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Mitológicas ISSN: 0326-5676 [email protected] Centro Argentino de Etnología Americana Argentina Idoyaga Molina, Anatilde LOS PECADOS CAPITALES Y LAS NOCIONES DE ENFERMEDAD EN EL NOROESTE ARGENTINO (NOA) Mitológicas, vol. XVIII, núm. 1, 2003, pp. 67-94 Centro Argentino de Etnología Americana Buenos Aires, Argentina Available in: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=14601804 How to cite Complete issue More information about this article Journal's homepage in redalyc.org Scientific Information System Network of Scientific Journals from Latin America, the Caribbean, Spain and Portugal Non-profit academic project, developed under the open access initiative

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Mitológicas

ISSN: 0326-5676

[email protected]

Centro Argentino de Etnología Americana

Argentina

Idoyaga Molina, Anatilde

LOS PECADOS CAPITALES Y LAS NOCIONES DE ENFERMEDAD EN EL NOROESTE

ARGENTINO (NOA)

Mitológicas, vol. XVIII, núm. 1, 2003, pp. 67-94

Centro Argentino de Etnología Americana

Buenos Aires, Argentina

Available in: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=14601804

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Network of Scientific Journals from Latin America, the Caribbean, Spain and Portugal

Non-profit academic project, developed under the open access initiative

MITOLOGICAS, Vol. XVIII, Bs. As., pp. 67-94

* Centro Argentino de Etnología Americana - Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Argentina)[email protected]

Introducción

En otras oportunidades hemos resaltado laimportancia que tienen ciertas creencias yprácticas de raigambre católica en las medici-nas tradicionales del noroeste argentino -NOA- (Idoyaga Molina, 2001, y 2002a). Enefecto, tanto el curandero como el lego -cono-cedor de la medicina casera- se valen de di-versos procedimientos terapéutico-rituales quedenotan su origen católico, nos referimos a lacura de palabra,1 los rezos, la invocación delas deidades, el alumbrado con velas a santosy vírgenes, la repetición de la señal de la cruz,el consumo de agua bendita, el sahumado depacientes y de espacios, la alusión a la Trini-dad y el manipuleo de otros símbolos religio-sos. En el mismo sentido, cabe destacar quediversas representaciones del catolicismo dansoporte a teorías etiológicas de la enfermedady a prácticas terapéuticas. Estas representa-ciones implican que la misma noción de en-fermedad integre valores morales, indique cul-pas o denuncie al infractor de una norma, ha-

ciendo del doliente una víctima o un indivi-duo censurable.2

Entre las nociones del catolicismo debe-mos mencionar la visión dual de la personaconformada por cuerpo y alma, y la idea deespíritu.3 Estas concepciones dan sentido alas etiologías de taxa como el susto, que he-mos propuesto denominar desequilibrios en-tre las entidades de la persona, al rapto delalma o espíritu que comporta la agarradura4

y a la terapéutica de ambas dolencias.Es también de capital importancia la ce-

remonia del bautismo que provee significa-do purificatorio y terapéutico al agua, al aguabendita, al aceite y, que, al dotar a la personade nombre, aporta la noción de renacimien-to simbólico.5

Las figuras de santos, vírgenes, Cristo eincluso Dios Padre son fundamentales, pues-to que actúan como auxiliares del curande-ro, pueden causar enfermedades y constitu-yen arquetipos, cuyas acciones suelen actua-lizarse por repetición mítico-ritual (IdoyagaMolina, 2001 y 2002a).6 Por su parte, el Dia-

LOS PECADOS CAPITALES Y LAS NOCIONES DE ENFERMEDAD EN ELNOROESTE ARGENTINO (NOA)

Anatilde Idoyaga Molina*

Summary: In order to explore some Catholic moral and religious contents present in the illness notionsand practices in North-Western Argentina (NWA), the author analyses the relationship between illnessetiological theories and the capital sins. She focuses on the envy, covetousness, wrath, pride, sloth,gluttony and lust, linking them to organic, social and religious- ritual illness etiological theories and tosome specific folk illness taxa, like envidia (envy), brujería (harm), mal de ojo (evil eye), nervios (nerves),sopladura (an emanation that penetrate de body) agarradura (lost of the soul).

Key words: illness, etiological theories, capital sins, NWA.

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blo se asocia a la enfermedad, a otros daños,a la brujería y a los brujos, a la calificacióndel tiempo de carnaval y al ámbito nocturno.A pesar de su perfil prevalentemente negati-vo, puede ser manipulado por los curande-ros y en algunos casos hasta convertirse enauxiliar (Viotti, 2003).

Las creencias relativas a la supervivenciadel alma después de la muerte dan cuenta delas relaciones entre hombres y difuntos. Estenexo puede tener un cariz positivo como seobserva en las almas que se convierten enayudantes del curandero, pero también pue-de ser un vínculo negativo cuando el difuntotrasmite la aikadura.7

El sistema de creencias del catolicismoaporta también la idea de la ofrenda comoforma de relación entre el individuo y la dei-dad, tal como da cuenta el Génesis a travésde los arquetipos de Caín y Abel. El incum-plimiento ritual o la escasez de las ofrendasson los motivos que desencadenan laagarradura (pérdida del alma o principio vi-tal), la sopladura (intromisión de la enfer-medad-sustancia en el cuerpo) y múltiplesdolencias (Idoyaga Molina, 2002b).

El papel que juegan los sistemas de creen-cias -incluidos los mítico-religiosas- nosmuestra que, como han señalado Lock yScheper-Hughes (1996: 43), el conocimien-to sobre el cuerpo, la salud y la enfermedades culturalmente construido, negociado yrenegociado en un proceso dinámico.Consiguientemente, las concepciones y prác-ticas en relación con la salud y la enferme-dad poseen aristas y significados de índolediversa. Entre ellos, contenidos morales y re-ligiosos, los que si bien de modo alguno ago-tan el campo de la enfermedad y la salud, nohan sido suficientemente tratados en el áreaque nos ocupa.

En esta ocasión intentamos explorar larelación entre el sistema de creencias del ca-tolicismo respecto de los pecados capitalesy las teorías etiológicas de la enfermedadentre criollos y mestizos del noroeste argen-tino (NOA). Los criollos son nativos de ori-gen europeo -especialmente español e italia-no- y árabe, mientras que los mestizos des-cienden de criollos y de los indígenas anti-guamente asentados en el NOA. Estos últi-mos fueron colonizados primero por los incasy más tarde por los españoles y sometidos aun brutal proceso de opresión étnica, cultu-ral y lingüística que implicó la pérdida delas lenguas nativas y de la mayoría de sustradiciones culturales. En definitiva, lo quehaya quedado del reservorio indígena está ar-ticulado en los marcos de referencia y es-tructuras de pensamiento y significaciónimpuestos por la sociedad dominante.

Vale la pena destacar que la relación entreenfermedad y pecado es históricamente con-sistente con las concepciones oficiales de laIglesia Católica y, en general, de las iglesiascristianas. Como ha notado Laplantine (1999:111) la explicación de la enfermedad comoconsecuencia del pecado es un modelo do-minante en las representaciones del cristia-nismo. Por otra parte, de acuerdo con el mis-mo autor, la visión de las dolencias como malabsoluto, que se manifiesta en la desvalori-zación social, es mucho más fuerte en nues-tra cultura que en cualquier otra (ibidem: 121).

Los materiales sobre los que nos basamosfueron recabados en diversos trabajos decampo durante los años 1997, 1998, 1999,2000 y realizados en las localidades de lasSanta Catalina, La Quiaca, Yavi, San Salva-dor (Provincia de Jujuy), Campo Quijano,Rosario de Lerma, Rosario de la Frontera,Cachi, Salta (Provincia de Salta), Icaño y

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San Fernando (Provincia de Catamarca). Las técnicas utilizadas fueron primordial-

mente cualitativas, recurrimos a entrevistasabiertas, extensas y recurrentes con infor-mantes calificados, a entrevistas a gruposnaturales (Coreil, 1995), a la observación ya la observación participante con el objetode indagar las nociones, prácticas y viven-cias relativas a la enfermedad y la salud. Enun segundo momento, se enfocaron caminosterapéuticos, vale decir los itinerarios con-cretos seguidos por los dolientes en búsque-da de recuperación. Siguiendo el diseño usa-do por Young (1981), sobre la base del ma-terial obtenido en entrevistas abiertas y, ha-biendo identificado numerosos taxavernáculos, teorías etiológicas y manifesta-ciones de múltiples dolencias se dio a un gru-po reducido de informantes una serie de fi-chas escritas con nombres de enfermedadesy otra serie de fichas escritas con teoríasetiológicas de los males mencionados en laprimera serie, solicitándoles que juntaran lasfichas que conectaban los nombres de las en-fermedades con las explicaciones sobre elorigen. Dicho procedimiento permitió pro-fundizar la identificación de síntomas distin-tivos y etiologías de diversas dolencias, te-rapias preferenciales y otros aspectos vincu-lados al tema.

Los textos que aquí presentamos fueronrecabados con magnetófono y, posteriormen-te, transcriptos en forma literal. Al pie de cadarelato se indica el lugar de recolección y elnombre del informante o de todos losintervinientes en el caso de las entrevistas agrupos naturales.

El enfoque seguido responde a loslineamientos de la fenomenología que pro-pone la comprensión de las vivencias y delos fenómenos culturales, en su expresión

fenoménica y en su esencia, para lo cual elinvestigador debe realizar una puesta entreparéntesis de sus saberes teóricos y tradicio-nales, así como de sus disposiciones prag-máticas y afectivas, mientras que para acce-der a la esencia de los fenómenos es necesa-rio poner entre paréntesis los aspectos acce-sorios de los hechos (Bórmida, 1976;Merleau Ponty, 1969; Schütz, 1972).

Los resultados aquí expuestos son partede sendos proyectos de investigación finan-ciados y auspiciados por el Consejo Nacio-nal de Investigaciones Científicas y Técni-cas y el Instituto Universitario Nacional delArte.

Los pecados capitales y los motivos de en-fermedad y muerte

Los conocimientos que denotan lapresencia de influencia de los pecadoscapitales en relación con la enfermedad y lamuerte están integrados a un corpus desaberes que los autores viven inmediatamentecomo una totalidad sin distinción de diversastradiciones. No obstante, es factible elucidartres tipos de conocimientos principales.

En grandes líneas, las nociones y prácticassobre la enfermedad, la salud y la muerte enel NOA muestran la síntesis cultural (Taussig,1987) entre tradiciones de la medicina humo-ral -aunque profundamente refiguradas-, con-cepciones y prácticas de raigambre católica y,en tercer lugar, los distintos aportes de lossistemas de creencias de los inmigrantes es-pañoles, italianos y árabes que ingresaron enel área a lo largo de cuatro siglos. Es en estemarco en el que puede aparecer algún elemen-to de origen indígena (Idoyaga Molina, 1999/2000 y 2002 a).

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Por supuesto que los conceptos, signifi-cados y acciones que nos ocupan sonreelaborados e incorporan y refiguran cons-tantemente nuevas realidades, tales como co-nocimientos biomédicos actuales y nuevostaxa de enfermedad, nociones y tratamien-tos de medicinas alternativas (yoga, reiki,acupuntura, gemoterapia, cromoterapia, etc.),en boga hoy en día y asociadas generalmen-te a la difusión del movimiento de la newage, entre muchos otros aspectos de disímilrelevancia. En otras palabras, el hablar de lasíntesis entre ciertos saberes y tradicionesprincipales no implica negar la dinámica his-tórica, ni los procesos de cambio, obviamentecuranderos y actores sociales incorporanconstantemente diversos elementos, tipos deservicios y conocimientos que les permitenadaptarse al nuevo contexto local y global,que hace que los curanderos se conviertanen una opción apreciada por individuos detodos los niveles socioeconómicos y educa-cionales.

Los saberes de raigambre biomédica -enespecial de la medicina humoral- incluyenel conocimiento de numerosas recetas -en sumayoría de origen vegetal, en menor medidamineral y, a veces, animal- la utilización deventosas, cataplasmas, parches ysanguijuelas, los baños de asiento, masajes,acomodamiento de huesos dislocados,tratamiento de luxaciones y quebraduras,entre otras técnicas. El aporte de la medicinahumoral, aunque refigurada, se ve en formapalpable en la clasificación de los males, losremedios y los alimentos en fríos y cálidos yen la teoría etiológica de la enfermedad comoun desequilibrio orgánico (Idoyaga Molina,1999a y 1999/2000). Son concretamente deorigen humoral las nociones que explican lasdolencias como desbalances térmicos y

alimenticios (Idoyaga Molina, 2002a).Al hablar del saber de los inmigrantes, nos

referimos al reconocimiento diagnóstico ytratamiento de taxa vernáculos como el malde ojo, mal aire, pasmo, susto, empacho, ti-ricia, culebrilla, pulso, pata de cabra, bruje-ría o mal hecho, abertura de carnes, entreotros.

Los aportes del catolicismo son eviden-tes, por ejemplo, en una terapéutica ritualque incluye rezos, invocaciones, pedidos yencendidos de velas a las deidades cristia-nas, la utilización y consumo de agua bendi-ta, la triple repetición de acciones que impli-ca la manipulación del poder del tres, núme-ro sacralizado por su asociación a la Trini-dad, el uso de agua y aceite, el sahumado delos pacientes y de los espacios corrompidos,y la ejecución de la señal de la cruz, símbolode vida y restauración (Idoyaga Molina,2001). Terapéuticas rituales de raigambre nocatólica se advierten, por ejemplo, en el tra-tamiento de la tiricia -tristeza asociada a ma-nifestaciones orgánicas-, y la agarradura �pérdida de energía- entre otras (IdoyagaMolina, 2001).

En un intento de sistematizar las teoríasetiológicas de la enfermedad de alcance ge-neral para sociedades criollas y mestizas, te-niendo en cuenta la perspectiva de los nati-vos, propusimos una clasificación de seiscategorías, que discrimina teorías etiológicasorgánicas, emocionales, entre las entidadesde la persona, sociales, espacio ambientalesy religioso-rituales (Idoyaga Molina, 2002ay c).

Las teorías etiológicas que denominamosorgánicas explican la enfermedad comodesequilibrios físicos que resultan dedesbalances alimenticios, térmicos, golpes yotras causas naturales. Ilustran este tipo de

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dolencia el empacho, la gripe, el resfrío yotros males que suelen ser clasificados entérminos de cálidos y fríos.8

Las etiologías emocionales explican elorigen del mal en la vivencia de fuertesemociones y problemas afectivos quedesencadenan afecciones orgánicas y, aveces, desequilibrios mentales, tal comosucede en el padecimiento conocido comonervios (Idoyaga Molina, 2002c), sobre elque nos extenderemos posteriormente enrelación con el pecado-sentimiento de ira ocólera. También la tiricia ejemplifica este tipode causalidad, se trata de la tristeza quepadecen especialmente los niños ante lapérdida de seres queridos o del ámbito socio-ambiental. Se manifiesta tanto en afeccionesfísicas como en el ánimo del individuo. Estetaxon da cuenta de los trastornos que implicala inmigración y las experiencias de ajuste alos nuevos entornos, además del papelfundamental que se atribuye a la presenciade los padres en el mantenimiento de la saludde los niños.

La teoría etiológica de la enfermedad quedenominamos desequilibrio entre las entida-des que integran la persona refiere la pérdi-da del alma. El susto es el padecimiento típi-co, este último se explica como la pérdidadel alma o espíritu que queda vagando en ellugar en que se produjo la experiencia depánico, se caracteriza por cuadros de insom-nio, dolor de cabeza y excitación.9

Las causas sociales refieren los males quese originan en la interacción social, puedenincluir la intención negativa de otras personascomo sucede en el caso del daño o malhechoque es el mal padecido por las víctimas de labrujería. El daño es realizado por un espe-cialista generalmente a pedido de algúnmiembro de la propia comunidad (ver

Barrios, 2000; Bianchetti, 1995, IdoyagaMolina, 2002a, Viotti, 2003). Algunas vecesla envidia -un pecado capital- produce el malhomónimo en el individuo que es objeto detales sentimientos (Idoyaga Molina, 2002a).También el mal de ojo se origina en lainteracción social, se trata del mal que,intencionalmente o no, causan personas�fuertes� o de mucha energía, al mirar, tocaro pensar en un ser más débil (Disderi, 2001;Idoyaga Molina, 1999b, 2000 y 2002a).Todas estas dolencias se manifiestan en elplano físico, el malhecho puede ocasionar,además, trastornos mentales. La envidia y labrujería son asintomáticas mientras que elmal de ojo se asocia preferentemente al dolorde cabeza (ver Bianchetti, 1996; IdoyagaMolina, 1999b y 2002a; Palma, 1978 y Pérezde Nucci, 1989).

La etiología espacio-ambiental alude a lascontaminaciones que ocasiona el ambiente,como es el caso del mal aire. Vale la penanotar que el concepto tradicional no eshomologable a las explicaciones de índoleecológicas en boga actualmente, sino que setrata del poder (en cuanto manifestación depotencia o sacralidad) que se asigna adeterminados espacios. Se trata de males quese manifiestan físicamente, especialmente entrastornos musculares y dérmicos (IdoyagaMolina, 2002a; Pérez de Nucci, 1989).

Las causas religioso-rituales aluden tantoa faltas y culpas imputables a los hombrescomo a la intención malevolente de lasdeidades o la trasgresión de un tabú.Ejemplifican las fallas humanas elpadecimiento de agarradura o sopladura yotro conjunto de males que se atribuyen alincumplimiento ritual, la mezquindad en lasofrendas o la inobservancia de las promesasrealizadas a santos y vírgenes (Idoyaga

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Molina, 2002a y b). La intención negativacon independencia del comportamientodel individuo es característica del Diabloque origina la agarradura y otros males,causa la muerte en forma directa y a vecescompele al individuo al suicidio(Balzano, 1985; Idoyaga Molina, 2002a).El suicidio es moralmente censurable deacuerdo con las creencias del catolicismoya que supone atentar contra la vida, quees un don de Dios, y que sólo Él puedequitar. En el NOA no se atribuye adepresión o problemas emocionales sinoal accionar del Diablo que capta laintención e intelección del individuo,compeliéndolo a actuar de una manerainmoral y opuesta a la que prescribe la fecristiana. No obstante, el individuo no essiempre víctima pasiva del accionar delpersonaje, en algunas circunstancias,especialmente en tiempos de carnaval, essu pensamiento y actitud lujuriosa la quedesencadena la oferta del Diablo. Latrasgresión a las prohibiciones queimpiden a la mujer embarazada concurrira velorios, entierros o realizar actividadalguna conectada con los muertos causala aikadura en el vástago. La accióncontrapasística de los muertos punetambién a quienes hayan transitado porantigales10 o apropiado de ajuaresfunerarios y otros restos de antiguassepulturas (Idoyaga Molina, 2002 a y b).Finalmente, los difuntos provocan sinintención la aikadura en quienes no dejanque las almas alcancen su destino final,al seguir interactuando oníricamente conellas y al recordar al muerto cons-tantemente, lo que impide superar la crisisy concretar el duelo.11

Teniendo en cuenta que las nociones

y valores morales presentes en los pecados ca-pitales no son elementos excluyentes ni únicosen las teorías etiológicas de la enfermedad, pa-saremos a analizar el modo en que se relacionancon diversos taxa vernáculos y con las ideas yvivencias del mal.

La envidia además de un sentimiento es elmal que el sentimiento provoca en el individuoque es objeto de tal pasión. Es a la vez causa yenfermedad, al igual que el ojeo y el mal hechoo brujería se funda en la acción de los hombres.El sentimiento de envidia, en cuantopensamientos y deseos negativos sustan-cializados, penetra el cuerpo de la víctima y semanifiesta como la dolencia física denominadaenvidia.

Los síntomas de la envidia pueden servariadísimos, desde dolor de cabeza hastaproblemas musculares, óseos, cardíacos o de otraíndole. El modo en que se manifiesta suele estaren relación con aquello que es motivo de laenvidia. Así, a una señora que le envidiaban suhabilidad en el telar, la afección le apareció enla cintura, lo que le impedía tejer, una joven queenvidiaban por la belleza se quemó parte delrostro y, para dar un último ejemplo, un hombrea quien le envidiaban la camioneta chocó a causade los malos deseos, por lo que padeció múltiplestraumatismos y además se arruinó su vehículo.

�La envidia puede causar enfermedades. Yotejía en el telar y me dolía la cintura, era laenvidia. Y yo fui a una curandera. Yo tejía y meenfermé, tenía dolor en la cintura y andaba decostado (no podía enderezar su cuerpo paracaminar), era por envidia de mi vecina� (Beatriz,Icaño).

�Yo tenía una sobrina que era muy linda, todaslas chicas le tenían envidia, tanto la envidiabanque al final se quemó la mitad de la cara�(Beatriz, Salta).

�Tuve un accidente cuando viajaba en

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camioneta, me llevaron al hospital y mecuraron las heridas y el brazo y las piernasque se me habían quebrado. Cuando salí delhospital fui a ver un curandero, él me dijoque había tenido el accidente porque misvecinos me envidiaban la camioneta.Entonces me trató para que no me llegara laenvidia y desde ese tiempo no me pasó másnada� (Fernando, Rosario de la Frontera).

�La gente mala siente envidia, le daenvidia lo que uno tiene. La persona que esenvidiada tiene que ir al curandero para versi le está pasando algo, porque hay gente quees fuerte y rechaza la envidia pero a otra lellega y se enferma. A la gente que esenvidiada le puede doler cualquier cosa, estarenfermo del hígado, tener dolor de cabeza,lo que sea, y eso es por la envidia� (Eugenia,San Salvador de Jujuy).

En lugar de un mal físico, la envidia pue-de concretarse también en otro tipo de per-juicios que dificultan el desenvolvimientofamiliar, social, sentimental y laboral de lapersona, tales como rupturas afectivas, pe-leas familiares, reyertas en la comunidad,pérdidas económicas, de fuentes de trabajo,etc. Son motivos de envidia la habilidad enlas tareas que competen a cada sexo, el reco-nocimiento social, el trabajo bien remunera-do, la belleza física, la afabilidad en el trato,la riqueza y la posesión de bienes, las bue-nas parejas, las familias bien constituidas,entre otros aspectos que denoten éxito y ar-monía.

�Si es una señora que trabaja, la gente letiene bronca y entonces no le va bien, tieneque ir a uno que sepa curar la enfermedadque le pusieron. También puede uno tenerproblemas en el trabajo o con la familia, laenvidia puede traer muchos trastornos�(Eugenia, San Salvador de Jujuy).

�Hay gente que hace daño por envidia. Porel mismo deseo que el envidioso tiene deperjudicar a una persona, esa personaempieza a andar mal en el trabajo, la salud,cosas así. Hay personas que viven bien conla familia, que trabajan bien, que no les faltanada en la casa, y ya viene una envidia sobreellos. El que siente envidia no piensa o no seda cuenta de que esa persona envidiadatrabaja para vivir bien, no le desea el mal anadie y por eso Dios lo ayuda a él para quemantenga su familia� (Juan Arias, Rosariode la Frontera).

�La gente causa enfermedad cuando tieneenvidia. Acá me tienen envidia. Yo tenía unavecina de acá al lado, tiene una casa hermosaella, y yo no. Yo no, porque todavía no mealcanza a mí el dinero, pero despacito la voyhaciendo, yo soy sola, sola con mi hija yresulta que mi vecina me pedía papas, azúcar,cebollas, un pedazo de pan, plata, todo, elharagán, el trapo de piso, la escoba, hastaque yo dije: �Basta�. Y no le he dado másnada. Siempre me pedía por envidia para queyo nunca termine mi casa� (Juana, SanSalvador de Jujuy).

Se advierte en el anteúltimo de los textosque el bienestar en la salud, el trabajo o fa-miliar es explicado como resultado de larecompensación que hace la deidad a los in-dividuos que se comportan adecuadamentey de sentimientos nobles, vale decir salud ybienestar son dones dados por Dios y tienenuna dimensión moral. Como contrapartida,se asocia la figura del pecador con la capaci-dad de enfermar. De lo que se deduce queaquel que es moralmente censurable es so-cialmente reprochable pues sus acciones ysentimientos inadecuados son causa de do-lencias y otros tipos de sufrimientos en víc-timas inocentes.

74 ANATILDE IDOYAGA MOLINA

Los sentimientos de envidia causan enfer-medad de por sí, pero además pueden origi-nar otras conductas para dañar a la personaenvidiada y provocar otros males como elmalhecho, también conocido como daño obrujería y el mal de ojo. En efecto, los senti-mientos de envidia, a veces sumados a ce-los, odio y deseos de venganza motivan lasolicitud de un trabajo de maleficio. Los da-ños se realizan generalmente por encargo deun cliente, que desea la ruina de alguien ypaga por este servicio. Los especialistas eneste tipo de trabajo son los brujos, aunquetambién se puede acudir al curandero12

(Idoyaga Molina, 2002a).�Esos trabajos la gente los pide porque

siente envidia, odio. La gente siente odio yenvidia por motivos de pareja, de trabajo,porque esa persona puede tener lo que el otrono tiene. La persona que odia va y encarga eldaño a otra persona. Hay curanderos quesaben hacer daños, algunos dicen: �Yo sólosaco males, sólo curo�. Pero otros tambiénaceptan hacer daño� (Juana, San Salvador deJujuy).

�Hay personas que son, así, de mal hacer,por rabia joden a otras personas. Tienen en-vidia a las personas que andan bien, que vis-ten bien, que comen bien, que andan biencon la familia, que trabajan. No es necesariover que uno sea malo contra otra persona paraque lo jodan. Mucha de esa gente anda apren-diendo qué hacer, es la gente más peligrosa.Por ejemplo, a usted le agarran odio y yainventan qué hacerle para perjudicarle susalud, en su trabajo. Es una cosa de mal ha-cer que utiliza la gente para perjudicar a otrapersona, por antojo, muchas veces quizás sonesos tipos que andan aprendiendo brujeríapara ver si surte efecto lo que piensan. Yotros, por odio o por celos o por envidia a

una persona que ven que vive bien, tranqui-la, con familia, que no le falta nada, quecome, duerme bien, que se pasa una granvida, adonde va consigue trabajo. Hay gen-te que vive de la envidia, hace daño por gus-to de ver que esa gente se vaya abajo� (JuanArias, Rosario de la Frontera).

En cuanto al origen del mal de ojo u ojeoexisten dos posibilidades. Por un lado,provocan la enfermedad los celos, la envidiay los malos deseos de las personas que miran,tocan o piensan en los niños, o seres conmenor energía que ellos. Vale decir, esresultado de la acción intencional de un serhumano. Por otro lado, la causa del ojeopuede hallarse no ya en un acto voluntariosino en el exceso de poder, de energía o defuerza de la persona que piensa, mira o tocaal niño.

�Hay varias interpretaciones de cómo seproduce la ojeadura. Por ejemplo, usted tieneun nene y hay una persona de su familia queespera conocerlo y no lo conoce, entonces laansiedad ojea al nene. En otros casos lapersona tiene malos sentimientos, envidia,celos, malos deseos, maldad. La gente tienemaldad, si usted se compra un auto, o si sunene es lindo, la gente le tiene celos o rabia�(Beatriz, Salta).

En el ojeo, al igual que en la envidia y enla brujería, el perjuicio perpetrado a lapersona puede incluir la enfermedad delindividuo y también el daño a suspertenencias.

�Las plantas y los animales también seojean. A una señora se le secó la planta, se lasecó alguien que tiene vista fuerte, es comosi fuera una envidia de la planta porque laven tan bonita. Si uno tiene un animal que esfiel, un buen perro por ejemplo, al que le dancelos, siente envidia y lo ojea� (Teresa,

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Cachi).Las acusaciones de envidia, al igual que

las de maleficio y de ojeo, están dirigidas amiembros próximos de la comunidad, a losvecinos, incluso a los propios parientes. Laenvidia, el malhecho y el mal de ojo aludena los conflictos emergentes en la vidacotidiana, revelan la cercanía y lahabitualidad del trato entre la persona quepadece el mal y la que lo ha causado, expresalos peligros que plantea la interacción social,ubica la enfermedad en el mundocircundante, en la proximidad del ahí. Es porello amenazante. Refiriéndose a la poblacióndel Putumayo (Colombia) Taussig señala quela envidia está siempre presente, cuando seoye hablar a los curadores caseros, como unconocimiento social implícito que sirve parainterpretar la situaciones sociales (1987:393-94). La envidia aparece no tanto como lacausa de la brujería sino como la fuerzainmanente del discurso que enfoca los hechosen la mira de la búsqueda del sentido y sinsentido de la sociabilidad.

La envidia como núcleo de la teoríaetiológica de la enfermedad da a ésta uncontenido moral y religioso, que define aldoliente como víctima y al causante comoinmoral y pecador. Consecuentemente,especialistas o curanderos con fama derealizar trabajos de daño y quienes los visitense tornan individuos censurables y blanco deacusaciones de realizar o encargar diversostrabajos de brujería que explican elinfortunio, incluida la enfermedad, de otrosmiembros de la comunidad. Pareciera que laenvidia brinda una herramienta de acusacióna un otro con independencia delcomportamiento �objetivo� de ese otro, sinembargo no toda acusación es aceptada yconsensuada socialmente.

El sentimiento de ira o cólera origina elmal denominado nervios. Se trata de un taxonpolimorfo que admite diversas manifes-taciones de gravedad muy disímil, que endefinitiva no puede definirse de acuerdo almodelo biomédico de enfermedad a travésde la asociación sistemática de síntomas ysignos.13 En cuanto a las manifestaciones, losnervios se hacen evidentes en dolores decabeza, del cuello, la garganta, los tendonesy los nervios en cualquier parte del cuerpo,en la sensación de ahogo y opresión en elpecho, en parálisis, hemiplejías, derrames,temblores, taquicardia, problemas de presiónarterial, demencia, incapacidad para actuary experimentar una desarmonía que incideen que las cosas que uno tiene entre manosvayan mal. Se asocian al arrebato, a laintranquilidad, el estrés y la aflicción. Eldolor es resultado de la tensión de un nervio,el �tirón� del nervio. En el plano de laconducta los nervios se perciben en la cóleraque suscitan las acaloradas peleas a gritos,la agresividad y la pérdida de control, a lavez que en fallas resultantes del estrés y laspreocupaciones excesivas que conducen aestados iracundos.

Desde la perspectiva de los actores causaneste mal las interacciones dominadas porsentimientos de ira.

�Provocan los nervios muchas cosas, aveces, renegadas, renegadas que uno tiene,algunas rabias que se agarra en el momento.Los nervios vienen por rabia, causas de lavida de uno, por peleas con la familia, porpeleas en el trabajo. Por ejemplo, si unopiensa mucho en algo malo que le pasó, yuno lo va trabajando en la mente, uno piensay lo trabaja y le da paso a la rabia, a la ira ya todas estas cosas, es porque uno se poneincontrolable� (Juana, San Salvador de

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Jujuy).�A mi madrastra le dan nervios cuando

grita y pelea con mi papá. Entonces le duelela cabeza y se le estira el nervio al costadode la garganta y le duele. A veces lloraentonces se le pasa. Cuando uno no puedellorar, ahí se queda con el dolor. A mimadrastra a veces le duelen las piernas, comoque no las siente por los nervios.� (Beatriz,Santa Catalina).

�La gente que se vuelve loca, a veces sevuelve loca por el sistema nervioso, por mu-cho pensamiento con ira, o sea que realmen-te esta atacado totalmente a los nervios, to-talmente a los nervios. A la gente le da ner-vios, por peleas, se queda con rabia, porquediscute, con la hija, la vecina, se dicen insul-tos, cosas malas. La crisis de los nervios a lapersona la trastorna, la trastorna. Y a raíz delos nervios es todo, todo, todo, la persona sepuede volver trastornada y a la vez loca� (Jua-na, San Salvador de Jujuy).

Es claro que causan los nervios el senti-miento de ira o cólera que se manifiesta enlas peleas y conflictos que plantea la vidacotidiana en el contexto de la familia y elvecindario. También la ira puede emergerante la pérdida del empleo y las interaccionesnegativas o problemas en el ámbito del tra-bajo, así como ante la continua remembran-za de hechos trágicos o de episodios negati-vos.

La tensión vivida en la interacción socialconduce al padecimiento de los nervios. Lostextos abundan en ejemplos al respecto, nosmuestran que la vivencia de ciertos hechosimplica un estado emocional caracterizadopor sentimientos fuertes y nocivos para lasalud, como la ira o cólera, los que tarde otemprano se concretan a través del sufrimien-to de los nervios.14

En toda circunstancia la enfermedad alu-de a un descontrol emocional que tieneimplicancias físicas y/o psíquicas. Ahorabien, pareciera que hay personas másproclives a padecer nervios que otras en cuan-to que, a través del recuerdo, actualizan lasexperiencias tensionantes. En otras palabras,si bien es dable que cualquiera puede pade-cer el mal -y de hecho, como señala un in-formante: ¿quién no ha tenido un disgusto yexperimentado la enfermedad?- están espe-cialmente expuestos tanto a sufrir de nervioscomo a ser víctima de episodios más graves,aquellos que no ocupan su mente y siguenpensando y hablando de los hechos ocurri-dos y, de este modo, reproduciendo constan-temente el estado emocional que provocó elataque de nervios. Están también más expues-tos quienes por características personales sonproclives a encolerizarse y dejarse llevar porlos problemas de la vida cotidiana.

La idea respecto de diferentes tipos depersonas nos recuerda los cuatro tipos decomplexiones descriptos por la medicinahumoral �flemático, sanguíneo, colérico ymelancólico- que tuvieron vigencia comoparte del marco explicativo de la enferme-dad hasta entrado el siglo XIX. De acuerdocon esta concepción son los individuos decomplexión colérica los más propensos apadecer de nervios.

Por otra parte, los trastornos nerviosos yel �ataque de nervios� son malestares deorigen biomédico y reconocidos hastaprincipios del siglo XX. La idea deenfermedades nerviosas se consolidó cuandoel desarrollo de la fisiología introdujo elconcepto de sistema nervioso central yexplicó numerosos episodios de enfermedadcomo resultado de fallas en este sistema.Buena parte de los saberes, incluida la

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denominación del taxon vernáculo, muestrala incorporación y refiguración de saberes dela biomedicina, como se advierte en elsiguiente relato, que intenta una explicaciónnatural y racionalista, aunque llena de errorespara la ciencia médica:

�El renegar afecta los tendones, pero máslas células y los vasos sanguíneos. La aortase llena de sangre y en esas situaciones vienenlos derrames, lleva la sangre a la cabeza.Muchos se pierden o no saben que hacen,otros quedan inválidos, sin movimiento, asíson los nervios� (Esther, Campo Quijano).

De lo expuesto se desprende que las ideasrelativas a los nervios sintetizan diversossaberes y tradiciones de la medicina humoral,de la teoría biomédica respecto delfuncionamiento del sistema nervioso centraly de las creencias de catolicismo.

La ira o cólera no controlada, unsentimiento y un pecado capital, es el núcleode la teoría etiológica de los nervios. Sinembargo, el enfermo de nervios no es un sercensurable que deba soportar el mal comocastigo, ya que la tendencia a ser más omenos propenso a padecer dicha dolencia esparte de la naturaleza intrínseca de cada serhumano. La imposibilidad de controlarse esun rasgo autodestructivo, que hasta puedecriticarse socialmente, pero no es objeto devaloración moral que lo señale comopecador.

�Mi marido sufre de nervios, yo lo tratocon remedios caseros y alumbro velaspidiendo a Dios que lo cure. A veces cuandogrita mucho, la mamá le recrimina que nopuede ser así que tiene que controlarse, queya es un hombre grande. Claro, el que no secontrola sufre siempre la enfermedad,dolores, sofocones, problemas de presión yno se puede curar. Yo trato de ayudarlo para

que sane y le digo que se controle con losgritos porque a la gente le gusta hablar,siempre están buscando como hablar mal dela vecina, de este, del otro y a mí no me gustanlas habladurías en el barrio� (Josefina,Campo Quijano).

La gula es una de las causas del empacho(problemas digestivos y estomacales),cuando la persona come en exceso o vituallasque le caen mal a pesar de saber que le traeránconsecuencias negativas. Sin embargo, notodo empacho es por gula, puede debersetambién -de acuerdo a los actores- atrastornos digestivos, a la mala combinaciónde alimentos o a ingerirlos con el �estómagofrío�.

�Cuando uno come comida pesada o muygorda, no le cae bien porque es muy pesadala comida, pero uno la come igual porquehay personas que tienen gula. Cuando unoestá con el estómago frío y come comidapesada ya le trae problemas de digestión, yase empacha. La carne de chancho y la carnede cordero son peores que la de vaca, perohay gente que las come aunque saben queles hace mal porque son más sabrosas y elloslas prefieren. También si uno toma vino nodebe comer sandía porque se empacha, sehace como una pelota en el estómago�(Eugenia, San Salvador de Jujuy).

La alimentación inadecuada o conductasinapropiadas durante el proceso de digestiónconducen a males como el empacho,problemas estomacales, renales y presiónarterial. Desde esta perspectiva, se consideradañino comer y/o beber excesivamente,tomar bebidas o alimentos fríos, ingerircarnes pesadas como la de puerco o cordero,cortar el proceso digestivo por inmersión enel agua sin haber esperado el tiemponecesario y combinar alimentos en forma

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inapropiada.El empacho se debe a causas orgánicas o

naturales, no obstante puede ser objeto devaloración moral y censura social cuando seasocia u origina en la gula. El placerexperimentado en la comida es el atributoque la caracteriza y que, por ende, suele sercensurado.

�Algunos de pura gula se enferman porquecomen de más, no pueden parar, comen algoque les gusta y comen aunque sepan quedespués van a estar enfermos, no les importamolestar a otros para que los atiendan. Venla comida y no pueden controlarse, aunquese vayan enfermando cada vez más y hastaterminen muertos, no pueden controlarse. Lacomida en exceso causa empacho, problemasde presión, del corazón, la gula puede llevarloa uno hasta la tumba. Y ahí ya se nota que noestán haciendo bien, por eso comer por gulaes un pecado� (Juan Arias, Rosario de laFrontera).

El carácter moral de la gula y de laenfermedad consecuente, a diferencia de laenvidia y la cólera no se relaciona con lainteracción social, se asocia al pecado queimplica la experiencia de placer sin controly sin límites, y al pecado que implica atentarcontra la propia existencia.

La pereza y la avaricia se ligan a lasopladura, a la agarradura y, en general, alos males que se originan en la inobservanciao mezquindad ritual y al incumplimiento delas promesas hechas a santos y vírgenes.

La sopladura se manifiesta comoalteraciones dérmicas, manchas, ronchas,forúnculos, puede también evidenciarsecomo problemas en las articulaciones u óseosen general. Lo que equivale a decir que aludea cuadros sintomáticos de índole diferente yque la biomedicina clasificaría como distintos

taxa. Este mal se origina en la violación detabúes y en el incumplimiento con lasofrendas que se deben realizar a Pachamama(la Madre Tierra) y a las deidades en general.

De acuerdo con el sistema de creenciasde los campesinos, los hombres debenmantener una relación de reciprocidad conlas deidades, especialmente con Pachamama.Esta última posibilita los cultivos, la crianzade animales, el aprovisionamiento de agua yde leña y la explotación minera, favores queel hombre debe contraprestar en ocasión delprimero de agosto, día de celebración ritualdedicado a Pachamama, y, en general,durante el mencionado mes. Los campesinosentienden que el lapso en cuestión es enextremo peligroso por estar la tierra abiertaesperando ser alimentada y retribuida.Además, de mostrarse los hombresespecialmente solícitos durante este tiempoceremonial, también deben compensar a latierra al ocupar una casa nueva, en cadaseñalada -rituales en los que se marca elganado, se agradece y se propicia lamultiplicación del mismo- y en otrasceremonias que se realizan en los cerros paraofrendar a la Madre Tierra. El sentido de estascelebraciones es el de agradecer lo recibidoy propiciar las actividades futuras, si alguienno cumple con estos rituales o muestramezquindad en las ofrendas, Pachamamacastiga al infractor enfermándolo oproduciéndole otros perjuicios, tales comopérdidas económicas, problemas y reyertascon los familiares o con otros miembros dela comunidad. Las dolencias ocasionadas,incluyen los problemas cutáneos yamencionados, cefaleas, neuralgias, trastornosgastrointestinales, alteración nerviosa,dificultades para conciliar el sueño, entreotros males.

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Si el individuo es avaro en sus ofrendas o,además de mezquino, perezoso pararealizarlas, la deidad le quita lo que le hadado, ya se tratare de salud, progresoeconómico u otro tipo de bienestar.

La acción terapéutica, además deltratamiento del paciente, incluye siempre larealización de los rituales que se hubierenomitido y/o la repetición de la ofrenda hechacon tacañería, esta vez mostrando sobradagenerosidad para anular el verdadero origende la dolencia y de este modo recuperar lasalud.

La misma entidad causa la pilladura oagarradura, que se manifiesta en síntomas si-milares. La diferencia fundamental entre lasopladura y la pilladura o agarradura radicaen que la última implica el rapto o la sustrac-ción paulatina de la energía vital, de la enti-dad anímica o del espíritu, es entonces lasustracción de uno de los elementos que con-forman la persona el aspecto determinantede la dolencia, mientras que la sopladura sedefine por la incorporación de la enferme-dad/sustancia -una emanación similar a ungas invisible que envía la deidad-, es enton-ces la intromisión de un elemento extraño enel cuerpo del individuo la causa del mal.Nuevamente, el incumplimiento o mezquin-dad ritual motivado en la avaricia o la perezaque lleva al olvido y al desinterés causan laagarradura.

�Había un chiquito que se enfermó porquelos padres se olvidaron de ofrendar a laPachamama, entonces lo agarró la Tierra ytuvo problemas en los huesos, y lo trataronpero nunca volvió a caminar bien. Si uno seolvida de challar15 a la Pachamama o dejapasar el tiempo (en especial el mes de agosto)le viene la enfermedad. Empiezan a pasarcosas raras hay personas que quedan chuecas,

o con la boca chueca, o sin poder caminar, osin poder mover las piernas. Trae problemasa los huesos, o le aparecen ronchas y searruina la piel. Eso es porque la Tierra losagarra, porque no le dieron de comer aPachamama. Eso es también lo que dicenpilladura de la Tierra. Dicen que la Tierralos quiere comer, que los agarra la Tierra.Esa enfermedad si la agarran a tiempo sepuede curar, pero hay personas que nunca securan, hay personas que quedan deformes.Si la gente tiene agarradura hay que pedirlea Pachamama para que se cure. Si uno nohace el ritual en el mes de agosto tiene quehacer el ritual en el justo tiempo que Vd.tiene. Igualmente uno tiene que challaragradeciendo cada vez que uno tiene una cosanueva, póngale un televisor, una moto. Miyerno le compró una moto a mi hija, y buenoél vino para acá, hicimos un asado en la casa.Yo he orado en silencio, he pedido que cadavez nos dé más y que no nos quite lo quetenemos a nuestro alcance, y después todoshemos challado la moto, le tiramos vino,cerveza, gaseosas, uno tira lo que tiene en lamesa. Se challa con líquidos no más. Leagradecemos a Pachamama, y le pedimos queno nos quite lo que conseguimos. Le pedimossiempre tener un poco más, siempre conayuda de ella, son las creencias que unotiene� (Juana, San Salvador de Jujuy).

El incumplimiento con el ritual de lasofrendas es el motivo que genera la reacciónde la deidad, quien pune al trasgresorenviándole la enfermedad �agarradura osopladura- u otro tipo de males como mermaseconómicas -fracaso en los cultivos, en la críade ganado, en los negocios, pérdida de losbienes obtenidos, etc.-. Esta noción deenfermedad equipara las dolencias quepadecen los hombres con otro tipo de

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perjuicios que inciden evidentemente de igualmodo en la calidad de la existencia.

El sentido de estas prácticas es el deagradecer lo recibido, propiciar la abundanciade bienes y proteger los bienes que se poseen.Los pecados de avaricia y pereza puestos demanifiesto en la falla ritual son causa deenfermedad y se contraponen a lagenerosidad de las deidades que posibilitanla vida, el sustento, el bienestar de la familiay todo aquello que la existencia tiene depositivo.

El padecimiento de múltiples dolenciaspuede asignarse a la acción punitiva ocompensatoria de los personajes míticos delcatolicismo, ante la avaricia o la perezamanifiestas en el incumplimiento ritual. Lossantos y las vírgenes deben ser ofrendadosen su día, los Reyes Magos el seis de enero,los domingos debe cumplirse el precepto deir a misa, porque de otra forma las figurasofendidas reaccionarán negativamente.

�A un vecino se le paralizó la mitad delcuerpo, cuando no pudo manejar el cuerpofue al hospital. Ha ido y le han hechotratamiento, pero le agarra como un ataque(el informante tiembla para mostrar). Seasusta mucho, va al médico particular perono pasa nada. Fue también al curandero delcampo, a Don Ángel, y a otro hombrecitomás, todos esos lo han tratado. Le hacenhacer perdón porque dicen que es castigo.Castigo del Rey Mago. La gente que tiene(la figura del Rey Mago) en el campo lefesteja, le hace la misa (celebración) el 6 deenero. El Rey se enoja si no hace celebración.El Rey le mandó enfermedad porque nofestejó, fue mezquino. Mi papá tiene laimagen de Melchor, Baltasar y de una reina,no me acuerdo el nombre de esa reina.Cuando llega el seis de enero mi papá le

festeja, le hace el cumpleañitos� (Victoria yEsteban Mamaní, La Quiaca).

El texto nos muestra un caso posible dehemiplejia, que fue interpretado etioló-gicamente de acuerdo a la noción deenfermedad tradicional como desequilibrioreligioso-ritual. En efecto, al no habercumplido el dueño de la imagen, motivadopor la avaricia y/o la pereza, con lacelebración del seis de enero que el ReyMago exige, la figura reaccionó castigandoa su devoto a través de una grave enfermedad,cuyo origen en una falla ritual fuedeterminado por el curandero.

Es común en el NOA la devoción a santosy vírgenes, cuyos poseedores se consideransus esclavos, en virtud de esta condicióndeben realizar una celebración en el día enque el calendario eclesiástico conmemora ala figura. Se invita a vecinos y amigos a querecen ante la imagen y, posteriormente, serealiza una fiesta en la que el dueño convidacomida y bebida a los rezadores (Colatarci,1994 y 1999). En dicha oportunidad el dueño-conocido también como el esclavo- de laVirgen, del santo o del personaje mítico quefuere, agradece los dones recibidos conanterioridad y pide buena fortuna para eltiempo venidero. En estas ocasiones, lagenerosidad no sólo es bien valorada sinotambién un augurio propiciatorio para que lavirgen, santo, rey mago o la entidad que fuereretribuya con abundancia.

Lo dicho para santos, vírgenes y figurasdel catolicismo, vale para el Dios cristiano,Veamos:

�Si uno no va a misa, Dios se enoja ypuede mandarte la enfermedad. A una señoraque faltó muchas veces a misa, como eraperezosa, Dios le mandó derrame cerebral.La atendieron en el hospital pero igual se

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murió. Murió porque se lo merecía, ella nocumplía por perezosa, era una señora quepodía caminar, salir, todo. A veces Diosmanda enfermedad que se puede curar, lagente va al médico o al curandero y se cura.Dicen que el derrame cerebral no se puedecurar. Hay enfermedades nuevas, antes nohabía derrame cerebral� (Victoria y EstebanMamaní, La Quiaca).

El castigo de la avaricia y la pereza comoresultado de cualquier tipo de incum-plimiento ritual es visto como una justacompensación, incluso si el acto punitivoincluye no sólo la enfermedad sino tambiénla muerte. Es causa real, no metafórica osimbólica, e incluye tanto la dimensiónorgánica como la anímica.

La pereza y la avaricia suelen asociarsetambién al incumplimiento de las promesasque la gente suele hacer a santos y vírgenes.En estos casos con el objeto de superar uninfortunio la persona promete una ofrenday/o una peregrinación anual en retribución alo recibido.

En lo que hace a la salud, la acción de�promesar� se realiza habitualmente con finesterapéuticos y eventualmente preventivos.

Es común que las madres prometan aalguna virgen y, menos frecuentemente a unsanto, participar de la procesión y/operegrinación hecha en honor de la deidad,año tras año, a cambio de que la figura saneal niño, este último en su carácter de�promesado� debe ser presentado cada añoal personaje mítico, llevando una ofrenda, enreconocimiento y como contraprestación ala salud y/o protección otorgadas.

A diferencia de los niños, los adultoshacen las promesas para sí y de obtener lasalud deben cumplir con el requisito departicipar de la celebración anual a la virgen

o al santo. La figura elegida para promesares tenida por milagrosa y habitualmenteescogida entre las predilectas del enfermo odel familiar que promesa al niño.

De acuerdo con la perspectiva de loscampesinos, la figura mítica, es la que operala sanación del enfermo, es bueno que eldoliente entre en contacto físico con la figura,pues estas deidades son definidas comoverdaderos ídolos. Vale decir, la imagen esla deidad y no una mera representaciónplástica de la misma, es, por lo tanto, un sercon poder y voluntad, lo que le permite sanar,proteger o castigar a cualquier individuo.

Vírgenes y santos otorgan salud o bonanzaa cambio de que la persona participe de lascelebraciones con las que se ha compro-metido. De ello se deduce, que entre los seresmíticos y las personas se establecen pactosde reciprocidad que ambos deben observar.En el caso de que la persona incurra en unafalta, se genera un desequilibrio ritual que espunido por la deidad causando la enfermedado quitando el bien que hubiera otorgado.

�Si uno no cumple las promesas que hacea la virgen o al santo, al que sea, y no participade la procesión todos los años, o no leencienden las velas, o no le llevan lo que leprometió, ya le viene castigo y la persona seenferma, o el nene, si prometió a un hijo queestaba enfermo. La gente siempre trata decumplir porque son creencias que uno tieney tiene que cumplir. Hay personas que sonperezosas y entonces no van y no cumplen yhay otras que son también avaras, entoncesno cumplen. Por ejemplo hay personas queprometen construirle una capilla al santo, oalgo que es costoso y después dicen: �No,esto es muy caro�. Hacen así porque sonavaras y entonces les viene el castigo, lavirgen le quita todo lo que le dio, la salud, o

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la casa, o lo que sea� (Juana, San Salvadorde Jujuy).

Es claro, que las deidades se vengan delincumplimiento ritual generando el mal queoportunamente curaron, actuando en virtuddel talión, representación que sitúa el origende la enfermedad en la falla ritual de la per-sona y no en la acción punitiva de la deidad.La avaricia y la pereza suelen ocasionar elquiebre de la relación de reciprocidad y equi-librio entre el individuo y los seres míticos.

El Diablo, Malo, Maligno o Tío tambiénpuede provocar la agarradura, otrasenfermedades e incluso la muerte. Laagarradura se hace evidente en alteracionesmentales, parálisis o afecciones óseas. Estafigura suele dañar a cualquier persona porpura malignidad y, especialmente, se tomarepresalias con quien no respete el pactorealizado. De acuerdo con las represen-taciones campesinas, algunos individuosrealizan pactos con el Diablo para obtenerfortuna u otro beneficio, a cambio debenrealizar las acciones que éste les solicita.Habitualmente, el demonio demandasacrificios importantes a sus socios, talescomo la entrega de familiares, muertes, etc.Si la persona no cumple con el pedido o violael pacto, se enferma o muere en virtud de laacción punitoria de contrapaso ejecutada porel Maligno. En este caso la enfermedad seorigina en una falta cometida por el hombre,mientras que de no mediar un pacto la causade la dolencia está en la maldad del personajey no en la ruptura de un esquema dereciprocidad.

La avaricia, el deseo de obtener y poseerbienes materiales es uno de los motivos quemovilizan a los hombres a realizar el pacto.Aunque no es el único sentimiento pecami-noso que está en la raíz de la búsqueda de

relación con el Diablo, también aparecen lalujuria y la soberbia. Cuando el deseo deéxito amoroso y sexual funda el pacto seadvierte la lujuria, mientras que cuando elcontrato responde al deseo de resaltar en al-guna actividad, tal como la ejecución virtuo-sa de algún instrumento musical, la danza, laequitación o los juegos, se manifiesta la so-berbia.

Más allá de las causas especificas, paraproducir la agarradura el Maligno se apropiade la entidad anímica, extrayendo el principiovital presente en el aliento y originahabitualmente la muerte. En ciertascircunstancias, es el Diablo quien guía losactos del enfermo y, algunas veces, lo llevaal suicidio (Balzano, 1985). Comportamientoque también es definido como pecado,aunque no necesariamente un pecado capital.

Las posibilidades de que un incauto caigaen poder del Diablo aumentan en carnaval,lapso dominado por el demonio y en el quesu presencia entre la gente no sólo espermanente, sino que además es convocadapor los hombres a través de la ceremonia dedesentierro. Desde este punto de vista, elindividuo atrapado por el Diablo aun siendoinocente e incapaz de realizar un pacto, esvíctima de un desequilibrio ritual operado porlos hombres al instalar un tiempo en que laspersonas van ser tentadas y asechadas por eldemonio. En este caso, la agarradura serelaciona con la calificación del tiempo quetrae el carnaval, el cual puede definirse comoun lapso ritmado por la presencia del Diabloy, por ende, peligroso, se trata de un períodode exceso y de desequilibrio, en el se admitencomportamientos inadecuados en otrascircunstancias. Es el manejo que los hombreshacen del tiempo ritual lo que los expone engrado sumo al accionar del Maligno.

83LOS PECADOS CAPITALES Y LAS NOCIONES DE ENFERMEDAD (...)

�Yo curo, susto, empacho, zafadura, peroahora en la serena no puedo curar. El tiempode la serena es tiempo de alegría y decarnaval. No puedo curar porque estemporada del Tío (Diablo), anda el Tío y espeligroso. El Tío puede hacer tentaciones�(Don Ángel, La Quiaca).

Por ser un lapso dominado por el Diabloacciones como la terapia, en la que elcurandero se comunica con sus auxiliares -habitualmente santos y vírgenes-, manipulael poder de los seres míticos y no pocas vecesinvoca a Dios, deben suspenderse. Laoposición de calidad ontológica y deintenciones entre el Dios Creador, vírgenesy santos por un lado, y el Diablo por otro, enel sistema de creencias del catolicismo de loscriollos y mestizos del NOA fundamenta elcese de las actividades que implican lainteracción con las deidades de calidad eintención positiva hacia los hombres.

El tiempo de carnaval se inserta en unaduración mayor que se inicia el miércolesde ceniza y culmina el domingo de Pascua.En este tiempo decrece el poder de Cristo envirtud de que se repite la pasión y muerte deDios y aumenta el poder del Diablo a travésdel ritual del desentierro del carnaval.

�El Diablo es peligroso a veces agarra ala gente porque sí, es especialmente peligrosoen carnaval, porque en carnaval anda entrela gente, porque la gente misma lo hadesenterrado, lo trae, es culpa de la gente loque pasa. Uno está en carnaval y ve una chicahermosa que no conoce, pero igual se pone aconversar y después la invita a salir afuera yresulta que no es una chica es el Diablo y ahíenseguida lo agarra. El diablo saca el espíritu,por la boca le aspira el aliento y le saca elespíritu, entonces la persona se enferma y semuere, es difícil de curar la agarradura�

(Horacio, Humahuaca).Es la lujuria -referida como alegría por uno

de los informantes- lo que da lugar a latentación del Diablo, la lujuria hace a laesencia del carnaval. Este es un tiempo defiesta, cantos, bailes y borracheras, en el quese permiten las infidelidades conyugales, lalibertad sexual, las conductas orgiásticas ydionisíacas, las actitudes voluptuosas yprovocativas. Es un tiempo de desco-nocimiento de las jerarquías y de las pautasde respeto, es un tiempo de permisos, deirresponsabilidad, de alteración de los rolesde la vida cotidiana. Es tiempo dedesdibujamiento de las identidadesindividuales, ocultas bajo el velo y la ilusiónde las máscaras. Los días de carnaval son unasuerte de saturnales en las que prácticamentetodo está permitido.

�El carnaval es peligroso, la gente andade fiesta se emborracha, duerme concualquiera, no sólo los que están solteros,hacen igual los que están casados. Quierenestar de fiesta ponerse de novios por un ratono más. Por ahí te agarra el Diablo porque lagente esta, así, de fiesta, es culpa de la genteque anda buscando con quien divertirse y porahí viene el Diablo y te tienta� (Beatriz,Salta).

Desde la perspectiva expuesta, es la lujuriade los seres humanos la que facilita y originael padecimiento de los males -incluidas laenfermedad y la muerte- ocasionados por elDiablo.

Volviendo al tema del pacto con el Diabloveamos cómo se liga a la soberbia y, ensegundo lugar, a la lujuria.

�A veces por soberbia, la gente hace pactocon el Diablo, porque siempre hay algunoque quiere ser el que mejor toca la guitarra,el que canta más bonito, el que mejor baila,

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el que mejor juega a la taba (juego de azar enel que se usa el hueso astrágalo). Ellosquieren ser el mejor, que todos les prestenatención, algunos piensan que así tambiénconsiguen más mujeres. También haycuranderos que hacen pacto para ser los másconocidos y ganar más plata, pero a veces essólo por soberbia porque les gusta serimportantes, que venga la gente a consultarlosde lejos, que se junte mucha gente en la casaesperando que los atiendan. Pero siempretiene castigo hay una curandera que hizopacto y puede curar a todos menos a sufamilia. A lo mejor uno que canta bien leviene la enfermedad, es peligroso el pactocon el Diablo, puede hacerle algo al que lohizo, o sí no, a los familiares. Y si no le pasanada cuando está vivo cuando muere pierdeel alma para siempre porque ya se la apropióel Diablo� (Josefina, Campo Quijano).

Cuando la soberbia motiva el pacto con elDiablo la persona corre los mismos riesgosde infortunio, enfermedad y muerte que enlos otros casos, y a la vez está compelida acometer toda clase de pecados. Entre ellos,el primero y principal es la entrega de su almaal Diablo, lo que implica su condena eterna.Dado que los pactos suelen exigir la entregade otras almas al Diablo -usualmente una poraño- los pactantes cometen y/o facilitanhomicidios, además ponen en riesgo deenfermedad y muerte a sus parientes máspróximos amigos y vecinos. Sin duda, lasoberbia introduce al individuo en el caminodel pecado, la perdición, la enfermedad y lamuerte.

Más allá del pacto con el Diablo la sober-bia es siempre un mal sentimiento que con-duce a experiencias negativas. En relacióncon el ámbito de la enfermedad y la salud, lasoberbia suele expresarse en actitudes que

sobredimensionan el propio poder o energíaante los daños, los ambientes nefastos y ho-rarios nefastos -por ejemplo las abras y lashoras de la siesta- y el poder de los seresmíticos.

�Hay gente que dice: �Yo tengo muchaenergía, soy fuerte no me va a pasar nada,sólo a los débiles les agarran los daños, sóloa los niños y a los débiles les agarra el malde ojo, sólo a los débiles se contagian el malaire, los que son más débiles se enferman,les agarran los daños�. Yo por ejemplo soysanadora y soy fuerte pero a veces viene genteenferma que está brujeada y yo no la tratoporque a lo mejor a mi no me pasa nada, peroel daño le puede caer a mis hijos que sonmás débiles, a mis nietos que son chiquitos.Así que hay cosas que yo no hago� (Juana,San Salvador de Jujuy).

Como se advierte en el texto la posibili-dad de contraer cualquier tipo de dolencia,entre otros aspectos, depende del caudal ener-gético con que cuenta cada individuo, laspersonas más fuertes pueden rechazar losdaños y otros males. Cuando esto ocurre nose anula el mal sino que este se desplaza ytoma a un ser más débil del entorno familiarde la persona que fue objeto de daño. Tam-bién la manipulación de entidades de podernegativo puede causar la enfermedad y hastala muerte. Veamos un ejemplo:

�Hace mucho tiempo yo estaba mal, yoestaba mal, y fui a ver una parapsicóloga quese llama Osiris. Es muy conocida, atiendemucha gente y vive en Córdoba. Yo habíacomprado una casa en Córdoba, tenía parien-tes ahí. La parapsicóloga me dijo que mehabían hecho un daño, yo tenía parte de lapantorrilla como podrida. Ella me lavó comosiete veces, me lavaba y me pasaba las ma-nos. Después me puso una venda y la pierna

85LOS PECADOS CAPITALES Y LAS NOCIONES DE ENFERMEDAD (...)

se me arregló, mire (muestra la pantorrilla).Ella describió mi casa en La Quiaca, señalódonde había dos ventanas con rejas y dijoque debajo de una estaba el daño. Dijo quelo sacara y lo quemara. Cuando volví a LaQuiaca busqué un curandero boliviano paraque sacara el daño. Él empezó a cavar y tira-ba cartas y decía: �Ya está cerca�, hasta quelo encontró. El curandero no quiso quemar-lo, dijo: �¿Qué sabe esa mujer (laparapsicóloga)?�. Entró a la casa y lo partióal medio, había un muñequito sin pies ni ca-beza, uno que me representaba a mí y otroigual que era mi mujer. El curandero se lollevó. Al otro día vino el sobrino y yo le hedicho: ¿Qué pasa, si yo le he pagado a tu tío?Y él me dijo: �Es que mi tío se ha muerto�.Era fuerte el daño y el se murió� (Carlos, LaQuiaca).

La terapia de la agarradura y de los otrosmales producidos por el demonio, noincluyen la expiación ni la compensaciónritual a Pachamama sino la propiciación ritualde la misma, para captar su voluntad y utilizarsu poder en contra del Diablo. Sueleconcentrarse, además, en el sahumado y enlas invocaciones, rezos, rogativas yencendido de velas dirigidos a Dios, la Virgeny otras deidades del catolicismo, quienes sevisualizan como opuestos al demonio, deacuerdo al sistema de creencias religiosas.La cura requiere también de técnicasespecificas destinadas a recuperar el alma deldoliente.

En síntesis los desequilibrios religiososrituales implican una idea de enfermedad quehace hincapié en problemas orgánicos,emocionales, entre las entidades delindividuo (por la pérdida del alma o la energíavital) y en la necesidad de equilibrio con losseres míticos. Equilibrio que la pereza, la

avaricia, la soberbia y la lujuria socavandando lugar a múltiples dolencias, la muertey otros tipos de infortunio.

A pesar de que determinadas dolenciaspueden ser objeto de censura, en tantodenuncian fallas morales y/o religiosas enindividuos concretos, nos parece exageradohablar de control social a través deldiagnóstico de tal o cual enfermedad. Talcomo pudimos observar y comprobar laenvidia o la acusación de brujería son partede la experiencia cotidiana, nadie por ellodeja de hablar con la vecina, de interactuarcon los parientes o de ir al curandero, inclusode visitar aquellos de los que se dice quesaben y suelen hacer trabajos de daño. Quela ira sea un pecado no es un hechoespecialmente tenido en cuenta para impedirpeleas o enfrentamientos cotidianos.Tampoco nadie parece perder el interés porla comida, aun cuando lo acusen de gula. Lalujuria sigue encontrando sus saturnales enel carnaval, que se celebra con amplioconsenso social. El que fue soberbio,mezquino o perezoso y está, como resultadode estas actitudes, sufriendo una enfermedadu otro infortunio rara vez es criticado y,menos aún, socialmente sancionado.

En definitiva, el análisis de la relaciónentre los pecados capitales y las nociones yvivencias de la enfermedad, nos muestra quelas dolencias son mucho más queconocimientos sobre el cuerpo, la mente ysu buen funcionamiento, son experienciasque comprometen la interacción social, lapercepción del espacio, ideas sobre lapersona y las entidades que la integran,valores morales, ideas religiosas y prácticasrituales.

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Conclusiones

Las teorías etiológicas de la enfermedadrefieren causas naturales -como desbalancestérmicos, alimenticios, quebraduras, etc.- cau-sas emocionales, entre las entidades de laspersonas, causas sociales (la acción o los sen-timientos y deseos de otras personas), causasespacio-ambientales y religioso-rituales.

Estas teorías sintetizan y refiguran saberesy prácticas de la medicina occidental -espe-cialmente la humoral- del sistema de creen-cias del catolicismo y otras tradiciones deraigambre europea y árabe que trajeron losinmigrantes desde el siglo XVI en adelante.

Los pecados capitales se asocian de di-versos modos con las teorías etiológicas ymanifestaciones de la enfermedad.

Dos de los pecados capitales generan en-fermedades concretas: la envidia y la cólera,mientras que los restantes pueden estar en laetiología de episodios particulares, comosucede con la gula y los males de tipo orgá-nico a que ésta se conecta, o la pereza, laavaricia, la soberbia y la lujuria que en espe-cial se relacionan con los desequilibrios reli-gioso-rituales.

La envidia es un sentimiento, un pecado yla enfermedad misma que el sentimiento en-gendra. La etiología del mal se debe al peca-do�sentimiento.

La cólera o ira conduce al padecimientode nervios, especialmente cuando quien laexperimenta no pone de sí para superar lassituaciones conflictivas que simplementesuceden en la interacción cotidiana con fa-miliares, vecinos y compañeros de trabajo.

La gula es una de las causas posibles delos males que genéricamente podemos de-nominar desbalances alimenticios, que traenmales diversos como problemas de corazón

y de presión arterial, entre otros.La avaricia y la pereza pueden motivar el

incumplimiento ritual o la mezquindad en lasofrendas, se asocian consecuentemente a lasopladura, la agarradura y los males origina-dos en desequilibrios religioso-rituales.

La avaricia, la soberbia y la lujuria apare-cen entre los deseos y sentimientos que fun-dan los pactos con el Diablo. Pacto que escausa de perdición, enfermedad y muerte. Sibien el pacto puede traer el sufrimiento decualquier infortunio y cualquier dolencia, laagarradura del Diablo es el taxon más típico.

La lujuria finalmente se asocia al carna-val, un tiempo orgiástico y de desorden, unlapso demoníaco en que el humano es presafácil, especialmente si está dispuesto a nue-vas experiencias amorosas y a dejar domi-narse por los impulsos del sexo.

Lo expuesto nos muestra que la noción yla vivencia de la enfermedad poseencontenidos morales y religiosos de raigambrecatólica, entre los que figuran los pecadoscapitales.

Notas

1. Las más variadas dolencias se tratanmediante la cura de palabra. Distintaspersonas poseen fórmulas para curar di-versas enfermedades como las quema-duras, el empacho, la abertura de car-nes (desgarros), la hernia, la angina, eldolor y ardor de estómago, el dolor demuelas, las verrugas, las hemorroides,el susto, el mal de ojo y el daño. Estasfórmulas son secretas y sólo puedentransmitirse en viernes santo, noche-buena o en la víspera de San Juan. An-tes de pronunciar las oraciones el

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curador se persigna y suele hacer ade-más la señal de la cruz en la frente o enla parte afectada del cuerpo del dolien-te. Las oraciones se dicen en silencioinvocando la ayuda y el poder de Dios,de la Virgen o de algún santo. El conte-nido de las frases o fórmulas hace refe-rencia a la vida de Cristo, a atributosde la Virgen, o al poder y beatitud de laSantísima Trinidad. Al decir las frasesse ordena que la verdad enunciada sehaga realidad en el enfermo, cuyo nom-bre se indica expresamente. A continua-ción se rezan tres ave maría o tres pa-dre nuestro si en el texto se invoca a laTrinidad o alguna de las figuras que laintegran, si el pedido compromete laintervención de un santo una sola ple-garia es suficiente. El empleo de ora-ciones o ensalmos es de larga data, seusaban en España ya en la Edad Mediay actualmente figuran entre los proce-dimientos utilizados por los curande-ros (Campagne, 1996: 219-22;González de Fauve, 1996: 106 yMariño Ferro, 1996: 421-427). Ello noquiere decir que deba pensarse en unaestricta coincidencia entre las prácticasdel NOA y las españolas, lo que impli-caría negar la dinámica histórica y elaporte de otras sociedades con los con-secuentes procesos de transformacióny refiguración de costumbres y repre-sentaciones culturales. En el caso quenos ocupa, es significativo -por ejem-plo- el aporte inmigratorio de poblaciónde origen árabe, cuyas tradiciones in-cluyen el recitado de versos del Coránpara tratar diversos males, incluso deproblemas suscitados durante el alum-bramiento.

2. Sobre diferentes teorías de laenfermedad y su conexión conconcepciones morales puede verseLaplantine, 1999.

3. El concepto de espíritu ha sidorefigurado y algunos campesinos lodescriben como una de las entidadesque integra la persona, diferente delalma, vale decir el sujeto tendría unalma, un cuerpo, un espíritu y, porsupuesto, un nombre. Sobre losconceptos de alma y espíritu en eldesarrollo de la teología católica y sobrelas nociones de almas y lasmanifestaciones de poder en el sujetopuede verse van der Leeuw, 1964.

4. Hemos propuesto denominardesequilibrios religioso-rituales a losmales que se originan en la acción delas deidades, la agarradura puedeproducirla la Pachamama como castigoal incumplimiento o mezquindad ritualy también el Diablo por puramalignidad o como resultado de unpacto con algún ser humano. Sobrepacto con el Diablo puede verseAmaya, 1996; Forgione, 1994 y 1996;Krause, 1995 y Torres, 2003.

5. El nombre ha sido reelaborado comoun alma nombre, como una entidad delindividuo, que tiene un papelimportante en varios procedimientosterapéuticos y que, a la vez, puede serobjeto de daño.

6. Nuestros informantes curanderoscontaban entre sus auxiliares configuras del catolicismo como el Sagrado

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Corazón, el Niño Dios de Praga, laVirgen de la Candelaria, San Santiago,San Ramón, San Antonio, entre muchosotros.

7. La aikadura es producida por losmuertos, suele afirmarse que los niñosnacen aikados cuando la madre no harespetado la interdicción que impide alas mujeres embarazadas concurrir avelorios, al cementerio o conectarse conlos muertos de algún modo. Este malse advierte principalmente enproblemas motrices, falta de tonicidadmuscular y color amarillento en la piel.Los adultos padecen aikadura cuandono dejan de pensar y soñar con algúnfamiliar muerto recientemente. Sobreeste tema puede verse Bianchetti, 1996e Idoyaga Molina, 2000 y 2002a.

8. Los principios de la medicina humoralque entendía la enfermedad como undesbalance del organismo y clasificabalas enfermedades, los remedios y losalimentos en cálidos y fríos, fueintroducida en los tiempos de laconquista. Fue profundamenterefigurada con el correr del tiempo, noobstante, mantiene vigencia ennumerosas áreas del país (IdoyagaMolina, 1999/2000) y en toda AméricaLatina (Foster, 1994)

9. El susto es un taxón extendido enAmérica Latina (Adams y Rubel, 1967;Estrella, 1996; Foster, 1994; Klein,1978; Lagarriga, 1999; León, 1963;Pagés Larraya, 1967; Rubel, 1964;Rubel et al, 1992; Uzzell, 1974;Valdizán y Maldonado, 1922; Zolla et

al, 1992, entre otros), España (Ribert,1996) e Italia (Galt, 1982). En laArgentina (Bianchetti, 1996; IdoyagaMolina, 2000 y 2002a y b; Palma, 1978;Pérez de Nucci, 1989, entre otros)aparece en comunidades criollas ymestizas con algunas diferencias: en elNOA la experiencia de pánico producela pérdida del alma o espíritu, mientrasque en el nordeste, Cuyo y la regiónpampeana no. Por el contrario, soncomunes en todas partes los síntomasy cuadros característicos del mal y otrosaspectos, como la propensión de losniños a padecer esta dolencia.

10. Se denomina antigales a yacimientosarqueológicos donde suelen aparecerantiguas urnas funerarias y otros restos,son tenidos por espacios de dudosacalidad. Los muertos prohíben quetomen piezas o restos de su ajuar y desu entorno, de no respetarse estadisposición los muertos como repre-salia enferman al infractor.

11. Los parientes de los difuntos debenayudar a que el alma encuentre sudescanso eterno, en lugar de penarvagando por el plano terrestre. Es coneste fin, que se les prende velas, serezan misas y se pide a Dios por ella.Sobre este tema véase Krause, 1994. Eneste sentido aquel que piensa, llora yextraña al difunto no se comportaadecuadamente pues obstruye sucamino hacia la morada final.

12. El curandero es en rigor un serambivalente que puede ejercer tanto laterapia como valerse del poder del que

89LOS PECADOS CAPITALES Y LAS NOCIONES DE ENFERMEDAD (...)

está dotado para dañar (Pérez de Nucci,1989 e Idoyaga Molina, 1999b y 2000).

13. En las últimas décadas diversos autoreshan tratado el tema de los nervios ensociedades o grupos específicos (Barletty Low, 1980 y 88; Dresp, 1985; Hill yCotrell, 1986; Jenkins, 1991; Lock,1990; Low, 1981 y 88) y en análisiscross- cultural (Low, 1985 y 1994). Enlo que hace a América, este taxonaparece en sociedades de AméricaLatina (Barlett y Low, 1980 y 88; APA,DSM-IV, 1995; Idoyaga Molina, 2002c;Idoyaga Molina y Luxardo, 2003; Low,1981 y 88; Martínez, 2003), entregrupos latinos de los Estados Unidos(APA, DSM-IV, 1995; Jenkins yCofressi, 1998) y en grupos de origengriego de los Estados Unidos y Canadá(Lock,1990; Low, 1994).

14. En otros contextos socioculturales-como la población campesina y urbanade Costa Rica- se atribuyen a causasbiológicas, que incluso pueden serdefinidas como hereditarias, a causasemocionales como la pena que provocala pérdida de familiares, y a otrosfactores como la crisis y discordia enla familia, y la desestructuración delgrupo familiar (Barlett y Low, 1980;Low, 1981). Entre la población de hablainglesa en el Caribe de Costa Rica, losnervios se atribuyen a desequilibriosproducidos por las preocupacionesexcesivas, alcohol, fuertes emociones,dietas inadecuadas y problemas quetraen explosiones de cólera (Hill yCottrell, 1986). Entre la población deGuatemala se señala a la cólera y la

aflicción como las principalesetiologías de los nervios (Low, 1988).De acuerdo con Garro (2000), entre loscampesinos de Pichátaro (México) sedenomina bilis a la enfermedadoriginada en fuertes emociones.

15. Acción ritual de asperjar con bebidas �habitualmente alcohólicas- a la tierra,las casas, los vehículos, las tiendas, etc.El objetivo de estas acciones esagradecer lo recibido, propiciar laabundancia futura y proteger la casa oel bien de que se trate.

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ResumenCon el objeto de mostrar que las nociones

y prácticas en relación con la enfermedad enel noroeste Argentino (NOA) integrancontenidos morales y religiosos delcatolicismo, la autora analiza la conexiónentre las teorías etiológicas de las

enfermedades y los pecados capitales. Enfocala envidia, la cólera o ira, la gula, la avaricia,la pereza, la soberbia y la lujuria,relacionándolas con teorías etiológicas de lasdolencias orgánicas, sociales y religioso-rituales y con taxa específicos de enfermedad,tales como la envidia, la brujería, el mal deojo, los nervios, la sopladura y la agarradura.