Arqueologia Experimental en El Noreste de Mexico

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    CiENCiAUANLLNEA DEL TIEMPO

    HCTORCARLOSLAZCANOFERNNDEZ

    * Universidad Autnoma de [email protected]

    Arqueologaexperimental en elnoreste de Mxico

    El presente trabajo describe las actividades llevadas acabo entre 2000 y 2007, periodo en que fui titular delas clases de arqueologa y de arte prehispnico mexi-cano en la Universidad de Monterrey. Las fuentes deestas actividades son la etnohistoria y laetnoarqueologa; la primera, entendida como la his-toria de los no civilizados,1es decir, la historia de lospueblos sin historia; y la segunda entendida como elestudio etnogrfico de culturas vivas desde una pers-

    pectiva arqueolgica.2

    El instrumento que me permiti utilizar los cono-cimientos etnohistricos y etnoarqueolgicos fue laarqueologa experimental, una disciplina que pretendeentender lo que el hombre antiguo estaba haciendo.

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    Al reproducir antiguas condiciones, trata de hacer usode algunas armas y herramientas del pasado para ob-tener alguna informacin de esos objetos, sus inven-tores y poseedores,3otra posible definicin sera queconsiste en la replicacin de artefactos, elaboracinde hiptesis con respecto al uso de stos y la compro-

    bacin de dichas hiptesis. La arqueologa experimen-tal, una disciplina auxiliar de la arqueologa, y porende la antropologa, debe considerarse parte de lasciencias sociales.

    Este documento describe una serie de actividadesque incluyen la replicacin de artefactos prehistri-cos, as como su utilizacin en experimentos destina-dos a proporcionar un poco ms de informacin acer-ca del pasado remoto del noreste de Mxico.

    El tlatl

    El tlatl, un arma utilizada desde hace ms de veintemil aos,4bsicamente es un palo o vara del tamaodel brazo, con un gancho en un extremo para acomo-dar un dardo o proyectil y una agarradera en el otroextremo, que permite lanzar proyectiles a una distan-cia mayor.

    El tlatl fue y sigue siendo usado en muy diversoslugares; en algunas partes desapareci y resurgi conusos diferentes. En otras, no dej de usarse y se sigueutilizando ms o menos con los mismos propsitosque en el pasado, como en Australia y Alaska; en otraspartes ms desapareci de manera reciente, como enMichoacn (en algn momento del siglo XX).

    El tlatl. Se compone de una punta de proyectil, dardo o proyectil, lanzadera(la que se toma con la mano) y contrapeso.

    Como el arco, el tlatl consta de dos piezas: la lan-zadera y el dardo o proyectil. El dardo o proyectil secoloca sobre la lanzadera y se arroja con un movimien-to parecido al de una pelota de beisbol; el consenso esque funciona como una aplicacin de la palanca (unamquina simple),5 como se muestra en las siguientes

    ilustraciones:No se tiene conocimiento de si realmente evolu-

    cion a partir de la pica o lanza, tampoco hay eviden-cia de que el arco y la flecha sean una evolucin na-tural del tlatl. Sin embargo, al parecer picas, lanzas,tlatls y arcos y flechas aparecieron en ese orden; nofue una historia de simple reemplazo, sino de coexis-tencia pacfica, en la cual cambiaron los usos y finesde estos artefactos.

    Los materiales utilizados para la construccin detlatls son muy variados: hueso, madera, piedra, entre

    otros; cabe destacar que la preservacin de algunos deestos materiales es difcil; sin embargo, en Francia sehan encontrado ejemplares con una antigedad deunos veinte mil aos.6

    A diferencia de una pica o lanza, el tlatl tienemayor alcance (98 m alcanza la pica, frente a 258 mdel tlatl), pero sta es ms grande y de cerca puedeser ms efectiva, una pica o lanza es una arma menosespecializada, ms multipropsito; frente al arco yla flecha, el tlatl tiene menos alcance (la flecha puedealcanzar hasta 1000 m), pero mayor penetracin de-bido al tamao de los proyectiles.5 Debido a eso, al-gunos grupos de esquimales lo siguen usando en lacacera de mamferos acuticos, lo mismo que gruposde aborgenes australianos. En Michoacn, en parti-cular en el lago de Ptzcuaro, se us para cazar patoshasta los aos cuarenta del siglo XX.

    En la actualidad, se utiliza como auxiliar del co-nocimiento acadmico, de hecho se han diseado di-versos experimentos para replicar su uso, tamao, ve-locidad, alcance, capacidad de penetracin, certeza,efectividad, etc. Su uso tambin ha renacido comodeporte, incluso existe una asociacin mundial que

    incluye a diversos pases, entre los que se efectan com-petencias o campeonatos. Asimismo, y esto es impor-tante subrayarlo, en algunos estados de la Unin Ame-ricana se permite la cacera con tlatl.

    Si bien el tlatl aparece en la iconografa de lasculturas mesoamericanas como la maya, la tolteca, lateotihuacana y la azteca, y el nombre proviene de una

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    voz nhuatl que significa lanzadera, particularmen-te nos interesa hablar de ste en el noreste de Mxi-co, donde hay evidencia de su uso en varias fuentesarqueolgicas:1. Grabados en piedra que parecen ser imgenes que

    lo representan.2. Puntas de proyectil que diversos autores sealan

    como puntas de tlatl.3. Algunos ejemplares conservados en tumbas enCoahuila.

    Por otra parte, la iconografa rupestre muestra evi-dencia indirecta con las representaciones de faunacomo el venado: las astas, las huellas y, asociadas constas, representaciones de cuchillos, puntas de pro-yectil y tlatls.8

    En diversos lugares y momentos se han diseadoexperimentos como auxiliares en el estudio del pasa-

    do remoto; en el caso del tlatl, el propsito de losexperimentos ha sido obtener informacin acerca desu alcance, capacidad de penetracin y efectividad. Enlos aos ochenta, en frica se desarrollaron experi-mentos con el propsito de saber si proyectiles impul-sados por tlatl eran capaces de penetrar la piel deelefante; de alguna manera esto dara informacin desi en el pasado se habra usado de manera efectiva enmegafauna como el mamut. Los resultados fueronpositivos: perforaron la piel de estos animales conpuntas de proyectil de diversos materiales como obsi-diana y pedernal.9

    Arqueologa experimental en el noreste de Mxico

    Desde 2002, el Dr. William Breen Murray, el Lic.Francisco Ruiz y un servidor llevamos a cabo experi-mentos con tlatls. Asimismo, de 2000 a 2003 expe-rimentamos con pigmentos naturales (carbn, xido

    Ejemplos de tlatls.

    Cacera de patos en el lago de Ptzcuaro.7

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    zona, y los artefactos como las varas son simples yfciles de conseguir. A diferencia de los grabados, paraalgunos de los ingredientes utilizados en la elabora-cin de los pigmentos tal vez s se requieran conoci-mientos especiales de hierbas o sustancias que sirvanpara aglutinar y fijar los pigmentos en las superficies

    rocosas, posiblemente el curandero(a) o anciano delgrupo los preparara, pero la ejecucin podra ser unaactividad social no especializada.

    La lechuguilla

    En el caso de los textiles, se realiz trabajo de campoen el ejido de Los Fierro, a 40 km de Monterrey, en lafrontera con Coahuila, ah se observ el trabajo decorte, preparacin e hilado de la fibra del agave olechuguilla. Tambin se realizaron ejercicios para ta-

    llar la lechuguilla con piedras, con los cuales se esta-bleci que la piedra para trabajarla no debe tenermucho filo, pues de lo contrario podra cortar las ho-jas, no despulparlas. Adems, se constat que el arte-facto para despulpar requiere poco trabajo para su fa-bricacin, e incluso se puede improvisar con muchasde las piedras que abundan en la regin, puede seruna piedra con poco filo, plana de la parte de abajo,del tamao de la mano, entre ms pesada mejor. Asi-mismo, para apoyarse se puede usar un trozo de pielde animal, un tronco o incluso una piedra grande lisa;finalmente, el hilado o torcido de la fibra lo puedenrealizar una o dos personas sin ayuda de mquinas deningn tipo.

    La lechuguilla fue utilizada por los antiguos po-bladores del noreste de diversas maneras: como ali-mento, tal y como lo describe Alonso de Len: lo pre-paraban en barbacoa y hacan una masa para suconsumo. Tambin lo empleaban para obtener fibra yelaborar cuerdas y amarrar cosas.10

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    Otro uso que mencionan algunos autores es el delos quiotes o inflorescencias de la lechuguilla paraelaborar dardos para el tlatl.11Muchas de esas varasson rectas, las protuberancias no son difciles de qui-tar, son ms gruesas de un lado, lo que les da caracte-rsticas como los aeroplanos modernos (ms gruesos

    al frente y delgados en la parte de atrs); es fcil colo-car un astil en la punta, pues el interior es suave, y enla parte de atrs es fcil hacer un hoyo para engancharen la lanzadera. Una vez que los quiotes estn biensecos, no son muy pesados y funcionan bien con doso tres plumas; adems son fciles de reparar cuando sedaan y no requieren mucho trabajo de fabricacin omantenimiento. No resulta extrao entonces que de-bido a los mltiples usos de esta planta, los antiguospobladores del noreste la tuvieran en gran estima.

    La cultura material es lo poco que nos queda delos antiguos pobladores del noreste de Mxico, el tlatl,

    los petrograbados, las pinturas rupestres y el uso delas fibras son parte de esa cultura material de los anti-guos cazadores-recolectores del noreste. Por lo tanto,es necesaria la preservacin de esos conocimientos, yla arqueologa experimental es uno de los medios quetenemos a nuestro alcance para lograr este objetivo.Despus de haberlas esclavizado, marginado y por finexterminado, tratar de recuperar y conservar algo deesas culturas es lo menos que podemos hacer.

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