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revista militar

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    015AS&

    A 10 aos de Antuco

  • En esta edicin...En esta edicin...Director ResponsableCoronel Cristbal de la Cerda RodrguezJefe del Departamento Comunicacional

    Comit EditorialTeniente Coronel Ral Rosas lvarezJefe Seccin Informacin Pblica

    EditoresHermes Lpez BaezaLorena Soto Guzmn

    PeriodistasMaite Jara ZuazagoitaCarolina Carrillo RuizConsuelo Ebner BustosMara Ignacia Guzmn CifuentesRodrigo Beraud Guzmn

    Colaboradoresscar Vargas MedinaVernica Sapiains HerreraIgnacio Vallmitjana Espina DiseoJhonny Vega Lobos

    FotgrafosJuan Muoz NavarroRamn Otrola ValenciaMiguel Ferrada Martnez

    Direccin y Administracin:Avenida Almirante Blanco Encalada N 1724Santiago Fono: 2269 34 458 Fax 2269 34 273

    Revista fundada en diciembre de 1974.El material grfico de la revista no podr ser reproducido salvo expresa autorizacin del Ejrcito de Chile.

    Registro de Propiedad Intelectual N 89.922

    PROHIBIDA SU VENTA

    AS&Puesto de mando ........................................................................................................... Pg. 3

    Curso de Guerra Especial para Cuadro Permanente ......................................................... Pg. 4

    Reserva Institucional, comprometidos con la Patria .......................................................... Pg. 7

    Cifras positivas para el Sistema de Salud del Ejrcito ....................................................... Pg. 11

    Carrera acreditada de oficial de Ejrcito .......................................................................... Pg. 16

    135 aniversario del "Asalto y Toma del Morro de Arica" ................................................ Pg. 18

    Ejrcito recuerda tragedia de Antuco ............................................................................... Pg. 20

    Puesta en marcha de material M109 ............................................................................ Pg. 32

    Cuando el esfuerzo, tenacidad y entrega rinden .............................................................. Pg. 34

    Entrenamiento fsico en funcin del combate .................................................................. Pg. 38

    Si volviera a nacer, volvera a ser militar ...................................................................... Pg. 41

    Nuestro compromiso: La Familia Militar .......................................................................... Pg. 44

    Veterano de tres guerras, Top One .............................................................................. Pg. 48

    Breves ............................................................................................................................ Pg. 50

    Deportistas de combate en Toronto 2015 .................................................................... Pg. 52

    Al Gran Mrito Ejrcito de Chile .................................................................................. Pg. 54

    Militar las 24 horas... ...................................................................................................... Pg. 55

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  • Puesto de mandoArmas & Servicios

    Un encuentro entre el Ejrcito y la comunidad

    Una vez ms los ariqueos se reunieron el 7 de junio en los faldeos del histrico pe-n, para conmemorar con un simblico acto el 135 aniversario del Asalto y Toma de Morro de Arica. Junto con recordar la gesta ocurrida en 1880, la nortina ciudad se volc a las calles a travs de sus diversas organizaciones y en especial, el Ejrcito, por medio de la VI Divisin, para celebrar adems el da de las Glorias del Arma de Infantera.

    Ceremonias similares se realizaron en todas las guarniciones militares del pas, re-cordando tanto la pica gesta de Arica como todas aquellas oportunidades en que el campo de batalla o en la preciada paz que conquistamos, el Ejrcito se ha hecho presente para permanecer siempre junto a nuestros conciudadanos.

    Se trat entonces de que las nuevas generaciones, herederas de aquellos infantes que combatieron en ese Morro hace 135 aos, en la actualidad, con un sentido de vene-rado respeto, fidelidad y honor, renueven el desafo de estar a la altura de aquellos apreciados hroes y soldados ilustres, en un compromiso permanente con la Patria; el mismo respecto del cual dieron fiel testimonio los 45 soldados que perdieron la vida en la tragedia de Antuco, a quienes recordamos en esta edicin.

    En sintona con lo que la patria nos demanda, este tradicional acto cvico-militar fue una instancia de encuentro y nuevo testimonio de reconocimiento ciudadano hacia nuestra institucin, as como un mensaje claro del compromiso permanente del Ejr-cito con sus races, valores, tradiciones y capacidades, puestas siempre el servicio de la grandeza de Chile.

    Humberto Oviedo ArriagadaGeneral de Ejrcito

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  • Curso de Guerra Especial para Cuadro PermanenteClases lderes de un proceso de cambioDesde abril de este ao se incorpor, a la lnea de carrera del cuadro perma-nente el Curso de Guerra Especial con mencin Liderazgo de Combate, diseado para la preparacin y entre-namiento de los clases que comandan pequeas unidades.

    04:45 de la madrugada del viernes 17 de abril de 2015 y el Cabo Segundo Ale-jandro Pieda Argomedo, del Regimien-to de Infantera N 21 Coquimbo, se levanta para su segunda semana en el curso de Guerra Especial. En 15 minu-tos deber equiparse con 33 kilos, para una marcha de 14 kilmetros junto a 59 camaradas, que forman parte de la pri-mera versin, dirigida a los clases que se desempean como comandantes en la Fuerza Terrestre (FT) o en escuelas.

    Formar parte de la primera promo-cin de cabos segundo del curso, es emocionante, un verdadero honor y, adems, reviste un gran desafo en lo personal y profesional, manifiesta orgulloso el Cabo Segundo Pieda. Agrega que hemos tenido un entre-namiento duro e instrucciones exigen-tes, en beneficio de nuestra formacin. Adems, que el curso est centrado en el liderazgo es fundamental para nosotros los instruidos, porque lle-garemos a nuestras unidades como instructores, sabiendo que la palabra educa, pero el ejemplo arrastra.

    Planificado por la Divisin Educacin (DIVEDUC) y ejecutado por la Es-cuela de Paracaidistas y Fuerzas Espe-ciales (ESCPAR), el Curso de Guerra

    Especial con mencin en Liderazgo de Combate, tiene por objetivo fo-mentar y reforzar las competencias de los integrantes del cuadro permanente para ejercer como comandantes de pe-quea unidad, marcando un hito en la institucin y en la preparacin profe-sional de los clases de Ejrcito.

    Est enmarcado en el mejoramiento continuo de la carrera profesional del cuadro permanente, fue creado para reducir la brecha de los procesos edu-cativos en la preparacin de la fuerza, y as contar con personal capacitado para liderar una unidad, pero tambin ampliando la gama del conocimiento a todo el personal.

    Pgina N 4AS&

  • Nuevos lderes

    Disciplina, honor, autocontrol, respe-to, trabajo en equipo, autoconfianza, perseverancia, motivacin, seguridad y persuasin son atributos fundamen-tales en un lder, cualidades que el personal del Ejrcito de Chile traba-ja constantemente, pero que con este nuevo curso se regulan y norman, de acuerdo a los requisitos que la organi-

    Eje Entrenamiento:Entrenamiento Fsico.Entrenamiento Individual de Combate. Marcha. Tiro. Orientacin. Primeros Auxilios. Telecomunicaciones. Combate cuerpo a cuerpo.

    Lder

    Carcter: Disciplina Lealtad Honor Respecto

    Intelecto: Agilidad mental Experticia Tacto CriterioEjemplo personal: Capacidad fsica Seguridad Porte militar

    Desarrollar un ambiente positivo y ser un digno representante de la profesin

    zacin debe adecuar, para garantizar que sus integrantes tengan acceso a una preparacin ntegra y actualizada, formando capital humano competente y comprometido con los valores y vir-tudes institucionales, todo ello basado en su tradicin bicentenaria.

    La Ordenanza General del Ejrcito define el liderazgo militar como el arte de persuadir a los subalternos,

    para lograr de ellos adhesin a un ideal, de manera que, provistos de un propsito, direccin y motivacin, de-sarrollen una tarea, cumplan una mi-sin y mejoren la organizacin, sin-tindose al mismo tiempo, satisfechos y realizados.

    En el curso los atributos del lder son potenciados bajo un entrenamiento duro, exigente y riguroso, que los pre-para para guiar tropas en el marco tc-tico dentro de las pequeas unidades encuadradas en la FT.

    Slo los mejores

    La capacitacin se realiza en un am-biente de conflicto, porque es el esce-nario ptimo para que los alumnos de-muestren fuerza espiritual, resiliencia, carcter, capacidad para sobreponerse a la fatiga y disciplina, entendiendo que en este ambiente es donde se ejer-ce la profesin militar.

    El sistema de evaluacin, en el que los alumnos se desenvuelven durante poco ms de un mes, fue desarrolla-do por un grupo multidisciplinario, integrado por siclogos y asesores educacionales de la DIVEDUC, quie-nes disearon una evaluacin de dos

    Eje Tcnico: Tcnicas de Combate:

    Tcnica a nivel escuadra bsico. Tcnica a nivel escuadra avanzado. Tcnica a nivel escuadra en el com-

    bate urbano.

    Eje Liderazgo: Mando y Conduccin.

    Planificacin. Liderazgo en ataque a una localidad. Ataque nocturno. Ejercicio Final Aplicado.

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  • pruebas psicolgicas, adems de una entrevista personal.

    Con esas herramientas se obtuvo in-formacin sobre recursos, habilida-des, desempeo y experiencia profe-sional de cada uno de los postulantes, permitiendo garantizar que el alumno fuera una persona estable emocional-mente, tranquila y capaz de enfrentar la realidad con seguridad, principal-mente en situaciones con alto nivel de estrs.

    Adems del examen psicolgico se realizaron pruebas de suficiencia fsi-ca, una marcha de 10 kilmetros con 2da. lnea de equipamiento y un exa-men de Procedimiento de Conduccin de Tropa (ejercicio terico en la carta a nivel escuadra).

    Cada uno de los postulantes se en-contraba en su quinto ao de egreso,

    encuadrado en una unidad con tropa o alumnos, clasificado en lista uno o dos en los ltimos tres perodos y con certificacin de salud, pruebas fsicas y de habilidades bsicas de combate.

    A esta primera versin del Curso de Guerra Especial mencin Liderazgo de Combate para Clases de Armas 2015, postularon 145 profesionales que cumplan con los requisitos, que-dando seleccionados 60.

    Lderes al 2026

    El Ejrcito y sus circunstancias ac-tuales exige tener lderes en todos los mbitos. Por esa razn, a travs del tiempo, la institucin perfecciona sus procesos formativos y de capacita-cin, para contar con lderes capaces de otorgar el soporte que requiere la FT.

    Para dar cumplimiento a este proceso es fundamental el empleo de nuevas tecnologas, que se facilitan median-te el uso de la educacin a distancia, que sumada a la instruccin y entre-namiento, permitir contar con una fuerza preparada para enfrentar los desafos que el pas demande.

    Mi experiencia como alumno ha sido muy gratificante, participar de un curso bien diseado, con instructores muy preparados y con un alto nivel de exigencia nos ha permitido descubrir nuevas capacidades y habilidades, concluye finalmente el Cabo Segundo Alejandro Pieda, luego de terminar el perodo de entrenamiento y agrega que lo enseado por los instructores generar un impacto en nuestra ca-rrera, as como nuestro desafo ser influir positivamente en la carrera de nuestros instruidos como lderes de los lderes del futuro.

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  • Comprometidos con la Patria

    Reserva Institucional

    8.110 hombres y mujeres son los que integran la Reserva Institucional, son voluntarios y tienen un fuerte compromiso con la Patria. Cada sbado, luego de una semana de trabajo y responsabilidades, cambian su terno, corbatas, tacos y maquillaje por una

    tenida de combate, para realizar jornadas de instruccin y entrenamiento militar.

    Oficiales y cuadro permanente reservistas del Regimiento de Infantera N 1 Buin entregando ayuda en Copiap.

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  • La Reserva del Ejrcito cuenta actual-mente con 49 Unidades Base de Mo-vilizacin (UBMs) en distintas ciu-dades del pas, donde los voluntarios son preparados y organizados para su desempeo en la Fuerza Terrestre.

    A partir de 2014 la administracin de la reserva se comparte entre el COP y el COT.

    El COP ejecuta el proceso del ciclo del personal (ingreso, mantencin, egreso, administracin de la reserva)

    y asegura que se disponga de un re-curso humano adecuado en calidad y cantidad en las unidades. Algunas de sus tareas son la regularizacin y con-trol de ascensos, el proceso de califi-cacin, reconocimientos y beneficios, entre otras. Adems, prximamente se crear una Base de Datos de la Reser-va Militar.

    Por otra parte, el COT asumi los pro-cesos de instruccin y entrenamiento, y su respectiva evaluacin para de esta manera incrementar las capacida-

    des de la reserva. En el segundo se-mestre de 2015 el objetivo es instruir a 500 reservistas adscritos, correspon-dientes a 12 UBMs de la institucin, a travs del Sistema de Educacin a Distancia y mediante el proceso de autopreparacin, concentrados en 4 cursos en lnea.

    Los cursos abiertos para el presente ao son: tcnicas de cereo del arma, nudos y ataduras, uso de cartas y br-jula, primeros auxilios en combate y metodologa de la instruccin.

    Plan de Accin para la Reserva

    Para la institucin la Reserva es de extrema importancia, y es por lo cual a travs del Plan de Desarrollo Estratgico del Ejrcito al 2026 se pretende lograr una dependencia realista de la movilizacin. Para ello se han establecido una serie de tareas en el Plan de Accin 2015 2018 Orca:

    Realizar un estudio sobre la organizacin y rol de la reserva militar institucional el ao 2016.

    Elaborar un estudio para que en situaciones de crisis la reserva sirva tanto para los fines del rea estratgica de la defensa, como tambin en tiempo de paz, para actividades de proteccin civil, como asimismo en la seguridad y cooperacin internacional.

    Efectuar un trabajo con la Direccin General de Movilizacin Nacional para presentar modificaciones a la Ley de la Reserva, para contar con un marco legal al 2016.

    Proponer al Comando General del Personal un anlisis, para incorporar a partir del ao 2016, una reserva de 4.000 efectivos.

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  • Cabo de Reserva Francisco Oyarzo Paredes corrige a su escuadra de soldados de reserva dentro de la instruccin de Ejercicios de Escuela, en el Regimiento de Infantera N 1 Buin

    AS&Pgina N 9

  • Orgullo de ser reservistaJorge Medina, es un periodista de la ciudad de Copiap, quien por su fuer-te compromiso con la patria ingres a la reserva del Ejrcito. Hoy es alfrez y pretende ascender este ao a subte-niente, en su querido Regimiento de Infantera N 23 Copiap, donde realiz su instruccin y colabora per-manente. Para el alfrez Medina este regimiento es cuna de hroes, ya que es heredero de los gloriosos Batallones de Atacama, que estaban compuestos por reservistas, lo que le produce un orgullo especial al saber que los reser-vistas de esa parte del pas son parte de la historia en las victorias del Ejrcito.Haber ingresado a la Reserva le da la oportunidad de aportar sus conoci-mientos, acercar a la institucin con

    la comunidad y apoyar al personal en cualquiera situacin donde requieran de su aporte profesional. Y as ha sido en distintas oportunidades ya que en su tiempo como reservista le han tocado muchas experiencias como el Rescate de los 33 de Atacama, servir como en-lace con los medios de comunicacin de la regin, asesorar comunicacional-mente a varios comandantes de esa uni-dad, y ahora ltimo, haber apoyado la gestin del Jefe de la Defensa Nacional para la Regin de Atacama, General de Brigada Rafael Fuenzalida Carmona, luego de los aluviones que afectaron al norte del pas. El alfrez Medina considera que la Reserva es una real oportunidad de po-der servir a la patria y en especial para acortar las brechas entre la civilidad y los militares.

    Cmo ingresar a la reserva?Para postular a la Reserva Militar debe dirigirse a la Unidad Base de Movilizacin ms cercana a su domicilio o de su

    preferencia, tomar contacto con la Seccin 3ra. Operaciones o comunicarse con los telfonos que encontrar en cada uno de los Centros de Reservistas, donde le indicarn si existen vacantes, antecedentes y documentacin que debe presentar. Para mayor informacin ingresar a la pgina web de la reserva http://reserva.ejercito.cl/index.html, donde podr encontrar las UBM.

    Requisitos: Ser chileno (a). Mayor de edad. Con o sin valer militar (con o sin servicio militar). Salud compatible (evaluado por un mdico de la Unidad Base de Movilizacin). Disponer de tiempo e inters para asistir regularmente a las citaciones a instruccin (das sbados). Presentar documentacin exigida

    La Reserva Militar se sustenta en el alto espritu y vocacin de servicio de sus integrantes, ya que sus actividades no son remuneradas

    y las actividades se llevan a cabo los das sbados

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  • Cifras positivas para el Sistema de Salud del Ejrcito

    La incorporacin del copago, el cambio cultural en los beneficiarios y otras iniciativas han sido factores fundamentales para optimizar los recursos destinados a la salud de los integrantes de la institucin.

    AS&Pgina N 11

  • Desde el 2013 el Sistema de Salud del Ejrcito (SISAE) ha venido ejecutado una serie de medidas estructurales, destinadas a mantener los niveles de coberturas y beneficios, diseadas con el objetivo de mejorar la sustentabili-dad financiera.

    Un factor fundamental para adoptar-las fue el problema que generaba una creciente demanda, que presentaba n-dices de 5,6 atenciones anuales de los usuarios del SISAE en comparacin a las 2,4 atenciones anuales de los bene-ficiarios de FONASA.

    Esta situacin, insostenible financie-ramente, pona en riesgo, por una par-te, al Fondo de Salud al no poder fi-nanciar la demanda por prestaciones, y por otra, la imposibilidad de mante-ner un importante nivel de coberturas y beneficios para los afiliados.

    Dentro de estas medidas cabe men-cionar el aumento en el aporte de los Fondos Solidarios, que permiti incorporar nuevas coberturas y be-neficios adicionales, tales como con-sulta de libre eleccin, ciruga lsik, descuento adicional de medicamentos ambulatorios (20% adicional) y co-bertura catastrfica, entre otros.

    Tambin se establecieron las Macro Zonas de Salud, medida que ha permi-tido la administracin descentralizada del sistema y el adecuado manejo de las derivaciones. Las Macro Zonas de Salud son nueve, ubicadas en: Arica, Iquique, Antofagasta, Santiago, Ran-cagua, Concepcin, Valdivia, Coyhai-que y Punta Arenas.

    Adems, se determin la diferencia entre el arancel Ejrcito (monto mximo que el fondo puede pagar) y el valor prestacin, que corresponde al costo real de las atenciones. La dife-rencia entre ambos valores es de cargo

    de los beneficiarios. Sin embargo, y con la finalidad de apoyar el financia-miento del pago adicional, se bonifica un determinado porcentaje a travs de los Fondos Solidarios, especialmente en prestaciones con mayores diferen-ciales como las hospitalarias.

    El copago constituy una de las medi-das de mayor impacto, pues introdujo un cambio cultural, especialmente en los beneficiarios en servicio activo, modificando uno de los viejos para-digmas desde los inicios del SISAE, que era el concepto de gratuidad.

    La incorporacin de estas medidas ha tenido notorios efectos positivos en los Fondos de Salud y especialmente en el Fondo de Medicina Curativa, alcan-zando resultados como un adecuado control de la demanda, equilibrio fi-

    nanciero por parte del ente asegurador y de la Red de Instalaciones de Salud, mantenimiento e incremento de cober-turas y beneficios asociados a los Fon-dos de Salud y, lo ms importante, asi-milacin por parte de los beneficiarios de ese cambio cultural, incorporando al copago como factor clave para la sustentabilidad financiera del sistema.

    En el perodo 20122013 la demanda present una disminucin del 6,58% y del 7,99% en 20132014. Asimismo, la Red de Instalaciones de Salud present un aumento de sus ingresos por Co-pagos del 7,09% en 20122013 y del 12,91% durante 2013 2014. Son ci-fras positivas que marcan la tendencia de ir fortaleciendo el sistema, gracias a las medidas adoptadas y que de seguro permitirn entregar otros beneficios a los usuarios en un futuro cercano.

    Ejemplo de CopagoPago por Diferencia Arancelaria Titular Activo,

    Consultas Ambulatorias

    Descripcin Arancel institucionalPrecioHMS Bonificacin Copago

    Consulta Mdica Electiva $ 8.510 $ 10.187 $ 8.510 $ 1.677

    Consulta Mdica $ 11.710 $ 14.003 $ 11.710 $ 2.293

    Consulta Mdica Especialidades $ 13.070 $ 15.685 $ 13.070 $ 2.615

    Consulta Mdica de urgencia $ 16.120 $ 19.292 $ 16.120 $ 3.172

    Pgina N 12AS&

  • Nuevos beneficios en el

    SISAEUn nuevo beneficio tienen los usua-rios adscritos al FOSAFE (Fondo Solidario del Personal en Servicio Activo) y Fondo Complementario de Salud (Fondo Solidario del Personal en Condicin de Retiro) consisten-te en la cobertura para Sesiones de acupuntura en los Hospitales Milita-res de Santiago y del Norte. La pres-tacin opera va reembolso y con un tope anual por beneficiario de hasta 1,5 UF, excluyndose la consulta pre-via e insumos asociados.

    Para personal en retiro y sus cargas fa-miliares (cnyuges), mujeres con 40 aos y ms de edad y hombres con 50 aos y ms, a partir de mayo del 2015 se estableci un 100% de cobertura a un Programa de Salud Preventivo, que se materializ inicialmente en el Hospital Militar de Santiago (HMS), hacindose extensivo progresivamen-te a las distintas regiones del pas.

    Estos Programas de Salud (ver recua-dro), a travs de cuatro tipos de ex-menes, detectaran en forma precoz factores de riesgo modificables (ta-baquismo, hipertensin arterial, dis-lipidemia, obesidad, sedentarismo), problemas de salud, as como la pre-diccin de la prdida de funcionalidad en el adulto de 65 aos y ms.

    Programa de salud preventivo

    Examen Fsico:

    Constitucin y estado nutritivo (peso, talla, ndice de masa corporal y circunferencia de cintura)

    Presin Arterial

    Pulso Arterial Radial

    Temperatura

    Respiracin

    Exmenes de Laboratorio:

    Glicemia

    Colesterol Total o Perfil Lipdico

    Hemograma y VHS

    Antgeno Prosttico

    Promocin de la Salud de Factores Protectores de la Salud (Consejera):

    Entregado por cualquier profesional del equipo de salud.

    Estilos de Vida

    Tabaquismo

    Alimentacin Sana

    Evaluacin de la Funcionalidad de las personas de 65 aos y ms:

    Evaluacin y aplicacin para Diagnstico Funcional:

    ndice de Barthel (Instrumento que mide la capaci-dad de la persona para la realizacin de diez activi-dades bsicas de la vida diaria, obtenindose una estimacin cuantitativa del grado de dependencia del sujeto).

    Minimental Abreviado (Instrumento que permite en forma sencilla evaluar funciones como: orientacin, memoria, lenguaje, capacidad de seguir instruccio-nes y capacidad visuoconstructiva).

    Escala de Depresin Geritrica.

    Pgina N 13 AS&

  • Potenciando el primer nivel de

    atencinEl SISAE pretende lograr un modelo de atencin integral capaz de posi-cionar al paciente en un nivel central, considerando el ambiente en que se encuentra inserta principalmente su familia.

    Para lograr ese objetivo, entre otros aspectos, se necesita potenciar el pri-mer nivel de atencin, que en cifras de la Organizacin Mundial de la Salud (OMS) debera resolver un 80% de las enfermedades.

    El primer nivel de atencin se desa-rrolla en tres tipos de instalaciones; las primeras se denominan Centros Mdicos Militares y estn ubicados en Santiago. El segundo tipo son los Sub Centros Mdicos y, finalmen-te, el tercer tipo, est representado por las Enfermeras Regimenta-rias(ER) insertas en las unidades del Ejrcito a lo largo del pas (ver figura piramidal).

    Las ER son unidades bsicas de aten-cin. En tiempos de paz desarrollan acciones de salud que integran a bene-ficiarios pasivos y sus cargas. Cuentan con un oficial de Sanidad (mdico), que atiende consultas de medicina ge-neral, y un oficial de Sanidad Dental (dentista), que atiende consultas de odontologa general.

    Centros Mdicos Militares (CMM)

    Sub Centros Mdicos (SCM)

    Enfermeras Regimentarias (ER)

    En una primera etapa seis de las 51 ER con que cuenta el Ejrcito, sern remo-delas en infraestructura y optimizacin del equipamiento mdico bsico, alcan-zando los estndares necesarios. Estas pertenecen al Regimiento Reforzado N 24 Huamachuco, 2da. Brigada Aco-razada Cazadores, Regimiento de In-fantera N 16 Talca, Regimiento de Infantera N 8 Tucapel, Regimiento Reforzado N 5 Lanceros y Regi-miento Reforzado N 11 Caupolicn. Como medida de fortalecimiento con-

    Primer Tipo de instalacin

    Segundo Tipode instalacin

    Tercer Tipode instalacin

    tarn con Enfermeras Universitarias y la contratacin de personal conforme a las necesidades del Modelo de Salud Familiar. Quedarn pendientes para el presente ao otras siete enfermeras.

    Paralelamente se encuentran en desarro-llo proyectos de equipamiento tecnol-gico para el Hospital Militar Santiago y el Hospital Militar del Norte (Anto-fagasta), incluyendo en este ltimo el mejoramiento de las dependencias de la urgencia y servicio de hotelera.

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  • Salud para el Ejrcito y la

    comunidad, en marcha

    Para fortalecer la atencin mdica y dental del personal y de comunidades aledaas, se ha iniciado la construccin del Centros Clinico Militar (CCM) Arica. Asimismo, durante el ltimo trimestre se pretende construir un nue-vo Centro de Rehabilitacin Infantil aledao al HMS. Complementariamen-te, se continuarn desarrollando traba-jos para mejorar los CCM Iquique, Cordillera y Maip, adems de iniciarse la formulacin de un proyecto para el traslado del rea dental y admi-nistrativa del CCM Punta Arenas al Hospital de las Fuerzas Armadas.

    Telemedicina, una realidad

    realizando la evaluacin tcnica para implementacin. La teleconsulta en Psiquiatra, se dar inicio durante la primera semana del mes de agosto.

    El programa fue creado con la finali-dad de acercar a los beneficiarios que residen en zonas con barreras geo-grficas a las instalaciones de salud, o en zonas que presenten ausencia de especialidades, permitiendo aumentar la cobertura del SISAE y dar alter-nativas a los usuarios alejados de los principales centros asistenciales insti-tucionales.

    Otra iniciativa es la implementa-cin de la Telemedicina, sistema de atencin va videoconferencia que comenz en septiembre del ao 2014, que se encuentra disponible en la especialidad de dermatologa en los CCMs Valdivia y Coyhaique.

    El Comando de Salud el Ejrcito, ad-quiri dos dermatoscopios para opti-mizar las atenciones. Se trata de apa-ratos que permitirn emitir imgenes ms concluyentes al mdico a cargo, dirigida en lnea desde el HMS.

    La telemedicina tambin presenta como novedad su utilizacin para la atencin en Psiquiatra, especialidad que prximamente llegar al CCM Iquique, donde actualmente se est

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  • Carrera Proceso aprobadoLa Comisin Nacional de Acredita-cin (CNA) comunic a la Escuela Militar la decisin de acreditar, por tercera vez, la carrera de Oficial de Ejrcito, por un nuevo perodo de cin-co aos, hasta mayo de 2020.

    La Acreditacin es un proceso volun-tario al que se someten las institucio-nes de educacin superior autnomas del pas, as como las carreras de pre-grado, programas de postgrado y es-pecialidades del rea de la salud que ellas imparten, para contar con una certificacin de calidad de sus proce-sos internos y sus resultados.

    La Escuela inici el proceso de reacreditacin de la carrera en el mes de junio de 2014, con un extenso estudio de evaluacin interna, que abarc to-das las reas acadmicas del progra-ma de formacin profesional del ofi-cial de Ejrcito.

    En esa evaluacin se someti a an-lisis, mediante criterios e indicadores de calidad determinados por la CNA, a todas las reas y procesos de for-macin, tanto militares y acadmicos generales, como de instruccin y de-sarrollo de valores. Ese estudio dio origen a un informe de autoevalua-cin que fue entregado a la CNA para

    su anlisis y observaciones. Posterior-mente en febrero de 2015, una comi-sin de acadmicos en representacin de la CNA, realiz una visita de eva-luacin a la Escuela Militar, con el propsito de constatar en terreno lo informado y confirmar la realidad y calidad de la formacin profesional de la carrera.

    Finalmente el directorio de la Comi-sin, ante el informe de autoevalua-cin realizado por la Escuela y las apreciaciones del Comit de Pares Evaluadores, resolvi, por unanimi-dad de sus consejeros, otorgar un pe-rodo de acreditacin por cinco aos.

    de oficial de Ejrcito

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  • Cabe indicar que hay dos tipos de acreditacin. La primera es la Institucional, que certifica el cumplimiento del proyecto de la institucin y la existencia, aplicacin y resultados de mecanismos eficaces de autorregulacin y de aseguramiento de la calidad. La segunda es la de Carreras, que certifica la calidad de stas en funcin de sus propsitos declarados y de los criterios establecidos por las respectivas comunidades acadmicas y profesionales.

    Durante 2014 se dieron curso a 267 pro-cesos de pregrado, correspondientes a la evaluacin de 252 carreras impartidas por instituciones de educacin superior. A pesar de que la acreditacin es volun-taria en nuestro pas, slo el 44% de la matrcula de pregrado (carreras) estn actualmente acreditadas, y la carrera de Oficial de Ejrcito es una de ellas.

    Esta calificacin constituye una cer-tificacin pblica que indica que los procesos de formacin realizados, la excelencia de sus docentes, la accin doctrinaria de sus oficiales, la idonei-dad de sus directivos y la totalidad del personal que, directa o indirectamente est relacionado con la tarea educativa del cadete, cumplen con los criterios y estndares que el Estado, a travs de la CNA, ha determinado como funda-mentales y prioritarios para la forma-cin de su capital profesional.

    Adems de cumplir con la formacin de un oficial de calidad para el Ejrcito, la

    Escuela Militar demuestra que este pro-fesional tiene similares niveles de cono-cimientos cientficos, culturales y huma-nistas que otros especialistas del pas.

    Lo anterior es de gran importancia, si se toma en consideracin que la de ofi-cial de Ejrcito es la nica carrera de las Fuerzas Armadas en alcanzar su acreditacin por tercera vez consecu-tiva, implicando una responsabilidad complementaria al constituirse en los representantes de la verdadera calidad educacional con que se desarrolla la compleja educacin del personal de la Defensa Nacional.

    En la Escuela Militar los cadetes pueden organizar su tiempo y decidir cules son sus necesidades, si estudiar o entrenar (Sala de estudios de la Escuela Militar)

    Cuando una institucin, programa o carrera est acreditado, cuenta con la certificacin respecto de la implementacin de sus mecanismos

    de aseguramiento de calidad y sus resultados. Adems, los alumnos nuevos podrn acceder a financiamiento estatal o recursos que

    cuenten con garanta fiscal para el financiamiento de sus estudios.

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  • La ciudad de Arica y el Ejrcito conmemoran el 135 aniversario del

    "Asalto y Toma del Morro de Arica"

    Nuevamente Arica se visti de gala para celebrar una de las proezas ms heroicas de nuestra historia; cientos de ariqueos se volcaron a la

    Plaza Bernardo OHiggins para recordar los 55 minutos de

    gloria, en que se conquist el inexpugnable pen.

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  • La ceremonia para conmemorar el 135 aniversario del Asalto y Toma de Morro, fue encabezada por el Mi-nistro de Defensa Nacional, Jos An-tonio Gmez U., acompaado por el Comandante en Jefe del Ejrcito, Ge-neral Humberto Oviedo A., en la ciu-dad nortina.

    Junto con recordar la gesta heroica ocurrida en 1880, la VI Divisin de Ejrcito, organizaciones e institucio-nes conmemoraron el Da de las Glo-rias del Arma de Infantera, en el acto que convoc tambin al Intendente de la Regin de Arica y Parinacota, Emi-lio Rodrguez P., alcaldes de Arica y de Putre, adems de parlamentarios y la comunidad.

    El encuentro se inici con los hono-res de reglamento y el izamiento del pabelln nacional e interpretacin del himno patrio, que dio paso a la inter-vencin del Comandante del Regi-miento Reforzado N 4 Rancagua, Teniente Coronel Jean Pierre Iribarra F., sobre la gesta heroica. Frente a ustedes forman los batallones de In-fantera Rancagua, Huamachuco y Bulnes, herederos de aquellos infan-tes que combatieron en este Morro hace 135 aos, y con humildad acep-tamos el desafo de estar a la altura de aquellos hroes, indic.

    En la ocasin, el Comandante en Jefe del Ejrcito entreg las medallas y trofeo a los integrantes del represen-tativo vencedor de la Competencia de Patrullas que realiza cada ao la VI Divisin, y que este ao y por terce-

    ra vez obtuvo el trofeo el equipo del Regimiento Reforzado N 24 Hua-machuco, al mando del Teniente Nicols Valderrama.

    Tras la entonacin del himno del Arma Infantera, y de un esquinazo del Club de Huasos de Arica, se reali-z el desfile con ms de mil efectivos de las Fuerzas Armadas y de Orden, donde participaron delegaciones del Regimiento Reforzado N 4 Ranca-gua y del Regimiento Reforzado N 24 Huamachuco; adems de una unidad de formacin del Buque Es-cuela Esmeralda, junto con organiza-ciones de la comunidad de Arica.

    El Comandante en Jefe destac que siempre volver a Arica es muy re-confortante, especialmente para un militar, el haber compartido con la

    representacin del Ejrcito en la zona estos das, y ver este testimonio de la participacin de la fuerza de la ciuda-dana es el compromiso para Arica y el mensaje para Chile, puntualiz.

    En la ocasin, el Ministro de Defensa manifest que un gran desfile, una celebracin muy importante para Chi-le y con un marco impresionante que es el Morro de Arica, y contento de haber acompaado a Arica y al Ejr-cito, y de haber visto a la comunidad marchando y celebrando.

    En tanto, el 6 de junio, un responso y una alegora patritica A los Hroes del Morro fueron las actividades a las que se sum la comunidad y las autoridades encabezadas por el Mi-nistro de Defensa y Comandante en Jefe.

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  • Una maana que decan iba a llover. Haca fro pero finalmente, a medio-da, sali el sol. As fue el 18 de mayo en la ciudad de Los ngeles, durante la ceremonia a los Mrtires de An-tuco, en el Regimiento Reforzado N17 Los ngeles, donde se reunie-ron para conmemorar los 10 aos de la tragedia, padres, madres, hermanos y otros familiares de los soldados del 2005, junto al Ministro de Defensa Nacional, el Comandante en Jefe del Ejrcito y otras autoridades naciona-les, institucionales y regionales para recordar y nunca olvidar a aquellos jvenes que fallecieron en la montaa en el cumplimiento del deber.

    Pese al fro y lgica tristeza, en el ambiente haba una sensacin de tran-quilidad y paz. La msica de fondo que acompa la entrega de medallas recordatorias a padres y familiares de los 44 soldados conscriptos y el sar-gento segundo fallecidos, as como a los soldados que sobrevivieron y par-ticiparon en la ceremonia, envolvi

    A 10 aos, junto a familias de fallecidos y soldados sobrevivientes:

    Ejrcito recuerda tragedia de Antuco

    de un emotivo recogimiento la carpa instalada en el Memorial inaugura-do en julio de 2005, a la entrada del mismo regimiento. Un lugar privile-giado para tener siempre presentes a esos camaradas que ya no estn, dicen quienes caminan por ah.

    Las palabras del Comandante en Jefe del Ejrcito, General Humberto Ovie-do en esa jornada as lo comprueban. Este acto recordatorio, junto a mu-chas otras iniciativas desplegadas durante la ltima dcada, afianza el compromiso de mantener viva la me-moria de 45 de los nuestros, y para velar porque jams vuelva a repetir-se una tragedia como la ocurrida quiero asegurarles a sus distinguidas familias que sus hijos fueron, son y continuarn siendo muy importan-tes para el Ejrcito y que lo ocurrido constituy una leccin de vida para todos nosotros.

    Despus de una oracin ecumnica y un solemne toque de silencio, cada

    una de las 45 familias de los falle-cidos, junto a su padrino militar, coloc una ofrenda floral. En esta oportunidad tambin se destac a los soldados sobrevivientes de los cuales 22 continan la carrera militar y per-manecen en la institucin. Adems se resalt la entrega y dedicacin de Ximena Salgado Fritz y Anglica Toro Carvajal, asistentes sociales de la institucin que han acompaado estos 10 aos a muchas de las fami-lias de los soldados fallecidos, los sobrevivientes de la marcha, como tambin al personal de la unidad que se vio afectado por el trgico hecho.

    La ceremonia, que dur aproximada-mente tres horas, dio paso a un disten-dido almuerzo en el que familiares de los fallecidos, ex conscriptos y perso-nal del Regimiento, compartieron con autoridades militares y civiles en el comedor de la unidad.

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  • Actividades conmemorativas por los soldados de Antuco

    Todos los aos el Ejrcito prepara o participa en una serie de actividades en el marco del aniversario de la Tragedia de Antuco.

    T con familiares: En el comedor de Suboficiales de la unidad, el 27 de abril.

    Romeras en los cementerios: Junto a las familias de cada soldado.

    Ceremonia en Laguna del Laja: Se de-sarrolla junto al memorial a los pies del volcn.

    Ceremonia en Monte Cea: Plaza Memo-rial Mrtires de Antuco, en la ciudad de Los ngeles.

    Ceremonia Oficial en el Regismento Re-forzado N 17 Los ngeles: en el Me-morial A los hroes de Antuco.

    Almuerzo de camaradera en el Comedor de Soldados del Regimiento: Despus de

    la ceremonia oficial.

    Ministro de Defensa NacionalFinalizada la ceremonia, el Ministro de Defensa Nacio-nal Jos Antonio Gmez, indic que en representacin de la Presidenta, he estado hoy da acompaando a las familias y al Ejrcito, conmemorando los 10 aos de esta terrible tragedia, pero que demuestra la fortaleza, capacidad de recuperacin que tiene nuestro Ejrcito y nuestra gente. Por eso estoy agradecido de estar con el Comandante en Jefe y con los miembros del Ejrcito y las familias en esta conmemoracin.

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  • Para que jams vuelva a repetirse una tragedia como la de Antuco, el Ejrcito ha establecido y rectificado procedimientos institucionales, que se pueden resumir en lo siguiente:

    Una forma de hacernos cargoLecciones aprendidas:

    Proyecto Torrente: Optimiza el sistema de comunicaciones, con el fin de mantener permanente-mente enlazadas a las distintas unidades que se encuentran en terreno.

    Creacin del Centro de Lec-ciones Aprendidas (CELAE): Permite retroalimentar cada acti-vidad en los escenarios donde se desenvuelve el personal, con el fin de incorporar, modificar o eli-minar aquellos aspectos donde se identifiquen falencias. A la vez se implement el Sistema de Lec-ciones Aprendidas (SILAE), que depende de la Divisin Doctrina.

    Instauracin e implementacin de Patrullas de Auxilio y Res-cate en Montaa del Ejrcito (PARME) cuyo objeto fue dotar a algunas unidades del Ejrcito con elementos necesarios para desem-pearse en situaciones especiales de emergencia en la montaa.

    III Divisin de Montaa: Se cre el 2011 para contar con una unidad de armas combinadas con doctrina, preparacin, entrena-miento, equipamiento y experien-cias, basada en una estructura de mando funcional y sistemas rela-cionados, para accionar eficiente-mente en el complejo escenario geogrfico que posee Chile.

    Prevencin de riesgo y del medioambiente: debido a la im-portancia de ambos mbitos, el Ejrcito decidi incorporarlos a su gestin institucional.

    Implementacin de un Mdulo Integral de Liderazgo: su obje-tivo es obtener capacidades para optimizar y potenciar la accin de mando de los integrantes de la institucin.

    Equipamiento: Incorporacin de modernos equipos de proteccin para enfrentar adversidades de la naturaleza, junto a la optimiza-cin de programas asistenciales para apoyar a vctimas de trage-dias.

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  • Los otros sobrevivientes de Antuco

    Testimonios

    No es fcil hablar sobre lo ocurrido hace 10 aos en la montaa, sealan muchos que integraron el personal de planta del Regimiento Reforzado N17 Los ngeles, que marcharon junto a los soldados ese 18 de mayo de 2005. Pese a que cada uno guarda diferentes recuerdos y emociones de lo que signific esa jornada, coinciden en que es una fecha que nunca olvidarn.

    Fueron das que los marcaron a ellos, a sus familias y su entorno. Nadie quiso que esto pasara una situacin que no se puede predecir se hizo todo lo que se pudo. Todos quienes participaron en la campaa poseen distintas re-flexiones todas vlidas, todas legtimas.

    Se debe recordar que se desarrollaron dos investigaciones oficiales (institucional y judicial), las que demostraron distin-tos grados de responsabilidad. A la vez, stas concluyeron que hubo quienes destacaron por su temple, al lograr ayudar a muchos de los jvenes soldados que finalmente sobrevivieron.

    An hoy muchos de ellos se cuestionan haber hecho todo lo que estaba en sus manos si hubiera actuado distinto, habran ms sobrevivientes? si retrocediera el tiempo, volvera a hacer lo mismo? hice lo correcto? preguntas que probablemente cualquiera se hara de vivir lo mismo. Pero hay que estar ah para saber cmo son las cosas, argumentan oficiales y clases que marcharon.

    En todo caso, coinciden en que somos todos sobrevivientes.

    Da del Soldado:Cada 18 de mayo el pas, y en particular el Ejrcito, conmemoran con mucha emocin y solemnidad el Da

    del Soldado Conscripto, como una forma de destacar a los jvenes soldados que cumplen con este importante deber cvico.

    En virtud de lo acontecido aquel 18 de mayo en la montaa, la Presidenta de la Repblica, mediante Decreto Supremo N 112 de fecha 15 de mayo de 2007,

    instituye el Da del Soldado Conscripto como un reconocimiento que Chile y su Ejrcito brindan a los 45 soldados que perdieron la

    vida en los faldeos del volcn Antuco.A partir de este ao, durante la ceremonia conmemorativa, la institucin entrega un estmulo de reconocimiento al soldado de cada unidad, que se haya destacado durante el desarrollo de la Fase de Instruccin Inicial de Formacin del Combatiente Individual (FIIFCI).

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  • Capitn Cristbal Zeren Bustamante:Una profunda revista despus de la accin

    Fueron horas difciles momentos muy complicados en los que uno no sabe si est en lo correcto o no re-flexiona el Capitn Cristbal Zeren Bustamante, respecto al rol que le toc cumplir, durante la marcha del 18 de mayo, que deriv en la tragedia de An-tuco. El oficial, del arma de Caballera Blindada, haba llegado al Regimien-to Reforzado N 17 Los ngeles el 2001 como instructor. El 2005 tena 24 aos y era teniente de la Compaa Andina, integrada por dos oficiales ms (un capitn y un teniente) un sub-oficial, siete clases y 80 soldados.

    Hoy, ms maduro y reflexivo, es la pri-mera vez que habla pblicamente de lo vivido y asegura que para todos hay un antes y un despus de la tragedia. El Ejrcito del 2015 no es el mismo que el del 2005. Siento que la institu-cin ha hecho esfuerzos por mejorar y cambiar aspectos que eran defici-tarios. No hay que olvidar que antes era distinto; no estaba explcita la Ordenanza General del Ejrcito (fue publicada el 2006), nadie hablaba de la obediencia reflexiva o de amistad profesional. El cumplimiento de las rdenes era tal vez ms taxativo que reflexivo en ese sentido creo que el Ejrcito avanz. Otro aspecto que rescata es que ahora los procesos de enseanza incluyen la experiencia vivida en Antuco. Por ello dice que transmitira a las nuevas generacio-nes de oficiales que no solo se que-den contentos con el cumplimiento

    de la misin, que vean ms all: qu contexto hay y cules pueden ser los alcances, las consecuencias o daos colaterales de la ejecucin de las r-denes. Esa es una visin que debemos tener como oficiales, para cuidar de nuestro Ejrcito.

    Su vivencia como teniente de la Com-paa Andina fue dolorosa y complica-da. Recuerdo muchas cosas, unas ms claras que otras. Despus de la marcha, fue muy triste; recib amenazas, me lla-maban culpndome por la muerte de sus hijos seala con cierta afliccin. Sin embargo, siente que su actuacin fue la correcta. Junto a un clase lleg con 58 soldados sobrevivientes al Refugio de La Cortina. Estoy tranquilo con las de-cisiones que tom. Cuando se ve el con-texto, el detalle de lo que pas fueron decisiones acertadas. Eso lo agradezco a la formacin de la Escuela Militar y a la que uno tiene como oficial de Ejrcito. Slo en situaciones extremas se puede ver el verdadero ejercicio del liderazgo.

    Describe que la noche anterior al des-censo nadie vio una imposibilidad real para bajar Cuando salieron del refugio de Los Barros, a las 08:45 am

    del 18 de mayo, haba nieve incipien-te que despus aclar.

    Nadie prevea nada. bamos (cuatro clases y un

    soldado) ltimos y de pronto comenzamos a ver unas

    mochilas abandonadas despus de 40 minutos o ms,

    vimos una raqueta colgada en un colige que marcaba un

    grupo de fusiles.

    Ah se detiene para resaltar lo impactante que es para un militar ser testigo del abandono del cargo de material de guerra (fusiles). Nos dimos cuenta que estaba pasando algo muy grave. Al seguir se encontraron con el Teniente Durand y el Capitn Gutirrez, quienes supona iban a la cabeza de la Compaa Andina. En ese momento el Capitn Gutirrez, Comandante de la compaa, le orden que continuara la marcha, encontrara al resto del grupo y asumiera el mando, pues l se quedara con algunos soldados que estaban sufriendo sntomas de hipotermia y deban ser estabilizados.

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  • Ah comprend lo que estaba pasan-do lo primero era encontrar a nues-tros soldados para que llegaran al refugio de La Cortina. Los clases que iban conmigo se haban adelantado por lo que yo iba solo Camin mucho rato era un pasillo blanco, helado y trgico. Me encontr con soldados desorientados, otros sentados en sus mochilas con un cordn los amarr a la ma y comenc a guiarlos Pensa-ba que deba sobreponerme, intentaba abstraerme de lo que estaba sucedien-do para las decisiones que deba tomar y llegar con la mayor cantidad de sol-dados a salvoDebamos seguir los coliges que indican el camino, pero no se vean, tampoco el volcn o la la-guna el reloj se congel, la brjula y el gps dejaron de funcionar, la radio no prenda era muy desesperante deba rescatar a mis soldados, siete u ocho hasta ese momento.

    Cabo Primero Cristhian Robledo Ramrez:Luchando para sobrevivir

    El 2005 era Cabo y llevaba cuatro aos en el Ejrcito, contando los dos de alumno en la Escuela de Subofi-ciales. Con 22 aos lleg, a finales de marzo, desde el entonces Regimien-to La Concepcin al Regimiento Reforzado N 17 Los ngeles a la Compaa de Morteros. Lo que ms recuerda de los conscriptos del 2005 es el entusiasmo que demostraban por aprender.

    As ocurri durante las tres semanas de instruccin en Los Barros. El Cabo Primero Robledo recuerda que la no-che antes de la marcha estaban todos entusiasmados por volver. Tomaron desayuno y partieron a las 5:15 am., en columnas. Los instructores dividi-dos en tres: algunos a la cabeza, junto a quienes cumplen el rol de huelleros, otros al medio y los del final, quienes tienen la misin de custodiar que nadie se rezague. Cuando llegamos al es-tero lo cruzamos y todo iba bien hasta que el clima comenz a cambiar. La marcha se complic de forma rotunda; de una simple llovizna a una nevazn, con viento, bajas temperaturas y gra-nizonieve que nos golpeaba la cara.

    El viento blanco era muy fuerte y si me detena ellos caan producto de la hi-potermia, por lo que no haba opcin. Providencialmente me encontr con el Cabo Segundo Nstor Quiroz, que tambin iba como yo arrastrando a un grupo de soldados. Fue una alegra inmensa encontrar a alguien en quien apoyarme, por lo que comenzamos a turnarnos. Yo adelante haciendo hue-lla, l detrs cuidando que ninguno se rezagara y al revs. A medida que avan-zbamos nos encontramos con ms sol-dados, por lo que nos dividimos entre la cabeza de la columna y los del final, que empujaban para que nadie se que-dara atrs.

    Por fin llegamos al refugio de la Uni-versidad de Concepcin... hicimos fuego con las tablas que sacamos de las paredes derretimos nieve para tomar agua, pasamos la noche y tra-

    tamos de organizar una ruta de mar-cha armamos las unidades, los ms afectados los pusimos al medio, y lle-gamos despus de tres horas con 58 soldados al Refugio de la Cortina.

    Confidencia que, aunque nunca lo ha dicho, siente que desde un principio se hizo un juicio apresurado. Hubo una estigmatizacin de los instructo-res. Pero hubo actuaciones tremenda-mente destacadas, de gente que salv y arriesg su vida por sus soldados lamentablemente creo que no ha ha-bido un reconocimiento explcito a quienes ayudaron a salvar a muchos sobrevivientes. La tragedia de Antuco pudo haber sido de proporciones an mayores, si no hubiera sido por gente que en ese minuto tom decisiones que permitieron salvar vidas, finaliza.

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  • Ah se nos dio vuelta el panorama... la columna se empez a desarmar, debi-do a que los instructores comenzamos a asistir a los que se vean afectados. Yo, que iba al centro, pas al final apoyando soldados el viento blanco iba y volva, era muy fuerte Senta-mos impotencia ya que tratbamos de ayudar, pero no dbamos abasto De pronto, llegu a un refugio que estaba construyendo mi Sargento Tolosa, en el que se encontraba el Soldado Ca-rrasco.

    Hasta ese momento no saba cun importante iba a ser

    ese conscripto en mi vida. Se supone que nos quedaramos ah hasta que llegara ayuda,

    pero yo intua que era imposible que sobreviviramos

    si no salamos

    Aunque no soy especialista en mon-taa recordaba las experiencias de mi padre, un suboficial en retiro, instructor de montaa por ms de 30 aos. Le dije a Carrasco si se senta con las capacidades fsicas para con-tinuar el camino y de ah en adelante fuimos slo los dos... Botamos casi todo lo que llevbamos en las mo-chilas cuando comenzamos a ver el camino con equipo abandonado, par a Carrasco y le dije: vas a ver cosas que no te van a gustar, pero lo nico que quiero es que mires hacia adelante y no pares eran momentos muy fuertes, de mucho impacto para la edad que tenamos, reflexiona.

    Contina sealando que el clima em-peor an ms. El viento no nos dejaba avanzar. La cara, las manos, todo estaba congelado, sentamos como agujas que nos pinchaban. Tras 11 horas el cuerpo no daba ms. ba-mos uno tras otro y el que iba detrs

    tena que cantar o contar algo, com-partamos sobre nuestras familias, historias, todo para mantener la luci-dez y para escuchar que an segua ah intentar girar el cuerpo, im-plicaba un esfuerzo que no podamos realizar.

    Como a las 13 horas de marcha, gri-tbamos al cielo, a la montaa que no nos iba a dejar ah. A metros del re-fugio de la universidad, vimos fuego en un tarro, que debieron haber de-jado otros que continuaron el ago-tamiento era extremo, tanto que para entrar al refugio, debamos sortear una pirca de piedras de medio metro, pero no pudimos la impotencia era tal que llorbamos. Debimos gatear y dar vuelta a la pirca al llegar nos recuperamos un poco, pero tenamos que continuar le dije a Carras-co que si poda seguir, faltaban solo unos 3 kilmetros igual nuestra mo-ral estaba fuerte, pues sabamos que quedaba poco. Ya eran como 15 horas de marcha. bamos perdiendo las ga-nas, pero an as los dos nos motiv-bamos y arengbamos el ya no era el Soldado Carrasco, era mi amigo. ramos dos personas tratando de sal-varse.

    El miedo siempre estuvo presente, pero hasta ese momento no haba-mos sentido desesperacin fue complejo, ya no quedaban fuerzas al momento que diviso el refugio La Cortina, le grito a Carrasco que co-rra por su vida corre, corre, slva-te! y en ese momento caigo de cos-tado a la nieve. Quedo ah. Mi cuerpo no daba ms al parecer mi misin consista en llevar a Carrasco al refu-gio cuando estaba tirado en la nie-ve, veo que Carrasco corre, de repen-te para y se da cuenta que yo sigo en el suelo... l mira el refugio, me mira a m, vuelve a mirar el refugio (con

    mucha emocin el cabo Primero Ro-bledo describe el debate interno que mantiene el soldado Carrasco) yo le grito que siga pero l volvi y junto con ayudarme, me dice, mi cabo si morimos o vivimos, que seamos los dos, pero esta marcha la comenc con usted y la terminar con usted.

    Tras avanzar unos metros, fueron di-visados por personal del Ejrcito que se encontraba en La Cortina, quienes salieron a su rescate. La situacin del Cabo Primero Robledo era crtica, incluso le debieron practicar procedi-mientos de reanimacin. Horas ms tarde, con ropa seca y convaleciente, despert y segn recuerda.

    Me senta confundido, no saba dnde estaba, lo primero que pregunt fue por Carrasco y me dijeron que estaba bien

    volv a dormir y como a las tres de la maana escuch la voz de mi pap pese a que

    senta una tremenda alegra, no entenda qu haca ah

    despus me cont que al escuchar las noticias sobre lo que estaba ocurrien-do en el volcn, pesc su mochila de montaa y tom rumbo al refugio de La Cortina. Pese a que los caminos estaban cortados debido a la tor-menta, dej su auto en Conaf (lugar en que detenan a todo vehculo por el mal tiempo) y comenz su ascen-so a pie, como a las siete de la tarde. Camin por varias horas con el nico objetivo de encontrar a su hijo, vivo o muerto. Cerca de las 3 de la maa-na, ingres al refugio de La Cortina y grit dnde est mi hijo? de in-mediato le dijeron que yo estaba bien. Lleg al lugar donde me encontraba y nos dimos un abrazo que jams ol-vidar.

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  • Cabo Claudio Gacita Quijada

    Sargento Segundo Felipe Rubio MezaDesde Antuco, me dieron ms ganas de estar en el EjrcitoSin la ayuda de los instructores no se hubieran salvado tantos soldados. Pese a lo que haya dicho la prensa, nosotros no dejamos a los soldados. Es injusto que hablen cuando no estuvieron en la marcha, seala el Sargento Segundo Felipe Rubio, quien el 2005 era Cabo e instructor de la Compaa de Morteros, con 26 aos.

    An contina en el Regimiento por un fuerte sentido de pertenencia que se acrecent despus de Antuco. La tragedia me hizo sentir ms que te-namos que estar aqu. La comunidad local quiere mucho a los militares.

    Agrega que no se ve en otra parte que no sea con sus soldados pues es un es-tilo de vida, una vocacin. Todo lo que viv en la marcha trato de apli-carlo como instructor que es el deber ser del uniformado. La relacin que intento establecer con ellos es de con-fianza.

    Cuando rememora la marcha, seala que nunca antes haba sentido algo as, pese a que haba participado en otras instrucciones en la misma zona. El viento blanco da cero visibilidad. No se escucha nada el sonido del viento lo tapa todo. Uno poda gritar y na-die escuchaba... tratamos de reunir el mximo de soldados e intentamos se-guir juntos si caan, los instructores los levantaban y arengaban para poder motivarlos. Enfatiza que durante el trayecto de la marcha mantena la espe-ranza que cambiara el clima y que los soldados que faltaban llegaran con los instructores que venan atrs cuando stos no llegaron fue difciluno nun-ca piensa que puede pasar eso.

    Los primeros aos agrega fueron difciles, pero con el tiempo se llega a la tranquilidad que hicimos todo lo posi-ble. Fue doloroso para las familias per-der un hijo, un hermano o un nieto y aunque no es comparable, para noso-tros tambin fue duro perder a nuestros soldados a todos nos marc la mar-cha. Hoy mismo mayo del 2015 me cuestiono si pude haber hecho ms.

    Siempre le comento a mis soldados que el Ejrcito ha aprendido de los errores, que todos hemos aprendido. Reflexio-na y seala que ha notado los cambios que ha aplicado el Ejrcito, basado en las lecciones aprendidas de la tragedia.

    Es el cuarto de ocho hermanos. Seis de ellos se inscribieron voluntariamente en el Servicio Militar. Lamentable-mente Guillermo, que lo anteceda fue parte de los soldados que fallecieron el 2005. Despus de dos aos quiso ingresar como conscripto al Ejrcito para posteriormente continuar una ca-rrera militar. Pese a lo difcil que fue para sus padres la prdida del tercero de sus hijos, de igual modo lo apo-yaron, ellos siempre han respetado las decisiones que hemos tomado, asegura. Lo ocurrido en Antuco fue un accidente que espero no vuelva a pasar. En todo caso he visto cmo el Ejrcito ha aprendido.

    A 10 aos de la tragedia, Mara (la nica mujer entre los hermanos) y Marcelo se encuentran desarrollando su servicio

    militar en el Regimiento Reforzado N17 Los ngeles.

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  • Desde ocurrida la tragedia, las asis-tentes sociales del Ejrcito, Ximena Salgado Fritz y Anglica Toro Car-vajal, han acompaado en la tristeza e intentado apoyar la recuperacin emocional de muchas familias de los soldados fallecidos, como tambin de los conscriptos que sobrevivieron. Por esta razn el Comandante en Jefe del Ejrcito no dud en destacar su entrega: Han demostrado un espe-cial esmero, compromiso, cario y comprensin el Ejrcito y muchos de los presentes conocen de su voca-cin.

    Segn Ximena Salgado Fritz, acom-paar a los padres, madres, hermanos o soldados sobrevivientes, ha sido lo ms fuerte que me ha pasado en la

    vida. Para la profesional, la bondad y espritu de recuperacin de este gru-po de personas, que durante estos 10 aos le han abierto sus hogares, ha significado encontrar un sentido de vida personal y profesional. Han de-jado convertirme en un miembro ms de sus familias.

    He sido testigo del profundo dolor que ha tocado sus vidas

    y, a la vez, de la fortaleza y espritu de perdn que ellos

    han vivido.

    Ximena Salgado Fritz, Asistente socialUn importante apoyo de 10 aos

    Agrega que poder ayudarlos ha cam-biado su forma de ver las cosas, he sido testigo de lo vulnerable que so-mos y la forma en que el paso del tiempo hace que se tenga una visin ms humana de toda situacin. As explica la resiliencia que han experi-mentado las familias de Antuco, pues muchas de ellas mantienen una estre-cha relacin con el Ejrcito.

    Con una emotiva ceremonia, y junto a las familias, el Ejrcito record a los soldados de Antuco

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  • Cabo Segundo Juan Carlos Monares LagosLo que viv en la marcha me sirve para tratar de evitar que suceda algo similar. Todo lo aprendido lo aplico con mi gente, con nuevos soldados.

    Cuando hizo el curso de Montaa fue la primera vez que volvi al volcn Antuco, fue fuerte, pero lo asum como una vivencia que tuve en mi vida y que lo positivo y negativo que viv, me poda servir a futuro. La tra-gedia me dio ms fuerzas para entrar al Ejrcito, enfatiza.

    Seala que siempre quiso estar en el Ejrcito y pese a ser uno de los solda-dos de la Compaa Andina, nada le quit ese sueo. Actualmente es ins-tructor de montaa en el Regimiento Reforzado N17 Los ngeles y se-gn l, la tragedia se provoc debido a que el clima jug una mala pasada.

    No culpa a nadie de lo sucedido. Tom esta

    experiencia como una forma de instruir a otros jvenes.

    son los soldados sobrevivientes de Antuco que hoy se mantienen en la planta del Ejrcito22

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  • Puesta en marcha de material M109

    En Punta Arenas

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  • En el Grupo de Artillera N 7 Wood, de la 4ta. Brigada Acorazada Chorrillos, de la V Divisin de Ejrcito, se efec-tu la puesta en servicio del material M109 A5.

    Las pruebas de tiro se realizaron en el predio Santa Mara, en la regin de Magallanes, donde se efectuaron tres tiros por pieza, actividad que fue monitoreada por el Instituto de Inves-tigaciones y Control (IDIC).

    Este material de artillera, arribado al pas en el mes de di-ciembre de 2014, inici su proceso de armado de pieza (deprocessing) los primeros das de marzo, para entregar de for-ma definitiva los obuses, luego de esta actividad para verificar que la puesta en servicio de esta nueva capacidad fuese con-forme a los estndares requeridos por la institucin.

    Este programa tiene asociada la infraestructura correspon-diente al material y los cursos de capacitacin relacionados con el mantenimiento y operacin para todas las tripulaciones.

    Con la llegada de este material, que reemplaza a la plataforma AMX-13, todos los grupos de artillera autopropulsados del Ejrcito tienen en su conformacin obuses M109.

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  • Cuando el esfuerzo, tenacidad y entrega rinden

    La Cabo de Sanidad Constanza Beln Prez Daz, destaca. Tiene 20 aos, dos y medio de carrera militar y tras cinco intensas sema-nas en Georgia, Estados Unidos de Amrica, obtuvo el primer lugar del Curso TAC12 de Liderazgo de Comandantes de Pequea Unidad en Fort Benning, superando a 29 camaradas masculinos.

    Cabo Constanza Prez Daz

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  • ...Mi mam estaba asustada, porque siempre he sido muy seorita, femenina, de manitos cuidadas, entonces no crea que su princesa pudiera ser militar, porque se cree que para serlo hay que tener carcter fuerte, ser brusca, pero no es as. Recuerda con alegra las instruccio-nes, el perodo de campaa, los mo-mentos de acondicionamiento fsico, aprender desde maquillarse hasta las

    formas militares y asegura que apre-ci hasta los retos, porque seala que cada experiencia aporta y forma el temple, ese que despus se necesita para ser lder.

    Al tercer da de entrar a la escuela nos hicieron una charla y dijeron que los que queran ser enfermeros tenan que dar una prueba. Esa noche en for-macin comunicaron quienes haban quedado. Nos llamaron por orden de notas y fui la primera, habamos pos-tulado como 80 y quedamos 10. Con-firm otra vez que este era mi camino.

    Cuando me fui a la Escuela de los Ser-vicios dije aqu viene lo difcil, porque haba muchos camaradas que tenan estudios y yo no, as que tena que es-tudiar el doble o el triple para estar a la altura. En esa poca no descansa-ba nada. Dorma como cuatro horas. Haca deporte y estudiaba; ahora s que ese esfuerzo vali la pena.

    Egres el 19 de diciembre de 2014 con la primera antigedad de los Servicios y pudo elegir su primera destinacin. Prefer el Regimiento de Infantera N 1 Buin porque adems de en-fermera soy militar y en una unidad

    Mide 1,54 mts., pero no se achica. Al saludar da la mano con firmeza y mira directo a los ojos. Sonre y habla rpi-do, es espontnea y no le importa con-tar que alguna vez llor de emocin o que tuvo rabia cuando sinti que se le acababan las fuerzas. Es una joven sincera, optimista, que irradia felici-dad, principalmente porque, segn dice, hace lo que quiere, ser militar.

    Soy la primera uniformada de mi fa-milia, aunque mi pap tambin tuvo ganas de postular, pero en esa poca estaba muy enamorado de mi mam y no se atrevi a dejarla sola, as que estoy cumpliendo un poco su sueo tambin.

    Mi mam estaba asustada, porque siempre he sido muy seorita, feme-nina, de manitos cuidadas, entonces no crea que su princesa pudiera ser militar, porque se cree que para ser-lo hay que tener carcter fuerte, ser brusca, pero no es as.

    Pese a dar la PSU y quedar aceptada en Obstetricia en la Universidad San Sebastin, entr el 13 de febrero de 2013 a la Escuela de Suboficiales, para cumplir su anhelo.

    Durante 2012 di las pruebas psico-lgicas, tericas, exmenes mdicos y la entrevista personal y las fui pa-sando todas, estaba demasiado feliz, pero le peda a Dios, porque soy muy creyente, que no me diera falsas espe-ranzas. El 2 de enero de 2013, para mi cumpleaos, fueron las pruebas fsicas y adems dieron los resulta-dos de la PSU. Ese da me destacaron porque fui el primer lugar de todas las mujeres. Dos semanas ms tarde me notificaron que haba quedado y llor de emocin.

    como sta puedo ir harto a terreno, seala.

    Mi primer servicio fue bien simpti-co. Me haban dicho que cuando lle-gaba una enfermera nueva se llenaba de soldados de tropa profesional, de puro frescos, y as fue. Cuando llegu, antes de las 08:00 hrs., haba hartos. Entonces me puse seria y les pregunt que tenan. La mayora iba por dolor de cabeza o de estmago y les dije que tena solo para pinchar re enton-ces la mayora arranc. Ahora ellos ya me conocen, saben que soy profe-sional, as que son bien respetuosos y leales.

    Su excelencia acadmica le otorg adems la oportunidad de ir, en marzo pasado, a Estados Unidos de Amrica a cursar el TAC12 de Liderazgo de Comandantes de Pequea Unidad en Fort Benning, Georgia, junto a las tres mejores antigedades de la Escuela de Suboficiales, todos hombres, igual que otros 26 alumnos del Ejrcito de Colombia.

    Part con los Cabos Mario Ziga M., Jos Navarro M. y Esteban Carlo G., ninguno sabamos mucho ingls pero nos las arreglamos porque via-jamos solos. Fue toda una travesa recuerda y sonre, nos estaban es-perando y nos acogieron muy bien.

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  • A las 05:00 empezaba la jornada con acondicionamiento fsico muy espec-fico hasta las 07:30 hrs. ms o menos. Los ejercicios se hacen conforme a un protocolo establecido. Luego de 08:00 a 17:00 hrs. tenamos clases, sobre derechos humanos, primeros auxilios e instruccin en terreno, don-de fuimos evaluados como lderes. Ah nos dieron una misin a cumplir y la logramos. Nos iban a emboscar y nosotros los emboscamos a ellos. Eran Rangers y estaban muy sor-prendidos.

    Finalizado el curso le comunicaron que haba obtenido tres premios: Acondicionamiento Fsico, Distin-cin de Honor y Lder de Lderes. La alegra de recibir estos reconoci-mientos tuvo que compartirla con un difcil momento.

    Una semana antes de venirme a Chi-le mi abuela se puso grave en Concep-cin. Mis paps no me haban dicho para no preocuparme pero, debido a que perda la conciencia, me conta-ron y pude comunicarme con ella. Me prometi que me esperara, para que le entregara el dlar que le haba pro-metido, pero no pudo. Falleci el da que viajaba. No alcanc a verla pero si pude hablar antes y eso me tranqui-

    liza. Era muy regalona de ella. Ape-nas llegu a Santiago tom mi tenida de salida y fui a Concepcin, porque ella se senta muy orgullosa de que yo fuera militar y alcanc a estar presen-te en su funeral.

    Cuando regres al Regimiento todos se portaron muy amorosos, me de-mostraron el orgullo que sintieron,

    de que una integrante de la unidad dejara bien puesto el nombre del Re-gimiento y del Ejrcito en otro pas, frente a otras instituciones.

    Llevo apenas dos aos de escuela y seis meses de planta y debo decir que mi vida en el Ejrcito, aunque corta, ha sido nica. Realmente agradezco demasiado a la institucin, porque puede ser que sea tambin mi esfuer-zo, pero hay mucho del apoyo que me han dado en cada uno de mis logros.

    Como mujeres, todava, tenemos que ser doblemente buenas para validar-nos, demostrar que somos capaces. Hay que esforzarse, ponerse metas, soarlas, seguirlas. Mis sueos ahora son ir a una misin de paz y seguirme especializando, continuar haciendo cursos, seguir estudiando, aprendien-do Yo s que se puede, solo hay que intentarlo.

    ...Mi abuelita me daba paz. No hay que preguntar el por qu?, sino el para qu? Ella ya haba cumplido en la tierra...

    Sofa de 5 y Matas de 10 aos, hermanos de la Cabo Prez, tambin quieren ser militares.

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  • El logro obtenido en Estados Unidos fue difundido en medios de comunicacin

    social de Columbus y especialmente en el diario Militar de Fuerte Benning,

    Bayonet & Saber, donde la destacaron como un ejemplo de la exitosa

    incorporacin de la mujer en las fuerzas armadas de Amrica.

    La Cabo Prez junto a los 29 camaradas del curso TAC12 en Estados Unidos.

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  • Proyecto perfiles fsicos diferenciados en la FT

    Entrenamiento fsico en funcin

    del combateAS& Pgina N 38

  • Un cambio de paradigma, donde el entrenamiento fsico no solo es para rendir las Pruebas de Suficiencia F-sica (PSF), sino un medio para tener aptitudes y destrezas para el combate (individual y colectivo), permitiendo alcanzar los estndares institucionales y sus competencias para una tarea de instruccin determinada, vinculadas con las Habilidades Bsicas de Com-bate (HBC) y las Habilidades Guerre-ras (HG), eso es lo que busca el Pro-yecto perfiles fsicos diferenciados en la Fuerza Terrestre (FT) y Ejrcito Institucin (EI)

    Con este desarrollo se espera que el combatiente tenga un ptimo desem-peo en su unidad, y para ello es fun-damental que cuente con un adecuado nivel de preparacin fsica, acorde a las exigencias de su empleo dentro de ella, y as contribuir al xito de la mi-sin encomendada.

    Para lograr aquello la Divisin Doc-trina (DIVDOC), en conjunto con el Comando de Salud, la Escuela de los Servicios y la Brigada de Operacio-nes Especiales Lautaro (BOE), se encuentra desarrollando este indito proyecto, que tiene un plazo de tres aos, para alcanzar los perfiles fsicos diferenciados segn la unidad en que se desempeen los combatientes.

    Su objetivo es cuantificar el rendi-miento cardiopulmonar y muscular en las diferentes unidades de la FT para identificar el perfil fsico del comba-tiente, asociado a sus tareas de com-

    bate, considerando factores de riesgo cardiometablicos y msculo es-queltico.

    Con ello se lograr disear programas de entrenamiento diferenciados en re-lacin con sus HG y Tareas Esenciales de la Misin (TEMs), permitiendo de-sarrollar una instruccin fsica militar diferenciada, de acuerdo a la funcin de las unidades para el combate.

    Hablamos de funciones de combate y niveles de especializacin, de acuerdo a cmo esos tipos de unidades realizan y desempean tareas de combate. Por ejemplo, las unidades de la BOE se deben entrenar de forma diferente a otra unidad, considerando variables que tengan relacin a su equipamiento, escenario y tipo de misin; por lo que requieren programas de entrenamiento fsico diferenciados en

    Estos programas de preparacin fsicos diferenciados tendrn

    directa relacin con las tcnicas, procedimientos y

    nivel de condicin fsica de la unidad.

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  • Perfiles fsicos diferenciados (muscular, antropomtricos y cardiopulmonar)

    La metodologa de esta investigacin propone reconocer los requerimientos energticos, determinar las capacida-des asociadas a las competencias de combate, identificar cualidades fsicas y elaboracin de programas de entre-namiento, definiendo los protocolos de evaluacin.

    Perfil AvanzadoPSF HBC HG

    Perfil BsicoPSF HBCEjrcito Institucin

    Fuerza Terrestre

    su programacin anual de instruccin y entrenamiento, explica el Jefe de rea Educacin Fsica Militar del Depto. III de la DIVDOC, Mayor Claudio Nieto J.

    Para lograr estos programas se han desarrollado tres lneas de investigacin:

    Agentes estresores y fatiga psicobiolgica (asociado en ambientes extremos)

    Factores de riesgo cardiome-tablicos y msculo esqueltico (asociados a medicina preventi-va)

    El equipo de trabajo de este proyecto est compuesto

    por oficiales, suboficiales y profesores civiles, especialistas

    en el rea de Educacin, Medicina Deportiva,

    Entrenamiento Deportivo y Ciencias del Ejercicio, entre

    otras reas.

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  • Suboficial Mayor Cristin Daniel Quezada Gonzlez, del Regimiento de Infantera N 8 Tucapel

    Si volviera a nacer, volvera a ser militar

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  • Ingres a la institucin el 1 de febrero de 1983. Hoy con 32 aos y 6 meses de servicio asegura que ser militar re-quiere de compromiso y voluntad, de entender que entregar lo mejor de s, va en beneficio de un inters superior, que es el pas, que son nuestros con-ciudadanos.

    Desde nio estuvo ligado al Ejrci-to, porque su padre militar y siempre lo acompaaba al regimiento o a ver las conferencias patriticas, retretas y desfiles que se hacan en la plaza de la ciudad de Lautaro. Adems fue inte-grante de la premilitar que exista en esos aos en el Regimiento de Infante-ra N 20 La Concepcin.

    Al terminar la Enseanza Media, a los 17 aos, tom la decisin de postular al Ejrcito. Mi mam me apoy en todo momento, pero mi padre que-ra que estudiara en la Universidad. Despus se dio cuenta de que lo mo iba en serio que era mi verdadera vo-cacin, seala el Suboficial Mayor Cristin Quezada Gonzlez al recor-dar sus inicios en la institucin.

    Ingres a la Escuela de Suboficiales sin servicio militar, pero no fue difcil acostumbrarme al rgimen, ya que me gustaba la disciplina y la doctrina mi-litar. Adems mi sueo era llegar a la institucin y al fin lo haba logrado.

    Asegura que al principio extraaba mucho a sus padres y hermanas pero con el paso de los das fue conociendo a sus compaeros de curso, algunos de los cuales tambin alcanzaron el gra-do de Suboficial Mayor y con los que se ha vuelto a encontrar despus de 30 aos.

    Respecto de la formacin recibida en sus primeros aos de carrera, ma-nifiesta con nostalgia tener muy bo-

    nitos recuerdos de mis superiores, principalmente de mi Comandante de Escuadra en la Escuela de Subo-ficiales, el Cabo Segundo Miguel Sa-linas Galaz, que fue un ejemplo dig-no a seguir. Sus enseanzas las puse en prctica en mis primeros perodos como instructor, los conocimientos y la personalidad estaban, pero faltaba la experiencia. Con el paso del tiempo todo se fue haciendo ms fcil y ms entretenido.

    Cul es a su juicio la principal mi-sin del cuadro permanente a lo lar-go de la carrera militar?

    Lo principal es el compromiso y la voluntad de cada uno por entregar lo mejor en beneficio de un inters su-perior, por su pas, por su regimien-to, por nuestros conciudadanos, pero principalmente por nuestros soldados

    conscriptos que son la razn de ser de todo militar.

    Cmo es su relacin con los cabos que inician su carrera militar?

    Mantengo una buena relacin siendo un gua, un orientador, transmitiendo las polticas institucionales y del man-do, ya sea en la carrera militar como tambin en aspectos familiares, profe-sionales, lnea de carrera y postula-cin a especialidades secundarias.

    Mi preocupacin por ellos es instar-los a que en cada grado que ostenten, tengan siempre presente que deben superarse y capacitarse, nuestra ins-titucin nos da las herramientas y las posibilidades para hacerlo, deben ser profesionales de las armas y no olvidar nunca que representan y pertenecen a una institucin que naci con la patria.

    El Suboficial Mayor Quezada est casado hace 24 aos con Carmen Gloria Sanhueza Gutirrez, junto a quien es padre de dos hijas, Da-niela Valentina de 22 aos, que cursa 4to. ao de Pedagoga en Ingls y Constanza Carolina de 13 aos, estudiante de 8vo. bsico. Las tres asegura son los pilares de su desempeo en el Ejrcito.Sin duda que la familia ha sido el principal apoyo en el desarrollo de mi carrera militar, sin su comprensin y colaboracin quizs no hubiese sido posible llegar al ltimo grado en que me encuentro.

    Siempre me he sentido acompaado, en primer lugar por mi esposa, que ha sido muy importante, dedicando parte de su tiempo para que pueda cumplir en mi trabajo, en mis ausencias por encontrarme en distintas comisiones, teniendo de su parte la comprensin necesaria para que nada me distrajera de lo que deba hacer. Ense a mis hijas a conocer mi trabajo, a entender que a veces no poda estar presente, en fechas importantes como cumpleaos, navidades o actos del cole-gio, saban que el pap deba cumplir.

    El trabajo no resta compromiso con la casa. Tengo varias misiones como cortar el pasto del jardn, mantener la lea para el fuego, ayu-dar a mi hija menor en sus labores de estudiante. Y aunque soy 100% militar tengo varias distracciones, me gusta mucho trotar, jugar ft-bol y salir de pesca. En provincia la vida militar es diferente a la de Santiago existe ms tiempo para compartir con la familia, ya que las distancias son ms cortas, tambin existe ms vida de casino.

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  • Experiencia lejos de nuestras fronteras

    En las dos destinaciones que tuve en el extranjero pude ratificar la buena preparacin que recibimos para des-empear funciones y tareas con otros profesionales militares de diferentes pases.

    Como hombre, como padre y como profesional de las armas,

    me siento muy agradecido y orgulloso de mi institucin,

    lo que tengo y lo que soy se lo debo a mi querido Ejrcito de Chile. Si volviera a nacer sin

    duda volvera a ser militar.

    Lo ms emocionanteMe encontraba en el regimiento, en Temuco, cuan-

    do recib un llamado telefnico que me informaba que haba logrado llegar a la cspide de la carrera militar, al grado mximo, Suboficial Mayor. Es el ins-tante ms emocionante, porque literalmente pasaron por mi mente todos los aos de servicio, los momen-tos gratos y tambin los de mayor dificultad.

    Agradec a Dios por bendecirme con esta distin-cin, a mi familia por su constante apoyo, tuve

    presente a mis padres y hermanas, que junto a mi familia me han apoyado incondi-

    cionalmente y se sienten orgullosos de lo que he podido lograr a lo lar-go de esta hermosa profesin, so-

    bretodo mi Padre, ya que l tambin alcanz el grado de Suboficial Mayor en el arma de Infantera.

    Luego llam a mi esposa y mis hijas. Fue un hermoso momento, porque me felicitaron y reiteraron su apoyo en lo que se vena, nuevos compromisos, ms responsabilidades en mi trabajo, y a disfrutar la nueva condicin en la institucin, hacindome presente que todo era producto del esfuerzo, responsabilidad y de haber hecho las cosas bien.

    En el ao 2003 realiz un curso de ca-pacitacin en Fort Benning, Georgia, Estados Unidos de Amrica. Fue una experiencia profesional muy enriquece-dora, porque compart con personal de otras unidades de nuestra institucin, de otros ejrcitos y escuch las vivencias de militares del Ejrcito de Estados Unidos que cumplan misiones de guerra.

    En 2011, durante 1 ao, fue designado Dactilgrafo para la Junta Interameri-cana de Defensa en Estados Unidos de Amrica. A esa misin fui acom-paado por mi esposa e hijas. En lo profesional, personal, cultural, y es-pecialmente en lo familiar, fue de las mejores experiencias que he vivido, estoy muy agradecido de la oportuni-dad que me dio el Ejrcito de repre-sentarlo en el extranjero.

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  • Nuestro compromiso: La Familia Militar

    Constanza tiene dos aos y cuatro meses y sufre de Sndrome de Torch. Sus padres, el Cabo Primero Nelson Daz del Regimiento Reforzado N 10 Pudeto, de Punta Arenas, y Jacqueline afrontan esta situacin con gran entereza. En forma regular deben viajar desde el extremo austral de Chile a la capital para la atencin mdica de Cony. Y fue precisamente en uno de esos viajes que conocieron la labor de esta entidad. Mi hija tuvo que ser operada en abril en Santiago. Fue entonces cuando nos visitaron las voluntarias de la Fundacin y desde ah nos han apoyado continuamente. Por eso para m es muy importante que las personas se inscriban en el aporte voluntario porque ayuda mucho a familias como la ma. Nosotros estamos muy agradecidos, seal el Cabo Primero Daz.

    El Cabo Primero Nelson Daz junto a su esposa Jacqueline y a su hija Constanza visitaron la sede central de la Fundacin antes de regresar a Punta Arenas.

    Son muchas las ayudas que realiza la Fundacin de Seoras del Ejrcito mes a mes. Todas enfocadas a apoyar material y espiritualmente a los integrantes del Ejrcito y su grupo familiar. Los Cabo Primero Nelson Daz y Daniel Figueroa quisieron entregarnos su testimonio.

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  • El Cabo Primero Daniel Figueroa, del Regimiento de Polica Militar N1 Santiago, tambin vive una situacin similar con su hija Beln de tres aos y medio, quien tiene Atrofia Muscular Espinal. l junto a su esposa Loreto, se turnan cada noche para cuidarla. Es agotador, pero con amor todo se puede. Adems, el Ejrcito me ha dado facilidades para estar con mi nia, confiesa Daniel.

    La Fundacin tambin visit a esta familia que cada da se esfuerza para sacar a su hija adelante.

    En su casa, el Cabo Primero Daniel Figueroa, su esposa Loreto y la pequea Beln.

    En la oportunidad efectuaron un recorrido por la zona y compartieron con las familias afectadas. Fue un agrado ver cmo las familias van superando lo vivido. Han sabido sobreponerse en lo personal y tambin en el trabajo. Me impresion como

    han recuperado lugares que quedaron devastados como el jardn infantil al que asisten sus hijos. Nosotros quisimos visitarlos y entregarles un aporte para ayudarlos a recuperar sus enseres perdidos, afirm Marianne Stegmann.

    Visita a Copiap

    La campaa para apoyar a las familias de Copiap afectadas por el aluvin ocurrido en marzo, culmin con la visita que realiz a esa ciudad la Presidenta de la Fundacin, Marianne Stegmann, junto a la representante de Accin Social, Jacqueline Clavelle.

    Agradezco de corazn todo el apoyo y preocupacin de la Fundacin. Las

    felicito por la maravillosa labor que hacen, manifest la madre de Beln.

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  • Premio a la Excelencia AcadmicaEn el marco de la conmemoracin del aniversario N17 de la Fundacin, se efectu, a lo largo de todo Chile, la entrega de las Becas de Excelencia Acadmica a los dos mejores promedios egresados de los Colegios de la Fundacin Alczar y a 14 hijos de la familia militar egresados de Enseanza Media, con altas calificaciones en el ao 2014 y que hoy cursan primer ao de educacin superior.

    Este es el primer ao que la Fundacin entrega estas becas de incentivo en todo Chile, con el fin de descentralizar y premiar el rendimiento acadmico de los nios. Felicito a todos los alumnos como a sus padres por el apoyo que les han brindado en la obtencin de estos logros. Espero que sigan estudiando con dedicacin y les deseo mucho xito en los diferentes caminos que emprendan en el futuro, afirm Marianne Stegmann.

    Christin Pino Lanata, Periodista de TVN, junto a las voluntarias de las fundaciones organizadoras.

    Integrantes de la filial Punta Arenas, junto a voluntarias de la Fundacin Blanca Estela de la Armada y de la Corporacin de Apoyo a la Familia de la PDI, participaron en una interesante actividad de discusin sobre diversos temas de la contingencia.

    Para dicho efecto, el periodista de TVN, Christian Pino Lanata, fue el encargado de exponer a las voluntarias de las tres instituciones acerca de distintas materias de actualidad, tanto de carcter nacional como internacional, realizndose un interesante intercambio de opiniones.

    Charlas de temas contingentes

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  • T Entre AmigasUna entretenida jornada para compartir con las amigas, se realiz el 26 de mayo, en el Club Militar de Chile. Rifas, remates y regalos sorpresas, fueron parte de la velada a la que asistieron ms de 300 personas.

    El T Entre Amigas fue una instancia organizada por la Fundacin, con la finalidad de recaudar fondos para las actividades sociales que efecta. En la ocasin, la Presidenta de la Fundacin agradeci la colaboracin y participacin de las asistentes, invitndolas a seguir trabajando con entusiasmo para cumplir las metas trazadas.

    Para Katty Goic, quien asisti al Te Entre Amigas, formar parte de esta actividad es muy importante. Nadie est ajeno a vivir situaciones difciles. Da tranquilidad saber que contamos con esta ayuda.

    Se pasa muy bien en estas actividades. Llena el alma saber que, adems, puedo ayudar, dijo por su parte Andrea Leal, al trmino del evento.

    Tu ayuda es importante para continuar apoyando a nuestras familias.Inscrbete en el aporte voluntario.

    Fundacin de Seoras del Ejrcito Ayudar es Recibir

    Infrmate sobre el quehacer de la Fundacin de Seoras del Ejrcito, ingresando al sitio web www.senorasdelejercito.cl,

    contactndote al telfono 223876300 o directamente en la sede central ubicada en Asturias 439, Las Condes, Santiago

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  • En nueve meses, este libro testimonial del abogado y militar, Jos Miguel Va-rela, alcanz el primer lugar en las listas de libros ms vendidos elaborados por El Mercurio y La Tercera. Con un pblico trasversal, este verdadero fenmeno li-terario entrega una mirada apasionante del mundo castrense del Chile de fines del siglo XIX. Lectores con oficio opi-nan sobre su xito.

    Veterano de tres guerrasTop One

    En la Feria Chilena del Libro de Hur-fanos 670, scar, tambin vendedor, seala que este texto no slo lo com-pran hombres mayores interesados en la historia, sino tambin universi-tarios y mujeres que buscan un buen regalo para sus parejas. Es un libro transversal. Su argumento repasa las ltimas dcadas del siglo XIX. Le ha ido tan bien que hace unas semanas se nos termin agotando. Aproveche y llvelo ahora porque en unos das de seguro se acaban, advierte.

    Este breve sondeo grafica el gran inters que despierta este relato histrico, que desde su lanzamiento en septiembre de 2014, ya alcanza la increble suma de 6.000 ejemplares vendidos. Se trata de una cifra que ha empinado a Veterano de tres guerras al primer lugar en la categora No Ficcin de los rankings elaborados por El Mercurio y La Tercera. Lo anterior, luego de permanecer por 14 semanas escalando posiciones hasta alcanzar el top one en las listas de los ms vendidos.

    Una magnfica equivocacinLo interesante de este fenmeno es que no se trata de un best seller, ni trae un potente aparataje de marke-ting. Han sido los propios lectores sus mejores promotores, explica el gene-ral Marcos Lpez A., presidente de la Academia de Historia Militar. Eso le agrega ms valor a una obra que ha sido aplaudida por la crtica con toda justicia.

    Guillermo Canales abuelo de Gui-llermo Parvex (este ltimo autor del libro), trab amistad con Jos Miguel

    Ha tenido una muy buena venta y excelentes comentarios en la prensa, afirma Wilma, vendedora de Librera Antrtica Parque Arauco refirindose al inusitado xito de Veterano de tres gue-rras. Yo creo que no debera llamar la atencin porque al lector frecuente le interesan estos temas, agrega.

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  • Reconoce que se equivocaron al con-cluir que slo el pblico relacionado con el mundo militar y de la historia comprara el libro. Cuando vemos que mucha gente regresa para adqui-rir un segundo ejemplar para rega-larlo, o que los jvenes se han inte-resado, hemos llegado a pensar que Veterano de tres guerras est cum-pliendo hoy un rol similar al que en su tiempo tuvo Adis al Sptimo de Lnea.

    La voz de crticos y lectores

    A tres meses de lanzado el libro, Roberto Merino publicaba en El Mercurio: Escribo desde el entusiasmo total. Al margen del inters histrico, lo que me cautiv de este libro es la posibilidad impensada de ingresar al Chile decimonnico con una sensacin de vvido onirismo. La mirada de Varela no desdea jams el escenario en que suceden las cosas: la textura, el color, la

    atmsfera, todos aquellos elementos que constituyen la evanescente realidad. Todo esto pienso en relacin a este libro maravilloso. Jos Miguel Varela pertenece en cierto modo a la raza del chileno aventurero (14 de septiembre de 2014).

    La Alcaldesa de Santiago, Carolina Toh, seal en la seccin Tendencias de La Tercera, que Veterano de tres guerras es un libro que todo chileno debiera leer. Pocas veces he ledo un re-trato ms emocionante, cruento y reve-lador de nuestra historia e identidad.

    El 28 de junio, Artes y Letras de El Mercurio, se refiere a esta obra como un verdadero fennemo editorial que ya lleva un mes liderando los ran-kings de los ms vendidos.

    Fernando Villegas, socilogo, afirm en Radio Agricultura que se trata de un libro apasionante que llam su atencin desde que lleg a sus manos. El autor es un hombre observador, valiente y sensible con una existen-cia llena de peripecias como soldado, abogado e incluso profesor. Estamos ante un texto donde aparece la vida cada vez ms querible de Jos Miguel Varela, pero tambin la vida de nues-tro pas en la que aparecen y crecen