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UFO PRESSPUBLICACION TRIMESTRALEneroMarzo de 1984Nmero 19 Ao VIDIRECTORESGuillermo Carlos RoncoroniA lejandro Csar Agosti ne I Ii.'EFE DE REDACCIONAlejandro E nique ChionettiARTENstor PuccettiREDACTOR ESPECIALlus R. GanzilezCOLABORARON EN ESTENUMEROAluin 1. L{rws{,n, Witly Smh, FedraRedn" Raberl* Enrique Eanchs, Ru-Ln A. Morsles, Zulrna Ferndndez,Alcn . Msrc;'!, Hctar E. S*lsr, -{e-riberts Janasck, Rann {}. Fa{anl,Jsuier Agsstinelli, Gusisttu Antorta,Cruspo Cypeus, JUF S, lnforesps^ce. UFO NYT y El Pttrteic..tos rr,:b,.,::s ;; ssn sxciusiuaresporxcliliJnd de ss Gutoras"Se permite ic reproduccin tr:tsl oparciol de ios ariculss publimdassempre que se mencione la fuente,nmero de edicn y d;reccin pas-tal. Se agradecerd el enuia de unejemplar^

Lrx trabajos frrmados s:,'responsabildad de sus c,'reflejan la opinin de lo ?--"-J --'Buenu Aires, las cuala s - -das a traxs de sus resx;. "riales.

GlrtUFO FRESS,Agradecer :bia can otras publicac:o-:-J iWll acknsssledge tuirn :-': *r::' :;-exchange usith similcr s:,:.Aceeplera auec plais:,aLtec lwtff les pub!:cc:tairesUFO PR.F.SS es unc ,r::mestrol dedicada a la l:',temtico CVNI y edi:cc.:misi n de lnuestigocic. :{ULi}, aelegaci- cti ', :',9uo'iss 1L-irOSl er: : :ireccn P*sta:C"C. 2b, su,:. Li!425, Cnpiili l.Repb!itc ii.,

'.,,l*,'r5 ldeli.-:;: -v-*d7, si . . ' . -Distrib u1, ; Sc.=;' : :- rSuNripcidn t,r:..:--de j984. a.-

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EDITORIAL 3

De nkoRA EN msooo- N os ttimos aos, en nuestro pas, prctica.mente no ha habido

actividadD';;;;r;;;J;-qi, i' nuvu sufrido' los'e'fectos de la profunda cisis .social, po'F, iitru' irl,[ca en'la que nos hemos visto sumergidos' La ufologa, co- mo ctividad humana orqanizada, no fue la excepcin'Resultara ocioso exttenderse en omentarios acerca del actual estado de la investi'oilOn iVNt nn ,riiiri iifi' eniiendo que hemos llegado al punto en que todos1afconados. investiqadores y analistas) debemos asumir (aunque mu9no nos'iiiiil ;;;l; ifotgu pnrcnindose por tal at estudio cientfico, sistemtico y or-rtuo det fenrin'o Je tos objefos'voladores no identifica/.os) no existe e,n,Ar"oentina. Y iusto es prequntarse si alguna vez exisli, ms all de los valoraDles yi;i;;^J"; lnrit'ntvduaies.La fologa, en nuestro pa,s, ryo ha pasado nuncade st'r, iuslantente, un acopio de esfuerzls y aporles ndividuales V di1Persotl !!-',^denads 1,, mayoria de ellos al fracaso desde su mismo inicio y cuy,a rascendencnha sido mnina o nula tanlo a nivel nacional como internacional.- einrgintnu ,ornoi oo en o.tras tantas ramas de actividad) co1319eflemaleria-prima (innumerables y excelenes cas-os, y capacitados inve.stgadores yuiuttiiui) i, si embargo, la ive.stigacin OVNI se encuentra virlualmerte extingii v iat' pequenl rntts de da son, en muchos casos, francamente desaIentadoras en visfas al futuro.Y, necesariamenle, surge la pregunta: Cul es la razn del actual estancamienn de la investigacin ufolgica e Argentina?- iiuit oJu la culpaiel "impalse" ufolgico a la difcil situacin econmica vivida en los ttmos'llepo, n, hasla ciert punto, una disculpa facilista. Escierlo que la situacin de la conoma nacional no pe.rnite a una organizacin sinfnes de !ucro llevar irAo sus actividades con plena libertad, y que h.oy en da ediur-uiii.ple bote:t o viajar 400 ktmetros p'ara investigar un incidente es un luo iin-io'iii it, en'condiciones de darse; sera neZ.io no admitir esos datos'Jn-iiu ,iullJuJ qre nosotros mismos vivimos cuando cada trimestre debemos editiriuutt piiiacAn o bda vez que algn mi.embro de la CIU debe viaiar al interior del pas a los fines de una investigacin "in situ".-Pirso'nalmente, ui,ntiundo que et prblema fundamental pasa.par una nefaslap.itiiidud al nvdualismo' y ury total falta /e. grganiTcin, factores, por otrapare, que no son exclusivos de la actividad ufolgica sino que, por el contrarioparecen formar parte de nuestra esencia misma'' Baste como p'rueba de esta aseveracin el hecho de que la gran mayora de los"oruDos de invesliqacin" que actualmente existen no son olra cosa que meros"Zutit-di-go,;;,ripos conformados por un investigador, g dos e.n el meior deti ,iot, /utu u u , sus boletines se mencionan eitensas listas de colaboradores y completsimos "slaffs".

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LDITORIALl indvdualismo y la falta de organizacin va, incluso, ms all, trocndose ha-egosmo cuando se trata de comparfir informacin respecto de uno material ufolgico en general (fotografas, bibliografa, etc), lo cual lleva ainvestigador a alesorar de manera enfermiza la poca o mucha informacinobtiene privando a sus colegas de acceder a la misma y privndose, a sL! vez,acceder a informacin que poseen oros investigadores. As aparecen, encasos, las "fofografas exclusivast' y los "archivos ultra secrelos".problema no termina all, ya que no solamente juegan conlra la ufologa la di-situacin econmica, el individualismo y la desorganizacin, sino existe unfactor que, dn gran medida, sobreviene a consecuencia de los aneriores yla naturaleza misma de nuestra actividad: el desaliento, patentizado en la grande buenos investigadores que poco a poco se alejan del quehacer ufolgi-y de los pequeos o grandes grupos quq, de la noche a la maana, dejan de

panorama parece francamente desalentador y las perspectivas fu-lgicamente en que la situacin dista de serpero de ninguna manera es irreversible en tanto y en cuanto, una vez iden-el problema y las causas que lo moivan, acertemos en las medidas concre-en pos de una ufologa mejor.solucin de la problemt'ica no pasa por una persona en particular, sino quepor cada uno de nosotros, y por todos reunidos. La solucin transila necesa-por el camino de la organizacin; una organizacin que nos permila ven-las dificultades econmicas en la medida que todos parlicipemos de los costosla investigacin comparliendo los beneficios de ella; una organizacin que per-aprovechar los esfuerzos individuales y evitar que estos se diluyan, multipli-sus efectos en una coparticipacin de esfuerzos y de ideas; una organiza-que permita vencer el desaliento a travs de la fijacin de metas y obetivosy graduales; una organizacin en la cual sus miembros se despojen deegosmo y aporlen esfuerzos, ideas e informacin para benefcio de la disciplinanos ocupa; una organizacin en la cual sus miembros compartan punlos desin que ello implique perder su individualidad y su independencia de criterioun tema lan controverlido como el fenmeno OVNI; una organizacin, enque nos permita estructurar u;; verdadero estudio sistematizado del fenmenoy donde ninguno de sus mismbros sean piezas imprescindibles, garantizn-

as Ia supervivencia de la organizacin en el tiempo, ms all de susexislencia de una orqanizacin de tales caraclersticas no es una utopa. Porexisten en eiexterior ejemplos concretos de organizaciones'desfina-a nuclear el esfuerzo de grupos de investigacin e invesligadores independien-que realmente funcionan como tales y, si bien en el pasado cercano ha habidouna organizacin que nucle grupos de investigadores in-nuestro pas bajo la t'orma de una asociacin o federacin, esi,Jsno han ido ms all de eso (salvo un caso concreto) habiendo {racase,,causas que no hemos de analizar ahora, pero que bien pueden ser el pun': :de un nLtevo proyecto serio de organizacin en la medida que aprende-'::los errores propios y ajenos.

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EDITORIALDe ahora en ms, cada uno en la medida de sus posibilidades, de.beemos dgir nuestros esfuerzos y abocarnos particularmenle a dar las bases de la organiziin que nos nucle i qru nos peimila superar esta etapa verdaderamente crtde la investigacin ufolgica en nuestro pas.En nuesta prxima ecn continuaremos exponiendo nuestro pensamien

respecto de este tema, profundizando fundamentalmente en los lineamientos deorganizacin tal como nosot'ros la enendemos. Por cierto, nos interesara sabeofinin e ideas de nuesros lecores a esq respecto, pretend.iendo que esta ne'ditorial sea el punto de partida de un gil intercambio de ideas que nos permavanzar en este lerreno.La presente edcin estl ntegramente dedicada a los "casos de secuestrogracis a la iniciativa y al esfuerz de nuestro compaero de tareas Aleiandro A,gnett. Aprovechams adems para agradecer,,por-esle m.edi9, a nuestros cglegespanols Pedro Redn y Luis R. Cozlez del CEI barcelons, por.su in.estmaclaboracn y por el material facilitado, que ha permitido la realizacin de eedicin.J Guillermo Roncoron

3 De ahora en mspor Guillermo Roncoroni

6 Abduccin: cuando se quiebrala raznpor Roberto E. Banchs10 Hipnsis de "Abductees"Imaginariospor Aluin H. Lawson27 El "Rapto" de Quilmes:La Componente Etlicapor A. E.Chionetti y A.C.Agostinelli32 Dionisio Llinnca: El InformeSolaripor Guillermo Roncoroni36Secuestro ufolgico o Traumanatal?por Aluin H. Lawson

SUMARIO41 Alvin Lawgon: PromotorDetractor?por Willy Smith44Smith vs. [.awson: Buscarpunto justopor Luis R. Gonzilez4 8 Abdccionbibliografapor Luis R. Gonzdlez58 Ummorismo: Zafarranchol6oCrtica de Medios64 Espacio del lector66 Homenaje

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OPrNloNffiffiffiffiffiffiffiffiffiCUANDO SE QUIEBRAtA RAZONE. Banchs0S casos de abduc-cin, o secuestro,constituyen los msinteresantes reperto-dentro de los encuentrosovnis, no slo por la abun-de elementos testimo-de alta extraeza, sinopor los indicios reve-de su eventual natura-Es esta clase de informesque durante largos aospermitido suponer quea aportar los argumentosdel origen delEn cambio, esta-ante un gran interro-qug 9eja entreverlimitado conocimientomientras insistimosinviabilidad de las llama-hiptesis simplistas, co-pretendida explicacin defenmeno que aparece ancomplejo cuando vamosen los aspec-ms desusados y de difcilcomo el aqu

Nos estamos refiriendo a losen que seres humanoshaber sido secuestra-por una "manifestacinsea esta el mismo obje-o las entidades que ocupaniriterior, denominadas ge-"ocupantes",su habitual antropomorfia.

Dentro del tecnicismo jurdi-co, se reserva la voz "se-cuestro" parala clase de deli-tos en que una persona esaprehendida, mediante lavolencia o enga0, y ocultadapara un determinado f in (1). Elconcepto permite aplicarsefuera del contexto estricta-nente lesalista v denotar laclaS de "sucesoS en que lostestigos-ovni .son red.uci4os Y,con recuencia, conducidos alinterior del objeto o a un mbi-to totalmente extra0. Porisual. suele emplearse tam-bin'el trmino "abduccin",de uso extendido,Las claves para el asombro:

de se observan entidades uocupantes, huyendo ante lapresencia de los testigos ooermaneciendo indiferentes ocontemplativos frente a ellos.Los informes disminuyen to-dava cuando deseamos exa-minar los casos de contacto,en los cuales se establece unasuerte de comunicacin o unmensaje inteligible por partede los ocupantes. Y finalmentese hallan los casos de abduc-cin o secuestro. dondedichos ocupantes acos-tumbran experimentar con epercipiente humano.Pese a que esta categoriza-cin se encuentra - inevi-tablemente- viciada de algu-nas interpretaciones huma-nas, al estudiar los distintos ti-pos de informes segn la pro-ximidad con el testigo, es po-sible advertir contrastes deimportancia en el comporta-miento del fenmeno. siendopor dems sugestivo que enlos informes de contacto apa-rece una cualidad "mstica"-a veces mesinica- antesoue "cientfica", a diferenciade los casos de.secuestro.con sus matices exoerimenta-listas.No obstante. queda claroque hay una cj'e:encia'desta-cable entre i:: : i: ucido y uncontaciCo. i: : ccntacto los

Entre los diversos tiPos decasos ovni, son extremada-mente raros los relatos de se'cuestros. La mayora se re-fiere a avistamientos de obje-tos a larga.distancia y altitud, amenudobbservados en trnsi'to. v de obietos relativamentepr'limos, -con formas bienapreciables por su tamao an-gular, que.dan la impresin destar siguiendo los accidentesdelterreno. En menor cantidadse hallan los aterrizajes, queDarecen darnos una idea ms]lrecisa de cierto reconoci-mienlo. Menos frecuentes sonlos enluentros cercanos don-

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OPINIONocupantes pueden invitar altestigo al interior del objetc,trayndolo de vuelta a un lugarfamiliarizado por 1. En un ca-so de secuestro, en cambio, lamanifestacin ovni se apoderade la persona, reducindola f-sica o volitivamente, para con-ducirla a otro sitio donde esretenida. Una distincin anms notoria se advierte en lassimples observaciones deocupantes, muchas veces es-quivos y faltos de inters en eltestigo.Fuera del mrgen de credibi-lidad que se.desprende de nu-merosos eprsooros, como enlos fraudulentos secuestrosargentinos de Dionisio Llanca,en Villa Bordeu; de CarlosDaz, en lngeniero White, yotros, as tambin, en los c-lebres y aparentemente fiablessucesos ocurridos en otras la-titudes, tales como los de Bar-ney y Betty Hill, en New Hamp-shire; Antonio Villas Boas, enSan Francisco de Sales, y deCharles Hickson y Calvin Par-ker, en Pascagoula, surge elpropsito de violar fsicamen-te, o de alguna otra forma, lapersona del secuestrado.Contrariamente a los contacta-dos, los seres humanos noparticipan de conversacionesamigables, a los cuales se lestransmite algn tipo de conoci-miento, prediccin o aviso(2).Pero tampoco puede pasarsepor alto que los casos fidedig-nos no difieren sustancialmen-te de ciertas i.magineras hu-manas n0 Insptradas en suce-sos reales, cuvas posibles mo-tivaciones (cm u'nes?) habraque hallarlas, tal vez, en losestudios de Carl j.ung sobre eltnc0ncrente c0tecttvo.Sin embargo, no hay manerade saber cuntos casos de se-cuestros ocurren anualmente.Los nicos registrados han si-do los que fueron ofrecidospor los proiagonistas, al ser li-

Interpretacln 8no de un dibra4te dm! en ble al publlcttsdo m de bduccln_ ,_ _ Antonlo Yi[ar Boe (Do!. SUFOI).,_. _-berados y recuperar la con- parecidas, segn constaciencia de lo ocurrido. El mis- los archivos policiales,mo caso Hill, en 1961, fue re- dieren haber sido secuesportado a la Fuerza Area co- das por una manifestacinmo una observacin de un dis- ni (4). No deja de ser sugerco con ventanas, pero nada di- te, tampoco, que en los tramjeron acerca de los ocupantes finales del resonado filme "nide la prdida de tiempo, que cuentros cercanos del terslo se revel fortuitamente tipo", aparezca una gran nbajo hipnsis. Aunque es de ignota procedencia queoportuno sealar que cuanto va a bordo y restituye ams extraordinario es el suce- numerosa colonia humanaso (o ms conmueva o suscite diversas pocas, y a algunemociones y reflexiones), el vehculos embargados.testigo parece tender por lo mismo, cabe agregar que egeneral a mantenerlo en reser- mos ante hechos que no deva entre las personas de su de analogarse con lo acontconfianza. Recordemos el inci- do en muchos convulsionaddente de Socorro, en 1964, en pases del continente, aunqel que un patrullero de cami- -por supuesto- debidnos vi un ovni y a dos de sus causas muy distintas. Pocupantes, que -pese a haberlo quizs una parte de nuestroreportado oficialmente, prime- ters por este aspectoro pidi que lo dejarana solas problema y el por qu decon un sacerdote (3). aumento de informes de eEs sorprendente notar que ndole, debarnos hallaralgunos uflogos afirman que fuera del marco de la ufologinuchas de las personas desa- .r(l)-CABANELLAS, Cuillermo; Diccionario de Derecho Usual.Ed. Atalaya, Buenos Aires, I946. (2) gRlAZACf. Norman v MENNICKSimon; O Guia dos Ufos. Difel, Sao Paulo, 1979; pp. l/lB.(3) VA!!EE, JuqqggqiElC_glegio Invisible. Diana, Mxico, l981; p. I(4) MICHEL, Aim. Revista Lumieres dans la Nuit. Le Chambon-sur-Liqnon, Nmero 164, Abril lg77: no.

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OPINIONpor el fenmeno, siendo la ma-nifestacin de una inteligenciacapaz de modificar su propianaturaleza fsica y psquica.Aunque algo endeble para elactual paradigma cientfico,esta hiptesis viene a conciliardiversas tendencias de opi-nin sobre la naturaleza de losovnis. Surgida de la paulatinaaceptacin de un fenmenoextraordinario v del interscreciente por sta clase detestimonios, la derivacin ac-tual hacia temas tan fantsti-cos provoca , a la par , variadoscomentarios y fuertes reac-ciones en los ambientes msracionalistas. Tendencias quese producen trs una singularexaltacin del poder delhcnbre puesto en el de-sarrollo de la ciencia v la tcni-ca, pero tambin, cando sehalla en un umbral prximo alos lmites del conocimientoimpuestos por la tradicin po-sitivista, asomado a un univer-so abierto al mundo del incon-ciente v lo irracional. Ms allde lo p-erceptible y circundan-te, aparece una realidad queno es captada usualmente pornuestros sentidos y que no al-canza a ser comprendida confacilidad mediante los meca-nismos de la razon.A vista de la componentecrucial que resulta la circuns-tancia vivida por eltestigo, he-mos distinguido suscintamen-te diversas modalidades desecuestros-ovni en relacin asu estado de lucidez de con-ciencia:1.- Secuestro-ovni ordina-rio: el testigo tiene plena con-ciencia de todo lo transcurri-do, desde el momento en quees llevado hasta su reintegro.2.- Secuestro con extravode la conciencia: se produce" prdida parcial o total dela misma, entrando en un esta-do amnsico, de ensoacin,

o de falta de capacidad anmi-ca o reflexiva. Por lo general,se produce en las facetas mssignificativas del suceso.3. - .Salto espacio-temporal:constsle en un cambto apre-ciable, instantneo o paulati-no, a lo que es descript como"otra realidad", situacin o lu-gar sin prdida aparente de lossenil00s.Auntenticidad o ficcin:

y la psique:En el estudio de los casosabundantes argumentosconfirmar que elfen-guarda relacin con laintroduciendo una dis-espacio-temporal en ele se d escriben las si-vividas por los testi-En tan espinoso problema,conexin existente entre lospsquicos y parap-a los ov-demuestra cierta coheren-que no reside slo en unade algunos detallespu0reran aparecer com0reflejo del inconciente per-o colectivo, sino en unade otros aspec-sin contenido afectivo oque sugieren provenirHav indicios cadams evidenes de que nosante una inteligenciaotro orden, ajena al ser hu-pero que tiene "algo en1". Se puede su-inclusive, que el ovni

utilizara a la vez da-obtenidos del inconcientedatos directrices impuestos

Crrl G[stv Jung: rur ld@! en lomo alfenmeno OVlt{l an e apllatr y, en mrde m urlto !uy, lodava no ha rdorupendu.

Atentos a lo descripto porlos testigos de tan enigmticoshechos, una pregunta perma-nece latente en nosotros: sonautnticos testimonios de unarealidad percibida?.Antes de intentar formularuna respuesta, ser precisohacer una distincin bajo elcriterio de verdad o falsedadinferida de la consistencia deltestimonio. Desde luego quelos informes comprendidos enel primer criterio despiertannuestra mayor preocupacin,sin restarle por ello inters alos segundos, que nos han deavudar a reconocer el factord ruido que afecta este tipode repertorios.Los casos falsos (o sea, losque falsean la realidad aconte-cida), estn ordenados de lamanera siguiente:a) Casos deliberadamente mis-tificados o fraudulentos.b) Casos originados en labuena fe del testigo, pero irre-ales al hallar causas naturaleso conocdas (psicsis, alucina-ciones, etc.).Apelando a cierto reduc-cionismo, los casos verdade-ros estn comprendidos delmodo en que se seala a conti-nuacin:a) Casos sin explicacin con-vencional y reconocidos comoreales. i rrer:os, en el mbitodel teslrg:b) Cs: s :::s'derados autn-

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OPINION 9ticos como una realidad per- surgen, por semejanza, comoceptualde caractersticas an- un ejemplar "cuento de ha-malas, capaces de ser re-^das", como un pasaje a unagistrados por instrumentos e dimensin mgica u onricaimpresionar los sentidos de donde no cab ninguna evi-cualquier otro sujeto que pu- dencia que los respalde, fueradiere haber estado presente, del valor que puede tener elpor una probada naturaleza f- testimonio del mismo protago-sica. nista. A nuestro modo de vr,A partir de entonces, podr insuficiente para emitir uriiniciarse el estudio para deter- juicio sereno y demasiadominar si los informes son confiable sobre una realidadautnticos expedientes de una tan peculiar.realidad subyacente al Al examinar estos casos, sehombre, o lo supera; orientan- tiene tambin en cuenta undo la investigacin hacia el factor de posibilidad que re-esclarecimiento del fenmeno sulta de la formacin y crite-en su conjunto, con el auxilo rios aplicados para evaluarlos.de hiptesis preliminares y de i En algunos, de la inclinacinespeculacin terica. previa oor defender determi-Es curioso y notable advertir hada teora: un escptico seque los informes de resistir invariablementeaad-secuestro-ovni no suelen pro- mitir cualquier explicacin queporcionar ninguna clase de ar-.le resulte desusada. Un fanti-gumentos fcticos, probato- " co mstico jams aceptar unarios, sino algunos de dudosa.verdad que se oponga a supr0cedencra. l0do parece dogma. Un cientfico adheridodescansar en la confianza que .a su ciencia no soportar algonos inspira el testigo, an i que pu.eda quetlrantar suscuando se encuentra someti- . principios ordenadores ydo a los ms severos exme- tachar de absurdo lo que e-snes o interrogatorios. inexplicable. A pesar, sn es-Mientras assea, seguir sien- tos episodios los que debendo una realidad sostenida so- impulsar a la investigacin y ac.ialmente, desde stas expe- ensayar nuevos y meJ0res mo-riencias individuales. delo explicativris conforme aEs claro que los relatos de los hechbs y hallazgos.los presuntos "abducidos" Incluso etamos abituados

a ver personas que admitenexistencia de los ovnis comexp.resin de una inteligencno humana, pero que se-resten a aceptar que los mismpuedan aterrizar, ms aque puedan estar ocupadopor entidades antropomorfay todava mayor es la resistecia por admitir la posibilidade que sta manifestacipueda secuestrar y reteneralgn especmen hLmano. pro -admitida esa teora- nhay motivos fundados para spgler que ello no sera psibleD

SOBRE EL AUTORArquteclo en orienlacin ur-banstica. Licenciado enMetodologa Cientlica. Doc-tor en Psicologia Social. Sedesempe como docenle einvestigador en la Universi-dad de Belgrano. Desde1 965 se dedica al estudio delos OVNI y es Coordinaoordel CEFAI (Centro de Estu-dios de Fenmenos AreosInusuales). Su direccinpostal es: Casilla de Correo9, sucursal 26, 1 426,Buenos Aires, Reoblica Ar-gentina. D

CT, SOUTH AUSTMLIA 5082

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HIPI\{O$S DT,ABDT]CTtrES"IMAGINARIOSH. LawsonN un intento deevaluar objetiva-mente las declara.ciones de los "se'por OVNIs, sehipnticamenteimaginarias agrupo de voluntariosno poselan nlngun co'previo sobreA cada sujeto se Ie8 preguntas si'que abarcancomponentes ms im'de un tpico rela'de "abduccin".Aunque los investigado'esperaban diferenciasla comPara'entre un resumen dede 4 abduc'

"reales" y 4 imagi'no evidenci va'eignificativas.en las sesiones re'sobre los sujetosdel tema OVNIex'configuraciones quedetalles bien es'en los informes"reales".Todava no existe unasatisfactoriadichas configura'ni para otras simili'entre las abduc'"reales" e imagina'

ras-. Qui significativa-mente, existen bastantesparalelismos entre estascaractersticas y las "cons-tantes irnaginativas" odescripciones recurrentesde forma, color y movi.mientos facilitadas por dis-tntas personas en experi-mentos de alucinacionesinducidas por drogas; ocon los llamados "relatosms aII de la muerte", ascomo con otros procesosmentales. As pues existenrazones para pensar que'al menos algunas partes delas historias contadas porlos secuestrados "reales",reflejan con bastante exac-titud Io qrre sus sentidoshan percibido.Sin embargo, pese a lasnumerosas semeJanzas,existen tambin diferen-cias cruciales (tales comolos supuestos efectos fsicos o los testigos mltiples)las cuales parecen postularque las abducciones porparte de los OVNIs son algoapate y distinto de las ex-periencian alucinatorias oimaginarias. Teniendo encuenta esta matizacinpuede proponerse el si.guiente Modelo de Abduc-cin: el testigo percibe re-

almente ciertas imgenes(de no importa que fuente)tales como luces ParPade'antes y muy brillantes, for'mas reticuladas movindo'se aI azar en el cielo, tne'les iluminados, figuras hu'manoides. etc. Estas cons'tantes de la abduccin secombinan con elementosprocedentes de la imagina'iin y la memoria de testi'o. incluvendo sus conoci'ientos previos sobre OV'NIs, para crear un en'cuentro "real". La realidadsubjetiva de una intensaexperiencia alucinatoria esun suceso fsicamente real.Posteriormente Puede queel testigo d a conocer la"verdad" tal como l la ha"vivido", aunque Io que re'almente ocurri resulte im'posible de dilucidar.' La complejidad del fen'meno OVNI queda reflejadaen el modelo que acabamosde describir, ya que exis.ten muchos asPectos enig'mticos todava sin expli'car,. entre ellos el mayormisterio de todob: Ia natu-raleza del estmulo que ini.cia ta alucinacin en el tes.tigo, disparando as la se.cuencia de la abduccin.El autor prefiere una hi-

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ESTUDIO 11ptesis dualstica sobre losOVNls. Pero mientras si-gue sin obtenerse una evi-dencia fsica suficiente-mente concluyente, estetrabajo permite llegar a laconclusin'de que Ios OV-Nls son -en trminos psicolgicos- incuestionable-mente reales y que toda in-vestigacin centrada en losaspectos no fsicos del fe-nmeno es altamente pro-metedora.INTRODUCCIONDesde principios de1977, 16 voluntarios hansido hipnotizados y someti-dos a "abducciones" imagi-narias, por un hipnlogoclnico en colaboracincon un grupo de uflogos'en la Baja California. El ob-jetivo del presente trabajoes describir los distintosexperimentos realizados ydiscutir sus implicacionesen la investigacin OVI\II ala luz de otras experienciasanlogas a las abduc-ciones, particularmente lasalucinaciones inducidasmediante drogas.Los secuestrados imagi-narios eran voluntariosprocedentes de distintasescuelas universitarias ycomunidades locales. Etgrupo estaba compuesto del0mujeresy6hombres,entre 12 y 65 aos. En basea un breve cuestionario,cuya parte oral fue realiza-da antes y durante la hip-nosis como una comproba-cin suplementaria, todoslos sujetos fueron conside-rados como "ovejas", estoes, ignorantes respecto altema OVNI y no familiariza.dos con la extensa literatu-ra sobre el mismo.

El estudio sobre abduc-ciones imaginarias estuvomotivado primordialmentepor la ihstisfaccin de losinvestigadores con los re-sultados de distintas inves-tgaciones sobre casos deabduccin supuestamentereales. Entre las varias ob-jecciones destacaremos: l)la incertidumbre sobre lacredibilidad de los testi.gos; 2) la ambigua naturale-za de las evidencias anec-dticas y de otro tipo queapoyaban las declara-ciones; y 3) cuestiones noaclaradas tales como la efi-cacia de la hipnosis y/o delos procedimientos hipn-ticos aplicadog en cada ca-so particular.Los investigadores co-menzamos el estudio en lacreencia de que las abduc-ciones imaginarias seranclaramente diferentes delos casos "reales", ofre-ciendo as alguna pruebasobre la "realidad" de lasabducciones investigadas,Pero lo que encontramosfue sorprendente e in-quietante, y la mayora deltiempo transcurrido desdeentonces lo hemos emple-ado en tratar de dilucidarlas conclusiones de esosinesperados resultados,METODOS Y MATEBIALES

Como nos muestra la ca-sustica conocida, la mayo-ra de las aproximadamen-te 2) abducciones queconstan en los archivospresentan varias etapasdistintivas, el conjunto delas cuales configura una se-cuencia de la atrduccin o"Abduccin Modelo":. E testigo est en unentorno normal fsica v

mentalmente.. El testigo entra en unsituacin de "p"eabduccin".r Comienzo de la experiencia.A Prdida de Control.B El testigo percibe un OVNI.C El testigo tiene la sensacin de ser conducido al interior del OVNI.D El testigo observa el interior del OVNI.E El testigo percibe unoseres.F El testigo siente como e"examinado",G El tesgo nota como recbe un "mensaje".H El testigo se encuentrde vuelta en un entornnormal. Fin de la experiencia.o Secuelas de la abduccin.

A partir de esta "Abduccin Modelo" se elaboruna serie de 8 preguntas stuacionales que fueron incorporadas en el cuetionario que se pas a todos los sujetos del expermento. A continuacin presentamos un breve resumen de dicho cuestionarioI - Declaracin prelimnar describiendo la naturaleza del experimento.2 - Hipnosis.3 - Se presenta la idea deencuentro OVNI imaginario y se' pide al testigo qucuente todo lo que ocurrcon el mximo detalle.4 - Se formulan diversapreguntas sobre cada unde las 6 fases de un encuentro OVNI o abducciimaginaria:l) Imagnese en su lugar favorito, cmodo y relajadocuando de repente ve uOVNI. Describa lo que ve.2) lmagnese que ha subidal OVNI. Cmo lleg al interior?

(') El grupo incluye al Dr. W.C. IvtcCall, John De Herreray el autor. Versiones preliminares de este trabajo hansido presentadas en los Simposium OVNI del MUFONen 1977 (Scottsdale, AZ) y en la Reunin de la Aso-ciacin Americana de Psicologa en 1978 en Toronto(Canad).

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Imagnese que se en'en el interior delDescriba lo que ve'Imagnese que ud. estentidades ose OVNI. Descr'Imagnese que los seressomten a un examen 'Describa lo que le es-pasando.imagnese que ud. recibelipo de mensaje deocubantes del OVNI.dice el mensaje Y co'se lo dieron a conocer?Imagnese que ha I'teltodonde se encontrabavi el OVNI. Cmohizo, y cmo se siente?lmagnese que ha PasadotiemPo desde quesu encuentro conOVNI. Hay algo que in'que su Personalidadsus funciones fisiolgicaspsicolgicas han sidoen alguna formasu experiencia?Para tratar de conseguir

perspectiva global delse intentlos datos obte'tanto en las abduc'"reales" como ima'Las transcriP'de 4 casos "reales"4 imaqinarios fueron ana'por lnea Ybajo 8 diferen'categoras:Patrn (paralelismo evi'con casustica Pre'Posible patrn (Parale-que el analista consi'probable)Patrn no reconocibleExtraeza de los datosObjetividad del sujeto (seque la resPuestasesgada)Deformacin del sujetoestima que la resPuesta

prejuicio o suges'Posible dato paranormaldatos ESP tales como

h) Componente emocional(ta emotividad en la res'puesta del testigo)Durante el anlisis se uti'lizaron otras dos catego'

ras que no aParecen en lacompracin de la Figural:i)Sugestin intencional(una pregunta sugerente Yptanteada deliberadamen'te)j) Sugestin no intenciona-da (pregunta o sugerenclano flattada o accidental)

Las 4 abducciones i'reales" fueron seleccionadasprincipalmente Porque seiratab de casos creibles,con 2 o ms testigos Ysobre los que disPonamosde transcripciones comPle-tas de las regresiones obien alqn otro tiPo de in-formes detallados. Los se'cuestrados "reales" son:a) Betty Hill, cuYa abduc'cin iunto a su marido Bar'ttev tt New hamPshire enl96l es quizs el ms famo'so caso e este tiPo. El es-tudio utiliza la "narrativaonrica" de la Sra. Hill (5)-un detallado inforrnesobre la serie de sueosque siguieron a su suPues't abduccin- en vez delas qrabaciones de las se-sions hipnticas, debido asu mayor laconismo Y a suesencial identidad con es'tas ltimas.b) Judy Kendall (7), una delas 3 hermanas que asegu'ran haber sido secuestra-das cerca de Woodland (Ca-lifornia) en 1971. El casoKendall fue investigadopor el mismo equiPo deuflogos que trabaja en es-te estudio.c) Sandy Laron (8) que ase'qura haber sido secuestra-. cott su hija y su novio enDakota del Norte en 1975.d) Elaine Thomas (9) una deque

supuestamente secuestra'dai cerca de LibertY (Ken'tucky) en 1976.El intento de cuantifica'cin es subjetivo Y utiliza

una pequea muestra' Perose aplic la misma herra'mienta analtica en ambostinos de atducciones. Debe"alutse asinrismo, quetos casos.de abduccionesbien investigadas Y con tes'tigos mltiples son muy es'casos.RESU LTADOS

El anlisis en 8 catego'ras se realiz simPlementetotalizando las unidades deinformacin (bits) existen-tes para cada categora Yotrteniendo los Porcentajesresultantes. Mientras quelas categoras individualesvaran hasta l0 Puntosunas de otras, cuando secompararl los Promediosde las 4 abducciones "-re-ales" e imaginarias, surgensorprendentes similitudesentre ambas, comomestra la Fig. I'Cualesquiera que seanlas posibles deficienciasdel anlisis comParativo Yde la cuantificacin Poste'rior, todos los sujetos ima'qinarios describieronruchas configuraciones Ydetalles idnticos aaquellos que aparecen convariable frecuencia en todala casustica OVNI (no sloen casos de atrducin)' l'asDautas varan desde las ob'vias ("en f orma deolatillo';) a raros e inclusobscuros detalles de altaextraeza ("tnel de luz")'Alqunas de las ms intere'.rtes caractersticas apa'recidas en las 8 Primerassesiones hipnticas' estndebaio (clasif icadas en"norraleb " e "insltas"para mayor claridad). Vercuadro.. +

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ESTUDIO r3tabla ILOS PATROHES EI{ L(lS RAPTOS IMAGIilARIOS

"Visn del OVNI"OVNI dernasiado brillanle -9ara verloOVNI en lona de disco (3)OVNI rodeado de neblrnaN4ovirnientos errtlcos

"Examen"De cabeza a pies, rneldicarnente (3)Entidades arnables, pero a lo suyoParisis duranle el exarnen (4)"Mensaje"Teleplico (4)Conienrdo: ecolgrco' crentifrco, "volveretnos"olvidar todo" (2)" Retorno"Faliga y desorienlacion"Nade rne creer'El testgo acepla la experiencia OVNI"Secuelas"El tesligo mantiene una "mente rns abierla"El test9o olvda lo ocurnoo

OVNt Ins brilla4te que-coloreacoP,'j:i lJl"ll'J:":t1".31,'oT3jll,",,o ", n',o o"'obetoOVNI "aurnenta Y encogel't"ar,go srenle oue el OVNI lo observaEl lestigo es llevado a travs de un tunel de luz(3)El acceso parece 'un largo vajeEl lestigo enlra a travs de las paredes del OVNI

Patrones inslilos

Sin consolas ni rnobiliarioflurno y neblna (2)Fro y calor en alternanciaZurnbido casi "hipnlicoPantallas de TVEl testigo se encuenlra denlro de una "burbuja'

Tornan rnueslras de sangreEl lesligo senle un exafnen rnenlal (2)Hernorragias detenidas y curadas rpidarnenleEI teslrgo duerrne baslanle ternpo despues delexarnen

Verbal (2)Olro (2)Sin rnensaie (3)El ser rnueve la boca pero sin etnilir sonidos

Piel rrrlada, garganle secaOuemaduras en la PrelEl teslrgo se sienle "rns allo"

El lestigo queda intrigado por el "trernpoperddo'i tst'go espera que "algo va a pasar"

Patrones normales

"Acceso al OVNI"El testigo es llevado en tranceEl testigo se desmaya"lnterior del OVNI"

Consolas, rnobiliario (5)Luces rnuy brillanles i6)fernperalura fria (3)Zumbido fuerle"Seres"Hurnanos (2)HurnanoidesBobolsSin algn rasgo facial (6)Dedos con membranas interdigrlales y pulgaresEl lestigo percibe seres telepticos (3)

Anrrna leSExlicos (3)Aoaricionales (2)Dos tipos de enlidades en el rnisino OVNIRayo retrctil etnitido por los ojos del ser

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Una de las ms extraascoincidencias relacionauno de los relatos imagina-tivos con el informe de unaabduccin rodhesiana de1974, describiendo ambasentidades aparicionalesque asumen cualquier for.ma que el testigo deseever. Ello sugiere la provo.cativa posibilidad de quelos testigos "reales" seande alguna forma respon-sables de ciertos elemen-tos significativos que apa.recen en sus propias ab.ducciones.

Los tipos de entidadespresentes en los casos "re-ales" e imaginarios consti-tuyen otra interesantepauta. Debe sealarse quelas. 6 categoras conocidasde entidades (humana, hu-manoide, animal, robot,extica y aparicional)fueron descriptas en las 8primeras regresiones. Losdibujos de las Fig. 2 y 3ofrecen la ms clara evi-dencia en favor de la exis.tencia de amplios y profun-dos paralelismos entre lasabducciones "reales" eimaginarias.

DISCUSIONLos patrones que apare.cen tanto en las experien-cias"reales" como en lasimaginarias forman unconjunto demasiado abun.

dante y complejo como pa-ra deberse a las fuentesculturales ordinarias talescomo la televisin, el cine,las restas y otros mediosde comunicacin. seraesencial un profundo cono-cimiento de toda la literatu.ra ufolgica para saber de-talles tales como rayos deluz que se retraen, OVNIsque cambian de tamao, le-taciones a travs de untuto luminoso y seres pocousuales. Y sin embargo,nuestro procedimiento deseleccin haca muy impro.bable un conocimiento pre-vio sobre el tema OVNI su-ficientemente significativo.Cualquiera que sea suorigen, estas configura-ciones parecen probar quelos secuestrados imagina.rios no fantasean en abso-luta libertad -por ejemplo,no describen seres gelati-nosos u OVNIs que respi.ran-. La ausencia de estasdisparatadas imgenes su-giere que dichas configura-ciones ofrecen una estruc-tura comn alrededor de lacual los testigos imaginansus experiencias, siguien-do un limitado campo ima-ginativo que coincide conla mayora de los casos deabduccin "reales".Debemos destacar asimismo que dichos patroneso configuraciones parecenconfirmar que las narra-ciones imaginarias puedenconvertirse en indicadoresde confianza sobre detallesde casos "reales". Estasorprendente conclusinpuede llegar a tener ungran valor en futuras in-vestigaciones, aunque demomento no sepamos c-mo.

DESCRIPCION DE UNA APARICIONMAGINARIA"... Mientras ms lo miraba rns tomaba forfnahurnana ante mis ojos. Cornenz rnuy alargado...tena partes de una cara hurnana perol.. de algu-na forma no era normal. Era corno si no tuvieraorejas, o... conforrne rns lo rniraba.,.. rns ernpe-zaoa a parecerse a lo que yo quera ver corno unser hurnano... Me pregunto si rne estara proyec-tando esa irnagen a travs de rni rnente... porquecarnbiaba continuamente conforrne se acercabapaso a paso. Tena la sensacin de que se carn-biaba para rn..."

,Sujeto hipnotizado N. 4DESCRIPCION DE UNA APARICION "REAL''"... Fuirnos prograrnados dentro del autornvil...Y enlonces la forrna que haba sldo proyectadaen el asiento trasero y que se rnanluvo all duran-le todo el viaje me dijo que yo vera lo quequsera ver en su lugar y slo eso: si yo queraque parectese un fnonstruo, parecera un rnons-truo. No s... que hicieron... Tenan la rnisna for-ma general que los hurnanos, con torsos grandesy cuellos ... que hicieron... Tenan la rnisrna forrnageneral que los hurnanos, con torsos grandes,cuellos, sin pelo, dos brazos, dos piernas..."Tesllgo de la abduccin rodhesiana (bajo hipno-sis) FSR 21 N" 2 o. 9.

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Queda todava sin res.ponder la pregunta clave:De dnde provienen esosimportantes patrones queaparecen en los relatosimaginarios de abduccin?Examinemos algunas alter-nativas:A. El procedimienlo hipntico.-Ya que la regresin hipn.tica se ha ido utilizndo ca-da vez ms en estos lti-mog aos para obtener ma-yor informacin solre lassupuestas abducciones, esrazonable preguntarse silas pautas que aparecenpodran ser estimuladaspor eI procedimiento hip-ntico seguido. Desdeluego, debe mantenerse lamxima cautela sobre losresultados de la regresinhipntica en la investiga-cin de casos OVNI. Comosabe cualquier hipnlogoexperimentado, la "mes-merizacin" -sea cual seasu naturaleza- no es uncamino seguro ni un atajo ala verdad. Cualquier testigo puede mentir, o creersus propias mentiras, e in-validar por tanto la regre-sin. Un resultado ms fre-cuente suele ser que el tes-tigo confunda sutilmentesus propias fantasias con larealidad, sin que l mismoo el hipnotizador se dencuenta de lo que ocurre. Yaen fecha tan lejana como1947 un inteirto de utilizarla hipnosis en una investi-gacin OVItll se convirtien un ejemplo -aunquecompletamente inespera-do- de una abduccin ima-ginaria (2). Puede resultarimposible saber con certe-za cuando el testigo estfantaseando.No obstante, la regresinhipntica se ha empleadoen un pequeo porcentajede los miles de informesque han establecido los de-talles ya conocidos que ca-racterizan el fenmeno OV-

NI; y adems, muchos de

estos rasgo! peculiares (ta.les como los rayos de luzretrcles) tambin apare-cen en casos donde no seha usado la hipnosis. Portanto, la hipnosis r,iii;edeser una herramienta de in.vestigacin muy valiosa, sise usa con las debidas pre.cauciones. Esto es todo loque podemos afirmar porel momento.8. Inlerrogalorio sesgado.-Otra suposicin admisiblees que los patrones son mo.tivados por una serie depreguntas tendenciosasque pueden sesgar los re-sultados de la abduccinimaginaria. En respuestanos limitaremos a citarparte de la regresin ima-ginaria nmero 6, Nteseque el hipnotizador realizauna pregunta simplemientras que eI sujeto res-ponde con un extensoprrafo descriptivo dondepueden contarse ms de 35detalles observacionales-ninguno de los cualespuede decirse que sea de-bido a sugestiones o a otrotipo de metodologa in-correcta-:P: "Ahora imagnese queud. est viendo algunas en.tidades o seres... Desrr:ba.los tan detalladamente co.mo pueda".R: "Parecen tener formahumanoide. Tienen cabe.zas redondeadas. muchoms grandes que ... las hu.manas. Parece casi como siestuvleran,.. comprobandosi soy hostil o no. Sug cuer.pos tienen un color diferente del de sus manos yrostros. Puede... puede quesean ropas... I-a piel pare.ce... como de cera... ceraamarillenta. No tiene nadade pelo. Tienen una espe-cie de piel llena de hincha.zones. Sus rostros parecenhumanoides. Pero sus ma.nos tienen el mismo coloramarillento y tamtlin

hinchazones. Realmente no

tiene dedos, aino una escie de membranas. Yembargo no veo unas ptuberancias claras o dedSino una especie de munes al extremo... de 1a.mano. No parecen... teneNo puedo ver piernaspies, quiz ellos tienen..que parece como... ropaalguna clase que les llehasta el suelo. Los dostn vestidos iguales. Elje es... oh... de un colorrando ms a prpura quazul. Parece ser todo unhecho todo de una spieza- No se ve ningucostura en el traje. Sus oestn muy, muy hundidoRealmente no puedo vojos ni pupilas. Tienenque parece una nariz enmedio de la cara, pero remente apenas si eobresaY las bocas son... aberturredondas sin labios... Pacen tener cuellos muy ctos y hombros manchos... lf{iden unos 4 p2 pulgadas. Puede quepoco ms... No tienenmas ni herramientaSimplemente dan vueltalrededor de m... Ysuelo parece estar hudindose como si fueraascensor. Y... la puerta prece elevarse. Creo quetamos descendiendo.. Esno parece afectar:les lo mmnimo. Creo que posibmente me estn estudiandde la misma forma quelos estudio a ellos". (Elbujo de los seres descrtos, segn fue realizapor eI propio testigo, aprece en la Fig. 4).Aunque en ninguna ssin hipntica pueden eminarEe por completo lsesgos y sugerenciasconcientes, en'las regnsiones imaginarias nopresentan en general estipo de fallos. Quis debra recordar aqu qunuestro anlisis comparavo localizaba las posiblepreguntas sesgadas, elimnndolas.

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16 ESTUDIOC. Son las abducciones "re-imaginarias?.-existencia de importan-y numerosas coinciden-los relatos "re.e imaginarios nos lle-fcilmente a suponerlas abducciones "re-son imaginarias. Pe.existen tambin diferen.importantes entre am.tipos de experiencias,muestra la tabla com-siguiente:

En cualquier caso los in.vestigadores somos con-cientes de que cualquier te-ora explicativa debe teneren cuenta las conside-rables diferncias existen-tes entre ambos tipos deabducciones.D. La influencia de la hiptesisextralerrestre (HET.-Los OVNIs, y desde luegosupopular seudnimo, los"platillos volantes" su-

EXPERIENCIAS DE ABDUCCIONIMAGINARIA. Voluntarias El testigo norrnalrnente controla sus efno-ciones. No tiene Sensacn de "tienpo perdido". No presentan efectos fsicos o fisiolgicoso No oadece arnnesia. Pocos sueos o pesadillas. Ninguna secuela aparente

Norrnalrnente no hay rnernoria "conciente" de laexoeencraEXPERIENCIAS DE ABDUCCION "REALES''. InvoluntaraS. Los tesligos estn a rnenudo asustados y rnani-fiestan una gran ernotvidad. A rnenudo se citan "tiernoos oerdidos". Se indican electos fisicos o fisiolgicos. La arnnesia es frecuente. Sueos y pesadillas, etc.. Secuelas consstenles en perturbadores efec-los ernocionales o osouicos. A veces se tienen rnernorias concients del en-cuentro OVNI

Durante una de las se'que realizamosun incidente muyuna vez desper-los sujetos que inter-(una pareja) no pu-asegurar que no hu-tenido un encuentroDe forma similar,secuestrados "re-no pueden asegurarsi sus relatoso no partes ima-

gieren para la mayora dela gente la posibilidad devisitantes extraterrestres.seres superiores con unatecnologa avanzada quepodran considerar alhombre como un esoeci-men ms. A pesar de queno existen ms evidenciasde peso a favor de la HETque a favor de las dems,nin!una de las restantes te.oras sobre los OVNIs (ma-nifestaciones psquicas. ob-

jetos extradimensionales,fenmenos naturales des-conocidos, mensajeros di-vinos, etc.) amenaza Iasupremaca de la HET. Lateora "nuts & bolts"(NDT.- los OVItlls como ob-jetos materiales) puede portanto haber distorsionadoalgunos informes OVNI alhaber creado un complica-do conjunto de expectativas orientadas a la HETque se plasmara en los relatos en formas de pautas yconfiguraciones especfi.cas.[^as pautas imaginariasnormales podran derivar.se de una excesiva prepon.derancia de la HET. Si losdatos imaginarios fuerancompletamente acultura.les, podramos esperar ma-nifestaciones de las otrasteoras, pero aparentemen-te no es as. Aunque desdeluego, el predominio de laspautas HET puede debersesimplemente a que las de.ms teoras son errneas.Sin embargo, los patro-nes imaginarios inslitosno parecen derivarse de laHET, ya que al contrarioque con los patrones nor-males, tienen una profundi-dad mtica que eliminarauna fcil influencia cultu-ral. Adems, los patronesinslitos presentan afinida-des con otros procesosmentales que sern discutidos ms adelante.E. Arquetipos Jungianos.-Muchas de las pautas queaparecen en las abduc-ciones "realeg" e imagina-rias nos recuerdan los con.ceptos arquetpicos de-sarrollados por Carl Jung,cuya relacin con los OV-Nls describi en su libro"Flying Saucers" ("Sobrecosas que se ven en elcielo") (6). Dichas pautasnos llevan necesariamentea una interpretacin jun-giana, ya que tanto los rela-tos imaginarios como los

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ESTUDIO 130%

2Oolo

lOlo

12RGURA T.-

"reales" parecen exigir unconocimiento colectivo dela imaginera OVI\I. Sin em-bargo, aunque reconoce-mos las posibilidades deesta idea. de momento laconsiderarnos slo comouna especulacin intere-sante.F. Sugestin paranormal.-Hemos pensado tambin enIa posibilidad de que algu.no de los secuestrados ima-ginarios estuviera "leyen-do las mentes" de los 3 oms uflogos presentes du-rante las sesiones hipnticas. La comunicacin para-normal podra explicar lahabilidad de los volunta.rios "ovejas" para describir detalles casi desconoci-dos en la fenomenologaOVNI. Sin embargo, en elmejor de los casos, las evi-dencia a favor de esta fas.cinante posibilidad son am-biguas.

Grifico que muestra las extensas similituderentre le informacin procedente de 4 abduc.ciones "reales" y 4 imaginariasG. Limitaciones de las respues-las cerebrales.-I-as pautas podan expli-carse si, como se ha su-puesto ltimamente, lamente reacciona de formasimilar a una . amplia va-riedad de estmulos , en bu-yo caso fenmenos aparen-temente no relacionadosentre s produciran idnti-cos efectos mentales (ll).Si la mente enmascara susactivida.des de esta forma,llegar a conocer algo sobreel estmulo que da lugar alas experiencias de abduc-cin ser dificil. Adems,la idea de un cerebro limi-tado parece abrir una cajade Pandora epistemolgica: incluso si escogemoscreer al testigo, nuncasabremog en que .medidasu relato coincide con la re-alidad ( ver Fig. 5). Volvere-mos a este tema ms ade-lante.

Ninguna de las alternvas citadas responde acuadamente a las pauaparecidas ni a todas lascgnitas que apanecen aalrededor. Y lo que es mtodava queda por expliuna mportante consecucia de dichas pautas:testigos de las abduccio"reales" muy posiblemte estn contando la vdad tal como ellos la hexperimentado. En apode esta firmacin vieninvesti gaciones realizaden otros campo$: l) trajos recientes de R.K. Siey otror (ll,12,l3) sobrealucinaciones originadpor el consumo de drogy 2) edencias anecdticprocedentes de los rela"ms all de la muerte"copilados por RaymoMoody y otro! investigadres (9).

CLAVES:Datos de la abduccin sl-

Datos de la abduccin imaginariaCATEGORIAS:I - Patron2 - Posible patrn3 - Patrn no reconocible4 - Exlraeza de los datos5 - Objetividad del suieto6 - Delormacin del uieto7 - Posible dato paranrmal8 - Componente emocional

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ESTUDIO8FIGURAS 2 y 3

'm,ffi, ^H"wAffiws{HE{H' EIm

aFFzt'z

Existen semejanzas fun-damentales entre la Abduc-cin Modelo y las que sedenominan "constantesimaginativas", las descrip-ciones coincidentes de for-mas, colores y movimien-tos que facilitan distintossujetos sometidos a aluci-naciones inducidas pordrogas. Algunas de las si-militudes ms obviaspueden ser: l) la brillante yparpadeante luz inicial; 2)visiones de tneles y/o tu.bos; 3) gran variacin decolores intensos; 4) imge-nes dando vueltas o hacien-do espirales; 5) dibujos ge-omtricos; 6) movimientoserrticos de las imgenes;7) la participacin del sujeto en Ia experiencia o for-mando parte de la imagine-ra; 8) informes sobre ml-tiples "pantallas de TV",muchas veces mostrandodatos autobriogrrficos; 9)infegr:acin de laspropiasmernorias del testigo en laer

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r ,l.'t(;l lltA ,@,agona66hlpnosir

Dibujo del ser descripto por elsujeto No 6

Visin sufrida durante una alu.cinacin medlante drogas. N.tense los parecidos con los inte.riores de los OVI\ls y con.los"grandes recintos" (tmada de"HALLUCINATIONS'i)

Diagrama de las hipotticasrespuestas similares de la men.te frente a una variedad de est.mulos diferentesr)

torno.Una de las funcionesestos tubos de luz es la letacin de los testiqos.Fig. t2 muestra un jemtipico de una levitac"real". Otros sucesos silares fueron descriptos p3 secuestrados imagirios:Sujeto No l: "Del mismoIi un largo tubo que quea unos 2 pies sobre mi..luego ese largo tubolndrico sigui bajandEra de color gris y... conces de colores en su inrior... Me pareca comoflotara durante un mometo y entonces... me econtr dentro".Sujeto Nt 2: "... una sucin suave... que de alguforma me introdujo dent

un punto central (Siegel(13) p. ll7).Pero las imgenes de t.neles/tubos toman formasdiversas en los informesOVNI. Algunas son clara.mente como tneles,mientras que otras pare.cen deformaciones figura-tivas de las imgenes. Co.mo vemos en la Fig. 9,' apa-recen en Io9 relatos comopasadizos,. cubculos, con-tenedores transparentes,habitaciones, etc. A veceslas imgenes de tneles sepueden reconocer endescripciones como las delos apndices como "trom.pas" que cuelgan de un 0V.NI, e incluso, en una mini.versin, como el tubo ci.lndrico que usar los hu.manoides frecuentemente(como si se tratase de un

instrumento mdico) du-rante los exmenes fsicos.La imaginera tnel,/tuboparece surgir tambin enmuchos informes de OVNIsciIndricos (algunosejemplos tpicos aparecenen la Fig. l0). Uno de losms extraordinariosejemplos es el tubo lumino-so retrctil que muchostestigos describen como sifuera un tnel o tubo ilumi.nado. Observados desde elsuelo es como si estuviesenmirando en un tnel de luz.Este rayo tubular tieneunas curiosas caracters.tics: aparece y se retraeIentamente, mostrando un"extremo" plano (como enla Fig. I l); la briltante luzno da sombras; y supuesta.mente tiene efectos fsicossobre los testigos y el en.

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ESTUDIO@jF

-|ITT\@ru- arE laq * 09?)IoJ.rr Dcsrrt (CA) qs (t9?4)

Trvis walto case (1975)

OVIt{Is en forma de tubo

"Grandes recintos" observadosen algunas abduccioneg "reales"Tpico rayo luminoso retrctilprocedente de un OVI\II quemuestra el extremo plano y cla-ramente delimitado del mismo

Comparacin de imgenes tu.bulares aparecidas en (de izq. ader.) abduccin imaginaria, ab'duccin 'real" y alucinacin

Imaglnera de tnele o tuboE

como a tral's de su base...como algn tipo de tnel deaire y luz que me atrajo alinterior... Cuando despertme encontr dentro de untubo".Sujeto No 3: "Fu atrado...como una mota de polvopor un aspirador. Quierodecir, de pronto allestaba.,.".Otra imagen comn enlas alucinaciones es un di-bujo geomtrico cuadricu-lado o reticular que en oca-siones se combina con unalmaginera ms compleja yreconocible (como en laFig. l3). Estructuras ge-omtricas pueden versetambin en.algunos dibujoshechos por los testigossobre la apariencia externade los OVNIs (ver distintosejemplos en la Fig. l4).Muchas de las estructurasgeomtricas relacionadascon los OVNIs son fuentesluminosas rectangulares ocirculares que los testigos

FIGURAI tt

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ESTUDIO 21es&[[000[[[0[&@ffioooo@oooo 0oooooe\pcoooo.ooooo*-o\ ,-\).nt-g*--^ttV*- *-)

Ilustracin de una levitacinmediante un rayo luminoso

Dibujo geomtrio e imaginera"compleja" o reconocible ob-eervada en una alucinacinDibujos geomtricos observa.dos en distintos OVNIg

nas". Un punto interesantereferido a las formas OV-NIs descriptas es que vir.tualmente toda fcyma ge-omtrica imaginable tienesu sitio en los dibujos delos..testigos.As pues los OVNIspueden asociarse directa-mente con cierta secuenciade "constantes" alucinato-rias: fuentes de luz pulsan.tes; tneles y/o tubos; im.genes rotatorias; estructu-ras geomtricas; colores; ymovimientos aleatorios.Estos y otros paralelis.mo-s apoyan la idea de queexisten pautas secuen-ciales tanto en las alucina.ciones inducidas por dro-gas como en las abduc-ciones. Siegel asegura que,al menos en las alucina-ciones debidas a la cocanaparece haber una progre-sin hacia niveles de expe-riencia superiores ..deidesimples luces, siguiendocon formas geotntricas v

hasta llegar a sensacionestctiles" ( I l).Otros paralelismos sonincluso ms dramticos. Laimagineria que aparece enlas alucinaciones y en losinformes de encuentroscercanos es a menudo tanparecida que podra inter-camtriarse. En la Fig. 16 seincluyen 4 dibujos: "A"procede de un EC3 en lcual se observ un OVI{Icon una estructura como"panal de abeja" y un seren una ventana; "8" es unatpica estructura geomtrica aparecida en una aluci-nacin, no muy .diferentede Ia anterior; "D" procedetambin de una experien-cia alucinatoria v muestraun tnel rotatorib con unaigura en una "ventana"quenosrecuerdaaAyC.En la Fig. l7 tenemos unaalucinacin "compleja", osea una figura humana cla.ranlente reconocible, quepuede compararse con un

ser visto en un casg OVNI.las similitudes ertre lasdos figuras, conro de tirascmicas, incluyen su aura,sus expresiones, y el queambos fueiad de tipo apari-cional. Curiosamente. tan.to los testigos de alucina-ciones como los de las alu.cinaciones perciben enocasiones formas humanascomo de dibujos animados.Existen otras semejan-zas. Los sujetos drogadosaparentemente integransus propias memorias ensus experiencias, repitien-do sus antiguas vivenciascon algunos cambios ynueva intensidad. Una inte-resante manifestacin deeste proceso es ilustradapor la Fig. 18. Los sujetossometidos a alucinacionesgeneralmenle observanuna seiie de "pantallas detelevisin" que recogen re.tazos de su propia vida pa-sada. De igual modo, los se-cuestrados "reales" v los

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Imgenes similares proceden-tes de informes OVNI y de aluci-nacrone9:

imaginarios aseguran ha.ber visto grupos de pan-tallas con datos auto-biogrficos.Tambin afloran datospersonales en otras fasesde las abducciones. Porejemplo, Judy Kendalldescribi la "cateteriza-cin" a la que fue sometidapor los extraterrestres, yluego fevelo que ya habiasufrido una operacin si-milar en un hospital (7).Sandy Larson dijo que du-rante su experiencia el"examinador" extra-terrestre haba "raspado"el interior de su nariz (se-os frontal:sJ, despus pu-do saberse que haba sufri- 'do con anterioridad unaoperacin de sinusitis (8).Existen otros ejemplos enla literatura. Sorprenden.terDente, uno de los sujetoshipnotizados

periment este fenmenode memorias mdicas: elsujeto No 3 afirm que losseres Ie aplicaron en la ca-ra durante su exarnen ungran aparato como unamscara; luego recordque durante una tonsilecto.ma cuando era nio utili-zaron una mscara sintilar.Si detalles mdicos puedenllegar a infiltrarse en losrelatos de abduccionesimaginarias y "reales", nohay razones para que noocurra lo mismo con otrosdatos personales. Como enel caso de las alucina-ciones, est claro que la in.terrelacin entre la memo-ria y la imaginacin puededar lugar a una grrn va-riedad de detalles deriva.dos de las experienciaspersonales del tesgo.Los errores v confu--

pueden estar envueltos enotro posible campo de evi.dencias que podra apoyarla "realidad" de las expe-riencias de los secuestra-dos por un OVNI. Nos refe.rimos a los datos aporta-dos por las "experinciasal borde de la muerte", osea, a Ios relatos de algu-nas personas que aparente.mente han pasado por lamuerte clinica y luego hanpodido ser resucitadas o"vueltas" a la vida. Segnla describe Raymond Mo.ody y otros (9) la evidenciaes ms anecdtica que rgi.damente cientfica. v estono debe olvidarse,- Peroadems de ser intrigante yprovocativa, su carctergeneralmente informal nola diferencia mucho de lamayora de los informesOVNI. Las "experiencias al

A. Entity in "window" B. TJpicel geometricof honeycomb-surface or Lattice image eport.t:FO. (F/\Vbb. YEAR ed bJ. haltucinaring sub-OF HUilIANODS.) jects.l"'i

C. Entiry reported near D. Hallucinatioo imageaulo hood. (WebbIYEAR of human figure *.iihin aOF lUllANOIDS.) rotating tunnet. (suggest-ed by Segel, H.\LLUCbATIONS)

luces hinel luminoso

S=magenea, en geomtricos,,nto-ttot /\\ i \v.7"momientos errticoscolores

Algunos paralelismos entre losOVI\Is y las alucinaciones

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ESTUDIO 23normalmente una serie deetapas que presentanmuchos paralelismos conla Atduccin Modelo. Aun-que estos relatos nosiempre siguen una mismasecuencia, muchos de losfenmenos descriptos ase-mejan detalles recogidosen las abducciones. Porejemplor l) luz brillante; 2)zumbidos (musicales o mo-lestos); 3) una sensacin de"flotar" fuera del cuerpo;4) desplazamiento a travsde un "tnel" o "tutrol', 5)acercamiento a una "puer-ta" o lmite de alguna clase;6) encuentro con un ser lu-minoso; 7) comunicacinteleptica con el ser; 8) unrpido repaso "como enuna pantalla" de la vida deltestigo; 9) algn tipo de"exarnen moral" (que re-cuerda el exmen fisico delas abducciones) sobre lasacciones pasadas; l0) un"mensaje" moral de algntipo; I l) el retorno; l2) unafase posterior en la que eltestigo experimenta cam-bios de personalidad engrados diversos.El contexto global de Iamuerte y la agona estdesde luego muy alejadodel de las abducciones OV-NI, pero a este nivel ocurrecomo en las experienciasalucinatorias. En la Fig. 19se enumeran algunos deIos ms sealados parale-lismos entre las abduc-ciones ("reales" o imagina-rias), las alucinaciones ylas "experiencias ms allde la muerte". Estos de-talles aparentemente casiidnticos sugieren quecualesquiera diferenciasque existan entre estos fe-nmenos no se derivan desus cualidades esenciales,sino de las interpreta-ciones que de los mismoshagan los participantes.

Prueban los extensosparalelismos existertesentre las alucinaciones. las"experiencias ms all de

',4K,iguras similares procedentesde un caso OVNI (izquierda) yde una alucinacin (derecha)"Secuestrado" y "pantallas detelevisin" mostrando datospersonales. Un fenmeno similar se da tambin durante lasalucinaciones

la-muerte" y las abduc-ciones imaginarias y "re-ales" que estas ltimas sonilusorias?. Creemos qucno, por 4 razones:Primero, muchas abduc-ciones (y otros encuentroscercanos) afectan a 2 o mstestigos, y en cambio existemuy escasa evidencia deque se den alueinaciones o"muertes" compartidas (5rmenos an de forma espon-tnea y con una duraiinsuperior a varias horas).Segundo, existen varioscasos donde se informa deefectos fisiolgicos y psico-lgicos, e incluso fsicos,asociados a experienciasde abduccin, los cuales (sison ciertos) no aparecen enlos dems tipos de expe-riencias.Tercero, Ios sujetos en-vueltos en una alucinacino en estado de agona, es-tn convencidos de la "re-alidad" de su experiencia

slo durante o desius delas fases de mayor intensidad; en cambio, en la mayora de las abducciones uotros encuentros cercanoslos testigos se convencendesde las primeras fasesde la "realidad" de lo queestn viviendo (no importalo increble que ellos sepanque es).Cuarto, mientras que emecanismo disparador oestmulo para las alucinaciones v los "relatos msall de-la muerte" puededeterminarse con bastanteprecisin, el estmulocausante de las abducciones "-reales" continuasiendo uno de los mayoresmisterios de la Ufologa.Aunque las abduccionesno son simplernente alucinatorias, la existencia deesas constantes cornunescon otras experiencias,ofrece evidencias objetivasde una gran trascendencia

NGURA I

FIGURA I

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24para la Ufologa: estas simi.litudes sugieren que al me-nos algunas partes de losrelatos de abduccin "re-ales" reflejan con bastanteexactitud lo percibido porlos testigos a travs de sussendos. O sea, los testi-gos han percibido realmen-te colores brillantes y par-padeantes, tneles lumino-sos, "cosas" con dbujosgeomtricos movindose alazar en los cielos y figurashumanoides!. Estas "cons-tantes imaginativas de laabduccin" ofrecen unaestructura base que los tes-tigos de abducciones "re-ales" pueden interpretarde tal forma que las con-viertan en un encuentroOVNI (igual como habranhecho los sujetos hipnoti-zados).Un modelo esquemticode las abducciones"reales" puede ser el si-guiente:l) I-as constantes imagina.tivas de la abducin (que eltestigo percibe realmente)se integran con datos pro-cedentes de, 2) la imagina-cin, 3) la memoria, y 4) elconocimiento generalsobre los OViYIs (sesgadohacia Ia HET) del propiotestigo. [^a conccin deltestigo sobre la "realidad"de las constantes inicialesf acilita la aceptacinirreflexiva de elementosprocedentes de la imagina-cn y la memoria, y enton-cet tenemos otro en-cuentro OVNI.Este modelo, desgra-ciadamente, deja sin expli-car partes importantes delfenmeno OVNI y en parti-cular la naturaleza del estimulo que dispara la per-cepcin de las constantesimaginativas.., el sucesoinicial y ms misterioso enIa secuencia de la abduc-cin. A prorsito de- estaidea, vale la pena citar las

"Los informes OVNI... nonos ofrecen ninguna indi.cacin sobre el estmulo re-al que motiv el informe;nos dcen slo lo que msatrae al testigo de la natu-raleza de los 0VNls... losEC3 son como experienciasalucingenas en las que elsujeto percibe una mezclaentre el mundo real y supropio mundoinconcien te..."lEste dilema epistemolgico sera ya suficiente,problema, pero suscomplejidades se multipli.can. Un estudio reciente re-alizado por el psiclogoRichard Haines, no ha e-denciado diferencias subs-tanciales entre los dibujosde OVNIs realizados portestigos "reales" yaquellos realizados porpersonas que nunca hanvisto un OVNI (4), lo que de-muestra que cualquierapuede dibujar un OVN"aceptable", haya tenido on, un encuentro con unode ellos. Igual que ocurreen nuestro caso, el trabajode Haines nos hace pregun-tarnos cunto (si algo) deltestimonio de un testigo es"verdad". Lo que es ms,otros investigadores handescubierto que durante elREi\I o sueo profundo, elsistema muscular humanosrfre una ligera parlisis(qui para evitar que eje-cutemos realmente lo queestrmos soando (1)). Lostestigos de encuentros cer.canos informan frecuente-mente haber sufrido unaespecie de parlisis al acer.carse al OVNI y/o en otrosmomentos claves. Pero va-rios secuestrados imagina.rios (y su enigrntica con.sistencia es intpresionantc)tambin aseguran sentirseparalizados en momentossirnilares. Si la parlisis re.Iaciona las experienciasOVNI con los sucos, en.

cuestrados imaginarios?.Es muy posible que lossueos. las alucinaciones.las "experiencias ms allde la muerte", y toda unaextensa variedad de fen.menos mentales. desde lameditacin a los ataques demigraa o a la esquizofre.nia, tengan importantes se-mejanzas y que todos ellosestn relacionados con al-gn aspecto comn de laconciencia humana.Mientras los psiclogos noentendan mejor estas ma-terias, dos teoras (ambasutilizando el concepto delinconciente colectivo deJun'g) son dignas de consi.deracin. Siegel proponeque "los mecansmos sub.yacentes en el sistema ner-vioso central" juegan unimportante papel en lasalucinaciones (13). Sta-nislav Grof sugiere que Iamente contienen matricesarquetpicas que se activanante ciertos estmulos (3).Para uestros propsitosllamaremos a este procesola "matriz.encuentro".Pensamos que puede seraplicable a muchas si-tuaciores, donde la in-terpretacin subjetiva delindividuo deternrinar siun suceso en concreto es"vido" como una visinagnica, o conlo una abduc-cin, etc..t^a idea de que distintosprocesos del sistema ner.oso central y/o matricesarquetpicas inconcientesintervienen en los en-cuentros OVNIs parece tlig.na de desarrollo e investi.gacin. Si los ufolgosaprenden algo de las alucinaciones, la hipnosis y Insvisioncs agnicas; quizlos psiclogos y otros st)c-cialistas en la concietciahunrana pueden aprenrleralgo tle los relatos de ab-duccin y otros infortesOVNI. Herranrientas Dara

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ESTUDIO 25FIGURA l9 Paralelismos enire 4 tipos de fenmenos experimentales

ImgenesLuz intensa.Luz pulsante.Luces de colores.Dibujos geomtricos.Formas geomtricas.Tneles,/tubos.Espirales.Imgenes en rotacin.Cambios de forma.Cambios de tamao.Zumbidos.Sensacin de flotar."Gran recinto".Aproximacin a una "puerta".Encuentros con,,geestt.Comunicacin teleptica.Repaso vital en las ',pantallas de TV".Examen moral.Examen fsico.Niebla.Mensaje.Retorno.Secuelas."Realidad" de la experiencia.

abduccin. ',real,,aaaaaaaaJaoaaaoaaaaaa,I

abduccinimaginaria zlucinacin agonaaaaaaaa

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matriz-encuentro y la hip.nosis de secuestrados ima-ginarios, que ofrecen final-mente las primeras posibi-Iidades de duplicar las ex-periencias OVNI en el labo-ratorio. (14).SOBRE EL AUTORHa sido miembro por 15aos de la Universidad delEstado de California. En laFacultad de Long Beach deese claustro se desempecomo Profesor de Ingls yse especializ en literaturapara nios. En Stanford reci-bi, en 1967, su doctoradocorno bachelor en Artes. Al-vin H. Lawson reside en5861 Huntley Avenue, Gar-den Grove, CA. 92645,USA. trFuenle: TheJournal of UFOStudies", Volumen l, Nmero I,1981.Ttulo original: "Hypnosis ofimaginary UFO 'abduc tees"'.Genlileza CUFOS Central.

IRADUCCION:LUIS R. GONZALEZ

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CONTRAENCUESTA 27ELSRAPTOb DE OUILMES:

LA COMPONENTE ETILICAAlejandro Chionett YAlejandro AgostinelliMs de una vez, durante los improvisados concilibulos ufolgicos porleos, se ha insistidoacerca de la importancia que levist'e depurar la casustica nacional promoviendo y ejecutando ex-cursiones de cortraencueia a los efects de constatar la autenticidad -o de recogef ms informa-cin- de vieios eoisodios OVNI sobre los cuales poco se saba.A continuain ublicamos una encuesta realizada hace lres aos referida a un cautivanle casode "secueslro-OVNl" que form parte activa de la escalada platillista sudamericana de 1968.

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NOTICIAN la edicn del 4de julio de 1968del diaro "Crni-ca" de Buenosuna noticiano obstante sus feno-nouna sorpresa desme-entendiendo elen un marco so-en el que las denun-ufolgicas extraordi-eran monedaNo sn dar antessentada la buena fe, Iay el carc7erde la protagonisladeclaracioneseste sentido del mdicola familia y"todo" el vecindario), elperidico in-siguiente modo

"Una vecna de Quilmesdice que fue paseada Porun OVNI""La seora Aleiandra Mart'nez de Pascucci relat que alas 20.30 hs. del martes pasa-do (el 2 de iulio) regresaba asu hooar cuando, en la es-quina-de Saavedra y Alvear,debi cruzar un baldo allexstente. 'Sent que una fuer'za invisible me apretaba Y ab'sorba. Quise gritar y no Pu-de. No perd elconocimiento... me encontren un recinto en el que slohaba dos hombres veslidoscon ropas como si fueran me'tlicas, que irradiaban muchaluz. Lo mismo ocurra con sucalzado y sus cascos, loscuales apenas permitan aPre-car el nacimiento del pelo Y lacara completa'.

'Uno de ellos era muy alto,meda ms de dos metros; elolro era un poco ms bajo,pero tambin de estalura ma-yor a la normal'. Los sereshablaban entre ellos en unidioma incomprensible paraIa seora. Luego de un corloviaje -por las ventanillas sevean luces verdes y colora-das- la volvieron a dejar enlierra. Se.encontr junto a uncemenlero y un tax que pasa-ba por el lugar -cuya ubica-cin no se sabe precisar- lallev gratuitamente hasla sudomicilio. 'Es todo lo que mepas -concluye- y jamspodr olvidarlo'." (1)Por otra parte, el artculoseala que el matrimonioPascucci tiene dos hijos-que en esa poca tenan17 y 20 aos- y vuelve ainsistir sobre el excelenteconcepto que ellos gozanen el vecindario, lo cual-aseguran- fue sobra-dammenle confirmado porIos reporteros deLrontcaVale la pena apunlar queeste episodio ha sidoamplamente difundidotanto en libros y revisfas dela Argentna como del ex-terior, y que la inclusin deuna snlesis del caso en unboletn del CEFAI (2) nosrefresc la memoria impul-sndonos a efectuar la pre-senfe conlraencuesta.Como dato curioso po-demos aadir que el mis-mo 2 de julio de 1968 en elque ocurri el aso Pas-cucci se produjeron asi-mismo en el pas olros dossucesos de similar enver-gadura -por lo menos anivel periodstco-: la pin.loresca experiencia del jo-ven Oscar Heriberto Iriart,en Sierra Chica, Olavarra(que, segn RobertoBanchs, es un caso negati-vo) (3), y el fantasmal epi-

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Portezuelo, provincia deSalta, protagonizado, entreotros varios testgos, PorFrancisco Emilio Sol (4).NUESTRO PASEO PORQUILMESEl 26 de setiembre del98l nos dirigimos al lu'gar con la seguridad deque a pesar de los treceaos transcurrdos ibamosa regresar con informacinms valosa que la sumi-nistrada en su momentopor "Crnica".Antes de abordar a laprotagonsta del suceso,cremos convenienle con-versar con algunos de losvecinos para ir formndo-nos una idea acerca delprestigio que ostenta la se'ora en Ia zona Y recoger,por otra parte, los recuer'dos que cas semPre con'serva la gente de "barrioadentro" sobre esta clasede eventos. En efecto, nolardamos en adverlir dequ manera Ia imagen dela seora Aleiandra Mart'nez de Pascucci an semanlena indeleblementevinculada con el vieiohecho en la memoria delos pueblerinos. Sin em'bargo, esta curiosa tradi'cin barrial, tambin esta'ba asociada con sosPecho-sos antecededentes quedelalaban en ella ciertapropensin a la fabulaciny, como si esto fuera Poco,la tildaban de ser una Per-sona adicta a las bebidasalcohlicas. Por suPuesto,la cons!atacin de estosmalvados rumores no sig'nificaban una pruebaconcreta de que enlre"gallos y medianoche" laseora de Pascucci habaurdido un fraude. Es sabi'do que muy a menudo lasvecindades suelen caracte'rizar sn razn a quienestraen barullo y alboroto a

fue que no nos cost de-masiado encontrar a luga-reos que desconocan to-do Io referenle al "se-cueslro" pero que, no obs-tante, nos aseguraban sinningq empacho quenueslra testigo padecaaquella fuerle inclinacinde "darle al escabio". Ya enlos alrededores de la casade la familia Pascucci, di-mos con una anciana se-ora (a la que olvidamospedirle su nombre) quien,segn aparent, conocabastante a fondo tanto adoa Alejandra Martnezcomo a las circunstanciasque nos haban llevadohasta all. Desgrabamosparte de lo que nos narresa tarde:"La verdad de todo aquelasunto es la siguiente: ella es'taba ansiosa con la cuestinde que quera que el hijo fuerauna estrella famosa y conoci'da. Tena ganas de que em'piece canlando por televisin.Y por eso arm aquel cuenlo;lo que buscaba era que se lallevara para hablar por TV eseteriodista enano... comoera... ah, s, Pipo Mancera, yde esa forma vincularse y en'gancharlo al pibe. Pero al fi-nal no consioui nada de eso.lmaonese. es una correnlinaborlacha, se la pasa tomandotodo el da. Desde que la co'nozco, y mire que han pasadoaos y aos, esla muler toma,Vea si ser loca que ella mis'ma no tuvo ningn inconve-niente en conesarme que lo'do eso haba sdo un engao.Tuerce la mueca de haceaos. Es una muier a la queno hay que llevarle el aPunleen nada. Y bueh, que leva'cer... la bebida es unadesgracia".

No sabemos si ha queda'do calro que la amable se-ora hizo Io imposible paraque no nos quede ni una

haba sdo un intencionafraude, apelando talpara ello a exageraconque magnifiquen la ctundencia de su argumto. Sera deshoneslo noconocer que falt pocora que lograra convennos. Pero anles era unasn insobornable dialocon la verdadera protanista.UNA ENTREVISTA BREFuimos atendidsiempre en el umbral dpuerta. No es menesterpsiclogo social para saque no es precisamentelugar en donde se puestablecer una convecin amistosa. Una niaunos diez aos fue qunos abr Ia puerTa y,toda deferencia, solimos la presencia de quresult ser su madre,ya habamos divsado einterior de Ia viviendarando hacia donde estmos con cara de poamigos, Apenas se aceexgi con rudos modaveriguar "qu... buscmosLuego de una brevesentacin le explicamomotivo de nuestra vterminado lo cual dAlejandra manifesf: "no. De eso no quierhablar. Nrs, no. De ningmanera". Largo rao laora continu negndosrepitiendo -quiz msra si misma que paraaccidentales interlocures- con la mirada Peda y valndose para exsarse de frases inconexen voz muy baja ah"No, no. Eso pas hmucho y qued olvidadEntre tanto los encueslares quedamos expectan:casi mudos- dejaque siguiera hablandentrevistada, a Ia esp

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30 - CONTHAENCUESTAnos explicara el por qurenuencia a referirse alfue necesario pre'ms nada, y menosentrar en discusiones,en eslos casos siempre Per'Ampliamos y re'cual era el motiode nuestro inters, aadien'do esta vez el importante pa'que juega para nosotrosconocer la opinih que lemerece a la testigo la expe'riencia que haba sufrido. Ycon un murmullo apenasaudible, dijo: "Pero no, si to'do aouello haban sido menti-ras mas". Pero... si llevamosal extremo la objetividad deta que nos vanagloriamos:

No sera esla simplementeuna trampa para sacarnosde encima? AI rao, sali alumbral un hombre para verqu estaba sucediendo; ycon l -ya retirada Ia seo'ra Alejandra a sus aposen'

los- mantuvimos una cortacharla, acaso la ms revela-dora:"Yo vine hace un ao y medioa esta casa. en aquel enloncesyo eslaba en Per. Por eso espoco lo que les puedo decir. Lonico que s es que en eseliempo ella eslaba muy enfer-ma. Estaba muy mal, sufra des-varos, realmente estaba dema-siado enferma y..."PALABRAS FINALES

Dadas as las circunstan-cias, y por ms buena volun-tad que hubiramos aporta-do los encuestadores, Iasevdencias se haban descar-gado quilando todo margenpara suponer que el episo-dio tuviera apenas una por-cin de realidad extraa-EI lector podr extraer deeste material varias ense-

anzas. De ellas los firman.tes coinciden en subrayar,quiz a manera de moraleja,los importantes logros quese van obteniendo a lrcvsde esta saludable prctica: lacontraencuesla de los casosantguos.Tarea que, en otraspases, di signos osten-sibles de progreso en el pro-ceso de depuracin de lasgrandes oleadas (5,6). Yconfirmar, otra vez, que elmejor "Iralamiento" que ad-mite la compleja informa-cin ufolgica es Ia compro-bacin personal en el lugarde los hechos, sin ms inter.mediario para el encuesta-dor que el testigo y su entor.no. Y acceder s a lacomprensin del fenmenocon la menor cantidad po-sible de atenuantes.

REFERENCIAS

El recorte fue rescatado de los archivos del CRD(Centro de Recepcin de Datos, C.C. 60, 1642, Sanisidro, Prov. de Buenos Aires) por genlileza del scorHeriberto Janosch.Roberto E.; "segundo Nne-xg del libro'Los OVNIs y sus Ocupantes"', Boletn CEFAINmero 10, Buenos Aires, 1980.

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A lo lrgo del esrudio de esre maremag-num que es l fenmeno O.V.N.l., se hasupuesto, entte otras cosas, que los lu-gares en que estos se vean con unamayor frecuencia, estaban indudable-mente relaconados con el carcter v laideosincrasia de las gentes que los habi-taban. Tambin se especul, sobre todomis colegas "Base U.F.O. Officer" (sic),u Of iciales O.V.N.l.s de las Bases de laU.S.A.F.. que los ayistamientos eran unproducto tpco de bromas v alucinacio-nes producidas por las borracheras delfn de semana. Opinaban que los O.V.N.l.s, se vefan con mayor asidudad losfnes de semana, puesto que, entonces,era cuando la gente sala a divertirse y,en definitiva, consumla ms alcohol.Como consecuencia de ello, los testrgosque reportaban un avistamiento de Noldentificados haban visto vrsrones, r:ro-ducdas por los vapores et licos.El tiempo y los estudios ufolgicos alrespecto - desmintieron categrca,mente estas gratuits aseveraciones.Desde siempre nos intrig, al tener encuenta las hiptesis antes mencionadas,esla pregunta: iHasta que punto serverdad.que dnde ms se bebe, se venms O.V.N.l.s?Para poder contestar ahora a esta cues.tin, nada ms sencillo que verificar lacorrelacin "Observaciones O.V.N.l.s-Consumo de vino", por considerar que elvino es, en Espaa, el ms representativode los caldos alcoholicos ingeridos por laooblacin autcton-Para ello, nos centramos en la casulsticaespaola del ao 1974, con una muestrareflejada en la TABLA l, en la que se es-

pec Irca:- Col 1: Un nmerocorrelativoasigna-do a cada provincia espaolaordenadas alf abticamente.- Col 2: Las provincias, en idntco or-den.- Col 3: Nmero de avistamientos O.V.N.l,s, en cada una de ellas, du-rante el ao 1974.- Col 4: Estos mismos avstamentos ,pofcentuados.- Col 5: Consumo medio Orovincial devino durante el mismo ao

(expresado este consumo enlitros por persona y aol.El lstado de los 181 casos de avistamien-tos durante.el .pasado .1974 nos lo haproporctonaoo.tntegramente el C.E.l. deBrcclona, y el consunro medio provn-cial de vno, nos ha sido facilirad por ellnstituto Nacional de Estadstca, a i;vista de su Anuario de ese mismo ao.Todos estos datos, vicnen pormcnoriz_dos en las grtrcas de la FlG. l.Tentados estamos de dar cuerpo, o ex-presin matemtica, a estas distribucio-nes, pero, consid.erndo con bucn crite-rio que, ello serla una prdida dc tiem_I)o inll,.opna-rJPs que. de la simple ins.peccton de a rlt), l, 5c oeducc que am,bas distribuciones son aleatoras nter-considerada mente.

Conscientes de que estas distribucionesno hayan tenido, nl tengan, posiblemen_re, un guroso tratamiento matemticoestadstico, debemos decir de este infor-mal. estudo que hayuna cuasi.dispari

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REVISION

ffiffiffiffiffiffiffiffiffiGuillermo Roncoroni

nlesligocones, y a los ftnes de intercombiar opiniones sobreel prlicular, mantuuimos uorios y prolongados conuersa-ciones sobre los dslnlos motices e impliconcias del presunlosecuestro. Cobe deslacor, sin emborgo, que pese a que om-bos conociamos lo dislnla melodologa y los dotos que ma-nejabomos en nuestras respecti\os inDestigacones, en todomomenlo manluimos nueslra tolol independencia de cite-rios, apoydndonos erclusiuamenle en datos y eDidencios pro-pias con el fin de no afectar Io objetiuidad de nuestros conclu"sones Esls inuestigaciones dieron origen a lrabojos publi-codos en lorma independiente (3,4,5,6)Si bien ombos inDestigaciones coinciden en considerar elncidenle supuestomente prolagonizodo por el camionero co-mo un ftoude, existen diferencios significolittas en Io que ha-ce a los cominos desandados para arribor o esa conclusin,ya que Banchs puso especial nfoss en el aspeclo relatiao oIa conllicluado personolidad de Llonco y en Ias moli0ocionespscolgcas que ste haba terido para perpetror el eneoo.As, Bonchs inlerprela que la perlurbada psquis de Lloncapudo haber "eloborado" lo totolidad del conlaclo moliuodapor algn factor extemo (la brillanle luz de un automoil, porejemplc) y que luego, en las dislintas fases de Ia inuesticacinlleuodo a cobo en Baha Blonca, olguien pudo haber "fijodo"y adornado esos "recuerdos", a los efectos de hocer mriscreible y conliable el reloto del testigo, a 1rc0s de Ia lcnicode Ia regresin hipntico.Pol mi arte, Io inueslieacin no se cenlr en un ospeclo enpartculor sino en una uisin de conjunto de los dislintos face-tas del incidente, Iomando el aspecto de Ia personalidod dellesleo como uno mds de los tems a considerar en Ia ituesti-goclrin, interpretondo que e! camionero rogu Io lotalidoddel incdente desde su mismo punlo de partido (planeandoinclusitte el motiuo de su detcncn a la uera de Io ruro en lonoche del 28 de octbre de 1973), contando luego con Iocotnplicidad de otros indiuiduos que uieron en el coso unabuena opoflunidad poro alconzor cierta notoriedad pblicae, inclusi,e algn benelicio econntico.

Durante el curso de mis nlesligociones luue opofiunidadde tomor conlacto con el Dr. Solai a lines de 1974, oporluni-dod en aue el ctado lacultoliuo me refiri sus dudos en cuan-to o la outenilcidad del incidenle apoyodtrs en uno serie detests o los que hobo somelido o Llonco (cuyos conclusoneslormon porte del informe que reproducmos) y en una lesincerebrol que haba detectado o lroDs de un elcclroencefo-Iogromo (lesin que olgctabo el lbulo occpitol del presunlotestgo) y que, en opinin del Dr.Solari, inuolidoban el testi-monio del camionero y, por consiguienle, el caso en s nts-mo.Es interesante rcsaltor eue Ios conchsiones de los estudiosIlet'ados o cobo por el Dr. Solori nunco hteron incluidos enlos trabojos publicados por ONIFE o por Fabio Zerpo en !or-no ol coso Llonca ol punto que el inlomre dcl Dr. Solari es

dodo o conocer por primera Dez en eslos pdginos pese a quedota de".374 y que, siendo porte de la primero inuestigocindel caso LIanca, el mismo hte concientemente ocultodo por elpncipal diuulgodor del incidcnle, no pudiendo encontrorserelretrcios o slo en ninguno de los nolos publicodas con la

L presunlo secueslro del que habro sido p.tima elcomionerc Dionisio Llanca es, sin dudos, el msnolorio de los cosos de abduccin reDor!.Cos enArgenrna, no slo por sus coracterslicos, sino porgran difustn gue el nismo alcanz en los medios de pren-y, fundomentolmente, en algunas publicaciones especiolide Arqentina y el extronjero.No uamoiaqu a brolundLr en las corocten'sticos del co-Llonca por enlender que nuestros leclores ya se en-sucientemente familiarizodos con ellas y, en casolos detaltes det incidente. remtimos-al lec!or aserie de fuentes donde oodni encontrar obundonte mote-sobre el cilado coso (uer BIBLIOGRAFIA, notas I y 2).Lo presenle noto tiene como objetiw el brindor un nuetna Ia inuesfgocin del presunto incidente, que se !rodu-en la reproduccin del inlorme mdico del Dr. H. Eduardohuto de una seie de estudios a los oue oflunamenteDionisio Llanco, estudios englobodos dentro deque x dio en llomor "ODeratiuo Villo Bordeu", lleuodo apor ONIFE, bojo Io direccin de Fobio Zerpa.El inlorme que reproducimos nos lue locilitodo wr el uflo-Rufuin Omor Moroles, y tiende a esclorccer notoromevpersonolidad det srigo y apoyo to hiptesis de u

o al menos lo descolifica como rcsriqo conoble.Adems de lo inLestigocin lleuada a cZbo por ONIFE,reahzodas dos intpsticociones indeoendientes uno deencabezado por el orjuiteao Roberto E. Bonchs (CE-y lo otra por quien esto eseribe. En el lrancuno de las

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REVISION 33ffiffiffiffiffiffimEL II{FORME SOLARI

NOMBRE: Dionisio LloncaDOlf ClLlO: Son Martirt 787 - Ing. Jocobocci, R. NegroESTADO CIVIL: so1eroEDAD:25 aosFECHA DE NACIMIENTO; 17 de octubre de 1948OBSERVACIONES

EI sujeto fue enlteuistado el do 3l de julio del correnleoo, dicho enlrelista se prolong duronle el trmino de cositres horos (l 7.30 o 20. I 51.Se conleccion en su tronsculso una reducida Historia Psi-coclnico, y a posreriori se reolizaron uorios prucbos psico-ndlcos y ptoyectD0s.Debido a la posibildad de que no uoluiero o repelirse Io si-tuacin de enlreusto, los pruebos permldos poro el Iapso deuno sesin fueron oumentodus Este hecho influenci, sequ-rornenle, en cierlos deficiencios de los proptsikts buscodos. Apesor de ello, se ha podido deterntinar, con certidurnbre, ros-gos de personalidod del sujeto, que completan el diagnsticodel EEG y lo ontplt'an consiguenlemenle.En el andlisis de las pruebos no se ha utilizodo control, da-da su simplicidad.ENTREVISTA PSICOCLINICA:

A lraLvis de! cueslionario y Io entreaislo obiefla realizoda,se concluye que D. LL. encuodra tpicamenle dentro del"sndrome" de la personalidad epilptica, ogregodo a ello de-lerminodos rasgos histricos. Difcrenciado os, claramenle,de un supueslo cuodro de psicopoto.Los signos (comicioles) son coraclersticos: el)idente lalla desinceridad (sobresoliente en el juego de la enlreoslo); un olloconlenido de agresividad reprimida; susceptibilidad oumen-lada; hondo senlido de justcio perconol. La brodipsiquia,lentilicocirn y perseuerocin del pensamienlo complelan Io lipficocin del cuadro conticiol.En cuonto o los rosgos histricos onibo mencionados, s-los son usuoli:obles o lras de Ia luerle deDendencio ntaler-na y lo hosttldod ol medio, que lu imposibilito poro lo obten-cin de un buen conlaclo sociol. La uii'-'lcin de la repre-sin y negocin conto principplcs meco,ismos cle tlelensa,caroclerzo, dodo su conlnuoda presencio, el concomlonlehistrico expresodo.

PRUEBAS PSICOMETRICAS Y PROYECTIVAS:RAVEN fiest de malrices progresivas):Esle es un lesl foclorol especiolmenle confeccionado poraeuoluar el factor g. Permite deterntinar el grodo de obserua-cin y rozonomiento a