Conocido como AVJ (en inglés Video Game
Addiction), es el término de que una persona piense
excesivamente en los videojuegos, sin necesidad de
ser un friki.
La condición se caracteriza por la individual
tendencia a creer en que lo que pasa en los
videojuegos pasa en la vida real y viceversa.
Esto puede traer varias consecuencias, como que al
chico que tiene la enfermedad desarrolle una
gordura descomunal una violencia increíble, seguido
de una locura digna de caso clínico, dependiendo
de la persona y el videojuego en cuestión.
El niño parece estar en trance cuando juega, tenso,
con mandíbulas apretadas, ojos fijos al televisor , no
responde cuando se le llama y pierde interés por
otras actividades propias de su edad o a las que
usualmente practicaba y hasta por comer.
Además, muchos niños utilizan los videojuegos
como mecanismos de escape a dificultades en la
escuela o en el hogar obstaculizando así el
desarrollo adecuado del niño ya que confunden la
realidad con la fantasía.