203

1.the billionare wins the game

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: 1.the billionare wins the game
Page 2: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

Índice Sinopsis ............................................................... 4

Prólogo ............................................................... 5

Capítulo 1 ........................................................... 7

Capítulo 2 ......................................................... 18

Capítulo 3 ......................................................... 24

Capítulo 4 ......................................................... 34

Capítulo 5 ......................................................... 46

Capítulo 6 ......................................................... 57

Capítulo 7 ......................................................... 74

Capítulo 8 ......................................................... 83

Capítulo 9 ......................................................... 94

Capítulo 10 .................................................... 103

Capítulo 11 .................................................... 117

Capítulo 12 .................................................... 123

Page 3: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

Capítulo 13 .................................................... 129

Capitulo 14 .................................................... 138

Capítulo 15 .................................................... 146

Capítulo 16 .................................................... 158

Capítulo 17 .................................................... 171

Capitulo 18 .................................................... 182

Epílogo .......................................................... 195

Próximo libro ................................................... 199

Sobre el autor: .................................................. 201

Créditos .......................................................... 202

Page 4: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

Sinopsis oseph Anderson ha decidido que es el momento en que sus tres

hijos exitosos encuentren novias. Joseph quiere nietos para

llenar su enorme mansión, y él los quiere de inmediato.

Su hijo mayor, Lucas, tiene éxito en todas las áreas de su vida, excepto el

amor. Él no tiene ningún deseo de tener a la mujer que entre en esa vida,

causando el caos, o utilizando el nombre de su familia.

Amy Harper se crió en circunstancias trágicas y no le gustan los hombres,

ricos mimados que se han transmitido todo con una cuchara de plata.

Pasó años en terminar su educación y la suerte de conseguir un trabajo

con la famosa Corporación Anderson.

Amy y Lucas lucharán su atracción el uno al otro, pero descubren que no

pueden resistir las chispas que vuelan. Toman un viaje juntos para

aprender a desafiar, la confianza y, en definitiva... el amor.

J

Page 5: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

Prólogo Traducido por B!!

Corregido por Alyshia Cheryl

¡Esto no está bien, Katherine! —Joseph golpeó su puño

contra la mesa, haciendo temblar la vajilla—. Estos chicos

simplemente no nos escuchan, ninguno de ellos. ¿No

pueden darse cuenta de que no estamos haciéndonos más jóvenes?

Debería haber tenido nietos dando brincos en mis rodillas hace años.

Katherine sonrió mientras escuchaba a su esposo quejarse de sus hijos

desobedientes. Sabía que lo que decía no era nada más que palabras

vacías. Él adoraba a sus hijos tanto como ella lo hacía.

Ella tenía que estar de acuerdo con él, además, el hecho de tener a unas

hermosas mujeres embarazadas sería un excelente complemento a la casa.

Siempre había soñado con mecer a sus nietos bebés en medio de una

mesa rodeada por la gente que amaba.

—Ahora Joseph, sabes que si te entrometes de nuevo, los muchachos van

a desconocerte —advirtió Katherine a su marido.

—Si ellos no hacen algo acerca de esta situación de darnos nietos, voy a

desheredarlos —gruñó él, aunque sin convicción.

—Desde que te retiraste el año pasado, has tenido demasiado tiempo libre,

Joseph Anderson. Los chicos ya han asumido muchas responsabilidades.

¿Estás seguro de que quieres poner más en sus manos? —finalizó,

sabiendo ya la respuesta.

—Los muchachos están listos para el amor y el matrimonio. Sólo necesitan

un pequeño empujón para avanzar.

La decisión había sido tomada. Tendría por lo menos un nieto en su casa

vacía antes de Navidad.

Katherine suprimió un suspiro, sabiendo que no había nada que pudiera

decir para cambiar la mente de su caprichoso esposo. ¿De dónde cree él

que sus hijos adquirieron ese rasgo particular? A pesar de sus defectos,

Page 6: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

ella no podría amar a cualquiera de ellos, incluyendo a su esposo, más de

lo que ya lo hacía.

—Lucas será el primero —dijo Joseph con su voz estruendosa, sacando

inesperadamente a Katherine de su ensueño—. Ya le he encontrado la

novia perfecta.

Joseph se reclinó hacia atrás en su silla con una expresión de satisfacción

en su rostro. Finalmente, tenía un proyecto para mantenerse ocupado, con

el premio de sus nietos como recompensa. Lucas tendría que prepararse

para algunas aventuras salvajes cuando llegara la mañana del lunes.

Katherine observó la expresión de satisfacción en la cara de Joseph, y

pensó en advertirles a sus hijos acerca de lo que estaba por venir. Pero

decidió no hacerlo, ya que si bien no estaba de acuerdo con la intromisión

de Joseph, ella realmente deseaba esos bebés…

Page 7: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

Capítulo 1 Traducido por liiaa!! & Alyshia Cheryl

Corregido por Xhessii

uedes hacer esto. Entrar por allí con total confianza. ¿A quién le

importa si esta familia es más valiosa que Bill Gates y Donald

Trump juntos? Fuiste contratada para este puesto, y necesitas

este trabajo.

Ellos obviamente vieron algo en ti, así que mantén la frente en alto.

Amy Harper continuó dándose una conferencia a sí misma en el ascensor

durante el largo paseo hasta el vigésimo-quinto piso de la Compañía

Anderson. Sintió que se formaban nudos en su estomago a medida que se

adentraba cada vez más en el mundo corporativo.

Se cepilló el mechón de pelo dorado que escapó de su rostro, más por

nerviosismo que por necesidad. Se consideraba de apariencia promedio, y

trataba de restar importancia a los rasgos atractivos que le habían sido

dados. Ella quería ser respetada… no codiciada, al igual que su madre.

Tenía el pelo largo y aún no encontraba la voluntad suficiente para

cortarlo, aunque al fin y al cabo, siempre lo colocaba en un moño poco

favorecedor.

Ella siempre ocultó sus curvas al mundo. Había sido bien dotada, en lo

que un ex-novio había llamado en “todos los lugares correctos”. Sus ojos

verdes mostraban todas las emociones que estaba sintiendo, y por mucho

que lo intentara, no conseguía eliminar lo que ella consideraba un defecto

fatal.

Todavía no podía creer que hubiera sido contratada como secretaria

ejecutiva de Lucas Anderson. Todos los que vivían dentro de un radio de

mil millas alrededor de Seattle, Washington, sabían quiénes eran los

Anderson.

Su empresa tenía muchas divisiones diferentes, que requerían mucho

personal. Trataban de todo, desde la construcción y la agricultura de alta

gama a las adquisiciones corporativas. Aunque su sede era en los Estados

P

Page 8: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

Unidos, hacían negocios en todo el mundo, y estaba emocionada por ser

parte de todo eso.

Su empleo era en la oficina principal, trabajando para el reciente

presidente, Lucas Anderson.

Lo único que ella realmente sabía era que se había hecho cargo de la

posición de su padre hace un año.

Aunque ella se había graduado con honores, recién acababa de salir de la

universidad y se sentía un poco abrumada por la perspectiva de trabajar

para un hombre tan poderoso. Ella aún no conocía a Lucas, sin embargo,

conocía a su padre.

Originalmente había conocido a Joseph en una feria universitaria hacia el

final de su último año de la Universidad. Él le había dado su tarjeta y le

dijo que le llamara después de su graduación. Lo había hecho, y la puso

en una entrevista más rápido de lo que esperaba.

Mientras continuaba el largo viaje en el ascensor, su mente retrocedió a la

semana anterior, cuando había sido entrevistada para el puesto de trabajo.

Amy respiró profundamente mientras salía del taxi, alzando la vista hacia la

enorme casa que estaba frente a ella. Antes de que pudiera parpadear, el

auto amarillo se alejó, dejándola congelada en los primeros peldaños de la

extensa escalera de cemento. No había vuelta atrás, ahora.

Ella subió lentamente los escalones y se acercó a la puerta, que era lo

suficientemente grande como para que pasara un camión a través de ella.

Parecía que al Señor Anderson le gustaba hacer las cosas a una escala

mucho mayor que una persona promedio.

Tocó el timbre, aunque él debía saber que ella ya estaba allí ya que había

abiertos las rejas de la entrada para la entrada del vehículo.

En cuestión de segundos, la puerta fue abierta por un señor mayor, quien

por suerte, estaba sonriendo.

—Hola, soy Amy Harper. Tengo una cita con el Señor Anderson.

—Buenos días, Señorita Harper. Es un placer conocerla. Por favor, sígame

hasta la sala de estar, donde el Señor Anderson se le unirá en breve —

ofreció el hombre.

Page 9: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

Amy asintió, y siguió sus pasos rápidos mientras la conducía a través de la

asombrosa casa. Ella no podía dejar de mirar a su alrededor mientras sus

pasos resonaban en las paredes.

La casa estaba llena de lujos, desde los maravillosos pisos de mármol hasta

las invaluables obras de arte que adornaban las paredes. Cuanto más

caminaba, más fuera de lugar se sentía. No podía entender cómo alguna vez

siquiera pensó que podría hacerse cargo de un empleo tan prestigioso como

trabajar para una corporación multi-millonaria. Pasaron a través de un

conjunto de puertas dobles de gran tamaño, y Amy miró alrededor de la

tibia habitación mientras sus hombros se relajaban. Había una chimenea

tan grande que literalmente podría caminar dentro de ella, estaba ardiendo

y olía a cedro, dándole a la habitación una calidad reconfortante. Aunque la

habitación estaba bien iluminada, las lámparas eran de una tonalidad

suave, por lo que la habitación era increíblemente acogedora.

—¿Quiere algo para tomar mientras espera?

Amy negó con la cabeza y le dio una pequeña sonrisa al hombre. No quería

parecer grosera.

—Adelante, póngase cómoda en la sala de estar. Le informaré al Señor

Anderson que usted ha llegado.

Antes de que Amy pudiera responder, él se fue, dejándola cerca de la

entrada. Finalmente logró que sus pies respondieran a su cerebro, y se

acercó al cómodo sofá. Se dejó caer en el cuero suave y se echó hacia atrás.

No tuvo que esperar demasiado tiempo, ya que una voz retumbante la hizo

sentarse recta, asustándola. Ella estaba agradecida de no haber aceptado

la bebida o la hubiera derramado toda sobre sí misma.

—Buenos días, señorita. Harper. Lamento haberla hecho esperar. A veces,

es difícil colgar el teléfono —dijo Joseph.

—No he estado esperando demasiado tiempo, Señor Anderson. Gracias

hacerme una entrevista tan pronto. Realmente lo aprecio. —Amy se levantó

del sofá, y se adelantó para estrechar su mano.

—El placer es todo mío. Ahora, dejemos las formalidades de lado. Llámame

Joseph, por favor —dijo él, mientras le ofrecía su mano.

Page 10: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

0

Amy sintió como si estuviera atrapada antes de que un tren se aproximara.

No sabía cómo reaccionar. No podía ser grosera, pero se sentía incómoda

llamándolo por su nombre de pila. Ella tomó su mano.

—Gracias. Puede llamarme Amy —respondió finalmente ella, decidiendo

simplemente no llamarlo por ningún nombre.

—Ahora que dejamos las formalidades de lado, vamos a sentarnos y charlar

¿Te han ofrecido algo de beber?

—Sí, pero no necesito nada. —Ella no creía que fuera capaz de tragarse

nada con el nudo de nervios dentro de su garganta.

Joseph la invitó a sentarse nuevamente en el sofá, lo que hizo rápidamente,

así podría descansar sus temblorosas piernas. Él se sentó en una silla

frente a ella, y luego posó sus ojos azules en ella. El hombre era bastante

intimidante, más de seis pies de altura, con los hombros más amplios que

recordaba haber visto.

Tenía el pelo de color blanco nieve, un bigote bien recortado y una blanca

barba. De hecho, era bastante guapo para un hombre que debía tener unos

cincuenta años, al menos.

—Me quedé impresionado con tu hoja de vida durante la feria de trabajo en

la Universidad. Si mal no recuerdo, has tenido trabajos regulares desde que

tenías catorce años, entonces trabajaste a tiempo completo durante toda tu

escolaridad, ¿correcto? ¿Cómo te las arreglas para regular el tiempo y

mantener estos niveles impresionantes?

—Siempre he creído en el trabajo duro. Me aseguré de no sobrecargarme con

tareas y tomé mis clases un poco más tarde en la mañana, para poder coger

el ritmo de los turnos en mis trabajos. No quería graduarme con una gran

deuda —dijo Amy, feliz al saber que había hecho exactamente eso, y que

estaba más o menos libre de la deuda.

—Muy impresionante, Amy. Tu hoja de vida dice que te graduaste con un

título en finanzas empresariales con especialización en relaciones públicas.

¿Cuáles son tus planes para el futuro?

—No he tenido mucho tiempo para pensar acerca de dónde quiero estar en

diez años, pero mi objetivo siempre ha sido conseguir un empleo en una

gran corporación, como la suya, y trabajar para conseguir mis planes. Sé

que no es una tarea fácil, pero aprendo muy rápido, y no tengo miedo de

Page 11: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

1

trabajar duro o durante extensos horarios. Voy a hacer lo que sea necesario

para aprender todo lo que necesito para ser un gran complemento a su

empresa.

—¿Qué pasa con el matrimonio y los bebés? —preguntó él, sin apartar la

mirada de sus ojos.

Amy sintió que sus mejillas se enrojecieron debido a la pregunta. Ella sabía

que la mayoría de las grandes empresas tenían miedo de contratar a

mujeres jóvenes debido al hecho de que a veces se casaban, y luego

necesitaban tiempo libre para tener hijos y cosas así. Ella no quería mentir,

pero sabía que por su respuesta podía perder el trabajo.

—No estoy con nadie en este momento, pero estaría mintiendo si dijera que

no quiero que eso suceda. Finalmente, si me interesa tener hijos, tanto si lo

hago de la manera tradicional o a través de la adopción. Siempre he querido

ser madre, pero puedo garantizarle que no dejaría que nada afecte mi

rendimiento en el trabajo. Sé cual es el precio de tener un empleo seguro, y

no puedo ser una gran madre sin tener un hogar sólido para mi hijo —

respondió ella. Sabía que él no la conocía, pero podía obtener cartas de

recomendación. Ni una sola vez había tomado un día libre por enfermedad

en el trabajo y sus tareas de la escuela siempre habían sido entregadas a

tiempo, si no antes del tiempo establecido.

Joseph continuó observándola durante mucho tiempo, tanto así, que a ella le

dieron ganas de moverse inquietamente en su asiento. Con mucha voluntad,

se quedó quieta mientras esperaba su respuesta.

—¿Tienes familia o amigos cercanos dispuestos para ayudarte?

Amy se sorprendió por sus preguntas. Nunca antes había tenido una

entrevista con tantas preguntas personales. Estaba perdiendo el control de

la situación. Tenía todas las respuestas para las preguntas de una

entrevista típica, pero no para las cosas que le estaba preguntando. Ella no

quería que nadie supiera las verdaderas circunstancias de su vida personal.

—Tengo algunos amigos, pero no tengo familia aquí —respondió finalmente,

sintiéndose segura y satisfecha con la elección de sus palabras. La realidad

era que no tenía familia, y punto.

Joseph comenzó a hacer algunas preguntas más relacionadas con el trabajo

y ella se relajó, segura en su conocimiento del mundo de los negocios. Había

estudiado mucho, y ocupaba el poco tiempo libre que tenia para investigar a

Page 12: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

2

las grandes corporaciones, sabiendo que quería un trabajo de salario alto

cuando se graduara.

Sus objetivos reales incluían un trabajo sin parar durante varios años, en

los cuales ahorraría cada centavo extra que pudiera, así podría formar una

familia. Había estado sola desde que era una niña, y no quería morir de esa

manera.

Lo que Amy no sabía era que Joseph ya había verificado exhaustivamente

todos sus antecedentes, sabía que era huérfana, y tenía ideas mucho más

grandes en mente que sólo un puesto de asistente ejecutiva. Él estaba

buscando una potencial nuera.

—Amy, ha sido un verdadero placer hablar contigo hoy. Eres mi última

entrevista, así que con seguridad puedo decirte que el empleo es tuyo si te

gusta.

Amy miró de vuelta a Joseph en completo estado de shock. Ella no había

esperado oír nada sobre el empleo durante al menos una semana, por lo que

se encontró sin palabras. Él sonrió mientras esperaba a que ella recobrara

la compostura.

—Uhm... gracias, señor Anderson. Yo... Por supuesto, me quedo con el

trabajo —tartamudeó ella, olvidándose por completo de su solicitud de

llamarlo por su nombre de pila.

—Eso es grandioso. Bienvenida a la Corporación de la familia Anderson...

Amy regresó de nuevo a la realidad cuando el ascensor sonó anunciando

su llegada.

No estropees este trabajo, Amy.

Si todo sale bien, podrías tener ese hijo. Podrías estar completamente

segura dentro de un año.

Con sus últimas palabras de ánimo a sí misma, ella respiró hondo y

esperó a que se abrieran las puertas.

Cuando llegó al piso veinticinco, estuvo paralizada momentáneamente por

el miedo. Era la oficina más hermosa que jamás había visto. Las puertas

daban paso a un vestíbulo enorme, con una mesa redonda de madera de

cerezo. Detrás del escritorio había una rubia impresionante, quien parecía

Page 13: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

3

ser mucho más eficiente de lo que Amy esperaba ser. Columnas de mármol

blanco flanqueaban la puerta de entrada, la que llevaba a las oficinas.

Exquisitas pinturas colgaban de las paredes, añadiendo una profundidad

de colores cálidos. En la esquina había un área con muebles de cuero y

una mesa de café. Una lámpara araña que actuaba como pieza central se

elevaba por el techo. Se sentía cada vez más anticuada e inadecuada

mientras avanzaba por la habitación.

—¿Puedo ayudarle? —le preguntó la mujer a Amy.

Amy salió de su parálisis temporal y caminó hacia ella.

—Sí, soy Amy Harper. Soy la nueva secretaria ejecutiva para el señor

Anderson. Empiezo hoy —concluyó ella con la máxima confianza que pudo

reunir.

La mujer la miró fijamente durante un momento antes de tomar el

teléfono.

—Señor Anderson, tengo a Amy Harper aquí, dice que es su nueva

secretaria ejecutiva. —Hizo una pausa por unos momentos—. Está bien…

Sí, señor.

Colgó el teléfono y se volvió hacia Amy.

—El señor Anderson dice que ya cuenta con una secretaria ejecutiva y que

no ha contratado a nadie nuevo. También dijo que si usted es una

reportera tratando de averiguar acerca de alguna historia sobre su familia,

todas sus respuestas son “sin comentarios”. —Miró con desdén a Amy y

luego dijo—: Que tenga un buen día, señora Harper.

Ella no le dio a Amy otra mirada. Ella se volvió hacia su ordenador y se

comportó como si Amy no estuviera en la habitación. En lo que a ella

concernía, Amy fue despedida.

—Um, perdón. —Amy miró la placa de identificación de la secretaria—,

Shelly, fui entrevistada la semana pasada por el señor Anderson. Me dijo

que viniera a la oficina a las ocho en punto, así que es posible que desee

que pase, si sólo puedes volver a intentarlo —dijo ella un poco más

potente. Shelly alzó la mirada, como si le impactara mucho que la mujer

inquietante todavía siguiera allí.

Page 14: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

4

En ese momento, sonó el ascensor y entró una mujer mayor sonriendo a

través de sus ojos azules.

—Tú debes ser Amy. Lo siento, llegué tarde. Me quedé atrapada detrás de

un accidente de autos —dijo la mujer mientras se acercaba—. Mi nombre

es Esther, y voy a estar trabajando contigo esta semana… una vez que

estés capacitada, estarás por tu cuenta. Joseph me llamó y me hizo saber

que encontró mi reemplazo perfecto —dijo con humor en su voz.

Amy respiró hondo, y sintió alivio al saber que el trabajo no estaba sólo en

su imaginación.

—Es muy bueno conocerte, Esther. Estaba un poco nerviosa cuando

Shelly dijo que no tenía trabajo —concluyó ella, sin siquiera mirar a la

secretaria.

Esther miró a la mujer en cuestión con desaprobación.

—Ella contesta los teléfonos aquí temporalmente y no sabía que me estoy

retirando. Lo siento por la falta de comunicación —dijo Esther. Era obvio

que no había amor entre ellas dos.

—Camina conmigo, y te voy a mostrar tu nueva oficina mientras te hablo

un poco acerca de la historia de esta maravillosa compañía. El edificio

original fue creado hace poco más de cien años atrás, pero la ciudad ha

crecido y muchas instalaciones han sido añadidas desde entonces. El

abuelo de Joseph, Benjamín, comenzó la Corporación Anderson con poco

más que una oración y unos pocos dólares. Como estoy segura que tú

sabes, su trabajo duro valió la pena. Ahora somos una empresa a nivel

mundial, con oficinas en todos los Estados y en todo el mundo.

Joseph fue el próximo Director Ejecutivo electo después de la muerte de

Benjamín, pero su hijo, Lucas, se hizo cargo del puesto el año pasado, y

sin duda seguirá sus pasos. Él es un hombre brillante, y estoy segura de

que te encantará trabajar para él.

—Tengo que ser honesta, todo esto es un poco abrumador. Quiero decir, la

historia de esta familia rica, la cantidad de negocios que tienen, incluso el

edificio en sí. No sé cómo un hombre hace un seguimiento de todo —dijo

Amy con asombro.

—Oh, se necesita un equipo completo, cariño, créeme. No te pongas

nerviosa por nada. La forma de mantener la cordura en este lugar caótico

Page 15: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

5

es simplemente hacer una tarea a la vez. Mira la imagen más pequeña, y

antes de que te des cuenta, el día terminara y habrás logrado mucho más

de lo que imaginabas —le aseguró Esther.

Caminaron por el pasillo y a través de una puerta de roble grande hacia

una oficina masiva. ¿Era todo en el edificio hecho a una escala mucho más

grande que una casa normal? Había ventanas del-piso-al-techo contra la

pared del fondo, dejando entrar el brillo de luz de la mañana. Ella

agradeció la luz natural.

En el centro de la habitación había una enorme mesa de tres lados. En la

superficie había una computadora de último modelo. Había cajas en el

suelo. Dos sillas fueron puestas delante de la mesa, y un sillón grande

detrás de éstas.

Una biblioteca ocupaba la mayor parte de la pared, los estantes alineados

de arriba a abajo con un montón de títulos.

Amy esperaba que no le hicieran leerse todos los libros en un período corto

de tiempo. Esperaba que sólo estuvieran allí, ya sea por decoración o para

cuando se necesitara una respuesta específica. Aunque, gracias a la

internet, podría buscar todo lo que necesitara mucho mas rápido.

La luz natural inundó la habitación desde el suelo hasta las ventanas del

techo alineadas en la pared del fondo, detrás del escritorio. Amy estaba

agradecida por las ventanas descubiertas, si se estresaba demasiado,

podría tomar un minuto para admirar a la increíble ciudad de Seattle, así

su estrés disminuiría. Realmente era una oficina ideal.

—Entra. Entra. Toma asiento. Te voy a mostrar lo que necesitas para

empezar y, antes de que te des cuenta, serás excelente por tu cuenta, y no

necesitarás mi ayuda —dijo Esther amablemente.

—Tengo mis dudas acerca de esto, pero me alegro de que sea usted la que

me entrene. Es muy agradable.

—Gracias, Amy. ¿Te importa si te llamo por tu nombre de pila? Nunca he

sido buena con las formalidades. Siento que un entorno de oficina debe ser

agradable, y que realmente debemos saber con quiénes trabajamos, eso

hace una gran diferencia. Joseph se convirtió en un querido amigo mío, al

igual que su bella esposa, Katherine. He visto crecer a sus hijos en

apuestos jóvenes, y he sido tratada como parte de su familia. Es algo muy

bueno, también, porque hay semanas en que verás mucho más esta

Page 16: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

6

oficina que tu propio hogar. Necesitarás una relación de trabajo saludable

con tu jefe.

—Me encantaría mantener un clima informal. Joseph me dijo lo mismo

durante la entrevista, y no sabía cómo responder, pero estoy empezando a

ver que este lugar no es lo que yo pensaba que sería. Me esperaba una

plantilla rígida y trabajo sin fin —dijo Amy. Hasta se dio cuenta de lo que

dijo, y rápidamente trató de corregirlo.

—Yo no estaba tratando de decir que el trabajo duro es malo, o ser

profesional es algo negativo. Yo sólo…

—No es necesario dar explicaciones, Amy —interrumpió Esther—.

Entiendo exactamente lo que estás diciendo. Antes de que yo tuviera la

suerte de conseguir un trabajo con Joseph, trabajé para una gran

inmobiliaria en el otro lado de la ciudad. El jefe era grosero conmigo y con

sus clientes, nunca sonreía a nadie, y no se preocupaba por las personas

que trabajaban para él. Él sólo se preocupaba por sus ganancias. Hay una

gran cantidad de empresas como esa, pero esta no es una de ellas. Ellos

esperan mucho de ti, pero también están dispuestos a compensar el

trabajo. Ellos tratan a su personal, desde las posiciones más bajas a las

más altas, con respeto. Los beneficios son casi alucinantes, pero pronto te

darás cuenta. Ellos ahorran mucho dinero al tener un índice de rotación

de trabajadores muy bajo, y casi nunca sufren en las finanzas, ya que

tienen una oferta de negocios para el cliente muy valorada en todas las

áreas de la compañía. Incluso en tiempos económicos difíciles, no sólo

sobreviven, sino prosperan.

Amy se relajó mientras escuchaba a Esther. La mujer debería ser una

reclutadora para la corporación, aunque no necesitaran una. Antes de ese

momento, Amy no se había dado cuenta de lo afortunada que era al haber

conseguido ese puesto de trabajo. No importaba, sin embargo. Ella iba a

trabajar duro, no importa cuanto, no había otra manera.

Las dos mujeres trabajaron juntas el resto de la mañana. Amy se sentía un

poco abrumada, pero disfrutaba de la compañía de Esther y estaba

cogiendo el ritmo de algunas de las tareas que estaba haciendo. Además,

ella realmente disfrutaba de la compañía de Esther. Ellas trabajaron muy

bien juntas, y a Amy le hubiera gustado tener más de una semana de

entrenamiento con ella. Amy no tenía madre y tendía a disfrutar de la

compañía de las mujeres mayores, especialmente cuando eran amables y

solidarias.

Page 17: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

7

Esther dejó que Amy trabajara en un proyecto mientras ella limpiaba el

correo electrónico. Amy se alegró al descubrir que era capaz de hacer la

tarea asignada sin pedir ayuda. Se sentaron en un silencio cómodo, y

trabajaron durante un par de horas antes de ser interrumpidas.

—Esther, necesito esos informes, por favor, y, ¿puedes cancelar mis citas

para el resto del día? Tengo que ir a casa de mi padre. —Amy alzó la vista

mientras el hombre más impresionante que jamás había visto entró por la

puerta. Él estaba mirando un papel que tenía en la mano, lo que le dio

tiempo para observarlo secretamente desde la cabeza hasta los pies.

Lo primero que notó fue su estatura. Tenía que ser por lo menos de un

metro noventa, con amplios hombros. Los músculos ágiles que se podían

ver perfectamente, incluso a través de su traje de negocios oscuro,

obviamente hecho a la medida, lo que claramente acentuaba su bronceado

dorado. El conjunto se completaba con una corbata floja, que lo hacia lucir

como si acabara de salir de la portada de la revista GQ.

Tenía el pelo castaño oscuro y parecía como si hubiera estado corriéndole

la mano toda la mañana. Luego de unos segundos, él por fin levantó la

mirada, y sus profundos ojos azules observaron a unos asustados ojos

verdes.

—Lo siento, Esther. No me di cuenta de que había un cliente aquí. Hola.

Soy Lucas Anderson —terminó él y le tendió la mano a ella.

Amy descubrió que no podía hablar, y lo vio levantar las cejas

inquisitivamente. Su rostro se volvió una sombra agradable de color rojo, y

entonces finalmente rompió el contacto visual.

Ella salió de su trance, dándose cuenta de que la estaba esperando para

presentarse, por lo que se levantó para darle la mano.

—Hola, soy Amy Harper.

Amy se quedó completamente paralizada en el lugar donde estaba cuando

sus dedos se cerraron alrededor de los de él, quedándose sin aliento.

Page 18: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

8

Capítulo 2 Traducido por liiaa!! & Alyshia Cheryl

Corregido por Xhessii

uando sus manos se tocaron, Lucas sintió una oleada de

adrenalina a través de su cuerpo, dirigiéndose directamente a su

ingle. Él le apretó la mano, tirándola un poco, no lo suficiente

como para botarla, pero lo suficiente para que ella lo sintiera. No le

gustaba esta repentina atracción instantánea, ni un poquito.

Era hermosa, sí, pero también lo fueron muchas otras mujeres que

estuvieron con él, aunque ninguna tenía el poder de electrificarlo con un

simple toque.

Lo que acaba de ocurrir con Amy era una novedad para él.

Una mirada llena de emociones cruzó el rostro de Amy, Lucas se vio

fascinado por sus expresiones.

Él era conocido por su habilidad para leer a una persona. Era la forma en

que tuvo tanto éxito en el mundo corporativo. La mujer parecía estar

pasando por una gran variedad de emociones, desde nerviosismo al deseo

y todo lo que ella hacía era mirarlo. Él quiso acercarse más, apretarla

contra él, y besar esos deliciosos labios rosados, pero de alguna manera se

las arregló para alejar esos pensamientos.

Había trabajo que hacer, un trabajo importante. Desde luego, no tenía

tiempo para jugar con aquella mujer, obviamente inocente.

Lentamente, Lucas se volvió hacia Esther, liberando la mano de Amy al

mismo tiempo.

—Cuando tu invitada se vaya, pasa a mi oficina y agarra el papeleo en mi

escritorio. Tengo varias cartas que necesito que envíes hoy, y unas cuantas

otras tareas que quiero que estén listas antes de las cinco.

—¿No has hablado con tu padre, Lucas? —preguntó Esther, deteniéndolo.

—¿Hablar sobre qué?

C

Page 19: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

9

—Les he enviado mi renuncia el mes pasado, y tu padre dijo que quería

contratar a una asistente nueva —indicó.

—Te dije en ese entonces que yo necesitaba que te quedaras por más

tiempo. Supuse que el asunto estaba resuelto —dijo con demasiada

dureza.

—Lucas, no te atrevas a usar ese tono de voz conmigo. No lo olvides, te he

visto correr con nada más que un pañal. Sabías que cuando tu padre se

jubiló estaría dejándote tan pronto como pudiera, y que me quedé para

asegurarme de que tuviéramos una transición sin problemas, pero ahora

es mi turno para jubilarme. Me encanta esta empresa, pero, al igual que tu

padre, creo que a veces lo mejor es seguir adelante con las cosas y traer

una nueva generación.

—Lo siento por el malentendido. ¿Puedes trabajar un mes más para que

pueda encontrar un reemplazo adecuado para que tome tu posición? Voy a

doblar tu salario, sabiendo que es un inconveniente —declaró él, tratando

de olvidar que Amy estaba en la habitación.

—Tu padre ya realizó las entrevistas, y Amy es tu nueva ayudante. La he

estado entrenando toda la mañana, y está haciendo un trabajo

extraordinario —finalizó Esther y le dio unas palmaditas en la mano de

Amy.

Su mirada se volvió de inmediato a la mujer en cuestión, la única que lo

había encendido con nada más que el toque de sus dedos. No había forma

posible de que pudiera trabajar para él, ni siquiera una oportunidad.

* * * *

De repente, Amy era el objeto de su mirada intensa. En el momento en que

él puso de nuevo sus helados ojos azules en ella, sintió que su estómago se

derretía. El hombre tenía el suficiente calor, un calor que llenaba sus ojos,

para que fueran considerados como un incendio peligroso. Ella nunca

había reaccionado tan fuertemente a nadie antes y no estaba contenta con

los sentimientos desconocidos que la inundaban.

Ella trató de enderezar sus hombros y poner una expresión de

indiferencia, pero estaba segura de que no lo estaba consiguiendo.

Page 20: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

0

—Voy a hablar con mi padre acerca de esto, pero debería haber sido

informado de las entrevistas. No se sienta demasiado cómoda en su nueva

posición, señorita Harper —habló con la máxima autoridad, a

continuación, pasó por la puerta, cerrándola un poco más fuerte de lo

necesario.

—Pensé que sabía que me habían contratado. Él ni siquiera sabía que te

estás yendo —dijo Amy con aprehensión en su voz. Ella podría estar

perdiendo su trabajo soñado antes de incluso de empezar.

—Ahora, no te preocupes por nada, Amy. Todo va a estar bien.

—Sé que has trabajado aquí durante mucho tiempo, Esther, pero la

expresión en su rostro no era la de un hombre feliz. Yo no me adelantaría

tan pronto a una jubilación si fuera tú —dijo Amy, tratando de hacer una

broma, aunque sonó seria.

—Te darás cuentas de que Lucas no es tan desagradable como parece.

Está irritado en este momento, pero se le pasara pronto. Vamos a terminar

nuestro trabajo para el día de hoy. Para mañana este asunto se aclarará y

será olvidado —prometió Esther.

Amy tenía sus dudas, pero no tenía sentido preocuparse por ello. Daría lo

mejor de sí misma, y así tal vez su posición estaría a salvo.

Ellas se absorbieron en su trabajo, y el incidente fue puesto en un

segundo plano… aunque seguía ahí, pero lo dejarían pasar por el

momento.

* * * *

—Papá, ¿cómo esperas que dirija esta empresa cuando tú estás

interviniendo y haciendo cosas sin avisarme? —Lucas se paseaba delante

de su padre, de un lado para otro a través de la sala de estar de la casa de

sus padres.

—Bueno, hijo. Cuando me fui, te dije que Esther se retiraría una vez que te

hubieras establecido. También dije que me encargaría de su reemplazo. No

es mi culpa que lo olvidaras. Y no es culpa de Esther que no tomaras en

serio su renuncia.

Page 21: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

1

—Me tomo todo en serio. Por lo menos, podrías haberme dicho de las

entrevistas, así hubiera participado en ellas. Tendrías que haberme dejado

encargarme de esto.

—Sé que tú estás más que capacitado para hacer tu trabajo. Sin embargo,

cuando te hiciste cargo, prometí dejar todo resuelto antes de mi partida.

Éste fue el último punto que tuve que resolver —dijo Joseph, dejando a

Lucas sin argumento alguno.

—Papá, sé que estás tramando algo. Aún no puedo averiguar lo qué es esta

vez, pero soy capaz de contratar a mi propio personal —dijo él con

frustración. Era mucho más difícil discutir con el hombre cuando él estaba

siendo razonable—. No se ve exactamente bien cuando el presidente de la

compañía no sabe lo que está pasando en sus propias oficinas —concluyó

él.

—Hijo, entrevisté a una treintena de personas, y la señorita Harper era,

por lejos, la candidata más calificada. Créeme, no tendrás ningún

problema con ella. La he verificado exhaustivamente antes de enviarla a ti.

—Su hijo no tenia la menor idea de que en realidad él estaba verificándola

como su futura nuera y lo que menos le importaba eran sus capacidades

como asistente ejecutiva, a pesar de que ella lo había hecho muy bien en la

universidad y lo más probable es que hiciera un trabajo extraordinario en

la oficina. Joseph sintió que Amy era la candidata perfecta para Lucas.

Ella era inteligente, fuerte, y había pasado por mucho en su corta vida.

Ella necesitaba una familia, y Joseph necesitaba una nuera. Eran la

pareja perfecta. Lucas no tardaría en darse cuenta de eso.

—Me has dejado con pocas opciones. No creo que haya forma de hacer

cambiar de opinión a Esther, ahora que ya ha tomado una decisión. Está

bien. Veré cómo ella funciona, pero si no trabaja sólidamente conmigo,

entonces la despediré y la siguiente persona será alguien que yo

encuentre, no tú —dijo él.

—Por supuesto, Lucas —accedió rápidamente su papá, queriendo cambiar

de tema—. Ahora, sigamos con otro negocio —Joseph sabía que no podía

darle demasiado tiempo a Lucas para pensar en el asunto de la familia.

Era un chico inteligente, y Joseph no quería que él averiguara lo que

estaba haciendo. Si Lucas tenía idea de cuánto Joseph quería que sus

hijos se casaran, Lucas saldría corriendo por las colinas antes de que

tuviera la oportunidad de enamorarse de Amy. Y eso no estaría bien para

los planes de Joseph. Él quería esos nietos, y cuanto antes, mejor.

Page 22: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

2

Los dos pasaron el resto de la tarde repasando el nuevo paquete de

beneficios que Joseph había modificado. Joseph se había retirado de los

negocios, pero a él le gustaba seguir participando. Iba a volverse loco si

dejaba la empresa por completo. Le había prometido a su esposa Katherine

que no trabajaría setenta horas a la semana nunca más, pero él nunca

accedió a olvidarse de la corporación que su abuelo había comenzado. Ella

lo entendió y apoyó su decisión de ser un miembro activo en el

departamento de recursos humanos. Después de todo, ella tenía un

corazón enorme. Fue por eso que la quería mucho, incluso después de

treinta y cinco años de matrimonio.

* * * *

Cuando Lucas dejó la casa de su padre, su frustración había disminuido

considerablemente. Cuando Lucas volvió a la oficina, todo el mundo se

había ido. Mientras se dirigía a su oficina, podía oler un persistente olor a

vainilla en el aire, apenas una indirecta, pero suficiente para recordarle a

su nueva empleada. Él no creía que su nueva contratación se

desempeñaría bien. Tenía el presentimiento de que su nueva empleada iba

a ser nada más que un problema para él. Lo mejor para ambos sería

simplemente despedirla. Sabía que su padre se enfadaría, pero tendría que

apoyarlo.

Mientras estaba de pie en el umbral de las puertas que conectaban sus

oficinas, luchó consigo mismo al recordar su expresión inocente, tan

abierta y legible.

Con una firme resolución, él se irguió y dio la espalda a la habitación,

cerrando la puerta silenciosamente detrás de él. Estaba en control de sus

emociones, y no había forma de que una extraña se metiera bajo su piel.

Las mujeres iban y venían en su vida, sirviendo a un propósito esencial, y

saliendo sin hacer ruido. Su nueva empleada no iba a conseguir la ventaja

y el control de cualquier parte de él, ciertamente no de sus emociones.

Con esa determinante resolución, se acercó a su escritorio y cogió un

archivo. Tenía mucho trabajo para terminar esa noche. Él se recostó en su

sillón y comenzó a leer un archivo, quedándose dormido antes de que se

diera cuenta. Eso no era inusual. Él dormía en la oficina tanto como lo

hacía en su propia casa.

Page 23: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

3

Lucas pasaba a menudo las noches en la oficina después de quemarse las

pestañas. Siempre había puesto al trabajo por delante de cualquier placer.

Él había sabido desde muy joven que iba a hacerse cargo de la empresa

familiar. Estaba en su sangre.

El último pensamiento de Lucas, antes de sucumbir al sueño, fue el de

unos vivos ojos verdes llenos de hambre.

Page 24: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

4

Capítulo 3 Traducido por Kachii Andree & Alyshia Cheryl

Corregido por Alicadi

Creo que estás lista para pasar unos pocos días por tu

cuenta. Solo lláma por teléfono por si me necesitas. Pero

creo que te voy a ayudar en las playas al sur de California

—dijo Esther mientras recogía su chaqueta y su bolso.

Era la segunda semana de Amy y lo estaba haciendo mucho mejor, pero el

pánico la consumía ante la idea de que Esther la dejaría sola. Bueno, no

exactamente sola por su cuenta, Lucas no era más que un pedazo de

madera a la distancia.

No podía decir que era grosero, pero tampoco era amable. Sus azules ojos

la mantenían cautiva mientras ella y Esther se sentaron delante de él en

su escritorio, con su tono de mando, pero siempre profesional. Ella todavía

lo veía sonriéndole.

—Voy a estar bien Esther pero te voy a extrañar —Amy finalmente le

aseguró.

—Te voy a extrañar demasiado querida, pero no te preocupes por nada.

Voy a estar de vuelta el lunes para comenzar con tu horario de

entrenamiento final. Estás entendiendo todo esto de forma mucho más

rápida de lo que yo hice, y no era tan técnico cuando estaba empezando.

Creo que eres una gran adición para el equipo.

—Eres demasiado buena para mí. Asegúrate de llenarme una botella con

arena, así al menos puedo fingir que de vez en cuando voy a una playa

cálida —dijo Amy con una sonrisa.

—No pasará mucho tiempo antes de que estés volando por todo el mundo.

Parte de tu trabajo es viajar a las diferentes divisiones de la corporación

con Lucas. Algunos de esos lugares son increíbles. Es muy difícil trabajar

en una suite cuando puedes ver el sol brillando sobre una hermosa playa

blanca. Joseph siempre fue bueno en asegurarse de que tuviera un poco

de diversión. Sin embargo, estoy segura de que Lucas lo hará de la misma

manera —le aseguró Esther.

Page 25: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

5

Amy tenía serias dudas al respecto, Lucas no parecía estar familiarizado

con cualquier cosa que tuviera que ver con diversión. La idea de verlo en

un traje de baño, inmediatamente envió mariposas a su estómago.

—Sí, probablemente tengas razón —respondió Amy por fin, dándose

cuenta de que Esther la miraba de manera extraña. No ayudaba que su

respuesta fuera un poco sin aliento.

Deja de soñar despierta acerca de tu Jefe. El hombre que te odia tal como

eres. Tú de ninguna manera, necesitas cambiar esta situación que empeora

por desearlo a él —se reprendió Amy.

—Muy bien entonces, ahora me voy. Que tengas un gran día —dijo Esther

antes de salir de la oficina.

Amy se sentó en su escritorio, un poco perdida. Ella tenía sus

asignaciones, pero su primer día sola...

Después de un par de minutos ella se fue. No era como si pudiera

estropearlo todo.

Un par de horas más tarde, se sorprendió cuando su intercomunicador

zumbó.

—Amy, te necesito en mi oficina.

Lucas fue breve y al grano, nunca agregó más palabras de las que

necesitaba. Era un poco desconcertante. Ella tomó su libreta y

rápidamente se dirigió a la puerta. Antes de girar el pomo, tomó un aliento

fortificante y luego entró.

—Buenas tardes, Sr. Anderson.

—Necesito que tomes unos memos para mí, luego escribes las cartas. Los

necesito de vuelta en una hora. Me han llamado para una emergencia y no

sé cuánto tiempo estaré fuera. Normalmente, vendrías conmigo, pero como

estás en formación todavía, quedas fuera del asunto —dijo él con tono

cortante.

Ella se movió sobre sus pies sintiendo como si acabase de recibir un

regaño por ser nueva. Ella sabía que no debía decir nada a cambio, pero se

sentía como pidiendo disculpas, sin saber por qué.

—Sí señor —respondió ella mientras se sentaba frente a él.

Page 26: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

6

Lucas tuvo que mirar su computadora mientras él maldijo su reacción

hacia Amy, de cómo su esencia se apoderaba de él. Si no ganaba cierto

control sobre la reacción de su cuerpo hacía ella, él nunca lograría

conseguirlo a través de las próximas semanas, y mucho menos siendo un

empleo de largo plazo. Decidió en ese momento que si un nuevo asistente

era contratado por él, debería ser hombre o una mujer mucho mayor.

Sabía que había estado trabajando por muchas horas, pero obviamente,

era hora de que llamara a una de sus amigas. Necesitaba encontrar alivio

antes de que él terminara haciendo algo estúpido como lanzando a su

nueva asistente sobre su escritorio.

No era que él fuera un adolescente lleno de hormonas. No podía entender

por qué diablos estaba reaccionando tan fuertemente por ella. Sí, ella era

atractiva, pero había visto mejores mujeres, que eran mucho más pulidas,

y aun más, que conocían las puntuaciones.

Él tenía cero dudas de que su ayudante no era el tipo de mujer de una sola

noche... Y ese era el único tipo de mujeres con las que él salía. No tenía

tiempo ni deseo para una relación seria.

Lucas se recompuso, entonces dictaba las notas que quería a máquina. Si,

esto era lo que hacía bien... Los negocios. La mayoría de las personas

dejan que sus trabajos los gobiernen, causándoles estrés, pero eso no le

pasaba a Lucas. Él prosperaba en el mundo de las altas finanzas.

Finalmente alzó la vista. Se le cerró la garganta por un momento mientras

la miraba con furia, al tiempo que ella escribía para mantenerse al

corriente con él. El mismo pedazo de pelo obstinado que siempre estaba

escapando de su moño, estaba ahora acariciando su mejilla, al final

haciendo cosquillas en la comisura de su boca, prácticamente enmarcando

sus deliciosos labios rosados.

Su entrepierna estaba apretada mientras pensaba en esos labios

deslizándose por su piel, sacando su lengua y enfriando su cuerpo

acalorado.

Cuando ella alzó la mirada, sus ojos se abrieron, las emociones

intermitentes a través de su cara expresiva. El hecho de que no podía

ocultar nada no le servía de mucho. Él sabía que su empleada estaba tan

atraída por él como él de ella.

Page 27: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

7

Su entrepierna palpitaba mientras sus miradas se encontraron, ninguno

de ellos parecía capaz de alejarse.

Sus hermanos tendrían un momento divertido si vieran lo que su diminuta

asistente estaba haciendo con él. Siempre les gustaba burlarse de él por

ser siempre de acero, por ser siempre el que está en control, incluso desde

que eran adolescentes.

Conseguiría una verdadera patada por su falta de control debido a una

pequeña mujer.

—Eso es todo —dijo finalmente, sabiendo que su voz era dura, pero no era

capaz de detenerlo. Vio como ella saltó de su silla y luego como sus

mejillas se ruborizaron con una sombra roja tentadora que le hacía querer

decir “al diablo con todo” y solo tirar de su regazo.

—Uhm… está bien. Yo… uhm… voy a tener esto a tiempo —tartamudeó

con voz temblorosa antes de colocarse de pie.

Vio como poco a poco se abrió paso de su oficina con inestabilidad en sus

pies. El suave balanceo de sus caderas no ayudaba en la situación, no en

todo.

Finalmente, él se colocó de pie necesitando salir de su oficina. Tomó su

maletín de deporte y salió por su entrada privada. Se sintió aliviado por

dejar la oficina a tiempo. Para cuando regresara, él sabía que tendría sus

hormonas bajo control.

Amy salió del ascensor con un rebote adicional en su paso. ¿Qué diferencia

hay? Es sólo un mes —pensó ella con una sonrisa sincera. A parte de la

tensión superior que tenía con Lucas, ella realmente no pasaba mucho

tiempo con él, por lo que sus días eran soportables. Le encantaba su

trabajo y se sentía segura en el desempeño de sus asignaciones, incluso

sin Esther a su lado. Se sentía bien, muy bien.

—Amy, ven y toma un poco de torta —escuchó a Esther llamarla—. Es mi

fiesta de despedida. —Amy alzó la vista para encontrarse con cientos de

empleados que llenaban la sala de conferencias. Todo el mundo estaba

charlando, comiendo y parecían tener un buen momento.

—Buenos días Amy, he escuchado cosas maravillosas acerca de ti ¿Cómo

te va? —Esto vino de Joseph segundos después de que se acercara y

pasara un brazo por sus hombros.

Page 28: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

8

—Es muy bueno Sr. Anderson, gracias por darme esta oportunidad —dijo

ella tímidamente. El hombre todavía era intimidante, pero con su sonrisa

amable y sus ojos amistosos, no era difícil relajarse en su presencia.

Estaba creciendo su cariño por el gigante gentil.

—Tonterías, hija mía, ganaste esta posición por estudiar mucho y tener

una ética de trabajo excelente. Esther dijo que te estás ajustando muy

bien y haciendo un trabajo fantástico. —Se rió con ganas—. Ven conmigo.

Quiero que conozcas a algunos de los otros empleados. —Envolvió su

brazo en el suyo y la arrastró por la habitación durante varios minutos,

por lo que estuvo en decenas de presentaciones, antes de detenerse frente

a un hombre bien vestido—. Mike, quiero que conozcas a Amy. Ella es la

nueva asistente ejecutiva de Lucas —dijo Joseph en voz excesivamente

alta, provocando que varios jefes dieran vuelta en su dirección. Amy podía

sentir su cara colocándose más caliente, no le gustaba la sensación de ser

observada.

—Encantado de conocerte, Amy —dijo Mike mientras sus labios se

curvaron.

Él extendió la mano y tomó la de ella, sus pulgares acariciando su

muñeca. Ella no tenía muchas citas, así que no estaba al tanto de las

señales sutiles que estaba enviando él. Ella sintió el calor de su rostro un

poco más.

—Mike trabaja en las oficinas de una planta más abajo como asistente.

Pensé en presentarlos por lo que si tienes alguna pregunta, él puede

responderlas. Voy a dejarlos para que charlen —dijo Joseph con una

sonrisa antes de marcharse.

Después de un momento incómodo, Amy se encontró disfrutando de la

compañía de Mike. Era un buen tipo con un sentido del humor y una gran

cantidad de conocimientos.

Mike era el tipo de hombre que normalmente le interesaba a Amy. Era de

aspecto medio, no alguien a quien pondrías un calendario, pero que

definitivamente le daría una segunda mirada. Era ingenioso y su sonrisa

era atractiva. Aun así, él no revolvió su estómago, o hizo que sus mejillas

se colocaran de color. Él estaba a salvo.

—Conozco un pequeño restaurante justo bajando la calle. ¿Te gustaría

cenar el viernes?

Page 29: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

9

Amy miró al apuesto hombre y deseo sentir aunque sea la más mínima

chispa de interés en él, pero no lo hizo. Pero ella realmente no quería salir

con nadie en este momento. Estaba concentrada en su trabajo y tenía

metas en mente. No tenía tiempo para citas, pero no quería herir sus

sentimientos. Estaba entre la espada y la pared.

* * * *

Al otro lado de la habitación, Lucas fulminó con la mirada a su nueva

empleada. Ella nunca sonreía de esa manera cuando él hablaba con ella.

Por supuesto, estaba normalmente dándole órdenes. Aun así, no le

gustaba la atención que estaba dándole a otro hombre. Realmente no le

gustaba el interés que vio en los ojos de Mike.

A medida que Lucas la miró pausadamente de arriba hacia abajo, pudo

comprender ese interés.

¿Qué creyó su padre que hacía, presentándosela a Mike? Todo el mundo

sabía que él cambiaba de mujer mucho más rápido que cuando se

cambiaba de ropa. Muchas mujeres habían sido engañadas por sus

demostraciones de afecto, pero Lucas sabía que el chico sólo tenía un

objetivo en mente, y Lucas estaba seguro de que Amy no estaba preparada

para las consecuencias de un romance fallido de oficina.

Lucas estaba aun más irritado por preocuparse de eso. Se consoló

pensando que estaba preocupado sólo porque si ella era dejada por Mike,

su rendimiento en el trabajo se vería afectado, por lo tendría que

despedirla. Luego tendría que tomarse un tiempo de su apretada agenda

para contratar a una nueva empleada.

Él estaba a punto de ir hacia allá, agarrarla el brazo y arrastrarla lejos,

cuando su padre se le acercó.

—¿Cómo estás, hombre? —preguntó con demasiada astucia.

—Bien, padre. ¿Y tú? —respondió automáticamente, sin apartar los ojos de

Amy.

Estaba pensando en que la fiesta de la oficina había ido demasiado lejos.

Era el momento de alejar a su empleada de Mike, y volver al trabajo.

* * * *

Page 30: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

0

Joseph estaba pensando que su plan estaba funcionando a la perfección

mientras veía a su hijo lanzando dardos por los ojos a una Amy que reía

con Mike.

Lucas se estaba enamorándose de Amy rápidamente, y él ni siquiera se

daba cuenta. Joseph también pudo llevar todo de forma mucho más

rápida… agilizando las cosas. En el juego del amor, nadie podía perder.

Joseph casi podía sentir el peso de su primer nieto descansando en sus

brazos. No podía imaginar un regalo de Navidad más perfecto para

Katherine y él.

—¿No crees que Amy y Mike se ven bien juntos? Ella parecía algo sola la

semana pasada. He estado preocupado por ella, teniendo en cuenta que no

tiene familia. Ella se ha mantenido en silencio acerca de sus

circunstancias, pero creo que le vendría muy bien un amigo —dijo tan

sinceramente como fue capaz. No había nada como un poco de celos para

hacer que un hombre reaccionara.

—Mike es un canalla. Voy a poner fin a esto. Necesitas dejar de

entrometerse en la vida de las personas, padre —dijo Lucas con enojo.

—Lo siento, hijo. No sabía que estabas interesado en ella. Sabes que un

jefe no debería involucrarse en un romance con su empleada —agregó.

Conocía bien a su hijo. No había nada que le gustara más que un desafío,

y decirle que no podía tener a Amy, lo haría quererla aun más.

—No estoy interesado en ella —dijo Lucas, sin engañar a su padre en lo

más mínimo—. Sólo sé qué tipo de hombre es Mike. Él va a romperle el

corazón, y entonces su trabajo se verá afectado. Estoy sólo pensando en el

ambiente de trabajo.

—¿El trabajo ha sido estresante, Lucas? Pareces algo cansado.

—El trabajo ha estado bien, papá. Es que no me gusta que vengas aquí,

causes un caos con mi empleada, y luego actúes como si todo estuviera

bien. Todavía no estoy muy feliz por lo que hiciste a mis espaldas y la

contratación de Amy, pero ella está haciendo su trabajo realmente bien, y

no tengo tiempo para encontrar un reemplazo en este momento. Tengo

cosas mucho más importantes en las cuales preocuparme. Ahora, si me

disculpas, tengo trabajo que hacer. —Con esas palabras de despedida, él

empezó a caminar en dirección a ella.

Page 31: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

1

Joseph rió para sus adentros, sintiéndose francamente eufórico. Oh sí, su

hijo estaba cayendo con fuerza. Él había escogido a la esposa perfecta para

él.

Se acercó a Esther y le dio un codazo en el brazo para que pudieran

apreciar el espectáculo.

—Sabes, Joseph Anderson, uno de estos días, cualquiera de tus hijos

averiguara todas las acrobacias que haces para manejar sus vidas y no

podrás seguir haciéndolo —dijo Esther con una sonrisa.

—Ah, Esther, ¿cómo me subestimas de esa forma? Soy demasiado astuto

como para ser atrapado.

—Puedes pensar que tienes a todo el mundo engañado, pero no eres tan

listo como crees —respondió ella, aunque sus ojos estaban pegados a

Lucas mientras éste caminaba a través de la habitación…

—Tendremos que esperar y ver…

* * * *

—Amy, tenemos trabajo que hacer —dijo Lucas mientras se acercaba a ella

y Mike. Amy notó que él ni siquiera reconoció la presencia de Mike, y este

hecho aparentemente no pasó desapercibido para el otro hombre,

tampoco. Mike, quien obviamente no quería hacer enojar al jefe, se fue a

escondidas sin palabra alguna.

Amy perdió un poco de respeto hacia él y suspiró para sus adentros.

Luego, se volvió hacia Lucas.

—Sí, señor Anderson. Lo siento, pero todo el mundo estaba aquí y no

estaba segura de lo que se suponía que debía hacer. Me pondré a trabajar

ahora mismo —respondió Amy con su cabeza erguida, y se dirigió hacia su

oficina. Ella no entendía por qué él sonaba tan irritado. Todos estaban en

la fiesta. No era como si la fiesta hubiera sido su idea.

Lucas la siguió hacia la oficina y luego se metió dentro de ésta mientras

ella se sentaba, sabiendo que él aún no había dicho todo.

—No me gustan los romances de oficina. Causan nada más que

problemas, no es bien visto —le informó él en su tono de voz más

Page 32: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

2

imponente, lo que causó que el vello en la parte trasera del cuello de ella

se erizara.

Ella tuvo que contar en silencio hasta diez antes de responder.

—En primer lugar, señor Anderson —dijo ella con los dientes apretados—.

Yo simplemente estaba socializando con otro empleado. Y, en segundo

lugar, que elija tener un romance con alguien no es de su incumbencia. —

Amy se sorprendió por el ácido tono en su propia voz. Era la primera vez

que ella le había hablado así.

De repente, él estaba a sólo unos centímetros de su cara.

—Cuando usted trabaja para mí, va a escuchar lo que digo. Mike es un

mujeriego, y no quiero hacerme cargo de las repercusiones cuando él la

deseche como pan añejo, y créame, lo hará.

Amy inclinó la cabeza hacia atrás alejándola de la suya, su ritmo cardíaco

acelerado. Ella estaba segura de que su corazón latía tanto que era visible

para él, incluso a través de su camisa. Se olvidó por completo de su ira

contra el hombre mientras la necesidad de extender la mano y acariciarlo

la abrumó. Quería a Lucas. Todo en él gritaba a sexo, y si él se apoyaba un

par de pulgadas más cerca y reclamaba su boca, ella le correspondería.

Sabía que era irracional, y debía pensarlo mejor, pero había estado

tratando de esquivar esas oleadas de calor que sentía cada vez que estaba

cerca de él hace semanas y se preguntó si su imaginación hacía justicia a

lo que se sentiría besarlo.

¿Qué tan malo podría ser un beso? Por lo menos, se daría cuenta si todo

era parte de su imaginación o no: las chispas, el deseo y la química.

Durante lo que pareció una eternidad, donde no pudo romper el contacto

visual con él. Sintió calor líquido cerniéndose dentro de ella. Mira hacia

otro lado, desvía la mirada, mira hacia otro lado, se gritó a sí misma hasta

que por fin encontró la fuerza de voluntad para desviar la cabeza,

preguntándose cuánto tiempo habían estado de pie allí cara a cara.

* * * *

Al darse cuenta de lo cerca que él estaba de ella, y también el deseo

intenso que tuvo de besarla sorprendió a Lucas, quien se irguió y se retiró

de su oficina. Antes de que pudiera pensar en ello, él cerró la puerta,

Page 33: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

3

haciendo que las imágenes en la pared se tambalearan. Su cuerpo estaba

duro como una roca y una ligera capa de sudor cubría su frente.

Lucas se apoyó contra la puerta y deseó que su cuerpo volviera a la

normalidad. No había sentido tanto deseo por una mujer desde su época

universitaria. Incluso en ese entonces, sabía que había poseído un mayor

control. Si ella no hubiera roto el contacto visual, él podría haber

terminado tomándola allí mismo, sobre su escritorio, sólo a unos pocos

metros de distancia de cientos de empleados que podrían haber entrado en

cualquier momento. No pudo alejar la imagen mental de ella retorciéndose

debajo de él en la mesa de madera, con su cabello libre del horrible moño.

Era sin duda tiempo de ir al gimnasio y gastar algo de su energía

reprimida.

Tomó su bolso y salió de la oficina, montando en su ascensor privado para

no tener que hablar con nadie. No estaba de humor, y no quería descargar

su frustración en alguien inocente.

Después de un intenso trabajo de dos horas, Lucas todavía se encontraba

duro, había disminuido su frustración, pero no por completo. Cuando

volvió a la oficina, buscó la lista de teléfonos en su computadora. Se quedó

mirando los nombres durante diez minutos, antes de hacer clic en la X y

cerrar la pestaña. Sabía que lo mejor que podía hacer, era llamar a

algunas de las mujeres con las que se encontraba a veces, pero no pudo

hacerlo.

Con un suspiro de disgusto consigo mismo, obligó a su mente a

concentrarse. Tenía trabajo que hacer y no iba a permitir que su cuerpo lo

controlara. Se volvió hacia su ordenador y se puso a trabajar. Evito a Amy

el resto del día, eligiendo comunicarse con ella solamente a través de

correo electrónico. Parecía ser mucho más seguro para ambos.

Page 34: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

4

Capítulo 4 Traducido por Auroo_J & BUTY_MADDOX

Corregido por Alyshia Cheryl

l tiempo pasó volando rápidamente para Amy cuando aprendió

su nuevo trabajo. Después del intenso momento con Lucas el

día de la fiesta, ella había estado asustada por la conservación

de su trabajo como asistente ejecutiva. Afortunadamente, él había sido

bastante profesional respecto a ese punto, en vez de despedirla

inmediatamente.

Lucas estaba fuera la mayor parte del tiempo, y la comunicación se

realizaba a través de correo electrónico.

Lo que no podía entender era por qué eso la molestaba. Ella debería estar

aliviada por tenerlo lejos, sin estar en lo más mínimo molesta cuando él no

estaba cerca.

Ella apenas conocía al hombre y él provocaba todo tipo de emociones

diferentes en su interior. La lujuria estaba sin duda en la parte superior de

la lista. Siempre había sido de las chicas buenas, saltándose ciertas cosas

para estudiar, postergando las relaciones por el trabajo, y guardándose

para el hombre adecuado. Bueno, tenía veinticuatro años y todavía no

había conocido al indicado, o eso se decía a sí misma.

Todavía recordaba cuando escuchaba a las chicas riendo en la biblioteca

de la escuela mientras hablaban de sus citas de la noche anterior. Amy

había sentido una punzada de celos al ver que ellas tenían tiempo para

divertirse, además de estudiar, pero nunca había sentido que se estaba

privando de algo. Un mes en cuartos reducidos con Lucas Anderson, y

todo estaba cambiando.

De pronto se encontró fantaseando con su apuesto jefe, preguntándose

cómo se vería si se aflojaba la corbata un poco, si se desabrochaba el

primer botón de sus pantalones ajustados. Se preguntaba muchas cosas

inapropiadas, y tuvo que detenerse. Tener una aventura con su jefe no era

parte de sus planes para futuro.

E

Page 35: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

5

—Perdona la interrupción, Amy, pero Joseph Anderson está aquí y quiere

verte —dijo Tom a través del intercomunicador, asustándola.

—Iré inmediatamente —dijo ella tras una breve pausa.

—No te preocupes, él ya se dirige hacia tu oficina, cariño.

Lucas había despedido a la recepcionista rubia, emocionando a Amy, ya

que la mujer le había disparado dagas cada vez que entraba y salía de la

oficina. Amy quería gritarle que no estaba interesada en el jefe y que podía

tenerlo, pero de alguna manera se las había arreglado para mantener la

compostura.

El nuevo recepcionista era un gran tipo, y con el jefe fuera, cuando tenía

tiempo libre, ella se sentaba con él, y charlaban de todo. Sólo había estado

trabajando con él durante un par de semanas, y estaba convirtiéndose en

su mejor amigo.

—Gracias por el aviso —dijo ella, luego se enderezó rápidamente antes de

que Joseph llenara la habitación con su presencia.

—Buenos días, Amy. Yo estaba aquí y pensé en pasar y ver cómo estabas.

—Eso es muy amable de su parte, Sr. Anderson, pero estoy bien.

—Creo que voy a tener que visitarte todos los días hasta que te sientas lo

suficientemente cómoda para llamarme Joseph —dijo con una sonrisa

mientras se sentaba, dando la impresión de que se quedaría un rato.

—Está bien, está bien, iré en contra de todo lo que me enseñaron y te

llamaré por tu nombre. Sólo quiero que sepas que eso parece una falta de

respeto para mí —dijo ella, sonriendo. Era difícil discutir con Joseph.

—Puedo ser duro cuando tengo que serlo, pero me he dado cuenta que la

mayoría de las personas responden mucho mejor a un trato amistoso.

Cuando era joven, al igual que mis hijos, tendía a ser un hijo de puta, la

arrogancia irradiaba de mí en oleadas. Mi bella esposa, Katherine, me curó

de eso. Ella nunca me permitió perder el control.

—Su esposa parece una mujer increíble y elegante.

—Eso es cierto. Hemos estado casados por más de treinta años, y le doy

gracias a Dios todos los días por tenerla a mi lado Yo sólo quiero lo mismo

para nuestros hijos —dijo, mirándola directamente a los ojos.

Page 36: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

6

Amy sintió pánico en su interior, como si él estuviera enviándole algún tipo

de mensaje. Ella finalmente se echó a reír, haciendo poco caso a su

comentario. Sólo estaba siendo él mismo, un tipo simpático. Es por eso

que ella disfrutaba tanto de su compañía.

—Estoy segura de que cada uno conoce a alguien en el momento indicado.

Cuando estaba terminando la universidad, en ese entonces en busca de

trabajo, supe que las relaciones eran la última cosa en mi mente. Sus hijos

probablemente sienten lo mismo, especialmente con Lucas haciéndose

cargo de su antiguo trabajo, y sus otros dos hijos haciendo lo que sea que

ellos hagan —terminó ella sin convicción, dándose cuenta de que no tenía

idea de lo que sus otros hijos, Alex y Mark, hacían.

—Oh, esos chicos tienen un montón de tiempo libre. Creo que

simplemente se niegan a casarse porque están demasiado ocupados

jugando. No me preocupa, sin embargo. Se casaran algún día —dijo, como

si estuviera compartiendo un secreto con ella.

—Esa es una actitud positiva.

—He descubierto que la vida es demasiado corta para ser otra cosa que

positiva. Cuando algo no va como lo deseas, entonces tienes que buscar

en otra dirección y hacer un cambio —dijo—. Mira a mi hijo menor, Mark.

Él me echo una mano cuando lo necesite, pero él nunca tuvo la intención

de ser parte de este mundo empresarial. Siguió los pasos de su abuelo y se

convirtió en un hacendado. Sin embargo, no podía ocultar ese gen

Anderson que tenemos para el éxito. Ha hecho que el rancho de la familia

prospere durante su estadía en él. A Alex le gusta viajar por el mundo, y se

ocupa de la mayor parte de nuestro negocio internacional, y es realmente

bueno en eso, también, constantemente trayendo más negocio. Luego, por

supuesto, está Lucas. Él siguió los pasos de su bisabuelo, y los míos

también. Cada uno de nosotros tiene la necesidad de trabajar para ser el

número uno. La única cosa que mis hijos tienen en común, sin embargo,

es que tienen corazones de oro. Cuando se enamoran, será para toda la

vida. Es por eso que han estado esperando mucho tiempo, en mi opinión.

Su voz era hipnotizante mientras hablaba de su familia. Siempre usaba

una voz más grave y fuerte que la de una persona promedio, pero mientras

hablaba de sus hijos, cambió de tono, obviamente mostrando el gran amor

por su esposa e hijos. Amy tuvo que luchar contra la melancolía repentina

de querer recibir parte de ese amor. Una de las cosas que más quería era

una familia. Era algo que le había sido negado, y sabía que cuando

Page 37: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

7

tuviera a sus hijos propios, los amaría tanto como Joseph amaba a sus

hijos. Como le gustaría tener un padre como él, ahí para ella.

Ella sacudió la cabeza, alejando esos pensamientos. Había aprendido hace

mucho tiempo que no debía pensar en lo que no tenía. Era mucho mejor

centrarse en las cosas que podía cambiar, y las que había logrado. No

tenía sentido regodearse en la autocompasión.

Antes de que Amy se diera cuenta, había pasado una hora y se encontró

riendo de otra de las historias de Joseph. Sintió una punzada de

culpabilidad al darse cuenta de la cantidad de tiempo que había pasado

con él en lugar de trabajar. No debía sentirse mal, ya que ella fue

sorprendida al máximo, pero aun así...

—Yo podría sentarme aquí y hablar contigo durante todo el día, querida,

pero será mejor que te permita volver a tu trabajo. Gracias por complacer a

un anciano durante un tiempo —dijo Joseph mientras se levantaba.

—El placer ha sido mío, Joseph. Gracias por tomarte un tiempo de tu

apretada agenda para charlar. Podría olvidar todo lo demás mientras estás

hablando —dijo ella con sinceridad.

—Eres una verdadera dulzura, Amy. Estoy muy contento de haber tenido

la suerte de encontrarte —dijo, y entonces, para su sorpresa, en lugar de

estrecharle la mano, extendió los brazos y la abrazó. Amy tuvo que luchar

contra las lágrimas repentinas que querían brotar mientras sus manos

suaves llegaron a su alrededor y el olor reconfortante de menta invadió sus

sentidos.

Gracias a Dios que no esperaba que ella dijera algo más. Él la soltó y salió

de la habitación. Se dejó caer en su silla, sin saber cuánto tiempo se quedó

mirando la puerta vacía antes de que el timbre sonara de nuevo.

—Amy, cariño. Es hora de almuerzo. Tengo que salir de este lugar antes de

que me vuelva loco. Saldremos a comer pizza extra grasosa y refrescos de

soda. —La voz energética de Tom se oyó a través de su altavoz.

—Estoy en camino. Dame cinco minutos para terminar este mensaje para

el Sr. Anderson, y entonces, yo soy toda tuya.

Amy sabía que probablemente debería quedarse en la oficina durante el

almuerzo para ponerse al día, teniendo en cuenta que había pasado

demasiado tiempo con Joseph, pero necesitaba salir y dar un paseo.

Page 38: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

8

Joseph había despertado muchas emociones en su interior, y estar

rodeada de un muy enérgico Tom, le ayudaría a volver a Tierra.

Amy salió de su oficina, sonriendo, y Tom tiró su brazo alrededor de su

cintura mientras se dirigían a los ascensores. La puerta se abrió justo

cuando estaba inclinado hacia ella en lo que parecería ser un momento

íntimo para un observador. Los dos estaban en esa posición, y para suerte

de ella, justo cuando Lucas entró por las puertas abiertas.

—¿Qué está pasando aquí, Amy? —gritó casi él—. ¿Has olvidado que este

es un lugar de trabajo? Me he ido un par de semanas, ¿y piensas que

puede desfilar a tus novios y salir de aquí? ¿Y si hubiera sido un cliente?

—Amy estaba demasiado aturdida por su ira como para ser capaz de

pronunciar alguna palabra. ¿Qué estaba pasando con él?

Amy captó la leve sonrisa en la cara de Tom, volviéndose, así su nuevo jefe

no podía verlo. Amy frunció el ceño. Ella se preguntó para sus adentros si

debería cancelar el almuerzo y volver a trabajar.

—Hola, Sr. Anderson. La señorita Harper y yo estábamos saliendo en

nuestro almuerzo. Ya hemos establecido los teléfonos y estaremos de

regreso en una hora. —Con eso, él tiró de ella en el ascensor, y se fueron

antes de que ella tuviera la oportunidad de cambiar de opinión. Oh, sabía

que iba a tener problemas por eso. Lucas no era exactamente el tipo de

hombre al que le gustaba ser contra-decido. Estaba un poco asustada por

la reacción de su jefe cuando ella regresara al trabajo. Ya era demasiado

tarde para hacer algo al respecto en ese momento.

* * * *

Antes de que Lucas tuviera tiempo de reaccionar, las puertas se cerraron,

dejándolo aturdido y más que un poco enojado.

Estuvo a punto de seguirlos para poder arrastrarla de nuevo a las oficinas.

Sólo años de control bien gestionado le hicieron quedarse donde estaba. Lo

que realmente quería hacer era echar a Tom por una ventana y arrastrar a

Amy en sus brazos. La había evitado tanto como fue posible con la

esperanza de que superaría su obsesión, pero la forma en que lo miraba no

ayudó. Él podía ver que era una atracción mutua, y ambos luchaban

contra los sentimientos que tenían el uno al otro.

Page 39: 1.the billionare wins the game

Pág

ina3

9

Él hizo un par de llamadas, imaginándose que el hombre con el que Amy

estaba era Tom. Lucas había pensando que estaría bien para su padre

encontrarle una nueva recepcionista. No era tan difícil encontrar a una

persona para contestar los teléfonos. Pero en lugar de una bonita mujer de

sesenta años, su padre contrató a un joven atractivo, quien obviamente

tenía los atributos suficientes como para atraer a la asistente de Lucas.

Él sabía que no debía preocuparse, ni en lo más mínimo, que no debería

importarle en absoluto, pero en el fondo, le importaba, le importaba

mucho más de lo que debería.

Se quedó en su despacho durante toda la hora que se fueron, no

consiguiendo hacer nada. Sólo se paseaba de un lado de la habitación a la

otra, esperando con impaciencia su regreso.

* * * *

—Sabes que le permitiste pensar que estábamos escabulléndonos por

alguna aventura ilícita durante nuestra hora de almuerzo. Voy a estar en

el infierno por eso. —Amy trató de decirlo tan severamente como era

posible mientras ella y Tom se sentaban en su restaurante favorito sólo a

una cuadra de las oficinas.

—No pude resistirlo. Tenía una expresión de amargura en su rostro al

verte encerrada en los brazos de mi hermoso ser. —Se rió entre dientes.

Amy había estado luchando contra su atracción por Lucas desde el

momento en que lo conoció. Ella sabía que él la quería, pero también sabía

que era una mala idea involucrarse con su jefe. Ella no era una de esas

mujeres que dormían con sus jefes para alcanzar la cima. Ni siquiera

estaba cerca de ser una de esos tiburones corporativos. Ella estaba

trabajando duro para que un día pudiese proporcionar un hogar estable

para la familia que siempre había querido.

—Estabas ocultándomelo, sabes. No tenía idea de que el jefe estaba

caliente por tu cuerpo —prosiguió Tom.

—Él no está caliente por mi cuerpo —dijo—. Simplemente le gusta estar en

control de todo, incluyendo a sus empleados. Sólo espera... Él va a estar

diciéndote con quién puedes salir, también —dijo ella, comenzando a ver el

humor en la situación. Ella sabía que ambos terminarían superando la

atracción pronto, y de ninguna manera, quería que Tom supiera que ella

Page 40: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

0

pensaba que su nuevo jefe era impresionante y que le hacía perder el

aliento cada vez que entraba en la habitación.

—Cariño, ya puedo decir que no soy su tipo, por desgracia. —Suspiró,

siendo demasiado dramático—. Me gustaría cambiarlo, pero hay algunos

hombres que sólo tienen ojos para el reloj de arena. Pobre de mí, que estoy

destinado a la angustia, al ver ese pedazo de hombre a diario y nunca

tener una oportunidad.

Tom la había sacado exitosamente de su melancolía. Sabía que iba a tener

que soportar el mal humor de Lucas cuando regresaran, pero por el

momento, ella y Tom estaban teniendo un gran almuerzo.

Se reían y hablaban entre bocado y bocado de comida y, antes de que

ninguno estuviera listo, caminaban de regreso a la oficina, asegurándose

de no tener ningún contacto físico. Amy no sentía ninguna necesidad de

presionar su suerte más allá ese día. Ella no quería perder su trabajo

porque el jefe pensaba que era la fulana de la oficina.

Antes de que pudiera sentarse, ella estaba siendo telefoneada desde la

oficina de Lucas.

—Srta. Harper, ¿puede venir por favor? Tenemos mucho que repasar esta

tarde y, debido a su prolongado almuerzo, estamos retrasados —espetó su

voz por el intercomunicador.

Amy suspiró, sabiendo que su día de paz estaba oficialmente terminado.

Recogió su laptop y se dirigió a la puerta que comunicaba sus oficinas.

Ella refunfuño un poco para sí misma, sin embargo, como ella se había

asegurado de no tener un almuerzo extendido y había, de hecho, regresado

de nuevo unos diez minutos antes de lo que tenía que ser.

Lucas no levantó la vista cuando entró en la habitación. En silencio cruzo

el suelo y se sentó en el lado opuesto de la mesa. Se sentaron por unos

minutos en un silencio incómodo. Ella comenzó a retroceder, lo que la

hacía notar aun más. Cómo se atrevía a hacerla sentir como una niña de

escuela que se sienta en la oficina del director, ya que había sido

capturada besuqueándose en el campus.

Lucas supo al segundo en que entró. Ella no hizo ningún ruido, pero su

perfume le envolvió. A continuación, sintió el cambio en el aire, mientras

ella se sentó en voz baja en la silla frente a él, siendo el único sonido

Page 41: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

1

apenas audible el cruzar de sus piernas, el ligero ruido mientras sus

medias de nylon se rozaban.

Sus ojos estaban fijos en la pantalla del ordenador mientras él ciegamente

golpeaba botones en el teclado, sin tener ni idea de lo que estaba haciendo.

Por lo que sabía, podría haber regalado millones de dólares en apenas un

segundo. Lo que más le asustaba, sin embargo, era el hecho de que ni

siquiera le importaba si lo hacía.

Él sabía que tenía que hacer una observación más pronto o más tarde,

pero aún estaba demasiado cerca de agarrarla de la silla y hacerle olvidar

a cualquier otro hombre, excepto él. Se imaginaba echándola sobre la

mesa y poniéndole fin a la tortura para ambos. Podía marcarla como suya,

y ella no tendría pensamientos hacia otro hombre. La idea de ella gritando

su nombre era casi su perdición.

—¿Terminaste el informe de Nielson que envié por correo? —Él habló por

fin y se mostró satisfecho de ver su salto al oír el sonido de su voz. Por

alguna extraña razón, su reacción lo relajaba. A él le gustaba la forma en

que la ponía nerviosa. Se preguntaba qué más podría hacerla saltar.

Lucas se puso de pie, caminó alrededor de su escritorio y se sentó en el

borde de la misma, sus piernas a sólo unos centímetros de distancia. Se

dio cuenta de que ella se sentó más recta incluso, si eso era posible. Sus

piernas estaban cerradas tan herméticamente juntas que le sorprendió

que no gritara de repente por un calambre muscular.

Después de lo que parecieron horas, pero en realidad fueron sólo

segundos, Amy le entregó el expediente sin palabras, ya había anticipado

que él estaría pidiéndolo. Tomó la carpeta, asegurándose de que sus dedos

se rozaran. Notó la piel de gallina aparecer en su brazo.

Él comenzó a sentirse mucho mejor, sabiendo que estaba de nuevo al

mando. Fingió leer el archivo, tomándose su tiempo, disfrutando de la

cercanía.

—Muy bien. —Ella saltó una vez más, como si hubiera olvidado que

estaban sentados juntos en la habitación.

Él sabía que ella era demasiado fuerte para admitir que la hacía sentir

algo, y no había manera de que fuera a llorar de misericordia. Había

aprendido mucho de ella desde el primer día que se conocieron. Si hubiese

lucido molesta de alguna manera, entonces él habría encontrado la fuerza

Page 42: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

2

de voluntad para apartarse, pero podía ver la pasión brillando en sus ojos,

a pesar de que tratara de ocultarlo. Su respiración estaba acelerada,

haciendo que sus pechos subieran y bajaran por debajo de su blusa, y

pudo ver la huella de sus pezones endurecidos presionando contra la tela.

Quería agacharse y sentir el pulso de sus pechos bajo sus labios. Su

excitación era un afrodisíaco.

Lucas cambió su peso, haciendo que su pierna se presionara contra la de

ella. Se sentó congelada. Era evidente que quería moverse, pero no sabía

cómo hacerlo sin previo aviso.

Era un juego de voluntades, y él realmente no sabía cuál de ellos cedería

primero. Él estaba probando su resistencia hacia la atracción que sentía

por ella, eso era seguro. Sabía que lo más inteligente sería dar marcha

atrás y sacarla de su oficina, pero no podía hacerlo. Si ella le pedía

retirarse, él la dejaría ir, pero esperaba que no lo hiciera. Le gustaba su

juego. Sabía que estaban llegando a su límite. Se estaba poniendo

demasiado caliente sentado tan cerca de ella, por lo que les dio a ambos

un descanso y empezó a caminar por la habitación para crear distancia.

—Muy buen trabajo —dijo finalmente, con respecto al archivo. Se metieron

en una cómoda rutina después de eso, y trabajaron bien el resto de la

tarde.

El aire estaba lleno de tensión, pero hicieron un buen equipo cuando

ambos se concentraron.

El tiempo pasó rápidamente, como solía ser cuando estaba junto a ella.

Él no quería dejarla ir. Disfrutaba de la embriaguez de su olor. Se

complacía en la forma en que sus ojos se lanzaban hacia él y luego miraba

hacia otro lado. Sus curvas seductoras hacían que su cuerpo se apretara.

Ya era hora de que pusiera fin a la tortura. Solo una noche juntos, eso es

todo lo que necesitaban. Trató de razonar consigo mismo que esta

situación no heriría a nadie. Si era incómodo entre ellos después de que

estuvieran satisfechos, entonces él la trasladaría hacia otra división de la

empresa, por lo que no pasaría nada.

La idea de que ella dejara las oficinas dejó una sensación desagradable en

él. Pensó en lo que iba a hacer, nunca lanzaba sus jugadas antes de crear

un plan, y mucho menos cuando su mente se encontraba tan

desorientada.

Page 43: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

3

* * * *

Amy luchó contra sus propias emociones mientras pasaba el día con

Lucas. Un minuto él estaba dándole órdenes, y al otro, la seguía como una

pantera, cada vez un poco más cerca con cada paso que daba. No entendía

su atracción hacia Lucas. Sí, él era guapo, pero que nunca le había

importado antes. A muchas mujeres les gustan los hombres fuertes, alfa,

que piensan que el mundo debe inclinarse ante ellos. A ella no.

A ella siempre le habían gustado los tipos de hombres que había

encontrado durante la escuela. Así que tenía que decirse continuamente

que no podía soportar a los de su tipo. Ella no necesitaba, ni quería, un

hombre para hacerla sentirse completa. Le gustaba su vida mucho y no

quería que nadie interviniera y le dijera cómo vivir. No era más que otro

hombre, al igual que tantos otros hombres que habían existido.

Si ella rompía sus reglas y se involucraba con alguien, nunca iría por un

rico egocéntrico millonario como su jefe. Sería un hombre cálido,

cuidadoso, alguien que quisiera una docena de niños y le trajera flores por

lo menos una vez a la semana. Sexo que durara sólo unos minutos, una

relación que durara toda la vida. Podía vivir con mal sexo, pero no podría

vivir con un imbécil de marido.

Mentirosa. Tú quieres emoción. Has estado trabajando en vez de distraerte

desde que apenas comenzaste a caminar, con miedo a desobedecer, con

miedo a decir alguna insolencia o impertinencia, con miedo a pedir algo.

Ahora, ves a este hombre, este dominante y magnífico hombre, y quieres que

él tome el control. Quieres que te obligue a salir de tu caparazón. Lo quieres

a... él. Y algo mucho más importante que eso, quieres que él te desee, para

que tome la decisión por ti.

Amy se sentó paralizada mientras luchaba una batalla interna consigo

misma. Su mente cuidadosamente controlada para acallar a su corazón.

Ella iba a ganar la pelea, lo que no sabía era que quedaría en mil pedazos

cuando todo estuviera terminado.

A las cinco de la tarde, alguien llamó a la puerta.

—Entre —habló Lucas.

Tom se asomó a la habitación.

Page 44: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

4

—Hola, Sr. Anderson —dijo antes de volverse hacia Amy—. ¿Estás lista

para salir? Tengo los teléfonos alterados, y me muero por un Bloody Mary

y unas alitas picantes.

Amy empezó a levantarse de su asiento cuando Lucas habló:

—Tenemos demasiado trabajo para terminar esta noche, Tom. Amy tendrá

que perderse la hora feliz —dijo, un poco grosero, en su opinión.

—Está bien, Tom, voy a coger el autobús a casa esta noche. De todas

formas, agradezco el paseo en la mañana. Nos vemos el lunes. —Ella le

dio una sonrisa de disculpa antes de volver a trabajar en su portátil.

—Está bien, dulzura. Nos vemos el lunes. —Le guiñó un ojo—. Que tenga

un buen fin de semana, Sr. Anderson. —Tom salió rápidamente y, una vez

más, Amy estaba sola con Lucas. Ella se quedó mirando a Tom por unos

minutos con anhelo. Le encantaría simplemente sentarse y tomar una

copa con su mejor amigo. Sus nervios habían estado en el borde de toda la

tarde.

El estado de ánimo de Lucas pareció deteriorarse después de que Tom se

fue.

—¿Por qué no trajiste tu propio auto para venir a trabajar hoy? —le

preguntó por fin, poniendo fin a veinte minutos de incómodo silencio.

—Yo no tengo un auto. Normalmente sólo viajo en autobús al trabajo, pero

Tom no vive muy lejos de mí, así que el último par de días hemos estado

compartiendo el automóvil. No tengo ningún problema con el autobús, sin

embargo. —Le molestaba el tener que explicarle las cosas.

—Te voy a dar un paseo a casa esta noche ya que te estoy manteniendo

hasta tarde —dijo, como si el asunto se resolviera al instante. No esperaba

nada, sólo su cumplimiento.

Se sentó por un momento antes de responder.

—No necesito un paseo a casa. Ya le dije que estoy acostumbrada a viajar

en el autobús. Voy a estar bien —dijo ella con los dientes apretados. Sabía

que no sería el final de la discusión, pero ella no lo dejaría caminar sobre

ella, jefe o no.

Page 45: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

5

Estaba cansada de luchar consigo misma y él. Tenía miedo de que si no se

alejaba pronto de él, terminaría por levantarse, golpearlo, o peor todavía,

rasgar de su camisa hasta sacársela, de preferencia con los dientes.

Page 46: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

6

Capítulo 5

Traducido por Auro_J, BUTY MADDOX & Alyshia Cheryl

Corregido por Samylinda

u respuesta lo enfurecía. ¡¿Cómo se atrevía a decirle que no,

cuando le estaba ofreciendo un paseo?! Por primera vez, ya que

no pudo recordar a alguien que le hubiera dicho que no antes, y

se encontró con que no le gustó, en absoluto. ¿Cómo podía preferir viajar

en el autobús a aceptar un viaje con él? ¿Era su compañía tan repulsiva

que no podía soportar estar en su presencia, aunque sea sólo por un

momento?

Estaba confundido ya lo suficiente acerca de cómo se sentía. No queriendo

decir algo de lo que se arrepentiría, decidió no decir nada más. Si

realmente creía que iba a permitirle viajar en el autobús, entonces no era

tan inteligente como él creía que era.

Podía ser terca, pero ciertamente podía superarla y llevarla a su

apartamento. Estaba acostumbrado a que la gente hiciera lo imposible por

él. Fue un poco sorprendente, pero no era tan desagradable, encontrar a

alguien que estaba dispuesto a discutir. Descubrió que le gustaba Amy un

poco más cada vez que lo desafiaba, pero no había manera de que la

diminuta zorra fuera a salirse con la suya esa noche, no cuando se trataba

de su propia seguridad.

Podía ver que estaba cansada, pero siguió acumulando el trabajo sobre

ella. Por un lado, él todavía estaba enojado de que se negara a viajar con

él, y en segundo lugar, sólo quería estar con su compañía.

Después de que su enojo inicial disminuyera, se involucró en sus propias

tareas, quedándose hasta medianoche cuando terminó el proyecto. Perdió

la noción del tiempo.

—Sr. Anderson, no quiero quejarme, pero son las once. ¿Puedo venir

mañana si esto realmente tiene que hacerse? —preguntó proyectando

S

Page 47: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

7

fatiga. Se sentía un poco culpable de que hubiera dejado a su

temperamento anular, perdiendo su buen juicio. Él normalmente nunca

hubiera permitido que se quedara tan tarde.

—No me di cuenta de la hora, lo siento. Podemos terminar esto el lunes —

dijo—. Vamos a salir de aquí. —Puso su trabajo de fin de semana en su

maletín y se dirigió con ella a su oficina. Se puso de pie junto a la puerta

mientras Amy ordenaba su trabajo y recogía su bolso y abrigo. Levantó la

vista, y podía decir que estaba sorprendida de ver que todavía estaba allí.

—Está bien, Sr. Anderson. Nos vemos el lunes. —Trató de hacer una salida

rápida y se dirigió directamente hacia los ascensores.

Él sonrió para sí mismo, disfrutando del canto de su voz. Le resultaba

cómico que pensara que podía ser fácilmente dejada en paz. Por lo general,

las mujeres lo perseguían por todo el lugar. Le gustaba el juego del gato y

el ratón con su nueva ayudante.

Esperaba muchísimo su captura.

Amy apretó el botón del ascensor, y los dos dieron un paso dentro para el

largo camino hacia abajo. Ninguno de los dos habló. Estaba sonriendo

para sí, y sabía que ella estaba luchando contra la irritación.

Cuando llegaron al vestíbulo, él la siguió mientras se dirigía hacia las

puertas.

—Hola, Amy. Estás trabajando hasta tarde. No hay ningún autobús. ¿Le

gustaría que llamara a un taxi? —preguntó el guardia de noche.

—Eso sería genial, Paul. —Le dio su mejor sonrisa—. ¿Cómo está

haciéndolo esa hermosa niña tuya? ¿Entró al equipo de baloncesto?

—Sí, entró al equipo universitario y ha dado volteretas alrededor de la casa

desde hace dos días. Te voy a mostrar las imágenes tan pronto como mi

esposa las revele —continuó—. Buenas noches, Sr. Anderson. Tenga un

viaje seguro a casa —le dijo a Lucas, como si acabara de darse cuenta de

que estaba allí con ellos dos.

—Paul, la señorita Harper no necesitará que llame un taxi. Voy a darle un

paseo a casa ésta noche —dijo Lucas con la confianza de saber que su

palabra se tomaría sin preguntas. Paul miró a la cara rígida y con una

expresión inflexible de su jefe, y decidió que no estaría en el medio de todo

lo que estaba pasando.

Page 48: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

8

—Está bien, entonces. Disfrute de su fin de semana. —Se volvió y regresó

a su escritorio.

Lucas sacó a Amy a través de las puertas delanteras, tomando su brazo.

Ella no quería causar una escena delante de Paul, así que se fue sin

protestar, pero se iba dar una idea de Lucas en su mente una vez que

estuvieran afuera. Había estado conteniéndose un mes y la tensión que se

había estado acumulando, estaba por encima de su tope.

Tan pronto como estuvieron fuera, se volvió hacia él, dispuesta a dar

rienda suelta a toda la ira que había tenido a en las últimas horas.

Maldita sea, se veía increíble cuando estaba furiosa y con ira. Él quería

arrancarle el moño y hundir sus dedos sobre su sedoso cabello.

—Mira... —le espetó, pero él no le dio tiempo para terminar la frase. No

podía aguantar más, así que se acercó y la tomó en sus brazos, aplastando

sus labios contra los suyos.

Se quedó tan estupefacta y rígida en sus brazos durante unos tres

segundos, mientras sus labios acariciaban los de ella. Él supo el momento

de su rendición, cuando toda la ira, la frustración y toda la atracción

crecieron entre ellos. Sus brazos alcanzaron su cuello y sus labios se

abrieron en una invitación, permitiéndole el acceso total de su boca.

Una vez que tuvo su rendición, sus labios se suavizaron, comenzando a

persuadir en vez de exigir. Sus brazos se movían arriba y abajo de su

espalda, moldeando su cuerpo al de él. Se sentía como si no pudiera

acercarse lo suficiente. Necesitaba más, mucho, mucho más.

No había pensamientos de protesta o ira. Nunca había sido noqueada en

sus pies antes, pero había una primera vez para todo. Su cuerpo estaba en

llamas, y no quería que parara ese sentimiento.

No podía respirar, pero no tenía ninguna necesidad de oxígeno. Su único

deseo era que su cuerpo fuera presionado contra el de ella y sus labios,

para seguir trabajando su magia. En su estómago había un millón

mariposas revoloteando alrededor, y chispas de electricidad atravesándola.

Lucas estaba listo para tomarla allí en la acera. Empezó a levantar la parte

inferior de su camisa, olvidando que estaban de pie a la vista de quien

quisiera caminar.

Page 49: 1.the billionare wins the game

Pág

ina4

9

Amy fue la primera que se topó abruptamente con la realidad. ¿Qué estaba

haciendo? Estaba a punto de que su jefe la tomara en la pared exterior del

edificio. Inclinó la cabeza hacia atrás y lo empujó. Antes de que ella

supiera lo que hacía, su mano se acercó y le dio una fuerte bofetada en la

mejilla. Acabando con toda la lujuria dentro de él.

Se quedó allí, jadeando, sus ojos redondeados con el doble de su tamaño

normal. Había casi hecho el amor con su jefe en una pared, en público, y

luego le dio una bofetada en la cara. No podría hacer otra cosa que mirarlo

con horror.

Lucas no podía decir si estaba aturdido por los besos, por la bofetada, o

por ambos.

Ella también parecía ruborizada y despeinada. Él dio un paso hacia atrás

para que no lo golpeara de nuevo. Él ganaría el control de sí mismo,

porque sabía más allá de toda sombra de duda que sería suya. Sabía que

no sería capaz de romper el hechizo que ejercía sobre él hasta que ambos

derrumbaran los sentimientos corriendo a través de ellos.

—Dejaré pasar esto, pero debe estar preparada para enfrentar las

consecuencias si me abofetea de nuevo —dijo, mientras se frotaba la

mandíbula. Ella había puesto realmente su peso en el golpe. No era una

mujer indefensa que no podía sostener su posición ante él.

—¿Cómo se atreve? —escupió—. No puede ir por ahí besando a quien se le

apetezca. Puede ser rico y de gran apariencia, pero no le pertenezco. Yo soy

su empleada y nada más.

Con éstas palabras se dio la vuelta y empezó a alejarse.

Tomó cerca de cinco pasos antes de que Lucas la cogiera del brazo y la

hiciera girar.

—Yo no sé qué especie de juego estás jugando, Amy, pero le da igual que la

tome de nuevo allí —le espetó.

Su cuerpo todavía estaba en llamas, y caliente o fría, estaba haciendo

estragos en él. Él quería echarla abajo en la acera y tomarla en un

movimiento rápido. Su inagotable deseo por ella escandalizó el infierno

fuera de él.

—Lamento eso —apenas salió, obviamente teniendo dificultades para

disculparse—. He perdido la cabeza por un momento, pero si cree que

Page 50: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

0

tomé esta posición porque podría dormir con mi jefe, entonces tiene otra

cosa en mente. Olvide que ésta noche pasó. Yo lo haré. Nos vemos el lunes,

Sr. Anderson.

Luchó para liberarse de su mano de hierro.

Sus palabras fueron aumentando su temperamento. Era como si hubiera

tirado un vaso de agua helada en su cara. ¿Se olvidaría de lo que había

pasado? Como el infierno que lo haría. Él estaba cerca de recordarle una

vez más su composición química. Sólo un montón de años de ser un

experto en el autocontrol le impidió hacer precisamente eso.

Él no se olvidaría de ella pronto, y se dio cuenta de que no quería que ella

se olvidara de él tampoco. Estuvo tentado a tomarla de nuevo entre sus

brazos, pero sabía que no tenía la fuerza de voluntad para ser dejado dos

veces en unos pocos minutos. La próxima vez que empezaría algo sería en

algún lugar en donde podría ser también terminado, y se aseguraría de

que fuera una participante activa y que no jugara a la víctima.

En lugar de besarla, dio la vuelta y tiró de ella. Luchó contra él cada paso

del camino, pero supuso que sabía que sus palabras no servirían de nada

porque se quedó en silencio. Él llegó a su auto y lo abrió. No tardó en

meterla al asiento delantero, y luego caminó alrededor del auto para

meterse en el asiento del conductor.

Dio la vuelta al coche y se retiró de la zona de aparcamiento.

—¿Dónde vives, Amy?

* * * *

Estaba tan enojada que tenía que contar en silencio hasta diez antes de

que pudiera hablar de nuevo.

— ¡Le dije a que no quería ir con usted! —finalmente escupió.

—Bueno, si querías el viaje o no, lo conseguiste, por lo que sería de gran

ayuda si acabaras de decirme en dóndes vives. Es decir, a menos que

quieras venir a mí casa y terminar lo que empezamos de nuevo allí en la

calle. Yo estaría de acuerdo con eso, también —ofreció.

Una vez más, tenía que contar en su cabeza. Se sentía atrapada entre una

roca y un lugar duro. Lo último que quería era que su jefe extravagante

Page 51: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

1

supiera donde vivía. Pensaba en renunciar en cuanto ahorrara el dinero

suficiente. Pensó por un momento, y entonces le dio la dirección de un

complejo de apartamentos cercanos.

Sabía que si él realmente quería encontrar su casa, era perfectamente

capaz, pero por el contrario, no vio nunca una razón para que fuera a

buscarla.

Se detuvieron en el edificio, y vio que el auto y las luces de reversa se

apagaron. Sabía que tendría que actuar con rapidez, o él la acompañaría

hasta la puerta. Se detuvo para esperar que el auto parara. Saltó antes de

que él pudiera detenerla y corrió por el costado del edificio.

No le dijo nada, ni siquiera miró hacia atrás para ver su expresión. Asumió

que estaba furioso con ella por tomar ventaja. De vez en cuando el hombre

tendría que perder una batalla, incluso si estaba segura de que él siempre

ganaría la guerra.

Amy no quería correr ningún riesgo y, tan pronto como estuvo fuera de su

vista, corrió tan rápido y se escondió detrás de unos arbustos. Se quedó

allí por mucho más tiempo de lo que era probablemente necesario.

Finalmente, cuando pensó que se había ido, se arrastró hacia fuera y se

coló en la parte delantera del edificio, mirando alrededor en busca del

auto.

La costa estaba vacía. Suspiró para sus adentros. Tenía alrededor de una

caminata de tres kilómetros para volver a su hogar, y los zapatos que

llevaba no estaban hechos para ello. Ah bien, pensó, creo que será bueno

comenzar.

Dijo una oración en silencio para que no la asaltaran en el camino. El

barrio no era exactamente lo que se llama "Familia Feliz", y por lo general

no salía tan tarde sola.

Pasó una hora antes de que Amy llegara a su casa. Suspiró con disgusto.

La casa centenaria estaba muy degradada porque no había sido

mantenida. Había limpiado su espacio de arriba abajo durante dos días

antes de dormir allí.

Tuvo que quedarse por mucho tiempo para terminar su universidad.

Trabajó a tiempo completo mientras asistía a la escuela, apenas tenía lo

suficiente para cubrir la matrícula, y mucho menos para cubrir sus

gastos.

Page 52: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

2

Siempre había estado dispuesta a hacer lo que fuera para hacer su futuro

mejor. No le tenía miedo al trabajo duro y se lo había demostrado a sí

misma y a los otros a lo largo de los años.

Su madre soltera había sido el peor padre imaginable y la había llevado de

una casa vieja a otra. Amy siempre tenía hambre, estaba sucia y tuvo que

rechazar a muchos amigos de su mamá diariamente.

Estaba agradecida por haber descubierto las bibliotecas locales como sus

santuarios y se enamoró de la lectura. Había pasado horas revisando todos

los libros inimaginables, desde el inicio hasta el final.

La biblioteca había sido cálida, y fue allí donde supo que iría a la

universidad y que nunca viviría de esa manera otra vez.

La madre de Amy murió cuando ella tenía sólo catorce años, y había sido

una de las pocas afortunadas que había sido llevada a una buena casa de

acogida. Fue allí donde había recibido su primera verdadera ruptura en la

vida. Amy había llorado a su madre, aunque no merecía que estuviera de

luto. Al mismo tiempo, supo que era una de las afortunadas que habían

conseguido salir de tan mala situación.

Había pasado de un apartamento infestado de drogas a un barrio familiar

con una gran escuela, e incluso había ganado algunas becas. Ya sabía

cómo sobrevivir en la nada y, una vez que se graduó y obtuvo el gran

trabajo en la Corporación Anderson, sus sueños finalmente, eran casi una

realidad. En un mes más, por fin tendría un verdadero hogar.

Amy volvió de nuevo a la realidad, la cual seguía en su alquiler compartido

y miró a su alrededor a su habitación en ruinas. Levantó la cabeza en alto

porque pronto iba a estar fuera de aquel lugar horrible, y nunca miraría

hacia atrás una vez más.

Se metió en su cama, acostándose en la oscuridad mientras pensaba de

nuevo en el último mes. Muchas cosas habían cambiado en su vida. Se

había graduado, consiguió el trabajo de sus sueños, y desarrolló una gran

amistad con un chico genial.

Lucas.

No podía pasar una hora sin dejar de pensar en su nombre. Hasta sus

sueños estaban llenos de su jefe. ¿Por qué tenía que ser tan

impresionante? ¿Por qué tenía que atraerle tanto? Si fuera la única que

Page 53: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

3

sintiera la atracción, no sería tan malo, pero, obviamente, después de ésta

noche, ni siquiera podía fingir que él no sentía el mismo deseo.

Deseaba que él no quisiera. Sería mucho más fácil para ella mantener su

distancia. Con una nueva resolución, se comprometió a mantener un aire

profesional, no importaba lo mucho que su cuerpo ardiera cuando estaba

cerca de él. Tenía que mantener su trabajo, no podía vivir en barrios de

crack nunca más. Quería salir de ahí.

Después de dar vueltas durante horas, Amy finalmente se quedó dormida

en el momento que apareció el sol en el cielo. Estaba agradecida que era

fin de semana.

* * * *

Sábado por la mañana, Tom estaba a punto de salir por la puerta y tomar

su auto para ir a la casa de Amy cuando el teléfono sonó.

—Diga —dijo con su habitual voz alegre.

—Estoy buscando a Tom, por favor —respondió muy formal Lucas

Anderson.

—Éste es Tom. ¿En qué puedo ayudarle, señor Anderson? —¿Por qué el

jefe estaba llamando un Sábado?

—Tom, estoy buscando la dirección de Amy. La que está en su expediente

personal parece estar mal. Dejó su bolso en el auto la noche anterior, y

tengo que devolvérselo. Ya que ustedes siempre viajan juntos, usted debe

saber la dirección.

Tom casi le dio la información sin pensar. La forma en que su jefe habló,

salió mucho más parecido a una orden de un sargento. Se sentía como si

debiera estar saludando y gritando, "¡Sí, señor!" Él se detuvo en el último

momento, recordando que Amy tenía una dirección incorrecta por una

razón.

—Voy a ver a Amy éste fin de semana, Sr. Anderson. Yo podría tomar el

bolso. Se encontrará conmigo en el bar esta noche —dijo. Tom pensó que

esto haría más fácil todo. Obviamente, él había calculado mal, sin

embargo.

Page 54: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

4

—Tom, no entrego las pertenencias de un empleado a otro empleado. Me

encargaré de que Amy consiga su bolso de mi parte. Si usted fuera tan

amable de darme esa dirección ahora, entonces yo podría darle el bolso.

Su voz había sido formal antes. Ahora era fría como el hielo.

Wow, Tom estaba pensando, éste tipo lo ha malinterpretado todo. Si quiero

mantener mi trabajo, será mejor que le haga saber que no estoy interesado.

—Um, ¿Sr. Anderson? Amy y yo sólo somos amigos. Ella realmente,

realmente, no es mi tipo, si sabe lo que quiero decir. Por lo tanto, usted no

tiene que preocuparse acerca de las citas entre oficinas o cualquier cosa

con nosotros.

Lucas pensó que era un tipo inteligente y podría sumar dos y dos.

Hubo una breve pausa en el extremo de la línea, y luego con un sonido

más agradable Lucas habló de nuevo—: Todavía necesito la dirección.

* * * *

Lucas no estaba contento de tener que volverlo a hacer. Todavía estaba

molesto de que Amy corriera de su vehículo la noche anterior. No le

gustaba ser ignorado, y nunca nadie lo había rechazado por su presencia

hasta sentir la necesidad de huir de él. Ahora tenía dos empleados que no

le quisieron dar lo que necesitaba. Él estaba tratando de no estrangular a

los dos.

—Mire, entiendo lo que está pidiendo, y por qué lo está haciendo, pero

Amy es mi amiga, y le prometí que no daría a conocer su dirección. Si

traiciono su confianza, nuestra relación se vería afectada. Realmente me

encantaría ayudarle, y sé que usted puede despedirme, pero no puedo

darle algo que no es mío.

Lucas apenas pudo mantener su temperamento bajo control. Había

descubierto que ella había mentido acerca de dónde vivía. Había sido

bastante fácil. Él simplemente había llamado a la sociedad de gestión de

los apartamentos y les pregunto si vivía allí.

Le dijeron que no era actualmente un residente, pero, a principios de la

semana, se había puesto en solicitud uno de sus apartamentos. Tenían

una unidad que estaba disponible en tres semanas, y lo había reservado.

Al ser nueva en la mano de obra, había sido rechazada, pero habían

Page 55: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

5

hablado con su padre a principios de la semana y, como la solicitud venía

desde Joseph, ellos estuvieron encantados de tenerla como una inquilina.

—Lo siento, Sr. Anderson, realmente me tengo que ir. Sé que ella está en

un lugar realmente horrible en éste momento, pero yo le voy a ofrecer un

lugar para alojarse por un par de semanas hasta que consiga un nuevo

apartamento. Me dijo que acaba de terminar la universidad y que la

contrataron para su empresa y estaba emocionada de tener un buen lugar

en primer lugar.

Tom habló rápidamente antes de que Lucas pudiera ser capaz de cortarlo.

Lucas fue sorprendido por el silencio una vez más. Con Tom despidiéndolo

tan fácilmente como Amy lo había hecho la noche anterior. Estaba

empezando a sentir que estaba perdiendo su toque.

—Hablaré con la Srta. Harper personalmente. —Colgó el teléfono sin

molestarse en decir adiós.

Tom fue olvidado en el segundo que el teléfono tocó su base. Todo en lo

que Lucas podría pensar era en el siguiente paso para encontrar a Amy.

Después de una hora de hablar con varias personas, Lucas tuvo la

información que quería. Había crecido con el dinero, pero le habían

enseñado desde temprana edad no usarlo en contra de las personas. Sin

embargo, hubo momentos en los que tener dinero le hizo la vida más

simple, y ésta era una de esas situaciones.

Se sintió incómodo mientras se acercó a su casa. El barrio no estaba para

pasar el rato cómodamente durante el día ni mucho menos por la noche.

En el momento en que vio el lugar en el que ella estaba viviendo, estuvo

horrorizado.

¿Qué estaba haciendo ella allí? ¿Cómo pudo por casualidad poner en

riesgo su propia seguridad? No le deseó ni a su peor enemigo la casa, o el

barrio en el que residía. Cuando vio lugares como la casa en la que ella se

estaba hospedando, fue una experiencia humillante para él, y sabía que

tenía que tener más tiempo para su trabajo voluntario porque había tanta

gente que necesitaba ayuda.

Él había estado haciendo trabajo voluntario desde que era un muchacho,

al igual que sus hermanos. Cuanto más ocupado tenía su día a día, más

fácil era que se olvidara de la gente necesitada, pero consideró lo de la

Page 56: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

6

casa una excusa pobre, hizo un voto de que apartaría el tiempo, pase lo

que pase.

Lucas cuidadosamente subió los escalones, temiendo que fuera a caer a

través del porche podrido en cualquier momento. La puerta no parecía

mejor, y estaría agradecido de tener algo de desinfectante para después de

poner sus manos en cualquier cosa que tocara. De mala gana, levantó el

puño y golpeó con fuerza, entonces podría ser oído por encima de los

chillidos de los animales, que parecían venir de todas las partes.

El olor característico de la orina, que esperaba que pertenecieran a

animales que vagaban a través de los carriles del porche podrido. Cuanto

más tiempo permanecía allí, más enojado se ponía.

Amy había estado con su compañía durante un mes, demasiado tiempo

para que siguiera residiendo en los barrios pobres. Trajo a casa una

computadora de trabajo con información confidencial sobre la empresa. Si

caían en las manos equivocadas, podría causar enormes horas de trabajo.

Debería haber pedido un adelanto, hecho algo para salir de éste lugar. Aun

el necio orgullo tenía sus límites.

Page 57: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

7

Capítulo 6

Traducido por Alyshia Cheryl

Corregido por Samylinda

espués de unos cinco minutos, la puerta fue abierta por fin por

un hombre que apestaba a alcohol, quien llevaba nada más que

un par de calzoncillos sucios. A Lucas le resultó difícil

conservar para sí su expresión de asco mientras miraba el rostro del sucio

hombre, quien parecía no saber lo que es un cepillo y para qué servía.

—Hey caballero, no pareces el chico de la pizza. ¿He ganado algo? —

balbuceó el hombre.

—Estoy buscando a Amy Harper. —Lucas no iba a hablar con el hombre.

Iba a recoger a Amy y sacarlos a los dos lejos de aquí.

—Era de esperarse que la primera persona que visitara a esa snob vistiera

de traje —murmuró el toxico hombre. Miró a Lucas de arriba a abajo y

luego murmuró—: Yo debería haber cobrado mucho más alquiler. A ella

obviamente le está yendo mucho mejor que a mí si tiene a alguien como

usted. ¿Qué es? ¿Una prostituta de tarifas muy caras? Apuesto a que

alguien como usted le gusta la ilusión de la inocencia, y ella tiene eso con

creces. Yo sabía que no era nada más que una actuación. Supongo que

simplemente no tengo suficiente dinero para pagar por sus servicios.

El hombre continuó entre dientes, provocando que Lucas sintiera ganas de

golpearlo contra la pared. Tenía que encontrarse con Amy antes de que

hiciera algo precipitado de lo que luego se arrepentiría, sin embargo.

—Amy, hay un tipo grandote que quiere verte —gritó antes de salir por la

puerta. Lucas esperaba que fuera la última vez que viera al hombre. El

tipo estaba loco, y Lucas tenía que llevársela lejos. No podía entender cómo

se sentía segura en cualquier lugar cerca de ese tipo.

Lucas escuchó un crujido de una puerta abriéndose, y, a continuación,

Amy estaba de pie delante de él. No existen otras palabras para describir la

mirada de horror que le dio. Lucia como un ciervo atrapado por la flecha

de una ballesta y sabía que preferiría hundirse en el piso de la inmunda

casa que hablar con él.

D

Page 58: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

8

A Lucas le hubiera parecido divertida la expresión de Amy en cualquier

otro momento, pero al verla en la casa de un sucio hombre, cualquier

rastro de humor acerca de la situación se esfumó. Él estuvo cerca de

tomarla de un hombro y alejarla de ese lugar.

—¿No vas a invitarme a entrar? —preguntó Lucas con los dientes

apretados.

—Sr. Anderson, ¿cómo encontró éste lugar? Estoy aquí sólo

temporalmente, lo juro. Voy a mudarme a uno de esos apartamentos en un

par de semanas.

Sonaba ansiosa.

—Hice un par de llamadas. Tenías tanta prisa por alejarte de mí anoche,

que dejaste tu bolso en mi auto —respondió.

Ella bajó la mirada y notó lo que estaba sosteniendo.

Amy se acercó a tomar el bolso, pero él la detuvo antes de que entrara por

la puerta. Ella se apartó de él, evitando el contacto físico.

—Sr. Anderson, no hay necesidad alguna de entrar. Le agradezco por traer

mi bolso, pero estaba a punto de salir.

No hacía contacto visual con él, y apenas pudo evitar las ganas de agarrar

su barbilla y enderezar su cabeza para que lo mirara a los ojos.

—Vamos a buscar tu abrigo. Necesitamos hablar. —Fue todo lo que dijo él

en respuesta. Esas palabras finalmente la hicieron alzar la mirada, su cara

lavada recupero algo de color. Bueno, él pensó, preferiría verla enojada que

avergonzada y derrotada.

—Puede ser mi jefe, de lunes a viernes, Sr. Anderson, pero los fines de

semana son míos y puedo hacer lo que quiera —dijo con vehemencia—.

Usted puede irse.

Se volvió hacia su habitación, al parecer esperando ser obedecida.

Obviamente, estaba equivocada si pensaba que él se iría. Su actitud

arrogante estaba alterándolo. Él la siguió en silencio y cerró la puerta de

su habitación detrás de ellos. Se dio la vuelta ante el sonido de la puerta al

cerrarse. Cuando le devolvió la mirada, él vio fuego ardiendo en ellos.

Page 59: 1.the billionare wins the game

Pág

ina5

9

—No escuchó, ¿cierto? —espetó ella—. Se lo dije, tengo cosas que hacer

hoy. Estoy más que dispuesta a dejar que usted sea el jefe durante la

semana, pero mi tiempo personal es mío, y yo no le debo ninguna

explicación. —Tenía las manos en las caderas, los labios apretados, y

estaba dando golpecitos con el pie al piso sucio.

Era verdaderamente un espectáculo digno de contemplar.

Finalmente, logró esquivar su mirada para centrarse en observar a su

alrededor, a un espacio pequeño. Su habitación era casi... hogareña. Él no

creía que hubiera una sola mota de polvo a la vista. Era pequeño, muy

pequeño. Su armario era más grande que la habitación, pero estaba

impresionado con la forma en que todo estaba limpio y ordenado.

Tenía un alambre colgando a través de la pared del fondo para la ropa,

algunas de las cuales le darían un par de noches de insomnio. También

tenía una especie de cubo en la esquina con jabón para lavar a su lado.

En la otra pared había un pequeño aparador con una especie de mini-

nevera y una pequeña cocinilla.

En el centro de la sala, a sólo un par de pies delante de él, estaba la cama.

Hecha con un tejido muy elegante en la parte superior. La cama parecía

estar asentada en una especie de bloque.

Podía ver que había hecho un esfuerzo real en su pequeño hogar, pero por

desgracia, colocar una taza de porcelana en el alcantarillado no hacia al

alcantarillado mejor. No verías a la hermosa taza. Todo lo que verías sería

la porquería que lo cubre.

Lucas por fin pareció darse cuenta de que estaban de pie a solas en un

espacio reducido, y una cama invitándolo frente a él. Su mirada se centró

en Amy, quien estaba totalmente enojada y su ira disminuyó de repente,

necesitaba tomarla en ese lugar.

Lucas dio un paso hacia Amy. Estaba perdiendo la voluntad y no sabía si

podría resistirse a ella por algún minuto más. Su paciencia estaba

comenzando a agotarse y juró no comenzar algo hasta que pudiera

finalizarlo, y aunque la casa fuera tan repugnante como lo era, había una

cama limpia delante de él, que funcionaría bien. Repentinamente la puerta

fue abierta de un empuje y de ella salió el compañero borracho de

apartamento de Amy, mayormente desnudo. Lucas iba a golpear al tipo,

algo que no había hecho desde sus días de universitario.

Page 60: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

0

—Bueno, Amy, ya que parece que me has mentido —dijo arrastrando las

palabras—. Tu renta se triplicará y la quiero ahora o puedes sacar tu culo

adinerado de mi casa. Obviamente, tienes una clientela adinerada, por lo

que no deberías tener problemas con dinero en efectivo.

—Yo no tengo ese tipo de dinero... —comenzó ella.

Él rápidamente la interrumpió.

—Tú siempre estás caminando por aquí como si fueras mejor que el resto

de nosotros. Siempre hablas de cosas que no entiendo y tienes esa mirada

de desprecio en tu cara. Al ver a uno de tus novios, supe que tienes un

montón de dinero. Ese auto que él está manejando vale más que tres de

estas casas. ¡Quiero mi dinero, ahora! —gritó y dio un paso amenazador

hacia ella.

Lucas rápidamente intervino en su camino, y la mirada en sus ojos paró al

hombre, quien no se acercó más. Normalmente, Lucas habría parado al

tipo por hablarle de esa forma, pero las cosas estaban saliendo mucho

mejor de lo que esperaba. Él había planeado exigirle que dejara el lugar,

pero ahora él no sería quien luciría como el malo. El inútil pedazo de

basura se estaba convirtiendo en un héroe para Lucas. Él conseguiría

sacarla de la casa y el haragán borracho sería el responsable

—Eres un bastardo borracho, nunca te he soportado, ni a éste pedazo de

mierda de lugar, casi destruido. Siempre te he pagado a tiempo cada mes

sólo para puedas tomar mi dinero y te drogues. Me he alojado aquí sólo

porque no he tenido otra opción, y para tu información, me voy de aquí en

un par de semanas, de todos modos. ¡Estoy harta de tu pestilencia! —

terminó con lágrimas en los ojos.

—¡Sal ahora puta snob ...! —gritó antes de ser interrumpido por Lucas.

—Ya es suficiente. Ella se irá, pero hasta que lo haga, sal de su habitación.

Si le hablas de esa manera otra vez, te las vas a ver conmigo —dijo Lucas.

El hombre dio un paso atrás e hizo una rápida retirada. Incluso él sabía

que no debía desobedecer a Lucas.

—Amy, no es necesario de que te lleves algo de aquí. Voy a reemplazar

todo. Nos iremos.

Page 61: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

1

Lucas estaba tratando de ser amable, una actitud nueva de parte de él

hacia ella, pero sonó como si no creyera que sus pertenencias valieran la

pena de conservarse.

—Usted puede hacer más dinero en un día de lo que he hecho en toda mi

vida, pero todavía me siento orgullosa de mis posesiones —dijo

bruscamente.

—Amy, yo no intentaba insultarte, o a tus pertenencias. Es sólo que tu

compañero de apartamento es muy inestable, y quiero sacarte de aquí lo

antes posible.

Ella finalmente rompió en llanto.

—¡No recibo limosnas!

Lucas se acercó y la tomó en sus brazos. Trató de empujarlo, pero era

como mover a una roca de dos toneladas. Dejó de luchar contra él y luego

sollozó en su hombro durante unos pocos minutos. Rápidamente llamó a

su hermano en busca de ayuda, mientras seguía abrazándola.

Por último, cuando se podía decir que se había calmado lo suficiente como

para comenzar a empacar, la ayudó a recoger sus pertenencias. Para

cuando terminó, su hermano Alex, estaba allí con su camión.

—Oye, Lucas, ¿estoy interrumpiendo?

Amy alzó la vista cuando Alex entró en la habitación.

—¿Es una regla en su familia que todos los chicos nacen más guapos que

los dioses griegos?

Podía ver que había hablado antes de pensar en ello. Lucas vio cómo la

cara de Amy se puso roja en cuanto las palabras salieron de su boca.

Lucas de repente sonrió, una sonrisa por primera vez en mucho tiempo. Le

gustaba que Amy lo comparara con un dios. Realmente le gustaba que

pensara que él era sexy. Ciertamente no era tan inmune a él como estaba

tratando hacerle creer.

* * * *

—Tú debes ser la famosa señorita Harper, la causa de las noches de

insomnio de mi hermano —habló Alex, se acercó y la levantó de inmediato

Page 62: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

2

en un enorme abrazo de oso. Amy estaba demasiado aturdida como para

decir algo.

Después de que Alex por fin la soltó y gentilmente la puso en el suelo, lo

miró sorprendida y un poco consternada, al descubrir que no sentía la

más mínima agitación de deseo por él. Era tan guapo como su hermano,

con un cuerpo bien formado, y sin embargo no hubo fuegos artificiales al

estar en contacto con él.

El hecho no fue del agrado de Amy. Si se sentía atraída por él, entonces

podría explicar su atracción por Lucas, también. Él era caliente por lo que

cualquier mujer podría sentirse atraída. Mientras miraba más de lo que

debería a Alex, se dio cuenta de que era inútil. Parecía que el único

Anderson con el cual su cuerpo traidor respondía era el que estaba

frunciendo el ceño hacia ella.

—Alex, si pudieras dejar de maltratarla, para presentarte. Amy, éste es mi

desagradable hermano menor, Alex. Él era el único disponible que tuviera

un camión grande, así que no podía dejar pasar su ayuda —se quejó

Lucas.

—Gracias —murmuró Amy, sin saber realmente qué más decir.

—Un placer, Amy. Siempre estoy disponible para ayudar a una dama en

apuros —dijo él con un guiño, causando que sus mejillas se calentaran.

—Sí, Alex, lo entendimos, te gusta coquetear. Si pudieras poner tus

hormonas bajo control durante cinco minutos, podríamos conseguir sacar

las cosas de ésta habitación y salir de una vez por todas de aquí. No sé

cuánto tiempo pasará hasta que el loco vuelva y yo realmente no tengo

ganas de recibir un disparo hoy —murmuró Lucas.

—Sí, señor —dijo Alex con un saludo burlón, antes de reírse. Lucas lo miró

ferozmente antes de que los dos hombres comenzaran a moverse.

Antes de que Amy supiera lo que estaba pasando, tenían su habitación

completamente vacía y sus cosas cargadas en el camión de Alex. Estaba de

pie en la acera mirando hacia la casa a la que se vio obligada a vivir

durante años. Mirando a través de los ojos de Lucas, era pequeña. Estaba

un poco horrorizada por haber logrado vivir en un agujero por tanto

tiempo.

Page 63: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

3

Amy fue sacada de sus reflexiones, cuando las palabras de Alex la

sorprendieron.

—No puedo esperar para robarte de mi hermano mayor, Amy. Eres

impresionante y demasiado buena para él. No rompas mi corazón. —Él

terminó de hablar, y le dio un beso rápido en los labios, luego se volvió y

trotó hacia su camioneta.

Se quedó clavada en el cemento durante unos segundos, levantó la mano

hacia sus labios. Nunca había estado tan cerca de hombres seguros de sí

mismos y le resultaba difícil de entender cómo se suponía que debía

actuar. Los chicos normalmente no la besarían en la mejilla, por no hablar

de los labios.

Finalmente, cedió a su buen humor natural y comenzó a reír. ¿Cómo no

disfrutar de la compañía de un hombre tan divertido? Descubrió que le

gustaba ése tipo de coqueteo inofensivo. La hacía sentir mucho mejor

acerca de su día.

Lucas, por su parte, no parecía tan divertido.

—Tienes que hacer caso omiso de mi hermano. Ha dejado que las

hormonas controlen toda su vida, y le gustan las mujeres bonitas, pero es

inofensivo.

Le tomó la mano y la condujo hacia su coche.

Vio que Lucas estaba irritado, pero no furioso. Y se dio cuenta de cómo los

hermanos se preocupaban por los demás. También parecía que les

gustaba irritar al otro y viceversa si podían. No quería meterse en medio de

eso. No era lo suficientemente fuerte para eso.

* * * *

Lucas no le admitiría a ella cómo él había querido destruir la cara de su

hermano por atreverse a besar a su mujer. También, él no admitiría lo

celoso que estaba en ése momento porque ella no había golpeado a su

hermano por haberla besado.

Se obligó a calmarse porque sabía que Alex estaba tratando de fastidiarlo.

Había funcionado.

Page 64: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

4

Cuando llegaron a las puertas del auto, Amy de repente dudó.

—Espera un minuto.

—¿A dónde llevaran todas mis cosas? Yo no sé a dónde ir, todavía. Esto

ocurrió tan rápido que no he tenido tiempo de pensar en lo que pasará

después.

Lucas podía ver que estaba empezando a entrar en pánico.

—Amy, cálmate. Voy a llevarte a casa de mis padres, por ahora. Mi

hermano le dijo a mi padre lo que pasaba, y mi padre quería hablar

contigo. —Empezó a sacudir la cabeza cuando él la miró a los ojos—. Amy,

no es prudente decirle a mi padre que no.

Amy no dijo nada más. Sólo subió en el vehículo y se abrochó su cinturón

de seguridad. Lucas rió mientras caminaba alrededor del auto. Él sabía

cómo se sentía. Cuando su padre hacia una seña, tú ibas. Tú no ibas

porque él estaba a la cabeza de la familia. Ibas porque el hombre se había

ganado tu respeto. Ibas porque era el tipo de hombre por el cual podrías

inclinarte en una reverencia.

Había sido un padre excepcional, nunca colocó el trabajo por delante de su

familia, y siempre fue el primero que estaba cuando cualquiera de los

chicos tenía un problema o una buena noticia, si era el caso. Era

consciente de la situación de Amy porque la familia siempre le dijo todo.

Lucas y Amy no hablaron durante el viaje a la mansión de la familia. Él

sabía que ella necesitaba tiempo para recuperarse. Había pasado por

muchas cosas en las últimas horas y estaba feliz de saber que no era el

chico malo de la situación actual.

Amy necesitaba tiempo para sí misma porque estaba a punto de ser

arrojada en el caos de su familia. Todo el mundo estaba en la casa este fin

de semana por el cumpleaños de su madre. Cualquier día de fiesta era

motivo para que la familia celebrara junta, pero el cumpleaños de su

madre era algo más grande.

Su padre siempre decía que el nacimiento de su esposa era un gran motivo

de celebración. Era la luz de su vida y que su mundo hubiera estado vacío

sin ella. Sentía que su cumpleaños debía ser un día de fiesta nacional.

Amy interrumpió sus pensamientos cuando por fin habló mientras se

acercaban a la casa.

Page 65: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

5

—Sr. Anderson, perece que tiene visita en su casa. Probablemente no es el

mejor momento para que me quede aquí. Por favor, ¿me dejaría usar su

teléfono para poder llamar a un taxi y dejar de ser un problema para

usted? —habló casi en un susurro.

—De ninguna manera. —Fue su única respuesta.

Amy se miró a sí misma y luego de vuelta hacia él.

—Estoy usando unos viejos pantalones vaqueros —suplicó—. Por favor no

me haga entrar ahí con este aspecto.

Él sólo se rió al ver la expresión de pánico en su rostro y su voz

horrorizada. Su familia había sido bendecida con más que la mayoría, pero

no eran lo que pensaba que eran. Nunca habían tratado mal a alguien por

la forma en que estaban vestidos, o porque no tenía mucho dinero.

—Actúas como si fuéramos un grupo de snobs. Somos gente normal, como

cualquier otra persona. ¿Y qué si nos gustan las cosas bonitas? Tú eres

una snob en estos momentos, al juzgar a mi familia por lo que tenemos —

dijo en tono acusador.

Sus palabras funcionaron muy bien. Sus ojos se abrieron mientras

pensaba en lo que había dicho, entonces vio el fuego que tanto le gustaba

en sus ojos. Bueno. Le gustaban sus defensas, su confianza. No quería un

ratón de mujer sentada a su lado. Quería una mujer fuerte, terca, alguien

que lo desafíe y haga arder su sangre. Además, había algo que Amy tenía

que aprender de él, que siempre conseguía lo que quería, y en ese

momento él la quería con él.

Lucas dio la vuelta alrededor del auto y la ayudó a salir. Él puso su brazo

en el suyo y la arrastró por el camino.

Había ido a la mansión por su entrevista de trabajo hace un tiempo, por lo

menos no tenía por qué sentirse tan intimidada ahora. A pesar de que

había estado allí antes, él se dio cuenta de cómo perdió el aliento al ver

toda la belleza del lugar. Era el hogar de su infancia, pero él sabía cómo se

vería para un extraño. Era impresionante.

Lucas la condujo a través del vestíbulo hacia la parte trasera donde la risa

se oyó venir por los pasillos. Mientras caminaba hacia adelante con ella a

su lado, Lucas sintió cómo se iba la tensión. Le gustaba estar a su lado,

Page 66: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

6

aunque sabía que no debía. No importaba, sin embargo, estaba en casa y

Amy estaba a salvo. Se sentía muy bien.

—Finalmente, llegaste. ¿Qué has hecho, tomar la ruta del turista? He

estado aquí durante media hora ya, y yo no era el que conducía el auto de

carreras. —Alex se acercó y le dio un codazo a su hermano en las

costillas—. Estás perdonado, sin embargo, ya que trajiste a mi futura

esposa hermosa. ¿Cómo estás, preciosa? Hemos estado separados por

mucho tiempo ya. ¿Quieres huir conmigo a Las Vegas y casarnos? —

bromeó. Puso su brazo alrededor de ella y la arrastró por la habitación

para tomar una copa.

Lucas sacudió la cabeza mientras rodaba los ojos. Sabía que a su hermano

le daba aun más miedo el matrimonio que a él. Iba a mantener un ojo en

ella, sin embargo, porque si alguien podía cambiar a su hermano de

playboy a un hombre felizmente casado, sería Amy.

Se había asegurado de hacerles saber que era suya, por lo que sus dos

hermanos sabían que Amy no estaba en el mercado. Se sorprendió al ver

los celos corriendo a través de él. Nunca había sentido lo mismo por

cualquier otra mujer con la que había salido. Si alguna hubiera tenido

ganas de correr al lado de sus hermanos, con mucho gusto les hubiera

dicho adiós.

No es que hubiera sido un problema, ya que ninguno de sus hermanos se

interesaba por la mujer del otro. Tenían un código entre ellos y nunca lo

romperían. Tú no ibas y robabas a la chica de tu hermano. Por otra parte,

que se sintieran celosos el uno del otro era un asunto completamente

diferente, y a los chicos les encantaba fastidiarse entre sí.

Empezó a caminar para recuperar a su mujer... uhm, empleada... de

nuevo, cuando Esther le salvó de hacer eso.

—Alex, déjala. Estás coqueteando descaradamente y la estás

avergonzando. ¿Cómo estás, Amy?

—Estoy muy bien. Realmente estoy tratando de entender ese programa del

computador, y no creo que tenga que llamarte el lunes. Hoy es sólo otro

imprevisto de último momento. Nada de qué preocuparse —dijo Amy a

Esther con valentía.

Lucas se dio cuenta de que Amy no estaba acostumbrada a que la gente se

preocupara por ella, ni que la quisiera, si era el caso. Tendría que

Page 67: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

7

acostumbrarse a ambos. Los empleados de los Anderson eran

considerados parte de la familia.

Se preocupaban de ellos. Sus días de soportar el peso del mundo sobre

sus hombros habían terminado.

* * * *

—Sé que estás haciendo un excelente trabajo. Quiero decir, ¿qué estás

haciendo con tu vida? Me enteré de lo de tu hogar —dijo con simpatía.

Antes de que Amy supiera lo que estaba pasando, ella se vio envuelta en

un abrazo. Se formó un nudo en su garganta mientras Esther la abrazó.

—Ahora, no tengas miedo de pedir ayuda de vez en cuando. Vamos a llegar

a conocernos muy bien porque esta familia se preocupa de las personas

que aman —dijo.

—Gracias, Esther. Es muy bueno tener excelentes patrones —Amy

finalmente logró decir.

—Sí, fue difícil al principio retirarme. Me encantó trabajar tanto en las

oficinas de Joseph todos estos años. Vi a sus hijos crecer mientras corrían

por los pasillos en el trabajo. Entonces, me hice muy amiga de Katherine.

La mejor parte de la jubilación, sin embargo, es que son mi familia ahora,

así no los perdí, acabo de conseguir más días para dormir.

—Estoy un poco abrumada por todo esto. No estoy acostumbrada a que

las personas se preocupen por mí. Se siente un poco surrealista, como si

fuera a despertar en cualquier momento. Realmente espero que no sea el

caso —admitió Amy.

—Puedes relajarte, Amy. Estás en buenas manos —prometió Esther.

—Amy, estoy tan contento de que estés aquí. Tenemos mucho de qué

hablar, pero eso vendrá más adelante. Estoy seguro de que te has dado

cuenta de que hay mucha gente alrededor. —Joseph se coló entre ellas y

su entusiasmo causó que Amy saltara un poco. Él siguió hablando antes

de que tuviera oportunidad de responder:

—Hoy es el cumpleaños de mi increíble esposa, y todos nos reunimos para

celebrar la llegada de esta hermosa mujer al mundo. Vamos, vamos, quiero

que la conozcas, junto con algunas otras personas. Le he hablado acerca

de nuestra reciente empleada —concluyó.

Page 68: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

8

Él puso su brazo en el suyo, y tuvo que correr un poco para mantener su

ritmo. Puede que se retirara de ser presidente, pero él había dirigido la

compañía durante muchos años y todavía estaba muy activo.

—Katherine, me gustaría que conocieras a Amy, la nueva asistente

ejecutiva de Lucas. Está haciendo grandes cosas por allá. Yo no creo que

sea posible reemplazar a Esther, pero tenemos mucha suerte al tener a

Amy —dijo Joseph mientras se dirigía a una mujer hermosa, quien no

parecía tener más de cincuenta años.

Su pelo de longitud media estaba perfectamente estilizado sobre sus

delgados hombros. Era casi de la misma altura que Amy, a pesar de sus

tacones de cuatro o cinco centímetros. Sus brillantes ojos castaños tenían

pequeñas líneas alrededor de ellos, obviamente, demostrando que sonreía

mucho.

—Es maravilloso conocerte, Amy. He oído hablar mucho de ti. Lamento

tanto tu situación, querida. No dejes que ésta gente te abrume demasiado.

Sé que hay mucha testosterona en ésta sala, pero todos estos chicos sólo

hablan mucho. Cuando llegas a conocerlos, son nada más que gentiles

gigantes —dijo Katherine mientras se inclinaba hacia adelante.

Antes de que Amy pudiera hablar, Katherine tiró de ella en un abrazo. Se

estaba acostumbrando a lo cariñosos que eran los Anderson. No tenían

ningún problema con abrazos o besos. Realmente tuvo que luchar contra

las lágrimas mientras Katherine la abrazó por un momento, el dulce aroma

de la canela flotando a su alrededor.

La madre de Amy nunca la había abrazado. ¿Cómo podía cuando había

estado tan ocupada consiguiendo su próxima dosis?

Hacerse cargo de su familia era un compromiso que se había hecho cada

día cuando tuviera sus propios hijos. Se encontró queriendo aferrarse a

Katherine por unos minutos más.

La mayoría de las veces pensaba que estaba bien con no tener familia,

pero viendo a los numerosos y afectuosos Anderson, todos juntos en una

habitación, se daba cuenta de que no estaba tan bien con eso. Quería ese

vínculo familiar.

—Gracias por invitarme a su fiesta —logró decir Amy cuando Katherine la

soltó.

Page 69: 1.the billionare wins the game

Pág

ina6

9

—El placer es todo mío, querida. Me encanta mi cumpleaños porque

siempre es maravilloso tener a mi familia y amigos cercanos. Vamos a

vernos muy seguido ahora que trabajas para nosotros. Es por eso que

Joseph siempre ha sido tan exigente con quien contrata en esas

posiciones, porque sabe que no es sólo un empleado, sino una parte de

nuestra familia, también.

Amy no sabía qué decir. Le había dicho que los Anderson trataban a sus

empleados muy bien, pero no podía entender porque los invitaban a su

casa, tratándolos como iguales. No es extraño que su tasa de rotación de

personal fuera tan baja. Estaba agradecida de nuevo por la suerte de

haber conseguido ese trabajo.

Con aun más determinación, supo que tenía que luchar contra su

atracción hacia Lucas, porque de ninguna manera quería perder su

posición en la Corporación Anderson. No tanto por su cheque, sino que los

necesitaba desesperadamente, le gustaba la idea de ser parte de su

familia.

—Te llevaré a conocer a más gente, Amy. Hay una gran cantidad de

ejecutivos de las oficinas que probablemente conocerás, pero sé que

siempre me toma un tiempo aprender sus nombres. Este es un buen lugar

para hacerlo. Algunas de las personas que están aquí se han retirado ya

hace un tiempo, pero en general se los ve en las oficinas ayudando a la

nueva generación. Una vez que seas parte del acelerado mundo de los

negocios, es difícil desprenderse de él, incluso si sabes que es hora de

retirarse —dijo Joseph con una sonrisa

Durante los siguientes veinte minutos, Joseph la arrastró por toda la

enorme habitación para hacer tantas presentaciones que sabía que nunca

los recordaría a todos.

A pesar de que la gente estaba vestida de manera informal, todavía se

sentía incómoda de pie entre ellos usando sus viejos pantalones vaqueros

y una sudadera. Nadie la miraba con disgusto, al menos no lo había

notado pero todavía estaba acomplejada por su aspecto.

Mientras hacían sus rondas finales, se produjo un gran revuelo en la sala.

Levantó la vista para ver lo que causó la conmoción, cuando de pronto otro

dios griego estaba de pie delante de ella.

Page 70: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

0

En serio, ¿crecían en los árboles? Vio el parecido de familia y sabía que

éste debía ser el último hermano. Santo cielo, era tan sexy como el pecado

con su piel firme, sus desgastado jeans Wrangler y un sombrero negro de

vaquero que había visto días mejores. La sonrisa que se extendía por su

cara remataba su aspecto devastador.

A pesar de que su ropa estaba casi tan desgastada como la de ella, él con

ella o sin ella lograría verse increíblemente bien.

—Oye chico, ¿qué te tomó tanto tiempo? Sabes que tu madre ha estado

preguntándose dónde estaba su hijo menor. Pensó que habías olvidado por

completo su cumpleaños —dijo Joseph, antes de inclinarse y darle a su

hijo un abrazo.

—Ah, papá… Isabelle estaba dando a luz, y tenía que asegurarme de que

iba a estar bien. Chad está con ella ahora, así que me apresuré para llegar

hasta acá —dijo tímidamente a su padre.

—Sólo porque has llegado antes de que se cortara el pastel —dijo Joseph,

perdonando la llegada tardía de su hijo.

—¿Dónde está Lucas? Tengo que hablar con él —preguntó Mark, antes de

que sus ojos se encontraran con ella. Vaya, se parecía a su hermano

mayor, pero era un poco más robusto. Los tres juntos harían que

cualquier mujer se derritiera a sus pies.

—Tu hermano está al otro lado de la habitación, y si no me equivoco, te

está lanzando el mal de ojo —le dijo Joseph con un guiño a Mark, el cual

Amy no comprendió.

Mark miró a Lucas, y una enorme sonrisa se formó en su rostro, luego se

volvió hacia ella. Pensó que sus propias rodillas temblarían. El tipo tenía el

atractivo sexual escrito sobre él, y tuvo que admitir que no le dolían los

ojos al mirarlo.

Amy no tenía forma de saber que la mirada que Lucas le estaba dando a

su hermano, claramente diciéndole que no era solamente su asistente,

Lucas le estaba dejando en claro a todos los hombres en la sala que

aquella mujer era solamente suya.

—Ahora dime, ¿quién es ésta hermosa mujer que llevas del brazo? ¿Mamá

finalmente recobró sus sentidos y te mando a pasear? —Se dio la vuelta,

dándole a Amy toda su atención.

Page 71: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

1

Sintió un rubor cubriendo sus mejillas, luego bajó la mirada, no quería

que se diera cuenta de que estaba avergonzada.

—Mark, deja de avergonzar a nuestra invitada. Ésta es Amy Harper. Es la

nueva secretaria ejecutiva de tu cobarde hermano de allá, que por cierto,

está dándote una mirada muy fea —le incitó Joseph.

—Bueno, señorita Amy es un verdadero placer conocerla. Tengo una gran

oferta de trabajo, si es que usted se cansa de trabajar para un aburrido y

pedante hermano mío —dijo, mientras le dio un guiño coqueto.

Antes de que Amy pudiera parpadear, tiró de su brazo, consiguiendo un

casto beso en frente de una sala llena de extraños. Rápidamente se giró

con la espalda recta y le echó el brazo por los hombros.

—La oferta de trabajo sigue en pie si quieres. Eres simplemente

impresionante y una besadora espectacular —dijo él con un guiño.

Amy temía que su rostro permaneciera ruborizado durante todo el tiempo

que estaba en torno a los hombres Anderson. Con su belleza y confianza,

tenía la sensación de que cada uno tenía una visión diferente del mundo.

Debió sentirse ofendida por haber sido besada por los tres hermanos, pero

no tenía ganas de quejarse. Ni Alex ni Mark, habían tratado de profundizar

sus besos. Tenía la sensación de que serían buenos amigos, a pesar de que

podría haber aprovechado la oportunidad de hacerles saber que nada

estaba pasando entre ella y Lucas.

Mientras Amy pensaba en los tres besos por separado, se quedó

consternada al darse cuenta que sólo el beso de Lucas había causado un

deseo ardiente dentro de ella. Sabía que Lucas no era el único hombre

elegible en esta sala, pero se sentía atraída hacia él. No estaba contenta de

darse cuenta de eso.

Sabía que los dos hermanos de Lucas estaban coqueteando

inofensivamente, pero por lo general cuando una mujer era besada por

hombres tan afables y francamente guapos como Mark y Alex, ella no

podría controlar las respuestas naturales de su cuerpo. Estaba pensando

en lo que debía hacer cuando Lucas se acercó a ellos.

—Está bien, Mark, puedes quitar tus manos de Amy. Me la llevaré para

conseguir algo de comida. Por cierto, no está disponible —dijo Lucas

mientras sacaba el brazo de Mark de sus hombros. No se había dado

Page 72: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

2

cuenta de que su brazo aún estaba alrededor de ella hasta que Lucas lo

dijo.

Con esto, se cambió de un hermano a otro. Estaba empezando a sentirse

como un juguete nuevo y brillante. Definitivamente, recordaría corregirlo

cuando le dijera a la gente que no estaba disponible. No quería salir con

nadie en este momento, pero no era el lugar adecuado para hacer ese

anuncio. No era de su incumbencia, y ciertamente no tenía derecho a

decirle a nadie acerca de su vida amorosa, o mejor dicho, la falta de una.

A medida que su mano se posó en su hombro, sus dedos la tocaron,

acariciando su clavícula, Amy sintió el tirón familiar de calor deslizándose

a través de ella. Su pulgar rozó su cuello y la piel de gallina al instante

estalló. ¿Por qué él? ¿Por qué tenía que ser Lucas el que despertara su

libido dormido?

—Lo siento por mi hermano, por cierto, mis dos hermanos. Sólo están

tratando de fastidiarme, pero deben involucrarte a ti para hacerlo —se

quejó Lucas mientras la conducía hacia el área de alimentos, donde los

platos eran ilimitados para los huéspedes.

—Creo que lo positivo de la situación es que ahora puedo decirles a todos

que he besado tres de los mejores hermanos que he visto nunca. Hará que

me vea más mundana de lo que soy —dijo con una sonrisa.

Amy se imaginó que tenía dos opciones en la materia. Bien podría irritarse

o podría encontrar lo divertido de la situación. No todos los días una chica

era besada por tres hombres increíblemente calientes, así que decidió que

tomaría la opción número dos y reiría.

—¿Le gusta jugar con diferentes hombres? —preguntó con voz tranquila.

—Sus hermanos son inofensivos —dijo finalmente. Lucas miró hacia abajo

y ella no entendía por qué estaba tan molesto.

—No estabas riendo cuando me besaste.

Amy se detuvo en seco por ése comentario. No, no había estado riendo

cuando él la había besado, pero luego, su cuerpo había estado en fuego

todo el tiempo, haciéndola olvidar dónde estaba. Lucas le daba miedo, le

hacía olvidar que no quería una relación. No podía darle un beso, era

demasiado peligroso.

Page 73: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

3

—¿No dijiste algo acerca de la comida? —preguntó, tratando de cambiar de

tema, esperando que él lo hiciera.

Él la miró intensamente durante unos momentos antes de que siguiera

caminando. Exhaló un suspiro de alivio al dejar que el asunto pasara. Un

incómodo silencio los rodeaba mientras cada uno cogió un plato.

Amy perdió todo el apetito mientras permanecía de pie junto a Lucas,

preguntándose exactamente cómo iba a continuar trabajando para él. Si él

la dejaba, estaba segura de poder superar su enamoramiento, pero con él

tocándola, no estaba segura de durar más de un mes antes de que

estuviera rogándole para que terminara lo que había iniciado en la calle

oscura.

Trató de alejarlo de su mente mientras Lucas la condujo a una mesa y se

sentaron. No pasó mucho tiempo para que otros se unieran. Pronto, fueron

rodeados y Amy se sorprendió al descubrir que estaba disfrutando de la

noche, la fiesta continuó hasta bien entrada la noche.

Amy soltó sus problemas e incluso olvidó que estaba técnicamente sin

hogar por el momento. Se relajó y se tomó el tiempo para conocer a otras

personas de la oficina, incluso programando almuerzos durante el mes.

Todo saldría bien. Así sería, porque estaba empezando a sentirse segura,

por primera vez en su vida.

Page 74: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

4

Capítulo 7 Traducido por Alyshia Cheryl

Corregido por Alicadi

my no tenía ni idea de lo tarde que era hasta que estuvo

sentada cómodamente en una silla, balanceándose en la

terraza de atrás y viendo cómo la fiesta comenzaba a

acabarse.

Los problemas vinieron a su mente. Ella no tenía mucho dinero guardado.

Tenía sus primeros dos cheques de pago, que eran impresionantes, pero

ese dinero se suponía que era para el pago inicial de su nuevo

apartamento. Si ella gastaba el dinero para alojarse en un hotel, le tomaría

mucho más tiempo instalarse en un lugar fijo.

Oh, bueno, pensó. No tenía más remedio que hacerlo. Simplemente

retrasaría sus planes por un mes o dos. Eso no era un problema que no

pudiera resolver. Estaba tan cerca de sus metas que nada iba a detenerla.

En el gran esquema de cosas, esto era sólo un contratiempo menor.

—Ahí estás, Amy. Me sentaré en este columpio para darme un rato a mí

mismo —dijo Joseph, sacándola de su concentración—. La fiesta

finalmente terminó, así que vamos a entrar en mi oficina y nos

preocuparemos por los negocios —continuó.

—Sí señor —respondió ella sin pensarlo hasta que él levanto una de sus

cejas—. Lo siento, Joseph —dijo con una pequeña sonrisa, cada vez más

acostumbrada a llamarlo por su nombre de pila.

Ella sólo estaba nerviosa y su primera reacción fue de pánico ante la idea

de hablar sobre los negocios. Le preocupaba no estar lo suficientemente

calificada para el trabajo y que él la despidiera cualquiera de estos días.

Ella sabía que no la invitaría a la fiesta sólo para despedirla después, pero

el vivir como siempre lo había hecho, causaba un instinto natural de

temor.

—Ahora que hemos solucionado el problema de los nombres, ven conmigo

—dijo él con una sonrisa. Ella no pudo evitar sonreír ante su buen humor.

A

Page 75: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

5

Amy se levantó y rápidamente siguió a Joseph a través de un laberinto de

pasillos, preguntándose cómo él no se perdía en el inmenso palacio de su

casa. Debió haberle tomado años a Katherine el decorar toda la casa. Amy

miró a su alrededor pensando que la decoración realmente le gustaba.

Había considerado la posibilidad de estudiar diseño de interiores en la

universidad, pero sabía que los empleos eran difíciles de conseguir en el

mercado, así que ella había sido inteligente y había elegido a los negocios

en su lugar. A pesar de que le hubiera gustado tener el lujo de poder elegir

un trabajo que realmente le gustara, no lo hizo. Su primera prioridad era

asegurar su futuro. Ella nunca viviría en un entorno inseguro otra vez.

Quería una familia y no podía tenerla hasta que asegurara su vida. Tuvo

que recordarse que aún era joven y tenía mucho tiempo.

A medida que se acercaban a su oficina, ella se detuvo en seco cuando se

encontró con un cuadro en particular. Era una obra de su artista favorito,

Thomas Kinkaid. Se veía como un original.

Era uno de sus favoritos, con una hermosa casa de campo al lado de un

arroyo. La pintura era impresionante como todas sus demás obras. La

forma en la que estaba pintada hacía parecer como si el agua estuviera

realmente en movimiento, y las luces de la casa encendidas, haciéndole

señas para que entrara. Ella podía imaginarse a sí misma sentada en el

porche rústico mientras sus preocupaciones desaparecían por la corriente.

Sonrió ante la idea tentadora, feliz al ver la bella imagen en el momento de

su vida en que más lo necesitaba.

* * * *

Ella no se dio cuenta de la sonrisa de Joseph al verla extasiada viendo la

pintura. Cuanto más tiempo pasaba alrededor de Amy, más sabía que

había tomado la decisión correcta. Ella no estaba impresionada por las

estatuas de millones de dólares o autos de lujo. Estaba impresionada con

las verdaderas obras de arte. Realmente sería una gran adición a su

familia.

Se enorgullecía de su habilidad para leer a una persona en un corto

período de tiempo. Así era como él había tenido tanto éxito todos los años

que había sido el Director Ejecutivo. Y él había leído a Amy muy

Page 76: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

6

rápidamente. Estaba sola, necesitaba una familia, y tenía miedo para

confiar en la gente. También tenía un corazón de oro.

La había observado la mayor parte de la noche, cómo interactuaba con la

gente en la sala. Siempre estaba haciendo lo que podía para hacerlos

sentir más cómodos, a pesar de que tenía que preocuparse de su vida en

ese momento. No podía imaginar lo que se sentía no tener un hogar

seguro.

Sería una maravillosa esposa para su hijo. Los dos estaban buscando algo

más en su vida, lo que pasaba era que ninguno de los dos se daba cuenta,

o estaban dispuestos a aceptar el hecho.

Joseph pudo darse cuenta de que Lucas no podía apartar los ojos de Amy.

Era obvio que ella estaba desarrollando fuertes sentimientos por Lucas,

también. Joseph esperaba una boda para la primavera. Así podría

conseguir un nieto antes de Navidad. Y no habría mejor noticia que esa.

* * * *

Amy salió de su ensueño, murmuró una disculpa, y siguió a Joseph dentro

de su oficina en la casa. Como todo lo demás en la vida de Joseph, su

oficina era enorme, pero sorprendentemente acogedora. Una enorme

chimenea dominaba la mitad de una pared, ardiendo en su interior, el

crujido de la madera, enviando el olor a pino dulce al aire. Había varios

sillones cerca del fuego, y una biblioteca que recorría toda la pared. Se

acercó a la biblioteca, y encontró algunos de sus títulos favoritos en los

estantes.

Se contuvo, justo a tiempo, antes de agarrar una de las copias de la

estantería. Ella podía imaginarse acurrucada en el sofá, junto al fuego,

leyendo hasta que se durmiera. Eso sonaba casi perfecto en ese momento.

Lucas entró en la habitación, sus ojos lo tragaron antes de que ella

pudiera detenerse.

Se olvidó de que Joseph estaba cómodamente en una de las sillas de la

habitación que estaban cerca del fuego, viendo en silencio el intercambio

entre ellos dos. El calor se extendió a través de ella al verlo, a pesar de que

había estado con él hace una hora antes.

Page 77: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

7

Algo en el ambiente íntimo de la oficina hizo que sus pensamientos fueran

sobre sexo.

Esquivó su mirada y miró hacia la alfombra suave que estaba delante de la

chimenea. Podía verse a sí misma atrapada en sus brazos mientras él

tomaba uno de sus pezones y lo lamía.

¡Alto! ¿Qué estás haciendo? Se preguntó a sí misma. No vas a enamorarte

de tu jefe. Ella repitió eso unas diez veces.

Finalmente consiguió la fuerza de voluntad para mirar hacia otro lado, y se

centró en Joseph.

Después de un silencio incómodo, Joseph le ofreció una sonrisa

reconfortante. Parecía como si pudiera leer su pensamiento, y eso la

asustó. Ella se sentiría horrorizada si él sabía el tipo de pensamientos que

estaba teniendo sobre su hijo.

—Amy ven y siéntate para que podamos hablar.

Amy inmediatamente se adelantó y se sentó en el sofá frente a él. Trató de

relajarse, pero sus manos estaban un poco inestables, por lo que las

agarró firmemente en su regazo y se sentó erguida mientras esperaba a

que continuara.

—Amy, nos gusta cuidar de nuestros empleados. Nuestra filosofía es que,

si tratas bien a tus empleados, ellos seguirán siendo felices en su trabajo

y, por lo tanto, más felices en sus vidas. Todo se resume al punto de

partida. Un empleado feliz es igual a clientes felices —comenzó Joseph.

—Estoy muy feliz en mi trabajo, señor. Sé que estoy luchando un poco con

el sistema informático, pero si me da un poco de tiempo, voy a manejarlo.

Estoy más que dispuesta a trabajar los fines de semana y quedarme hasta

tarde, así no estoy usando su tiempo mientras aprendo el sistema —dijo

Amy cuando encontró su voz. Ella haría lo que fuera necesario para

mantener su trabajo.

—Estás haciendo un trabajo increíble, querida. No tengo ninguna queja

acerca del rendimiento de tu trabajo, estás lista. Esther y Lucas han dicho

que eres una verdadera adición para el equipo. Esta conversación no se

trata de ningún problema de trabajo —consoló él.

Amy tomó un profundo suspiro de alivio.

Page 78: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

8

—Te he traído hasta aquí para hacerle saber acerca de sus beneficios,

mientras trabaje para la empresa. Has pasado tu período de prueba por lo

que el trabajo es tuyo permanentemente —dijo él.

Amy estaba preocupada ante la posibilidad de perder su trabajo, pero él

sólo quería hablar de sus beneficios. Ella estaba tan emocionada que tuvo

dificultades para mantenerse en su lugar. Quería saltar y bailar. El alivio

se deslizaba a través de su cuerpo.

—Sr. Anderson, muchas gracias por la confianza en mí. Realmente

significa mucho. Prometo no defraudarlo, y seguiré ocupando todo mi

tiempo libre para asegurarme de estar dando mi cien por ciento. Éste es el

mejor trabajo que pude haber conseguido alguna vez, sobre todo después

de salir de la universidad —dijo con verdadera gratitud.

Joseph sonrió ante el entusiasmo en su voz.

—Amy, eres un soplo de aire fresco, pero ¿no le gustaría escuchar acerca

de sus beneficios antes de darme tanto las gracias? —preguntó.

—Sí, por supuesto, señor —dijo.

—Sabes que yo estoy oficialmente retirado, y mi hijo está a cargo de la

empresa. Está haciendo un trabajo condenadamente bien, pero él me

preguntó, desde el principio, si yo todavía me encargaría de todas las

cuestiones del personal. Él tiene muchas responsabilidades ya, y esto es

algo que realmente disfruto, como él sabe bien. Nuestra empresa se

enorgullece de ofrecer más beneficios que otras compañías en promedio.

No revelamos esto a los nuevos empleados porque, en primer lugar, quiero

que tomen la posición en la que quieren trabajar aquí, y en segundo lugar,

si el empleado no funciona, entonces no hay daño causado —continuó—.

Nosotros nos encargamos de todos los empleados, desde la parte superior

de la cadena de mando, todo el camino en medio, hasta el fondo. Cada

cargo ejecutivo obtiene un bono, sin embargo, según el trabajo que hace.

Trabajas para el presidente de la empresa, y por lo tanto, queremos

asegurarnos de que seas aun más premiada —dijo Joseph antes de

detenerse.

Amy esperó a oír lo que estaba diciendo.

Pensó que obtendría un paquete médico y jubilación, pero no sabía que las

corporaciones ofrecían más beneficios.

Page 79: 1.the billionare wins the game

Pág

ina7

9

—En primer lugar, recibirás un automóvil de la empresa. Lucas te llevará

a la concesionaria para que lo compren mañana. El favorito de Esther

siempre fue la LX Mercedes, pero puedes elegir lo que te acomode mejor.

Vas a estar manejando un montón para nosotros, y queremos que

disfrutes el paseo. Tenemos siempre en cuenta la seguridad como factor

número uno. —Sonrió él.

Amy sabía que muchas empresas ofrecían vehículos para el trabajo pero ni

siquiera había pensado que podía ser un beneficio suyo. Esther le había

advertido que estaría haciendo un montón de corridas después de que el

entrenamiento hubiera finalizado, pero no se había preocupado de cómo

iba a hacerlo. Estaba casi mareada de tanta emoción. ¿Podría llevárselo a

casa con ella? Quería preguntar, pero tenía miedo que sonara mal.

—El vehículo también será para tu uso personal y puedes mantenerlo —

dijo, como si le leyera la mente—. Si no hay problemas de rendimiento con

el auto, lo cambiaremos cada dos años. La seguridad es una gran

preocupación nuestra, y nosotros no queremos que colisiones en alguna

parte de la carretera —agregó.

—Eso es muy generoso, gracias —masculló ella, sintiéndose tan

asombrada que no pudo decir mucho.

—No hemos terminado aún, también te daremos un celular nuevo —dijo,

entregándoselo junto a un trozo de papel—. Tu número está en el papel.

Tiene minutos ilimitados, por lo que también puedes usarlo como celular

personal y puedes desocupar tu celular viejo. La comunicación es clave

para un buen negocio, y tenemos que ser capaces de comunicarnos entre

sí en todo momento… bueno, excepto en la noche, cuando el trabajo

debería ser la última cosa en la mente de alguien —agregó con una

sonrisa—. Desafortunadamente, en el mundo empresarial, el tiempo se

olvida, y habrá algunas noches de desvelo y fines de semana largos.

Amy no tenía problemas con el trabajo duro. Habría estado dispuesta a

hacerlo de todos modos sin los beneficios añadidos, pero con ellos, no

había cosa alguna que no hiciera por la empresa. Si tenía que trabajar

veinte horas diarias, lo haría con una sonrisa.

—Mi querida esposa colgó un par de llamados de mi empresa en el lago

cuando nosotros estábamos de vacaciones. Ella siempre me dijo que había

un tiempo para trabajar y un tiempo para relajarse.

Page 80: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

0

Después de conocer a Katherine, Amy podría imaginársela haciendo eso.

El pensamiento la hizo sonreír.

—Por supuesto, tendrás el mejor seguro médico, que comienza el lunes, y

todas las demás políticas de la empresa, que he enumerado aquí. Puedes

leerlas más tarde. Te ayudarán a conciliar el sueño. Ahora, el mayor

beneficio, que me parece bastante justo, teniendo en cuenta tu situación

actual que Lucas me ha informado —agregó sin ninguna condena en su

voz—. A todos nuestros ejecutivos se les ofrece vivienda. Tenemos un

edificio de apartamentos fabuloso, reservado para nuestro personal de las

empresas y empresarios que nos visitan junto a sus esposas. Hacemos un

montón de negocios con personas en el extranjero y han descubierto que

ahora prefieren estos apartamentos que un hotel. La renta es muy barata,

y todos los servicios están incluidos. Varios de los miembros de nuestra

junta permanecen en el complejo durante años, mientras ahorran para la

compra de sus viviendas propias. No hay límite de tiempo en la duración

de su estadía. Es tuyo mientras sigas trabajando. Si estás con licencia por

enfermedad, el apartamento es todavía tuyo. Quiero que te sientas como

en casa y segura en tu nuevo lugar.

Amy tenía la sensación de que él sabía un poco acerca de su pasado. Por

supuesto, él sabía de su pasado. Se imaginó que él hizo extensas

comprobaciones de antecedentes de las personas que habían trabajado

para su compañía, sobre todo en un cargo tan alto.

—Tu nuevo apartamento estará listo para el lunes, y podrás instalarte allí.

Tuvimos que pintarlo y hacer un poco de limpieza, ya que es donde Esther

estaba viviendo desde hace bastante tiempo —agregó—. Creo que lo

encontrarás muy cómodo. Ya está amueblado, pero Lucas te llevara para

comprar, y puedes escoger tus propias decoraciones. Tus cosas ya han

sido trasladadas, a excepción de unas pocas ropas que están junto a la

puerta para que las ocupes en el futuro.

—Me encantaría aceptar el apartamento. El edificio que me aprobó para

un par de semanas queda muy lejos del trabajo. Los complejos más

cercanos estaban fuera de mi alcance —dijo Amy con vergüenza.

—Perfecto, entonces podrás ir por la mañana. Luego te encargas de los

asuntos de negocios que tienes. ¿Alguna pregunta?

Amy se quedó atónita. Ella no sabía qué decir. Tenía su propio

apartamento. ¡Su propio apartamento! Incluso estaba amueblado. Se

Page 81: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

1

ahorraría unos cuantos billetes. Estaba tan emocionada que se olvidó de

todo por un momento y se levantó de un salto, lanzando sus brazos

alrededor de Joseph.

—Muchas gracias —dijo ella al verse al borde del llanto.

Amy se dio cuenta de lo que había hecho y lo poco profesional que había

sido de parte de ella, y retrocedió.

—Lo siento mucho, Sr. Anderson. Eso fue completamente poco profesional.

Es que... nunca me imaginé que algo así podría ser parte de mi trabajo…

—De repente ella se ahogó en su propias palabras, y no pudo hablar.

Joseph se levantó del sofá, y la abrazó.

—Está bien, querida. Nunca rechazaría un abrazo. Eres una buena

persona y muy inteligente. Te has ganado todo lo que has recibido. No lo

olvides, jovencita. —Él acarició su espalda, antes de soltarla—. En cuanto

a este fin de semana, entiendo que no tienes un lugar donde quedarte, así

que me gustaría ofrecerte la casa de huéspedes de mi propiedad. Ahora, no

rechaces la oferta. Nos gusta que la gente se quede allí. Es por eso que se

llama casa de huéspedes. No hay necesidad de que te quedes en un hotel

—dijo, sonando como su hijo, sin dejar espacio para la discusión.

—Te ves como si estuvieras a punto de caerte, así que Lucas tendrá que

llevarte hasta allá. Me di cuenta de que estabas mirando algunos libros.

¿Te gustaría llevarte alguno para leer esta noche? —ofreció.

Amy sabía que no tenía sentido discutir con el hombre. Ella perdería de

todos modos.

—Eso sería genial.

Amy no podía hablar en ese momento, o estallaría en llanto. Nadie había

hecho tanto por ella antes. Nunca había tenido a alguien que tuviera tanta

fe en ella, o le demostrara tanto cariño. Era increíble lo maravilloso que era

Joseph. Y comprendió por qué ellos tenían tanto.

Su familia se merecía todo lo que tenía ya que ellos lo devolvían diez veces.

No podía creer la suerte que había tenido al trabajar en la empresa. Ella

definitivamente controlaría la atracción por Lucas porque no valía la pena

perder todo lo que tenía por eso.

Page 82: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

2

Sí, tenía la sensación de que sería caliente, pero una noche en la cama con

él le llevaría años de arrepentimiento.

No había forma de encontrar otro trabajo tan bueno como el que tenía, y lo

perdería si se acostaban.

Sabía que no había forma de que pudieran ser una pareja. Él estaba fuera

de su alcance por lo que tendría que mantener distancias. Sabía que él la

deseaba, era obvio. Lo más probable es que él diera esa misma mirada a

todas las mujeres entre veintiuno y cincuenta, sin embargo. No era más

que un hombre increíblemente sensual. Ella estaba más preocupada por

comprender sus miradas que sobre lo que estaba pasando actualmente

ahí.

Su mente repetía el beso explosivo de hace un tiempo atrás.

Incluso podía justificar eso. Habían estado hasta tarde trabajando y

comenzaron a discutir. La ira tenía una tendencia a convertirse en deseo,

eso era todo.

Amy se dio cuenta de que estaba allí de pie, así que se obligó a moverse, se

dirigió directamente a la estantería y cogió el enorme libro que había

estado mirando antes. No podía esperar para perderse dentro de la

historia. Ella ya se estaba imaginando a sí misma en el mundo de fantasía.

—Gracias de nuevo, Sr. Anderson. De verdad ha sido muy bueno conmigo.

Espero no defraudarlo.

—Ya sabes, vas a tener que comenzar a llamarme Joseph sin que tenga

que recordártelo —bromeó él—. Tengo fe en ti, Amy. Tengo la sensación de

que nosotros vamos a trabajar juntos durante muchos años. Voy a dejar

que Lucas te lleve a la habitación de huéspedes. Necesito encontrar a

Katherine y despedir a los últimos invitados. Disfruta tu noche, querida.

Con estas palabras, Joseph dio media vuelta y salió de la habitación. De

repente, la habitación gigante, parecía más pequeña que un armario, con

ella y Lucas dentro de ella.

Finalmente se dio cuenta que él no había dicho ninguna palabra durante

la conversación. Ella realmente quería saber qué estaba pensando.

Page 83: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

3

Capítulo 8 Traducido SOS por BUTY_MADDOX

Corregido por Catleo

ucas observó todo el convenio entre Amy y su padre. Había

esperado ver la misma mirada de codicia entrar en sus ojos como

generalmente les ocurre a las mujeres cuando están alrededor de

su familia. Sorprendentemente, lo que avistó en su rostro era solo

sobresalto, mezclado con gratitud.

¿Podía realmente no importarle la cantidad de dinero que tenía? Iba a

averiguarlo. Lucas sabía que era cínico cuando se trataba de mujeres, pero

todavía no había encontrado a nadie que no demostrase que estaba en lo

correcto. Es por eso que no tenía citas, y por supuesto no llegaba a

empezar relaciones.

Solo salía con mujeres para satisfacer sus necesidades y, como las trataba

bien, no se sentía culpable por ello. Conseguían lo que querían de él: joyas

caras, viajes ocasionales y la asistencia a las más altas funciones de

publicidad de la ciudad.

Era capaz de satisfacer sus necesidades y ellas de conseguir cinco minutos

de fama y regalos caros. Eso le funcionaba o, al menos, había estado

funcionando hasta que conoció a su ayudante.

Parecía inocente, pero sabía que si se acostaban juntos, ella —al igual que

todas las mujeres— cambiaría. No podía entender su fascinación hacia

ella. Al principio sí, era nueva, aparentemente intocable, fue como una

bandera roja para un toro. Quiso conquistarla y reclamar su derecho sobre

ella. Sin embargo, esos sentimientos deberían haber acabado ya, en lugar

de fortalecerse. Se puso serio ante la idea de ser la única mujer capaz de

someterlo y derrotarlo.

Dejando a un lado la ridícula dirección que su pensamiento había tomado,

se obligó a concentrarse. Cuanto más pronto estuviera resuelto el asunto

con ella, más rápido podría salirse de esto antes de que hiciera algo

estúpido, como besarla de nuevo.

L

Page 84: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

4

—Ven conmigo, Amy. Te voy a mostrar el lugar donde dormirás las

próximas noches —dijo mientras tomaba su brazo.

Cuando salieron de la oficina y comenzaron a caminar por el largo pasillo

hacia la parte trasera de la casa, Lucas sintió como si sus dedos se

quemasen. Sólo su determinación persistente por superar el deseo le hizo

seguir agarrando su brazo. No dejaría que la lujuria lo controlara.

Cuando salieron y se vieron afectados por el frío de la noche, tomó una

bocanada grande de aire esperando que el viento frío de alguna manera lo

enfriara. No funcionó.

En el momento en que llegaron a la casa de huéspedes, estaba agradecido

porque no pudiera leer su mente, porque en ese momento estaba

desvistiéndola lentamente, pieza por pieza, tirando de su pelo suelto de la

cola de caballo, y esparciéndolo por la almohada, sujetando los hilos de

seda entre sus dedos, tirando de su cabeza cerca de...

—Oh, esto es hermoso —exclamó Amy, sacándole de sus pensamientos.

Miró a la pequeña casa de campo rodeada de árboles y flores. Un camino

de piedra conducía a un pequeño porche cubierto que tenía un par de

mecedoras cerca de la pared.

Recordaba haber pasado horas entrando y saliendo de la casa con sus

hermanos. Una semana eran Robin Hood y sus alegres muchachos, la

siguiente vez G.I. Joe1 luchando por la salvación de América. La cabaña

era el territorio enemigo o un refugio, dependiendo del juego. Se habían

metido en problemas más de una vez por asustar a los invitados al salir de

los arbustos tendiendo una emboscada.

Lucas casi sonrió ante el recuerdo. Sus hermanos y él no habían querido

atacar realmente a los invitados, sólo fingieron que iban a capturarlos.

Algunas de las personas no vieron divertido que unos niños enmascarados

los persiguieran.

Amy suspiró, sacándole de su visita al pasado. La miró con curiosidad,

pero ella se negó a mirarlo a los ojos.

1 G. I. Joe: (Government Issue, Joe): En referencia a la representación del gobierno

estadounidense en sus soldados, apodados durante la 2da Guerra Mundial "JOE") es el

nombre de una línea de figuras de acción concebida por Stanley Weston, quien tuvo la

idea de crear unos muñecos militares enfocados a los niños, que pretendían emular el éxito de Barbie entre las niñas.

Page 85: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

5

—Entra, Amy. Te mostraré dónde está todo. Mis padres han abastecido la

cocina por lo que tendrás un montón de comida. Hay sábanas en la cama

y toallas limpias en el baño. Es un lugar pequeño, así que no creo que te

pierdas. Por favor, utiliza lo que necesites de la casa. Es para los clientes,

después de todo —dijo, aunque no creía que ella lo escuchara.

Estaba demasiado ocupada dando vueltas.

Trató de ver a través de sus ojos, dándose cuenta de las flores cortadas

frescas que estaban puestas en la mesa de la cocina pequeña, de la

variedad de jabones y lociones alineados en el mostrador del baño, y de la

bañera de gran tamaño en el jardín donde podía imaginarla metiéndose.

Con ese último pensamiento, Lucas sabía que era hora de irse. De ninguna

manera necesitaba una foto de ella cubierta de burbujas que quedase en

su cabeza.

—Me voy para que puedas relajarte —dijo él antes de escaparse

rápidamente por la puerta principal. Se detuvo en el porche delantero y

respiró hondo. Si no hubiera salido en ese segundo, habría cedido y la

hubiera tirado en la cama, haciéndole el amor hasta que ambos fueran

incapaces de caminar.

Mientras estaba de pie en el silencioso porche, decidió que tal vez era

mejor si se acostaba con ella. Quizá podía funcionar, razonó. Simplemente

le diría que desde el principio fue evidente que se sentían muy atraídos el

uno por el otro, y eso era lo más inteligente. Ella parecía razonable, lo

entendería.

Era la única forma que se le ocurría para poder sacarla de su sistema. Una

vez que tuvieran relaciones sexuales su salud mental volvería a la

normalidad. Si ella hubiera dejado de mirarle intensamente con miradas

ardientes, entonces él podría haber sido capaz de mantener el control un

poco más. Que el rostro de ella fuera como un libro abierto, pensó, no

ayudaba mucho. Sabiendo lo mucho que ella lo deseaba alimentaba más

su propio deseo.

Lentamente volvió a la casa grande para hablar con su padre. Se tomó su

tiempo para entrar, no queriendo que su padre lo viese hasta que su

cuerpo estuviera bajo control. Le tomó mucho más tiempo de lo que era

aceptable para que se enfriara.

Page 86: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

6

Finalmente entró, encontrando a su padre sentado en el estudio con un

vaso de whisky en la mano. Eso parecía una idea excelente.

—¿Hiciste que Amy se sintiera como en casa? —le preguntó Joseph.

—Sí, papá. A ella le encanta el lugar —respondió mientras caminaba hacia

el mini-bar. Se sirvió un trago triple de whisky y se lo bebió de un sorbo.

Sintió que sus nervios se empezaban a calmar a la vez que el fuego

quemaba su garganta y sus ojos se volvían acuosos. El dolor de la bebida

vale la pena, pensó, si podía calmar sus nervios a flor de piel.

Inclinó de nuevo la botella y vertió una pequeña cantidad en el vaso antes

de darse la vuelta y caminar a la zona de estar. Después de sentarse se

obligó a tomar un sorbo de la bebida en lugar de tragarlo. No necesitaba

un zumbido en su cabeza.

Lucas no vio la sonrisa de complicidad en el rostro de Joseph. Tal vez si lo

hubiera hecho estaría más preparado para la próxima conversación. No

tenía ni la menor idea de lo lejos que su padre iría a fin de tener nietos y

asegurarse de que sus hijos no estuvieran solos el resto de sus vidas.

—¿Dónde encontraste a la Srta. Harper, papá?

—Tuvimos una feria de trabajo en su universidad hace unos meses, y me

dieron su currículum entonces. Hice un poco de investigación sobre ella y

supe que era perfecta para el trabajo. Ya sabes, se necesita alguien

especial para trabajar para el presidente de nuestra compañía —respondió

Joseph.

—Sí, lo hace mucho mejor de lo que pensé que lo haría. Es un poco

parlanchina, pero estoy seguro de que se acomodará el tiempo que esté

con nosotros.

—¿Un poco parlanchina? ¿De verdad acabas de decir eso? —preguntó

Joseph sorprendiendo de Lucas. Miró a su padre ante las preguntas. Poco

a poco, se dio cuenta de lo que había dicho. Sus labios se curvaron en una

sonrisa. Bueno, sólo la estaba llamando como él la veía.

—He oído hablar a mamá acerca de algunas de las cosas que le has dicho

tú mismo, viejo —dijo Lucas, la sonrisa en su rostro restándole cualquier

mérito a sus palabras.

—Crecí, muchacho, y tú deberías hacer lo mismo. No te estás haciendo

más joven, ¿sabes?

Page 87: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

7

—Solo tengo treinta. No es como si tuviera un pie en la tumba —dijo

Lucas con exasperación.

—Cuando tenía treinta años tenía ya dos hijos, y otro a la vuelta de la

esquina —respondió Joseph.

—¿Me estás tomando el pelo? ¿Crees que debería casarme? —dijo Lucas

nombrando la palabra "matrimonio" como si fuera una palabrota.

—Tú eres el mayor, Lucas, el que debería ser un ejemplo a seguir para sus

hermanos más jóvenes. ¿Sabes? Tu madre y yo no nos estamos volviendo

más jóvenes. Quizá solo nos queden unos años... —La voz de Joseph se

fue apagando, desplomándose un poco en su asiento.

—Oh, por favor, papá. Eres uno de los hombres más fuertes que he

conocido. Ni se te ocurra pensar en actuar frágil para que me haga sentir

culpable por no estar siguiendo a las mujeres arriba, izquierda y derecha

para que pueda tener nietos. Además, tú no tienes un pie en la tumba,

tampoco. Tú y mamá todavía hacen caída libre —dijo Lucas mientras

levantaba las manos en señal de frustración.

—Uno nunca sabe lo que puede pasar mañana. Tengo una gran chica creo

que deberías conocerla. Es la hija de un amigo mío y creo que se llevaran

bien.

—Para justo ahí, papá. No necesito que me arregles citas. Al contrario de lo

que puedas creer, no tengo ningún problema en encontrar mis propias

mujeres. Si realmente quieres hacer algo de emparejamiento deberías

centrarte en Mark. De todos nosotros, es el más probable en sentar la

cabeza y darte una generación de nietos —dijo Lucas mientras miraba a su

padre.

Su padre había comenzado a quejarse acerca de nietos hace un par de

años atrás, pero Lucas no se preocupó, mas si Joseph trataba de

establecerle citas a ciegas entraría en modo de pánico. No tenía ningún

deseo en caminar hacia el altar, nunca.

—Voy a dejarlo por ahora, pero hay que empezar a pensar en tu futuro —

dijo Joseph, como si le estuviera haciendo un favor. Lucas pensó que sería

mejor si lo dejaba pasar.

Page 88: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

8

Los dos charlaron un rato más sobre el negocio y Lucas comenzó a

relajarse. Su día había sido largo y estaba listo para ir la cama, a pesar de

que odiaba acortar su poco tiempo con su padre.

—Tengo que ir a casa, papá. Te veré por la mañana, ¿de acuerdo?

—Eso está bien, estoy un poco cansado —dijo Joseph mientras se giraba—

. Espera, Lucas, Amy se olvidó de tomar sus papeles. ¿Puedes ir a dárselos

antes de salir?

El estómago de Lucas se encogió ante la idea de volver a verla esa noche,

pero no tenía ninguna excusa buena que darle a su padre del porqué no

podía hacerlo. Tal vez la suerte estaría de su lado y ella estaría dormida y

así podría dejárselo en la puerta principal.

—Claro, papá. Dile a mamá que la quiero, y que mañana voy a verla.

Le dio a su padre un rápido abrazo antes de caminar desde la habitación.

Rápidamente se dirigió a la cabaña, viendo sólo una tenue luz brillante a

través de la ventana de la parte delantera. Llamó a la puerta, pero no hubo

respuesta así que comprobó el pomo. No estaba cerrado todavía. Iba a

tener que hablar con ella sobre eso. Entró y estuvo a punto de gritar su

nombre cuando ella dobló la esquina.

Se quedó congelado en su lugar mientras sus ojos la consumían. Ella

estaba de pie delante de él sin nada más que una toalla pequeña que

apenas estaba cubriendo su cuerpo. Podía ver todo el camino desde los

pies hasta la parte superior de sus muslos blancos cremosos. La parte

superior de la toalla estaba tan abajo que podía ver la elevación de sus

pechos abundantes. Como si su cuerpo apenas vestido no fuera suficiente

para empujarlo hacia el borde, todo su cuerpo estaba todavía brillante de

su baño.

Su olor se arrastró hasta él, llenando su nariz con algún tipo de especias,

como canela. Fuera lo que fuese, le dio ganas de tomar unos cuantos

bocados de ella. Una pulgada más de movimiento en cualquier dirección y

sería capaz de ver todos sus secretos.

Lucas se obligó a sí mismo a dar la vuelta y salir por la puerta principal.

Sabía que era lo que tenía que hacer, pero de alguna manera comenzó a

moverse. De pronto, estaba de pie delante de ella con los brazos alrededor

de su cintura.

Page 89: 1.the billionare wins the game

Pág

ina8

9

Empujó su cuerpo húmedo, casi desnudo contra el suyo, y después estaba

devorando sus labios. La sintió endurecerse durante un milímetro de

segundo, antes de que lo estuviera agarrando hambrienta.

Nunca había deseado tanto a una mujer, hasta el punto de sentir que

moriría si no la tomaba.

Durante medio segundo su cerebro trató de recuperar el control, pero

cuando oyó un suave gemido escapar de sus labios, perdió su compostura

completamente. Si ella le hubiera empujado lejos, o le hubiera rechazado,

de alguna manera hubiera sido capaz de liberarla, pero ella se esforzaba

en estar más cerca de él, gimiendo mientras enredaba su lengua con la de

ella. Ella se retorció entre sus brazos, ninguno pareciendo conseguir

suficiente del otro.

Con un rápido movimiento le arrancó la toalla, dejando que sus manos

corrieran libremente de arriba a abajo por su cuerpo. Acarició sus curvas,

disfrutando de la sensación de la suavidad de su piel mientras su mano

flotaba sobre la curva de su cadera, luego hacia arriba a un lado de su

pecho. Sin romper el beso, él la levantó y caminó la corta distancia hasta

el dormitorio. Suavemente la recostó en la cama, se desnudó y tiró su ropa

fuera, sintiendo un vacío en los pocos segundos que estuvo lejos de ella.

Su mirada fue atraída por la belleza de su cuerpo, haciendo que su

erección se hinchara aun más, la sangre corriendo a través de él,

centrándose en una sola área, urgiéndole a tomarla.

Lucas vio los ojos de Amy ir de la excitación a la timidez mientras miraba

su cuerpo desnudo. De repente sintió miedo de que ella cambiara de

opinión si le daba mucho tiempo para pensar en lo que estaban haciendo.

Estaba seguro de que él explosionaría. A pesar de que desnudarse no

tomó más de medio minuto, ya estaba dolorido de nuevo por tocarla.

Se unió a ella en la cama, cubriendo su cuerpo. Ella se inclinó hacia él,

buscando su boca. Con gusto la complació y mordió su labio inferior antes

de chupar su boca, los sonidos provenientes de su garganta instándole.

Finalmente, se separó para mover los labios hacia abajo. Lamió un camino

por su cuello, mordisqueando un poco antes de la piel sensible, haciendo

que otro gemido escapara de sus labios.

Mientras exploraba su exquisito cuerpo olvidó todas las dudas restantes y

simplemente disfruto del intenso placer que tocarla le traía. Ella comenzó

Page 90: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

0

a moverse debajo de él, abriendo las piernas a modo de invitación para que

empujara dentro de ella.

Lucas sabía que Amy estaba rogando por la finalización, pero se negó a

hacerla suya hasta que supiera que estuviera lista. A pesar de que no iba a

durar mucho más, sobre todo con su roce contra él; lo lamentaría si

terminaba demasiado rápido. Necesitaba que ella sintiera tanto placer y

satisfacción como él.

Cuando sus manos se deslizaron sobre sus pechos redondeados,

pellizcando los pezones con sus pulgares, su espalda se arqueó hacia

arriba, su cuerpo temblando. Ella envolvió las manos alrededor de su

cuello, tirando de él hacia ella. El mirar hacia sus ojos desenfocados de

deseo la consumió.

Él la agarró del cabello y aplastó sus labios contra los de ella, hundiendo

la lengua profundamente dentro de su boca. No se cansaba de ella: su

sabor, su olor, su sonido. Todo en ella lo excitaba. Cuanto más su lengua

acariciaba el contorno de su boca, más se retorcía de deseo.

Terminó el beso para explorar el resto de su cuerpo, lo que la hizo gritar de

frustración. Su propio cuerpo le estaba pidiendo poner fin a la tortura de

ambos. Iba a hundirse profundamente dentro de ella y hacerla suya,

¡únicamente suya!

Probó la suave seda de su estómago, sintiendo que temblaba debajo de su

boca. Mientras movía la cabeza hacia abajo y pasaba la lengua por el

interior de los muslos, todo su cuerpo tembló. Nunca había estado con

una mujer tan receptiva antes, y le resultaba imposible mantener siquiera

un aspecto de control.

Su boca finalmente la probó, sintiendo su sabor, haciendo que sus caderas

se arquearan de la cama mientras gritaba de placer. Sus gemidos le dio la

fuerza para seguir adelante. Probó su dulzura, sintiéndola temblar debajo

suya. De repente se puso tensa, y luego todo su cuerpo se sacudió y gritó

liberándose. Estaba temblando bajo su hábil boca así que movió su lengua

una última vez contra su húmedo calor húmedo antes de que poco a poco

hiciera su camino de regreso a arriba de su cuerpo.

Ella estaba un poco débil en sus brazos cuando él empezó a besar el

camino hasta su estómago. Sentía como si pudiera adorar su cuerpo el

Page 91: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

1

resto de la noche. Arrastró la lengua por sus pechos hinchados y

suavemente tomó una de sus pezones apretados en su boca.

Ella comenzó a temblar mientras su cuerpo se agitaba de nuevo a la vida.

Se tomó su tiempo pasando de un pezón sensible al otro hasta que ella

gritó por él. El grito profundo de placer rompió el último pedazo de control

que le quedaba. Rápidamente trasladó su cuerpo sobre el de ella,

presionando la punta de su erección sólida contra su apertura.

Su boca tomó la de ella otra vez mientras su mano se deslizaba hacia

abajo para asegurarse de que estaba lista. Movió los dedos sobre su sexo

hinchado, y luego entró. Todo su cuerpo se arqueó de la cama,

presionando contra él mientras gemía de placer.

—Por favor —rogó.

Ella estaba más que lista.

—Abre los ojos. Quiero verlos cuando te haga mía —susurró.

Poco a poco, como si un peso estuviera manteniéndolos cerrados, sus ojos

se alzaron medio abiertos.

En un empuje, se enterró profundamente en ella. Casi explotó con el

primer contacto de su apretado color agarrándolo. Sintió su cuerpo rígido,

y un sonido de dolor escapó de sus labios mientras se ajustaba a él. Sus

ojos muy abiertos, mientras su boca formaba una expresión de sobresalto.

Todo el cuerpo de Lucas se puso rígido cuando se dio cuenta de que ella

era virgen. ¿Cómo una mujer, especialmente una tan atractiva y

sexualmente seductora como ella, llegaba a la edad de veinticuatro años

siendo virgen?

La sorpresa le trajo de vuelta un poco de su control perdido. Tenía que

parar. No dormía con mujeres que no sabían la partitura. Él no era el tipo

de chico de "felices para siempre", lo que significaba que las vírgenes

estaban estrictamente fuera de los límites.

Empezó a retirarse de ella cuando su rostro se relajó y suspiró en éxtasis

mientras su cuerpo se ajustaba al de él.

Sabía que tenía que hacer las cosas bien y parar, pero cuando sus caderas

se movían hacia arriba, agarrándolo con más fuerza, dejó de luchar contra

ello. Empezó a moverse con un ritmo constante, pero a medida que su

respiración se hizo más pesada, y sintió el cuerpo de ella estremecerse, no

Page 92: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

2

pudo aguantar más y empezó a empujar rápidamente. Sus caderas

empujaron hasta él, y lo apretó de placer. Cuando ella gritó y su cuerpo

empezó a temblar a su alrededor, se corrió derramando su semilla

profundamente dentro de ella, sacudiéndose con el poder de su liberación.

Se puso encima de ella, sin moverse durante varios minutos mientras su

respiración volvía a la normalidad.

Dándose cuenta de que era más probable aplastarla, se volvió, llevándola

con él. No sabía qué decir, así que no dijo nada. Solo se quedó quieto

frotando su espalda hasta que oyó su respiración constante, lo que

indicaba que se había quedado dormida.

Se quedó donde estaba durante una hora, mirándola dormir plácidamente

en sus brazos. En el sueño, ella no pudo acercarse lo suficiente a él. Su

pierna estaba envuelta alrededor de su parte inferior del cuerpo, y su

cabeza descansaba sobre su pecho. Ella era la mujer más increíble que

jamás había visto, y ahora era suya. De repente, la cabeza de Lucas se

agotó rápidamente. Había estado a punto de quedarse dormido cuando la

constatación de que no había usado protección lo golpeó. ¿Qué había

estado pensando? Él nunca había tenido relaciones sexuales con una

mujer sin usar condón. No era tan estúpido como para quedar atrapado en

la trampa de un bebé. Sus pensamientos corrían en un millón de

direcciones diferentes. Sabía que no había manera de que ella hubiera

planeado tener sexo sin protección. ¿Cómo podía haber sabido que iba a

volver a la casa esa noche?

Tampoco era posible que fingiera su intensa reacción hacia él. Él había

estado con mujeres que sólo habían fingido, pretendiendo que les gustaba

el sexo. Lo hubiera sabido rápidamente y se hubiera ido. Quería una mujer

que estuviera caliente y dispuesta en su cama, no actuando como si

estuvieran realizando una tarea.

Estaba enfadado consigo mismo, pero volvió la ira hacia ella. De ninguna

manera se vería obligado a contraer matrimonio, pero si su noche de

pasión los conducía hasta a un niño, no iba a marcharse. La familia era

todo para él, y un niño no es un error, nunca.

Miró a Amy, sintiéndose de repente atrapado. Había estado decidido a

eliminarla de su sistema, pero podría terminar costándole todo. Era la

primera mujer que había logrado atraparlo con la guardia baja.

A medida que se deslizaba de la cama y se vestía, sus ojos volvieron a ella,

Page 93: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

3

pareciendo tan inocente mientras dormía, con una pequeña sonrisa en sus

labios. Se movió, estirando el brazo y moviendo su cuerpo hacia el centro

de la cama. La manta se deslizó, dejando al descubierto uno de sus

hermosos pechos, y su cuerpo reaccionó al instante.

Con enojo consigo mismo por todavía desearla, salió como un vendaval de

la casa de campo, corriendo escaleras abajo. Lo que quería hacer era

volver a entrar y subir a la cama junto a ella. Tenía que salir de allí y

refrescarse, averiguar lo que iba a hacer a continuación. Porque no tenía

ni idea.

Page 94: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

4

Capítulo 9

Traducido por Auroo_J y Deby92

Corregido por Curitiba

my se despertó en mitad de la noche y se estiró. ¡Ouch! Estaba

dolorida. Le tomó un minuto para despertar completamente, y

cuando ella llegó a ser más consciente, sólo tardó unos

segundos para que se enderezara en la cama. ¿Qué había hecho? Se había

acostado con su jefe.

¡Se había acostado con su jefe!

¿Qué tan estúpida había podido ser? ¿Tenía ahora que estar a su entera

disposición en cualquier momento que él se sintiera necesitado de

satisfacer sus necesidades? Él probablemente pensaba que sólo podía

pasar por allí, tener sexo con ella, y luego escabullirse en medio de la

noche.

No había manera en el infierno que él fuera a usarla y tirarla. ¿Cómo iba a

manejarlo? Tenía un par de opciones. Podría hacer una gran escena,

gritarle, y renunciar a su trabajo, a pesar de que no sonaba atractivo. Su

otra opción era fingir como si no hubiera pasado nada. Le gustaba esa

opción mucho más. Acababa de asegurarse de que no se colocaría en

cualquier posición más comprometedora.

Ella no lo tendría en su casa a solas, nunca.

Sabía que un simple toque de él le haría olvidar toda su cuidadosa

planificación y cualquier idea de resistencia. No podía permitirse estar en

posiciones donde estaría tocándola.

Ella inventaría un novio. Eso le impediría pensar que podía tomar ventaja

de ella. Le diría que estaba en una relación a largo plazo, y que había

cometido un error. Sintió un poco de pena, sabiendo que no llegaría a

repetir esa experiencia.

A

Page 95: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

5

Para su primera vez haciendo el amor, había sido increíble. No tenía idea

de que una persona podría sentir tanto. Su cuerpo estaba dolorido, pero

había valido-tanto-la-pena. Había leído que el sexo por primera vez no era

una buena experiencia. Esa gente no debió haber estado haciendo el amor

con alguien como Lucas Anderson.

Ella tuvo que sonreír ante la ironía. El hombre parecía un dios griego,

tenía más dinero del que nadie necesitaba, y hacia el amor como la

fantasía de cada chica convertida en realidad. Nada de eso importaba, sin

embargo. Fue un error, y no iba a repetirlo. Un error no iba a cambiar sus

planes de vida.

Amy fue al baño y se limpió. Estaba tendida hacia abajo cuando por fin se

dio cuenta de que no habían usado protección. Se incorporó rápidamente

en la cama de nuevo. Estaba consternada al pensar en la estupidez de

tener relaciones sexuales sin protección. No estaba preparada para ser

madre todavía. Siempre había soñado con tener su propio hijo, pero no de

esta forma. No iba a dar en adopción al niño si quedaba embarazada, pero

¿cómo iba a ser capaz de manejar todo esto?

Tendría que meditarlo y resolver todo más tarde. Ella no sabía nada.

Estaba muy probablemente exagerando. Sólo habían tenido sexo una sola

vez. No había muchas probabilidades de que ella tuviera un bebé la

primera y única vez que tuvo sexo.

Amy durmió a ratos el resto de la noche. Soñó que acababa de dar a luz a

la niña más hermosa. Ella estaba sosteniéndola cerca de su pecho, la

unión con su hija recién nacida. La criatura era perfecta en todos los

sentidos. De pronto, Lucas entró en la habitación con tres hombres, todos

con trajes de diseñador.

Empezaron a hablar la jerga legal, y de repente bajó la mirada y ella ya no

estaba cargando al bebé. Lucas la tenía. Entonces entró una alta y rubia

mujer despampanante, y le entregó el bebé a ella. "Aquí tienes, cariño. Te

dije que conseguiría un bebé para ti. Todo lo que quieras es tuyo", dijo

mientras salían juntos, dejando a Amy llorando por su bebé en la fría

habitación de hospital.

Amy se despertó aterrorizada. El sueño parecía tan real. Se sorprendió al

ver las lágrimas reales cayendo por sus mejillas. Se consideraba una mujer

fuerte, pero había una cosa que la podía poner de rodillas. Ella no podría

Page 96: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

6

sobrevivir si alguien fuera a llevarse a la familia que tan desesperadamente

quería.

Se rindió tratando de dormir y se levantó de la cama para prepararse el

desayuno. Trató de leer un rato, pero no podía concentrarse. Decidió que

tomaría un paseo por los jardines y disfrutaría del hermoso y limpio aire

de la mañana. Era exactamente lo que necesitaba para despejar su mente.

Vagó durante un par de horas, cuando Joseph se acercó a ella y casi la

hizo saltar de su propia piel.

—¿Cómo estás, señorita? Espero que hayas dormido bien. —Se

preguntaba cómo un hombre tan enorme podría fácilmente acercarse

sigilosamente a ella.

—Dormí muy bien —respondió ella automáticamente. Los círculos bajo sus

ojos delataban su mentira, pero era demasiado caballero para señalárselo.

—Pareces un poco nerviosa por algo. Si hay algo en que pueda ayudar,

todo lo que tienes que hacer es preguntar.

—Todo está bien, señor Anderson. Sólo estoy pensando en la mudanza y el

trabajo. Ha sido ya muy amable, y no quiero aprovecharme. Me siento un

poco culpable por quedarme en la cabaña anoche —respondió ella.

—Ahora, Amy, no hieras mis sentimientos. Me pareció que la cabaña era

muy confortable. He dormido allí yo mismo un par de veces cuando mi

esposa se enfermaba de mi actitud. —Se rió entre dientes.

—Oh, no, señor Anderson, me encanta la cabaña. Es simplemente muy

difícil para mí aceptar ayuda. Aprecio tener un lugar para quedarme, y

tengo que decir, ya me he enamorado de la cabaña. Es perfecta en todos

los sentidos posibles —respondió rápidamente, sin querer ofenderlo.

—Katherine todavía está durmiendo. Ella debe conseguir su descanso de

belleza. —Se rió entre dientes—. Por favor, ven y únete a mí en la terraza

para el desayuno. Me encanta tener a una mujer joven y hermosa como

compañía para comer. Esto hace que la comida sepa mucho mejor. —

Luego extendió el brazo hacia ella que lo tomó. Caminaron cogidos del

brazo a la casa principal.

Se estaban riendo mientras tomaban el desayuno cuando Lucas entró.

Amy podía ver que estaba instantáneamente en alerta.

Page 97: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

7

—Buenos días, papá —dijo mientras se sentaba—. Srta. Harper, espero

que los alojamientos fueran de su agrado —agregó formalmente.

Amy lo miró por un momento, tratando de entenderlo. Tardó unos diez

segundos. El hombre ya había conseguido lo que quería, y ahora estaba

haciéndole saber que era tiempo de volver al trabajo y nada más. Ella ya

sabía que así era cómo tenía que ser, así que ¿por qué le dolía tanto su

actitud?

Bueno, pensó, dos podían jugar el juego de "frío como el hielo".

—Dormí perfectamente, señor Anderson. Al comienzo de la noche tuve

estas náuseas y un dolor de cabeza horrible, pero luego se fue, y el resto

de la noche fue perfecta —dijo ella con voz aún más fría que la suya.

Sus ojos se convirtieron en rendijas y si ellos pudiesen matar, pensó que

sería una pila de cenizas. Decidió tentar su suerte un poco más y le sonrió

antes de alejarse e ignorarlo por completo.

* * * *

Joseph miró su pequeña representación, ambos pensando que estaban

siendo tan astutos. Se preguntó lo que había pasado la noche anterior. Se

veía para él como que los niños podrían haberse acercado y ambos corrían

asustados, ahora. Bueno, él no iba a dejar que se evitaran el uno al otro,

no cuando parecía que las cosas habían empezado finalmente a calentarse.

—Come, Lucas. Tienes un día ocupado. Necesitas llevar a Amy a conseguir

su auto y ayudarla a comprar para su apartamento. Es mejor empezar

temprano, por lo que estará listo para que ella viva allí. —Entonces miró a

Amy—. Creo que serás feliz allí.

—Sr. Anderson... —empezó a decir, pero él la detuvo.

—Ahora, Amy, eres una invitada en mi casa. ¿No crees que es hora de que

empieces a llamarme Joseph?

—Um, bueno, señor... digo, Joseph. Creo que el Sr. Anderson. —Ella

asintió hacia Lucas—, está muy ocupado, y no me importa hacer esto por

mi cuenta. Si se trata de una cuestión de una firma, podrían enviar por fax

el papeleo. Yo simplemente puedo tomar un taxi hasta el lote de autos.

Realmente, realmente no me importa —declaró ella hacia él.

Page 98: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

8

Joseph miró el vapor prácticamente saliendo de los oídos de su hijo ante

su declaración. Parecía que Lucas podría repartir actitud, pero no le

gustaba recuperarlo. Él disfrutaba bastante ver a su hijo retorcerse.

Se había quedado impresionado con Amy desde el momento en que la

había conocido, pero al poner a su hijo en su lugar, le gustaba aun más.

Ella era buena para Lucas. Necesitaba una mujer que no le permitiera

pisotearla. Ella le recordaba mucho a su Katherine.

Joseph había sido un tonto cuando había conocido a su esposa por

primera vez, pero por suerte lo había perdonado. No podía imaginar lo que

habría hecho si no ella. Él la amaba más cada día que pasaban juntos.

No le importaba presionar los botones de su hijo un poco, sobre todo si lo

apresuraba.

—Si Lucas está ocupado esta tarde, siempre podría llamar a Mark y

preguntarle si no le importaría escoltarte alrededor. No creo que eso sea

un problema. Él es mi único hijo que realmente disfruta ir de compras —

dijo Joseph, viendo a Lucas por el rabillo del ojo.

Pensó que el chico podría realmente encender la mesa tan brillante como

el fuego que ardía en sus ojos.

Bueno. Tenía que ser presionado.

* * * *

Lucas no quería pasar el día con ella, pero que tratara de zafarse

simplemente lo fastidiaba. ¿Cómo se atrevía a no querer estar con él?

Tenían una plática pendiente, y ella iba a malditamente pasar el día con él.

Además, no había manera de que él se fuera a sentar ahí mientras su

hermano llevaba a Amy por la ciudad. Podía ver fácilmente a Mark

enamorándose de ella. Su hermanito tenía un corazón de oro. Se negaba

vehementemente quererse casar algún día, pero Lucas podía ver el anhelo

en los ojos de Mark cuando se quedaban viendo alguna tonta película de

amor, o una pareja romántica se encontraba cerca. Tal vez Mark decía que

no quería casarse, pero Lucas sabía muy bien que era sólo parloteo.

Lucas rápidamente se puso de pie y se dirigió a su padre.

Page 99: 1.the billionare wins the game

Pág

ina9

9

—Claro que no estoy muy ocupado para llevar a salir a la Srta. Harper —

dijo, su voz chorreando veneno. Por fin la miró a la cara con una sonrisa

afectuosa.

—¿Por qué no te adelantas y te alistas para que podamos irnos de

inmediato? —dijo, mirándola de arriba abajo. Él ya sabía que estaba

vestida para la ocasión, pero sólo quería ser un imbécil.

Sonrió al ver como el fuego surgía en los ojos de ella. Prácticamente podía

escucharla gritándole en su cabeza. Sin importar lo mucho que quería

evitar reaccionar ante ella, instantáneamente tuvo una erección; todo en él

quería levantarla sobre su hombro y llevarla a la cama más cercana.

Había pensado que en una noche la sacaría de su sistema. Había estado

muy equivocado. Sentía que un mes completo no sería suficiente.

* * * *

Él estaba un poco nervioso como para mirarla por completo. Amy estaba

luchando por mantener sus emociones bajo control. Se veía sólo bien, no

estaba tratando de impresionarlo, de ninguna manera. Iría con él, sólo

para mostrarle que podía estar en su compañía sin ser afectada por eso.

La única cosa que la mantenía de decirle lo que realmente pensaba sobre

él, era el hecho de que estaba sentada en la mesa de su padre, y ella

respetaba a Joseph. Tan lejos como fue Lucas, más le valía ser cuidadoso,

porque podría resbalar y atropellarlo cuando estuviera probando su nuevo

carro.

—Estoy lista, Sr. Anderson —dijo con voz melosa, chorreando vinagre—

. Aunque tal vez quiera alistarse usted, y limpiar la mermelada de su cara

—añadió con satisfacción.

Sus ojos se estrecharon aun más antes de que se levantara de la mesa y

entrara a la casa sin decir otra palabra. En silencio Amy se rió entre

dientes, disfrutando de la victoria de ganar su pequeña guerra. Se sentía

bien el tirar al todo poderoso Lucas de un solo golpe.

—Bueno, ustedes chicos parecen estarse llevando muy bien —dijo Joseph

con completa sinceridad. Ella no pudo saber si lo decía enserio o no.

Parecía que sí. Tal vez los dos no habían sido tan obvios como ella había

Page 100: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

00

pensado. Se imaginó que se podía haber rebanado la tensión entre ambos

con un cuchillo, pero era bueno que Joseph no lo hubiera notado.

—Es un gran jefe. —Fue todo lo que dijo antes de bajar la mirada y

comenzar a picar su desayuno. No vio la sonrisa divertida en la cara de

Joseph.

—Me alegra escuchar eso, ya que ustedes dos estarán pasando mucho

tiempo juntos. Amaba mis viajes de negocios. Esther era invaluable al

tener todo en orden cuando estábamos de viaje. No pude haber hecho mi

trabajo tan bien sin ella. Katherine nos acompañaba con frecuencia,

especialmente cuando íbamos a lugares tropicales. Así fue como las dos se

convirtieron en grandes amigas.

Amy sintió un momento de puro pánico mientras Joseph hablaba sobre

ella viajando con Lucas. ¿Cómo le podría ser posible mantenerse calmada

si estuvieran encerrados solos en su jet, o en una suite de hotel? Ni

siquiera escuchó el resto de lo que estaba diciendo Joseph. Algo sobre

Katherine y Esther. No importaba, lo que si importaba era que tal vez

terminaría en alguna isla tropical con un jefe al que al parecer ella no le

podía quitar las manos de encima.

Trató de relajarse, pensando de nuevo en la conversación que habían

tenido. Él no estaba interesado en tener sexo con ella, ya no. Ya había

obtenido lo que él quería. Ella podía lidiar con su sarcasmo, incluso con

sus groserías; pero no podía lidiar con su contacto, al menos no sin

derretirse.

* * * *

Lucas regresó y se quedó de pie a su lado, esperando impacientemente,

mientras Amy tomaba unos cuantos bocados más de su comida,

masticando tan despacio como le era posible. Miró intencionalmente a su

reloj, tratando de hacer que apresurara su paso.

—Ahora, Lucas, deja de estar tan impaciente. No es educado apresurar a

una señorita —regañó su padre.

—Tenemos que hacer muchas cosas hoy padre, sólo quiero que ya nos

vayamos porque tengo planes con Vienna está noche —añadió, mintiendo

al decir que tenía una cita.

Page 101: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

01

Notó que Amy se tensó en su asiento. Excelente, pensó. No estaba tan

despreocupada como le quiso hacer creer a él. Estaba sorprendido de cuán

bien lo hizo sentir ese pensamiento. Él no reaccionaba bien a los rechazos,

incluso si no quería a la mujer. Sin embargo, ese no era el caso para

nada. Él todavía la quería, incluso ahora más que nunca.

Se puso de pie y tomó su bolso del respaldo de la silla.

—No quisiera hacer esperar a tu cita —dijo con una voz perfectamente

calmada—. Muchas gracias por el desayuno, Joseph. Estuvo delicioso. Su

compañía fue la manera perfecta de comenzar mi día —dijo y luego caminó

tranquilamente por la puerta, dejando a Lucas para que la alcanzara.

Parecía que había estado persiguiendo en muchas ocasiones desde que la

conoció.

Él sonrió para sí mismo mientras miraba el meneo de sus caderas, y los

pantalones ajustados que le moldeaban su exquisito trasero. Tenía que

admitir que no le molestaba esa vista por detrás. Perseguirla no estaba

mal, para nada mal.

—Que se diviertan, chicos. —Lucas escuchó a su padre gritar, pero no se

preocupó en responderle.

Estaba muy ocupado manteniendo la vista en su increíble sensual y

frustrante asistente.

* * * *

—¿Joseph Anderson, que estás tramando?

—Buenos días, hermosa. Sólo estaba tomando el desayuno con una

hermosa señorita y tu hijo gruñón. —Joseph levantó la mirada en lo que

Katherine entró por la puerta. Incluso con el ceño fruncido, era

absolutamente exquisita.

—Los dos sabemos que eso es mentira. Estas de Cupido, y por cómo se

ven las cosas entre estos dos, te está yendo muy bien. —Lo dijo con un

tono de desapruebo—. Cuando el chico se entere de lo que estás tramando,

te dejara de hablar. Sólo que ya te lo advertí.

—Para cuando se dé cuenta, estará muy enamorado de su esposa y me lo

agradecerá. —Joseph lo dijo con la misma actitud muy seguro de sí mismo

que Lucas había heredado. Joseph, esperó que indudablemente así fuera

Page 102: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

02

el caso. Porque, de otra manera su esposa estaría en lo correcto, y su hijo

no estaría nada feliz con él. Era un riesgo que estaba dispuesto a tomar.

—Vamos a dar un paseo —dijo al levantarse de la mesa y jaló a Katherine

a sus brazos, se inclinó y le dio un beso de buenos días.

Su intención era que fuera un beso corto, pero para cuando se alejó, se

había quedado sin aliento. Sonrió al ver como Katherine se sonrojaba y

sus ojos se ponían vidriosos.

¿Estaba tan mal el querer que sus hijos tuvieran un amor como el que él

tenía con Katherine? No creyó que hubiera nada de mal con eso.

Decidió que ese día iba a ser un gran día. Ya había empezado

maravillosamente con Lucas y Amy rumbo a una apasionada relación. Y

terminaría aun mejor con Katherine a su lado.

—Joseph Anderson, sólo estás tratando de sacar mi lado bueno al

distraerme —dijo casi sin aliento.

—¿Y está funcionando?

El rostro de Katherine se suavizó cuando miró en sus ojos. No podía estar

molesta con él por mucho tiempo, lo cual era algo muy bueno,

considerando que él hacía muchas cosas estúpidas.

—No debería dejarte salirte con la tuya y tus misterios, pero de repente ya

no me importa. Vamos a ese paseo —dijo, su rostro suavizándose en lo que

alzaba su mano y le acariciaba la mejilla.

—Nada me haría más feliz —le dijo Joseph antes de inclinarse y besarla de

nuevo.

No, definitivamente no había nada malo en querer que sus chicos tuvieran

lo mismo que él. Le agradecerían su intromisión cuando tuvieran a una

buena mujer a su lado.

Page 103: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

03

Capítulo 10 Traducido por Alyshia Cheryl

Corregido por KatieGee

my subió al auto con Lucas, inmediatamente absorbida por

su olor. ¿Por qué tenía que oler tan bien? Podía sentir una

agitación en su estómago mientras permanecía inmóvil junto

a él. ¿Cómo iba a querer estar con él después de lo que le había dicho y

hecho? Ella estaba tratando de no ver lo bueno en él, porque era mucho

más difícil mantener las distancias cuando ella bajaba la guardia.

Anduvieron en el auto en silencio durante varios minutos, hasta que él

aparcó en un estacionamiento. Éste no era el concesionario de autos. ¿Qué

estaba haciendo? Tal vez él iba a dejarla en algún lugar con la esperanza

de que fuera secuestrada.

—Vamos de compras primero. De esta forma los artículos pueden ser

entregados y llevados a tu apartamento —explicó. No esperó a que ella

respondiera. Salió del vehículo y se acercó a la puerta para abrirla.

Cuando él hacía esas cosas pequeñas, como tratarla como una dama, le

hacía ver su lado más humano. Ella deseaba no ver ese lado, era mucho

más difícil resistirse a él. Prefería que actuara como un arrogante bastardo

para poder justificar su propia distancia.

Ella se bajó del auto y caminó junto a él hacia la gran tienda.

—Realmente no necesito ningún tipo de decoración. Estoy segura de que el

apartamento está bien como está —Trató de decírselo. Se sentía incómoda

con toda esta situación, por todo lo que los Anderson habían hecho por

ella. Se sentía mucho más que una ayuda.

—Vamos a hacer esto —dijo con una voz que decía “Acéptalo, vamos a

hacerlo”.

Pronto descubrió que era mucho más fácil ir con él que discutir. La llevó a

través de cada departamento, preguntándole por sus preferencias en

colores y estilos. Su estado de ánimo parecía mejorar a medida que

avanzaban a través de la tienda. Nunca lo habría imaginado, pero parecía

que Lucas disfrutaba de las compras mucho más que ella.

A

Page 104: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

04

Nunca había tenido el dinero para gastar frívolamente, por lo que la

compra siempre había sido algo tedioso, nunca algo divertido.

Cuando terminaron las compras en la tienda, Lucas hizo los arreglos para

que los artículos se entregaran a su apartamento inmediatamente.

—Terminamos antes de lo previsto, Amy. Creo ya podrás mudarte esta

noche —dijo mientras salía de la tienda—. Tengo hambre. Vamos a

almorzar antes de ir a la concesionaria de autos.

Él no preguntó si tenía hambre. No preguntó si quería compartir una

comida con él. Él simplemente dijo que iban a almorzar, y por eso en su

mente, eso es exactamente lo que estaban haciendo. Si ella no hubiera

estado tan hambrienta, se habría negado a comer sólo para demostrar un

punto, pero ella sabía que él no se daría cuenta, y entonces ella sería la

que sufriría por el resto del día.

Él se detuvo en un pequeño restaurante y de nuevo se acercó para abrirle

la puerta del auto. A medida que comenzaron a caminar en el interior, él

colocó la mano en la parte baja de su espalda, enviando escalofríos por

todo su cuerpo hacia los pies.

Una vez adentro, el camarero les dejó patatas fritas y salsa, y rápidamente

regresó y tomó su orden. Mientras esperaban la comida, Amy pensó que

éste sería uno de sus momentos más incómodos.

—Tú y mi padre parecen llevarse muy bien —dijo Lucas, con un tono que

sonaba más como una acusación.

—Me agrada Joseph. Él siempre ha sido muy amable conmigo. Pasa de vez

en cuando a las oficinas mientras que te has ido, y honestamente siento

como si yo pudiera hablar con él durante horas y horas —respondió ella.

—Tiene un gran corazón. Yo no quiero que nadie se aproveche de ese

hecho.

Amy movió la cabeza con brusquedad y miró a Lucas con incredulidad.

¿De verdad la estaba acusando de utilizar a su padre? Así sonaba para ella

aquella frase. Quería golpearlo tan fuerte que sus manos estaban

prácticamente temblando, pero en su lugar, tomó una respiración honda

antes de abrir la boca.

—Usted puede pensar que todo el mundo está tratando de hacerle daño, y

que todo el mundo quiere algo de su familia, y que incluso puede ser el

Page 105: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

05

caso de una gran cantidad de gente que conoce. Como sea, usted no me

conoce lo suficiente como para hacer una acusación asquerosa como esa.

No siento nada más que profundo respeto por su padre, e incluso, nunca

podría imaginarme a mí misma haciendo algo para causarle daño. Sólo

porque usted está cansado y amargado con el mundo, por alguna razón

desconocida, no le da el derecho de hablarme así. Tiene dos opciones: o

bien pedir disculpas ahora mismo, o me voy caminando de este

restaurante. Me encanta mi trabajo, pero no me hablará de esta manera.

Es inaceptable.

Ella lo miró a los ojos, la furia hirviendo en su interior. Vio la sorpresa en

su rostro mientras hablaba. No tenía ni idea de cómo no estaba llorando.

Sabía que él podía despedirla en ese momento, y probablemente se

arrepentiría de sus palabras en el momento en que se encontrara

durmiendo en una habitación de hotel esa misma noche, pero por el

momento, estaba demasiado exaltada como para preocuparse.

Después de varios minutos de silencio, Lucas sonrió. Las comisuras de sus

labios se levantaron y aparecieron pequeñas líneas alrededor de sus ojos.

La sonrisa luego se convirtió en una risa. Amy lo miró con sorpresa. ¡Ahora

se estaba riendo de ella!

Ella empujó su silla hacia atrás y se levantó. Una persona no podía

aguantar tanto.

—Amy... para —dijo entre risas mientras ella rápidamente se abrió camino

a través del restaurante. De ninguna manera volvería. Sabía que tenía

menos de treinta segundos antes de que su ira se desvaneciera y

comenzara a llorar. Ella quería estar lejos de él antes de que sucediera.

Salió y comenzó a correr, logrando llegar al callejón de al lado del edificio.

Ella dio unos pasos en el interior, luego se apoyó contra la pared, con las

piernas temblorosas mientras la realidad comenzaba a atormentarla.

Oyó unos rápidos pasos y quiso gritar. Lucas vio la primera lágrima que

caía por su mejilla.

Él se acercó lentamente, como si estuviese tratando con un animal salvaje,

lo cual no estaba demasiado lejos de la realidad.

Se sentía muy impredecible en ese momento.

Page 106: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

06

—No me estaba riendo de ti, ¿de acuerdo? Lo siento. Sé que no estás

usando a mi padre. No sé por qué hable del tema. Yo sólo... sólo eres... ¡No

sé!

Dio un paso atrás, pasándose los dedos por el cabello mientras caminaba

delante de ella. Unas cuantas lágrimas más resbalaron mientras lo

observaba.

La agitación era evidente en sus movimientos, pero ella aún estaba

enojada, no sentía simpatía por su frustración.

—Mira, me estás volviendo loco. No sé qué diablos está mal conmigo ahora

mismo, pero no ayudas a la situación cuando me miras con los ojos llenos

de lujuria. No estás ocultando exactamente tus emociones —espetó

cuando se volvió y se puso justo delante de ella.

Las lágrimas de Amy se secaron mientras se alzaba sobre ella, sus cuerpos

a un sólo pie de distancia. Aun queriendo estrangularlo, todavía la

excitaba. Él había abierto las compuertas dentro de ella y una oleada de

deseo se había propagado por su cuerpo. Ahora tenía sexo en el cerebro

constantemente. Ella lo quería, aunque no le agradara mucho.

Sus ojos se clavaron en los de él y vio cómo sus profundidades azules se

dilataron. Su respiración se hizo más pesada, mientras el oxigeno se

convirtió en una sesión de ejercicio.

—Al diablo —murmuró Lucas antes de que sus manos se establecieran

contra la pared a cada lado de ella, rápidamente encerrándola. Antes de

que tuviera tiempo de parpadear, sus labios estaban sobre los de ella.

Necesidad, ira, frustración y deseo. Todo estaba en su beso. Su boca

aplastando la de ella mientras empujaba su lengua dentro, obligándola a

rendirse.

Ella no tenía otra opción.

No podía luchar contra lo que tanto deseaba. Trató de permanecer rígida

contra la pared de ladrillos, pero cuando la mano de él se levantó,

deslizándose a la parte delantera de su blusa, se dio por vencida. Ella le

devolvió el beso mientras la palma de él tocaba su pecho, masajeando la

carne suave, presionando su pezón endurecido.

El beso continuó mientras sus caderas empujaban contra ella,

presionando su erección en su calor. Aprisionándola aun más contra la

Page 107: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

07

pared. Sabía que estaba mal, sabía que no debería hacerlo, pero a ella no

le importó.

Una bocina sonó cerca, sorprendiendo a Amy. Lucas se retiró, sus ojos

nebulosos de deseo. De repente, una sirena sonó, y ambos se dieron la

vuelta, viendo como un auto de la policía entraba dentro del callejón.

Lucas dio un paso atrás y juró mientras Amy estaba de pie contra la

pared, preguntándose qué diablos acababa de hacer.

—Esto no debería haber ocurrido. Parece que una vez más tendré que

disculparme. Se está convirtiendo en una mala costumbre, que no me

gusta. Olvidémonos de mi comentario anterior, olvídate de este beso, y

terminemos el almuerzo, y luego seguiremos adelante con el día.

Lucas la miró, sus ojos desafiantes mientras hacía la oferta. Podía aceptar

sus disculpas e irse, o ella podría alejarse de todo: su trabajo, la

seguridad, y nuevos amigos.

Era una decisión fácil.

Sin decir una palabra, se apartó de la pared y se dirigió hacia el

restaurante. Se negaba a pensar en las cosas que había imaginado que

hubieran hecho. Ella sabía que su pelo estaba desordenado, y sus labios

tenían que estar inflamados. Era evidente que acababa de ser besada a

menos de un metro de distancia.

Con la gracia que más pudo, volvió a su asiento y cogió una fritura de

maíz2, comiendo un bocado. El sabor era como el aserrín, pero se obligó a

masticar y tragar, y luego repitió el proceso.

El resto de la comida fue en un incómodo silencio hasta que,

afortunadamente, él recibió una llamada telefónica que lo mantuvo

ocupado hasta que terminaron de comer.

La presión del día comenzaba a asentarse sobre sus hombros, y ella sólo

quería terminar con esto. Cuanto más pronto estuviera sola, mejor estaría.

Entonces ella tendría tiempo para pensar.

2 Fritura de maíz: Corn Chip. Es un aperitivo elaborado a partir de harina de maíz frita

en aceite o al horno, generalmente en forma de pasta o a una cucharada pequeña. Las

frituras de maíz son gruesas, rígidas y muy crujientes. Tienen un fuerte aroma y sabor de

maíz tostado, y son a menudo muy espolvoreados con sal.

Page 108: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

08

En silencio se dirigieron al estacionamiento después del almuerzo. Ella

nunca había tenido un auto antes, ni siquiera uno rentado. Sabía que iba

a tener uno después de la universidad, pero no había tenido el dinero

todavía. Había tomado un curso de manejo en la universidad, así que

sabía cómo manejar, pero todavía no estaba muy cómoda al volante.

No quería que Lucas supiera sobre su inseguridad, así que decidió,

aguantar y enfrentar la situación.

—¿Quieres uno manual o automático? —Fue la primera pregunta.

—Yo preferiría un automático

—Si quieres mi opinión, creo que deberías comprarte el Mercedes ML450

Hybrid SUV. Tenemos alrededor de diez opciones para ti, pero he hecho la

investigación en este caso, y es muy valorado en seguridad. Ocupa el

combustible de muy buena manera y se recomienda en los informes de los

consumidores —ofreció, sonando como un vendedor de autos.

—Realmente no sé nada de autos, Lucas. No sabría por dónde empezar —

respondió ella.

* * * *

Su cabeza se giró para mirarla, pero ella estaba mirando al lote de autos

como un niño perdido, por lo que no se dio cuenta de su desliz. Era la

primera vez que había usado su nombre de pila. Descubrió que le gustaba

el sonido de su nombre en sus labios.

Sabía que ella no se había dado cuenta de lo que había dicho. En su

nerviosismo por estar en una situación incómoda, temporalmente había

bajado la guardia. Le gustaba ese lado de ella. La Amy sin la armadura

parecía mucho más dulce y más inocente, y él quiso envolverla en sus

brazos, protegerla. Deseaba tanto llevarla de vuelta a sus brazos, sus

dedos se movieron involuntariamente en los costados.

Se detuvo, apenas. No estaba dispuesto a abrir su corazón a cualquiera.

Tenía que mantener el control de sí mismo, y así sería capaz de olvidarse

de lo que había hecho la noche anterior y antes de la tarde. Ninguno de los

dos necesitaba entrar en una aventura que terminaría con la pérdida de

un trabajo y el arrepentimiento de él. Tendría que resolver las cosas

cuando él tuviera más tiempo para pensar.

Page 109: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

09

—Si no sabes mucho sobre autos, entonces, espero que tomes mi consejo,

pero la elección es tuya. Tú serás la que conduzca el vehículo.

Lucas la encaminó dentro del edificio y pasó por el lado de los vendedores,

dirigiéndose directamente a la oficina del gerente.

—Lucas, es bueno verte de nuevo. Llegas temprano, pero ya he sacado el

auto que pediste —dijo el hombre detrás del escritorio, el cual tenía una

sonrisa sincera y se levantó para estrechar la mano de los dos.

—Gracias, Frank. Te lo agradezco. —Lucas ya estaba volviéndose para

llevar a Amy a través de la sala de exposición y las puertas laterales.

Mientras caminaban hacia el exterior, vieron un hermoso y pulido vehículo

carmesí estacionado en la acera.

Lucas la llevó al auto y abrió la puerta del conductor. Ella lo miró con

sorpresa y alegría en sus ojos.

Lucas no podía apartar los ojos de su cara mientras ella luchaba por

contener las lágrimas mientras miraba el coche delante de ella. De repente

se dio cuenta de que eso debió haber sido un logro para ella. Sabía que ella

nunca había tenido un verdadero hogar, al pasar de una casa casi en

ruinas a una verdadera casa.

Seguramente, no estaba acostumbrada a recibir regalos con demasiada

frecuencia. El vehículo debe parecer un juguete nuevo y brillante. Miró a

través de sus ojos, y se sintió humillado.

De repente, su rostro estalló en una enorme sonrisa mientras subía en el

asiento y comenzó a buscar el arranque de encendido.

—¿Dónde está la llave? Ni siquiera veo un lugar en dónde ponerla —

preguntó ella, mirándolo con una confusa, pero eufórica expresión. Lucas

se echó a reír y le explicó que era un botón de arranque.

—Una de las nuevas características de los autos híbridos es que funcionan

con electricidad cuando viajan a velocidades más lentas. El gas se iniciará

cuando sea necesario.

Pulsó el botón y las luces se encendieron, pero no había sonido. Ella lo

miró de nuevo por la confusión.

Page 110: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

10

—¿Cómo sabes que encendió si no hay ningún ruido? —preguntó,

genuinamente desconcertada.

Lucas no pudo evitarlo. Se echó a reír a carcajadas, realmente se estaba

divirtiendo. Ella era tan diferente a las mujeres con las que normalmente

salía, no es que ellos estuvieran saliendo, se recordó.

Su sofocada risa borró la sonrisa de su cara. Él sabía lo suficiente sobre

ella como para saber que no le gustaba que se burlaran de ella, y

probablemente parecía que eso era lo que él estaba haciendo.

—No me estoy riendo de ti. Acabo de encontrarte siendo un soplo de aire

fresco3 —continuó, riendo entre dientes—. Pon el auto en marcha. Confía

en mí. Conducirá por ti —dijo.

—¿Qué es esto, un auto espacial? —murmuró ella en voz baja. Él se las

arregló para no reír y fingió no haber oído el comentario. Tenía la

sensación de que podía reír a menudo con ella en su vida. Trató de

endurecer su determinación, sabiendo que no quería llegar a sentirse

demasiado cómodo a su alrededor. Era un camino muy peligroso

* * * *

Amy recorrió las carreteras secundarias de Seattle por alrededor de una

hora. Lucas la llevó a las afueras de la ciudad, no quería que su primer

viaje fuera estresante, y ella estaba agradecida por eso. Le encantaba el

vehículo. Conducirlo era como si estuviera al interior de un cristal. Incluso

una vez que el motor se encendió, no era más que un ronroneo el que se

oía. Era maravilloso, y ella no quería detenerse. Casi se olvidó de que

Lucas estaba aún con ella, lo cual era una hazaña bastante sorprendente

para sí misma.

—Amy, parece que te encanta este auto. ¿Por qué no nos dirigimos de

nuevo a la concesionaria y firmamos los papeles para que puedas llevártelo

a casa?

Estaba un poco decepcionada por terminar el viaje, pero ella asintió con la

cabeza y volvieron hacia la concesionaria. A regañadientes salió del auto

cuando llegaron, sus ojos se volvieron hacia éste, casi con miedo de que se

alejara, de que se lo quitaran.

3 Soplo de aire fresco: Llega a ser algo o alguien que renueva o da alivio.

Page 111: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

11

—Es todo tuyo, no tienes que preocuparte —dijo Lucas mientras ella

estaba todavía de pie en el lugar.

—Lo siento —murmuró Amy, mientras sintió calor subiendo por su rostro.

Se dio la vuelta y lo siguió adentro. Se obligó a no dar la vuelta de nuevo.

La documentación sólo tardaría unos veinte minutos, ya que Lucas era un

cliente preferente, y tenían todo preparado para él. Tendrían que hacerle

una limpieza final, así que les dijeron que sería entregado a su casa esa

noche. Ella estaba extremadamente decepcionada al no poder llevárselo

consigo de inmediato, pero no discutió con ellos.

Lucas la llevó hasta su auto, y ella se dejó caer en el asiento después de

que se retiró de la tienda. Sabía que era ridículo, pero no había tenido una

infancia como la mayoría de los niños, conseguir un montón de regalos en

las fiestas, y ropa nueva cada vez que quería.

La primera vez que había recibido un regalo de Navidad fue cuando estaba

en cuidado de crianza, y a pesar de que eran buenas personas, no tenían

mucho dinero, así que cada niño tenía sólo un pequeño artículo.

Todavía tenía los regalos, y apreciaba a cada uno de ellos. El auto, sin

embargo, el auto estaba muy bien. Era algo que nunca había esperado

tener. Aunque en realidad no era suyo, lo podría usar durante el tiempo

que trabajara para ellos. Eso era muy emocionante.

—Hemos terminado todo lo que necesitamos hoy, y tu apartamento está

listo. ¿Quiere ver tu nuevo hogar? —preguntó Lucas.

—Sí, definitivamente —respondió ella, sintiendo como su estado de ánimo

aumentó. Tendría que permanecer impacientemente sentada por mucho

rato mientras se abrían camino a través de la ajetreada ciudad. Pasaron

por la Corporación Anderson, y luego manejaron un kilometro antes de

dejar la carretera.

A medida que se acercaban al edificio grande, ella se sorprendía aun más.

Se veía más como un hotel de lujo que un complejo de apartamentos. Una

fuente de agua enorme con luces de colores estaba en el centro de una

calzada circular, rodeada de flores coloridas y exuberantes. El lugar estaba

pavimentado con piedras de varios colores, con aspecto de un camino de

salida de un libro de cuento de hadas. Miró hacia las puertas delanteras,

que fueron adornadas con un borde dorado y adornos de latón. Un portero

Page 112: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

12

con esmoquin estaba justo en el interior y saludó mientras el auto de

Lucas pasaba.

Ella se asomó por la ventana y miró hacia el techo, donde tres lámparas

arañas colgaban, alumbrando con un arcoíris de color mientras conducían

bajo el dosel. Era abrumador pensar que ella estaría viviendo en un lugar

tan sofisticado.

Se detuvieron en el interior de un túnel de un estacionamiento

subterráneo, donde él utilizó una tarjeta para entrar, antes de que

estacionaran frente a un signo reservado.

—Aparcarás aquí —dijo, mientras señalaba otro espacio reservado cerca

del ascensor. Él caminó alrededor del auto antes de que ella desabrochara

su cinturón, y luego abrió la puerta, algo a lo que se estaba acostumbrado.

No podía admitir lo mucho que le gustaba. Ella se quedó en silencio

mientras entraban en el ascensor de lujo y apretó el único botón

disponible.

—Este ascensor sólo llega hasta el vestíbulo. Es otra medida de seguridad

que tenemos en este lugar. Nos tomamos la seguridad de nuestros

inquilinos muy en serio.

Cuando se abrieron las puertas a un enorme vestíbulo, el cual podía

competir con los mejores hoteles en Nueva York, Amy no podía dejar de

jadear sorprendida. Había un escritorio grande asentado contra la pared

del fondo con un guardia de seguridad mirando los monitores delante de

él.

—Buenas noches, Sr. Anderson. Vino temprano esta noche —dijo antes de

sonreír a Amy.

—Hola, Fred. ¿Cómo estás?

—Bien. Bien. No me puedo quejar.

—Fred, esta es nuestra nueva inquilina, la Srta. Harper. Ella va a estar

viviendo en el 19-A.

—Es muy bueno conocerla, señorita Harper. Espero que usted disfrute su

estancia aquí. Es un gran lugar. Yo trabajo por las noches de martes a

sábado, pero vivo aquí, en el apartamento 2-A, si alguna vez me necesita.

Ya he puesto una lista de números del lugar, así que no dude en llamarme

en cualquier momento.

Page 113: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

13

A Amy le agradó Fred al instante. Parecía tener unos cincuenta años y

tenía una de esas sonrisas que te hacían sentir bienvenida. Con las

nuevas medidas de seguridad se sentía segura, así el resto del mundo no

podía llegar a ella, si no lo permitía. Vivir en Seattle, y siempre en las

partes más pobres, la había hecho muy consciente de las cuestiones de

seguridad. Había estado demasiado asustada para dormir, en más de una

noche, durante toda su vida.

—Ven conmigo, y te voy a dar un gran tour antes de mostrarte tu

apartamento —dijo Lucas.

La condujo por un pasillo a la izquierda. La primera puerta por la que

entraron los llevó a un gimnasio de última generación, y caminaron a

través del lugar rápidamente. Quería hacer una pausa y observar el

equipo, pero él parecía tener prisa, así que rápidamente siguió su ritmo. La

siguiente habitación albergaba una piscina de tamaño olímpico. Su boca

se abrió en sorpresa. ¿Podría ser real? Ella no sólo tenía un hogar, al que a

ella ni siquiera le importaría si fuera del tamaño de una caja de zapatos,

sino que también una piscina, gimnasio y mucho más.

La cabeza le daba vueltas mientras él le mostraba una bañera de

hidromasaje y sauna, y varios otros lugares, como una sala de juegos. Amy

sintió que Lucas la miraba mientras recorrían las instalaciones, y ella hizo

un intento de controlar su expresión. No podía ocultar el placer corriendo

por su rostro, sin embargo.

Le mostró el jardín privado con varios bancos escondidos en diferentes

lugares.

Al pasar por una de las zonas cubiertas de arbustos, ella vio a una pareja

joven muy ocupada besándose como para notar a Lucas y Amy,

Su pulso empezó a correr al ver a la pareja, que obviamente al estar

enamorados no podían mantener sus manos fuera del otro. Ella no notó si

Lucas lo vio o no, pero quería volver a entrar antes de que tuviera alguna

idea más erótica con su jefe.

—¿Qué te parece hasta ahora? —preguntó él. Amy intentó mantener una

expresión fría, trató de actuar como si estuviera acostumbrada a vivir en

lugares similares. No era como si él no supiera nada de su casa anterior,

sin embargo. Finalmente renunció a fingir y dio una vuelta mientras se

Page 114: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

14

reía en voz alta. Ella casi le agarró en medio de su euforia, pero en el

último momento, se apartó.

—No puedo creer que viviré aquí. Sé que debería actuar toda fría y serena,

pero me da igual. Me encanta este lugar, y creo que nunca querré

mudarme —dijo ella, con una enorme sonrisa en su cara.

—Bueno, es posible que desees reservar tu opinión hasta que veas tu

apartamento actual —dijo, mientras se dirigía al vestíbulo.

Lucas apretó el botón del ascensor y entró cuando las puertas se abrieron.

Subieron al piso diecinueve en silencio. A medida que bajaban y miraba a

su alrededor en los pasillos extra anchos con hermosas pinturas colocadas

estratégicamente, Amy finalmente se dio cuenta del enorme tamaño del

complejo.

Cuando le dijeron que era un edificio de apartamentos corporativos, ella

había asumido que sólo tenía un par de pisos, con unidades mínimas.

Pero, por lo que estaba viendo, debía haber cientos de apartamentos.

Mientras caminaban por el pasillo, se dio cuenta de que casi no había

puertas. Llegaron casi al fondo, cuando Lucas se detuvo y puso una llave

en la puerta a su izquierda.

—No hay muchas puertas aquí. ¿Cuántos apartamentos hay en cada piso?

—preguntó, casi con miedo a ver lo grande que era el suyo.

—Este piso sólo tiene dos apartamentos. Tenemos cuatro pisos que

disponen de tres dormitorios cada uno, seis pisos con dos dormitorios, y el

resto son todos los apartamentos de un dormitorio. Los primeros dos pisos

son departamentos temporales, donde los socios se quedan cuando vienen

por viaje de negocios. Todos los demás pisos son residencias permanentes

—respondió—. Este piso también se utiliza para conferencias y dispone de

varias salas disponibles para reuniones. Llevamos a cabo negocios aquí, a

menudo.

—Oh —dijo Amy, sin saber qué más decir.

Entraron, y el aliento de Amy salió corriendo. El apartamento era enorme.

Tenía una gran entrada, baldosas en tonos tierra, dando lugar a una

hermosa sala de estar. El mobiliario parecía nuevo, y la habitación estaba

equipada incluso con una gran pantalla de televisión y cientos de DVD’s en

Page 115: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

15

un estante junto a él. Ella rápidamente examinó los títulos y vio varias

comedias románticas.

¿No había algo en lo que ellos no pensaran?

—Esther te trajo unas cuantas películas que creía que disfrutarías como

un regalo de bienvenida a casa —dijo Lucas mientras miraba en el estante.

Ella se conmovió al ver que Esther hizo algo tan agradable para ella.

Tendría que asegurarse de enviarle tarjeta de agradecimiento, y luego

llevarla a almorzar. Lucas dio un paso atrás y dejó que ella deambulara

por el apartamento. Había una habitación de buen tamaño para un

invitado, si traía alguno. El baño principal estaba decorado con nuevas

fundas de baño y unos toques adicionales al inodoro y al lavado.

Ella abrió la puerta al final del pasillo y se sorprendió al ver el dormitorio

principal. Había una enorme cama con dosel en el medio de ella, cubierta

con el edredón púrpura que había elegido. Era el tipo de cama que siempre

había soñado con tener. Se acercó, saltó en medio de ella, y soltó una

risita.

—No sé qué decir. Nunca he conocido a una empresa tan generosa. Me

hacen sentir culpable con todo lo que me han dado cuando tantas

personas no tienen ni siquiera un tercio de esto. ¿Qué pasa si la empresa

me odia en seis meses más? ¿Qué pasa si soy un fracaso total y no puedo

hacer el trabajo, después de todo? Es tanta la presión.

—Amy, no habríamos hecho esto por alguien a la que no le tuviéramos la

suficiente confianza. Has estado haciéndolo muy bien, y odio repetirlo,

pero ofrecemos esto a todos los funcionarios ejecutivos.

Amy sonrió mientras Lucas salió de la habitación. Ella no estaba

recibiendo ningún tratamiento especial, lo que hizo que se sintiera mejor.

Ella no quería destacar. No quería sentirse culpable por lo que le habían

dado. Quería simplemente disfrutar de lo que tenía y por ahora, al menos,

era todo suyo.

Amy volvió a la sala de estar. Lucas estaba de pie con la espalda contra la

pared, mirándola. Aquí va, pensó ella. Él no lucia como si fuera a irse

pronto, y ella sólo quería eliminar el estrés y disfrutar de su nuevo lugar.

Si las cosas fueran diferentes, sería capaz de imaginar a los dos

acurrucados en el sofá, viendo una de sus comedias románticas, pero eso

nunca iba a suceder. Tenía que dejar sacar toda la emoción acumulada,

Page 116: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

16

sonreír enormemente, y bailar alrededor de su nueva sala de estar. No

podía hacer eso hasta que él se fuera.

—Gracias por tomarse el tiempo de su apretada agenda para hacer todo lo

que hizo hoy. Este lugar es increíble. Es mejor de lo que podía haber

imaginado o esperado, aunque yo realmente no necesito todo el espacio. Si

quiere puedo mudarme a un apartamento más pequeño y guardar este

para un empleado con una familia, estoy bien con eso. —Ella hablaba

rápidamente, por lo que no podía interrumpirla—. No estoy diciendo que

no me encanta la vivienda, porque si me encanta. Es en serio más

increíble que cualquier otro lugar que he visto, si menciono en dónde he

vivido antes, pero sólo parece ser un desperdicio de espacio para mí —

continuó ella, casi sin respirar.

Amy pensó que si ella hablaba primero, él no haría la demanda que ella

pensaba que estaba a punto de hacer. No iba dormirse en los laureles en

su camino a la cima, no importa lo que él pensara de ella después de la

forma en que se había comportado la noche anterior. No estaba tan

hambrienta de éxito.

Bueno, ella tenía hambre, sólo que era un hambre muy diferente. Lo

superaría en cuanto tuviera algo de tiempo a solas para pensar realmente.

Ella seguía diciéndose a sí misma eso, pero tenía serias dudas acerca de

su propio razonamiento.

Un incómodo silencio flotaba en la sala cuando se detuvo. Parecía que no

se iría hasta que ella se lo pidiera.

Page 117: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

17

Capítulo 11 Traducido SOS Alyshiacheryl

Corregido PaolaGP

ucas sabía que Amy estaba balbuceando por lo que no le daría

tiempo para hablar. Él pensó en dejarla hablar y luego darle su

opinión

Cuando por fin dejó de hablar y lo miró, sus miradas se encontraron. La

vio subir ligeramente la barbilla, y sus hombros estaban visiblemente

firmes. De repente, parecía enfadada y no podía entender por qué.

—Creo que debería irse ahora, señor Anderson. Tengo mucho que hacer

esta noche, y me gustaría acomodarme —dijo ella firmemente. Se puso de

pie al otro lado de la habitación, lejos de él, con los brazos cruzados,

luciendo como si quisiera decir muchas cosas más.

Lucas finalmente se apartó de la pared y comenzó a caminar hacia ella. Él

estaba tomando su tiempo, sin prisa para la conversación que estaban a

punto de tener. Ella dio un paso atrás mientras él se acercaba.

—Sr. Anderson —Ella enfatizó su nombre—, lo de anoche fue un error. No

debió haber sucedido, y no habrá una segunda vez. Lo siento si usted

pensó que tenia el derecho o que yo iba a entregarme a usted en

agradecimiento por la generosidad de su familia, pero yo no soy una puta

barata —finalizó.

Él sabía por la mirada en sus ojos que estaba aterrorizada, además ella

retrocedió un paso, lo que hizo que su temperamento empeorara aun más.

Nunca antes había golpeado a una mujer, y nunca lo haría, aunque si

alguien lo presionara a hacerlo, nunca seria ella.

Lucas estaba más enfadado de lo que él recordaba haber estado antes.

Tuvo que quedarse donde estaba porque temía que pudiera estrangularla

si se acercaban demasiado. ¿Cómo se atreve a pensar que él esperaba que

ella pagara la generosidad de su empresa con su cuerpo? ¡Ella fue quien

estuvo persiguiendo el premio gordo! Ella no había sido inocente cuando

gritaba su nombre en medio del placer. Lo había querido tanto como él la

había deseado.

L

Page 118: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

18

Se quedó mirándola durante un par de minutos antes de que finalmente se

calmara lo suficiente como para hablar.

—Te dije antes que teníamos que hablar un par de cosas, que aún

tenemos que hablar. Pero ahora mismo, vamos a arreglar esos comentarios

que acabas de hacer. Nunca he pagado por sexo, en cualquier forma, en

mi vida. Cualquier mujer que he tomado en mi cama ha llegado de buena

gana, y cuando ella se va, sigue pidiendo más. Anoche estabas tan

dispuesta a saltar en la cama conmigo, como yo quería estarlo contigo.

Había dos de nosotros entrelazados entre las sabanas, y me niego a tomar

toda la culpa.

Vio la fuga de miedo en sus ojos mientras la ira tomaba su lugar. A medida

que sus palabras siguieron apuñalándola, ella extendió la mano para

abofetearlo, pero él le agarró la mano antes de que lo hiciera.

—Te lo advertí, yo sólo te dejaría salirte con la tuya una vez —dijo él con

una sonrisa.

Luego la tiró a sus brazos y aplastó sus labios contra los de ella. Estaba

tan enojado que el beso fue casi agresivo en su intensidad. Él no fue gentil

mientras hacia que ella se rindiera ante él. La agarró del pelo y tiró de su

cabeza hacia atrás por lo que tuvo mucho mejor acceso, su cuerpo

palpitante de deseo desatado.

Ella luchó contra él por unos segundos, pero luego le devolvió el beso con

la misma pasión.

Cuando él supo que tenía su entrega total, la rechazó, a pesar de que tuvo

que usar cada onza de control que tenía, para hacerlo. Ella tenía los ojos

vidriosos de pasión, y su ira se había vuelto a reavivar.

Se quedaron en un punto muerto, jadeando, cada uno luchando contra

sus intensas emociones.

—Siéntate, Amy —dijo él finalmente, un poco más calmado mientras se

acercaba al sofá. Ella no quería enfrentarse a su ira si seguía desafiándolo.

* * * *

Mientras recuperaba la compostura, Amy se reprendió a sí misma. Ella se

dijo que no iba a hacer nada con él y luego, con un solo toque de sus

labios, todo pensamiento racional se fue, y no podía hacer otra cosa que

Page 119: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

19

acercarlo más. Estaba empezando a darse cuenta de que había una

delgada línea entre el amor y el odio. No era tan hostil hacia Lucas como

quería serlo.

Cuanto más estaba a su alrededor, más notaba las cosas atractivas de él,

no sólo su gran aspecto. Lo que era aun más atractivo que su aspecto, sin

embargo, era la forma en que hablaba con los demás empleados y la forma

en que estaba dispuesto a echarles una mano. Tal vez ella lo había juzgado

antes de tiempo y eso era lo que les había hecho ser tan hostiles el uno

con el otro. Sabía que ella había estado emitiendo una actitud negativa

desde el primer día que empezó. Estaba dispuesta a hacer un cambio. No

quería involucrarse con él en una relación, pero podía respetarlo como un

jefe.

Finalmente, se imaginó que ella podría terminar bien con este asunto, así

que se sentó en la silla frente a él.

—Estoy físicamente atraída por ti. No significa nada, sin embargo; eso fue

lo que quise decirte antes. Lo de anoche no debió haber ocurridó. Fue un

momento de debilidad para mí. No quiero perder mi trabajo, y no quiero

tener una aventura con mi jefe. Tenemos que seguir siendo profesionales a

partir de ahora —afirmó en lo que esperaba que fuera un tono profesional.

Él la miró como si hubiera perdido el juicio.

—Estoy de acuerdo contigo, Srta. Harper —dijo él, volviendo a nombrarla

por su apellido—. Lo de anoche no debió haber ocurrido. Pero tenemos que

lidiar con las consecuencias de la noche. Me olvidé de utilizar protección,

es la primera vez que me sucede. Sé que eras virgen y probablemente no

estás en control de la natalidad —dijo finalmente—. Yo no me desligo de

mis responsabilidades, así que si estás embarazada, necesito saberlo en

cuanto lo sepas. No tendré un hijo que se críe sin mí. Nos casaríamos

inmediatamente. ¿Entiendes?

Amy estaba tan sorprendida por las palabras de Lucas, ella no respondió

durante varios segundos. Ella no había pensando que él consideraría esa

opción. Ella hubiera asumido en el caso de un embarazo no planeado, que

él le pediría un aborto. Ella nunca lo haría, pero sabía que muchos

hombres no querrían la responsabilidad. Cuanto más pensaba en ello, sin

embargo, el sentido le hizo ver que él lo haría porque lo consideraría

correcto, para cuidar de su hijo. Venía de una familia amorosa, que nunca

negaría a uno de los suyos.

Page 120: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

20

Amy tomó unas cuantas respiraciones profundas antes de hablar con

Lucas. Ella repitió a sí misma que no podía permitirse el lujo de perder su

trabajo, y si estaba embarazada no podía darse el lujo de que supiera al

respecto. Él podría fácilmente demostrar que podía cuidar mejor al niño.

No necesitaba ni quería un hombre en su vida. Tenía que concentrarse en

sí misma. Había visto a su madre con más hombres de lo que nadie podría

contar. También había visto cómo esos hombres abusaban de su madre

diariamente. Era sólo su voluntad de supervivencia que le había salvado

del mismo abuso. Había aprendido a una edad joven a ocultarse cuando

los amigos de su madre se acercaban. Ella no había conocido todavía a un

hombre en el que pudiera confiar.

—¿Vas a estar ahí mirándome, o te vas a comportar como una adulta y

hablar? —le espetó él.

—En primer lugar, sólo porque soy una empleada suya no le da el derecho

a hablarme de esa forma. En segundo lugar, nunca me casaría con usted,

por cualquier motivo, especialmente, no para atormentar a cualquiera de

mis hijos —dijo ella con frialdad.

—Si hay un niño, maldita sea, bueno... — Lucas comenzó a exigir de ella

otra vez, pero ella lo interrumpió.

—Si hay un niño, será mío y sólo mío. No se trata de los viejos tiempos en

que una mujer tiene que hacer la voluntad de un hombre. Así que un niño

no es algo de lo que tiene que preocuparse. Ya he comprobado mi

calendario, y no hay nada que temer. Lo de anoche fue un error. He estado

saliendo con un hombre durante un año y había estado reacia a dar ese

último paso. Dado que con usted no fue demasiado incómodo, ahora

puedo consolidar nuestra relación —mintió ella.

Había una mirada sigilosa en la cara de Lucas, mientras caminaba

lentamente hacia ella. Se quedó de pie firmemente, no retrocediendo de

nuevo. Ella tenía que mostrarse firme, a pesar de que estaba temblando

sin control en el interior.

Sin decir nada, Lucas se inclinó y tiró de su cabeza hacia atrás, moviendo

su cara con una precisión a un centímetro de la de ella. Se quedó

congelado en su lugar hasta que ella empezó a temblar de necesidad.

Page 121: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

21

—Así que lo de anoche fue sólo una prueba para tu novio y para ti —dijo

con una voz tan tranquila que era mucho más aterradora que si hubiera

estado gritando. Podía sentir la energía acumulándose en sus brazos.

No tenía miedo de que él la golpeara. Tenía mucho más miedo de que la

besara de nuevo. Su resistencia se encontraba en su punto más bajo, y si

él tomaba sus labios otra vez, ella acabaría rogándole para que no se

detuviera. El calor mantuvo a su cuerpo a la espera de lo que estaba a

punto de pasar.

—No me gusta ser utilizado, Srta. Harper. Para nada. Realmente no me

gusta que me mientan. Puede que lo pasó anoche no fue nada para ti, pero

mientras yo estaba duro y profundamente dentro de tu cuerpo, no había

otro hombre en tu mente. Estabas estremeciéndote por mí y sólo por mí.

Cuando te acuestes con tu novio, será mi cara la que verás. No te hará

temblar de la forma en que yo lo hice. No te hará gritar de placer. Desde

luego, no te dejará satisfecha, tu cuerpo sólo quedara agotado. —Se detuvo

un momento mientras su corazón bombeaba y sus piernas temblaban,

tratando de aliviar el dolor insoportable que estaba causando con nada

más que sus palabras—. Puedes pensar en eso.

Él la empujó y salió del apartamento.

Amy esperó hasta que oyó cómo la puerta se cerró antes de perder la

compostura. Una vez que ella oyó el chasquido de la chapa de la puerta, se

dejó caer contra la pared, con las rodillas temblando mientras se deslizaba

hacia abajo. Luego, lloró un buen rato.

¿Por qué había permitido que esto sucediera? Si ella hubiera tomado un

baño después y no hubiera estado sólo una toalla... Si tan sólo hubiera

sido capaz de decir que no, entonces tal vez —sólo tal vez— hubieran sido

capaces de estar en la misma habitación sin atacarse el uno con el otro, o

tratando de quitarse las ropas. Incluso, podrían haber mantenido una

actitud profesional. Incluso mientras lo pensaba, sabía que era una

fantasía. La atracción salvaje era demasiado fuerte, aun desde el primer

día.

Ella permaneció en el mismo lugar por más tiempo del que debería,

llorando y sintiendo lástima de sí misma. Al final, se levantó. No iba a

dejar que esto la afectara más. Iría a trabajar con su escudo de armadura.

Era la cosa más inteligente que podía hacer,

Page 122: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

22

Ella había sido inteligente por los primeros veinticuatro años de su vida.

Tendría que perdonarse este error de juicio. A todo el mundo se le permitía

cometer un error de vez en cuando.

Page 123: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

23

Capítulo 12 Traducido por Alyshia Cheryl

Corregido Alyshia Cheryl

my tenía sentimientos encontrados cuando fue a trabajar el

lunes. Estaba flotando en las nubes, porque su nuevo auto

había sido entregado la noche anterior, y le encantó

conducirlo. Era una sensación excitante el conducir la hermosa maquina y

saber que nunca tendría que luchar con la multitud en el transporte

público de nuevo. Definitivamente había estado un par de veces

aterrorizada en el autobús cuando había estado en contacto con algunas

personas poco respetuosas. Estaba aterrorizada, por otra parte, del

ambiente de trabajo al entrar por esas puertas dobles. ¿Lucas iba hacerle

una escena? ¿Iba a enviarla a empacar? ¿Podía despedirla? No podía

hacerlo simplemente por su relación física.

Lucas podría, sin embargo, despedirla por no ser lo suficientemente buena

en su trabajo. Ella ya estaba nerviosa por lo bien que hacia su trabajo.

Aparcó el auto y se dirigió hacia el interior. Acababa de ver cómo podría ir

su día. No había nada que pudiera hacer al respecto, por lo que tendría

que hacer lo que pudiera e ir allá.

Las puertas del ascensor sonaron, y la puerta se abrió junto a la cara

sonriente de Tom.

—Me preguntaba cuando ibas a llegar. He estado rebotando en mi asiento

durante media hora —dijo, sin tiempo para saludos.

Amy suspiró.

—Hola, Tom. Si has estado saltando en tu asiento por media ahora,

entonces, has estado aquí por mas de una hora porque llegué media hora

antes —respondió ella. Él pasó un brazo alrededor de sus hombros y la

llevó a su escritorio.

—Está bien, Amy, es hora de hablar. ¿Qué ha pasado? Me abandonaste

totalmente este fin de semana. La forma en que el jefe estaba actuando la

noche del viernes, yo ni siquiera sabía si iba a estar aquí esta mañana —se

quejó él.

A

Page 124: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

24

—Todo está bien, Tom. El jefe y yo sólo teníamos un pequeño

malentendido. Te prometo que voy contarte todo más tarde, pero tengo que

empezar a trabajar en mi trabajo antes de que la persona antes

mencionada entre y tenga una razón para despedirme por ser una vaga —

dijo ella mientras se dirigía a su oficina.

Tom caminó junto a ella.

—Llegaste temprano. No puedes meterte en problemas por hablar conmigo

en tu tiempo libre.

—No creo que sea nuestro tiempo libre cuando estamos en estas oficinas.

Por favor, sólo déjame ir a trabajar, y vamos a salir esta noche, te lo

prometo —dijo, mientras lo empujaba y sacaba de su oficina.

Amy estaba ocupada en su escritorio cuando Lucas llegó dos horas más

tarde. Debe ser bueno ser el jefe y aparecer cuando te apetezca, pensó ella

hostilmente, y luego se arrepintió inmediatamente.

Ella no era una especie de exnovia de la secundaria que iba a tener

pensamientos mezquinos. Lo que él hacia con su tiempo libre, era su

asunto, sin duda no el de ella.

—Srta. Harper, necesito que vengas aquí, por favor —dijo por el

intercomunicador, haciendo que su frente sudara. Se secó la frente y

agarró su cuaderno, apretó sus rodillas para no temblar.

Con la mayor calma que podía fingir, dio un paso a través de sus puertas

comunicadas y se acercó a su mesa. Él estaba en el teléfono, de espaldas a

ella, mientras miraba por la ventana con una vista espectacular de la

ciudad.

Esperó cinco minutos, demasiado nerviosa para sentarse, pero muy

inestable sobre sus pies, ya que su cuerpo temblaba.

Finalmente, él colgó el teléfono y se volvió hacia ella, su cara

completamente inexpresiva. Ella parpadeó mientras sus miradas se

juntaron. Ella creyó detectar una oleada de fuego en sus ojos, pero él

parpadeó y ese fuego desapareció, haciéndola pensar que no era nada más

que su imaginación.

—Toma asiento. Tengo que dictarte algunos archivos para que los escribas

—dijo en su tono más profesional.

Page 125: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

25

Ella se sentó temblorosamente mientras se dispuso a tomar notas. Él

comenzó a hablar, y pronto se vio envuelta en el trabajo, sin tiempo para

preocuparse por nada que no sea conseguir una redacción correcta.

—Gracias, eso es todo. Estaré fuera de la oficina el resto del día, así que

me los envías a través de correo electrónico antes de esta noche.

Lucas se volvió hacia su ordenador y empezó a escribir algo, despidiéndose

de ella. Estuvo sentada un momento más, y finalmente consiguió

marcharse y se dirigió a su oficina.

Se dejó caer en su silla y dejó escapar un suspiro de alivio. Parecía que

realmente iba a actuar como si nada hubiera pasado. Ella estaba aliviada,

e irracionalmente dolida a la vez.

De inmediato empezó a escribir sus cartas, y el día transcurrió

rápidamente. Él se fue antes del almuerzo, dándole a ella finalmente la

oportunidad de respirar. No era fácil hacerlo cuando sólo tenía una puerta

delgada entre ellos.

El resto del día transcurrió sin incidentes. Lucas se comunicaba con ella

estrictamente por correo electrónico, y a las cinco de las tarde su humor se

había disipado considerablemente.

—Mi ordenador está apagado, los teléfonos fueron desconectados, y si no

haces lo mismo, voy a tener que sacarte a la fuerza de este lugar —dijo

Tom mientras se dirigía a su oficina y se sentaba en el escritorio.

—¿Cómo pudiste conseguir un trabajo cuando estás más interesado en

salir corriendo por la puerta que trabajar? —bromeó ella.

—Cariño, estoy en mi puesto actual por mi personalidad burbujeante.

Todo el mundo quiere que le conteste sus teléfonos —respondió con un

guiño sugerente.

—Eres justo lo que recetó el doctor, Tom. Necesito música a todo volumen,

comida chatarra, y un montón de soda —dijo Amy mientras apagaba su

computador.

Tom saltó del escritorio y tomó su abrigo antes de que ella pudiera. Se lo

ofreció, y ella sonrió mientras se lo ponía. Era un gran tipo. Realmente era

tan malo que fuera gay. A ella le encantaría tener a un hombre como él en

su vida.

Page 126: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

26

Bueno, si ella estuviera saliendo con alguien, eso era.

—Gracias, Tom. Eres un bombón.

—Que se lo digan a mi ex. Me dijo que estaba coqueteando demasiado. Le

dije que había una gran diferencia entre el coqueteo y ser amable. Algunas

personas son muy celosas. ¿Quién tiene tiempo para todo ese drama?

—Amen. Ahora, vamos a irnos antes de que Sr, Anderson aparezca con un

proyecto que me mantenga ocupada toda la noche —dijo con una sonrisa,

pero ella no estaba lejos de la verdad. El hombre lucía como si pudiera

trabajar día y noche, sin siquiera detenerse para comer o dormir.

—Cariño, el único proyecto en que Lucas trabajaría toda la noche no me

involucra, por desgracia. Tú, en cambio, probablemente podría quemar su

aceite a la medianoche, o en cualquier momento —se burló Tom.

Amy golpeó su brazo antes de colocar el suyo a su alrededor, y lo siguió

hasta el ascensor. Éste abrió rápidamente y caminaron fuera del edificio.

Llegaron a su lugar favorito, con tiempo suficiente para encontrar todavía

un asiento. Después de ordenar, Tom la miró expectante.

—¿Qué?

—No te hagas la tonta conmigo. He estado esperando todo el fin de semana

largo. Tú convenientemente comiste en la oficina hoy, así que ahora quiero

que todos los detalles interesantes. No te atrevas a dejar una cosa fuera —

exigió Tom.

Amy contempló la posibilidad de mentirle, pero como ella no podía

mentirle por cosas que valían nada, sabía que perdería el aliento. Además,

ella realmente necesitaba alguien con quién hablar, y ella sabía que sus

secretos estarían a salvo con él.

—Está bien, pero te advierto que es una larga historia... —dijo ella. Él sólo

levantó las cejas y esperó mientras descansaba la barbilla entre sus manos

entrelazadas, haciéndole saber que tenía toda la noche.

Amy finalmente dijo todo, desde las candentes escenas entre ellos, a partir

del primer día, el sexo excepcional, y finalmente la escena en su

apartamento. Los ojos de Tom estaban muy abiertos mientras la miraba

con deleite conmocionado.

Page 127: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

27

—Di algo —exigió ella cuando él continuó allí sentado con la boca abierta.

—Oh mi, mi, el ambiente de Capitol Hill4 estaba caliente. Mataría por

haber sido uno de esas moscas en la pared cuando todas las chispas

explotaron. ¿Cómo diablos hiciste para mantener tu virginidad a la

madura edad de veinticuatro años y no hacerlo en el asiento trasero del

coche de un musculoso adolescente?

—De todo lo que acabo de decir, ¿esa es la pregunta que tienes para mí?

—Bueno, sí. No puedo creer que eras virgen. ¿Te dolió?

Para Amy esta conversación hubiera sido extraña si hubiera sido con

cualquier otra persona, pero ella ya conocía la actitud sin límites en el bar

de Tom. No ocultes nada nunca.

—Sí, durante unos dos segundos, pero luego era sólo... ni siquiera

bueno… era increíble —suspiró ella.

—Oh —respondió Tom, recogiendo el menú de bebidas para avivar su

rostro. Ella no pudo evitarlo y se rió, se rió realmente, por primera vez en

semanas. Ella debería haber llamado Tom el domingo y él habría ido. Ella

se habría sentido mucho mejor para venir a trabajar al día siguiente.

—Gracias, Tom. Tenía que sacar todo esto de mi pecho, y realmente

necesitaba reír —dijo mientras sus ojos ardían de emoción.

—Te amo, Amy, y voy a estar allí para ti en cualquier momento, de día o de

noche. Ahora, tienes que estar ahí para cuando aparezca en tu puerta a

las 3 de la mañana con el corazón roto.

—Mi puerta siempre estará abierta para ti —prometió ella.

—Al parecer, eres una puta —dijo con una sonrisa mientras bromeaba con

ella—. Yo habría dado un millón de dólares si Lucas me hubiera

presionado contra la pared.

—No tienen ni siquiera un centenar de dólares, por lo que está fuera de tu

alcance.

—Si que te gusta aplastar a mis sueños, ¿no? —dijo mientras se dejó caer

en su asiento.

4 Capitol Hill: zona residencial de Washington.

Page 128: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

28

La comida llegó y continuaron con las bromas. En el momento en que se

fueron, se estaba haciendo tarde, y Amy llegó a su casa en un estado de

ánimo mucho mejor que cuando había salido esa mañana. Ella comenzó a

sentirse optimista ya que su mundo comenzaba a relajarse. Se quedó

dormida con una sonrisa aún en su rostro.

Page 129: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

29

Capítulo 13 Traducido SOS por Alyshia Cheryl

Corregido por Curitiba

my entró en el ascensor, con algo de miedo y una emoción

indefinida comprimiendo su pecho. Ella necesitaba hablar con

Tom. No podía decírselo por teléfono, así que había estado

esperando nerviosamente desde la noche anterior, y se le había hecho

imposible dormir.

Ella estaba en su quinto mes como asistente de Lucas, y le encantaba su

trabajo, bueno al menos una parte de él. Ella sabía lo que estaba

haciendo, y ahora estaba segura de sus habilidades. Esther se había

detenido en varias ocasiones para elogiar su trabajo, diciendo que era

como si Amy hubiera estado en la compañía durante diez años en lugar de

unos pocos meses. Las dos habían estado muy cerca, y Amy nunca la

rechazó cuando la invitaba a comer o a ver una película.

Ella tenía dos grandes amigos ahora. Tres, si contaba a Joseph, quien la

iba a ver por lo menos una vez a la semana para saber cómo estaba.

Insistió en llevarla a comer, diciéndole que estaba demasiado delgada y

que necesitaba un poco de carne en sus huesos antes de que fuera

arrastrada por un fuerte viento. Era un hombre sabio, y no era algo malo

decirle a una mujer que estaba flaca. Obviamente había estado felizmente

casado durante muchos años, y no sólo eso, sino que sabia escuchar a su

esposa.

Lucas era estrictamente profesional con ella. Le había dado sus

asignaciones de trabajo a Amy, con muy poca conversación entre ellos, y

luego la dejó sola. Nunca se detenía y era siempre cortés.

A menudo se encontraba mirándolo mientras él dejaba la habitación, más

a menudo de lo que debería, y estaba en camino a enamorarse de él, pero

hacia un muy buen trabajo ocultándolo. Él había sido más que

profesional, que era lo que quería, por lo menos lo que debería querer.

A

Page 130: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

30

Se decepcionaba cada vez que Lucas salía de la habitación, se sentía muy

vacía. Incluso había intentado ir a una cita con un chico de contabilidad,

pero había sido un desastre. La había aburrido hasta las lágrimas, y

cuando él la había besado al final de la noche, no había sentido la más

mínima pizca de pasión.

Casi todas las noches se despertaba en las primeras horas de la mañana

con el nombre de Lucas en sus labios, su cuerpo mojado y dispuesto a él.

Ella estaba agradecida de que él estuviera manteniendo las distancias,

porque ella nunca tendría la fuerza de voluntad para alejarlo si hacía un

movimiento.

Sus hormonas estaban por todo el lugar, al menos sabía por qué ahora.

No tenía otro hombre para comparar a Lucas, como también no podía

imaginar un sexo mejor que el que había tenido con él. Parecía estar en un

constante estado de excitación, su cuerpo deseaba lo que su mente no

necesitaba. ¿Por qué no podía ser simplemente fácil? ¿Por qué Lucas?

Si ella iba a comenzar una relación, superar su miedo a los hombres,

entonces ¿por qué no podía ser de un tipo como Bob de contabilidad?

Claro, era aburrido, pero con él estaría a salvo, segura y sería fácil. No

haría que su presión arterial subiera. Él sería fácil, suave, ¿por qué no él?

Sabía por qué no. Ella podía creer que no quería pasión, pero sólo un

sabor haría cambiar su opinión. Un sabor que era como una droga, que le

hacía querer más. Algunos días eran más fáciles que otros, y sabía que

hoy iba a ser uno de esos días difíciles.

Amy había pospuesto tomar una prueba de embarazo por mucho tiempo

porque ya sabía la respuesta. Había estado lidiando con las náuseas

matutinas durante dos meses, y hubo cambios sutiles en su cuerpo. Ella

era naturalmente pequeña, así que la mayoría no se dio cuenta de la

pequeña protuberancia en la parte inferior de su estómago, pero lo hizo.

Finalmente colapsó y tomó la prueba, luego la tiró a la basura. Ya sabía

que la respuesta era afirmativa.

Las puertas del ascensor se abrieron y ella salió, caminando directamente

hacia el escritorio de Tom. Estaba en el teléfono, por lo que zapateó con

impaciencia a la espera de él. Llevó un dedo a sus labios en una disculpa.

Obviamente, podía ver que ella realmente necesitaba hablar con él.

Page 131: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

31

—Me alegro de que hayas llegado temprano, Srta. Harper. ¿Puede venir a

mi oficina? —preguntó Lucas mientras se acercaba al escritorio.

Amy le envió a Tom una mirada de pánico, pero él estaba ocupado en el

teléfono. No había nada que pudiera hacer para salvarla de todos modos.

No era como si Lucas supiera algo. Ella no sabía lo que iba a hacer, pero

no podía decirle, a pesar de que sabía que estaba mal.

—Sí, por supuesto, Sr. Anderson —respondió finalmente, al mismo tiempo

que Tom colgó el teléfono. Articuló traidor a él mientras caminaba detrás

de Lucas.

Tom le envió una mirada inquisitiva, pero ahora tendría que esperar aun

más tiempo para hablar con él. De ninguna manera se arriesgaría a que

Lucas oyera su conversación.

—Déjeme ir a mi oficina y sacar mi bloc de notas —dijo Amy cuando

llegaron a sus puertas.

—No lo necesitas. Adelántate, deja tu bolso y tu abrigo y luego entra —dijo

Lucas mientras pasaba a través de su propia puerta.

Amy tomó su tiempo para dejar sus cosas. Sabía que Lucas no era

paciente, pero ella apenas había dormido, y su corazón estaba corriendo a

toda velocidad. Necesitaba hablar con su amigo, conseguir un poco de

perspectiva, no estar sentada frente a Lucas, absorbiendo su esencia,

viendo a sus ojos azules brillantes, y luchando contra el impulso de saltar

sobre su regazo.

Caminó lentamente hacia la oficina de Lucas, esperando que la

conversación no durara demasiado tiempo. No estaba preparada para

enfrentarse a él, y muchos menos, después de haberse hecho la prueba.

Ella no debería haberla hecho durante la semana. ¿En qué estaba

pensando?

Se sorprendió al encontrarlo de pie junto a la ventana. Estaba con la

mirada fija hacia la ventana, con las manos detrás de la espalda mientras

miraba hacia abajo en la niebla de la mañana de Seattle. Ella se puso de

pie cerca de la mesa, sin saber si debía decir algo o no.

—Tengo un viaje de negocios la semana que viene y necesito que vengas

conmigo —dijo, todavía sin volverse.

Page 132: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

32

El corazón de Amy comenzó a latir con fuerza. Ella no había ido a ningún

viaje con él, sin embargo, había salido mucho en los últimos meses. Se

preguntó qué era todo esto, y por qué la necesitaba allí repentinamente.

—¿A dónde? —preguntó finalmente ella, sin que importara realmente.

Todo lo que realmente importaba era el hecho de que ella estaría con él,

completamente solos.

—Australia. Contamos con un viñedo allí, y hemos estado teniendo

problemas. Parece que alguien está deliberadamente tratando de sabotear

nuestros cultivos. Nos ha tomado muchos años desarrollar nuestra gran

reputación por nuestros excepcionales productos, pero un envío malo

puede destruir todo eso —dijo Lucas mientras finalmente se volvía hacia

ella. Amy podía ver la frustración que sentía, pero todavía no entendía por

qué tenía que ir con él.

—Esto podría tomar un par de semanas y necesito una asistente. Esther

ha estado yendo a los viajes conmigo, pero finalmente puso sus pies en el

suelo y se niega a viajar más, así que necesito que vayas —dijo,

obviamente pensando que ella estaba confundida.

Ante sus palabras, sintió ira al rojo vivo hervir en su interior. Él le había

dado la espalda y no le había permitido hacer su trabajo. Había pensado

que lo estaba haciendo tan bien, cuando todo el tiempo, él no había

confiado en ella. Se sentía traicionada, la cual era una extraña emoción

respecto a su trabajo.

Ella todavía no había dicho ni una palabra cuando él volvió a hablar.

—Mira, Amy, nada de esto ha tenido que ver con tu desempeño laboral.

Vamos a dejar las cosas así —dijo mientras se pasaba los dedos por el

pelo.

—Ya veo —respondí con frialdad, aunque ella no lo hacía para nada.

—Eres tan increíblemente ingenua. Puedo ver que estás enojada y herida

por no pedirte que vinieras conmigo. ¿De verdad quieres que te lo

explique? —Prácticamente gritó.

—No, estoy bien —respondió ella, pensando que era hora de irse. Estaba

obviamente enfadada con él.

Page 133: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

33

—Yo no te lleve, porque sabía que el momento en que el jet se pusiera en el

aire, acabaríamos en mi muy grande y cómoda cama... y no dormiríamos

en ella —dijo, mirando directamente a sus asombrados ojos.

Amy quedó sin aliento ante su audacia. No había nada más claro que eso,

pensó ella.

—Bueno, yo... uh... ya veo —tartamudeó ella mientras daba un paso atrás.

—Tengo una reunión a donde ir. Vamos a terminar esta conversación más

tarde —dijo, despidiéndose. La forma en que sus palabras fueron

pronunciadas, como una amenaza. Ella no tenía ninguna duda de que se

estaban acercando a una confrontación.

No podía saber si estaba más asustada o excitada por la perspectiva.

Rápidamente se retiró a su oficina, donde pasó el resto del día en su

computadora. No tuvo un momento a solas con Tom ya que Lucas le

enviaba más y más trabajo. Se sobresaltó cuando Tom entró y saltó sobre

su escritorio.

—Amy, es tarde, y estoy más que listo para la hora feliz. Vamos, chica. Te

llevaré lejos de aquí.

—Lo siento, Tom. No me di cuenta de la hora. Ha sido un día

inusualmente estresante. He estado tratando de hablar contigo desde esta

mañana, pero luego me he hundido en trabajo —dijo, mientras la tensión

de la noche anterior se desplomaba de nuevo sobre ella.

—Bueno, no te preocupes, el día ha terminado, y te voy a sacar a pasear

por la ciudad —dijo él, prácticamente saltando en su asiento.

—En primer lugar, Tom, es un día de semana, y no todos podemos

quedarnos hasta las tres de la mañana y luego funcionar al día siguiente.

Más importante, sin embargo, es que realmente necesito hablar contigo en

algún lugar más tranquilo que el lugar al que acostumbramos a pasar el

rato —dijo ella, tratando de mantener la voz baja.

—Si intimidad es lo que quieres, entonces eso es lo que obtendrás. Sé de

un club increíble al que no te he llevado antes. Vamos a ir allí, tomar unas

copas y luego los dos podemos buscar chicos calientes. Justamente hay

unos saliendo de la oficina, y se ven bien en su traje de negocios —dijo con

un silbido.

Page 134: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

34

Amy no pudo evitarlo y se echó a reír. Era imposible estar preocupada

cuando estaba en presencia de Tom. Él estaba tan lleno de vida, y tenía

una manera de hacerle ver fácil el lado positivo de las cosas.

—Estoy dentro. No podría evitar el encuentro con mi futuro príncipe

encantador —bromeó ella, no sabiendo que significaba eso en lo más

mínimo. Sus pensamientos se desviaron a Lucas, sentado solo en su

oficina, pero ella se negó a seguir pensando en él.

Tenía que desahogarse con Tom, y la realidad era que no iba a poder salir

por un tiempo muy largo, si es que salía alguna vez, porque en unos seis

meses, tendría un bebé recién nacido.

* * * *

Lucas estaba en su oficina, con las puertas conectadas entreabiertas, y

oyó el intercambio entre Amy y Tom. Se sorprendió por los celos que

corrían a través de él. No le gustaba cómo se reía fácilmente con Tom, y

estaba seguro como el infierno que no le gustaba la idea de que ella ligara

con otros hombres.

Nunca había sentido celos antes de conocer a Amy, y estaba sorprendido

por el tirón en sus entrañas. Ya se había convencido a sí mismo de que no

había forma de que pudieran ser una pareja, así que por qué le importaba

con quién salía. No debería sentir nada hacia ella, pero incluso después de

meses, no podía dejar de pensar en ella, sin parar, al parecer.

Se sentó un poco más erguido en su silla. Estaba completamente fuera de

sí, lo cual divertiría a sus hermanos sin fin. Puso su cabeza entre las

manos y esperó a que ella se fuera. No tenía la menor queja respecto a su

labor. Había aprendido más cada día y estaba haciendo un trabajo

excelente.

Había considerado la idea de despedirla, pero había descartado la idea de

inmediato. No podía dejarla ir, no todavía. Tal vez sería capaz de hacerlo

eventualmente. Superaría la extraña crisis que su cuerpo estaba pasando,

y después sería capaz de trabajar con ella muy bien. Si no lo hacía pronto,

no tendría más remedio que trasladarla a otra división de la empresa.

Incluso la idea de que ella fuera a trasladarse a otra parte del edificio hizo

que sus músculos se tensaran.

Page 135: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

35

Lucas se levantó y decidió salir a tomar algo. Encontraría una distracción

agradable para pasar la noche. Cualquier mujer estaría feliz de ir a casa

con él. Era Lucas Anderson, después de todo. Había varios mensajes para

él ya. Sólo que no tenía ningún deseo de llamar a cualquiera de las

mujeres que normalmente hacía cuando su cuerpo le estaba alertando que

había dejado de lado al placer por demasiado tiempo.

A pesar de que la idea de una mujer diferente a Amy ni siquiera era un

poco atractiva, tendría que esforzarse en eso. Sabía que una vez que

saliera, él comenzaría a sentirse mejor, y estaba seguro de que algo

atraería bastante su atención, al menos lo suficiente por una noche.

Lucas fue a un club en el cual no había estado hace mucho tiempo y se

sentó. Él pidió una bebida y no habían pasado más de cinco minutos,

cuando una pelirroja excepcionalmente atractiva se sentó junto a él. Ella le

dio la mirada que decía: Cómprame una bebida, y puedes llevarme a casa.

Él echó hacia atrás la bebida antes de darle toda su atención.

—¿Puedo comprarte algo? —Puso todo el encanto a su disposición en su

voz.

Ella acarició con el dedo su mano.

—Quiero un Martini sucio, con azúcar.

Él le compró varias bebidas y la escuchó mientras ella trataba de seducirlo

durante más de una hora que parecía no tener fin.

Él sabía que todo lo que tenía que hacer era tronar un dedo y ella estaría

en su auto, iría casa con él. Estaba tratando de obligarse para hacer

justamente eso, pero sabía que no iba a suceder.

Lucas no sintió deseo alguno por las curvas de la mujer que se

encontraban en exhibición a cualquiera que quisiera una visión clara.

—Gracias por tu compañía esta noche —dijo mientras lanzaba varios

billetes sobre la mesa—. Buenas noches.

—En caso de que no lo hayas notado las señales, nene, estoy ofreciéndote

ir contigo. Confía en mí, no te arrepentirás de una noche o más, conmigo

—ronroneó ella.

Page 136: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

36

Lucas la miró por un momento, y luego se volvió y se alejó. No había

sentido nada. Normalmente, él la habría llevado a su casa y aceptaría lo

que le estaba ofreciendo. Una noche sin ataduras y sólo con buen sexo.

Él hubiera querido hacer eso, excepto por el hecho de que durante todo el

tiempo que había estado sentado allí, en la única mujer que había sido

capaz de pensar era Amy. Ella era suave y femenina, no era promiscua y

temeraria. También fue la mayor experiencia sexual que jamás había

tenido. Él no estaba sobre ella.

Salió del club y estuvo de pie al lado del auto, respirando el aire casi

helado. Cuando su cuerpo seguía ardiendo varios minutos más tarde, él

sabía que nada iba a saciarlo, nada más que una rubia curvilínea, que de

alguna manera había vuelto su mundo al revés desde que la conoció.

Rápidamente se alejó del club y llegó a casa en tiempo récord. Aparcó y se

percató inmediatamente del auto de Amy. Se sorprendió por la sensación

de alivio corriendo a través de él al saber que ella estaba en casa. Por

supuesto, eso no duró mucho cuando empezó a pensar que podría estar

un hombre con ella. Ella había ido a buscar a alguien.

De repente, tenía que saber si estaba con alguien, o sólo ella. Sabía que si

estaba con ella una noche más, él saldría de su extraña atracción por ella.

Tenía que tomarla otra vez, y entonces tal vez se daría cuenta de que no

era tan grande como lo recordaba.

Lucas tenía prisa para llegar a su apartamento. Ella todavía no había

descubierto que la otra unidad en su piso era de él. Había sido muy

cuidadoso cuando él iba y venía. Él no quería que ella supiera que estaba

tan cerca.

Las puertas se abrieron, y Fred levantó la vista del papel.

—Hola, Sr. Anderson. ¿Cómo fue su día, señor?

—Ha sido fantástico, Fred. ¿Sabe si la señora Harper está en su

apartamento?

La señorita Harper se encuentra actualmente en la piscina, señor.

—Gracias, Fred. Que tenga una buena noche. —Lucas cambió

rápidamente de dirección.

Page 137: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

37

Si ya estaba nadando, ella debe de haber estado fuera durante sólo media

hora. Esta fue una noche rápida. Tal vez los ligues habían sido escasos por

ser un día de semana.

Era eso, o tal vez ella tenía la intención salir cuando la vida nocturna

realmente comenzara. Bueno, podría poner esos pensamientos en espera,

porque había decidido que ella iba a pasar la noche con él.

Se metió en el vestuario de los hombres y se cambió.

Lucas salió de los vestuarios y se quedó desapercibido durante varios

minutos mientras Amy nadaba sola en la piscina. Se veía espectacular en

su traje de baño. Mostraba sus curvas a la perfección. Él quería poseerla,

pero la anticipación era parte de la diversión. Mientras ella estaba

nadando lejos de él, se zambulló en la piscina sin esfuerzo.

Hizo el menor ruido, y Amy no notó su entrada. Se dio la vuelta y estaba

haciendo su camino de regreso a él. Se metió en el agua, asegurándose de

que estaba en su línea directa. Esperó el impacto.

Ella no reaccionó cuando su cuerpo golpeó contra el suyo. Bajó por un

segundo, y rápidamente llegó el agua de pulverización.

—Oh, perdón —dijo ella mientras empezaba a mirar hacia arriba. Cuando

lo reconoció, se congeló—. ¿Qué estás haciendo aquí?

—Yo pensé que era un buen momento para darme un baño —contestó y se

fue a un ritmo más rápido a través de la piscina, con el cuerpo energizado.

Él se sentía mejor en ese momento que en meses. Sonrió durante todo el

camino hasta el otro lado de la piscina, esperando que ella aceptara su

desafío. Vería si ella se escaparía, quedaría o discutiría.

Page 138: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

38

Capitulo 14 Traducido por Alyshiacheril y PaolaGP

Corregido por PaolaGP

my se quedo en el sitio, sosteniéndose de la orilla de la piscina,

tratando de decidir si terminaba de dar su vuelta o se iba. Ella

estaba sobre la salida de la piscina cuando decidió que no

dejaría que él la persiguiera de esa forma. Comenzó su última vuelta.

Cuando Amy salió, Lucas seguía nadando.

Ella se dirigió a las duchas calientes, que formaba parte de su rutina. Ella

se sentó y dejó al agua caliente recorrerla.

Amy supo el momento en el que Lucas se le unió, su cabeza estaba de

espalda y con los ojos cerrados, pero ella podía sentirlo. No dijo nada.

Pretendió que no existía. Si él buscaba hacerla sentir incomoda estaba

haciendo un gran trabajo, pero ella no lo iba a mostrarlo.

Ella pensó que estaba haciendo un buen trabajo no mostrándolo. Su

cuerpo podría no mostrar nada en traje de baño, por lo menos. Si ella

hubiera sabido que estaba viendo sus pezones en ese momento, se hubiera

fundido en el agua.

Estuvo en la ducha por un poco más de minutos y decidió que era

suficiente. Trepó fuera rápidamente y se enrolló en la toalla que tenía

cerca. No dijo nada, sólo se dirigió al vestuario para cambiarse.

Después de tomarse su tiempo cambiándose, ella finalmente salió del

vestuario. Cuando vio a Lucas sentado encima del escritorio, ella le envió

una mirada feroz antes de irse pisando fuerte al ascensor. No le importó si

se veía como una niña haciendo un berrinche. Ciertamente no podría

superar su enamoramiento con él si lo veía tanto en el trabajo como en la

casa

—¿Qué tal la piscina? —preguntó Fred.

—Como recetó el doctor —respondió—, estoy cansada, sin embargo. Nos

vemos mañana. —Mantuvo pulsado el botón del ascensor. No importaba

qué tanto Lucas la irritara, ella nunca se desquitaría con Fred.

A

Page 139: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

39

En el momento en que las puertas se abrieron, ella entro rápido y hundió

el botón de su piso. Cuando las puertas comenzaron a cerrarse, exhaló un

suspiro de alivio, hasta que Lucas saltó dentro en el último segundo.

—¿Hay algo que necesites decirme? —Ella le lanzó la pregunta—. ¿O sólo

sigues a todos tus empleados a sus casas y actúas como acosador?

—¿Acosador? —él se cuestionó—. Sucede que vivo aquí también, Amy, o

no te informaron de espacio en el estacionamiento.

—¿Vives aquí? —preguntó, asombrada. ¿Por qué, en todo el mundo, él

tenía que vivir en esos apartamentos, cuando podía vivir en cualquier

lugar que quisiera? Ella lo miró sin saber qué contestar a esa reciente

información.

Ella no lo había visto alrededor del edificio, y había asumido que el puesto

del estacionamiento era porque tenía mucho trabajo allí.

—Sí. —Le tomó un momento procesar la respuesta a su pregunta.

—¿Por qué vives en un apartamento cuando puedes vivir en una casa? —

Se dejó llevar por la curiosidad, anulando su necesidad de no hablar con

él.

—Prefiero los apartamentos porque soy un hombre ocupado, y aquí no

tengo que preocuparme por nada, como la limpieza de una casa —

respondió.

Ella resopló. Como si él tuviera que mantener limpio algo, de todas formas.

Sus subalternos hacían su trabajo sucio. Él no era el tipo de persona que

tomaba su maquina de césped y cortaba toda una yarda. Se encogió de

hombros y volvió a ignorarlo.

La puerta se abrió en su piso y él salió con ella. Fue en ese momento que

ella se imaginó quién era el que vivía en el otro apartamento de ese piso.

¿Cómo ella no imaginó en los meses que llevaba viviendo ahí? Ellos en el

trabajo y en el mismo lugar, y hasta ahora sabía que lo tenía a pocos

pasos de su apartamento.

Ahora se le haría todavía más difícil dormir, sabiendo que tan cerca y lejos

estaba al mismo tiempo.

Page 140: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

40

Ella recuperó el paso y casi corrió hasta la puerta. Estaba teniendo

dificultades con la cerradura cuando él dio un paso adelante y tomó la

llave. Su cuerpo rozó el suyo y ella casi saltó fuera de su piel.

Él se sintió tan bien contra ella, aunque fuera sólo por un momento. Le

quitó la llave y la metió en la cerradura, frotándose contra ella todo el

tiempo. Su aroma la rodeaba, haciéndole extrañar su toque.

La puerta finalmente se abrió y ella se deslizó en el interior, girando, con

su mano la llave. Él la miró por un momento y se metió adentro, cerrando

la puerta detrás de él. ¿Cuánto más se suponía que tendría que soportar?

Su paciencia comenzaba a agotarse.

—¿Puedo usar el baño? Luego, tenemos que hablar. —Él no esperó una

respuesta. Sólo se dirigió a su cuarto de baño. Ella se apoyó contra la

puerta y trató de mantener la compostura. Ella podía manejar esto. Ella

manejaría el estrés de estar en la misma habitación que él, tan bien como

en el trabajo. Su apartamento no era diferente, ella trató de convencerse a

sí misma. Realmente quería un trago en ese momento.

Sabía que no podía, pero podía desearlo.

* * * *

Lucas respiró hondo mientras caminaba hacia el baño. Podía ser

civilizado. Tal vez incluso podría iniciar algún tipo de relación. Él no era

bueno con los compromisos, pero estaba dispuesto a darle una

oportunidad. No podía dejar de pensar en ella, así que tenía que haber algo

allí que valiera la pena.

Es posible que haya sacado conclusiones apresuradas acerca de ella, de

todos modos. Ella no era ni parecida a como él había pensando

originalmente. Él sonrió tímidamente. No solía admitir que se equivocaba

en algo, ni siquiera a sí mismo.

Los dos tendrían una agradable, razonable, y adulta conversación, y

entonces podría llevarla a la cama sin sentirse culpable por ello.

Lucas se sentía satisfecho con su decisión, mientras caminaba hacia el

baño. Terminó y luego se lavó las manos. Se dio la vuelta para irse, y fue

entonces cuando su mundo de repente se detuvo.

Casi no lo vio.

Page 141: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

41

En el bote de basura había una caja de test de embarazo. ¿Qué demonios?

Nunca había sentido tanto miedo como el que tuvo para llegar a esa caja.

Él miró en su interior y encontró el cartucho. Había dos líneas en ella.

¿Qué significaba eso?

Rápidamente, leyó la parte de atrás de la caja. Todo su mundo cambió en

un instante. Ella estaba embarazada.

¡Mierda, estaba embarazada! ¿Había planeado el embarazo? ¿Cómo pudo

hacerlo? Él ni siquiera podía pensar mientras se ponía de pie mirando

fijamente a la prueba de embarazo. Algunas de sus ex novias habían

intentado retenerlo a través matrimonio quedando embarazadas, y él las

evitó hábilmente. De alguna manera, sin embargo, su asistente se había

quedado embarazada la primera y única vez que habían tenido relaciones

sexuales. Estaba enojado consigo mismo y con ella. Sabía que no estaba

siendo racional, pero no podía ser racional en ese momento.

Muchas mujeres habían tratado de atraparlo para que les diera su

nombre, y todo el dinero que el él tenía, pero ninguna había tenido éxito

hasta ahora.

Bueno, será mejor enfrentar a la futura señora Anderson, pensó con

amargura. Lucas se tomó un poco de tiempo para componer su rostro

antes de volver a donde estaba ella.

Amy estaba sentada en el sofá cuando él entró en la sala de estar. Ella no

lo miró, y estaba agradecido porque estaba haciendo un gran esfuerzo por

componer su expresión.

—Volveré en un momento. Hay un par de llamadas de teléfono que

necesitó hacer. —Eso fue todo lo que dijo mientras pasaba por al lado de

ella y por la puerta grande. Cogió el teléfono tan pronto como se sentó en

el despacho de su casa.

—Necesito hablar con mi padre —exigió Lucas, sin preámbulos.

—Un momento, Lucas. —Él tuvo que esperar un minuto.

—Hola, hijo, ¿cómo estás?

—Me voy a casar y quiero que se haga esta semana, la próxima a más

tardar. Estoy ocupado con el trabajo, así que, ¿puedes hacerte cargo de los

Page 142: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

42

arreglos? Normalmente, tendría a mi asistente para hacerlo, pero ya que

ella es la novia, necesito a alguien más.

—¿Te vas a casar con Amy? Estoy tan feliz por ti, hijo. Ella realmente vale

la pena. Yo me encargo de todos los arreglos. ¿Fijamos la boda para el

viernes siguiente, de esta semana o la próxima? —dijo sin sorpresa en su

voz. Lucas se sorprendió un poco por la actitud de su padre. Estaba en

estado de shock como para sospechar, sin embargo.

—El viernes estará bien. Amy está embarazada, así que quiero mantenerlo

con discreción, por favor. Sólo tú y mamá, y Amy y yo —dijo él con cautela.

Él sabía que a su padre le encantaba organizar fiestas, y no quería a una

masa de gente allí para presenciar la farsa.

Lucas terminó de hablar con su padre y luego llamó a su abogado para

redactar un acuerdo prenupcial, asegurándose de que ella estaba

protegida.

Las llamadas de teléfono le llevaron una hora. Terminó y luego bebió un

trago de whisky.

—Está bien, Amy, vamos a terminar con esto —murmuró en voz alta.

Sabía que estaría en una lucha una vez que ellos estuvieran casados.

Caminó por el pasillo y usó la llave que no había devuelto para entrar,

Amy todavía estaba sentada en la sala de estar. Al principio parecía como

si no si hubiera movido siquiera, y entonces se dio cuenta del cuenco

sobre la mesa.

Bueno, supuso que su embarazo no había arruinado su apetito. Dio un

vistazo más de cerca y no vio ninguna diferencia al principio. Sólo tenía

unos pocos meses, después de todo. Luego, notó algunos cambios. Sus

pechos parecían más grandes, aunque ella los escondió muy bien en su

ropa holgada.

En lugar de lucir como si hubiera aumentado de peso, sin embargo, ella

parecía un poco más delgada. Él no sabía como eso era posible.

—¿Por qué no me has dicho que estás embarazada? —preguntó.

Ella vaciló por un par de segundos mientras lo miraba, su cara perdió todo

color. Era obvio que la había sorprendido. Ella rompió el contacto visual y

rápidamente miró al suelo.

Page 143: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

43

—Yo no creí que fuera de su incumbencia. Mi rendimiento en el trabajo no

se ha visto afectado por eso, y en los tiempos en los que estamos no es

asunto de nadie si uno es madre soltera o no. No puedes despedirme por

estar embarazada.

Él la miró fijamente, con la boca abierta. ¿No era su asunto? ¿Cómo

demonios podía decir que el hijo que llevaba en su vientre no era su

asunto?

—No vas a ser una madre soltera, Amy, y lo sabes. No voy a permitir que

mi hijo sea criado como un bastardo. Él tendrá mi nombre. —Su voz le dijo

que su camino era la única forma en la cual se llevaría a cabo la situación.

Si a ella no le gustaba, entonces sería una lástima.

—Este no es tu hijo. —Amy lo miró directamente a los ojos mientras decía

esas palabras. No había emoción en su voz. Él la miró, estupefacto. ¿No

era su hijo? ¿Qué estaba diciendo?

Él sabía que ella era virgen cuando había tenido relaciones sexuales con

ella. El ajuste de escala de tiempo. Por supuesto que era su hijo.

—Si no es mi hijo, entonces ¿de quién es? —Él decidió ver lo que ella diría.

Estaba observando cada movimiento que hacía. No había manera de que

ella fuera capaz de llegar a una historia de la nada.

—Yo le dije que estaba en una relación. Ésta progresó, pero él no quería al

bebé, así que terminamos.

Vio el pequeño parpadeo en sus ojos cuando ella mintió. Él sabía que ella

no le estaba diciendo la verdad. Sabía que el bebé era suyo, pero no podía

entender por qué ella le decía lo contrario. ¿Y si le permitía convencerlo de

que el bebé no era suyo? Él no podía entender que ganaría ella con eso.

—¿Qué clase de juego estás jugando, Amy? No lo entiendo. Los dos

sabemos que el bebé que llevas es mío, así que ¿por qué me mentiste sobre

eso? —En su confusión, él bajó la guardia y le habló en voz baja,

desconcertado en lugar de enojado.

—No estoy jugando contigo, Lucas. Este es mi bebé, y nadie lo alejara de

mí —dijo casi suplicante—. Te estoy diciendo la verdad. El niño no es

tuyo.

Lucas finalmente entendió por qué estaba negando que él fuera el padre.

Ella pensó que él realmente se llevaría al niño. Estaba furioso porque ella

Page 144: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

44

pensó tan mal de él, que podría separar a niño de su madre. Si ella quería

pensar que él era un bastardo sin corazón, eso es lo que ella conseguiría.

—No te preocupes, Amy. Tendrás la oportunidad de ser madre y esposa.

Nos casaremos dentro de dos semanas, con suerte una. Ya he hecho los

arreglos. —Lucas se inclinó de repente, atrapándola entre el sofá y sus

brazos—. No me malinterpretes, sin embargo, mi novia querida. Si tratas

de cruzar, o huir con mi hijo, nunca los volverás a ver. ¿Ha quedado claro?

—susurró con una voz calmadamente mortal.

—Lucas, lo siento, pero no es tuyo. Esa noche que tuvimos juntos fue

genial, pero... ya pasó. No sé qué más decirte…

—Bien, si dices que el niño no es mío, vamos a hacernos una prueba de

ADN mañana. El procedimiento será algo doloroso para ti, pero no causará

ningún daño a nuestro hijo —dijo, y la arrinconó.

Amy se puso completamente blanca con sus palabras. Se dio cuenta de

que ella no tenía idea de que esta prueba existía. Ella probablemente

pensó que él habría estado contento de no ser el padre. Ella, obviamente,

no lo conocía.

Ella comenzó a hablar, y entonces, se rindió.

Juego.

Set.

Partido.

Él sonrió sin humor. Sabía que casarse era algo que ninguno de los dos

quería, pero no había manera posible de que alguna vez hubiera otro

hombre que criará a su hijo o hija, o incluso de que él fuera un padre de

fin de semana. Amy llevaba a su bebé, por lo que la única solución para

ellos para era casarse.

Él nunca había entendido cómo un hombre podía alejarse de su familia.

No era algo que él haría.

Lucas había tenido suficiente por una noche.

—Vamos a terminar este asunto mañana. Disfruta de tu última semana

como una mujer soltera. —Fue todo lo que dijo antes de salir por la puerta

principal.

Page 145: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

45

Él caminó tranquilamente a su apartamento y entró, dejando su chaqueta

en el respaldo de la silla, y luego se dirigió directamente a su gabinete de

licores.

La noche había comenzado con una gran promesa. Él debería haber estado

en la cama, en ese momento, con ella gritando su nombre, no tragando un

whisky doble.

Apagó las luces y entró en su dormitorio, dejando la ropa en el lugar que

cayera, y luego se metió en la ducha y se metió bajo el chorro caliente.

Lo que más le asustaba acerca de la situación entera era lo tranquilo que

se sentía. Él se iba a casar en una semana, sin embargo, él no tenía

miedo. Estaba enfadado con ella por no decirle, enojado por no haber

investigado y asegurado de que ella no había quedado embarazada.

Pero, él no estaba enojado por convertirla en su esposa. La idea de yacer

junto a ella todas las noches debería aterrorizarlo, pero en su lugar,

enviaba una extraña dosis de euforia a través de su cuerpo.

Él no podía sacar de su cabeza la imagen de su cuerpo tembloroso, con la

cabeza echada hacia atrás en éxtasis, cuando ella se desmoronó mientras

él se enterraba profundamente dentro de ella.

Mientras el chorro de agua seguía cayendo sobre él, se puso

completamente duro, su cuerpo todavía estaba en necesidad de liberación.

Sintió la tentación de regresar a su apartamento y darles lo que realmente

querían ambos.

Un par de noches más. Puedes esperar un par de noches más.

Con un gemido de frustración, él cambió el agua a fría, y luego se puso

bajo la ducha mientras un millar de pequeñas gotas de agua que caían

sobre su piel se sentían como maquinillas de afeitar. Después de un par de

minutos, el agua hizo su trabajo y él salió de la ducha, tembloroso, pero

con su cuerpo bajo control, al menos por unos minutos.

Page 146: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

46

Capítulo 15 Traducido por Alyshia Cheryl

Corregido por Deyanira

my se derrumbó en el sofá y lloró un buen rato. ¿Cómo había

podido dejarse engañar pensando que le haría creer que el hijo

no era suyo? ¿Por qué no se había librado de esa prueba? Si

ella hubiera vaciado la basura, podría haber guardado el secreto durante

unos preciosos meses más, tal vez incluso más, si es que hubiese

encontrado la ropa adecuada.

Sólo había confirmado el embarazo recientemente. Ella comenzó a sentirse

mal y se topó con el baño de invitados, el cual era el más cercano. Rara vez

lo utilizaba a menos que ella se enfermara. Ella vomitó mientras todo el

estrés de la jornada caía sobre ella y luego se sentó sobre la baldosa fría

por un momento.

Cuando ella se levantó para lavarse la cara, miró hacia abajo y gimió.

Estúpida, estúpida, estúpida, se reprendió ella cuando vio la prueba en

cuestión.

Ella no podía creer que hubiese dejado prueba donde él pudiera verla.

Sintiéndose derrotada, Amy se arrastró de vuelta a su habitación y lloró

hasta quedarse dormida. Ella sólo quería que el día acabara de una vez.

A la mañana siguiente, Amy se despertó, sintiéndose miserable. Corrió al

baño y vació su estómago entero y algo más. Se duchó y vomitó de nuevo.

Ella acababa de empezar su segundo trimestre. La enfermedad de la

mañana5 debería haber estado disminuyendo.

Sabía que estaba perdiendo peso, ya que su ropa le estaba quedando

suelta, lo que debería haber sido todo lo contrario. No se había preocupado

demasiado por eso, como todo lo que había leído hasta ahora había

mostrado que la enfermedad de la mañana era una parte normal del

primer trimestre.

5 Enfermedad de la mañana: hace referencia a los mareos y nauseas del embarazo.

A

Page 147: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

47

Ella débilmente se sentó en el suelo de la bañera mientras el agua

humeante caía sobre ella. Ella vomitó de nuevo, y cuando ya no quedaba

nada, continuó con arcadas, Amy cerró el agua mientras el último de los

líquidos de su estómago era llevado por el desagüe.

Se sentó en la bañera, temblando, pero estaba demasiado cansada como

para salir. Estaba asustada por la debilidad de su cuerpo.

—Por favor, Dios. No dejes que nada le suceda a mi bebé. Soportaré esta

extraña enfermedad durante nueve meses, si salvas a mi hijo —murmuró

en voz baja.

Dado que no podía encontrar la energía para salir de la bañera, cogió las

toallas cercanas y las arrojó sobre ella en un esfuerzo para mantenerse

tibia.

Ni siquiera podía levantarse para llamar a su trabajo. Sería despedida, sin

duda, ya que Lucas asumiría que ella no llamaba o se presentaba en un

intento de evitarlo.

Ella se quedó dormida del puro agotamiento que había envuelto a todo su

cuerpo. Dio las gracias a la oscuridad, ya que no tendría que sentir el frío

abrumador y dolores musculares consumiéndola.

* * * *

Lucas decidió esperar hasta que Amy se fuera antes de irse a trabajar, por

si acaso ella intentaba huir. Había estado en estado de alerta durante la

noche, en cualquier momento, por si ella intentaba salir del edificio. Los

empleados de su empresa eran leales a él, ya que fueron bien tratados. No

hicieron preguntas. Simplemente le dijeron que le notificarían cualquiera

cosa que pasara.

No había dormido bien y estaba de mal humor. Cuando empezó el horario

del trabajo, y ella todavía no había salido del edificio, se puso furioso. Así

que, ella pensó que ahora que estaba embarazada, podía faltar al trabajo.

¡Por encima de su cadáver! Ella no lo iba a evitar para tratar de llegar con

más mentiras.

Marchó a su apartamento y entró. Ella no estaba en la sala de estar o la

cocina.

Page 148: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

48

Estaba aun más furioso. No se había molestado en levantarse de la cama.

Bueno, había conseguido un marido, así que él se imaginó que ella no

quería trabajar por más tiempo. ¿Por qué trabajar cuando se podía

conseguir todo lo que quería de forma gratuita?

Se dirigió a su habitación y abrió la puerta, listo para tirar de las mantas

de encima y tener una pelea salvaje. Necesitaba dar rienda suelta a su ira,

y ella era el objetivo previsto. Estaba enfadado por todo, y necesitaba

desesperadamente algo para sacar sus frustraciones.

Cuando abrió la puerta y la cama estaba vacía, empezó a sentirse inquieto.

¿Se había ido sin que él lo supiera? Eso no era posible. Tenía un edificio

seguro. Ella no era una prisionera, pero su personal le habría dicho si ella

se hubiera ido. El comprobó su teléfono para asegurarse de que no había

perdido de alguna manera una llamada.

Volvió a entrar en la sala cuando se dio cuenta que la puerta del baño

estaba cerrada. Se acercó y escuchó un momento. No había ningún sonido

desde el interior. Sin pensar en su vida privada, abrió la puerta y entró.

Lucas estaba aterrorizado cuando vio que su pequeño cuerpo yacía allí,

apenas cubierto en la bañera. ¿Se había quitado la vida? ¡No! Corrió hacia

ella y cayó al suelo. Luego, dio un suspiro de alivio al ver que su pecho

subía y bajaba. Ella estaba temblando, incluso en sueños, y tenía

manchas moradas oscuras bajo los ojos.

Tomó un buen vistazo de su aspecto y lo pequeña que parecía. Había

bajado de peso significativamente.

¿No era que las mujeres embarazadas aumentaban de peso? ¿Cómo no

había notado los cambios en su cuerpo?

Esa era una pregunta fácil de responder. No se había dado cuenta porque

él había hecho todo lo posible por evitar mirarla muy de cerca. La había

evitado tanto como fue posible para no tomarla en su escritorio. Había

esperado superarla esta vez, ya que nunca había estado tan enganchado a

otra mujer.

Sabía que nadie podía falsificar este tipo de enfermedad. De inmediato se

sintió culpable por lo que le había hecho pasar la última noche. Mirando

hacia atrás, podía ver lo agotada que lucía, y que a él no le había

Page 149: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

49

importado. A él sólo le había importado que ella estuviera tratando de

engañarlo.

Lucas la envolvió en sus brazos y se puso de pie, sacándola de la bañera.

Ella inmediatamente se acurrucó en sus manos, en busca de calor, incluso

en sueños. Las toallas cayeron de su cuerpo, y su estomago se apretó por

el shock.

Había perdido peso, incluso más de lo que primeramente había pensado.

Ella no estaba teniendo un buen embarazo. Él debería haber estado

prestando atención. La puso en la cama y la tapó, mientras su cuerpo se

hacía un ovillo apretado. Ella dejó escapar un suave gemido de dolor, sin

despertarse. Notó el ligero golpe en el estómago por primera vez.

Vaya, pensó, ese bulto es mi hijo. Eso significaba que él realmente iba a ser

padre en seis meses. Ahora que su ira había disipado, la idea de un hijo

era increíble. En seis meses, estaría sosteniendo a su bebé. Estaría

saltando sobre sus rodillas y luego jugaría a la pelota con él en un par de

años.

Él se sorprendió al descubrir que ya amaba a su hijo por nacer. Le

encantaba el precioso bebé que crecía dentro de ella. No dejaría que nada

le sucediera a él, ni a su madre.

Lucas llamó al médico de la familia, y luego subió a la cama y acercó a

Amy junto a él. Él simplemente quería que ella entrara en calor.

Necesitaba protegerlos. Nunca había sentido tanto terror como cuando la

vio acostada en esa bañera vacía.

Se acurrucó a su alrededor y dejó escapar un suspiro. Después de unos

minutos, su temblor disminuyó. La sostuvo y le frotó la espalda, deseando

que ella y su hijo estuvieran bien.

Cuando Lucas oyó el timbre de la puerta, el dejó que el doctor entrara,

estaba asustado con la idea de que algo malo estuviera pasando.

* * * *

—¿Amy? Vamos. Abre tus ojos. Eso es bueno. Soy el Dr. Scott, y te voy a

revisar, ¿de acuerdo? ¿Sabes lo que pasó esta mañana? —Eso fue lo que

despertó a Amy.

Page 150: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

50

No tenía idea de cómo se había metido en la cama, pero el calor se sentía

tan bien.

—Yo estaba vomitando mucho y luego me metí en la ducha y no podía salir

—murmuró con voz quebrada. Por fin miró a su alrededor y se dio cuenta

de que Lucas estaba detrás del doctor.

—No sé cómo llegué aquí, o realmente lo que pasó. Tenía tanto frío y

cansancio —finalizó.

—No gastes tu energía, Amy. Nos vamos a asegurar que tú y tu hijo estén

bien —dijo el doctor, consolándola. Cerró los ojos de nuevo, ya que sentía

que tenía diez libras de pesas en cada uno.

Ella sintió que él la tocaba y luego sintió un ligero pinchazo, pero la peor

parte de todo el examen fue ser destapada seguidamente. Ella se

desvaneció dentro y fuera del sueño. Finalmente, oyó al doctor hablando

tranquilamente con alguien. Parecía más como un sueño. Tal vez lo era.

—Ella estará bien. Tiene que permanecer en cama hasta que se haga unos

exámenes de nuevo, pero parece que las náuseas matutinas severas la han

llevado a la deshidratación. No hay sangrado, pero está desnutrida. El

bebé parece estar bien. Su hijo toma de Amy lo que él y ella necesitan,

pero Amy no ha sido capaz de comer lo suficiente para alimentarse a sí

misma. Yo quiero que venga a al consultorio en un día o dos para un

ultrasonido, pero parece que ella tiene alrededor de tres meses. Necesita

tomar muchos líquidos, tales como sopas y jugos. Cuantas más calorías,

mejor.

—Eso es genial, Scott. Aprecio que vinieras aquí tan rápido. Nos vemos el

viernes. —Entonces oyó unos pasos y la puerta se cerró. Ella volvió a la

bienaventuranza del sueño.

* * * *

Lucas se paseaba por el apartamento después de que llamó y canceló

todas las citas del día. Quería sacudirla para despertarla y forzarla a

comer, pero el doctor le dijo que el descanso era tan importante como la

comida. Scott la había ayudado con somníferos y pastillas contra las

náuseas y le dijo a Lucas que debía mantener un ojo en ella para

asegurarse de que comiera y bebiera cuando se despertara.

Page 151: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

51

Ella despertó parcialmente varias veces, y Lucas la forzó prácticamente a

comer. Murmuró quejas, pero ella los digirió.

Para cuando llegó la oscuridad de la noche, Lucas estaba agotado. Entró

en la habitación y se metió en la cama junto a ella. La atrajo hacia sí y

cayó en un sueño profundo y exhausto. Sentía que podía dormir una

semana entera con ella en sus brazos.

* * * *

Lucas sintió a Amy moverse y abrió los ojos. Estaban frente a frente, y ella

lo miraba con sorpresa, vergüenza y pánico.

—Buenos días —murmuró—. ¿Has dormido bien?

Sus ojos se abrieron aun más por sus palabras casuales. Él sabía que ella

estaba confundida. Podía verlo.

Era probable que estuviera preguntándose como llegaron a meterse a la

cama juntos y si habían hecho algo.

—No pongas esa cara de pánico. Todo lo que hicimos fue dormir. Estuviste

congelándote todo el día y noche hasta que me acosté para compartir el

calor de mi cuerpo —dijo él perezosamente. Se sentía bastante bien

despertar a su lado. No había dormido tan bien en mucho tiempo. No se

había despertado ni una sola vez durante la noche.

—Disculpa —dijo mientras trataba de desenredarse de él—. Yo eh, necesito

ir al baño, por favor. —Ella se puso colorada. Él la dejó ir, y ella

rápidamente se metió en el baño.

Lucas estaba agradecido de haberla vestido. No habría sido capaz de

controlarse al verla caminar desnuda de la cama. No después de que su

cuerpo había sido moldeado al suyo durante toda la noche.

Continuó allí, sin poder salir de la cama. Él llevaba nada más que un

bóxer que demostraba el esfuerzo que había necesitado para dejarla ir.

Cuando oyó el sonido de la ducha, decidió que lo mejor era vestirse.

Amy estuvo en el baño el tiempo suficiente para que Lucas se preocupara.

Estaba a punto de ir tras ella cuando la puerta finalmente se abrió.

Llevaba la bata que había visto colgando de la parte de atrás de la puerta.

Ella le quitó el aliento.

Page 152: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

52

Incluso pálida, delgada y sin maquillaje era espectacular. Estaba

empezando a pensar que el despertar con ella día a día no sería tan malo.

Comenzó a creer que realmente podría hacer que el matrimonio

funcionara. En poco tiempo, él sería capaz de sostener a su bebé —el bebé

de ambos— en sus brazos.

* * * *

—Gracias por llamar al médico. Yo... eh... no sé lo que pasó ayer. Creo que

tal vez no he estado comiendo lo suficiente o algo. El bebé consume gran

parte de mi energía —dijo con una sonrisa mientras se frotaba el vientre.

Estaba nerviosa y no sabía cómo lidiar con él, o qué decir. Nunca se había

despertado con un hombre antes. No creía que hubieran tenido relaciones

sexuales, pero ella no estaba cien por ciento segura de eso. Ya estaba

enamorándose de Lucas y necesitaba proteger a su corazón y entender las

cosas.

En un momento el hombre estaba siendo un idiota arrogante, y luego al

siguiente estaba preocupándose por ella y asegurándose de que estaba

bien. No podía entenderlo. Era confuso, y estaba más asustada que antes.

Eso decía mucho, teniendo en cuenta la forma en la que había crecido.

Lucas pasó el día con ella en el apartamento. Ella dormía la siesta de vez

en cuando y comenzó a recuperar algo de color. Por la tarde, estaba lo

suficientemente bien como para un viaje a la oficina del doctor.

No hablaron en el camino, ambos pensando en cosas diferentes. Amy

estaba ansiosa por ver que el bebé estaba sano y salvo. Ella no podía creer

que iba a ver las primeras imágenes de su dulce bebé. Una vez que supiera

estaba bien y viera a su bebé moviéndose dentro de ella, Amy se sentiría

mucho mejor.

Caminaron directamente hacia la parte trasera del consultorio del médico,

donde él le dio privacidad mientras se cambiaba.

A continuación, se sentaron y esperaron juntos por el Dr. Scott. Ella

habría hecho esperar a Lucas demasiado tiempo en la entrada de la oficina

del doctor, pero ella sabía que no había manera de que él fuera a perderse

el ultrasonido.

La puerta se abrió.

Page 153: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

53

—Bueno, te ves mucho mejor esta tarde, Amy. Vamos a ver cómo tu

pequeño está creciendo, ¿de acuerdo? —dijo el doctor, yendo directamente

al monitor de ultrasonido. Frotó un poco de gel en su vientre, y ella

disfrutó la frialdad.

No se vio nada por unos momentos y luego, en el monitor, vio una carita

perfectamente clara.

—Este es el nuevo monitor de ultrasonido tridimensional. Obtenemos una

imagen mucho más clara de los bebés antes de nacer. Aún es un poco

pronto para determinar el sexo, pero parece que está sano y salvo —

aseguró el Dr. Scott a los dos.

Acercó la imagen.

—Parece que la fecha de nacimiento será en diciembre. Tienes un poco

más de tres meses. Tu hijo está completamente formado y del tamaño de

un maní en su cáscara, pero el latido del corazón es fuerte y se está

desarrollando muy bien. ¿Te gustaría escuchar ahora? —continuó.

Amy y Lucas asintieron. De repente, el único sonido en la habitación era

un golpeteo suave que se movía rápidamente. Nadie dijo una palabra

mientras el ritmo continuaba.

* * * *

Lucas miró desde el monitor a la cara de Amy y vio las lágrimas que

corrían por sus mejillas. El momento fue tan emocionante para él, se vio

superado por la emoción del momento y tuvo que alejarse. Su hijo estaba

fuerte y seguro. Amy era hermosa, y él estaba tan contento de que ella

llevara a su bebé. Podía ver el amor y la emoción a través de ella. Podía ver

que ya estaba enamorada de su bebé, y él sabía que sería una madre

fenomenal.

Es posible que hayan comenzado las cosas mal, pero sabía que todo

saldría bien. El Dr. Scott les imprimió algunas imágenes de la ecografía y

se las pasó. Ninguno de los dos habló mientras salían de la oficina. Los

dos estaban pensando en las imágenes que acababan de presenciar,

imaginando al recién nacido que luego alumbraría sus vidas.

Lucas llevó a Amy a almorzar, y las dos estaban muy emocionados porque

el bebé estaba en buen estado de salud, así que bajaron la guardia y lo

Page 154: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

54

pasaron muy bien juntos. Después del almuerzo, la condujo hasta la casa

de la familia.

—¿Por qué estamos aquí? —preguntó Amy con nerviosismo.

—Tenemos algunos planes de boda para hablar con mis padres.

—Lucas, no me voy a casar. No voy a ser obligada a contraer matrimonio

por cualquier motivo. Puedo que sea anticuada, pero creo en casarse por

amor y nada más.

—Amy, yo también soy anticuado, y creo que un niño necesita a ambos

padres. No vas a criar a mi hijo sola. No voy a discutir sobre esto. Él va a

tener dos padres. No se puedes alejar a mi hijo de mí.

* * * *

El tono de su voz la aterrorizaba. Sólo había pura convicción, sin ira, sin

súplica. Ella sabía que él no iba a dar marcha atrás. Amy bajó la cabeza y

se resignó. Tendría que casarse con un hombre por el bien de su hijo, no

porque él la amaba. Él no le estaba dando otra opción respecto al tema. Se

sentía frustrada por haber cometido el error pobre de dormir con él. Ella

no se arrepentiría de su hijo. Ella sólo deseaba haberlo hecho con alguien

que hubiera pasado e ido de su vida sin mirar nunca hacia atrás, o que la

hubiera amado incondicionalmente.

No estaba dispuesta, ni preparada, para compartir a su bebé con otra

persona. Claro, sería bueno tener una familia feliz y amorosa, pero no

podía pensar en muchas parejas que vivieran juntas. La tasa de divorcios

aumentaba cada año, y ella nunca hubiese querido añadirse a la lista de

las estadísticas.

Entraron en la casa sin decirse nada el uno al otro. Él había dicho lo que

se haría, ella había aceptado y él había ganado. Sabía que él siempre

ganaría. Tenía la esperanza de que a él sólo no le gustara jugar en el juego

de la paternidad.

—Lucas, Amy, estoy tan contento de verte. Tenemos mucho que discutir.

Todos los arreglos se han hecho. Amy, ve junto a Katherine y elige tu

vestido para que podamos hacer las modificaciones —dijo Joseph,

hablando rápido.

Page 155: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

55

Amy fue llevada a través de la casa y le mostraron opciones de flores y

pastel. Ella se puso un vestido que era mucho más hermoso que cualquier

cosa que jamás había pensado en usar. Amy había imaginado el día de su

boda cuando ella era joven, como la mayoría de las niñas hacían, y esto

era una boda de ensueño. Hubiera sido perfecto si el novio hubiera estado

enamorado de ella. Hubiera sido aun más perfecto si ella creyera que su

matrimonio podía durar para siempre.

Bueno, ella estaba obteniendo más que lo que la mayoría de las mujeres

obtendrían. Tendría un hogar seguro y llegaría a ser madre. Podía tratar

con cualquier cosa, siempre y cuando ella tuviera su hijo en sus brazos.

Sabía que era un matrimonio de conveniencia, pero ella tendría que lidiar

con eso. Estaría sola, pero, ¿cuán realmente sola podría estar, teniendo a

su bebé con ella?

Además, había planeado ser madre soltera, por lo que sólo tendría que

verse como ser una madre soltera con un compañero de cuarto que

también amaba demasiado a su hijo.

Se quedaron en la casa la mayor parte del día y cenaron con Joseph y

Katherine, a quienes ya amaba. Katherine estaba tranquila y parecía

subyugada por Joseph una gran parte del tiempo, pero era obvio para

cualquier persona a su alrededor que él la adoraba de una manera que

hacía que el corazón de Amy doliera. Ella tenía una serena dignidad a su

alrededor, para que todos supieran que, a pesar de que Joseph hablara

mucho más, ella era la que realmente estaba a cargo. Era la clase de

madre que Amy hubiese soñado con tener en sus miserables años de

infancia y adolescencia.

Ambos eran amables y atentos, y la escuchaban como si dijera la cosa más

importante del mundo. Sólo deseaba haber crecido con unos padres como

ellos. Pero, puesto que ella se casaría con Lucas, ellos serían sus padres.

Fue algo positivo que esperaba con ansias. Ella todavía pensaba que el

matrimonio era una mala idea, pero cuanto más tiempo pasaba con Lucas

fuera de la oficina, más pensaba que su vida no estaba completamente

destrozada.

Cuando Lucas la llevó de regreso al edificio de apartamentos, Amy estaba

casi dormida de pie. Ella había pasado un día muy agotador, pero, en su

mayor parte, había sido un buen día. Siempre disfrutaba visitando a

Joseph y Katherine, y nada era más grande que ver el ultrasonido de su

bebé que estaba por nacer.

Page 156: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

56

Debió mirar la foto un centenar de veces a lo largo del día. Se había

formado un nudo en su garganta cuando Lucas le había entregado la foto

a su padre, y ella había visto el brillo de las lágrimas en sus ojos. Ella

sabía más allá de toda duda que su niño sería amado más allá de

comparación. Tendría una infancia mucho mejor que la mayoría de los

niños.

—Bueno, hijo, este es el mejor regalo que podría habernos dado alguna vez

a tu madre y a mí. —Fue lo único que dijo mientras envolvió sus brazos en

él en un abrazo de oso.

Amy sonrió para sus adentros al pensar en el hombre maravilloso que era.

Lucas puso la mano en su espalda mientras caminaban hacia el edificio y

se dirigió directamente hacia el ascensor. Sintió un estremecimiento

recorriéndole la espina dorsal cuando la tocó. Ella se había esforzado por

resistir su atracción por él, y dio todo de ella para mantener una cierta

distancia.

Entraron en el ascensor, y Amy se dirigió a la puerta.

—Esta noche no, Amy. Usaremos mi apartamento. —Lucas la sacó de sus

pensamientos.

—Yo sólo quiero irme a casa, Lucas —dijo ella—. Ha sido un día muy largo,

y necesito tiempo para mí —terminó en un tono suplicante, con un dejo de

fastidio.

Lucas suspiró en voz alta y simplemente la llevó más allá de la puerta y

por el pasillo.

—Amy, vas a ser mi esposa en unos días. No sólo te estoy tomando como

esposa en el papel. Vamos a vivir juntos, dormir juntos y estar juntos en

todos los sentidos en un esposo y una esposa lo están. Sólo me casaré una

vez. Yo te proporcionaré muchas cosas y, a su vez, espero ser atendido.

Vas a compartir mi cama. —Una vez más habló con esa voz que no admitía

lugar a discusión.

De repente estaba muy alerta y furiosa. Estaba harta y cansada de todas

sus órdenes y que sólo esperara que ella siguiera al pie de la letra todo lo

que él le exigía.

—Está bien, Lucas. He aceptado la idea de que nos vamos a casar y pienso

cumplir con mis "deberes de esposa", pero por los próximos días, yo no soy

Page 157: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

57

tu esposa, y me gustaría disfrutar de mi apartamento antes de que mi

sentencia en la cárcel comience —replicó, con ganas de golpearlo y herirlo.

* * * *

Ella logró un efecto contrario a hacerlo enojar. Lucas tuvo que dejar de

sonreír. Si veía eso, pensaría que se estaba riendo de ella, que, en cierto

modo, lo era. Pensaba que iba a disfrutar definitivamente de su

matrimonio. Él no habría sido feliz con una mujer que atendía a todos sus

caprichos. Tenía suficientes personas dispuestas a hacer eso. Le gustaba

cómo su futura esposa tenía una personalidad fuerte y sintió el deseo de

luchar contra él. Sabía que no se aburriría con ella, nunca.

Sabía que podía impulsar el tema y que se quedaría con él, pero también

sabía que para ganar la guerra era mucho más importante ganar la batalla

todos los días. Ya la había hecho enojar, y su salud era más importante

que cualquier otra cosa. Tendría que dejarla ganar esta vez.

—Está bien. Lo haremos a tu manera. Esto hará que la luna de miel sea

mucho mejor —dijo al tiempo en que le abrió la puerta. Justo cuando

estaba a punto de entrar por la puerta abierta, envolvió sus brazos

alrededor de ella y la besó, largo y duro. Te dejaré pensado sobre lo que te

perderás esta noche, pensó mientras observaba su sumisión.

Se alejó, sintiendo bastante bien hasta que llegó a su apartamento, solo y

necesitado de liberación. Suspiró y se volvió hacía el grifo de agua fría y se

preparó para un infierno de larga semana.

Page 158: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

58

Capítulo 16

Traducido por Xhessii y Alyshia Cheryl

Corregido por KatieGee

Respira, Amy. Sólo respira. —Ella se sentía como que iba a

hiperventilar mientras se paraba en el vestidor de la

gigantesca mansión. Había pasado la mañana siendo

mimada por su día de bodas.

Su cabello estaba en un moño, con rizos cayendo por su cuello y su rostro.

Su maquillaje había sido expertamente aplicado para borrar los círculos

negros y resaltar sus ojos y su boca. Sus uñas fueron extendidas y

pintadas. No se sentía como ella misma. Ellos la habían puesto en un

vestido magnífico y miraba en el espejo a una extraña. ¿Quién era la chica

que la miraba? Ellos le habían dado unos benditos minutos para calmarse,

por los cuales estaba agradecida.

—Es hora, Amy —Escuchó que Joseph dijo suavemente. Eso fue lo

suficiente para que girara su cabeza. Ella nunca lo había escuchado

hablar sin su tenor normal. Él se miraba guapo en su esmoquin. Ella

definitivamente sabía que los chicos se miraban geniales en ellos. Él era

tan parecido y tan diferente de Lucas.

Joseph había envejecido bien. La más grande diferencia entre Joseph y

Lucas eran sus ojos. Los ojos de Lucas siempre estaban enfocados y

determinados, mientras que los de Joseph tenían líneas de la risa

alrededor de ellos y siempre parecían brillar. Él se miraba muy relajado.

Ella se preguntó si habían sido así toda su vida, o habían estado en un

momento tan enfocados como los de su hijo.

Joseph caminó y la besó en la mejilla.

—Estoy tan feliz de que finalmente tengo una hija en la familia. Eres

hermosa por dentro y por fuera. —Envolvió sus grandes brazos alrededor

de ella en un abrazo gentil.

Esas palabras significaban mucho para ella. Él sabía cuánto necesitaba

ella ser incluida en una familia amorosa. Hubiera dado cualquier cantidad

de dinero para ser amada de la manera en que Joseph amaba a sus hijos.

Page 159: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

59

Ella estaba obteniendo un pedazo de eso ahora, y no quería que nunca se

fuera.

—Como tu padre no está aquí, quería saber si pudiera tener más que el

honor de que me permitieras caminar contigo por el pasillo —dijo él con

lágrimas en los ojos.

Los ojos de Amy ardían y ella contestó a su gentil oferta.

—Sería para mí un honor que tú me escoltaras. Eres la clase de padre que

siempre soñé tener. —No podía decir nada más porque ella se había

atragantado mientras miraba a los ojos amables de él. Él la acercó en un

abrazo, y ella se colgó a él, esperando que él nunca la dejara ir. Había sido

cuidadosa a través de los años de no encariñarse demasiado de la gente, y

en unos cuantos meses, ella amaba a toda la familia de Lucas.

—Ahora, ahora, no quieres ponerte toda llorosa y arruinar tu maquillaje.

No creo que mi hijo pueda aguantar cualquier retraso. Él ya está

caminando en el pasillo. El sacerdote lo acaba de conducir a su punto en

el altar —Se rió por lo bajo Joseph.

Amy tomó una última mirada final en el espejo y tomó un respiro hondo.

—Estoy lista —dijo ella. Tomó el brazo de Joseph y él la condujo fuera de

la habitación. La música llenaba el aire mientras ellos pasaban la entrada.

Ella jadeó, y lo único que la sostuvo de correr fue Joseph agarrando su

brazo.

—Pensé que sólo unas cuantas personas estarían aquí —murmuró ella.

—Ahora, Amy, no tengas miedo. Mi hijo mayor finalmente se está casando,

y no podíamos herir los sentimientos de nadie al no ser incluidos en el

asunto —dijo él, haciéndola sentir culpable por no querer que todos esos

extraños la miraran.

Amy tomó un respiro hondo y sintió los nervios corriendo por todo su

cuerpo mientras tomaban el primer paso por el pasillo hermosamente

decorado. Ella miró directo al frente porque temía que si miraba a los

extraños, se giraría y huiría.

Miró a Lucas al final del pasillo, justo a una corta distancia de ella. Él le

quitó la respiración con lo hermoso hombre que era. Sus ojos se

Page 160: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

60

encontraron y se sostuvieron. Él le dio una sonrisa que parecía decirle que

todo estaría bien.

Amy sintió como si el viento la golpeara. Se paró para respirar. Joseph la

miró curiosamente, pero ella no se dio cuenta. No se dio cuenta de nada,

sólo que su cuerpo se estremecía.

Estaba enamorada de él, y se dio cuenta que no podía imaginar su vida sin

él. Él iba a ser su esposo, pero no la amaba. Ella no sabía cómo se iba a

poner después de la boda. ¿Cómo podría estar con él todos los días,

haciendo el amor y criando a sus hijos sin saber si él la amaba? Ella

apenas se podía sostener.

Joseph le dio un toquecito, y finalmente se puso de nuevo a caminar hacia

adelante. Ella tuvo que luchar para alejar las lágrimas. Quizás él al final se

enamore de mí, trató de confortarse. Si él pensaba que ella de alguna

manera lo había atrapado en el matrimonio, ¿cómo podría confiar en ella,

mucho menos amarla? Él sabía que ella no había planeado el embarazo,

pero él era honorable por hacer esto por su hijo, y, por lo tanto, siempre se

sentiría como si fuese atrapado.

No había nada que al momento ella pudiera hacer, así que continuaría

caminando por el pasillo y terminaría con la boda. Ella era una persona

fuerte. Tenía que almacenar y alejar su amor e intentar sobrevivir todo el

evento.

* * * *

Lucas sintió un momento de pánico cuando Amy se detuvo a medio

camino en el pasillo. ¿Iba a girarse y correr? Él no dejaría que ella llegara

lejos. Él sabía cuánto ella quería el bebé y, aunque le doliera mucho que la

atrapara, no podía dejarla ir. En los meses que la había conocido, ella

había invadido cada sentido, y no podía imaginar su futuro sin ella en él.

Suspiró de alivio cuando empezaron a caminar de nuevo hacia él. Cuando

su padre puso la mano de ella en la suya y ella caminó a su lado, una

calma silenciosa cayó sobre él. Él la tenía en sus brazos, y no iba a dejarla

ir.

Él apenas escuchó las palabras del sacerdote. Se concentró lo suficiente

para decir las palabras que necesitaba decir; al contrario, su mente estaba

consumida por su hermosa novia.

Page 161: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

61

Ella era toda una visión. Él había salido con modelos y herederas. Había

estado con más mujeres de las que debería estar, pero ninguna de ellas

había sido capaz de causar el endurecimiento en sus intestinos como Amy

lo hacía. Ella era una belleza natural y eso opacaba a las más brillantes

estrellas de Hollywood.

Él movería el cielo y la tierra para tenerla a ella como su esposa para

siempre. Se había enamorado de ella. Estaba conmocionado por los

sentimientos más profundos de su alma con esa revelación. No podía dejar

que ella se enterara de sus sentimientos porque entonces sabría que tenía

el poder para ponerlo de rodillas y que rogara por clemencia.

Él no dejaría que ella lo destruyera. Él sería un buen esposo, ella

aprendería a amarlo y no por su nombre o su dinero. Por favor, Dios, deja

que ella me ame y no por lo que puedo darle, agregó secretamente a sus

votos de amor, honor y obediencia.

Terminaron la ceremonia, y el sacerdote le dijo que podía besar a su novia.

Lucas le dio una sonrisa amplia.

—Felizmente. —Luego él la dejó caer sobre su espalda y consumió su boca.

Se olvidaron de que estaban parados en una habitación llena de gente.

Ninguno de ellos tenía idea de cuánto tiempo había durado el beso.

Podrían haber estado solos en su dormitorio. Había pasado mucho tiempo

de que había sostenido y saboreado el dulce néctar de sus labios.

—Ah, hijo, tienes mucho tiempo para hacer eso en la luna de miel —

interrumpió Joseph al par y le dio una palmada en la espalda a su hijo. La

multitud se rió por el entusiasmo de Lucas. Amy se volvió escarlata, y

Lucas se miraba como un marido muy orgulloso.

Para todos aquellos que atestiguaron la boda, el matrimonio se veía como

una unión de amor que iba a durar para siempre. La manera en que ellos

se miraban sólo podía ser descrita como atontada.

Caminaron por el pasillo mientras Joseph conducía a un vasto grupo de

gente al patio trasero. En el verdadero modo Anderson, ellos hacían una

boda espectacular que al menos durara una semana. Lucas miró las

expresiones faciales de su novia mientras pasaban por la multitud. Ella

estaba atemorizada.

Page 162: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

62

El patio tenía glamurosas carpas, llenas con tablas cubiertas con lino.

Había una pista de baile con luz suave, y toda una banda tocando música.

Los meseros pasaban bandejas con champán y comida, atendiendo a los

invitados. En cada mesa había cristal, porcelana y los arreglos florales más

fragantes y coloridos.

Lucas quería todas esas cosas tontas y tradicionales. No sabía por qué.

Dios sabía que no era una boda convencional. Amy probablemente

pensaba que era más apropiado tener guardias con armas indicándoles a

las personas dónde sentarse de mesa en mesa, desde que él la había

llevado a la fuerza a su matrimonio.

Él se sorprendió al ver que ella parecía estar disfrutando. O su novia

estaba llena de sorpresas, o era una actriz fenomenal.

* * * *

—Sabes, estás absolutamente impresionante esta noche —dijo Tom a Amy

cuando finalmente se las arregló para tener un momento a solas con ella.

Ella lo abrazó, agradecida de que su mejor amigo estuviera entre el mar de

extraños.

—Gracias por estar aquí, Tom. Esto es abrumador —dijo con un sollozo.

—Eso sí, no te olvides de mí ahora que estás casada y embarazada —dijo

con una sonrisa burlona.

Ella pudo ver la inseguridad debajo de las bromas, sin embargo.

—No he tenido verdaderos amigos durante toda mi vida. Tú eres el

primero, y te prometo que siempre serás la primera persona que llame

cuando necesite un hombro para llorar. Sabes que también me puedes

llamar en cualquier momento. Siempre seremos los mejores amigos —dijo.

Ella le dio un abrazo antes de que fuera llamada a cortar el pastel.

* * * *

Lucas y Amy cortaron el pastel y se lo dieron mutuamente. Brindaron su

unión y bailaron con los miembros de la familia. Lucas estaba sorprendido

por los celos intensos que sentía cuando cada uno de sus hermanos se

acercaba demasiado a Amy, quien era una mujer casada, y la llevaban

alrededor de la pista de baile.

Page 163: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

63

Cuando ella estaba bailando con Alex, dejó escapar una risa alegre por

algo que él dijo. Lucas se alejó de su compañera sin decir palabra alguna y

reclamó a su novia. Su hermano se rió aun más fuerte y besó en la mejilla

a Amy antes de liberarla para que se fuera con su marido.

—¿De que se reían ustedes dos? —preguntó él con celos cuando la hizo

girar en torno a la pista de baile.

—Me dijo que si recobraba mis sentidos podía llamarlo, y que le encantaría

llevarme lejos de su aburrido hermano mayor —dijo sonriendo,

deleitándose aún de la broma de su hermano.

—Tú eres mía, y sólo mía, y el único que puede llevarte a cualquier lugar

voy a ser yo —dijo él y tiró de ella con más fuerza para que así ella tuviera

espacio sólo para él en su mente.

La besó hasta que casi no pudo soportarlo más, y luego decidió que ya

habían pasado suficiente tiempo con la gente. Ya era hora de empezar la

parte de luna de miel de la boda.

—Es hora de irse. Vamos a darle las buenas noches a mis padres y huir de

aquí —habló él mientras le tomaba la mano y la conducía en dirección a

su mamá y papá.

* * * *

Amy se asustó mientras él la conducía hacia sus padres. Esto era todo.

Iban a estar solos muy pronto, y estaba aterrada. No sabía cómo actuar

como una mujer casada.

Ella no estaba preocupada por el sexo. Definitivamente había química,

pero estaba preocupada por el antes y el después del sexo. ¿Podría besarlo

cuando se le diera la gana? ¿Podría tomar su mano? ¿Podría decirle

cuando el bebe estuviera pateando, para que así pudieran compartir ese

momento? ¿Eran esas cosas demasiado íntimas?

En un matrimonio regular, no tendría que preguntarse ese tipo de cosas,

pero esto no era un matrimonio normal, y no sabía lo que se esperaba de

ella. Era aterrador.

—Mamá, papá, muchas gracias por la boda. Sé que no les dio mucho

tiempo pero aun así les salió hermoso. Nos vamos ahora —dijo Lucas

mientras abrazaba a sus padres.

Page 164: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

64

—Gracias a los dos. Son personas realmente increíbles. Estoy muy

contenta de ser parte de su familia —agregó Amy con timidez.

—Querida, nosotros somos los agradecidos de tenerte en nuestras vidas.

Ahora por fin tenemos a la hija con la que no fuimos bendecidos años

atrás —dijo Joseph, tomándola en un abrazo y luego pasándola a su

esposa.

—Ustedes dos tendrán una maravillosa luna de miel, y nos juntaremos a

comer la próxima semana. Ahora que la boda ha terminado, es hora de

prepararnos para nuestro primer nieto —añadió Katherine mientras la

abrazaba.

Amy estaba tan emocionada por su increíble familia política, no sabía qué

más decir. Su niño sería amado más allá de comparar y sin medidas. El

amor ciertamente sobrepasaría todo lo demás en su inusual unión.

—Danos unos minutos para subir las escaleras y Amy se cambié para su

salida —dijo Katherine, mientras la llevaba al interior de la casa.

Lucas lucía como si no fuera a dejarla ir ni por un minuto hasta que

Joseph se echó a reír y lo tiró hacia un lado.

—Ella volverá, hijo.

A Amy le encantaba esa risa. Rápidamente subió las escaleras con

Katherine. Estaba nerviosa cuando entraron a la habitación y vio el bello

equipo que Katherine había comprado para ella.

—Amy, sé que todo esto ha sido abrumador para ti pero quiero que sepas

que estoy muy feliz de tenerte en nuestras vidas —dijo Katherine, lo cual

provocó lágrimas en Amy. Ella deseaba tanto tener una madre.

—Gracias, Katherine. Es sólo que todo sucedió tan rápido —respondió ella.

No quería decir nada malo de Lucas, pero, a veces, el hombre realmente

era abrumador.

—Sé que mi hijo puede ser terco y un poco duro de cabeza. Él ha sido

herido antes. Cuando a una familia se le ha dado todo lo que tenemos, la

gente tiende a aprovecharse de uno. Lucas ha estado con mujeres que lo

han lastimado. Él nunca lo admitiría, pero una madre puede ver cosas que

otros no pueden. Aprenderás todo esto muy pronto —dijo Katherine

suavemente.

Page 165: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

65

—Simplemente no quiero que él me odie por pensar que de algún modo lo

he atrapado —dijo Amy, sintiendo que podía ser honesta.

—Oh, cariño, no tienes nada de qué preocuparte. El gruñido de Lucas es

mucho peor que su mordida. Será un buen marido. Ya puedo ver que te

adora, y cómo mi corazón se llena de placer al ver la manera en que lo

miras. No mires con pánico. No estoy esperando a que hables

abruptamente de tu amor por él, pero sé que los dos estarán bien —dijo

Katherine. Luego se acercó a Amy otra vez, y las dos mujeres se abrazaron,

compartiendo un primer momento entre madre e hija.

—Gracias de nuevo. Todo esto significa más de lo que podrías imaginarte

—le dijo Amy mientras se limpiaba las lágrimas.

—Yo soy la que debería estar agradecida. Nunca pensé que mi hijo

encontraría a una mujer como tú. Ahora, será mejor que vuelvas con

Lucas antes de que él venga a buscarte —terminó Katherine.

Amy se cambió rápidamente y se puso una hermosa blusa y falda, y luego

las dos bajaron.

Lucas y Amy dejaron la casa en medio de gritos de buena voluntad y

mucho alpiste. Se dirigieron a la limusina que los esperaba, la cual estaba

decorada con "Recién casados" en la parte trasera. Tan pronto como

estuvieron en la parte trasera, Lucas la tomó en sus brazos y de nuevo

arrebató su boca.

Ella lo deseaba tanto, no tenía ni un sólo pensamiento relacionado con

alejarlo. Su respiración se profundizó mientras ella enredó las manos en

su pelo grueso y oscuro para tirar de él más de cerca. Él estaba

presionando fuertemente contra su cuerpo dolorido, y ella todavía se

sentía como si no pudiera acercarse lo suficiente a él. ¡Oh, cómo amaba al

hombre que ahora era su marido!

Lucas estaba obviamente tan hambriento de ella como ella lo estaba de él.

Le desabrochó la blusa y le despojó el sujetador en cuestión de segundos.

Amy se quedó sin aliento mientras él se deleitaba de sus pechos con las

manos y labios. Él estaba moldeando su cuerpo adolorido con un toque

dulce de amante. Ella presionó aun más su toque, porque no quería que se

detuviera nunca.

Sus pezones alcanzaron la cima del deseo con cada una de sus caricias.

Cuando su boca llegó a una punta de color de rosa, ella echó la cabeza

Page 166: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

66

hacia atrás y gimió. Él cambió de lado, dándole a su cuerpo la atención

que necesitaba y quería.

Ella se dio cuenta de inmediato de que su cuerpo era más sensible ahora

que estaba embarazada.

Él la había convertido en lava fundida la única otra vez que habían hecho

el amor, pero esta vez, sentía que iba a hundirse en el asiento. No podía

tener suficiente de sus manos o boca sobre ella.

Cuando él soltó su pezón endurecido y arrastró su boca hacia la parte

inferior de su estómago, lo cual era apenas una muestra de lo viva que se

podía sentir por dentro, ella empezó a temblar. Le quitó la falda y se

deshizo de la ropa interior en un sólo movimiento suave, y luego puso los

labios y la lengua sobre la piel sensible en la parte interior de sus muslos.

No podía quedarse quieta. Ella quería más. Trató de acercarlo de nuevo a

su cuerpo, pero él la miró con ojos ardientes y sacudió la cabeza.

Comenzó a acariciar sus piernas otra vez, mientras sus manos recorrían

de arriba a abajo su estómago, pasando cerca de sus pechos y luego de

vuelta otra vez. Ella sintió su aliento cálido sobre sus partes más

sensibles, segundos antes de que fuera reemplazado por la humedad de su

lengua acariciando su carne hinchada.

Su cuerpo se sacudió por el contacto íntimo. A continuación, todos los

pensamientos se fueron, y no podía hacer nada más que sentir.

Habían pasado sólo segundos, y ella se caía a pedazos, temblando

mientras su cuerpo estallaba en éxtasis total. Antes de que tuviera tiempo

de parpadear, Lucas estaba desnudo y, una vez más, besándola

apasionadamente.

Su cuerpo empezó a arder de nuevo a la espera de su unión.

Él metió la lengua dentro de su boca, y luego le abrió las piernas. De

repente, él estaba en lo profundo de sus pliegues. Su respiración se

mezclaba con el sonido de sus gemidos mientras su cuerpo se apretaba

alrededor de él.

Ella explotó en éxtasis por segunda vez, temblando en sus brazos, y eso

fue todo lo que se necesitó para enviarlo al abismo. Él empujó en su

interior por última vez y luego cayó frente a ella, completamente saciado.

Page 167: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

67

Ninguno de los dos habló mientras sus respiraciones volvían lentamente a

la normalidad.

Ella no quería dejarlo ir. Sabía que una vez que se separaran, el silencio

incomodo comenzaría. Por ahora sólo eran dos amantes que disfrutaban

de las consecuencias de lo que habían compartido.

Ellos aún estaban enredados cuando el conductor anunció que llegarían a

su destino en unos cinco minutos desde el intercomunicador del auto.

Amy se ruborizó, de forma rápida luchó por ponerse la ropa.

—¿Dónde está mi sujetador? —preguntó ella con pánico.

* * * *

Lucas se echó a reír en voz alta por el horror en su rostro ante la idea de

ser descubierta desnuda en la parte de atrás de un auto con su marido.

Sacó el sostén que estaba detrás de él y se lo pasó. Ella terminó de vestirse

en un tiempo récord y se alejó de él. Lucas se enderezó, pero sabía que la

ropa volvería a ser arrancada en unos minutos. Le resultaba muy

entrañable que su esposa tuviera miedo de ser atrapada besuqueándose

en la parte de atrás de la limusina.

Acababa de hacerle el amor a Amy, demasiado rápido, y ahora quería

tomarla de nuevo, mucho más lento y delicadamente. Ya podía sentir su

cuerpo endurecido por el sólo pensamiento de hundirse en ella. No podía

entender cómo él podía desear con tanta rapidez tras haber quedado

totalmente satisfecho.

Se detuvieron en el aeropuerto, donde el avión privado esperaba su

llegada. Lucas la dirigió al interior, mientras que el equipaje era cargado.

—Vamos a despegar en unos treinta minutos, señor y señora Anderson.

¿Hay algo que pueda hacer por ustedes mientras esperamos? —preguntó

una señora rubia demasiado linda y alegre cuando entraron.

—Sí, Lana, gracias. Cenaremos, y tomaré un whisky americano. ¿Qué te

gustaría para beber, querida? —le preguntó a Amy.

—Me encantaría un poco de leche, por favor —respondió ella, dándose

cuenta por primera vez de que se estaba muriendo de hambre. Le

Page 168: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

68

encantaba la expresión de cariño saliendo de sus labios. La hacía sentir

como una verdadera esposa.

—Aquí está su leche, señora Anderson. Su comida estará en tan sólo unos

minutos —dijo la azafata alegre cuando regresó puntualmente.

Amy la miró con un poco de shock. Ella la había llamado señora Anderson

en dos ocasiones. Era la señora Anderson. No había pensado realmente en

eso. Continuamente había pensado en el poder del nombre Anderson, y

ahora lo tenía. Estaba tan fuera de sí en su mundo que no sabía cómo

podría posiblemente encajar

—¿Cómo te estás sintiendo? —preguntó Lucas.

—Muy bien, en realidad —contestó ella—. Me olvidé de comer hoy, así que

me muero de hambre. Creo que podría comerme una vaca entera en estos

momentos. ¿Sería grosero de mi parte pedir dos de las cenas pequeñas? —

preguntó ella, un poco avergonzada.

Lucas se echó a reír a carcajadas ante su pregunta.

—Tenemos una comida completa preparada para nosotros, Amy. No creo

que tengas que preocuparte por tener hambre. Yo estoy bastante

hambriento. No he tenido tantas oportunidades para comer con todas las

cosas que han pasado.

—Aquí está su primer plato. —Amy miró hacia las bandejas que Lana

colocaba en frente de ella, y su boca comenzó a salivar. Había varios

aperitivos en la mezcla, de los cuales se desprendían los aromas más

sorprendentes. Su estómago gruñó con la fuerza suficiente para que tanto

Lucas como Lana la oyeran perfectamente.

—Será mejor que comas antes de que mi hijo empiece a gruñir más —dijo

Lucas y le dio unas palmaditas en el estómago.

Amy estaba tan sorprendida por el momento íntimo, las lágrimas llenaron

sus ojos de nuevo. Ella se inclinó y lo besó impulsivamente.

—Tu hijo o hija —subrayó con humor—, está perfectamente bien. Es la

mamá la que podría consumir todo lo que está a la vista. —Ella agarró el

tenedor y murmuró en voz alta lo bien que sabía.

* * * *

Page 169: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

69

Lucas la miró, disfrutando de su placer durante unos momentos antes de

comenzar a comer su propia comida.

—Les serviré sus ensaladas después de haber despegado —dijo Lana y

luego se fue a comer.

Amy acabó con su comida y miró lo que quedaba en el plato de Lucas con

anhelo. Él se rió de su patética expresión y luego clavó un bocado y la

alimentó. Ella cerró los ojos y gimió de placer, y él se olvidó de la comida

mientras la sangre se agolpaba en su ingle.

Lo que ella hacía con él era increíble. La quería todo el tiempo. Disfrutaba

tanto de todo. Ella no tenía esa mirada de éxtasis en su rostro cuando

miraba los objetos de valor a su alrededor. Lo hacía cuando tomaba un

bocado de comida que se derretía en su lengua, y definitivamente cuando

él estaba empujando dentro de ella.

—Amy, ¿podemos empezar esta luna de miel con el pie derecho? Lo siento

por las acusaciones que hice en tu contra. Realmente me gustaría que

dejáramos pasar esas cosas y tuviéramos un buen viaje —dijo al tiempo

que tomaba su mano entre las suyas.

Los ojos de Amy se llenaron de lágrimas, y asintió con la cabeza.

—Estas hormonas del embarazo me hacen llorar a cada instante, te lo

advierto ahora —dijo ella con una risita—. Yo no suelo ser tan emocional.

—Me gustas así —susurró y la besó un poco más.

—Estamos listos para el despegue, Sr. Anderson. Por favor, abróchense los

cinturones de seguridad, tendremos un viaje tranquilo. El viento va en

nuestra dirección, por lo que deberíamos aterrizar en París a las nueve —

dijo la voz del piloto por el intercomunicador.

—Nunca he volado en un avión antes, pero he visto las películas, y tengo

que decir que esto es mucho mejor que compartir una fila de asientos con

un tipo grande y sudoroso a tu lado y un niño gritando detrás —dijo Amy

con entusiasmo.

Lucas se echó a reír. Ella realmente era vigorizante.

—Estoy de acuerdo contigo.

Page 170: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

70

* * * *

Durante el despegue, el rostro de Amy estuvo pegado a la ventana. Estaba

fascinada por todo el procedimiento. Le encantaba cómo el jet de pronto

despegó con velocidad. La sensación de estar levantada en el aire era

diferente a todo lo que antes había experimentado.

No tenía miedo. Se sentía llena de adrenalina. Definitivamente tendría que

añadir volar a su lista de cosas favoritas que le gusta hacer. Tendría que

ver si su esposo la llevaba a volar hacia otros países.

Tal vez durante su aniversario el próximo año.

Una vez que llegaron a una cierta altura, Lana les trajo el segundo plato.

Comieron varios platos, incluyendo una suculenta langosta. Eso

definitivamente no provenía de los congelados del supermercado del

congelador de su apartamento. Después del final del último plato, ella se

echó hacia atrás y se frotó el estómago.

—Tenías razón, Lucas, Estoy llena —dijo medio dormida mientras se le

escapó un bostezo.

—Vamos a tomar una siesta. Te ves agotada —dijo mientras se levantaba y

la ayudaba desde su asiento.

—¿Quiere que le traiga algo, señor Anderson? —preguntó Lana.

—No, gracias, Lana. Vamos a retirarnos por el resto de la noche —

respondió.

* * * *

Se fueron y se acostaron en la cómoda cama. Lucas desnudó lentamente a

su novia. Se tomó su tiempo para mostrarle lo mucho que la quería.

Lucas pasó la siguiente hora mostrándole repetidamente lo deseable que

era. Luego la tomó en sus brazos, y ella se quedó dormida en cuestión de

segundos. Se sentía muy afortunado de tenerla como novia. Puede que no

hubiesen empezado de buena manera, pero él sabía que iban a ser muy

buenos el uno para el otro.

Page 171: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

71

Capítulo 17 Traducido por Ale Rose & Deby92

Corregido por Deyanira

my y Lucas tuvieron un tiempo increíble en su luna de miel.

Él la había llevado a París por un par de semanas. No sacaron

a colación ninguno de los problemas que alguna vez habían

estado tan presentes en su relación desde el principio. Simplemente

llegaron a conocerse mutuamente.

Pasaron cada noche en el hotel haciendo el amor, aferrándose el uno al

otro, ninguno de los dos dispuestos a dejar ir al otro. Amy pensó, si su

relación se mantenía progresando de este modo, podrían tener un futuro

juntos después de todo.

Lucas la llevó por todo París. Estaba como una niña en Disneylandia.

Amaba toda la historia y antigua belleza de todo. Sabía que no era nada

nuevo para Lucas y calculó que estaba aburrido como una ostra.

Estaba equivocada al respecto. Lucas estaba visitando Paris por primera

vez a través de sus ojos. Era increíble ver las cosas que él había visto en

innumerables ocasiones a través de ella. Ella tenía tal amor y

reconocimiento de todo a su alrededor.

Lucas hubiera preferido quedarse en su lujosa habitación de hotel todo el

tiempo y recorrer su cuerpo en su lugar, pero a regañadientes se la llevó

por la ciudad del amor. Se preguntó cuando su sed por su esposa sería en

cierto modo saciada.

Le hizo el amor a ella y después podía volver y hacerlo de nuevo cinco

minutos después. No podía tener suficiente de ella, y ella parecía igual con

él. Ella no solía ser la que tomaba la iniciativa en hacer el amor, pero lo

compensaba con total entusiasmo una vez que empezaban.

La luna de miel terminó demasiado pronto. El viaje fue increíble, pero

estaba ansioso en mostrar a su esposa su regalo de bodas. Ambos

durmieron más en el vuelo red eye a casa, ya que no durmieron mucho en

París. Cuando llegaron de vuelta a Seattle, temprano en la mañana, ni

siquiera tuvieron que lidiar con el jet lag.

A

Page 172: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

72

* * * *

El avión de la compañía era bastante cómodo, era como si ni siquiera

volara. Amy estaba feliz con su matrimonio y no podía conseguir lo

suficiente de su esposo. Estaba encantada con sólo seguirlo a cualquier

lugar. No podía obtener lo suficiente de sus manos sobre su cuerpo. Se

tensaba con anticipación al pensamiento de sus dedos mágicos

acariciándola.

La invitó para un maravilloso desayuno en un pequeño comedor familiar,

cuya especialidad era un voluminoso omelet. Consumió toda su comida y

apenas se llenaba. Estaba seriamente preocupada, iba a ganar cien libras

si no se cuidaba.

—No puedo creer la cantidad de alimentos que estoy comiendo. Mejor

detenme antes de que sea tan grande como una ballena —dijo preocupada

a Lucas.

Él rió en voz alta.

—Recuerda, Amy, estás comiendo para dos y te puedo decir ahora, si estás

llevando mi niño, será muy exigente, incluso desde el vientre.

Oh bueno, pensó ella, de todos modos él no estaba con ella por su cuerpo.

Se casó con ella porque llevaba a su niño. Ese pensamiento puso de nuevo

un poco de malestar en su buen humor. Amy decidió olvidarlo y no pensar

en ello. Estaba disfrutando su tiempo con Lucas demasiado para dejar que

algo le afectara.

—Tengo un regalo de bodas para ti. Espero que te guste porque sería difícil

devolverlo —dijo Lucas a Amy. Ella no tenía ni idea qué otra cosa podría

darle.

Deseaba que él pudiera darse cuenta de que lo único que quería era su

amor. No le interesaba su dinero o su poder. No le importaban los viajes a

París o el gran diamante que ahora descansaba en su dedo. Sólo quería

que la amara tanto como ella lo amaba.

También se sintió mal, porque no tenía nada que darle a él.

—No sabía que teníamos que darnos regalos. No tengo nada para ti.

Page 173: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

73

—Déjame mostrarte lo que es —le dijo mientras la ayudaba a entrar al

auto. Se dirigían a la casa de sus padres y ella calculó que era su casa,

aunque no entendía por qué ellos tenían dos apartamentos en la ciudad.

Se dio la vuelta y condujo por un largo camino y ella estaba aun más

confundida. ¿Hacia donde iban? Continuó bajando la interminable entrada

sombreada con hermosos árboles por todo el camino. Detuvo el auto

frente a una casa de estilo colonial que era más grande de lo que cualquier

persona necesitaba.

Salió del auto y llegó a su lado, abriendo la puerta. Ella dio un paso hacia

fuera y le miró curiosamente. Subieron los escalones y él abrió la puerta,

de repente levantándola en sus brazos y llevándola a través del umbral.

—Bienvenida a casa —dijo antes de colocar sus labios sobre ella. Amy

estaba sin palabras. Había conseguido un nuevo hogar. ¿Había tenido esto

todo el tiempo y sólo se quedó en los apartamentos para estar más cerca

para trabajar? ¿Vivió allí antes con otra mujer?

Tenía tantas preguntas, pero tenía mucho miedo de las respuestas para

preguntarle en voz alta.

—¿Ésta es realmente nuestra casa? ¡Tenemos una casa real! —exclamó

finalmente y dejó asumir su emoción.

Siempre había soñado con tener un verdadero hogar, con una familia de

verdad en ello, pero nunca había pensado que le sucedería. Sabía que iba

a tener un hijo, pero tener un marido, también, parecía tan irreal. Apenas

podía respirar y tenía miedo de parpadear, con el temor de que todo

pudiera desaparecer.

Lucas la dejó en el suelo, y ella salió corriendo de una habitación a otra. El

lugar era enorme. Había algunos muebles, pero no muchos. La cocina

tenía todos los electrodomésticos conocidos por el hombre, y ella no podía

esperar para utilizarlos todos.

Una escalera enorme circulaba alrededor, lo que permitía dos formas de

subir o bajar. Tenía el tipo de barandilla en el que veías a la realeza

descender en todas las películas románticas. Arrastró su mano a lo largo

de la barandilla mientras corría escaleras arriba. Varias habitaciones eran

absolutamente impresionantes.

Page 174: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

74

Se sorprendió por la falta de mobiliario. Tal vez los entregaran más

adelante. Entró en una habitación y se quedó sin aliento. No había nada

en él, pero si una hermosa cuna antigua con ropa de cama de encaje.

Caminó lentamente hasta la cuna y pasó su mano, imaginándose a su

niño durmiendo bajo el delicado edredón. De pronto, Lucas estaba detrás

de ella, envolviéndola en sus brazos. —Esta era la misma cuna en la que

yo dormía cuando era un bebé. Sé que la mayoría de las madres quieren

diseñar su propio cuarto, pero significaría mucho para mí y para mis

padres si usamos esta cuna para nuestro hijo, —le susurró al oído.

—Mi madre hizo esta misma colcha. Pasó meses en ella mientras estaba

embarazada de mí. Ella hizo una para una para cada uno de sus hijos y

luego la guardó para sus futuros nietos —continuó él.

Amy quedó sin habla. Se sintió tan conmovida por este pedazo de historia

de su familia, sabía que no sería capaz de pronunciar las palabras. En su

lugar, dio la vuelta en sus brazos y decidió mostrarle lo mucho que le

gustaba la cuna.

Lucas suavemente la levantó y la llevó a su habitación. Se centró sobre

todo él y no en terminar su recorrido por la casa hasta mucho más tarde.

Mientras yacían en la cama juntos y ella se acurrucaba bajo su barbilla, él

le frotaba la espalda mientras hablaba.

—Debes haber notado la falta de mobiliario. Algunas de las piezas aquí

vienen de mis padres, y los otros es lo que he recogido a lo largo de los

años. El resto de la casa es para ti para decorar. Puedes hacer lo que

quieras. Si quieres algo de ayuda, mi madre me ha pedido que te informe

que ella disfrutaría trabajar contigo para hacer de este nuestro hogar. En

otras palabras, ella te está pidiendo que dejes que ella te lleve por toda la

ciudad en un frenesí de compras. Mi madre le gusta mucho ir de compras,

especialmente cuando es para alguien más. Estarás suplicando

misericordia, pero, sinceramente, si lo quieres hacer por tu propia cuenta,

prepararé una excusa —dijo.

Amy sabía lo que él quiso decir. Podría haberse negado, pero ella amaba a

sus padres y no creía que sería capaz en negarles algo. Había disfrutado,

pasando el rato con su madre y aprendiendo de ella. Katherine sabría todo

acerca de lo que los bebés necesitaban. Amy no sabía nada.

Page 175: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

75

—Estaría muy contenta de ir con tu mamá, pero no sé cuándo voy a tener

el tiempo —dijo.

Lucas respiró hondo, como si estuviera tratando de ganar valor. Eso la

sorprendió, ya que parecía que nunca tuviera miedo de nada.

—¿Qué es? —preguntó.

—Amy, honestamente no estoy tratando de controlarte, pero creo que sería

mejor si tuvieras que centrarte en ti y el bebé. Ya has tenido problemas de

salud y estarás muy ocupada preparando las cosas para nuestro nuevo

hogar y el bebé. No creo que debas de trabajar más para la empresa. —Él

finalmente llegó al punto.

Amy tenía muchos sentimientos encontrados. Se sorprendió de que la

emoción más fuerte que sintió fuera la de alivio. Ella lo estaba haciendo

bien en su trabajo, pero no le gustaba. Había tanta tensión implicada, y

todo lo que podía pensar era en su futuro hijo y su marido, de todos

modos, lo que hizo que trabajar tanto fuera más difícil. El médico no la

había liberado del reposo en cama, y podría una vez más centrarse en su

carrera después de que ella diera a luz a su hijo en forma segura.

No quería ser completamente dependiente de Lucas. Ya tenía una buena

cantidad de ahorros, debido al hecho de que tenía muy pocos gastos. Esa

era su manta de seguridad. No era lo suficiente para durar mucho tiempo

si ya no estaban juntos, pero sería suficiente para conseguir instalarse en

un nuevo lugar mientras ella encontraba un trabajo.

—Tendría que entrenar a una nueva persona. Estoy de acuerdo con no

trabajar por ahora, especialmente desde que el Dr. Scott dijo que tengo

que permanecer en reposo tanto como sea posible. Quiero conseguir un

trabajo después de que el bebé esté con unos meses de edad, sin embargo,

tal vez sería mejor si yo no trabaje para mi esposo —dijo.

Lucas parecía aliviado. —No tienes que preocuparte sobre el

entrenamiento de alguien. Mi padre ya ha tomado cuidado de todo eso

mientras estábamos en nuestra luna de miel —dijo alegremente.

—¿Quién es esta nueva persona? —preguntó con suspicacia. No quería

que alguna joven delgada y linda pensara en trabajar con su marido por

incontables horas a la semana. Sabía que había muchas mujeres por allí

que no tendría ningún problema para dormir con un hombre casado, y a

Page 176: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

76

través de esa puerta de conexión entre sus oficinas era demasiado fácil

para escabullirse.

La idea de que otra mujer colocara sus manos sobre Lucas era lo

suficiente para acelerar su respiración, y estaba lista para rasguñar los

ojos de esta persona inexistente. Ésta era su familia, y haría cualquier

cosa a su alcance para no soltarlo.

Lucas se rió. Sabía exactamente lo que estaba pensando.

—No te preocupes. Ella es una abuela felizmente casada con seis nietos,

que está más que calificada. Ella en realidad trabajaba para otra división

en la empresa, y mi padre sintió que era hora de que ella consiguiera un

ascenso —le aseguró.

—Esther ha estado trabajando con ella la semana pasada y se ha adaptado

en el trabajo rápidamente. Creo que lo hará bien para nosotros en las

oficinas corporativas. Por supuesto, ya no será un placer para mí trabajar

cada día, sabiendo que no estás allí. Me he acostumbrado a tu olor,

invadiendo cada aspecto de mi área de trabajo. Desesperadamente lo voy

a extrañar —dijo, acariciando su cuello.

—Creo que todo ha sido tomado con cuidado, entonces —dijo, sintiendo un

poco de suerte, ya que había sido sustituida tan fácilmente—. Voy a

centrarme en conseguir que nuestra casa esté lista para el bebé. —Amy

estaba asustada, como siempre había trabajado tan duro, y ahora no se

esperaba mucho de ella salvo para conseguir que la casa estuviera lista y

esperar a su pequeño por nacer. No sabía lo que iba a hacer con el tiempo

extra en sus manos.

Además, ella no tomaría nada de su marido si alguna vez él decidía que el

matrimonio había terminado. Ella lo amaba, y no se convertiría en la

mujer que él creía que era al comienzo de su relación.

Fue triste para ella saber cuántas personas utilizaban a Lucas y su familia

para sus propias necesidades egoístas. ¿No podían todas ésas personas ver

que los Anderson eran gente increíble, con o sin el dinero y el poder?

Bueno, ella planeaba mostrarle lo mucho que lo amaba por él mismo —y

nada más— por el resto de su vida.

* * * *

Page 177: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

77

Amy pasó los próximos dos meses consiguiendo que su hogar estuviera

decorado y listo para su recién nacido. Con frecuencia dejaba lo que

estaba haciendo y frotaba su vientre. Estaba feliz por el hecho de que

pronto iba a ser madre.

Su relación con Lucas estaba marchando bien, pero también le hacia falta

algo. Hacían el amor con frecuencia, y era asombroso. Cuando estaban

juntos en la cama, ella se sentía querida, como la mujer más hermosa del

mundo.

Cuando estaba en sus brazos, todo era perfecto. Él todavía no le había

dicho las palabras mágicas, pero se sentía amada por él. Tal vez él no sería

capaz de decirle que estaba enamorado de ella.

Todos los días peleaba consigo misma para no gritarle esas palabras.

Cada vez que hacían el amor, ella las decía en su mente una y otra vez. “Te

amo, Lucas”. “Te amo”. Como deseaba tener la confianza para decirle lo

que sentía. Temía que si se lo decía, él pensaría que era demasiado

pegajosa, y después se alejaría de ella.

No sabía si podría sobrevivir si él ya no la quisiera. Se había comenzado a

imaginar el “felices para siempre” que había leído en muchas novelas

románticas. Siempre había pensado que sólo era posible en ficción, pero

ahí estaba, viviendo en su propia novela.

Amy estaba perdida en sus propios pensamientos en lo que intentaba leer

un libro fuera de la piscina. Su estomago estaba más grande, ya que

estaba en medio de su tercer mes de embarazo. Se mantuvo esperando a

que Lucas sintiera repulsión por su cuerpo, pero parecía pensar que los

cambios eran sexis, si su reacción del cuerpo era una indicación.

Incluso en las raras noches que no hacían el amor, podía sentir la

evidencia de que él la quería al estar presionado en la suavidad de su

espalda.

—Hola, sexy —dijo Lucas mientras se sentaba y le acariciaba el cuello—.

¿Cómo te sientes hoy?

Continuó hacia arriba de su cuello con un beso con los labios abiertos que

hacía su pulso se disparara.

Page 178: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

78

—Me siento muy bien —ronroneé—. ¿Quieres que te lleve arriba y te

muestre? —declaró, mientras sus besos ya estaban haciendo a su cuerpo

llenarse de necesidad.

Él se rió y tiró de ella hacia su regazo, donde unieron sus bocas en un

profundo beso. Para cuando se separaron para tomar el aire que tanto

necesitaban, ella pudo sentir la evidencia de su excitación, y ya estaba

lista para él.

Deslizó su falda hacia arriba y la tomó ahí mismo en la sala de estar con

ella sentada arriba de él. Ella se vino rápido y fuerte y después colapsó en

sus brazos.

—Bueno eso fue un gran Hola —susurró él mientras continuó

acariciándole la espalda.

—La cena está lista —escucharon una voz que venía de adentro de la casa.

* * * *

Lucas tapó rápidamente a Amy, olvidando que su sirvienta pudo haber

entrado en cualquier momento.

Olvidaba que el resto del mundo existía cuando ella estaba envuelta en sus

brazos.

A él no le gustaba perder el control de esa manera, y se sentó incomodo

mientras su cuerpo trataba de regresar a la normalidad.

—Lo siento —dijo un poco tímido—. Sólo venía a saludarte, pero me

vuelves un poco loco —continuó. Ella puso la mano sobre su rostro

mientras miraba sus ojos—. No lo lamentes. Yo también te deseo así, y

nadie nos descubrió —dijo ella, sonando un poco a la defensiva—. Quiero

hacerte el amor tanto como nos sea posible antes que nuestro hijo tome

toda la habitación, y ya no puedas tocarme —terminó con poca conciencia.

Él la miró a los ojos de manera profunda y habló honestamente:

—Eres hermosa, Amy, y tu cuerpo cambiando con nuestro hijo creciendo

dentro de ti, sólo hace engrandecer esa belleza. Siempre te querré, y eso no

cambiará. —Continuó acariciándola.

Page 179: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

79

Se sentaron juntos por un rato más hasta que el hambre finalmente los

hizo levantarse e ir a la cocina, donde compartieron una silenciosa y

agradable cena. Se fueron temprano a la cama e hicieron el amor de

nuevo. Cuando Amy llegó al clímax, susurró finalmente en voz baja sin

poder ya contenerse:

—Te amo.

Ella lo sintió ponerse rígido con sus palabras y temió que de alguna

manera hubiera roto las reglas de su matrimonio.

Él no dijo nada, pero no la apartó. Ella reposó en sus brazos, sintiéndose

desolada y esperando que él le repitiera las palabras.

Sintió que él la amaba, pero tal vez se equivocó. Lagrimas silenciosas

rodaron por sus mejillas hasta que finalmente se quedó dormida de puro

agotamiento.

Lucas se quedó ahí, sosteniendo a Amy, en lo que su respiración se

tranquilizaba, para estar seguro que estaba realmente dormida. Ella lo

amaba, pensó con asombro. Ya había visto los signos de su apego y sintió

que ella se estaba enamorando, pero él tenía tanto miedo de abrirse.

Había habido muchas mujeres que habían dicho esas mismas palabras, no

porque lo amaran, si no porque amaban su dinero, su poder, y todo lo que

él les podía dar.

En el interior, él sabía que Amy no era una de esas mujeres, ella ya lo

tenía completamente envuelto alrededor de sus dedos. Al darle su amor

también, parecería que él estaría dando la última pieza de él. No estaba

listo para hacer eso. Tenía que quedarse con algo, trató de razonar.

* * * *

Después de que le dijo a Lucas que lo amaba, él comenzó a llegar tarde

cada noche. Lo veía muy poco. Podía sentir que lo perdía sin antes

realmente haberlo tenido. Se imaginó que iba a dar todo de ella, o dejarlo

ir. Ya no podía vivir a la mitad del matrimonio.

La estaba matando cada día un poco más, ver que él se alejaba de ella. No

le volvió a decir que lo amaba, temiendo que, si lo hacia, él le pediría que

durmieran en habitaciones separadas. Hacían el amor con menos

frecuencia, también, parcialmente porque se iba más, mucho más tiempo.

Page 180: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

80

Había tenido algunos meses a la mitad de su embarazo donde se había

sentido muy bien, pero el principio había sido duro, y el final era aun peor.

El doctor la mantenía vigilada, ya que se estaba hinchando mucho, y

estaba preocupado que su presión arterial estuviera muy alta. La había

puesto en reposo en cama el noventa por ciento del día, y ella se estaba

cansando de eso.

Cuando su presión arterial finalmente se controló, el doctor le dijo que se

podía mover un poco más, y que algo de aire fresco le haría bien. Decidió

salir de la casa por un rato.

Iba a ir a la oficina para sorprender a Lucas con una comida romántica,

hacer el amor y una confesión. Le iba a decir cuanto lo amaba y cuanto

quería que el matrimonio fuera real.

Si él no respondía a sus sentimientos, entonces lo dejaría ir y seguiría con

su vida. Ella sabía que él querría ser parte de la vida de su hijo y eso

tendría que arreglarse, pero ya no podían vivir como compañeros de

habitación.

Sabía que él todavía tenía el poder de quitarle a su hijo, pero con el tiempo

llegó a conocerlo, no creyó que él pudiera separar a un niño de su madre.

De todas formas, no había manera de que Joseph y Katherine estuvieran

de acuerdo con eso. Tenían mucho amor y respeto por la familia.

Amy se sentía nerviosa en su camino a la oficina. No había estado ahí en

un tiempo, y temía que él no estuviera feliz con su interrupción. Planeó su

visita cuando supo que él estaría solo y así podría sólo entrar. No quería

correr hacia Tom. No le había contado sobre lo que estaba pasando,

sintiendo como si estuviese traicionando a Lucas al decir algo negativo

sobre su matrimonio.

Esperaba que él la pudiera amar. Por favor, oró, déjalo amarme tanto como

él ama a nuestro hijo que todavía no nace.

Entró en su vieja oficina, la cual estaba vacía, y apretó su abrigo un poco

más fuerte. Era largo y la cubría muy bien, pero sabía que todo lo que

tenía puesto debajo era una pequeña lencería negra. Le había sido difícil

encontrar algo sexy cuando su estomago sobresalía como por un pie del

resto de su cuerpo, pero increíblemente, había dado en el clavo y se sentía

sexy de alguna manera por primera vez en hacía ya mucho tiempo.

Page 181: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

81

No estaba realmente consciente de su cuerpo, ya que su esposo pasaba

mucho tiempo frotándole el estomago y hablándole a su hijo. Él parecía

tan emocionado como ella al saber que tendrían un bebé. Algunas de las

cosas que no se planean resultan mucho mejor.

Entreabrió la puerta de comunicación silenciosamente y se detuvo donde

se encontraba, su corazón se rompió.

Lucas no estaba solo en su oficina. Había una delgada pelirroja envuelta

alrededor de él, y estaban atrapados en un abrazo muy apasionado.

Su cabello era un desastre, como si hubieran estado haciendo el amor por

horas. Su blusa colgaba abierta, y su falda estaba levantada mostrando

sus bragas. Ella era tan deslumbrante en un modo que Amy nunca

esperaría serlo; pensó en agonía.

Esta era la razón por la cual él ya no iba más a casa con ella. Tenía una

aventura.

Había dudado que él la pudiera amar, pero había habido un crecimiento

en su relación, o eso había creído. No importa qué, sin embargo, ella

nunca se dio cuenta que él era el tipo de hombre que era infiel. Hacían el

amor todo el tiempo. Pensó que estaba satisfecho –incluso más que

satisfecho, ya que al hacer el amor todo era muy frenético, como si no

pudieran tener suficiente uno del otro. Siempre estaba listo para hundirse

profundo dentro de ella, y eso era algo que un hombre no podía fingir.

Estaba horrorizada al pensar que tal vez él se imaginaba a su amante al

hacerle al amor a ella.

Tal vez así era como siempre estaba tan listo. Sabía que nunca podría

competir con alguien como la deslumbrante pelirroja, y Amy tenía el

corazón roto.

Se quedo ahí por unos segundos, pero le pareció una eternidad. Todo su

mundo comenzó a desmoronarse, y no sabía cómo es que todavía seguía

de pie.

Amy cerró la puerta y corrió hacia el elevador. Podía sentir lágrimas

calientes rondando por su rostro, mientras corría rápido al carro y

aceleraba a casa. Tuvo su respuesta.

Nunca se quedaría con un hombre que le fue infiel. No podía hacerlo.

Page 182: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

82

Capitulo 18 Traducido por Vafitv.

Corregido por Cristinita <3.

¿Qué crees que estás haciendo, Laura? —dijo Lucas de

forma exaltada a la pelirroja, con quien había estado

saliendo antes que él y Amy se hubieran involucrado.

Ella había entrado en su oficina momentos antes, con su famosa expresión

de pucheros, declarando que debían tener una charla. Él le había dicho

que no había nada de que hablar, pero ella había venido a su escritorio y

se había sentado delante de él, extendiendo sus piernas abiertas, de modo

que él no tuviera más remedio que darse cuenta que ella no llevaba nada

debajo de su falda demasiada corta.

Él no podía creer que en algún tiempo la había deseado. Ella era tan falsa,

mientras que Amy era auténtica, y él la quería fuera de su oficina de

inmediato.

—Tienes que irte. No hay nada más entre nosotros —dijo con los dientes

apretados mientras retrocedía la silla lejos de ella—. También sabes que

soy un hombre casado y ya no estoy en el mercado.

Ella acabó sonriéndole con lo que pensaba era una mirada seductora y

abrió su camiseta para mostrar sus pechos abundantes, los cuales se

desbordaban del sujetador. Él se había puesto de pie para sacarla de la

habitación cuando ella se envolvió alrededor de él y cerró sus labios en los

suyos. Él estaba tan sorprendido, que se quedo allí durante unos

segundos antes de que sus manos pasaran a su cintura y la empujara

lejos de él.

—Cariño, tú sabes que me quieres —dijo ella, sonando falsamente triste.

Él hizo uno de sus juegos. Marchó a su escritorio y pulso un botón.

—Seguridad, los necesito en mi oficina inmediatamente —gruñó.

Page 183: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

83

Al cabo de unos minutos, dos hombres corpulentos entraron en la

habitación para ver a la mujer todavía medio desnuda tratando de

envolverse alrededor de su jefe.

—Por favor, acompañen a esta mujer y sáquenla del edificio. Nunca más

dejen que entre otra vez —dijo con fuerza, incapaz de controlar su ira.

—Sí, señor Anderson. De inmediato —respondieron profesionalmente,

mientras cada uno de ellos la tenía de un brazo, y se la llevaron.

Lucas se echo atrás en su silla y apoyó las manos sobre su cabeza. Todo lo

que podía pensar era que gracias a Dios su esposa no estaba allí para

haber sido testigo de esa situación. Estaba seguro de que ella hubiera

pensado que él había invitado a la mujer.

Ella tenía una buena razón para estar insegura en su matrimonio, ya que

él había estado excluyéndola últimamente. La había alejado íntimamente

hasta llegar a un nivel tan alto. Se sentó allí, reconociendo que estaba

enamorado de Amy, ese razonamiento se apoderó de él.

No se sentía como una carga, para nada.

Él amaba a su esposa.

Ella lo amaba.

Ellos iban a tener un hijo juntos.

Entonces, ¿por qué estaba todavía sentado allí?

De repente, todo lo que quería hacer era ir a casa y envolverse en sus

brazos y decirle repetidamente lo mucho que ella significaba para él. No

entendía por qué estaba alejándola de su vida. Empezó a levantarse para

dirigirse a la puerta, pero recordó que tenía que terminar lo que estaba

trabajando. El contrato estaba previsto para la tarde, y él estaba casi

terminándolo.

Una hora más no haría ninguna diferencia, aun cuando pareciera toda

una vida. Rápidamente volvió al trabajo para poder volver rápidamente a

casa. No pudo evitar la sonrisa en su cara. Se detendría por rosas en el

camino. Se dio cuenta de que debía comprar algunas cosas para ella.

* * * *

Page 184: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

84

Amy no pudo evitar que las lágrimas cayeran mientras conducía desde la

oficina a su hermosa casa. Ella se sentó en el auto, mirando el lugar con

una profunda tristeza, sabiendo que nunca volvería a dormir allí de nuevo

en los brazos de su marido. ¿Cómo podía haberla engañado? Ella le había

entregado su cuerpo libremente, y su amor, también. Se arrastró lo

suficiente para caminar hacia dentro. Subió lentamente las escaleras que

conducían a su dormitorio y, una vez más, unas cuantas lágrimas se

deslizaron de sus ojos. No le tomaría demasiado tiempo empacar, ya que

no llevaría nada que no considerara exclusivamente suya.

Empacó algo de ropa y artículos de bebé y luego tomó la maleta de regreso

a su habitación. Miro a su alrededor una última vez y luego se quitó su

anillo de bodas. Se sentó en el tocador y le escribió a su marido una nota.

Puso su anillo en la parte superior de la carta, agarro sus maletas, y salió

por la puerta sin permitirse mirar atrás otra vez.

No tenía ni idea de donde se dirigía o que iba hacer cuando llegara allí.

Solo sabía que tenía que escapar. Tenía tanto miedo, que si él atravesaba

aquellas puertas y envolvía sus brazos alrededor de ella, se derretiría y le

pediría que la amara y que no corriera a los brazos de otra mujer. Ya le

había entregado su corazón. Ya no tenía nada más que ofrecer. No tenía

nada que él quisiera.

Amy condujo por la autopista y se dirigió hacia el sur. Después de unas

horas, ella pasó por Salem, y no se sentía lo suficientemente lejos.

Comenzaba a sentir un poco de dolor, sin embargo, se detuvo en una

parada para descansar y estirarse. Quería llamar a Tom y hablar con él,

pero estaba en el trabajo, y ella tenía demasiado miedo de que Lucas por

casualidad oyera la conversación. Tendría que llamarlo más tarde porque

realmente necesitaba un amigo en este momento.

Se puso de nuevo en camino y siguió conduciendo hacia el sur. Después

de un par de horas más, estaba en Springfield, al lado de Eugene. Siempre

había querido visitarlo, así que tomó la siguiente salida que la llevaría al

centro.

Salió de la autopista, al distrito financiero, y comenzó a buscar un hotel

barato. Pasó por el Hilton y negó con la cabeza. Esto estaba más allá de su

rango de precio por el momento. Por último, se encontró saltando a un

pequeño lugar y estaciono.

Page 185: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

85

Ella entró, tan cansada que apenas podía mantener la cabeza erguida. El

hombre detrás del mostrador estaba mirándola de reojo de una manera

que le daba miedo, sobre todo con el olor a alcohol que emanaba de él.

—Me gustaría una habitación para la noche, por favor —pidió en voz baja.

—¿Tiene tarjeta de crédito? —le dijo él.

—No, tengo dinero en efectivo —respondió, no queriendo usar su tarjeta de

crédito, y además, no confiaba en que el tipo tuviera su información.

—Bueno, normalmente requerimos tarjeta de crédito, en caso de que robe

algo… —Él la miro de reojo otra vez.

—Oh, entonces supongo que tendré que encontrar otro lugar —dijo ella

con calma, a pesar de que se sentía como si fuera a caerse en cualquier

momento.

—Creo que podemos hacerlo en efectivo en este momento —dijo, un poco

desesperado. Ella no iba a quedarse en el lugar si no había una doble

cerradura en la puerta. No confiaba en el tipo.

—Gracias, respondió Amy. —Y llenó la pequeña tarjeta que él le dio. Luego

recibió su llave. Fue a su auto y lo condujo al punto de aparcamiento en

frente de su puerta.

Salió cansada del vehículo, agarró su maleta y abrió la puerta de la

habitación del motel. Se quedó sin aliento ante el olor horrible de

cigarrillos y cerveza rancia, sintió que su estomago daba vueltas. Suspiró y

dio un paso dentro. Estaba demasiado asustada para abrir incluso una

ventana, ya que el barrio en donde ella estaba no parecía el más seguro.

No sería más la señora Anderson y tendría que acostumbrarse a la vida

como lo había sido antes de su matrimonio. En realidad no se preocupó

por la habitación, estaba tan vacía por la traición y el engaño de su

marido. Ella había estado en sus brazos la noche anterior, y luego él

estaba en los brazos de otra, sólo unas pocas horas más tarde.

Gracias a Dios por su cansancio porque cayó en un sueño inquieto casi

inmediatamente.

* * * *

Page 186: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

86

—Entonces, ¿a dónde demonios se fue…? —gritó Lucas a su cocinera,

Rosa. Sabía que no era su culpa que Amy se hubiera ido, pero no tenía a

nadie más para sacar su miedo e ira.

Él había vuelto a casa, anticipando la celebración con su esposa y decirle

lo que sentía. Las rosas se aferraban a su pecho. Había abierto la puerta y

la había llamado. Cuando no hubo respuesta, no había sentido pánico,

subió la escaleras, pensando que ella estaba tomando una siesta.

Ella había estado muy cansada últimamente, y él había estado preocupado

por su salud, así como la de su hijo o hija.

En silencio, entró en su dormitorio y miró alrededor. Frunció el ceño

ligeramente cuando no la encontró allí, pensó que estaría en el cuarto de

baño. Caminó hasta la puerta. No estaba allí, tampoco. Él estaba a punto

de salir de la habitación para preguntarle a Rosa donde se encontraba

Amy, cuando echó un vistazo y vio su anillo en la mesa sobre un pedazo de

papel. Al instante, se puso furioso. Ella lo había dejado. Lo sintió. Ella le

había dicho que lo amaba, y aun así lo abandonó. El la traería de regreso,

sin importar a donde se hubiera ido. Ella no iba a convertirlo en un idiota

y dejarlo plantado, solo y vulnerable. Le había mentido. Estaba seguro de

que ella había tomado todo lo que pudo en sus codiciosas manos en el

proceso de dejarlo. Todo este tiempo, ella sólo había jugado con él.

Lentamente se acercó al papel y lo miró, no queriendo saber lo que había

escrito, pero sin parar de leerlo.

Lucas.

Siento mucho que no fueras capaz de amarme. No puedo evitar lo mucho que

me he enamorado de ti, a pesar de que nunca fue el acuerdo entre nosotros.

Ya no puedo vivir contigo si me vas a dejar para estar en los brazos de otra

mujer. Sé que amas a nuestro hijo, y no trataré de alejarlo de ti, pero tengo

que escapar por el bien de mi propia salud. Me pondré en contacto contigo

después de que el bebé nazca, y nosotros podremos concretar algo entonces.

Te devolveré el auto tan pronto pueda conseguir que las cosas se resuelvan.

No estoy tratando de tomarlo. Solamente no tenía otro modo de marcharme.

Amy.

El leyó la nota aproximadamente 10 veces, sin entender lo que estaba

pasando. Él no la estaba engañando. ¿Por qué creería eso de él? Él pasó de

la ira a la confusión en menos de un segundo.

Page 187: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

87

Se calmó y volvió a leer la nota una vez más. Tenía que averiguar lo que

estaba pasando y no solamente sacar conclusiones apresuradas.

El caminó lentamente por las escaleras, casi como si estuviera en trance.

Se dirigió a la cocina donde Rosa estaba cocinando.

—Hola, Sr. Anderson. Llega temprano —dijo ella, como si no pasara nada.

Esta actitud hizo que su mal genio volviera.

—¿Has visto a mi esposa? —preguntó con enojo en su voz.

Ella se volvió hacia él, con el ceño fruncido.

—Ella se fue hace un rato —dijo perpleja, como si él supiera eso.

Fue en ese momento cuando él le gritó. De inmediato se sintió mal y se

calmó a sí mismo.

—Discúlpame, Rosa —dijo él—. Es sólo que ella se ha ido, y todo lo que

tengo es esta nota —dijo mientras empujaba la nota delante de ella.

Ella escudriñó la nota, y luego su aliento se enganchó cuando la volvió a

leer. Ella miró a Lucas con sospecha sobre su rostro. Él sabía que Amy se

había hecho amiga de Rosa y las dos pasaban mucho tiempo juntas.

—No engañé a mi esposa —comenzó a defenderse. No tenia que explicarle

nada a ella, pero no le gustó la censura que vio en sus ojos.

Ella inmediatamente bajo la mirada, como si supiera que había estado

mirando airadamente a su jefe.

—Esto no es mi asunto —afirmó ella.

—¿Me puedes decir dónde Amy ha estado hoy? —preguntó él.

—¿No lo ve, señor Anderson? Le empaqué un almuerzo, y ella se lo llevó a

su oficina. Me dijo que quería sorprenderlo con un almuerzo romántico

porque usted había tenido que trabajar tan tarde todas las noches. Estaba

muy emocionada cuando se fue. Volvió a casa mucho antes de lo que

esperaba que lo hiciera, pero supuse que sólo había olvidado algo, porque

estuvo aquí por unos quince minutos, y luego se precipitó hacia la puerta

sin decir una palabra.

Lucas de repente se hundió en la silla a su lado. Sentía que sus piernas no

lo apoyarían por más tiempo.

Page 188: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

88

—No —gritó él, con tal devastación en su voz que Rosa le puso su mano en

su hombro.

Él supuso que ella debió haber pasado por la oficina cuando Laura estaba

allí. Si ella hubiera estado allí en el momento oportuno, podría haber

parecido que él estaba teniendo una aventura. Lentamente se puso en pie.

—Tengo que hacer unas llamadas telefónicas —dijo mientras salía de la

habitación.

Una hora más tarde, de nuevo tenía la cabeza entre sus manos. Él había

hablado con sus guardias de seguridad y averiguó que ella había estado

allí al mediodía y se había marchado después de cinco minutos. Había

estado allí sólo unos minutos antes de que ellos hubieran escoltado a su

visitante no deseada hacia fuera.

Entonces, pensó que él estaba teniendo una aventura. Le parecía que el

hecho de que ella no confiara en él era un poco conveniente. ¿Por qué se

había marchado y sin preguntarle que estaba haciendo? Él asumió que

ella pensaba que encontrarlo con otra mujer rompería el acuerdo

prenupcial y que podría tomar todo lo que él tenia. Ella pensó mal.

Él llamó a los bancos para averiguar cuánto había tomado ella. Después

de otra media hora él colgó el teléfono y otra vez sintió vergüenza. Ella no

había tomado nada. Él había puesto un rastro en todas las tarjetas de

crédito para averiguar dónde habían sido usadas y se había dado cuenta

de que ella no había ocupado ninguna de ellas.

Y no sólo el día de hoy, sino que ella no las había utilizado nunca desde

que su madre y ella habían amueblado la casa. Había cero compras. ¿Por

qué él no le prestó atención a nada de esto? Nunca notó que ella no había

ido de compras, o que no había ido a ninguna parte.

El vagó por su dormitorio, sintiendo una dolorosa necesidad porque ella

estuviera allí. A él le gustaba salir con ella de compras para su bebé.

Estaba tan entusiasmada con cada nueva compra. Pensó en esos viajes,

cuando ellos habían pasado por los centros comerciales, y ella ni siquiera

había mirado las joyerías o boutiques de modas.

El miró la pequeña caja de joyas que su madre le había dado a Amy y se

dio cuenta de que las pocas piezas que había comprado para ella seguían

allí. Ella había tomado nada más que un poco de ropa y el auto, que dijo

que devolvería.

Page 189: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

89

¡El auto!

Él salió corriendo de vuelta a la oficina. Había estado sintiéndose

desesperado sobre como posiblemente encontrarla, ya que ella no usó las

tarjetas de crédito, cuando se dio cuenta de que podía rastrear el vehículo.

Él siempre lo añadía, en caso de robo o accidente.

En sólo unos segundos, él había localizado el vehículo. Echó un vistazo a

su reloj. Eran las ocho de la noche. Llamó a su piloto y le dijo que tuviera

el avión listo. Ellos llegarían a Eugene en una hora.

Lucas subió en su auto y llamó a su padre cuando se dirigía al aeropuerto

de Seattle. Su padre escuchó a Lucas mientras explicaba todo lo que había

sucedido.

—Recupérala, hijo. Ella es lo mejor que te ha pasado —dijo su padre

cuando Lucas dijo todo.

—He sido tan terco y estúpido papá, la amo y tenía miedo, si le daba mi

corazón, ella lo tendría todo. Finalmente me di cuenta que no importa más

porque sin ella en mi vida, no me interesa si tengo un corazón que lata o

no —terminó él con una nota estrangulada.

Su padre le dio un momento para que él recobrara la compostura y luego

le hizo saber que él y su madre estarían allí si necesitaba algo.

Lucas se sintió un poco mejor después de hablar con su padre. Él sabía lo

mucho que amaban sus padres a Amy. No podía tener una sola

conversación con ellos sin escucharlos alabar a Amy por una cosa o la

otra. Amy a menudo se encontraba en su casa durante el día, trabajando

en algo para él bebe.

Su madre también había ayudado a Amy a terminar la guardería. Habían

hecho hermosas diseños de plantilla en las paredes y cocido cortinas, él

había preguntado un día porqué no acababan e iban a comprar los

artículos, y ella lo había mirado como si fuera un niño.

—Significa mucho más cuando viene del corazón. Cuando nuestro niño

crezca, sabrá que su abuela y su madre lo querían tanto que querían hacer

de su primera habitación el mejor lugar del mundo —había dicho ella.

Lucas llegó al aeropuerto y estaría en el aire en tan solo treinta minutos.

Page 190: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

90

—El vuelo sólo tardara unos cuarenta minutos, Sr. Anderson —vino la voz

del piloto por el intercomunicador. Su asistente le trajo una bebida que era

muy necesaria una vez que estuvieron en el aire.

Él sabía que ella estaba allí al ver su auto estacionado en el frente,

mirándose fuera de lugar.

—¿Quiere que lo espere? —preguntó el conductor.

Lucas le entregó varios billetes.

—No, gracias. Tengo otro medio de transporte —dijo mientras caminaba

hacia la puerta principal.

El empleado detrás del mostrador parecía sucio y miró a Lucas de arriba

abajo con temor.

—¿Está buscando una habitación? —le preguntó, mirando mas allá de él.

Lucas pensó que el hombre estaba buscando a la puta barata que creía

que él llevaría allí. Lucas comenzaba a enojarse, pero también sabía que el

chico no acostumbraba a clientes como él.

—Mi esposa se registró aquí el día de hoy. Necesito saber en qué

habitación está. Ella dejará el hotel —dijo Lucas con autoridad.

—No puedo dar información sobre mis clientes. —La voz del tipo tembló,

no lo bastante, pues él esquivó la mirada de Lucas.

Lucas estaba listo para agarrar a la comadreja de hombre de la camisa y

tirarlo contra la pared, pero sabía que si se mostraba seguro, conseguiría

lo que buscaba.

Lucas puso cien dólares en el mostrador, y vio al hombrecito

prácticamente babear.

—La habitación de Amy Anderson, por favor. —Fue todo lo que dijo

mientras seguía con los dedos sobre el billete.

—Ella está en la habitación doce —dijo el tipo sin más argumentos. Le

entregó la llave a Lucas y le arrebató el billete del mostrador antes que el

hombre rico cambiara de opinión. Sin decir una palabra, Lucas salió y no

se detuvo hasta que llego a la puerta doce.

Él se quedo escuchando y no oyó ningún ruido, insertó la llave y giró la

perilla fácilmente. Empezó a empujar la puerta cuando una cadena lo

Page 191: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

91

detuvo. Se asomo por la rendija y la vio tendida en la cama, tiritando

mientras dormía, acurrucada sobre sí misma con la mano de manera

protectora sobre su estomago.

Lucas empujó la puerta hacia él unos centímetros. Luego le dio un tirón

rápido hacia adentro, y la cadena se rompió sin mucho esfuerzo. Estaba

horrorizado por la falta de seguridad en el edificio. Amy ni siquiera se

despertó cuando él entró en la habitación.

El olor del lugar era suficiente para hacer girar su estómago. La tenía que

sacar de ahí rápido, antes de que hubiera algún daño duradero a ella o a

su hijo.

Él se sentó en el borde la cama y suavemente la sacudió. Amy se despertó

y se sentó, sus ojos miraron alrededor con terror.

—Oh, gracias a Dios que eres solo tú, Lucas —dijo, mientras su

respiración se tranquilizaba. Teniendo en cuenta la zona de la ciudad en

que se encontraba, al igual que el tipo de mala calidad en la recepción, él

entendía su desasosiego.

Su felicidad al ver que era él, obviamente fue rápidamente olvidada cuando

ella se despertó lo suficiente como para darse cuenta de lo que estaba

pasando.

—¿Cómo has llegado hasta aquí? ¿Cómo sabias dónde estaba? —preguntó

ella.

—Estaba rastreando tu auto, Amy, y antes de que comiences a gritar

acerca de mí espiándote, hay rastreo de todos nuestros vehículos. Es una

medida de seguridad en caso de que alguno de ellos sea robado. —El

levantó su mano mientras trataba de retrasar la pelea—. Sé que tienes

mucho que decir sobre lo que crees que ha pasado, pero estoy realmente

incómodo con tenerte a ti y a mi hijo en este entorno poco saludable. Ya he

reservado una suite en el Valley River Inn, que está a solo unos kilómetros

de aquí. Vamos a dirigirnos allí, conseguiremos algo de comida y

tendremos una conversación —dijo él con su habitual calma y voz al

mando.

Él no esperó que Amy dijera algo. Sólo recogió sus cosas, que eran pocas,

teniendo en cuenta que nada fue desempacado. Sacó su maleta por la

puerta que seguía abierta y la colocó en el vehículo.

Page 192: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

92

Como Amy todavía no se había movido, él entró en la habitación, la levantó

en sus brazos como si ella no pesara nada, y la depositó suavemente en el

asiento del copiloto del auto. Coloco un par de billetes de cien dólares

sobre la mesa de noche con una nota que decía: “Por la cerradura”, y luego

rápidamente se retiró del estacionamiento del motel de barrio bajo.

* * * *

Amy tenía tantas emociones corriendo a través de ella y no sabía en cual

concentrarse. La emoción a la vanguardia era el amor. Ella amaba tanto a

este hombre. Su vida sin él parecía tan interminable y vacía.

Lo amaba demasiado como para no poder recostarse mientras él mantenía

relaciones con diversas mujeres. Sabía que la pelirroja no sería la última.

Él era vibrante, hermoso, y el sueño de toda mujer. Mira lo rápido que se

había enamorado de él.

Ellos llegaron al hotel, y ella lo siguió obedientemente, estaba demasiado

agotada —física y emocionalmente— como para luchar con él más esa

noche. Racionalmente tendría que explicar que ella no era el tipo de mujer

que se recostaría mientras su esposo dormía con otras.

Ellos entraron en la hermosa suite, y sus nervios aumentaron. No había

hablado con ella desde que la había sacado de ese motel asqueroso. No

estaba triste de ver al lugar al que iban.

Tal vez, después de que hablaran, él la dejaría quedarse en su antiguo

apartamento hasta que el bebe naciera. Sabía que ella estaba bajo órdenes

estrictas de no trabajar en ese momento, ya que podría causarle daño al

bebé. Ella nunca haría nada para lastimar a su hijo. Su mano acarició su

estómago mientras estaba sentada en el sofá y esperó a ver lo que él tenía

que decir.

Lucas se acercó al teléfono y realizó un pedido de comida. Luego se sentó a

su lado.

—Amy, nunca he estado tan aterrorizado cuando me di cuenta que me

habías dejado. ¿Cómo no te das cuenta lo que significas para mí? —

comenzó hablar.

Ella abrió la boca para responder, pero el negó con la cabeza suavemente y

la atrajo hacia su regazo.

Page 193: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

93

Ella sabía que tenía que luchar, pero a pesar que él era el motivo por el

que ella estaba con tanto dolor, quería la comodidad que él le estaba

ofreciendo. Él comenzó a frotar su espalda en círculos lentamente y tuvo

que luchar contra las lágrimas que querían caer de nuevo. No sabía cómo

ninguna sola lágrima salió de su cuerpo.

—Mírame, por favor —le suplicó él. Ella finalmente se volvió para mirar

sus ojos. Ellos parecían tan llenos de amor y sinceridad—. Te amo —

declaró él.

Ella finalmente perdió la batalla para contener las lágrimas. Cayeron

libremente por sus mejillas, y su cuerpo se sacudió suavemente por los

sollozos al oír finalmente las palabras que había deseado durante tanto

tiempo.

—Te amo y sólo a ti —dijo de nuevo mientras él con cuidado enjugó sus

lagrimas—. Lo que viste hoy no era yo adhiriéndome a otra mujer. Ella es

una ex novia que estaba tratando de recuperarme. Si te hubieras quedado

un momento más, me habrías visto apartarla en cuanto ella hizo su

movimiento. Hice que seguridad la sacara de las instalaciones. Hablé

acerca de estar en el lugar equivocado en el momento equivocado —

terminó con una tímida sonrisa en su rostro.

Lo miró fijamente, empezando a sentir un rayo de esperanza. Él decía que

la amaba, y tal vez realmente ella había sacado conclusiones apresuradas.

—¿Por qué crees que te engañaría? Hacer el amor contigo es la mejor

experiencia sexual que he tenido en mi vida, pero es mucho más que solo

sexo. Nunca puedo tener suficiente de ti. ¿Por qué en el mundo tendría

que ir a buscar a otra mujer cuando te tengo a ti todas las noches? —

preguntó él con confusión.

—Tiene más sentido para mí que te guste una mujer como ella. Yo no soy

sofisticada o hermosa. Te quedaste atrapado conmigo debido al bebé.

Simplemente tiene más sentido que tú en realidad seas capaz de amarme.

—Ella rompió en un sollozó apagado y no pudo decir nada más.

Lucas levantó su barbilla y puso sus labios sobre los suyos. Ella respondió

de inmediato, como siempre hacía, incluso a su más ligero toque. Él se

apartó rápidamente, pero con suavidad.

—Amy, admito que no comenzamos de la mejor manera, pero ya nada de

eso importa. Lo único que importa ahora es como nos sentimos el uno

Page 194: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

94

sobre el otro y como nos sentimos acerca de nuestro hijo —dijo él mientras

ponía su mano sobre su estómago.

—Te amo tanto. Lo siento, he sido un idiota. Tenía miedo de darte mi

corazón porque ya me posees en todo lo demás. Caminaría sobre el fuego

por ti. Te perseguiría hasta los bordes del universo. No puedo, y no voy a

vivir sin ti. Tú y nuestro hijo son mi razón para sobrevivir. Sin los dos no

hay alegría ni pasión en mi vida. No tendría sentido —dijo él.

Ella le creyó. Él la amaba.

¡Él la amaba!

Ella nunca en su vida, sintió alegría tan enorme como en ese momento,

sentada en el regazo de su marido con sus brazos envueltos

apretadamente alrededor de ella. Podía ver el amor en su rostro y sentirlo

en su cuerpo. Sabía que todo iba a estar bien. Sabía que iban hacer la

pareja que vencería las probabilidades.

—Te amo tanto, Lucas. Creo que te amado desde la primera vez que nos

conocimos. Traté de luchar contra ello, pero no se puede luchar contra un

hombre como tú. Eres con quién quiero estar el resto de mi vida —dijo ella

con pasión.

Amy le echó los brazos alrededor del cuello de su esposo y lo besó con un

hambre que los mantendría hasta muy tarde en la noche, o por lo menos

hasta que fueran interrumpidos con su cena.

Page 195: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

95

Epílogo Traducido por Mona

Corregido por Cristinita <3

Puja, nena, puja. Lo estás haciendo tan bien. Veo su cabeza

—masculló Lucas en un susurro aterrorizado.

—Arrrgggggg... —gruñó Amy cuando utilizó su última fuerza

restante y dio un empuje final. Ella se derrumbó de nuevo contra la cama

cuando escuchó el sonido más dulce imaginable.

El primer llanto de su hermoso bebé.

De repente el doctor colocaba a su recién nacida sobre la cima de su

pecho, Amy examinó el rostro arrugado de su hija lanzando su primera

rabieta.

—Ella definitivamente tiene el temperamento de su papá. —Lucas se rió

mientras él frotó a su hija desde la cabeza hasta los pies, asegurándose de

que ella estaba bien en todos los sentidos—. Creo que ella tiene hambre y

deja que todos lo sepamos. —Se rió entre dientes.

Incluso agotada, Amy miró de su marido a su bebé y sintió el orgullo y la

felicidad de cómo su familia creció. Ella podía ver el amor y el orgullo

brillando en los ojos de Lucas, y era la cosa más hermosa en el mundo.

—A Jasmine le gustaría tener a su padre abrazándola ahora —le dijo Amy

a Lucas. Él con cuidado la recogió y la sostuvo estrechamente contra su

pecho. El movimiento diminuto de su respiración era el sentimiento más

asombroso en el mundo. La noche anterior, había estado sintiendo sus

patadas de dentro de la segura matriz de Amy. Ahora, él la sostenía en sus

brazos.

Los doctores rápidamente limpiaron a Amy y Jasmine, luego los tres se

trasladaron de habitación.

Estaban allí no más que unos minutos cuando alguien llamó a la puerta.

—¿Podemos entrar? —dijo la voz tenue de su suegro normalmente potente.

Page 196: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

96

—Entra, entra, papá. Conoce a tu primera nieta, Jasmine Katherine

Anderson —dijo Lucas con orgullo.

Joseph con cuidado tomó a su nieta, una lágrima se derramó por su

mejilla. Las cosas no habían resultado mal en absoluto, pensó para sí

mismo. Él estaba en un hospital, sosteniendo a su nieta recién nacida y su

hijo estaba felizmente casado.

Su hijo debería agradecerle, pero Joseph sabía que era mejor no pedir

cualquier alabanza por todo lo que había hecho para conseguir a estos

chicos juntos. Su hermosa nieta eran todas las gracias que él necesitaba.

—Ustedes dos lo han hecho realmente bien aquí —dijo Joseph mientras él

sonreía de Amy a Lucas—. Ella es la bebé más hermosa que alguna vez he

visto en mi vida —continúo él.

Él de mala gana le dio la bebé a Katherine y miró un brillo venir sobre su

rostro cuando ella se sentó en la mecedora y la alimentó con el preciado

don de su pecho mientras tarareaba una canción de cuna.

—Casi conseguimos un bebé de navidad. —Joseph rió. Era veintitrés de

diciembre. Todos convinieron que Jasmine era el regalo perfecto para la

familia entera.

—Supongo que tendremos que trabajar en darle un hermanito a Jasmine

para que nazca en la navidad del próximo año —dijo Lucas mientras

miraba ávidamente a su esposa. Ella era todavía la cosa más hermosa en

el mundo, aun después de los trabajos forzados que ella había soportado.

—Ahora, hijo, de verdad quiero un montón de nietos corriendo por todas

partes de la vieja mansión vacía, pero tú no puedes querer asustar a tu

esposa. No es una buena idea hablar del segundo niño cuando aún se

siente el dolor del primero. —Él guiñó a Amy.

—El dolor ya está olvidado, papá. Amo a esta criatura más que a nada en

el mundo, y quiero darle muchos hermanos. Amo a Lucas tanto y este

amor tiene que ser compartido con los maravillosos niños que sé que

haremos.

El corazón de Joseph se amplió un poco más por cuánto él amaba a su

nueva hija. Le había pedido llamarle papá porque sabía que ella no tenía

uno. Él realmente la amaba como si fuera uno de sus propios hijos. Ya que

Page 197: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

97

ella estaba casada con su hijo, era su familia ahora. Todavía le gustaba

oírselo decir, sin embargo. Él se inclinó y besó su mejilla.

Hubo otro golpe en la puerta, luego la cara de Amy estalló en una enorme

risa cuando Tom dio un paso por la entrada, llevando un enorme osito de

felpa, globos y una bolsa grande de chocolates.

—Tom, estoy tan contenta de que finalmente estés aquí —dijo Amy a su

mejor amigo.

—Hubo un accidente en la autopista, o yo habría estado aquí hace una

hora —dijo Tom mientras él se inclinó y la besó en la mejilla.

—Ven y conoce a tu ahijada —dijo Amy. Los ojos de Tom al instante se

llenaron de lágrimas cuando él tomó el precioso bulto en sus brazos.

—Ella es perfecta, Amy. Justo como su mamá —él le dijo, tratando de

mantener sus emociones bajo control. Todos la visitaron durante

aproximadamente una hora, el corazón de Amy casi rebosaba por cuánto

amor ella tenía por las personas en la habitación con ella.

—Lo has hecho bien, Amy. Estoy muy orgulloso de ti. Los dejamos solos

con su niña ahora —dijo Joseph mientras ayudaba a su esposa a ponerse

de pie.

Katherine se acercó a la cama y pasó a su nieta a su madre, donde

inmediatamente empezó a rebuscar el alimento. Eso les dio risa a todos.

—Te amo también, mamá. Estoy tan contenta de que estuvieras aquí —

Amy se emocionó. Katherine rozó un beso a través de sus mejillas y luego

caminó de la mano fuera de la habitación con su marido.

Los dos giraron en la esquina, los ojos de Joseph centellearon.

—Bien, Katherine… uno ya está, faltan dos. Me gusta ser abuelo y me

estoy volviendo codicioso ahora. Quiero nuevos bebés cada año durante los

próximos diez años o así —declaró él, como si de verdad obtuviera su

deseo.

—Ahora, Joseph. Admito que esto resultó bien, pero tú no te entrometerás

más en la vida de tus hijos. Ellos pueden encontrar a sus propias

compañeras y encontrar su propio camino —dijo ella severamente a su

marido, aun cuando supiera que era una batalla inútil. Joseph solamente

envolvió su brazo alrededor de su esposa, silbando una melodía mientras

Page 198: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

98

ellos se dirigían a su auto. Él ya tenía la novia perfecta elegida para su hijo

intermedio, Alex…

Page 199: 1.the billionare wins the game

Pág

ina1

99

Próximo libro

The Billionaire’s dance

Sinopsis

Joseph Anderson ha decidido que es el momento en que sus tres hijos

exitosos encuentren novias. Joseph quiere nietos para llenar su enorme

mansión, y él los quiere de inmediato. Tuvo éxito con el casamiento de su

hijo mayor y en este intrigante libro nos trae la historia de Alex y Jessica.

Alex es un soltero empedernido al que le encanta viajar por todo el mundo

y tener tantos romances como sea posible. Eso es hasta que conoce a

Jessica Sanders. Una noche con ella y está cambiando su punto de vista

Page 200: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

00

acerca de la soltería y comienza a pensar que la vida matrimonial es el

nuevo camino para él.

Jessica proviene de una familia rica, y ha tenido a muchos hombres

guapos que se han aprovechado del dinero de su familia. Cuando conoce al

confirmadísimo soltero y conocido playboy, Alex Anderson, ella desconfía

de su coqueteo, y trata de evitarlo a toda costa. Hasta que terminan

atrapados en un ascensor, y su miedo a la oscuridad en un reducido

espacio es mayor que el miedo al hombre con el que está atrapada.

Alex la consuela haciendo el amor eróticamente en el ascensor, y cuando

ella sale corriendo una vez que están libres, se aleja con ganas de más. Un

año más tarde, él descubre que es padre, y se asegura de que Jessica no

tenga más remedio que dejarlo hacer lo honorable. Ellos tienen pasión,

romance, amor y a la familia para guiarlos en medio de este caos.

Page 201: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

01

Sobre el autor: Melody Anne es la autora de la

popular serie Billionaire Bachelors,

y Baby for the Billionaire. Ella

también tiene una serie de Adulto-

joven; Midnight Fire y Moon

Midnight—Rise of the Dark Angel.

Ella ha estado escribiendo durante

años y publicó el 2011. Ella tiene

un título de licenciatura en

negocios, por lo que le encanta

escribir sobre fuertes y poderosos

empresarios. Cuando Melody no está

escribiendo, le gusta pasar tiempo

con su familia, amigos y mascotas.

Ella vive en un pequeño pueblo

que ama, y está involucrado en

muchos proyectos comunitarios.

Puedes visitar su sitio web en: www.melodyanne.com. Ella responde a

todas sus fans. También puedes unirte a ella en Facebook en:

www.facebook.com/authormelodyanne, o en twitter: @authmelodyanne.

Ella espera con interés tus opiniones y espera que disfrutes de sus

historias.

Page 202: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

02

Créditos Staff de Traducción

Moderadoras

Kachii Andree & Alyshia Cheryl

Traductores

Ale Rose Alyshia Cheryl

Auroo_J BUTY_MADDOX

Deby92 Liia!!

Kachii Andree Mona

PaolaGP Vafitv Xhessii

Staff de Corrección Moderadora

Alyshia Cheryl

Correctores

Alicadi Alyshia Cheryl

Catleo Cristinita <3

Curitiba Deyanira

Fher_n_n KatieGee Paola GP

Samylinda Xhessi

Revisión

Kachii Andree

Diseño

KatieGee

Page 203: 1.the billionare wins the game

Pág

ina2

03

¡Visítanos!

Traducido, corregido y diseñado en