Durante las dos últimas décadas, laindustria tabacalera ha procurado

explorar la tendencia global haciamercados más abiertos a fin de vendermás cigarrillos. A estos efectos, lasempresas tabacaleras colaboraron conla Oficina de la Representación Comer-cial de EE.UU. a fines de la década de1980 para abrir mercados, especial-mente en Asia, a los cigarrillos esta-dounidenses:

“Como ha indicado claramente elex representante de Comercio de Esta-dos Unidos, Clayton Yeutter, lacuestión fundamental que afecta a laexportación de cigarrillos no es denaturaleza moral o de salud, sino depolítica comercial.”105

(R.J. Reynolds, 1996)

“El personal de Hong Kong yNueva York trabajó en estrecha cola-boración con la oficina de Washingtonen la preparación de nuevas estrate-gias sobre cuestiones comerciales yacceso al mercado, fortaleciendo nues-tra relación con el gobierno de EE.UU.,particularmente la oficina del Repre-sentante Comercial de EE.UU. (USTR).El resultado mejorará en gran medidanuestros negocios en Asia. El logro másnotable fue el acuerdo del gobiernojaponés de suspender la tarifaaduanera a los cigarrillos importados.El convenio fue el resultado de unaestrategia coordinada y emprendida

En Filipinas hemos atrasado conéxito la aprobación de la legis-lación nacional y, últimamente, dela legislación local.

Page 25: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

23

por Philip Morris junto con otros fa-bricantes estadounidenses, la USTR yotros organismos gubernamentalesestadounidenses, así como miembrosdel Congreso. En Taiwán, como resul-tado directo de la presión ejercida porPhilip Morris y por la industria, el go-bierno de EE.UU. emprendió 12 mesesde negociaciones que dieron frutoseste año en un convenio que abrirá elmercado para cigarrillos americanosimportados en 1987.”106

(Philip Morris, 1986)

Estos esfuerzos de apertura de mer-cados se ampliaron a otras partes

del mundo también:

“[En Egipto] Seguiremos tambiénapalancando el apoyo del gobierno deEE.UU. para eliminar el impuesto dis-criminatorio aplicado a las marcasinternacionales, a fin de penetrar elsegmento de precios intermedios.”107

(Philip Morris, 1989)

“Buscar oportunidades paraexplotar el apoyo al comercio de losgobiernos occidentales, por ej., deter-minar la factibilidad de una empresaconjunta con SEITA en Francia paraexportaciones a URSS.”108

(Philip Morris, 1989)

“…Procuraremos obtener un con-trato de licencia exclusiva con laempresa tabacalera de Jordania parauna marca secundaria…explotando elconvenio comercial entre Jordania yArabia que concede importacioneslibres de impuestos a Arabia Sauditaprocedentes de Jordania.”109

(Philip Morris, 1989)

El Convenio del Tratado de LibreComercio de América del Norte (TLC oNAFTA) y otros convenios comercialeshan sido una gran ayuda para laindustria tabacalera mundial:

“Philip Morris apoya firmemente aNAFTA y también apoya el proceso dela Ronda de Uruguay…. Las barrerascomerciales artificiales nos han man-

tenido fuera de algunos países. Laeliminación de las barreras comercialesnos dará mayores oportunidades depenetrar mercados. Estamos bien ubi-cados para aprovechar las nuevasoportunidades que nos ofrecerá laeliminación de las barreras comer-ciales. Veo que tanto el TLC como laRonda de Uruguay son los verdaderos‘ganadores’ en lo que se refiere aPhilip Morris.”110

(Philip Morris, 1994)

Naturalmente, nunca deberá dedarse por sentado el apoyo a estosconvenios:

“Participación preliminar coordi-nada de la empresa en el esfuerzo decoalición (USA* TLC) destinado a afian-zar la implementación legislativa delTLC, incluidos $100,000 para esteesfuerzo. También se asistió a variasreuniones del TLC relacionadas conBRT, incluida una del Grupo de Trabajoy Comisión Coordinadora, para planearla estrategia para 1993.”111

(Philip Morris, 1993)

La liberalización de las reglas deinversión es también importante paralas tabacaleras:

“A largo plazo, la producción localparece ser el único medio a través delcual podemos adquirir amplio accesoal mercado chino total. Otra consi-deración es que necesitamos estableceruna base manufacturera en Chinaantes de que el mercado de HongKong se someta a la jurisdicción deCNTC Beijing en 1997.”112

(Philip Morris 1991)

“Bajo el estrecho control delmonopolio, es muy difícil ganar accesoal mercado de la RPC. Sin embargo,China está cambiando y los cambiospueden ser repentinos e imprevisi-bles…. Debemos prepararnos paraaprovechar cualquier relajación de lasreglas y reglamentos.”113

(Philip Morris, 1993)

95 Philip Morris, “The Perspective of PhilipMorris International on Smoking andHealth Issues” (texto del documento dediscusión utilizado en la reunión de altonivel directivo), 29 de marzo de 1985,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023268329/8337, Número deBates 2023268329-49.

96 R.N. Ferguson y M. Waugh, “Social-Political Context of Cigarette Sales andUse in the U.S.—1987,” Memo a laComisión de Planificación estratégica, 27de mayo de 1987, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2050864094/4097, Número de Bates 2050864094-97.

97 T. Walls, “Grasstops GovernmentRelations,” 30 de marzo de 1993, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2024023252/3265, Número deBates 2024023252-65.

98 Philip Morris, “Summary of the KeyConclusions of Our Worldwide Reviewof the Issues Facing Marlboro,” 1994,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2048237361/7370, Número deBates 2048237361-70.

99 Philip Morris, “EFTA Eastern EuropeMiddle East Africa Long Range Plan1990-1992,” diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número deBates 2500066142-94.

100 Ibid.101 A. Whist, Philip Morris International

Corporate Affairs, 17 de diciembre de1986, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406,Número de Bates 2025431401-06.

102 Philip Morris, Draft Corporate AffairsPlan, 25 de noviembre de 1987,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501254715/4723, Número deBates 2501254715-23.

103 Philip Morris, “EFTA Eastern EuropeMiddle East Africa Long Range Plan1990-1992,” diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número deBates 2500066142-94.

104 J. Dollisson, 1989 2nd Revised ForecastPresentation—Corporate Affairs, 15 dejunio de 1989, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500101311/1323,Número de Bates 2500101311-23.

105 USCEA, “Global Tobacco Trade, US Policyand American Cigarettes,” ExecutiveSummary, 4 de enero de 1996,http://www.rjrtdocs.com/, Número deBates 507610680.

Page 26: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

24

106 A. Whist, Memo al Board of Directors,Philip Morris International CorporateAffairs, 17 de diciembre de 1986,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406, Número deBates 2025431401-06.

107 Philip Morris, “EFTA Eastern EuropeMiddle East Africa Long Range Plan1990-1992,” diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número deBates 2500066142-6294.

108 Ibid.109 Ibid.110 Philip Morris, Washington Relations

Office Annual Meetings Q’s & A’s, 21 demarzo de 1994, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2048589071/9091, Número de Bates 2048589071.

111 C. Fuller, Director, Philip Morris Wash-ington Relations Office, 1993, Novem-ber/December Monthly Reports,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2041424406/4415, Número deBates 2041424406-15.

112 Philip Morris, “People’s Republic ofChina,” 1991, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500098237/8268,Número de Bates 2500098237.

113 Philip Morris, “China—Vision 2000,”1993, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504033326/3348,Número de Bates 2504033326.

Page 27: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

25

Aunque la industria deltabaco ha sabido desde

hace casi 20 años queel humo de segunda

mano (conocidotambién como humo detabaco ambiental, HTA)

presenta un riesgograve para la salud, ha

hecho todo lo posiblepara restar importancia

a este riesgo y combatirlas medidas dirigidas a

restringir el consumo decigarrillos en lugarespúblicos y de trabajo.

Efectivamente, los científicos de laindustria han examinado las prue-

bas que demuestran que los nofumadores expuestos al humo desegunda mano sufren un daño consi-derable en los bronquiolos y han com-probado que es cierto:

“He examinado el documentoanterior y lo considero un excelentetrabajo que podría ser muy perjudicialpara nuestro negocio. Hay varias cosasque pueden hacerse para minimizar suimpacto.”114

(Philip Morris, 1980)

No obstante, en la década de1990, Philip Morris montó una cam-paña multimillonaria para socavar unestudio sobre los peligros del HTA,realizado por el Centro Internacionalde Investigaciones sobre el Cáncer, unafilial de la OMS. La campaña se dirigióa investigadores, los medios de comu-nicación y los gobiernos. Sus metaseran:

• “Retrasar el avance y/o la pu-blicación del estudio.

• Afectar la redacción de susconclusiones y la declaraciónoficial de los resultados.

• Neutralizar los posibles resulta-dos negativos del estudio, par-ticularmente como herramientaregulatoria.

• Contrarrestar el impactopotencial del estudio sobre lapolítica gubernamental, laopinión pública y las medidasde propietarios y empleadoresprivados.”115

(Philip Morris, 1993)

La industria tabacalera ha recono-cido desde hace mucho tiempo que elproblema del HTA podría amenazar sufuturo financiero si los gobiernos uti-lizaran la voluntad política para apro-bar restricciones a fumar en público.Un estudio confidencial para el Insti-tuto de Tabaco de EE.UU. sobre lasactitudes del público concernientes alconsumo de cigarrillos, escrito a finesde la década de 1970, observaba que

“Lo que el fumador se hace a símismo es su problema, pero lo quehace al no fumador es algo muy dife-rente…. Consideramos esto como eldato más peligroso hasta ahoraestablecido sobre la viabilidad de laindustria del tabaco.”116

(1978)

La industria comprende que

“La implicación inmediata [de lasprohibiciones de fumar] para nuestronegocio es obvia: si nuestros consumi-dores tienen menos oportunidades dedisfrutar de nuestros productos, losusarán menos frecuentemente y elresultado será un impacto adversosobre nuestros beneficios.”117

(Philip Morris, 1994)

“¿Qué significa para nuestraindustria estas advertencias sobre lasalud, una demanda pública mayorpara restringir el consumo de cigarri-llos y la creciente intolerancia de losno fumadores? Una reducción de lasventas, como es lógico. La Asociaciónde Comerciantes de Tabaco estudió larelación entre la legislación de restric-ciones a fumar y el consumo de ciga-rrillos entre 1961 y 1982. La con-clusión: que las leyes que restringen

7. Humo de segunda manoo humo de tabacoambiental

Page 28: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

26

fumar fueron la causa del 21 por cien-to de la variación de consumo de ciga-rrillos entre estados diferentes duranteese período…. Quienes dicen que tra-bajan en lugares donde hay restric-ciones, fumaron alrededor de un ciga-rrillo y cuarto menos cada día que losque no se encuentran en dichas situa-ciones…. Esa reducción de un cigarrilloy cuarto por día significa entonces unamerma de casi 7 mil millones de ciga-rrillos que no se fuman por año debidoa las restricciones para fumar en ellugar de trabajo. Eso equivale a 350millones de paquetes de cigarrillos. Aun dólar por paquete, hasta las restric-ciones más leves para fumar en ellugar de trabajo le cuesta a esta indus-tria 233 millones de dólares al año eningresos.”118

(Tobacco Institute, sin fecha)

Aparte de las reglas gubernamen-tales, la industria tabacalera tambiénse preocupa por los esfuerzos privados:

“La restricción voluntaria defumar—de empresas, asociaciones,organismos públicos e incluso sindi-catos—es uno de los retos más perjudi-ciales y más insidiosos que enfrenta-mos.”119

(Tobacco Institute, sin fecha)

El tema del HTA ha demostrado seruno de los problemas más difíciles

para la industria tabacalera. Como seindica en un documento de PhilipMorris de 1987:

“Aparentemente, los efectos delHTA sobre otras personas es ahora elarma más poderosa contra el consumode cigarrillos que se haya empleadocontra la industria.”120

(Philip Morris, 1987)

El presidente del Instituto deTabaco lo expresa de este modo:

“El atractivo lógico de un aire sinhumo es irresistible para los políticos,los comentadores, e incluso algunosfumadores. Es la manera más eficaz dereducir el consumo de cigarrillos…. Pormás obvio que parezca, nuestro objeti-

vo consiste en contener y refinar lacuestión del humo ambiental a fin dereducir la presión para imponer medi-das de seguridad…. Hasta ahora, nues-tra industria se percibe como parte delproblema pues fomenta una costum-bre ‘peligrosa’, logra resistir las medi-das protectoras y no hace nada parasatisfacer las expectativas del público.Algunos aspectos de nuestra luchasobre este problema han contribuido afomentar la presencia y credibilidad denuestros adversarios. Para resumir,debemos seguir un camino que nospermita manipular este asunto,redefinirlo, ampliarlo y demostrar,como hemos hecho en el caso de losincendios accidentales y el compor-tamiento juvenil, que aportamos más ala solución que al problema.”121

(Tobacco Institute, 1985)

Aunque la industria ha enfrentadotres categorías amplias de restriccionesal consumo de cigarrillos, ha tenidomucho éxito en rechazarlas:

“La primera es la legislación.Durante los últimos doce años, más omenos, hemos enfrentado más de1.000 proyectos de ley sobre fumar enpúblico y hemos derrotado más del 90por ciento de éstas. Las que hemosderrotado, normalmente vuelven apresentarse año tras año, a menudo enversiones modificadas para responder alas objeciones de los legisladores….ElInstituto—como cuestión de política ypráctica—está organizado para opo-nerse enérgicamente a toda legislaciónde esta clase. La segunda categoría esel litigio. Comparado con la legislación,en esta área ha ocurrido relativamentepoco…. La tercera categoría es larestricción voluntaria de fumar porparte de las organizaciones.”122

(Tobacco Institute, sin fecha)

Esto no quiere decir que la indus-tria se ha opuesto a todas las restric-ciones a fumar:

“Concentrarse en áreas de com-promiso que no cuestan nada, es decirsi es necesario aprobar algo aprobare-mos un anteproyecto de ‘política’ deno fumar en los ascensores.”123

(Philip Morris, 1987)

La estrategia de la industria sobrelos problemas del HTA han sido bas-tante uniforme en diversos países:

“Andrew Nelmes [de Gallaher]reseñó la estrategia del Reino Unidosobre el HTA. Esa estrategia consta detres componentes: (1) desafiarinformes sin fundamento que vinculanel HTA con enfermedades humanas, (2)poner el HTA en la perspectiva adecua-da con respecto a la calidad global delaire, y (3) desvincular la irritación delpúblico hacia el HTA de los presuntosefectos sobre la salud. Mediante estaestrategia, TAC (por sus siglas en inglésdel Tobacco Advisory Council, actual-mente conocido como la Asociación deFabricantes Tabacaleros) espera (1)crear una ciencia “comercializable”, (2)desviar la crítica sobre el HTA, y (3)colocar a la industria en la posiciónmás favorable posible.”124

(Philip Morris, 1988)

El esfuerzo de crear una “cienciacomercializable” se ha valido de

esquemas complejos en los que puedenseñalarse científicos financiados por laindustria. La “Operación Delantal Blan-co” de Philip Morris fue uno de dichosesquemas:

“Metas finales:• Resistir las restricciones a

fumar

“Si es necesario aprobar algo,aceptaremos un anteproyecto de‘política’ de no fumar en ascen-sores.”

Page 29: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

27

• Restaurar la confianza delfumador

Requisitos previos:

• Cambiar radicalmente laopinión científica y popular

• Restituir la aceptación social defumar

• Conservar las defensas de la responsabilidad delproducto.”125

(Philip Morris, 1987)

“Philip Morris presentó ante laindustria del Reino Unido su estrategiamundial sobre el humo del tabacoambiental. En todas las principaleszonas internacionales…proponen, enpaíses clave, formar un equipo decientíficos organizados por un científi-co nacional coordinador y por aboga-dos estadounidenses, para revisar ladocumentación científica o realizartrabajos sobre el HTA y así mantener lacontroversia en el tapete. Están gas-tando grandes sumas de dinero parahacerlo.”126

(Philip Morris, 1988)

Se resume el método de reclu-tamiento de PM. La idea era contratar“consultores” que, a escondidas delpúblico, actuarían como defensores deterceros en favor de la industria:

“Según Philip Morris, los consul-tores [científicos], idealmente, seríancientíficos europeos que no tenganconexiones previas con las tabacalerasy que no tengan antecedentes rela-cionados con la cuestión [sanitaria]principal que pudieran…conducir aproblemas de atribución. A conti-nuación se describe el mecanismo deselección de consultores: solicitan a unpar de científicos de cada paísque…presenten una lista de consul-tores posibles. Luego estos coordi-nadores o los abogados contactan alos científicos y les preguntas siestarían interesados en problemas decalidad del aire interior: el tabaco nose menciona en esta etapa. Seobtienen los CV [curricula vitae] y se

eliminan los ‘antifumadores’ obvios olos que tienen ‘antecedentes inadecua-dos’…. Posteriormente, Philip Morrisespera que el grupo de científicosopere dentro de los límites de las deci-siones adoptadas por los científicos dePM para determinar la dirección ge-neral de la investigación, queaparentemente será “filtrada” por losabogados para eliminar áreas deli-cadas.”127

(Philip Morris, 1988)

En Europa, la industria pudo emplearconsultores influyentes, entre ellos

un redactor de la prestigiosa revistamédica The Lancet:

“Lancet: Uno de nuestros consul-tores es un redactor de esta influyenterevista médica británica, y continúapublicando numerosas críticas, editoria-les y comentarios sobre el HTA y otrostemas.”128

(Covington and Burling, 1990)

En Asia, mientras tanto,

“Nuestro objetivo es limitar laintroducción y difusión de las restric-ciones a fumar y mantener la acepta-bilidad social generalizada de fumar enAsia.”129

(Philip Morris, 1989)

Para lograrlo,

“PM, RJR y B&W acordaron finan-ciar una red de científicos dedicados alHTA en Asia. Se han identificado can-didatos en Corea, Taiwán, Hong Kong,Filipinas y Tailandia. Se procura obte-ner el apoyo de JTI [Japan TabacoInternational] para llevar el programa aJapón. Al final de una sesión de capaci-tación a fines de junio tendremos unnúcleo de 10 científicos plenamentecapacitados en los temas, listos ypreparados para contribuir, escribiendoartículos, presentando informes a fun-cionarios estatales y realizando otrasactividades de esta índole. Su primeratarea será una conferencia de prensaen Hong Kong a fines de Junio.”130

(Philip Morris, 1989)

Los primeros intentos fueron algomenos científicos:

“Estudio de investigación cualita-tiva en Malasia…. El objetivo principaldel estudio era identificar las reglas noescritas del comportamiento delfumador que existen en Malasia, lascuales podrían presentarse como unabase lógica para excluir restriccionesde fumar en lugares públicos.”131

(Philip Morris, 1981)

A pesar de sus esfuerzos continuospara combatir las prohibiciones defumar, David Laufer, director de co-mercialización y ventas de Philip Morris,propuso en 1994:

“…[L]os argumentos económicos amenudo usados por la industria paraahuyentar las actividades que prohíbenfumar ya no funcionaban, si es quealguna vez lo lograron. Estos argumen-tos simplemente carecían de credibili-dad ante el público, lo que no es desorprender cuando se tiene en cuentaque nuestras desesperadas prediccionesdel pasado nunca se hicieronrealidad.”132

(Philip Morris, 1994)

114 J.L. Charles, Personal y confidencial: Dis-función de las vías respiratorias menoresen no fumadores con exposición crónicaal humo del tabaco, J.R. White y H. Froeb,Memo a T.S. Osdene, 30 de marzo de1980, http://www.tobaccodocuments.org/view.cfm?CitID=1709576&GetListAr-rayIdx=1&ShowImages=yes.

115 D.I. Greenberg, Organo Internacionalpara Investigaciones de Estudios deCáncer, 15 de septiembre de 1993,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501341817/1823, Número deBates 2501341817-23.

116 The Roper Organization, A Study of Pub-lic Attitudes Towards Cigarette Smokingand the Tobacco Industry in 1978, Vol.1, 1978, citado en S.A. Glantz, J. Slade,L.A. Bero, P. Hanauer, y D.E. Barnes, TheCigarette Papers, University of CaliforniaPress, 1996.

117 T. Wells, CAC Presentation Number 4, 8de julio de 1994, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2041183751/3790, Número de Bates 2041183751-90.

Page 30: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

28

118 Tobacco Institute, “Public Smoking: TheProblem (SDC Introduction),” sin fechapero alrededor de 1985,http://www.tobaccodocuments.org/,Número de Bates TIMN0014554-65.

119 P.G. Sparber, “Smoking in the Work-place,” Tobacco Institute, sin fecha,http://my.tobaccodocuments.org/,Número de Bates TIMN0014640-64.

120R.N. Ferguson y M. Waugh, “Social-Political Context of Cigarette Sales andUse in the U.S.—1987,” Philip Morris cor-respondencia interna, Memo al Comitéde Planificación Estratégica, 27 de mayode 1987, http://www.pmdocs.com/,Número de Bates 2050864094-97.

121 W. Kloepfer, Report on Public SmokingIssue Executive Committee, TobaccoInstitute, 10 de abril de 1985,http://www.tobaccoinstitute.com/,Número de Bates TIMN0013710-23.

122P.G. Sparber, “Smoking in the Work-place,” Tobacco Institute, sin fecha,http://my.tobaccodocuments.org/,Número de Bates TIMN0014640-64.

123Philip Morris, 24 de junio de 1987,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2021502679/2683.

124D. Hoel, “Joint Meeting on ETS—London, England,” Privileged andConfidential Memo to F.S. Newman,Philip Morris, 18 de junio de 1988,http://www.tobaccodocuments.org/view.cfm?docid=23706&source=BLILEY&ShowImages=yes, Número de Bates2021548222-35.

125J. Besques, “Minutes Of EEMA/EEC ETSStrategy Meeting Held On 870511,Strictly Confidential Memo, 26 de mayode 1987, http://www.pmdocs.com/,Número de Bates 2046754737-40.

126Dr. S. Boyse, “Note On A Special MeetingOf The UK Industry On EnvironmentalTobacco Smoke London,” 17 de febrerode 1988, http://www.pmdocs.com/,Número de Bates 2063791181-87.

127 Ibid.128Covington y Burling, “Report on the

European Consultancy Program,” Privi-leged and Confidential Memorandum, 1de marzo de 1990, Bliley Database,Número de Bates 2500048956-69.

129Plan de asuntos corporativos de PM enAsia, 1990–1992,diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500084000/4042, Número deBates 2500084000-42.

130J. Dollisson, 2da Presentación de pronós-tico revisado de 1989—Corporate Affairs,15 de junio de 1989, http://www.pmdocs.com/, Número de Bates2500101311-23.

131 Philip Morris, 30 de marzo de 1981,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025048077/8088.

132T. Wells, CAC Presentation Number 4, 8de julio de 1994, http://www.pmdocs.com/, Número de Bates 2041183751-90.

Page 31: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

29

Las tabacaleras se han opuesto siem-pre a cualquier tipo de etiquetas

sobre la salud en los cigarrillos:

“Nos oponemos firmemente a lasetiquetas con advertencias en lospaquetes de cigarrillos por variosmotivos: en primer lugar, las etiquetasde advertencia pueden implicar inco-rrectamente que se ha establecidocientíficamente que fumar causa algu-na enfermedad.”133

(R.J. Reynolds, 1981)

“En general, la mayoría de laspropuestas de etiquetas sugierenconocimientos sobre el tabaco y lasalud que en realidad no existen…[L]asetiquetas de ‘advertencia’ que implicanque el consumo de cigarrillos puedecausar cáncer o una enfermedad delcorazón pueden ser perjudiciales.”134

(Council for Tobacco Research, sinfecha)

En un curioso caso de deferenciaa las autoridades sanitarias, un memodel Instituto del Tabaco de 1981declara que

“Los fabricantes de productostabacaleros respetan el derecho de losfuncionarios de salud a ofrecer opi-niones sobre temas relacionados con lasalud pública…. En estas circunstan-cias, las tabacaleras consideran que lasetiquetas de advertencia son redun-dantes e innecesarias.”135

(Tobacco Institute, 1981)

Las empresas tabacaleras hancombatido enérgicamente las medidasque exigen poner etiquetas en los ci-garrillos; donde existen leyes sobre eti-quetado, han procurado que no se

refuercen las advertencias sobre lasalud:

“…Debido a los esfuerzos de PM,la Comisión de Especialistas de Labora-torios de Ministros de Salud del GCC[Consejo de Cooperación del Golfo]retrasó la publicación de advertenciasy de etiquetado del nivel máximo decomponentes en los paquetes de ciga-rrillos. También logramos combatir lasetiquetas rotativas sobre la salud y lasiniciativas para prohibir la publici-dad…. Lanzamos con éxito un desafíoen contra de la propuesta del gobiernosueco para poner etiquetas con adver-tencias sobre la salud…”136

(Philip Morris, 1986)

Una de las preocupaciones de laindustria es el efecto de las adverten-cias de salud sobre el consumo decigarrillos:

“Las regulaciones que comienzancon divulgación y etiquetado podríanconducir a restricciones y a la prohibi-ción de ciertos ingredientes. Estopodría alarmar a los consumidores,afectar el gusto de la marca y tener

resultados de competencia potencial-mente adversos.”137

(Philip Morris, 1992)

“Una declaración que vinculefumar con EL CÁNCER DE PULMÓN leparece correcta al público no iniciado.Mejorar la ‘exactitud’ de la advertenciasin necesidad aparente, incrementaríala credibilidad y me pregunto si esorealmente beneficiaría a nuestraindustria.”138

(Philip Morris, 1988)

En Noruega, Philip Morris adoptóun “plan de defensa legal, un plan derelaciones con el gobierno y un planpara los medios de comunicación” para“impedir” que se adopten las nuevasetiquetas de advertencia para la salud:

“El grupo principal que será objetode presión o cabildeo, será el de losfuncionarios superiores y políticos delMinisterio de Salud…. [S]e estable-cerán contactos similares dentro de losMinisterios de Comercio, Justicia eIndustria…. Alertar a nuestros contac-tos favorables en la esfera de losnegocios, incluidas las organizaciones

8. Etiquetado

...Debido a los esfuerzos [dePM], la Comisión de Especialistasde Laboratorios de Ministros deSalud del GCC retrasó la publi-cación de advertencias y de eti-quetado del nivel máximo de compo-nentes en los paquetes decigarrillos.

Page 32: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

30

comerciales y los sindicatos. Alertarespecialmente a otras industrias debienes de consumo, señalando la posi-bilidad de amenazas futuras.”

El plan para los medios de comu-nicación consistía en “…cuestionar losantecedentes de los requisitos para lasnuevas etiquetas, los fundamentosmédicos, las posibles infracciones demarcas comerciales y la experiencia dela Ley de Tabaco actual…. Diariosinfluyentes como VG y DagensNæringsliv serán informados de lapropuesta. Cabe esperar que publiquensus comentarios a nivel editorial. Estoscomentarios tienden a ser recogidospor los demás medios de comunicacióny son leídos por burócratas y políti-cos…. Dar a las revistas de negociosinformación sobre las consecuenciasque tendrán los nuevos reglamentosen las actividades económicasfuturas.”139

(Philip Morris, 1991)

Donde no podían derrotar las nor-mativas sobre etiquetas, las

empresas tabacaleras trataron dedebilitarlas incorporando una atribu-ción del gobierno en la advertencia,dando así protección legal a laindustria:

“Evitar la difusión de etiquetas deadvertencia para la salud inaceptables.Garantizar la atribución correspon-diente y, donde se justifique, invocaracción judicial. Preparar argumentos einiciativas de cabildeo para Europa delEste.”140

(Philip Morris, 1989)

“En Argelia, los esfuerzos de PhilipMorris condujeron a que el gobiernoaprobara una atribución en las etique-tas de advertencia para la salud.”141

(Philip Morris, 1986)

Estos esfuerzos se extendieron alas exportaciones de las empresastabacaleras:

“[D]eberíamos considerar colocaradvertencias para la salud en todosnuestros cigarrillos exportados. Desde

hace bastante tiempo que estoy afavor de esto. Creo que hacerlo mejo-raría nuestra postura en los litigios en

cuanto a la responsabilidad del pro-ducto, y eliminaría un foco de conside-rable crítica por parte de las orga-nizaciones de salud, los accionistas, eincluso algunos miembros del Congresoque están de nuestro lado.”142

(Philip Morris, 1991)

Cuando el gobierno de Islandia pro-puso una advertencia para la salud

que decía “Advertencia: Fumar cigarri-llos puede causar cáncer de pulmón yenfermedad del corazón,” un memo dela industria tabacalera afirmaba que:

“A través del Instituto de Tabacose está intentando determinar si elgobierno de Estados Unidos (tal vez enconjunción con la industria) puedeconvencer a las autoridades islandesaspara que cambien o suavicen de algunaforma la normativa, tal vez mediante laincorporación de una expresión queindique que la advertencia se publica‘según lo requerido por la leyislandesa’.”143

(Lorillard, 1969)

Philip Morris solicitó a la firma derelaciones públicas más grande delmundo, Burson Marsteller (BM), lapreparación de un “plan de comuni-cación” para poner advertencias vo-luntarias en los paquetes de PM. BMrecomendó que el etiquetado volun-tario

“…es algo que deberíamos hacer.[y que] deberíamos controlar esta pu-

blicidad hasta donde nos sea posi-ble.”144

(Philip Morris, 1991)

De hecho, la industria tabacaleraha convertido un problema potencialen algo ventajoso: las etiquetas sobrela salud pueden vender cigarrillos:

“Parece que un nuevo clientepotencial…ha pedido 100 ó 200 cajasde Marlboro con el aviso de adverten-cia para la salud estadounidense en lospaquetes…. Esto me hace pensar queprácticamente todo el mundo sabeahora que los cigarrillos británicos ylos estadounidenses llevan un aviso deadvertencia. Que yo sepa, ninguna otramarca lleva una leyenda particular,excepto “hecho en EE.UU.” en letraspequeñas; y los consumidores finalespodrían fumar más de estos cigarrillosque llevan el aviso sobre la saludporque eso les garantiza que estánhechos en Estados Unidos. Como Marl-boro tiene actualmente una propor-ción de ventas tan reducida en estemercado, creo que vale la pena inten-tar mejorar las ventas con el avisosobre la salud.”145

(Philip Morris, 1973)

Evitar la difusión de etiquetasde advertencia para la salud ina-ceptables. Garantizar la atribu-ción correspondiente y, dondese justifique, invocar acciónjudicial.

Page 33: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

31

133Citado en H. Thomas y J. Gagliardi, “TheCigarette Papers: A Strategy of Manipu-lation,” South China Morning Post, 19de enero de 1999.

134R.C. Hockett, Scientific Information inRelating to Proposals to Label TobaccoContainers, sin fecha, Council for Tobac-co Research, Número de Bates11299087-95.

135The Tobacco Institute, Tobacco in theDeveloping Nations, noviembre de 1980,http://www.tobaccoinstitute.com/getallimg.asp?DOCID=TIMN0154202/4218&if=avtidx, Número de BatesTIMN0154202.

136A. Whist, Philip Morris InternationalCorporate Affairs, 17 de diciembre de1986, http://www.pmdocs.com/, Númerode Bates 2025431401-06.

137Philip Morris Corporate Affairs Depart-ment Goals, 1992, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2047079509/9612, Número de Bates 2047079509-9612.

138A. Borek memo, 17 de mayo de 1988,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501048577/8578, Número deBates 2501048577-78.

139Philip Morris, “Countering New HealthWarnings Labels, Norway,” 1991,http://www.pmdocs.com/, Número deBates 2501240776-79.

140“Philip Morris EFTA Eastern Europe Mid-dle East Africa Long Range Plan 1990-1992,” diciembre de 1989, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número de Bates2500066142-94.

141 A. Whist, Philip Morris InternationalCorporate Affairs, 17 de diciembre 1986,http://www.pmdocs.com/, Número deBates 2025431401-06.

142M. Bring, memo para Michael Miles, 24 de julio de 1991, Philip Morrishttp://docs.house.gov/tabaco/docs2/pmsearch.htm, Número de Bates2023003838. También disponible através del sitio Web http://www.tobaccodocuments.org/view.cfm?CitID=973929&GetListArrayIdx=1&ShowImages=yes.

143A.J. Stevens, Carta sobre advertenciaspara la salud en los cigarrillos de Islandia“Iceland—Health Warnings of Ciga-rettes,” 25 de agosto de 1969,http://www.tobaccodocuments.com,Número de Bates 88694579-80.

144M. Bring, memo para M. Miles “WarningLabels on Exported Cigarettes,” 22 deoctubre de 1991, http://www.pmdocs.com/, Número de Bates 2023003853-3854 y 2045749945-9946.

145L.M. Blumberg, American Health Warn-ing Notice, Letter to H. Quick, PhilipMorris International, 19 de octubre de1973, http://www.pmdocs.com/, Númerode Bates 2024975020-21.

31

Page 34: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

32

En Estados Unidos, la industriaprocuró:

“Establecer mejores canales decomunicación entre la Oficina deWashington y Aportaciones Corporati-vas de modo que estas aportacionescumplan mejor con los objetivospolíticos de la empresa…. Además, losprofesionales de Washington debendeterminar quiénes deben recibirdichas aportaciones, de qué forma, ycómo eso complementa lo que yaestamos haciendo.”147

(Tobacco Institute, 1982)

“Identificar a aquellos miembrosdel Congreso que, debido a suantigüedad, cargo dentro del liderazgo,etc., es probable que sean parte de lapróxima generación de líderes delCongreso…. [D]eberíamos refinar losprogramas actuales para ampliar nues-tra presencia ante estos miembros,como reuniones y cenas y eventos pararecaudar fondos, además de las necesi-dades de financiamiento especiales deestos miembros.”148

(Tobacco Institute, 1982)

“Que les duela—Estrategia de laNRA [Asociación Nacional del Rifle].Dejar que los políticos conozcan ellado negativo de las actividades contrael tabaco, identificando a un candida-to vulnerable, aunando fuerzas parahacerle perder la elección y después,discretamente, dejar que otros políti-cos se enteren de lo que hemoshecho.”149

(Philip Morris, 1987)

Este esfuerzo destinado a ejercerpresión es emprendido por las

propias tabacaleras o a través de ter-ceros para que la relación con laindustria se mantenga oculta. Unagran parte de la estrategia ha sidocoordinada por las empresas taba-caleras a través de consorcios interna-cionales subvencionados por la indus-tria, tales como ICOSI (ConsejoInternacional sobre Asuntos Relaciona-dos con Fumar) e INFOTAB (CentroInternacional de Información sobre elTabaco).

La industria tabacalera haemprendido una campaña de 20 añoscontra las Naciones Unidas y la OMSen particular (ver la sección 13, sobrela Organización Mundial de la Salud yotros enemigos) para socavar laspolíticas de control de tabaco. Estosesfuerzos de cabildeo, o lobbying, hantenido gran difusión:

“INFOTAB ha estado coordinandoun esfuerzo de cabildeo en 38 paísesdonde el tabaco tiene importanciaeconómica, trabajando a través deempresas miembros, asociaciones taba-caleras nacionales y comerciantes dehojas de tabaco. Yo coordino unesfuerzo similar a través de la Cámarade Comercio Internacional. La meta deestas actividades es llevar delegadosnacionales a la AMS [Asamblea Mun-dial de la Salud] para que se opongana las recomendaciones extremas contrael tabaco. Brasil, México y Zimbabwehan sido los países mas activos ennuestro favor hasta ahora.”146

(R.J. Reynolds, 1986)

La industria tabacalerasigue teniendo una de

las máquinas decabildeo corporativomejor financiadas y

sofisticadas del mundo,a nivel local, regional,

nacional e internacional.

9. Cabildeo de laindustria tabacalera

Page 35: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

33

Estas tácticas se han llevado al restodel mundo:

“En los países miembros del CCG[Consejo de Cooperación del Golfo]hemos establecido una gran red defuentes y recursos de informaciónmediante los cuales podemos ejercerpresión sobre los funcionariosindicados.”150

(Philip Morris, 1986)

“Vincular nuestros programas dederechos de los fumadores con cam-pañas de relaciones públicas biendirigidas para contrarrestar la informa-ción errónea y tendenciosa, en parti-cular en los mercados nórdicos; exten-der el programa a Suiza, Turquía y elCCG.”151

(Philip Morris, 1989)

“Philip Morris ha asumido unpapel de liderazgo en la Cámara deComercio Filipina…. Prestamos asisten-cia en la visita altamente exitosa de lapresidenta Aquino a Estados Unidos. Elpersonal de Philip Morris Internationalocupa actualmente puestos clave enuna amplia variedad de organizacionesinternacionales que pueden ayudarnosen los años venideros.”152

(Philip Morris, 1986)

“El mercado suizo está sujeto a unaumento considerable de actividadescontra el tabaco…. Para contrarrestaresta tendencia…estamos expandiendonuestra red de contactos gubernamen-tales en la industria, el comercio y lasorganizaciones de turismo de Suiza;reunimos el apoyo de organizacionesde ciudadanos y de consumidores;usamos el sector tabacalero parlamen-tario para iniciar un diálogo con lospartidos políticos de centro derecha; yampliamos nuestros contactos en elmovimiento sindicalista.”153

(Philip Morris, 1989)

“Además, tuvimos otro aumentode impuestos en Uganda que fueinspirado por el FMI/Banco Mundial.Estos dos aspectos, el acceso restringi-do a fondos de cambio de donantes

extranjeros y las cuestiones tributarias,resultan una parte cada vez más cen-tral de la gestión económica en lospaíses africanos donde operamos. Ladirección de nuestras empresas realiza

una labor excelente, si bien inviertemucho tiempo, ejerciendo presiónsobre los gobiernos y los represen-tantes del FMI; pero se frustran cadavez más debido a las decisiones que seadoptan en última instancia en Wa-shington.”154

(BAT, 1993)

“En 1985 estamos trabajando paramejorar aun más nuestro desempeñoen comunicarnos con los legisladores.Nuestro plan tiene tres aspectos.Primero, vamos a reclutar más y mejorgente y les pagaremos más si fueranecesario. En Bahrain, Estocolmo, Lon-dres, Montreal, Filipinas y Japón vamosa reforzar nuestras unidades de asun-tos corporativos. Después, vamos aadoptar un método más sistemáticopara cultivar la gente “acertada”. Hastaahora quizás hemos sido un pococasuales. En tercer término, vamos aprestar más atención al cultivo de laburocracia en vez de seleccionar sim-plemente altos funcionarios adminis-trativos.”155

(Philip Morris, 1985)

Un memo sobre “Cambios en lapolítica británica de ayuda a

proyectos relacionados con el tabaco”indica que

“Si bien es improbable que ocurraun cambio completo en la nuevapolítica, por lo menos en el futuroinmediato, sí pueden crearse oportu-nidades que permitan asegurar que seaplique máxima flexibilidad a la ejecu-ción de la política…. [Y]a se han escrito

al Ministro varias cartas que expresanpreocupación…. [S]e ha acordado quedichas declaraciones deberán serrespaldadas por comentarios prove-nientes de países de África que estén o

puedan verse adversamente afectadospor la política revisada, específica-mente Malawi, Uganda, Zimbabwe,Zaire, Kenia, Camerún y Tanzania. Estecomentario se cursará a través de lasAltas Comisiones Británicas y losdepartamentos gubernamentalesnacionales…. La ITGA, a través de susmiembros en Malawi, Tanzania yZimbabwe, también ejercerá presiónen los ministerios correspondientes endichos países.”156

(BAT, 1991)

Amenudo las actuaciones han sidoencubiertas, como demuestra

claramente esta carta de un represen-tante de Rothmans a un miembro delparlamento egipcio:

“Cuando nos reunimos en junio,usted me pidió que preparara una‘ponencia científica’ acerca de larelación entre fumar y la salud, paraser usada por usted como miembro dela Asamblea Popular. La ponenciaadjunta se ha escrito en respuesta a susolicitud…. Observará que el documen-to no está firmado y le pido que nodivulgue mi nombre ni el de miempresa como fuente de este docu-mento. Por otra parte, puede usarlocomo lo considere conveniente. El Sr.Scott y yo nos hemos reunido conotros fabricantes internacionales quecomercializan cigarrillos en Egipto yhemos acordado una ‘opinión de laindustria’ común acerca del enfoqueque queremos que se adopte sobre laspropuestas de restricciones a la comer-cialización de cigarrillos. Consideramos

La meta de estas actividades esllevar delegados nacionales a laAMS para oponerse a las recomenda-ciones extremas contra el tabaco.

Page 36: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

34

que lo mejor sería que nosreuniéramos con usted nuevamentepara analizar este documento, y si leresultara conveniente, acogeríamoscon gusto una invitación para visitarloen El Cairo.”157

(Philip Morris, 1980)

La industria también crea y usaorganizaciones pantalla:

“Las asociaciones comerciales defabricantes de cigarrillos—nuestramejor cubierta—se están fortaleciendoen una serie de países donde se ponenen marcha vigorosas iniciativas. Tam-bién se están formando nuevas asocia-ciones nacionales, como en Brasil.”158

(Philip Morris, 1979)

O “aliados”:

“Seguiremos formando a nuestrosejecutivos como portavoces públicoseficaces, y buscaremos las oportu-nidades para que puedan difundirnuestros mensajes. Reclutaremos yactivaremos otras “voces/aliados” conquienes podamos comercializar nues-tras opiniones en forma creativa.”159

(Philip Morris, 1989)

“Los estrechos vínculos que se hanforjado durante muchos años [por laindustria tabacalera] con el gobierno,los miembros del parlamento, los con-tactos con científicos y el estable-cimiento médico, los círculos académi-cos y profesionales, los sindicatos, yotros (incluidos los medios de comuni-cación) deben conservarse y ampliarseasiduamente. A través de ellos, laindustria se encuentra en una posiciónque le permite tratar e influenciar, amenudo sin publicidad, la mayoría delas cuestiones relacionadas con eltabaco.”160

(Tobacco Advisory Council, 1978).

146R. Marcotullio, Memo “Regarding WorldHealth Organization,” 17 de marzo de1986, http://www.rjrtdocs.com, Númerode Bates 505745424.

147Philip Morris, “Government AffairsObjectives,” 7 de enero de 1992,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023200348/0355, Número deBates 2023200348/0355.

148Philip Morris, “Government AffairsObjectives,” 7 de enero de 1992,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023200348/0355, Número deBates 2023200348/0355.

149Philip Morris, Operation Down UnderConference, 24/6-28/6, 24 de junio de1987, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2021502679/2683,Número de Bates 2021502679/2683.

150A. Whist, Memo al Consejo de Adminis-tración, Philip Morris International Cor-porate Affairs, 17 de diciembre de 1986,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406, Número deBates 2025431401/1406.

151 Philip Morris, “EFTA Eastern Europe Middle East Africa Long Range Plan1990-1992,” diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número deBates 2500066142-94.

152A. Whist, Memo al Consejo de Adminis-tración, Philip Morris International Cor-porate Affairs, 17 de diciembre de 1986,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406, Número deBates 2025431401/1406.

153Philip Morris, “EFTA Eastern Europe Mid-dle East Africa Long Range Plan 1990-1992,” December 1989, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número de Bates2500066142/6294.

154R.S. Hartley, Carta concerniente al FMI/Banco Mundial dirigida a B. Bramley, 28de junio de 1993, BAT Guildford Deposi-tory, Número de Bates 502587026.

155Philip Morris, “Issues Raised in Hamish’sMemo”, 29 de marzo de 1985,http://www.pmdocs.com/, Número deBates 2023268340.

156BAT, reunión, 14 de marzo de 1991, enInfotab, BAT Guildford Depository,Número de Bates 502555340.

157G.W. Moore, Carta a Hassan M. Soleib,Eastern Co. SAE, Rothmans, 6 de octubrede 1980, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501021931,Número de Bates 2501021931.

158Philip Morris, discurso sin fecha,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023024475/4491, Número deBates 2023024475.

159Philip Morris, “EFTA Eastern Europe Middle East Africa Long Range Plan1990-1992,” diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número deBates 2500066142-94.

160C. Johnson, “A Public Relations Strategyfor the Tobacco Advisory Council;Appraisal and Proposals,” 20 de noviem-bre de 1978, http://www.library.ucsf.edu/tobacco/, British American Tobacco Doc-uments, Número de Bates 109881385-1407.

Page 37: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

35

La industria tabacaleraha considerado desde

hace mucho tiempo quelos medios de

comunicación son clavepara impedir laaprobación de

normativas efectivas.

Una de las maneras en que laindustria ha presionado a los

medios para recibir una coberturainformativa favorable es la amenaza

de retirar los fondos destinados a lapublicidad:

“…[N]o empleamos nuestro granpoder con los medios de comuni-cación…. A los medios les gusta eldinero que ganan con nuestra publici-dad y son un aliado que podemos ydebemos explotar…. [D]eberíamosrealizar un esfuerzo concertado ennuestros mercados principales paramotivar a los medios para que escribanartículos o notas editoriales positivasen cuanto a la postura de la industriasobre el consumo de cigarrillos.”161

(Philip Morris, 1985)

“Deseamos informarle que nuestraamenaza a la prensa fue más que nadauna medida táctica. Sabíamos que seestaba tramando algo relacionado conla prohibición de publicidad yteníamos que involucrar a la prensa….Amenazar a la prensa era la únicamanera de lograr que hicieran algo….Si bien Bahrain en sí no es un mercadotan importante, no podemos subesti-mar su función como precursor en elGolfo. Si cometemos un error aquí,tarde o temprano se notará en otrospaíses de la región.”162

(Philip Morris, 1980)

En aquellos lugares donde laindustria no hace mucha publicidad enla prensa, ha considerado con el fin deganar apoyo político:

“Actualmente no nos beneficiamosdel apoyo de los medios impresos [enPakistán], debido en gran parte a queno hacemos publicidad en la prensa.Las empresas están considerando sitiene sentido comercial asignar a losmedios impresos una parte de los fon-dos destinados a medios de comuni-cación a fin de obtener apoyo.”163

(Philip Morris, 1994)

Otra manera de ganar los favoresde los medios es patrocinar viajes paralos periodistas:

“Durante 1986, auspiciamos visitasa EE.UU. para 97 periodistas de cincopaíses. Esta actividad será ampliada en1987 y se concentrará más directa-mente en el tema del humo de tabacoambiental. Convocaremos presenta-ciones para periodistas de Asia, Lati-noamérica, Europa y Australia, yaumentaremos el número de periodis-tas extranjeros que llevemos aEE.UU.”164

(Philip Morris, 1986)

La industria se encarga de controlarquiénes son amigos y enemigos en

los medios de comunicación:

10. Relaciones con losmedios de comunicación

A los medios les gusta el dineroque ganan con nuestra publicidad yson un aliado que podemos y debe-mos explotar.

Page 38: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

36

“Refinar el servicio de prensa parapresentar respuestas verosímiles yoportunas a las preguntas. Una parteimportante de este esfuerzo seráseñalar quiénes son amigos y opo-nentes en los sectores impresos y elec-trónicos de los medios de comuni-cación.”165

(Philip Morris, 1987)

“Reforzaremos nuestro programade relaciones con los medios para quenos permita dar seguimiento a lasopiniones de los periodistas sobrecuestiones importantes, y para facilitarnuestros contactos regulares conellos.”166

(Philip Morris, 1989)

Contar con medios de comuni-cación suficientemente dóciles puedeservir muy bien los intereses de laindustria tabacalera en las batallassobre reglamentación:

“Trabajar en estrecha colaboracióncon los dueños de los medios deKuwait para mantener vigente laoposición a la propuesta contra eltabaco del ministro de saludpública…que procura imponer severasrestricciones al consumo de cigarrillos.En cooperación con las organizacionesque reciben apoyo mediante patroci-nios deportivos, anunciar los benefi-cios a través de los medios árabes yKuwaitíes.”167

(Philip Morris, 1987)

Pero a veces es mejor ocultarsedetrás de terceros:

“…tratamos de mantener a PhilipMorris fuera de los medios de comuni-cación en lo concerniente a temascomo tributación, prohibiciones parafumar y restricciones a la comercia-lización. En lugar de esto, tratamos desuministrar a los medios declaracionesde apoyo a nuestras posiciones deotras fuentes que conllevan más credi-bilidad que nuestra empresa y notienen intereses propios aparentes.”168

(Philip Morris, 1993)

Las empresas tabacaleras se hanhecho expertas en crear un “giro”:

“…tratamos de cambiar la manerade enfocar los problemas. El impuestoal cigarrillo se convierte en unacuestión de imparcialidad y políticatributaria eficaz. La comercializaciónde los cigarrillos es una cuestión delibertad de expresión comercial. Elhumo de tabaco ambiental se con-vierte en una cuestión de convivencia.Los incendios relacionados con los ci-garrillos resultan ser una cuestión deprogramas prudentes de seguridadcontra incendios. Y asísucesivamente.”169

(Philip Morris, 1993)

161 “The Perspective of Philip Morris Inter-national on Smoking and Health Issues”(Texto del documento de análisis utiliza-do en la reunión de altos directivos), 25de marzo de 1985, http://www.pmdocs.com/, Número de Bates 2023268329-49.

162Télex de A. Borek a W. Thomas, 11 defebrero de 1981, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501021955,Número de Bates 2501021955.

163Philip Morris, “Pakistan—Meeting in Lon-don,” 1994, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504024765/4767,Número de Bates 2504024765-67.

164A. Whist, memo al Consejo Directivo,Philip Morris International CorporateAffairs, 17 de diciembre de 1986,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2025431401/1406.

165Philip Morris, Draft Corporate AffairsPlan, 25 de noviembre de 1987,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501254715/4723.

166Philip Morris, “EFTA Eastern EuropeMiddle East Africa Long Range Plan1990-1992”, diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294, Número deBates 2500066142-94.

167Philip Morris, Draft Corporate AffairsPlan, 25 de noviembre de 1987,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501254715/4723.

168T. Walls, Grasstops Government Rela-tions, Philip Morris, 30 de marzo de1993, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2024023252/3265,Número de Bates 2024023252-65.

169 Ibid.

Page 39: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

37

Cuando en los años 50 comenzarona aparecer pruebas de los peligros

de fumar para la salud, los científicosde la industria tabacalera iniciaron unacarrera enloquecida para producir uncigarrillo “seguro”. Los beneficios co-merciales de desarrollar un productosemejante eran obvios:

“Apuesto a que la primera empre-sa en producir un cigarrillo con unaconsiderable reducción del contenidode alquitranes y nicotina…se llevará elmercado.”170

(Philip Morris, 1958)

“¡Vaya! No sería fantástico quenuestra compañía fuera la primera enproducir un cigarrillo que no décáncer. Lo que le haríamos a la compe-tencia.”171

(La firma de relaciones públicas deHill y Knowlton, citando a un abogado dela industria tabacalera, a mediados de la

década de los 50)

En 1961, los científicos de PhilipMorris consideraron la posibilidad deun “Cigarrillo aceptable según criteriosmédicos” que incluía la reducción delnivel general de substancias car-cinogénicas en el humo. Se estimó quela creación de un cigarrillo con estascaracterísticas costaría US$10 millonesy llevaría entre siete y diez años, y

“Lograr este objetivo requerirá ungran esfuerzo de investigación, porquelos carcinógenos se encuentran enprácticamente cada clase de com-puestos del humo.”172

(Philip Morris, 1961)

El desafío era reducir los nivelesde alquitrán al mismo tiempo que semantuvieran o incluso aumentaran los

niveles de nicotina para mantener alos clientes enganchados:

“[Reducir la nicotina por cigarrillo]podría terminar destruyendo el hábitode la nicotina en un gran número deconsumidores e impedir que nuevosfumadores llegaran a adquirirlo.”173

(BAT, 1959)

“Existe un peligro en la tendenciaactual de reducir cada vez más laentrega en los cigarrillos—es decir, elfumador terminará dejando elhábito…. [S]i se reduce el suministrode nicotina por debajo de un nivel de‘satisfacción’ umbral, entonces losfumadores se preguntarán más fácil-mente por qué mantienen un hábitocaro.”174

(BAT, 1977)

Los esfuerzos de R.J. Reynolds enla década de 1980 para crear un ciga-rrillo más inocuo llamado Premierincluía probar en babuinos versionesdel producto rociado con cocaína paracerciorarse de que suministraría elnivel de drogas necesario:

“Lamento enterarme de que lasmuestras de los animales que fumaroncigarrillos Premier cargados con crack[cocaína] tenían un contenido decocaína relativamente bajo. Ustedindica que los niveles de unos pocosng/ml, medidos poco después de laexposición, no son fisiológicamentesignificativos. En nuestra conversacióntelefónica de hoy cité varias inter-pretaciones posibles, incluyendo[que]…Premier en realidad no sirvecomo dispositivo suministrador dedroga.”175

(R.J. Reynolds, 1989)

Uno de los objetivos principales deproducir un cigarrillo supuestamentemás seguro era el de tranquilizar a losfumadores para que no dejaran defumar:

“Los fabricantes se están concen-trando en el bajo contenido de totalde materiales en partículas y de nicoti-na a fin de crear marcas…destinadas,de una u otra forma, a asegurarle a losconsumidores que estas marcas sonrelativamente más ‘saludables’ que loscigarrillos de mezcla ortodoxa.”176

(BAT, 1971)

“Todo el trabajo en esta áreadeberá dedicarse a proporcionar infor-mación que tranquilice al consumidorrespecto de los cigarrillos y el hábitode fumar. Esto puede lograrse de variasmaneras, es decir, mediante declara-ciones de suministros bajos, mediantela percepción de suministros bajos ymediante la percepción de ‘suavi-dad.’”177

(BAT, 1977)

“Los productos con bajo contenidode alquitrán terminarán definiendoesencialmente el negocio tabacalero.Esto cumplirá la función de ser unmecanismo importante para tranqui-lizar a los fumadores.”178

(BAT, 1979)

“Los que quieren dejar de fumarpueden ser persuadidos de dejar elhábito, o al menos mantenerse en elmercado más tiempo…. Un cigarrillomenos irritante es una vía (de hecho,la práctica de cambiar a cigarrillos concontenido de alquitrán más bajo y aveces con mentol en el proceso de

11. Diseño del producto:Cigarrillos “Suaves” y“Bajos en alquitrán”

Page 40: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

38

dejar el hábito, es un reconocimientotácito de este hecho). El cigarrilloseguro tendría un amplio atractivo,limitado principalmente por las pre-siones sociales para dejar.”179

(Imperial Tobacco, Canadá, 1986)

“En conclusión, la ‘amenaza’ parala marca entre la base de fumadoresexistente parece venir más de un deseode dejar de fumar (que es más fuerteentre los fumadores de SCUL [Silk CutUltra Light] que entre los fumadoresde SCEM [Silk Cut Extra Mild]), que delas marcas de la competencia…. Dehecho, es el nivel de alquitrán muybajo de SCUL y la percepción de quetiene un efecto menos nocivo sobre lasalud, lo que explica la alta opiniónque tienen los usuarios de su marca.Esto está respaldado por la imagen dela marca que establece una alta aso-ciación con ‘gente consciente de lasalud’.”180

(Gallaher, 1995)

Las encuestas de fumadores indi-caron que

“Una minoría consideró a los ciga-rrillos con bajo contenido de alquitráncomo una etapa en el camino a seguirpara dejar de fumar…. Sin embargo, lapercepción más común era que el bajocontenido de alquitrán quitaba urgen-cia o necesidad a la decisión de dejarel hábito.”181

(Gallaher, 1997)

Sin embargo,

“…es posible que el efecto decambiar a cigarrillos con bajo con-tenido de alquitrán sea el de aumentary no disminuir los riesgos delfumar.”182

(Tobacco Advisory Council, 1979)

Este aumento del riesgo se debe enparte a la ‘compensación’, medi-

ante la cual los fumadores ajustan suingestión de humo a fin de obtener unnivel específico de nicotina. Por lotanto, un fumador que consume unproducto con bajo contenido dealquitrán compensa el menor sumi-

nistro de nicotina inhalando más pro-fundamente y fumando más, un efectono duplicado en las mediciones de lamáquina oficial:

“Fumar para compensar: Este estambién un tema particularmente deli-cado. Por un lado tiene sentido desdeel punto de vista comercial. Por elotro, será beneficioso para la industriaobtener datos y hablar en contra dequienes declaran que el programa demenor suministro es engañoso debidoa que los fumadores compensan lossuministros bajos.”183

(Imperial, 1983)

Se plantearon dudas acerca de laposibilidad de poder producir algunavez un cigarrillo verdaderamente másseguro:

“Debido a que se producencarcinógenos conocidos de una va-riedad tan amplia de materias orgáni-cas durante el proceso de pirolisis[reacción química producida por laacción del calor], es sumamenteimprobable que pueda llegarse a unaforma completamente segura de fumartabaco.”184

(BAT, sin fecha)

Cuando los científicos de la taba-calera estadounidense Liggett produ-jeron un cigarrillo que presentaba unpeligro para la salud considerable-mente más bajo, encontraron dificul-tades por parte de los abogados de laempresa:

“Los abogados dijeron que no sepodría decir eso—no podemos hacerun ‘cigarrillo seguro’ porque eso impli-ca que los cigarrillos que hacen losfabricantes no son seguros, y eso pon-dría en riesgo de pleito a la empresa,de modo que el programa searchivó.”185

(1996)

Los científicos de BAT tambiénrecibieron objeciones de su jefe,Patrick Sheehy:

“Al tratar de crear un cigarrillo‘seguro’ corremos el riesgo, por impli-

cación, de que eso se interprete comoun reconocimiento de que el productoactual es ‘peligroso’ y ésta no es unaposición que, en mi opinión,deberíamos adoptar.”186

(BAT, 1986)

170 C.V. Mace, memo a R.N. DuPuis, sin títu-lo, 24 de julio de 1958, citado en P.J.Hilts, Smokescreen—The Truth Behindthe Tobacco Industry Cover-Up, 1996,Addison Wesley, p. 26.

171 Citado en “Tobacco on Trial: Week inReview,” Star Tribune, 22 de febrero de1998.

172H. Wakeham, “Tobacco and Health—R&D Approach,” 15 de noviembre de1961, Cipollone Trial Exhibit 608, Min-nesota Trial Exhibit 10,300,http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/,Número de Bates 1000277423-47.

173BAT Research & Development, Complexity of the P.A.5.A. Machine andVariables Pool, 26 de agosto de 1959,Minnesota Trial Exhibit 10,392,http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/,Número de Bates 100099115-17.

174BAT, “The Product in the Early 1980s,” 25 de marzo de 1977, Minnesota TrialExhibit 11,386, http://www.tobacco.neu.edu/ mn_trial/, Número de Bates1100699974-82.

175W.R. Rogers, “First Draft Report on PilotExperiment on Crack Puffing by Baboonsvia Premier, Southwest Research Insti-tute,” Report to Dr. C. Smith, R.J.Reynolds, 9 de febrero de 1989,http://www.rjrtdocs.com/rjrtdocs/frames.html, Número de Bates511477664–69.

176P.L. Short, BAT, “A New Product,” 21 deoctubre de 1971, Minnesota Trial Exhibit10,306, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Número de Bates 100028935-7.

177P.L. Short, “Smoking and Health Item 7:The Effect on Marketing,” 14 de abril de1977, Minnesota Trial Exhibit 10,585.

178BAT, 4 de abril de 1979, LitigationUsage: Minnesota Trial Exhibit 11350,http://www.tobaccodocuments.org/(Roswell Collection), Número de Bates109883101/3103.

179Creative Research Group, “Project Viking,Vol. 11: An Attitudinal Model of Smok-ing,” preparado para Imperial TobaccoLtd. (Canadá), Febrero-Marzo 1986, cita-do en R. Cunningham, Smoke and Mir-rors—The Canadian Tobacco War, Inter-national Development Research Center,1996, pp. 79-80.

Page 41: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

39

180Market Trends Ltd., “Silk Cut Research.”preparado para Gallaher, Noviembre de1995, Citado en G. Hastings y L. Mac-Fadyen, Keep Smiling, No one’s Going toDie: An Analysis of Internal Documentsfrom the Tobacco Industry’s Main UKAdvertising Agencies, The Center forTobacco Control Research and theTobacco Control Resource Center, 2000,p. 8; ver http://www.tobacco-control.org.

181 Calcraft Buck. Silk Cut Ultra: AdvertisingResearch Debrief, 8 de mayo de 1997,citado en G. Hastings y L. MacFadyen,Keep Smiling, No one’s Going to Die: AnAnalysis of Internal Documents fromthe Tobacco Industry’s Main UK Adver-tising Agencies, The Center for TobaccoControl Research and the Tobacco Con-trol Resource Center, 2000, p. 9; verhttp://www.tobacco-control.org.

182P.N. Lee, Note on Tar Reduction ForHunter, Tobacco Advisory Council, 19 dejulio de 1979, Citado en ASH, TobaccoExplained—The Truth About the TobaccoIndustry—In Its Own Words, 25 de juniode 1988; ver http://www.ash.org.uk.

183L. Blackman, Notas de una reunión dedirectores de investigación de una taba-calera, Oficina central de Imperial, 16 defebrero de 1983, Minnesota Trial Exhibit11,259, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Número de Bates 109840698-702.

184F.J.C. Roe y M.C. Pike, “Smoking andLung Cancer,” sin fecha, Minnesota TrialExhibit 11,041, Número de Bates105453524-35.

185Citado en Channel 4, Big Tobacco, Dis-patches, 31 de octubre de 1996.

186P. Sheehy, Confidential Internal Memo,18 de diciembre de 1986, Minnesota TrialExhibit. 11,296, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Número de Bates109875217-8.

Page 42: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

40

“DP”, o “Duty Paid” (impuesto pagado).Otro término común es “Transit” (trán-sito). Por ejemplo, un documento deBAT que comenta un cuestionariosobre comercio de tránsito, pregunta:

“P: ¿Qué es el comercio detránsito?

R. El comercio de tránsito es eltraslado de bienes de un país a otro sinpagar impuestos ni aranceles. Seconoce más comúnmente como con-trabando.”187

Las tabacaleras han usado tam-bién operaciones legales como pantallapara hacer publicidad dirigida a esti-mular las ventas en el mercado ilegal—llamadas “operaciones globales”:

“La cubierta ‘Disponible libre deimpuestos’ para las extensas necesi-dades de cobertura de los medios decomunicación debe utilizarse concuidado, pues puede convertirse fácil-mente en antagonística y atraer laatención a la fuente de la oferta delmercado, algo que preferiríamos queno sea objeto de escudriño. Lasimportaciones legítimas a través devarios grupos hoteleros es defensible yproporciona otra fuente de “cubierta”para nuestros planes de establecimien-to de marca, así como una plataformapromocional.”188

(BAT, 1993)

Las tabacaleras necesitan mante-ner la “fachada” sobre el contrabando:

“…BAT ha ‘provisto de personal’ enÁfrica Occidental, hasta el punto enque hay duplicación de esfuerzos entreSOREPEX y BAT (RU y E). Nuestro obje-tivo ahora es conservar la ‘fachada’que representa SOREPEX entre

Durante años, la industria taba-calera ha usado el espectro del

contrabando de cigarrillos para asustara los gobiernos para que no aumentenlos impuestos al tabaco. Sin embargo,ciertos casos judiciales recientes hanrevelado que más que debido a dife-rencias de precios, el contrabando deltabaco es en buena parte el resultadode medidas adoptadas por la propiaindustria tabacalera, que parece estaren complicidad con el comercio con-trabandista mundial. La industria taba-calera se beneficia del contrabando delas siguientes maneras:

• Las empresas tabacalerasreciben dinero por los produc-tos contrabandeados y puedenvender grandes volúmenes queingresan en la cadena de dis-tribución ilegal.

• El precio de mercado promedioreducido como consecuenciadel contrabando aumenta eltotal de ventas.

• Ciertos fumadores (particular-mente los pobres) están “pro-tegidos” contra la posibilidadde abandonar el hábito graciasa que los precios siguen bajos.

• El contrabando se usa parapresionar por la reducción delos impuestos internos, lo queaumenta la demanda en losmercados legales.

En los documentos, la industriaemplea una variedad de eufemismospara describir el contrabando. Amenudo, los cigarrillos se rotulancomo “DNP,” que significa “Duty NotPaid” (impuesto no pagado), en vez de

El contrabando detabaco se ha convertido

en una epidemiamundial—hasta un

tercio de lasexportaciones

mundiales anualesingresan al mercado

negro.

12. El contrabando detabaco

Page 43: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

41

nosotros y los delicados mercados deTogo, Benín, Níger (Unidad I) y ÁfricaEcuatorial (Unidad II), pero al mismotiempo permitir que el personal decampaña de BAT asuma el control deeste importante negocio.”189

(BAT, 1988)

Y mantener las exportacionesenmascaradas:

“Niger: Se sostuvieron discusionesconcernientes a importaciones directasa Nigeria a través del Sr. Adji…[quien]disfrazaría las importaciones de ciga-rrillos dando al embarque un nombrediferente, como cerillas.”190

(BAT, 1987)

Por otra parte, los documentosinternos de la industria indican que

la administración activa del negocio decontrabando se considera una priori-dad. Un plan de cinco años de BATpresenta la “administración activa yeficaz de las ventas libres de impuestos(DNP)”:

“En 1993 se estimaba que casi el6% del total de ventas mundiales decigarrillos, que asciende a 5.4 billones,eran ventas DNP…. Una cuestión clavepara BAT es garantizar que los obje-tivos y el desempeño del Grupo paratodo el sistema reciban la prioridadnecesaria mediante la administraciónactiva y eficaz de dicho negocio.”191

(BAT, sin fecha)

La nota de una reunión entre altosejecutivos de BAT y Philip Morris conresponsabilidad sobre Latinoaméricademuestra un amplio comportamientode cartel en la búsqueda de contratosde participación en el mercado,fijación de precios e intentos de limitarlos gastos de apoyo del mercado. Indi-ca que BAT y Philip Morris puedendeterminar precios en los mercados decontrabando y legal independiente-mente:

“BATCo sugirió negociar un enér-gico aumento de precios a nivel localpara las ventas libres de impuestos(DNP), para ser implementado a fines

de agosto si fuera posible…. Despuésde la decisión sobre DNP PMI [PhilipMorris International] sugirió quebuscáramos un aumento del preciocon impuesto pagado (DP). PMI queríaestablecer un vínculo con el aumentoDNP. Nosotros no apoyamos estainiciativa.”192

(BAT, 1992)

El contrabando es también unamanera de mantener la participaciónen el mercado, como se ilustra en estedocumento de Imperial Tobacco Limi-ted* (ITL—una subsidiaria de BAT, norelacionada con Imperial Tobacco delReino Unido) en Canadá:

“En términos de participación, ITLterminó 1993 donde había dejado en1991. Después de una pérdida de par-ticipación en 1992, ITL repuntó alponer sus marcas principales en loscanales del contrabando en el segundosemestre de 1993.”193

(Imperial Tobacco, 1994)

Otro documento de ITL a BATexplica aun más la situación:

“Como saben, los cigarrillos con-trabandeados (debido a los exorbi-tantes niveles tributarios) representancasi el 30% del total de ventas enCanadá, y el nivel sigue aumentando.Aunque acordamos prestar apoyo algobierno federal para reducir el con-trabando limitando nuestras exporta-ciones a EE.UU., nuestros competidoresno lo hicieron. Subsiguientemente,hemos decidido eliminar los límites alas exportaciones para recuperar nues-tra participación entre los fumadorescanadienses. Hacer lo contrario pon-dría en peligro el bienestar a largoplazo de nuestras marcas registradasen el mercado nacional. Hasta que se

resuelva la cuestión del contrabando,se exportará un volumen cada vez másgrande de nuestras ventas nacionalesen Canadá, y después se harán entrarnuevamente por contrabando paravender aquí.”194

(BAT, 1993)

La empresa tenía confianza enpoder evaluar exactamente qué partede sus exportaciones a Estados Unidosse contrabandeaba de vuelta a Canadá.En efecto, parece que la empresapodría presentar un desglose de susexportaciones en ventas legales e ile-gales mensuales:

“Muchas gracias por sus hojas decálculo manuscritas….También estoyesperando sus ventas libres deimpuestos. Las DF se declararán comolibres de impuestos y las DF tránsito sedeclararán como libres de impuestossin especificar.”195

(BAT, 1993)

En el punto álgido del problema,Bill Neville, un miembro de un grupode cabildeo para el Consejo de Fabri-cantes Tabacaleros Canadienses,observó que:

“Si hay contrabando, no nosexcusaremos de que sean cigarrilloscanadienses.”196

En el Reino Unido, Imperial Tobac-co hizo una admisión muy similar en elaño 2001 cuando se le preguntó acer-ca del contrabando:

“No queremos que solamente seimporten marcas extranjeras en elReino Unido. Es importante que, ocu-rra lo que ocurra, nuestras marcas noqueden excluidas.”197

Las empresas británicas ImperialTobacco y Gallaher están exportando

ITL repuntó al poner sus marcasprincipales en los canales de con-trabando en el segundo semestre de1993.

Page 44: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

42

miles de millones de cigarrillos fabri-cados en el Reino Unido a paísesdonde hay poco o ningún mercadopara ellos, lo mismo que ocurrió enCanadá. Se ha estimado que más de lamitad de los cigarrillos que son expor-tados actualmente por Imperial secontrabandean de vuelta al ReinoUnido.198 Hay pruebas también de quelas tabacaleras han decidido captar elmercado de “contrabando”, queexplota la diferencia en los niveles deimpuestos entre el Reino Unido yEuropa continental:

“Los contrabandistas (que repre-sentan más del 70% del mercado en lamayoría de los lugares) sólo se muevenpor las grandes marcas—Old Holborn yGolden Virginia. Necesitamos crear unademanda para Amber Leaf entre losconsumidores más nuevos y másjóvenes para estimular tanto las com-pras en tiendas como una disposiciónentre los contrabandistas para venderAmber Leaf.”199

(Gallaher, 1997)

El contrabando también se usapara establecer una participación en elmercado en diferentes países. Un do-cumento implica a altos ejecutivos deBAT en el desarrollo de una estrategiade comercialización basada en cigarri-llos contrabandeados:

“Asunto: DNP Brasil—ArgentinaSouza Cruz me informa que el presi-dente de BAT Industries ha apoyado laestrategia de que el Grupo OperativoBrasilero aumente su participación enel mercado argentino vía DNP.”200

(BAT, 1993)

Otro documento indica un grado decontrol tan alto sobre los merca-

dos contrabandeados que los planifi-cadores de mercado de BAT los tratancomo otro canal más:

El producto DNP “Kent SuperLights…deberá lanzarse dos semanasdespués del lanzamiento del productoDP…. Lucky Strike…[debería] retirar del

mercado DNP las versiones de 20 y10.201

(BAT, 1994)

Sin embargo, es imposible depen-der solamente del contrabando:

“1. Nacionala) NigeriaObviamente es prácticamente

imposible crear una marca puramenteGT [General Trade, un eufemismo parael contrabando] ya que se necesita unabase nacional. Por lo tanto sería lógicoimportar legalmente cierta cantidad, loque justificaría también una campañapublicitaria.”202

(BAT, 1990)

Pero el comercio general GT o“contrabando” seguirá siendo una pri-oridad:

“Supuestos fijos:

1. La situación política en losCamerunes seguirá siendoinestable durante 1992 ydespués se estabilizará:

2. La economía no mejorarádurante los próximos 5 años.

3. Las actividades de GT dirigidasa este mercado final seguiránsiendo una prioridad durante elperíodo.”203

(BAT, 1991)

Naturalmente, a veces será nece-sario satisfacer a esos países que estánperdiendo ingresos debido al contra-bando:

“Philip Morris International deseaproponer una presentación de laindustria al gobierno de Nigeria parasugerir que un derecho de importaciónespecífico reemplace la tasa ad va-lorem. El objetivo sería legalizar lasimportaciones ‘rentables’, dando así algobierno nigeriano los ingresos queestán perdiendo debido a la proli-feración de GT.”204

(BAT, 1990)

187B. Brady, Carta concerniente a las pre-guntas y respuestas sobre comercio deultramar, a K. Hardman & T. Bates, 25 demayo de 1993, BAT Guildford Depósito,http://www.publici.org/download/BAT_Q&A1.pdf, Número de Bates502553111-14.

188R. O’Regan, Notas de viaje—India 29 Nova 2 Dic 93, memo interno a ADG Pereira,7 de diciembre de 1993, BAT GuildfordDepository, http://www.ash.org.uk/,Número de Bates 500045755-58.

189R. Howe, Carta a M. Binst de Sorepex, 28de abril de 1988, BAT Guildford Deposi-tory, Número de Bates 301626956-58.

190BAT, Reunión Sorepex, 1 de julio de1987, BAT Guildford Depository,http://www.ash.org.uk/, Número de Bates301627037-38.

191 BAT, “BATco Global Five-Year Plan1994–1998,” sin fecha, BAT GuildfordDepository, http://www.ash.org.uk/,Número de Bates 500018206-10.

192BAT, reunión con representantes dePhilip Morris en PennyHill Park, Bagshot,5 de agosto de 1992, BAT GuildfordDepository, http://www.ash.org/uk/,Número de Bates 301653380-85.

* Una subsidiaria de BAT, no relacionadacon Imperial Tobacco del RU.

193 Imperial Tobacco Canada, MarketUpdate, 25 de abril de 1994, BAT Guild-ford Depository, Número de Bates202723892-902.

194D. Brown, carta a U. Herter, 3 de juniode 1993, BAT Guildford Depository,Número de Bates 500028145-47.

195T. Harwood, Carta a D. Renaud, 11 demarzo de 1993, BAT Guildford Deposito-ry, Número de Bates 500174516.

196Citado en R. Howard, “Threats DerailedTabaco Tax. Companies Warning LedOttawa to Ease ‘War on Smugglers’,”Toronto Globe and Mail, 22 de mayo de1992.

197Citado en el programa BBC Money, 14de febrero de 2001.

198R. Rowell y R. Cookson, “No SmokeWithout Fire,” The Big Issue South West,2-8 de octubre de 2000, pp. 18-19.

199S&C Saatchi. Amber Leaf: Gallaher Brief,4 de diciembre de 1997, citado en G.Hastings y L. MacFadyen, Keep Smiling,No one’s Going to Die: An Analysis ofInternal Documents from the TobaccoIndustry’s Main UK AdvertisingAgencies, The Center for Tobacco Con-trol Research y The Tobacco ControlResource Center, 2000, p13; verhttp://www.tobacco-control.org.

Page 45: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

43

200K. Dunt, Memo Regarding DNP BRASIL—Argentina, to U. Herter, B. Bramley[Chairman BAT], Pilbeam, Castro, 18 demayo de 1993, Guildford Depository,http://www.ash.org.uk/, Número de Bates5000028732-4.

201 M. Waterfield, Notas de viaje a Colom-bia, 23–24 de febrero de 1994, Nota dearchivo 9, Marzo de 1993, BAT GuildfordDepository, http://www.ash.org.uk/,Número de Bates 503891624-27.

202 S. Marshall a F. Combes, 10 de julio de1990, BAT Guildford Depository,http://www.ash.org.uk/, Número de Bates301626822-24.

203J. Green, Nota a ADG Pereira, sobre lavisita de Sir Patrick Sheehy, 6 denoviembre de 1991, 1 de noviembre de1991, BAT Guildford Depository,http://www.ash.org.uk/, Número de Bates301773703-5.

204J.M. Ticehurst, Carta concerniente a unavisita a la Unidad I, 14-26 de mayo, 5 dejunio de 1990, BAT Guildford Depository,http://www.ash.org.uk/, Número de Bates301626844-5.

Page 46: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

44

destacar el caso de acoso sexual delque se le acusa en EE.UU. para mini-mizar la importancia de su presenciaen la Conferencia.”208

(BAT, 1992)

La industria, inclusive, tratará demanipular la opinión religiosa a sufavor:

“Trabajar para crear un sistemamediante el cual Philip Morris puedamedir las tendencias hacia el tema defumar y el Islam. Identificar líderesreligiosos islámicos que se oponen alas interpretaciones del Corán quepodrían prohibir el consumo de tabacoy fomentar el apoyo a estos líderes.”209

(Philip Morris, 1987)

La industria tabacalera gastó mi-llones de dólares atacando y tratandode socavar a la OMS y a otros críticos,como la Organización Mundial deOrganizaciones de Consumidores (IOCU,por sus siglas en inglés). La OMS esconsiderada por la industria como la“fuerza rectora del movimientointernacional contra el tabaco.”210

(R.J. Reynolds, 1986)

La contraofensiva continúa hastahoy, con los intentos de la industria desocavar la Convención Marco sobre elControl del Tabaco, que BAT ha carac-terizado como una “obsesión delmundo desarrollado que se le quiereimponer al mundo en vías de desarro-llo.”211 A estos efectos, los documentosde las tabacaleras indican cómo éstasse prepararon para “[m]itigar las ini-ciativas de los programas [de laOMS]”212 y “[a]signar los recursos nece-sarios para pararla [a la OMS] enseco.”213

Nuestro objetivo sigue siendodesarrollar y movilizar los recursos

necesarios—aliados internos de PhilipMorris, entidades y consultores exter-nos, las asociaciones de comercia-lización nacionales de la industria ytodos los aliados posibles—para com-batir las iniciativas sociales y legislati-vas en contra del tabaco…. Especifi-caremos cuidadosamente nuestrosoponentes. Identificaremos, vigilare-mos, aislaremos y le responderemoscuidadosamente a individuos y organi-zaciones clave.”205

(Philip Morris, 1989)

“Debemos desacreditar a losantis…. Se nos ha advertido sobre elpeligro de adoptar una mentalidad desitio. Y hemos escuchado algunoscomentarios interesantes que cuestio-nan si es correcto, como se dice en elejército, disparar a todo lo que semueva. Pero al desarrollar contramedi-das, creo que no debemos olvidar quehay un estado de guerra.”206

(Tobacco Institute, 1979)

Parte de la estrategia de la indus-tria es reformular el debate:

“Presentarlo como un debateentre grupos contra el tabaco yfumadores, en vez de ‘ciudadanos afavor de la salud pública’ contra laindustria tabacalera.”207

(Philip Morris, 1992)

La industria irá hasta donde seanecesario para desacreditar a los indi-viduos que se le oponen:

“Ciertos reporteros tendrán quecuestionar su [refiriéndose a TedKennedy] dependencia al alcohol y

La industria tabacalerausa su poder político y

económico paracombatir a sus

oponentes:

13. La OrganizaciónMundial de la Salud yotros enemigos

Page 47: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

45

Un documento de INFOTAB sug-iere cómo “Atacar a la OMS” y “dividira la FAO/OMS.” Estas son las tácticasque sugieren:

“…criticar el manejo presupues-tario, abordar las prioridades de lasalud, exponer el chantaje de losrecursos, resaltar fallas regionales,atacar el ‘conductismo’. Refutar enmateria de asuntos públicos, desacre-ditar las credenciales de los activistas,hacer una guerra de estadísticas,invertir en relaciones de prensa,demostrar el impacto de esas organi-zaciones ‘poco convencionales’.”

El documento también sugiereque la industria debería “atacar a laIOCU” con las siguientes metas pro-gramáticas: “aliviar la presión de lasONG sobre la OMS, exponer las ‘cre-denciales’ de los activistas, refutar laregulación ‘conductista’, corregir latendencia anti negocios.”214

(INFOTAB, 1989)

Otros documentos exponen lanecesidad de “emprender una iniciativaa largo plazo para contrarrestar laagresiva campaña global contra eltabaco que desarrolla la OMS, e intro-ducir un debate público con respecto auna redefinición del mandato de laOMS.”215

(BAT, 1989)

La industria llegó, inclusive, a explo-rar encubiertamente la posibilidad

de establecer y subvencionar una fun-dación para

“…reemplazar a la OMS y susórganos anexos como asesores princi-pales de la comunidad europea sobreuna gama de asuntos, incluida la saludpública.”216

(Philip Morris, 1991)

La industria tabacalera estableciórelaciones inapropiadas con personal yconsultores de la OMS para influenciarsu política. Su contraofensiva contra laOMS incluyó el uso de institucionesacadémicas ‘independientes’, consul-tores y periodistas para socavar la

credibilidad de la organización, cues-tionar su “misión y mandato” y, enúltima instancia, impedir que la OMStrabaje contra el tabaco. Una de estaspersonas fue Paul Dietrich, un abogadoestadounidense vinculado por muchotiempo a las empresas tabacaleras. Enun momento, Dietrich era consultor deBAT al mismo tiempo que formabaparte de la Comisión sobre Desarrollode la Organización Panamericana de laSalud (OPS), la rama regional de laOMS en las Américas. Según los docu-mentos, Dietrich aparentemente ejer-ció influencia sobre las operaciones,prioridades y presupuestos de la OPS,aunque ésta lo ha negado vehemente-mente. Por ejemplo, en diciembre de1992, Dietrich envió a BAT un memoen el que declaraba

“Adjunto a este memo una copiade una factura de mis honorarios

mensuales de consultor del 1 de juniode 1992 hasta el 30 de septiembre de1992…. Mi trabajo en el Consejo de laOrganización Panamericana de laSalud continúa a través de mis esfuer-zos para reorientar sus prioridadeshacia el control de la enfermedad envez del estilo de vida.”217

(BAT, 1992)

En otra carta, Sharon Boyse de BATescribe que

“Paul ha logrado persuadir a laOPS para borrar al tabaco de su listade prioridades para este año.”218

(BAT, 1991)

Otro consultor clave era GastonVettorazzi, un ex director de laComisión conjunta para residuos pesti-cidas (JMPR por sus siglas en inglés),un órgano conjunto de la OMS y laOrganización de las Naciones Unidas

para la Agricultura y la Alimentación(FAO), dedicado a establecer normasrelacionadas con los pesticidas.Después de su jubilación a fines de losaños 90, Vettorazzi fue contratado porel Centro de Cooperación para laInvestigación Científica Relacionadacon el Tabaco (CORESTA, por sus siglasen inglés), un grupo de investigaciónfinanciado por la industria. Se le pagópara evaluar los pesticidas que se uti-lizan en el tabaco y vigilar la OMS, asis-tir a reuniones de la OMS y pasarinformes a funcionarios de la OMS queno conocían sus conexiones con eltabaco:

“Debe permitirse que el Dr.Vettorazzi presente su trabajo al JMPR,pero…deberá hacerlo a nombre propioy no mencionar a CORESTA ni a laindustria tabacalera.”219

(CORESTA, 1992)

En varias ocasiones, la industriaha intentado interferir en lospresupuestos de la OMS relacionadoscon su programa Tabaco o Salud (TOH).Un documento describe el plan dePhilip Morris de explorar “una variedadde posibilidades…para contener lasubvención del [TOH] por parte defuentes privadas.”220

(Philip Morris, 1989)

La industria también lanzó una cam-paña importante para desacreditar

un estudio emprendido por la AgenciaInternacional para la Investigación delCáncer, una organización afiliada a laOMS (ver Sección 7, Fumadores desegunda mano o Humo de tabacoambiental).

Las tabacaleras usaron otrosórganos de las Naciones Unidas parainfluenciar o resistir las iniciativas dela OMS para controlar el tabaco. Por

Paul ha logrado persuadir a laOPS para que borre al tabaco desu lista de prioridades para esteaño.

Page 48: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

46

ejemplo, desde hace mucho hanconsiderado a la FAO como un “aliadonatural”221 (ICOSI, 1979) y han hechocampañas para “[d]ividir la FAO/OMS”en relación con los problemas deltabaco222 (INFOTAB, 1989). Hacia estefin:

“En 1989, como consecuencia deintensas gestiones de grupos de pre-sión en Roma, la FAO publicó, a pesarde la vigorosa objeción de la OMS,informes significativos sobre la impor-tancia económica del tabaco y sobrelas proyecciones comerciales delmismo.”223

(BAT, 1992)

Una parte clave de esta estrategiade cabildeo se ha llevado a cabo através de la organización pantalla, laAsociación Internacional de Produc-tores de Tabaco (ver Sección 4, Agri-cultura y la Asociación Internacionalde Cultivadores de Tabaco).

La industria tabacalera tambiénprocuró desacreditar a la OMS y a losfuncionarios de la OMS a fin desocavar la eficacia de dicho órgano.Paul Dietrich, el abogado esta-dounidense y consultor tabacaleromencionado anteriormente, generóuna serie de artículos que atacaban lasprioridades de la OMS, sus funciona-rios y su manejo en los medios decomunicación. A estos artículos, contitulares tales como “¿En QUÉ…gasta eldinero la OMS?”, la industria les dioamplia circulación. Dietrich fue usadopor la industria para hacer presenta-ciones ante periodistas y gobiernosque atacaban a la OMS. Nunca semencionaron sus vinculaciones con elmundo del tabaco. La correspondenciacon BAT indica lo siguiente:

“He estado hablando con la indus-tria acerca de la posibilidad de cues-tionar las prioridades de la OMS en laregión…. Básicamente, la industriaestaría interesada (en algún momentoen el futuro cercado) en pedirle quehaga una gira por Sudáfrica, ademásde los países vecinos de Botswana,

Namibia, Lesotho, etc. Estarían intere-sados en que en Sudáfrica haga pre-sentaciones ante los Ministerios deSalud y Finanzas, además de asesoresconstitucionales y gobiernosregionales/negros. [Las empresas deBAT en Sudáfrica] entienden que estodebería ser totalmente independientede la industria y querrían consultarcon usted: (a) si estaría preparado parahacer esto y (b) en caso afirmativo,qué plataforma/excusa usaría para suvisita.”224

(BAT, 1991)

205Philip Morris, “EFTA Eastern EuropeMiddle East Africa Long Range Plan1990–1992,” diciembre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500066142/6294,Número de Bates 2500066142-94.

206R.M. Corner, “CountermeasuresDevelopment Program—Confidential,”20 de mayo de 1979, http://www.tobaccoinstitute.com/, Número deBates TIMN0156508-6520.

207 Philip Morris Corporate Affairs DepartmentGoals, 1992, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2047079509/9612,Número de Bates 2047079509-12.

208J.B. Dastugue, 8th World Conference onTobacco or Health, 1992, BAT GuildfordDepository, Número de Bates300504295-98.

209Philip Morris, Draft Corporate AffairsPlan, 25 de noviembre de 1987,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501254715/4723, Número deBates 2501254715-23.

210 R.J. Marcotullio, Carta sobre: WorldHealth Organization (WH0) 17 de marzode 1986, http://www.rjrtdocs.com,Número de Bates 505745424.

211 Martin Broughton, citado en “BAT Prof-its Nearly Double,” BBC Online, 7 demarzo de 2000.

212 J.M, Hartogh, To All Members of theICOSI Task Force 4th World Conferenceon Smoking and Health, 26 de junio de1979, BAT Guildford Depository, Númerode Bates 100433043-47.

213 INFOTAB, Appendix I, enero de 1989 Dis-cussion Paper, 30 de enero de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501045258/5268, Número deBates 2501045258-68.

214 Ibid.215 “World Watch: Protecting our Global

‘Next Generation’—A Proposed Confer-ence on Children’s Health Issues,” deoctubre de 1989; BAT Guildford Deposi-tory, Número de Bates 300516227-85.

216 H. Gaisch, “A Strategy For Europe, Favour-ing A Rational Approach to Public Policy-Making in All Important Areas,” 1 de sep-tiembre de 1991, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2028463298/3304, Número de Bates 2028463298-04.

217 P. Dietrich, memo a Sharon Boyse ofBAT, 22 de diciembre de 1992, BATGuildford Depository, Número de Bates500899119-20.

218 S. Boyse, memo to B. Bramley, 1991 deagosto de 1992, BAT Guildford Deposito-ry, Número de Bates 202019293.

219 Actas de la reunión extraordinaria deldirectorio de CORESTA en París, el 16 deenero de 1992, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2028427174/7181,Número de Bates 2028427174-81.

220Philip Morris, “Boca Raton Action Plan,WHO/IOCU/UICC: Strategies and Tactics,”31 de enero de 1989, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501045143/5147, Número de Bates 2501045143-47.

221 T. Finnegan, M. Senkus, y L. Zahn,“Action Plan Proposed by ICOSI TASKForce on 4th World Conference onSmoking and Health, Stockholm, junio18-22,” 30 de enero de 1979,http://www.ctr-usa.org/ctr, Número deBates 10395689-5695.

222 INFOTAB, Appendix I, enero de 1989 Dis-cussion Paper, 30 de enero de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2501045258/5268, Número deBates 2501045258-68.

223M. Oldman, Carta a D. Bacon con-cerniente a “Agro-Tobacco Services(ATS), Proposal for a Consultancy Agree-ment,” 7 de enero de 1992, BAT Guild-ford Depository, Número de Bates502552644-50.

224S. Boyse, Carta a P. Dietrich, 7 de agostode 1991, BAT Guildford Depository,Número de Bates 300516113.

Page 49: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

47

En todo el mundo, elconsumo de cigarrillos

entre las mujeres es unproblema de salud

pública grave que va enaumento.

Las mujeres, especialmente las de lospaíses en desarrollo, constituyen un

gran mercado sin explotar por lascompañías productoras de cigarrillos.La industria tabacalera emplea laexperiencia en tácticas de comercial-ización y promoción que ha desarrolla-do a lo largo de décadas, dedicadas allegar a estas fumadoras potenciales.Ya desde 1950, la industria reconocióque:

“Todavía existe un enorme merca-do potencial entre mujeres y adultosjóvenes, según acordaron los líderes dela industria tabacalera, reconociendoque el reclutamiento de estos millonesde posibles fumadores comprende elprincipal objetivo para el futuroinmediato y a también a largoplazo.”225

La industria tabacalera ha usadorepetidamente el tema de la indepen-dencia de las mujeres en sus campañaspublicitarias. En un informe sobre laindustria tabacalera, el Centro deInvestigaciones de la Responsabilidadde los Inversionistas observó losiguiente:

“Desde el punto de vista demográ-fico, la explosión de la población re-gistrada en muchos países subdesarro-llados garantiza un gran mercadopotencial para los cigarrillos. Desde elpunto de vista cultural, es posible quela demanda aumente con la continuaemancipación de la mujer y la vincu-lación, en la mente de muchos con-sumidores de cigarrillos fabricados,con la modernización, sofisticación,riqueza y éxito, una conexión estimu-

lada en gran parte por la publicidad decigarrillos en todo el mundo.”226

Las tabacaleras han relacionado ala mujer con marcas de cigarrillos“low-tar” y “light” (bajo contenido dealquitrán y suaves o livianos). En lacampaña publicitaria de Imperial Taba-co para sus cigarrillos Matineé ExtraMild en Canadá, por ejemplo,

“Nuestra mujer está al frente y enel centro. Es sin duda alguna la estre-lla. Es feliz y saludable. No es fanáticadel estado físico, pero le gusta partici-par en actividades divertidas y salu-dables. Y aunque las hace bien, no esla campeona…. Según los dictados dela estrategia, sus actividades no son niextenuantes ni aeróbicas. Fumar uncigarrillo con bajo contenido [dealquitrán y nicotina] sería una exten-sión lógica del estilo de vida represen-tado…. El tema ‘Sentirse extra bien,fumar extra suave’, es un reflejo delsentimiento que parece indicar lainvestigación anterior, es decir:‘Aunque fumo, me gusta ser activa ycuidarme —por eso fumo un cigarrilloextra suave.”227

(Imperial Tobacco, Canadá, sin fecha)

En los países en desarrollo, la indus-tria tabacalera usa su experiencia

en comercialización y promoción paracaptar fumadoras potenciales. Laesperanza de la industria en Africa,Asia, y Latinoamérica es que

“…el aumento en el número demujeres jóvenes fumadoras sirva paramantener la incidencia inicial…. [yque] Siga aumentando la incidenciafemenina en estas regiones. El resulta-do neto será un crecimiento continuo

14. La mujer

Page 50: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

48

de la incidencia aunque a un ritmomás lento que al principio.”228

(BAT, 1979)

La marca Virginia Slims de PhilipMorris ha sido el líder en tratar decaptar la atención de las mujeresjóvenes en Asia:

“…[N]aturalmente, nos interesamás saber cómo va a captar fumadorasadultas jóvenes emergentes quefumadoras de mayor edad”229

(Philip Morris, 1989)

En China, la empresa observa lanecesidad de fomentar las marcas

“…que actualmente son pequeñaspero pueden tener potencial de desa-rrollo a largo plazo, como el caso deuna marca femenina como VirginiaSlims.”230

(Philip Morris, 1980)

A pesar de sus esfuerzos poraumentar las tasas de mujeresfumadoras, la industria tabacalera nodesea que se reconozcan estos esfuer-zos, como indican estos comentariosde 1989 acerca de un informe inmi-nente del gobierno de EE.UU.:

“Aunque la incidencia en el con-sumo de cigarrillos no está aumentan-do en los mercados asiáticos debido anuestras importaciones, es posible queesté aumentando entre las mujeres, yel informe seguramente nos echará laculpa…. Burson-Marsteller acordóinvestigar la documentación y losestudios para tratar de encontrar unexperto sobre los cambios en los esti-los de vida de las mujeres asiáticas

para demostrar que fumar forma partede un cuadro más amplio.”231

(Philip Morris, 1989)

225United States Tobacco Journal, CigaretteExecutives Expect Added Volume, 1950,154 (26), 3, Citado en Preventing Tobac-co Use Among Young People, A Reportof the Surgeon General, U.S. Departmentof Health and Human Services, PublicHealth Service, Centers for Disease Con-trol and Prevention, National Center forChronic Disease Prevention and HealthPromotion, Office on Smoking andHealth, 1994, p. 166.

226 Investor Responsibility Research Center,Proxy Issues Report, Tobacco Sales inDeveloping Countries: Philip Morris Inc.(1982 Annual Meeting: 28 de abril 28)R.J. Reynolds Industries Inc. (28 de abril28), 1982 Analysis, 7 de abril de 1982,http://www.rjrtdocs.com, Número deBates 503653421-37.

227 Imperial Tobacco Ltd., Matinée ExtraMild Creative Phase 2 Rationale, RJR-Macdonald Inc. v. Canada (AttorneyGeneral), Citado en R. Cunningham,Smoke and Mirrors—The CanadianTobacco War, International DevelopmentResearch Center, 1996, pp. 177-178.

228BAT, 4 de abril de 1979, Litigation Usage,Minnesota Trial Exhibit 11,350,http://www.tobaccodocuments.org,(Roswell Collection), Número de Bates109883101-03.

229C. Leiber, Philip Morris Asia, Inter-OfficeCorrespondence, 25 de octubre de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504034812/4813, Número deBates 2504034812-13.

230D. Tso, 1981-1985 Five Year Plan—Mar-keting, Planning Inter-Office Correspon-dence, 25 de septiembre de 1980,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504011906/1916, Número deBates 2504011906-16.

231 T. Ricke, “USTR Support Plan,” Inter-OfficeCorrespondence, 19 de junio de 1989,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023263568/3570, Número deBates 2023263568-70.

...naturalmente, nos interesamás saber cómo va a captar fumado-ras adultas jóvenes emergentes quefumadoras de mayor edad.

Page 51: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

49

Durante muchos años, la industriatabacalera ha declarado su

inequívoca oposición a que los jóvenesfumen y su compromiso de reducireste fenómeno. Sin embargo, loscomentarios privados que se citan acontinuación ilustran la falsedad quesiempre han encerrado estas promesas.El hecho es que las compañíastabacaleras son adictas al consumo decigarrillos entre los menores. Casi el 90por ciento de todos los fumadoreshabituales comienzan a los 18 años oantes, y casi nadie prueba su primercigarrillo después de la infancia.232 Enotras palabras, si grandes cantidadesde menores no trataran de fumar,adquirir el hábito y convertirse enfumadores adultos adictos, las grandescompañías tabacaleras nunca llegaríana tener suficientes clientes adultospara mantenerse en el negocio. Enresumen, dirigir la publicidad a losjóvenes es un imperativo comercialpara que la operación tabacalera tengaéxito debido a que:

• Se necesitan nuevos fumadoresen el mercado para reemplazara los adultos que dejan o a losque mueren.

• Los nuevos fumadoresprovienen en su gran mayoríadel grupo de menores de 18años.

• La lealtad a la marca se formaen los primeros años.

• Una vez formada, es difícil ycostoso dejar la lealtad a lamarca.

• La elección de una marca enlos primeros años genera ingre-

sos por parte de los fumadoresa medida que envejecen.

• De esto se deduce, por lo tanto,que dirigir la comercializacióna los adolescentes es impor-tante para la viabilidad de laindustria en general y paratener éxito dentro de laindustria.

“Los fumadores adultos másjóvenes han sido el factor crítico delcrecimiento y el declive de cada marcaprincipal y de cada empresa durantelos últimos 50 años…. Si los adultosmás jóvenes dejan de fumar, la indus-tria decaerá, de la misma manera enque una población donde no haynacimientos terminará por desapare-cer.”233

(R.J. Reynolds, 1984)

“La pérdida de adultos jóvenes yadolescentes del sexo masculino esmás importante a largo plazo, puesagota el suministro de nuevosfumadores para reemplazar a losviejos… Ésta no es una pérdida fija dela industria: su importancia aumentacon el tiempo.”234

(R.J. Reynolds, 1982)

“…la base de nuestro negocio es elestudiante de la escuela secundaria.”235

(Lorillard, 1978)

Un plan de comercialización deR.J. Reynolds para 1975 presenta“Áreas clave de oportunidad” para:

“Aumentar nuestra franquicia deadultos jóvenes….[E]n 1960, este mer-cado de adultos jóvenes, el grupo de14 a 24 años, representaba el 21% dela población…. [E]llos representarán el

27% de la población en 1975. Repre-sentan el negocio del cigarrillo demañana. A medida que el grupo de14–24 madura, representará una parteclave del volumen total de cigarrillosdurante los próximos 25 años, comomínimo…. Por eso la estrategia a seguirpara nuestras marcas establecidas esmuy clara: la publicidad directa esatractiva para los fumadores másjóvenes…”236

(R.J. Reynolds, 1974)

Otro documento de Reynoldsreconoce la importancia de una marcanueva dirigida a los jóvenes:

“Ahora hay pruebas que indicanque el grupo de 14 a 18 años de edades un segmento de la poblaciónfumadora en vías de crecimiento. RJR-T debe establecer pronto una nuevamarca de éxito en este mercado parapoder mantener nuestra posición en laindustria a largo plazo.”237

(R.J. Reynolds, 1976)

“En términos generales, en Asia elsegmento de aroma completo estámenguando…. A pesar de eso, la partede Marlboro Rojo de adultos jóvenes yprincipiantes está subiendo en todaspartes y eso es alentador.”238

(Philip Morris, 1994)

Para la industria, por lo tanto, esimperativo concentrarse en losfumadores jóvenes, aunque les resultefrustrante que en muchos países nopuedan dirigir la publicidad directa-mente a ellos:

“Debería decirse que actualmente,y pienso que injustamente, se nosimpide promover cigarrillos directa-

15. Jóvenes fumadores

Page 52: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

50

mente en el mercado juvenil. [P]araque nuestra empresa sobreviva y pros-pere, a largo plazo debemos obtenernuestra participación en el mercadojuvenil…. Por tanto necesitamos mar-cas nuevas diseñadas para que resulten

particularmente atractivas al fumadorjoven, al mismo tiempo que, ideal-mente, sean atractivas para todos losfumadores…. Tal vez estas cuestionespuedan plantearse mejor se si consid-eran los factores que influyen en losposibles fumadores para probar el cig-arrillo, aprender a fumar y convertirseen fumadores confirmados.”239

(R.J. Reynolds, 1973)

La industria ha pasado unaenorme cantidad de tiempo estudian-do qué hace que los adolescentesfumen. Como escribe Myron E.Johnston, un investigador de PhilipMorris, en un informe que analizadatos de jóvenes de hasta 12 años deedad:

“Es importante conocer todo loposible acerca de los patrones y acti-tudes de fumar de los adolescentes. Eladolescente de hoy es el cliente regularpotencial de mañana, y la gran mayoríade fumadores comenzaron a fumar porprimera vez durante sus años de ado-lescencia…. [E]s durante los años deadolescencia que se elige la marca ini-cial: al menos una parte del éxito deMarlboro Rojo durante su período másrápido de crecimiento se debió a que seconvirtió en la marca de elección entrelos adolescentes que después sequedaron con ella al crecer.”240

(Philip Morris, 1981)

Imperial Tobacco de Canadá tambiénempleó consultores de investigación

de mercado para averiguar por quéfuma la gente:

“Como lo que siente hoy elfumador principiante tiene implica-

ciones para el futuro de la industria, esobvio que un estudio en esta área seríasumamente interesante. El Proyecto 16se diseñó para hacer precisamenteeso—averiguar todo lo posible paraentender cómo comienza la gente a

fumar, cómo se sienten los estudiantesde secundaria acerca de ser fumadores,y cómo prevén su consumo de tabacoen el futuro.”241

(Imperial Tobacco, 1977)

Philip Morris trató de investigar silos niños hiperactivos serían máspropensos a comenzar a fumar que losniños “normales” en un intento porautomedicarse con nicotina, pero se leimpidió obtener acceso a los registrosescolares:

“Hemos buscado una fuente dedatos que nos dé una muestra grandede niños hiperactivos que, en elmomento de su diagnosis, erandemasiado jóvenes para ser fumadores.Después estudiaríamos a estos niñoshasta que llegaran a la edad de fumar,y compararíamos la proporción defumadores entre ellos con la propor-ción en un grupo de control…. Aunquelos registros del sistema escolar pare-cerían ser los más adecuados paradicha investigación…las restriccionesen cuanto al acceso a los registros, alperíodo de tiempo en que puedenconservarse los registros, al tipo deregistros que se pueden llevar y a laparticipación de niños en investiga-ciones sin el consentimiento informa-do de sus padres, nos mantendrá fuerade los sistemas escolares hasta que sevuelvan a redactar las reglas.”242

(Philip Morris, 1977)

La industria ha empleado unaenorme cantidad de tiempo y dineroelaborando la imagen que debencomunicar las marcas para incitar a losjóvenes a fumarlas. Comercializa ciga-

rrillos como declaración de individuali-dad, de rebelión y de un derecho depaso a la adultez dirigido a jóvenesque buscan confirmación e identidad:

“Una nueva marca dirigida alfumador joven debe convertirse dealguna forma en la marca ‘de onda’ ysu promoción debe recalcar unión,pertenencia y aceptación en un grupo,al mismo tiempo que afirma la indivi-dualidad y ‘hacer lo suyo’…. Los añosde adolescencia y la primera etapa delos veinte son períodos de intensoestrés psicológico, inquietud y abu-rrimiento. Se producen muchas situa-ciones socialmente incómodas. El minu-to o par de minutos que se necesitanpara detenerse y encender un cigarri-llo, pedir fuego, encontrar un ceniceroy cosas por el estilo, dan algo quehacer durante los períodos de incomo-didad y aburrimiento…. La imagenfrágil, aún en desarrollo, que tiene desí misma la persona joven necesitatodo el apoyo y realce que puedarecibir…. Este efecto de realce de laimagen ha sido siempre un tema pro-mocional de peso para las marcas decigarrillo y se siempre se debe seguirrecalcando…. [U]n estudio detallado dela jerga juvenil actual, junto con unestudio de los libros de historia esta-dounidense que se usan actualmenteen las escuelas de secundaria y otrasfuentes similares indicativas de cosasvaliosas podrían ser un buen punto departida para un nombre de marcabueno y un tema de imagen. Esta esobviamente una tarea para la gente decomercialización, no para la gente deinvestigacion.”243

(R.J. Reynolds, 1973)

“El primer cigarrillo es una expe-riencia nociva para el novato. Para darpor sentado que el fumador principian-te tolerará lo desagradable de laexperiencia debemos invocar un moti-vo psicológico. Para el principiantefumar un cigarrillo es un acto simbóli-co. Ya no soy el nene de mamá, soyfuerte, soy un aventurero, no soy unzanahoria. Sea cuál sea la intención

...la base de nuestro negocio esel estudiante de secundaria.

Page 53: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

51

individual, el acto de fumar sigue sien-do una declaración simbólica de iden-tidad personal…. Cuando se desvanecela fuerza del simbolismo psicológico,empieza el control del efecto farma-cológico para sostener el hábito.”244

(Philip Morris, 1969)

La agencia de publicidad TedBates, explica cómo dirigir la comer-cialización a los niños, posicionando elproducto como “adulto”:

“En la mente del fumador joven,un cigarrillo cae en la misma categoríadel vino, la cerveza, afeitarse, usar unsostén (o no usarlo a propósito),declararse de independiente y esforzarsepor encontrar la identidad propia…. Porlo tanto, todo intento de llegar a losfumadores jóvenes, principiantes,deberá basarse, entre otras cosas, en lossiguientes parámetros principales:

• Presentar el cigarrillo comouna de las pocas iniciaciones almundo adulto.

• Presentar el cigarrillo comoparte de la categoría de pro-ductos y actividades de placerilícito.

• En los anuncios publicitarioscrear una situación tomada dela vida diaria del fumadorjoven, pero hacer, de maneraelegante, que esta situaciónaluda a los símbolos básicos delproceso de crecer y madurar.

• Hacer todo lo posible, (tenien-do en cuenta ciertas limita-ciones legales), por relacionarel cigarrillo con la marihuana,la cerveza, el sexo, etc.”245

(1975)

Por supuesto, la industria taba-calera querría que la gente crea quelos documentos internos que analizanla comercialización dirigida a losjóvenes refleja “el estilo antiguo dehacer negocios” y que ha modificadosu planteo. Sin embargo los documen-tos recientes demuestran que todosigue como siempre. Un documento de

Rothmans de 1998 muestra por qué lacomercialización es muy esencial parala motivación del joven fumador:

“Los fumadores adultos jóvenesbuscan asegurarse de que estánhaciendo lo que corresponde…. Losfumadores adultos jóvenes tambiénbuscan una identidad. Los cigarrillostienen que jugar un papel clave comodeclaración perenne de identidad. Porinferencia, si una marca de cigarrillosno comunica mucho en término devalores de imagen, no habrá muchamotivación para que un fumador adul-to joven persista con la marca, o laadopte. Los valores de imagen fuertespueden contribuir a establecer unaidentidad; los valores de imagendébiles no sirven.”246

(Rothmans, 1998)

De hecho, una agencia de publici-dad contratada por Gallaher revela

cómo

“Para esta gente, fumar es comouna insignia. Una señal de madurez,discernimiento e independencia.”247

(1995)

La misma agencia publicitariapregunta:

“¿Qué esperamos lograr con estetrabajo? Queremos más tipos de 18–34años de edad fumando más B&H [Ben-son & Hedges] que nunca. Queremosverlos destrozar paquetes de Marlboroy Camel y tratarlos con el desdeño quese merece la basura americana desegunda clase. ¡Por Dios! ¿Por qué dia-blos la gente va a fumar marcas que sehicieron para ser fumadas por vaque-ros y no por los jóvenes del país másde moda, “cool” y donde más cosaspasan en el mundo? De varias formasestas instrucciones son realmente cari-tativas. Trata de ayudar a la gente paraque reconozcan el error de sus cos-tumbres: creer que son “cool” al fumarlo que fumaba el estúpido Roy Rogers,y que abran los ojos a la verdad incon-testable de que el cigarrillo más “cool”del mundo es un B&H.”248

(1998)

Un documento de R.J. Reynoldsanaliza YAX, el término interno de laempresa para designar “marca para unfumador adulto joven”:

“Premisa: Una marca que ayuda alfumador adulto más joven ha tenertranquilidad y una sensación de bien-estar mediante la representación deformas de escape atractivas.

“HIPÓTESIS DE POSICIONAMIEN-TO… Una marca que, a través de situa-ciones íntimas y/o románticas, repre-senta la alegría, la intimidad y elsentido de pertenencia en una relaciónhombre/mujer será percibida por losfumadores adultos más jóvenes comoun aporte a su sensación de bienes-tar…. Una marca que representaseguridad financiera mediante imá-genes orientadas a la riqueza asequibleserá percibida por los adultos másjóvenes como un aporte a su sensaciónde bienestar…. Una marca que repre-senta buenos momentos y pertenenciaa través de situaciones divertidas y degrupo, será percibida por losfumadores adultos más jóvenes comoun aporte a su sensación debienestar.”249

(R.J. Reynolds, 1983)

Terence Sullivan, un representantede ventas de R.J. Reynolds, dice:

“Nos dirigíamos a chicos, y dije enesos momentos que no era ético y queprobablemente era ilegal, pero medijeron que era la norma de laempresa.”

Sullivan recuerda que alguien pre-guntó quiénes eran exactamente losjóvenes que quería R.J. Reynolds—¿chicos de la escuela secundaria o másjóvenes? La respuesta fue “¿Tienenboca? Entonces los queremos.”250

(1990)

El patrocinio de la industria taba-calera de a las carreras de autosFórmula Uno se ha concebido paraatraer al mercado juvenil:

“Objetivos generales para losdeportes motorizados… Considerar

Page 54: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

52

oportunidades de programas actuales ynuevos para ampliar nuestro alcance aprincipiantes y fumadores adultosjóvenes…. Medios de estrategia decomercialización de Fórmula 1: Con-centrarse en TV, cine y campañas alaire libre innovadoras; explorar nuevaprogramación, por ej., MTV.”251

(Philip Morris, 1991)

Según unos especialistas en co-mercialización que trabajan para laindustria tabacalera, patrocinar la Fór-mula Uno contribuiría a que la marcabritánica Benson & Hedges de Gallaherresultara más juvenil, dinámica y emo-cionante. La imagen de Fórmula Unoes “internacional, glamorosa, desafi-ante, rápida, furiosa, peligrosa, es vivirla vida plenamente y vivir al límite.” Enrealidad,

“…[A]l patrocinar la Fórmula Unolos entrevistados declararon que leshacía pensar que Benson & Hedges erauna marca grande, de gran liga, muypoderosa y con mucho dinero. Tambiénasociaban la marca con entornosjóvenes, rápidos, animados, adultos,emocionantes, con aspiración peroasqequibles. Era coherente con lo quesabían todos los entrevistados acercade la marca pero también extendía elterritorio asociativo para que la marcaresultara más juvenil, más dinámica ymás emocionante.”252

(Colquhoun Associates para Gallaher,1996)

Gordon Watson, gerente general deBAT en Hong Kong, sobre el

patrocinio del Macau Grand Prix:

“No estamos regalando dineroporque sí. Hemos entrado en esto muyconscientemente y toda la publicidadde JPS se ha edificado en torno a ca-rreras de autos, que se perciben comoun deporte rápido, emocionante y demoda para la juventud y, si se desea,para los que se sienten jóvenes. A ellosnos dirigimos en el mercado local y lasprimeras indicaciones son que hemosdado en el blanco.”253

A fin de desviar la creciente críti-ca por sus deliberados intentos de cap-tar jóvenes, las empresas tabacalerashan prometido últimamente oponersea que los jóvenes fumen y han asumi-do un compromiso de reducir esta ten-dencia mediante el diseño y subven-ción de programas preventivos parajóvenes. Sin embargo, las pruebas delos documentos de la industria taba-calera sugieren que las empresas hanconcebido, ejercido presión y han sub-vencionado programas preventivoscomo estrategia de relaciones públicaspara adelantarse a cualquierreglamentación:

“…un programa para disuadir a losadolescentes de fumar (una decisiónadulta) podría prevenir o demorar otrareglamentación de la industria taba-calera.”254

(Tobacco Institute, 1982)

“Como dijimos, los medios defini-tivos para determinar el éxito de esteprograma [juvenil] serán: 1) Unareducción de la legislación introduciday aprobada que restrinja o prohíbanuestras actividades de venta y decomercialización; 2) Aprobación delegislación favorable a la industria; 3)Mayor apoyo de empresas, padres ygrupos de maestros.”255

(Philip Morris, 1991)

Un memo de Philip Morris Lati-noamérica de 1994 deja clara lamotivación de la industria para lanzarsus programas juveniles:

“La creciente presión de lasfuerzas contra el tabaco en Lati-noamérica ha creado la necesidad deexplorar varias opciones para contra-rrestar la publicidad negativa….Teniendo en cuenta el clima legislativoadverso emergente en la región, te-nemos una oportunidad de crearbuena voluntad para la industria taba-calera al sacar una campaña públicapara desalentar el consumo de cigarri-llos juvenil.”256

(Philip Morris, 1994)

Por otra parte, las tabacaleras aveces son muy explícitas sobre elhecho de que su presunta publicidad“contra el tabaco” en realidad atrae alos niños a fumar. A mediados de ladécada de 1990, por ejemplo, PhilipMorris contrató a la agencia de publi-cidad Leo Burnett para desarrollar uncomercial con dibujos animados quepudiera usarse en toda Latinoamérica.La firma creó un anuncio de muestrausando una “familia” de fósforos ani-mados. Un informe que resume lasreacciones del público de Brasil alcomercial “Fósforos” dijo que

“Su impacto hasta podía inducir elsentimiento (especialmente entre nofumadores) de que este comercial detelevisión es una advertencia contrafumar, una campaña en contra defumar…. Este aspecto educacionalchoca a veces con la promoción decigarrillos y, por consiguiente, evocay/o sugiere un estímulo para el con-sumo, tal como el fósforo encendido yla industria tabacalera como patroci-nadora…. Si bien esta ambigüedadpuede tener al principio un efectonegativo sobre el comercial, es almismo tiempo su elemento másfuerte…. Vende cigarrillos como unaopción y no como una moda pasajera,además de tener un atractivo educa-cional que apunta a iluminar y no aprohibir. El comercial se dirige a ado-lescentes y, en menor escala, a suspadres. La presentación en la forma deun dibujo animado es atractiva y,debido a su carácter infantil, se esperaque atraiga la atención de los niños….Hay indicaciones de que este anunciodistinguirá al fabricante de sus com-petidores y mejorará su imagen ante elpúblico en general.”257

(Philip Morris, 1994)

Por supuesto, las tabacaleras sonmuy particulares respecto a los tiposde programas juveniles que apoyarán yno apoyarán:

Page 55: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

53

“[Brown & Williamson] no apoyaráun programa para jóvenes que los di-suada de fumar.”258

(Tobacco Institute, 1983)

Un Plan de Asuntos Corporativosde Philip Morris Australia, de 1992,señala los programas juveniles comouna manera de contrarrestar elmovimiento nacional en contra defumar:

“La industria ha mantenido untono reactivo y agresivo. En generalcarece de apoyo, permitiendo quequienes están en contra el tabacomantengan un enfoque eficaz en losproblemas de la salud. Las implica-ciones de la actividad australiana encontra de fumar son considerablesdebido a que Australia sirve de semi-llero de programas en contra de fumaren todo el mundo.”

Para invertir estas tendencias y“Hacer que PM [Philip Morris] se perci-ba como la compañía tabacalera‘responsable’,” el plan requiere que laempresa

“Logre que los políticos ‘fuercen’medidas sobre la industria medianteuna…campaña ‘contra el tabaco’juvenil.”259

(Philip Morris, 1982)

Un memo del Tobacco Institute de1991 arroja más luz sobre los

motivos de la industria para patrocinarprogramas juveniles:

“El programa juvenil y sus partesindividuales apoyan el objetivo del[Tobacco] instituto de desalentar lasinjustas y contraproducentes restric-ciones federales, estatales y localescontra la publicidad de cigarrillos através de las siguientes medidas:

• Reforzar la creencia de que lapresión de los pares—no lapublicidad—es la causa de quelos jóvenes fumen.

• Copar el centro político yforzar a quienes están contra eltabaco a un extremo….

La estrategia es bastante simple:

• Fomentar intensamente laoposición de la industria a quelos jóvenes fumen.

• Alinear la industria con unavisión del problema más ampliay sofisticada, es decir, la inca-pacidad paterna de contra-rrestar la presión de los pares.

• Colaborar con profesionales yeducadores de bienestar infan-til de buena reputación paraabordar el ‘problema’.

• Provocar a las fuerzas contra eltabaco para que critiquen losesfuerzos de la industria. Con-centrar la atención de losmedios en el extremismo de lasposturas contra el tabaco. Ade-lantarse y suavizar los puntosmás fuertes de los oponentes.

• Establecer la idea de un pro-grama bien recibido, en cre-cimiento, alentando una proli-feración de proyectospequeños, locales, y aventurasconjuntas apropiadas con otrosaliados. Evitar depender de unasola organización….”260

(Tobacco Institute, 1991)

Además de los denominados Pro-gramas Juveniles sobre el Consumo deCigarrillos, la industria ha estado pro-moviendo medidas de acceso a lajuventud que no surtieron efecto. En1995, un ejecutivo de Philip Morrisdeclaró que

“Si no hacemos algo rápido paraproyectar la percepción de la respon-sabilidad de la industria respecto a lacuestión del acceso de los jóvenes a loscigarrillos, pronto nos vamos a encon-trar con serias restricciones a la co-mercialización. Esas restriccionesprepararán el terreno para una legis-lación o reglamentación igualmentesevera sobre dónde se permita fumar alos adultos.”261

(Philip Morris, 1995)

Sin embargo, agregó su colega:

“Si podemos presentar una legis-lación proactiva u otras clases demedidas sobre la cuestión del accesode la juventud a los cigarrillos…prote-geremos a nuestra industria durantedécadas por venir.”262

(Philip Morris, 1995)

232Preventing Tobacco Use Among YoungPeople: A Report of The SurgeonGeneral, 1994.

233D. Burrows, “Strategic Research Report:Young Adult Smokers—Strategies andOpportunities,” R.J. Reynolds MarketingResearch, 29 de febrero de 1984, BatesNumber 501431519-10.

234D. Burrows, “NBER Models of Price Sen-sitivity by Age/Sex,” R.J. Reynolds Cartadel Departamento de Desarrollo de Mar-keting, 6 de octubre de 1982, Númerode Bates 513318391.

235T.L. Atchley, “Product Information,”Memo a C.L. Judge, 30 Agosto 1978,http://www.lorillarddocs.com/, Númerode Bates 03537131-32.

236R.J. Reynolds, “1975 Marketing PlansPresentation,” 30 de septiembre de 1974,Minnesota Trial Exhibit 12,493.

237R.J. Reynolds Tobacco Co. ResearchDepartment, “Secret Planning Assump-tions and Forecast for the Period1976–1986,” 15 de marzo de 1976.

238“Summary of the Key Conclusions of OurWorldwide Review of the Issues FacingMarlboro,” 1994, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2048237361/7370.

239C. Teague Jr., “Some Thoughts AboutNew Brands of Cigarettes for the YouthMarket,” 2 de febrero de 1973,http://www.rjrtdocs.com/, Número deBates 505101981-1992

240M. Johnston, “Re: Young Smokers—Prevalence, Trends, Implications, andRelated Demographic Trends,” 31 demarzo de 1981, Minnesota Trial Exhibit10,339, http://www.tobacco.neu.edu/mn_trial/, Número de Bates1000390803-55.

241 Kwechansky Marketing Research, “Pro-ject 16,” Report for Imperial TobaccoLtd., 18 de octubre de 1977, Exhibit AG-216, RJR-MacDonald Inc. v. Canada(Attorney General), Citado en R. Cun-ningham, Smoke and Mirrors—The Cana-dian Tobacco War, International Devel-opment Research Center, 1996, pp.166-167.

Page 56: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

54

242R. David, W.L. Dunn, A. Finch, E. Gay, yF. Ryan, “Smoker Psychology BehavioralResearch Annual Report,” 13 de juniode 1977, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2048370187/0190,Número de Bates 2048370187-90.

243C. Teague Jr., “Some Thoughts AboutNew Brands of Cigarettes for the YouthMarket,” 2 de febrero de 1973,http://www.rjrtdocs.com/, Número deBates 505101981-1992.

244T. Osdene, “Why One Smokes, First Draft,1969,” http://www.tobacco.new.edu/mn_trial/, Trial Exhibit 3681, Número deBates 1003287836-48.

245Ted Bates (agencia de publicidad) NuevaYork, “What We Have Learned from Peo-ple: A Conceptual Summarization of 18Focus Group Interviews on the Subjectof Smoking,” 26 de mayo de 1975, Mar-keting and Research Counselors Inc.,Nueva York Citado en Cancer ResearchCampaign and ASH, Danger! PR in thePlayground—Tobacco Industry Initiativeson Youth Smoking, de octubre de , 2000,p. 18; ver http://www.ash.org.uk.

246Rothmans (UK) Marketing Services,“Young Adult Smokers: Smoking Behav-iour and Lifestyles 1994-97,” October1998.

247Benson & Hedges: Creative Brief, 8 defebrero de 1995, presentación de CDP ala Comisión Selecta sobre la Salud,Cámara de los Comunes—Gallaher Brief1995, Citado en G. Hastings y L. Mac-Fadyen, Keep Smiling, No one’s Going toDie: An Analysis of Internal Documentsfrom the Tobacco Industry’s Main UKAdvertising Agencies, The Center forTobacco Control Research and the Tobac-co Control Resource Center, 2000, p. 17;ver http://www.tobacco-control.org.

248Presentación de CDP a la Comisión sobrela Salud de la Cámara de los Comunes—Gallaher Creative Briefs, 1998.http://www.parliament.the-stationery-office.co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/27ap29.htm.

249R.J. Reynolds, “RJR Project YAX: Premiseand Hypothesis Statements,” 1983,http://www.rjrtdocs.com/, Número deBates 502761709-14.

250Citado en P.J. Hilts, Smokescreen—TheTruth Behind the Tobacco IndustryCover-Up, 1996, Addison Wesley, pp. 96-98.

251 Philip Morris, “Motorsports SponsorshipMarketing Review,” Diciembre 1992,http://www.pmdocs.com/, Número deBates 2501058649/8680.

252Colquhoun Associates, “Brand equitycheck for Benson & Hedges in conjunc-tion with exploration of the Gratis cata-logue loyalty scheme: The qualitativeresearch summary report,” preparadopara Gallaher, Junio de 1996.

253Citado en R. Parke, “Masterminding aSpecial Gamble,” South China MorningPost, 18 de noviembre de 1984.

254Tobacco Institute, “The Development ofTobacco Industry Strategy,” 16 de abrilde 1982, http://www.lorillarddocs.com/getallimg.asp?DOCID=03673753/3762.

255J.J. Slavitt, “TI Youth Initiative,” 12 defebrero de 1991, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2500082629.

256C.L. Leiber, “Youth Campaign for LatinAmerica,” 23 de septiembre de 1994,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2503016523/6524.

257Philip Morris, “PMI ‘Matches’ CopyResearch,” 1994, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2503007035/7037, Número de Bates2503007035/7037.

258Tobacco Institute memo, 1983, citado enUS News & World Report, 4 de mayo de1998.

259“Philip Morris Sociedad Affairs Plan,Philip Morris (Australia) Ltd.,” 19 deoctubre de 1992, http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2023240608-27.

260Tobacco Institute, “Discussion Paper,”1991, Número de Bates TIMN 0164422.

261 Philip Morris, Third Draft of a Speech,JJM to PM Invitational, Importance ofYouth Issue, 10 de febrero de 1995,http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2044046017/6022, Número deBates 2044046017-22.

262 Ibid.

Page 57: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

55

Durante los últimos 50años, los altos

ejecutivos de laindustria tabacalera han

enfrentado un dilema:cómo conciliar lo que

ellos decían en públicocon lo que sus

científicos les decían enprivado sobre la salud y

la adicción.

Durante décadas, las tabacaleras semantuvieron unidas y negaron

toda acusación que se les hiciera.Cuando se enfrentaban con desafíospolíticos o legales, la industria publica-ba unos anuncios piadosos queresultaban ser nada más que gestosvacíos de relaciones públicas. Perollegó un momento en que el pesoaplastante de las pruebas indepen-dientes significó que la estrategia de“negar todo a todo costo” simple-mente resultó insostenible. Esto esalgo que la industria ha sabido muybien durante más de 20 años. Tómese,por ejemplo, este memo secreto deBAT en 1980:

“La gran mayoría de los obser-vadores, científicos y médicos inde-pendientes simplemente no aceptanuestra postura con respecto a lacausalidad…. La industria no puedejustificar satisfactoriamente su propiaexistencia continua, debido a quetodos los argumentos llevan en últimainstancia a la cuestión primaria de lacausalidad, y en este punto nuestraposición es inaceptable…. [N]uestraposición sobre la causalidad, quehemos mantenido durante unos veinteaños en defensa de nuestra industriacorre el peligro de convertirse precisa-mente en el factor inhibidor de nues-tra viabilidad a largo plazo…. A fin decuentas, es la opinión de este departa-mento que ahora debiéramos adoptarla posición B, es decir, que reconoce-mos ‘la probabilidad de que fumar esperjudicial para un pequeño porcenta-je de fumadores empedernidos’…. Aldar un poco podemos ganar un mon-

tón. Al dar nada podemos llegar aperderlo todo.”263

(BAT, 1980)

Un momento definitivo para laindustria ocurrió a mediados de losaños 90, cuando los documentos inter-nos en la industria del tabaco, de loscuales se publica una minúscula parteen este informe, se hicieron dedominio público. Los documentosexpusieron las mentiras que habíafomentado la industria durante tantotiempo e impusieron un cambio en lapercepción pública de la misma.Durante los últimos cinco años muchasde las principales fábricas de cigarrillosse han visto obligadas a anunciarnuevas posiciones respecto a fumar yla salud.

Estas posiciones han sido acom-pañadas por un aluvión de propagandade la industria para comunicar queésta ha aceptado sus errores pasados yque ahora se le puede tener confianza.En esencia, las tabacaleras piden quese les dé una segunda oportunidad.Como lo expresó un ejecutivo de PhilipMorris Asia en 1999:

“Lo único que le correspondepedir a nuestra industria es que lasociedad nos dé una oportunidad, nosdé un tiempo y nos juzgue a largoplazo por nuestras acciones…y por lapercepción pública de nuestra indus-tria que resulte de dichas acciones.”264

Muchas de las empresas han pu-blicado elegantes sitios Web paracomunicar al público cómo ahora sonfabricantes “responsables” de un “pro-ducto de riesgo” en una industria“controvertida.” Como era de esperar,

Epílogo: ¿Ha cambiadola industria tabacalera?

Page 58: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

56

estos cambios no han sido recibidoscon gran entusiasmo. En las palabrasde la influyente Comisión Selecta deSalud del Reino Unido:

“Nos da la impresión de que lastabacaleras han decidido socavar elconsenso científico hasta que llegue elmomento en que esa posición resulteridícula. Entonces ahora las compañíasaceptan en términos generales quefumar es peligroso (pero presentanargumentos que sugieren que la epi-demiología no es una ciencia exacta,de modo que las cifras de las víctimasfatales del tabaco podrían ser exage-radas); se equivocan respecto a laadicción a la nicotina; y todavía tratande destruir el argumento de que elhumo de segunda mano es peligroso.Las excepciones actuales a esto—basadas en las pruebas que nos handado—son, en primer lugar, PhilipMorris que declara no comentar mássobre estos temas excepto para prote-gerse en litigios, y en segundo lugar,Imperial, que declara no saber si fumares peligroso o si la nicotina es adicti-va.”265

Entonces, ¿ha cambiado realmentela industria, o estas nuevas pos-

turas políticas no son más que otrobombo de relaciones públicas? Enoctubre de 1999, Philip Morris anuncióque

“Philip Morris ha decidido que nodebatirá más en público si fumar causaenfermedad en los fumadores, o si esadictivo, excepto cuando sea necesarioen la sala del tribunal o en otros forosdonde se le exija hacerlo. En elentorno actual, no creemos queredunde en beneficio del interés públi-co—o francamente en beneficio delinterés de nuestra empresa, o de laindustria—participar en debates públi-cos sobre estos temas. Nuestroplanteamiento es respaldar un solomensaje uniforme sobre estos temaspara que los consumidores adultospuedan tomar de referencia para

adoptar todas sus decisiones rela-cionadas con fumar.”266

La empresa publicó entonces en susitio Web una declaración queaparentemente acepta el consensomédico y científico de que fumar ciga-rrillos es adictivo y causa cáncer depulmón y otras enfermedades. Pero elzorro pierde el pelo pero no las mañas,y después de que esta declaracióncosechó considerable publicidad, losejecutivos y abogados de Philip Morrisvolvieron a afirmar repetidamente quela empresa todavía no acepta estasconclusiones científicas. De hecho, tansólo un mes después de publicar su“nueva” postura, Philip Morris declaró,en documentos jurados ante tribunalesen el estado de Nueva York, que la“nicotina en los cigarrillos no es ‘adic-tiva’ según los criterios farmacológicosobjetivos y científicamente verifica-bles, que se emplean para definir dichotérmino.”

La empresa dijo, además, que sibien admitía que fumar cigarrillos esun “factor de riesgo, y efectivamentepuede causar ciertas clases de enfer-medades en el ser humano…no se haestablecido científicamente si fumarcigarrillos realmente causa algunas deestas enfermedades en los sereshumanos.”

Brown & Williamson también pu-blicó una nueva declaración

porque la empresa se dio cuenta deque su política de negar en realidadproducía más mal que bien. “La articu-lación de nuestra posición se ha con-vertido en un obstáculo para trabajarcon el gobierno, la comunidad desalud pública y para comunicarnos conel público,” dijo B&W.267

Dicho esto, la empresa todavíatrata de disimular el problema desalud:

“El porcentaje de fumadores quecontrae enfermedades, como cáncer depulmón, varía también entre las dife-rentes poblaciones. De todos modos,para ciertas enfermedades, incluido el

cáncer de pulmón, estudios realizadosen EE.UU. y en otras partes indicanque los riesgos son altos y sistemáti-cos. Esto sugiere que fumar es unacausa de (o un contribuyente para)enfermedad en el ser humano. Sinembargo, no conocemos ningunaforma de verificar que fumar sea lacausa de la mala salud de alguna per-sona en particular, ni por qué fumarpueda tener efectos adversos para lasalud de algunas personas pero no deotras.”268

Y B&W sigue negando que laempresa haya manipulado alguna vezlos niveles de nicotina:

“Los cigarrillos se hacen con mate-riales naturales que son inherente-mente variables. Sin embargo, Brown &Williamson, al igual que todos los fa-bricantes de cigarrillos, emplea mediostecnológicos para fabricar productosuniformes. Los niveles de nicotina semiden para garantizar la uniformidaddel producto y que las cifras publicadasestén correctas. La acusación de quealteramos la cantidad o la naturalezade la nicotina a fin de crear adicciónen los fumadores no es verdad; asícomo tampoco son ciertas las acusa-ciones de que los cigarrillos están‘salpicados’ con nicotina adicional.”269

La empresa también siguereiterando el viejo rumor falso de queel patrocinio del tabaco sólo tienecomo objeto el reconocimiento de lamarca:

“Los patrocinios prestan un servi-cio público al financiar un aconte-cimiento, tal como un concierto musi-cal o una competencia deportiva, paraque el público los disfrute. Lospatrocinios del cigarrillo favorecen elreconocimiento de las marcas deBrown & Williamson a diferencia delas marcas de los competidores ycumplen la función de contribuir acrear una imagen de la marca.”270

Otras compañías, si bien tratan dedar una apariencia de responsabilidad,en realidad no han cambiado en abso-luto. La casa matriz de B&W, BAT,

Page 59: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

57

sigue negando que el HTA es un pro-blema de salud.” La afirmación de queel HTA presenta un problema de saludno está respaldada por la ciencia,” diceBAT.271 Gallaher mantiene una posiciónsimilar sobre el HTA:

“Si bien aceptamos fácilmente queel humo de tabaco ambiental puedeser una fuente de molestia conside-rable para los no fumadores, las con-clusiones determinadas por la comu-nidad de salud pública parecen basarseen una ciencia débil e incon-cluyente.”272

Lo mismo ocurre con respecto afumar y la adicción; muchas de lastabacaleras o bien niegan el hecho oconfunden el tema. De acuerdo conIan Birks, de Gallaher,

“La confusión en el debate ocurrecuando llegamos al empleo de la pa-labra adicción, debido a que es unapalabra cargada de emotividad. Es unapalabra que tiende a usarse de muchasmaneras diferentes…. Sabemos quehay personas que son adictas a lastelenovelas, al té, al café, a las tortasde crema, a las papitas fritas, etc. Ladificultad estriba en que cuando lapalabra se usa ampliamente paradescribir todo tipo de hábito de com-portamiento, entonces, obviamente,fumar es un hábito. Puede ser unhábito fuerte para algunas personas,pero rechazamos el hecho de que lagente sea adicta a fumar y no puedadejar de fumar, porque pueden hacer-lo, y lo hacen.”273

BAT también confunde los proble-mas al argumentar que “la gente dice

que son adictos a ciertos alimentos, ausar la Internet, a hacer ejercicios, amirar ciertos programas de televisión oincluso a trabajar.”274

Gareth Davis, director ejecutivo deImperial, también niega que fumar sea

adictivo, aduciendo que fumar “no esparte de lo que considero comoadictivo.”275 Davis también desestima40 años de pruebas que demuestranque fumar causa cáncer:

“No creo que podamos decir que[fumar] es seguro o inseguro. [N]osabemos si es seguro o inseguro.”Agregó que “no estamos de acuerdocon que se haya demostrado quefumar sea una causa [de ciertasenfermedades].”276

Y del misma manera en que algunasempresas todavía niegan que

fumar sea peligroso, otras que trabajanpara la industria niegan haber engaña-do nunca al público. En marzo de 2001se inició el último juicio en EstadosUnidos contra la industria tabacalera.La compañía de seguros más grande deNueva York, Empire Blue Cross andBlue Shield, acusó a la industria taba-calera de hacer subir los costos delcuidado de la salud mediante unacampaña de 40 años de engaños. Sinembargo, el abogado defensor princi-pal para Philip Morris dijo que lascompañías tabacaleras nunca habíanconspirado para engañar al públicoacerca de los peligros de fumar para lasalud:

“No es así; y nunca fue así.”277

Entonces, ahora que las taba-caleras tratan reescribir el pasado ynegar los hechos del presente, quierenque se les tenga confianza para auto-rregularse. Cuando BAT publicó unadeclaración en el año 2000 detallandolo que denominó un “salto cuántico”para la reglamentación del tabaco,resultó ser nada más que otra llamadaa acuerdos voluntarios en lugar desometerse a una reglamentaciónexhaustiva. La resistencia continua dela empresa a toda reglamentación ylegislación vinculante es congruentecon los esfuerzos de la industria parano responsabilizarse por las muertes yenfermedades que causan sus produc-tos. La experiencia en todos los paísesha demostrado, una y otra vez, que loscódigos voluntarios, sea en relacióncon la publicidad o la divulgación,realmente no funcionan. La industriafavorece códigos voluntarios porquepueden subvertir y violar sin riesgoalguno de sanción.

La sostenida resistencia de laindustria tabacalera a toda

reglamentación efectiva se refleja ensu posición ante el Convenio Marco dela OMS para la Lucha Antitabáquica,que se negocia actualmente enGinebra. Según consta en declaracionesde BAT:

“La OMS, en su Convenio Marcopara la Lucha Antitabáquica, estátratando de desarrollar un tratadointernacional inclusivo y legalmentevinculante que procura negar acceso aun producto legal que es disfrutadopor centenares de millones defumadores adultos en todo elmundo…. Forzando a los agricultores areemplazar cultivos, creando una pro-hibición completa de los productosalmacenados y, para completar, ¡clasi-ficando al cigarrillo como productofarmacéutico!…En síntesis, se implicaque nosotros, como industria, notomamos en serio nuestra responsabili-dad social y económica, que no somoscapaces de una autorreglamentaciónproactiva y que necesitamos ser cuida-

...la nicotina de los cigarri-llos no es ‘adictiva’ según loscriterios farmacológicos objetivosy científicamente verificables quese emplean para definir dicho tér-mino.

Page 60: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

58

dos por los gobiernos. Sabemos queese no es el caso y que depende ahorade nosotros corregir estas opinionesequivocadas acerca de nuestra indus-tria. Ha llegado el momento deresponder al acoso—y necesitamos pre-sentar nuestro caso en forma convin-cente.”278

La industria tabacalera pide a losgobiernos y al público que le tenganconfianza, pero no ha hecho nada paraganársela. En efecto, la industria diceahora: “esta vez, realmente decimos laverdad.” Lamentablemente, estasempresas ya dijeron exactamente lomismo antes, cuando se enfrentaroncon amenazas reales a sus ganancias.Si las naciones del mundo no puedenconcluir de una vez por todas que nose puede confiar en la industria taba-calera, seguirán sufriendo la enfer-medad, la muerte y la discapacidadcausada por la la promoción de losproductos de esta industria y por subúsqueda de beneficios.

263BAT, “Secret—Appreciation,” 16 de mayode 1980, Número de Bates 109881322-31.

264E. Woodward, “Examining the Key IssuesFacing the Asian Tobacco Industry As ItGears up for the New Century,” Pre-sentaciones ante la Feria Mundial delRamo del Tabaco celebrada en HongKong, en octubre de 1999.

265http://www.parliament.the-stationery-office. co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/2702.htm.

266E. Woodward, “Examining the Key IssuesFacing the Asian Tobacco Industry As ItGears up for the New Century,” Pre-sentaciones ante la Feria Mundial delRamo del Tabaco celebrada en HongKong, en octubre de 1999;http://www.globalink.org/gt/ap-docs/9911yu/3.htm.

267Ver http://www.bw.com.268 Ibid.269Ver http://www.bw.com.270 Ver http://www.bw.com.271 http://www.parliament.the-stationery-

office.co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/2702.htm.

272Ver http://www.gallaher-group.com.

273http://www.parliament.the-stationery-office. co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/2702.htm.

274http://www.parliament.the-stationery-office. co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/2702.htm.

275R. Clark, “The Smoker’s Smoker,” TheGuardian, 17 de marzo de 2000.

276http://www.parliament.the-stationery-office. co.uk/pa/cm199900/cmselect/cmhealth/27/2702.htm.

277“Tobacco Industry Denies Deceiving Pub-lic at Brooklyn Trial,” Dow JonesNewswires, 27 de marzo de 2001.

278Discusro para el Sr. Ooi Wei-Ming ennombre de British American Tobacco enel Simposio Mundial y Feria Comercialdel Tabaco, 1999, http://www.globalink.org/gt/ap-docs/9911yu/2.htm.

Page 61: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

59

África, 18, 21, 47

África Ecuatorial, 41

África Occidental, 40

Alemania, 18

Arabia Saudita, 11, 23

Argelia, 30

Argentina, 14, 42

Asia, 9, 10, 18, 19, 22, 27, 35, 47, 48

Australia, 10, 22, 35, 53

Bahrain, 33, 35

Benín, 41

Botswana, 78

Brasil, 22, 32, 34, 42

Burkina Faso, 20

Camerún, 33

Canadá, 10, 20, 22, 33, 41, 47, 50

China, 9, 19, 23, 48

Corea, 10, 27

Costa de Marfil, 22

Costa Rica, 10

Ecuador, 10, 20

Egipto, 22, 23, 33

Emiratos Árabes Unidos, 11, 21, 22

Escandinavia, 37

España, 10

Estados Únidos, 22, 23, 25, 30, 32, 41,44, 48

Europa, 18, 27, 35, 42

Europa del Este, 19, 30

Filipinas, 10, 20, 22, 27, 33

Finlandia, 38

Francia, 23

Guatemala, 22

Guinea, 22

Holanda, 38

Hong Kong, 9, 22, 23, 27, 52

India, 31

Irán, 15

Iraq, 21

Islandia, 30

Italia, 17

Japón, 10, 20, 27, 33

Jordania, 23

Kenia, 33

Kuwait, 10, 36

Latinoamérica, 21, 35, 41, 47, 52

Lesotho, 78

Líbano, 11

Macau, 90

Malasia, 10, 27

Malawi, 14, 16, 33

Marruecos, 22

Medio Oriente, 10, 22

México, 32

Namibia, 78

Níger, 41

Nigeria, 22, 42

Noruega, 29

Pakistán, 11, 35

Reino Unido, 15, 26, 27, 33, 41, 42

Senegal, 19

Sudáfrica, 46

Suecia, 33

Suiza, 10, 21, 33

Tailandia, 14, 27

Taiwán, 10, 23, 27

Tanzania, 33

Togo, 41

Turquía, 9, 10, 14, 18, 22, 33

Uganda, 33

Unión Soviética, 19, 23

Venezuela, 11

Vietnam del Sur, 15

Yugoslavia, 22

Zaire, 33

Zimbabwe, 14, 32, 33

Anexo I:Índice por país y región

Page 62: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

60

Para reducir la búsqueda, agregue la frase “andmarketing” a los criterios de búsqueda. Unabúsqueda de “China and marketing” remite a108 documentos. Esto es ya mucho mejor, peroaun así es un número difícil de manejar. Di-gamos que lo primero que quiere ver es lospatrocinios deportivos. Agregue la palabra“sports” a los criterios de búsqueda, de modoque diga “China and marketing and sports.”Esta búsqueda remitirá a 11 documentos,incluido un plan de marketing de 1991 paraAsia (http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504051532/1658), un plan de 1994para aumentar el patrocinio del fútbol nacionaly regional en Asia (http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504051355A/1404) y undiscurso de 1990 que detalla las actividades pro-mocionales de Philip Morris en Asia, incluidos lospatrocinios y promociones en el lugar de venta(http://www.pmdocs.com/getallimg.asp?DOCID=2504034844/4875).

Tenga en cuenta que los motores debúsqueda de los sitios sólo pueden buscar losíndices de los documentos, en vez del textocompleto del documento. Entonces, aquellosdocumentos que contengan el término “China”en el texto, pero no en el índice, no apareceránen una búsqueda de ese término.

Consejos y tácticas debúsquedaAl realizar búsquedas, tenga papel a mano paraanotar los nombres en código de los proyectosespeciales, términos interesantes, nombres y car-gos de empleados y otras palabras que podríanser útiles en búsquedas posteriores.

Palabras clave:

Aparte de ciertos términos de búsqueda específi-cos, deben tenerse en cuenta algunas palabrasclave genéricas:

“Memo” (correspondencia escrita entre losempleados de una empresa)

“Plan” (puede ayudarle a encontrar planesde comercialización (“marketing”) paratodo un país)

“Letter” (“carta”, correspondencia escrita,generalmente a personas ajenas a laempresa)

Universidad de California en San FranciscoColección Brown & Williamsonhttp://galen.library.ucsf.edu/tobacco/bw.html

Sitio Web de Documentos de la Comisiónsobre Comercio del Gobierno de EE.UU.http://www.house.gov/commerce/TobaccoDocs/documents.html

Otros sitios importantes:

http://www.tobaccodocuments.orgUn metasitio que permite realizarbúsquedas en varios sitios Web almismo tiempo, además de examinarvarias colecciones compiladas por losinvestigadores.

http://www.ash.org.uk/links/industry.htmlEnlaces a sitios de documentos y com-pilaciones de citas de documentos dela industria

Documentos de British American Tobacco:

Se permitió a British American Tobacco (BAT)que coloque sus documentos en un depósitoseparado en Guildford, Inglaterra, en lugar decolocarlos en línea.279 Un subconjunto limitadode estos documentos puede encontrarse en líneaen:

http://www.cctc.ca

y

http://outside.cdc.gov:8080/BASIS/ncctld/Web/guildford/sf

Cómo empezarPara principiantes, el sitio de Philip Morris esuno de los más fáciles de usar, y contiene ungran número de documentos útiles. Serecomienda que los interesados se familiaricencon este sitio primero para entender mejor lossitios más difíciles.

Cómo comenzar:

La mejor manera de explicar cómo usar los sitiosde documentos es comenzar con un ejemplo.Digamos que usted desea averiguar acerca de losplanes de comercialización de Philip Morris enChina. Si va al sitio de documentos de PhilipMorris: ttp://www.pmdocs.com y escribe la pa-labra “China” como criterio de búsqueda, encon-trará que esta búsqueda remite a 2.231 docu-mentos—obviamente demasiados para examinar.

Como parte de sus pactos de arreglos extraju-diciales con una serie de estados de EE.UU.,

la industria tabacalera se vio forzada a divulgarmillones de páginas de documentos internos, ungran porcentaje de los cuales están actualmentea disposición del público en la World Wide Web.Estos documentos han proporcionado revela-ciones importantes—desde el papel de la indus-tria tabacalera en la facilitación del contrabandode cigarrillos hasta los esfuerzos de la industriapara reforzar la adicción a los cigarrillos— quehan contribuido a estimular la acción legislativay regulatoria. El reto continuo para los defen-sores del control del tabaco es cómo buscarentre estos documentos, cómo encontrar los máspertinentes para los esfuerzos legislativos y re-gulatorios y cómo usarlos después para producirel efecto deseado.

Sitios Web de documentos para compañíastabacaleras domiciliadas en EE.UU.

Existe una plétora de sitios Web de documentos,algunos más fáciles de usar que otros. Los Cen-tros para el Control y Prevención de Enfer-medades (CDC) de EE.UU. han compilado enlacesa todos los principales sitios de documentos en:http://www.cdc.gov/tobacco/industry-docs/docsites.htm. En esta página se pueden encon-trar enlaces directos y algunos consejos parabuscar una serie de sitios de documentos, entreellos:

Brown & Williamson(la subsidiaria estadounidense deBritish American Tobacco)http://www.bw.aalatg.com/

Council for Tobacco Researchhttp://www.ctr-usa.org/ctr/

Lorillard Tobacco Companyhttp://www.lorillarddocs.com/

Pleito de Minnesota Blue Cross/Blue ShieldTobaccohttp://www.cdc.gov/tobacco/industrydocs/mnbluecross.htm

R.J. Reynolds Tobacco Companyhttp://www.rjrtdocs.com/rjrtdocs.com/frames.jsc

Philip Morrishttp://www.pmdocs.com

The Tobacco Institutehttp://www.tobaccoinstitute.com/

Anexo II:Búsqueda de documentos de la industriatabacalera: Información básica,procedimientos y consejos

Page 63: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

61

“Publication” (artículos publicados enrevistas o en otros periódicos)

“Article” (generalmente un artículo dediario o revista)

“Telex” (la palabra de la industria paracorreo electrónico y télexes interna-cionales)

“Confidential”—Para facilitar la búsquedade la información más confidencial,también se pueden agregar los térmi-nos “attorney work product” o simple-mente “work product” a los criterios debúsqueda. Se ha dado esta designacióna algunos de los documentos más deli-cados, con la intención de protegerlosdel público.

• Como comprobará al iniciar susbúsquedas, las empresas usan nombresen código y acrónimos para muchas desus campañas, estudios internos yproyectos de investigación. Comoejemplos pueden citarse “Project 16”,“Operation Downunder” y “FUBYAS”(un acrónimo de R.J. Reynolds para“First Unbranded Young Adult Smokers”(primeros fumadores adultos jóvenessin marca). Estos nombres en código yacrónimos pueden ayudarle a centrarseen un proyecto particular al mismotiempo que se excluyen muchos docu-mentos superfluos.

• Los tribunales han puesto un “BatesNumber” (número de Bates) único encada página de cada documento. Estosnúmeros de identificación están estam-pados sobre la página, por lo generalverticalmente, en la esquina inferiorizquierda de cada documento. Anotelos números de Bates de los documen-tos importantes para usarlos como re-ferencias y facilitar cada vez más labúsqueda.

• Anote los nombres y cargos de losempleados mencionados en los docu-mentos que encuentra. A menudo sepone en manos de un ejecutivo lapolítica de una empresa y/o las activi-dades de comercialización en una cier-ta parte del mundo. Buscar documen-tos creados por esta persona puederevelar una cantidad de informaciónacerca de la manera en que actuó laindustria en ciertos países. Además,estos ejecutivos generalmente pre-sentaban a sus oficinas centralesinformes regulares sobre las actividadesde sus divisiones. Estos informespueden ser una gran fuente de infor-mación.

Almacenamiento dedocumentos para uso posteriorLos sitios de Philip Morris, Lorillard, y TobaccoInstitute permiten “marcar” documentos. Serecomienda marcar todo documento que con-sidere particularmente importante o que pudieranecesitar en el futuro. Para hacerlo, haga clic enel botón “view all pages” (ver todas las páginas)y después haga clic en el botón “add bookmarks”(agregar marcadores) de su explorador. Si usaInternet Explorer, le pedirá que escriba una fraseidentificadora en el campo “bookmark proper-ties” (propiedades de marcadores), mientras quecon Netscape tendrá que ir a la sección “editbookmarks” para escribir la frase. Si no agregaestas anotaciones, sus marcadores dirán sola-mente “image viewer” (visualizador de imágenes)y no reflejarán el contenido del documento, oincluso el título.

Adónde ir para conseguir másasistenciaLas instrucciones de búsqueda publicadas encada sitio contienen la información básica quedeberá leer cada investigador de documentosantes de iniciar la búsqueda. …stas contieneninstrucciones vitales, tales como la manera deformatear correctamente los términos debúsqueda. ¡Lea siempre estas instrucciones antesde avanzar! Consulte los ejemplos que se presen-tan con las instrucciones como primer paso pararesolver problemas. También podrá obtener asis-tencia de otros investigadores con experiencia,participando en las listas de discusión de docu-mentos de la industria tabacalera “doc-talk” e“intldoc-talk” en la Web. Para inscribirse en estaslistas, vaya a http://www.smoke-screen.org.

Requisitos técnicosVelocidad de conexión a Internet:

Un módem y línea de teléfono compatible conuna velocidad de 28.8 kbps (velocidad de bau-dios) serían adecuados para ver documentos sinque resulte tan lento que sea totalmente frus-trante. A esta velocidad, cargar una página detexto media llevaría entre 5 y 7 segundos, mien-tras que un documento de 50 páginas podríallevar de 6 a 8 minutos. Las conexiones a Inter-net con velocidades más altas (tales como DSL,ISDN, vía satélite, o servicios inalámbricos) ofre-cen tiempos de carga más rápidos pero cuestanmás y generalmente se encuentran solamente enlos grandes centros urbanos.

Velocidad de procesamiento:

Para ver los documentos se recomienda tener 32MB de RAM, como mínimo. Aumentar la canti-dad de RAM es relativamente simple en la ma-yoría de las computadoras.

Software:

A fin de ver los documentos, necesitará una ver-sión reciente de un explorador de Web, tal como

Internet Explorer (http://www.microsoft.com/downloads/search.asp?) o Netscape Navigator(http://home.netscape.com/computing/down-load/), que pueden bajarse gratuitamente. Tam-bién querrá tener una copia de Adobe Acrobat,un programa para ver archivos que tambiénpuede bajarse en forma gratuita en(http://www.adobe.com/products/acrobat/readstep.html). Los sitios Web de Brown &Williamson requieren su propio visualizadorexclusivo, que puede bajar gratuitamente enese sitio.

Otras preguntas frecuentes

P. ¿Cómo encuentro un documento si sólotengo el número de Bates?

R. Si después de escribir el número de Batesen el lugar indicado, obtiene la respuesta

“no records match your search” (no hay registrosque correspondan a esta búsqueda), tendrá queprobar de reemplazar el último dígito delnúmero de Bates por un símbolo de comodín (*).Si eso no resulta, pruebe reemplazar los dosúltimos dígitos del número por dos comodines.La idea es encontrar números que estén muycerca del que usted busca. Además, algunossitios responden cuando se ingresa el número deBates de la página inicial en lugar del númerode todo el documento.

P. ¿Todos los sitios responden a reducir lasbúsquedas usando la palabra “and” (y)?

R. No, en algunos sitios tendrá que usar unsímbolo (tal como el signo “+”) para

indicar el término de búsqueda “and.” Lea lasinstrucciones de búsqueda de cada sitio paraaveriguar si se usan palabras o símbolos en cadasitio para términos tales como “and” u “or.”

P. ¿Cómo debería buscar frases, tales comoPhilip Morris? ¿Escribo Philip Morris o Philip

and Morris?

R. Para encontrar cada caso del nombre dela empresa Philip Morris tendrá que

escribirlo exactamente en la forma que apareceel nombre de la empresa. De manera similar,si desea encontrar cada caso de la frase de dospalabras “political strategy” (estrategia política),escriba las dos palabras juntas de ese modo. Sinembargo, si desea encontrar cada documentoque tenga las palabras “political” y “strategy”en cualquier parte de la descripción pero nonecesariamente juntas, ingrese “political andstrategy” como criterio de búsqueda.

P. ¿Qué ocurre con mi privacidad? ¿Las taba-caleras sabrán que soy yo quien hace las

búsquedas?

R. Visitar algunos de los sitios permitirá quese incrusten marcadores (o “cookies”) en

su explorador, lo cual indica a las compañíasque hay personas en el sitio y qué están mirando.Actualmente no es posible vincular esta infor-mación con un individuo, pero los “cookies”pueden prepararse de modo que identifiquen al

Page 64: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo

62

proveedor del servicio de Internet que ustedusa. Todos los exploradores le permiten ya seabloquear los “cookies” o eliminarlos después decada sesión.

P. ¿Es posible copiar el texto de un documentoen mi procesador de texto?

R. No, aparte de volver a escribirlo textual-mente. Debería imprimir los documentos

directamente desde el sitio durante la conexiónen línea. En el caso de sitios que permitan vere imprimir documentos en formato PDF, podráguardar el documento en su computadorahaciendo clic en el icono “save” (guardar).Es posible usar un escáner para escanear eltexto de una impresión, aunque el softwarede reconocimiento de caracteres es bastanteelemental.

P. He tratado de encontrar una palabra o fraseparticular pero no obtengo nada. ¿Cómo

puedo tener una búsqueda más productiva?

R. Sea creativo. Piense en todas las frasesposibles que podrían producir algo sobre el

tema que está buscando. Si busca informaciónsobre China, pruebe también frases tales como“Far East,” o “Asia”. Lo más importante es leercuidadosamente lo que encuentre. Cuanto máslea, tanto más términos descubrirá que produz-can una búsqueda productiva. Tome nota de losnombres de los autores, la jerga y los acrónimosque usan las empresas para referirse a regiones,proyectos, técnicas de comercialización particu-lares, etc. y comience a buscar documentos conesas palabras y nombres.

(Reimpreso con permiso de la 11ma Con-ferencia Mundial sobre el Tabaco o la Salud)

http://tobaccofreekids.org/campaign/global/docs/searching.pdf

279Los investigadores que deseen ver estosdocumentos deben contactar a MartynGilbey en BAT para fijar una cita (tel.44-171-845-1466; Fax. 44-171-845-2783).

Page 65: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo
Page 66: Confíe ennosotros · La industria taba-calera continúa promocionando enér-gicamente el consumo de tabaco en todos los rincones del globo. Si la his-toria nos ha enseñado algo