2
https://www.msf.es/entrevista/colombia-ninos-cuentan-sus-secretos-en-dibujos ENTREVISTAS 26.07.2007 Colombia: los niños cuentan sus secretos en dibujos Compartir Share on Facebook Share on Twitter Share on Google+ Send to a friend Print Entrevista con Judith Rosales, psicóloga colombiana que trabaja en MSF. “Los niños son el centro de la historia”, explica © Javier Sancho Judith Rosales trabaja en el puesto de Salud que MSF tiene en Altos de Cazucá, un barrio periurbano del municipio de Soacha, cerca de Bogotá, donde atiende a niños que sufren situaciones causadas directa o indirectamente por la situación de violencia y conflicto. El dibujo es la forma más habitual para empezar a reconstruir sus propias historias. ¿Qué representan estos dibujos? Representan sus vidas. Muchos de esos dibujos lo pintan niños desplazados que nosotros atendemos. Como verás en todos está la naturaleza, el campo, de donde ellos vienen. Manifiestan como ha sido su vida anterior y la gran ruptura que significa su situación de

04 Los Ninos Cuentan Sus Secretos en Dibujos

Embed Size (px)

DESCRIPTION

04 Los Ninos Cuentan Sus Secretos en Dibujos

Citation preview

https://www.msf.es/entrevista/colombia-ninos-cuentan-sus-secretos-en-dibujos

ENTREVISTAS

26.07.2007

Colombia: los niños cuentan sus secretos en dibujos

Compartir

Share on Facebook Share on Twitter Share on Google+ Send to a friend Print

Entrevista con Judith Rosales, psicóloga colombiana que trabaja en MSF. “Los niños son el

centro de la historia”, explica

© Javier Sancho

Judith Rosales trabaja en el puesto de Salud que MSF tiene en Altos de Cazucá, un barrio

periurbano del municipio de Soacha, cerca de Bogotá, donde atiende a niños que sufren

situaciones causadas directa o indirectamente por la situación de violencia y conflicto. El

dibujo es la forma más habitual para empezar a reconstruir sus propias historias.

¿Qué representan estos dibujos? Representan sus vidas. Muchos de esos dibujos lo pintan niños desplazados que nosotros

atendemos. Como verás en todos está la naturaleza, el campo, de donde ellos vienen.

Manifiestan como ha sido su vida anterior y la gran ruptura que significa su situación de

desplazamiento.

Entre todos los casos que has atendido, ¿recuerdas alguno en particular con más

fuerza?

Sí. Sobre todo el caso de niños que han tenido que presenciar el asesinato de sus padres. Es

un drama difícil de resolver porque es un duelo violento. Tuvieron que ser testigos de ello a

una edad en la que no tienen ni la madurez ni los elementos necesarios para superarlo.

Otros casos que me impresionan mucho son los de niños que han seguido sufriendo

amenazas mientras son desplazados, y como resultado han sido víctimas de abuso sexual.

Esto le ha ocurrido a un niño que he atendido recientemente y que sólo tiene 11 años.

¿Cómo expresa un niño todo ese horror? Es difícil que los niños verbalicen sus emociones. Lo hacen a través del dibujo o del arte

que les facilita la expresión emocional. Si en un dibujo no llegan a sacar todo lo que tienen

dentro, al menos, pintar les sirve para que las reticencias iniciales disminuyan y así lo

puedan expresar oralmente más tarde.

¿Cómo es el tratamiento y seguimiento que se les ofrece a estos niños? Debe ser muy

difícil seguir tratando a un niño que ha presenciado la muerte de sus padres.

Las técnicas para trabajar con traumas son variadas y tienen diferentes pautas. Hay algunas

que son de destrucción y otras de construcción. Por ejemplo, se les enseña a utilizar las

metáforas para hacer la comparación con la realidad, creando una ficción paralela en la que

poder contar la verdad que les ha tocado vivir. Poco a poco, se termina volviendo a esa

realidad mediante técnicas narrativas en las que ellos ya cuentan en primera persona, como

si fueran el personaje principal de una historia, que es de hecho su propia vida. De ese

modo, ellos son el centro de la historia. Así se les ayuda a partir de una experiencia

traumática para reconstruir sus vidas. Aquí entra en juego tanto la parte cognitiva como la

emocional y la conductual. Es una técnica muy integral.

A pesar de todo, ¿te habrás encontrado casos en los que algún niño es más hermético y

se niega a buscar alivio?

He tenido un caso de una familia de tres niños. Eran muy vulnerables y víctimas de la

violencia. Se trataba de dos niñas de 2 y 9 años y un niño de 11 años. El papá ejercía la

violencia constantemente y abusó de la niña de 9. Después de todo, el papá se suicidó pero

antes intentó asesinarlos usando un veneno. Al final, él fue el único que murió. Estos niños

han presentado muchas resistencias, pero eso es parte de las primeras etapas de la

adaptación. Tratamos de brindar otras posibilidades que les permitan adaptarse mejor. No

hemos podido abordar todavía las dificultades neurálgicas. Esperamos hacer un trabajo de

grupo familiar, con la ayuda y participación fundamental de la madre.

¿Cómo se puede mejorar la adaptación al entorno en estos casos y en el de los

desplazados? En ese sentido, es importante ofrecer habilidades comunicativas y psicomotrices que doten

a los niños de un mejor desempeño escolar y social. Tanto en la casa, como en la escuela

(cuando los niños están escolarizados) este proceso es muy importante para que finalmente

no se sientan excluidos.