La Zona Occidental en el Clásico

5/17/2018 La Zona Occidental en el Clásico - slidepdf.com

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L a z o n a occ iden ta l

ene l C las ico

R o d o l f o F e rn a ~ c le z y D a ri a D e ra g a '

ln i roduccun;

el Oc:ic . , eTI:e se distinguio de Mesoamerica

central, del S\_:~ : / del s~~re5-Ct)per ur; incremento ,cis lenro de cornplejidad

social en 5l~S zn..cos. c .. r;-2.::1.":" del oerioco de los senorios incip ientes.' Esto se,~ ~ ; _r - J. ...

desorende de 13;observacicr. ct::l fc£:iS"110 arqueologico, el cual nos indica: . . . . _ '-1 .._..

OU iC. luezo i- l~ l r r.o rn e n tc c cr nun (1'-' c ; ; ; : : : ; . . . . . . ..eralizacion 0 '. .- -- 1 ~ _ vida sedentaria lo s. '- _..J.~ i:> ' ~ .~ . ,"_~,l __"..I ."'d __.,".C: 0 ....--'-- __...._, ..1_ .C La c s : - , v . 'W ,--" , . ..,

prccesos sociaies del : : : : S : . : : de MeS ; ) aDe : : : c a fueron m C L S dinarnicos que los del

Occ : c i e n c e .

Asi. en el Altiplano central ilen elsur observarnos 1a conforrnacion de se-

nones complejos- ji su gs" - ,e :zc l iz : ; ,c" i6ncomo forma deo rgan iz a c i on social, e n

'"Arqceologcs, investigacores cei Cent:o-:N.ru~:[alisco, -Gt!.adalajara.

lAgracieceD053. O rc o S c .h t- -C C 1 .:.\ :e ,J o se p .r _.:v io ~ n ::: jC :l r E d ua r do \ X 7U ! .i ar n s) L u is G 6m e z Gastelum y Susana

Ramirez Urrea is . ayuda cue nO:5Qr2 ' -r . :o rc lc ' :!a !' JG cara eiabcrar la revision ce este r r aba : o .lA las fo-m"!.asde or~:iz:Lc:6'n 5-0C~l~correspondientes a to que antes 'larnabarnos periodo Aldeano, pre-

fertmos ilamar.es se:\OrlOS inc.oientes. Ll razon es cue los ieS1:0S arqueoiogtcos oertinentes sugieren va una

cierta jerarcuizacicn ce la soc.e.iad, que conrrasta con la propuesta ·condicion igualitaria inherence a la vida

aldeap..a5Desde nuestro punta de vista los senorios, previos a la formacicn del Estado, se.distinguian por su orga-

ruzacion social jerarqu.ca y no es[~"dicaca er; sentido estricto y por su adscripc.on territorial basada todavia

en el parentesco. Tamoien se direrenciaban por carecer de escrirura y de sistemas de ccrnputo y registro de'I" eventcs. as! como per tener un menor rango de variacion upologica de sus sitios, Por orraparte proponernos

que habia senorios incipienres y comolejos. Los senonos cotnpiejos implicaban ya una construccion regional.

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1 6 2E i horizonte C l a s i c o

los siglos finales del segundo milenio aC. En contraste, en el Occidente -ee-gun nuestra mterpretacion-, los senorios complejos existieron a partir del

siglo IV aC, cuando en ciertas areas del resto de Mesoamerica se habian for-

mado va los pnmeros e s r ad c s .Una transici6n que llevo cinco siglos a los pueblos del resto de Mesoame-

rica torno once a los del Occidente, hasta que se forma el Estado rarasco en el

5 i g10 s». En consecuencia, creemos que ahi ocurrieron)=>%~9~~. que

compartieron 1 0 que se podria llarnar un ritmo de incremento de comple~

social de fango medio, en contraste con los pueblos de .,'vIesoamerica central~~~y del sur que se transformaron con mayor rapidez. Orros rasgos, como los

patrones concentricos de asencamiento de tipo guachimonton (vease figura 1)

y las rumbas de tiro (vease figura 2), solo distinguen subconjuncos del total..Desde esta perspectiva, e i Occidente es sobre todo definible des de el Precla-

sico tardio, cuando es clare s1.1diferencial de complejidad social con el resro de

I 'v '1esoar i l er i ca .

, 4 r e 3 .5 g e o g r a f ic 3 . s

La rnayoria de los especialistas coinciden en definir al territorio en que' ocurrie-

ron los orocesos sociales del Occidence con la sizuienre extension. cornen-. -'

zando nor su extreme noroeste. en el norte de Senaloa . c S " , ; 1 . 1 o c u D a b a - s o b r e .. 'f . 1: ...- -_- ~ ,

todo la planicie costera del Oceano Pacifico, Iimitada p O T el mary LaSierra

Lvladre Occidental _ ' \ 1 liezar a Navarit, el espacio ccntinuaba hacia los valles. U· ~.

Inrerrnontanos.del extreme poniente de la Mesa Central, as! como. a las es-

carpadas ramificaciones iniciales de la Sierra Madre del Sur, que cornienza en

la costa nOI1e de jalisco (vease figura 3).

Hacia las uerras altas del centro de Mexico, el Occidence se rernontaba a

los valles y cuencas lacustres de los actuales estados de Nayarit, Ialisco, NE-

ch6'acan y G1.1anaJuato. Ocupaba territories acenmadcs por e! Eje Volcanico

T 1. ,." .' 1

ransversa ; con sus respectrvos ataltarruentos ce escarpa y vasos acustres

que Henan sus grabens. Sus altitudes escalonadas varian entre los 1000 mSD.J . J :1

para la zona de Tepic y Composleia, y los 2000 para los valles michoacanos

Las cuencas y valles del centro y el sur de Jalisco yacen entre los 1350'[ 1550.

msnm Rumbo al suroeste, el ambito se extendia por la Sierra Madre del Surhasta su porci6n guerrerense, para alcanzar el extremo occidemalde la de-

presion del Balsas y parte de la planicie costera del Pacifico sur. El regimen

pluvial es veraniego en toda la zona, con escasa lluvia invernal. Las flucrua-



9,

R o d o lf o F e rn a n d e z y D a r i a D e r a g a • L a z o n a o c c id e n ta l e n e l C i a s i c o 1 6 3

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GUACi-lli'vIOI'lT9NDE TEUCHITLAt'J

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o 0Figura.l , Conjunto de estrucruras esr i l o .g1 . lach imo:n t6"ry:

--., . . . - - :

(modificado de !vlounrjoyy [email protected] ; · "The Prehispanic

Settlernent Zone ...", p. 356).

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FigurQ_ 2 .. U na c u:n :.ba de Eireprcn.nco de la comarca de Etzatanl

"Ja l i s (o .

c i o n e s actuates esrimadas de s us is ove ta s van de 400 a 2000 lTJ.!Il anuales. Las

rnenores preciprtaciones ocurren en el area smaloensey en la depresion del

Balsas. Las may-ores sucedeo en la SI e r r a vecinaal Cabo Corrientes en cuvas, ,.. ' , I . 1 ,e " ,-l • 1" I'd 1lc ~ rn e Q la C lo £..e s e x is te a 7 0 '1 1 2;ct~ bo sque m as n urn e c o e tc utora: mexicano iei

P-ecirico. Err los vanes imer- ; : · cGr: . . : :anos el regiDeI1 de lluvia va de 500 a 1200

mm en terrnmos aproximados.

Cron%g fa y p ro ce so s s oc ie le s-

E i lapse "qui considerado 10 drvidimos 'e n dos periodos. El primero cortes-ponde a los senonos incipientes y el segundo, a los sencnos complejos." E1

if'"' .4 Desde otra perspecriva, concebimos que en Mesoamerica existieron sehorios pristinos -pri.mero mcipien-tes y luego complejos- que se formaron con la ccnstruccion inic'ialde las regienes. Perc tambien percibirnos



R o d o lf o F e rn a n de z y D aria D erag a • L a z o n a o c c id e n ta l e n e ! C i a s i c o 1 6 5

Golfo

deMexico

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F :g~ r2 . 3 . ~ iL ix i .. ."Laxpa n s i on territorial eel Occicente.

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del siglo IV aC hasta el V II de; fecha esrirnada para la superposicion de 10-5

, . 1 . '1 ' 1 1 b ,. "0 rl . D "procesos socrates cei A_llP_:J.D.O centrar so, re 1 0 5 Gel CCh ..ieme , I rena super-

posicion se interpreta en funcion de un cambio profundoen el unrversc-scn-

ceprual de 10.5 pueblos del Occidente.' Esto se rnanifiesta en la transformacion

Laexistencia de senorios secundarics, ccnstruidos con el d e smemo r a r n i e n r o de los estadcs 0 cuanco los senorfos

pristinos entraron en relaciones CGnest8.Gos que les irnporuan desde fuera cierta estratificacion social. Para

. los prooositos de esre trabaio, la reg:6c.se concibe como ur.a relacion socioespacial entre 1..lI: gruoc de aldeus

y el [er:: -~[orio que ~c'J.pan~ que suele cobrar s", :ntiCOper 3U lccahzacion err el paisaie y per los aC';::'_l.05 Of~~

graficos que lo lirmtan. Esta relacion se in te ns i fi c a un a vez qye se COm l e ! 1Z aD a trasiapa: sus are::L$ c.e aprov.-

sicnarniento ce insurnos bas icos. C: 1 ( c n c e s ernpieza la competencia por el control de los recurscs naturales y

par ei eiercicio de dominic de lugares estracegicos pertinentes -corno campos de cult.vo, puertcs en e r e cor-

dille:'as, promontor.cs y vades de rios-. Los prccesos regicnales pris rinos construyen senorios tarnbien pristi-

nos r a.m~os pueden sec scmer.dcs a los rnis rncs principios teoricr» (Cfr, Fernandez, Mucba tierray.pccos

dueiios. ,J ,

) L:J.tradicion cultural ccnrcrma e! uruverao conceprua. de individuos y grupos, El universe conceotual

lc concebimos en terminos ce lO S esquernas _9 l age t i anos de asirmlaciou y acomodacion, que par lo genera! se

recomponen continuamente en runcion del crecimiento de la exper iencia y el conocirruentc (Flaveil, La pSlCO-

logia eiclutiua. .., pp 71-97). EsTOsesquernas dan aprirud al g:'JPO, como actor co l ectivc , para enfrentarse a la

realidad .que se presenta cada vez disnnta, pero que es semejanre a sf misrna en rnuchos aspectos, per rnostrar

ceterminadas regularidades y soore toco ciertas variaciones ciciicas, que se presenran aj actor par 10 generalen condiciones de compiejidad social creciente. El umverso conceptual tambien se puede considerar como el

punto de encuentroentre los dichcs esquerr.as piagerianos ce enrrentarniento a la realidad, los escuernas sirn-

b6licos geenzianos y, en cierta medida, los grades de ccmplejidad social de los modelos c e c r t c o s de la etno-

tog i a . Es un contexto simbolico culruralmente construido. Enel.o a c r ave s de el procesamos y digerimos la

irformacion que recibimos, con 10 cual 10 ennquecemcs al rnismo tiempo.

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_~ .........c..



E i h o ri z o n te C l a s ic n

166

drastica de sus patrones de organiraci6n del espacio en 105 asentarrJ.ientos -al 1 " "

menos en buena parte de su territorio-, asi como en la transformacion de su

pameon if sus cosrurnbres funerariasAl observar el diferencial de incremento de complejidad social entreel 2 : 1

Occidente y el resto de Mesoamerica, resulta una pregunta que rratarernos s ie o .- I. "

resp.onder al final de esta smr e s i s . iPor que fueron mas dinarnicos los proce - . f (cY

.' .

50S .?ociales del resto de Mesoamerica que los del Occidence? l ] ~~~ . _- ("'A- _.,_

A n t e c e d e n t e s

los trabajos terncranos de investigaci6n aroueoloQica ell el Occidence se hi-.L .. ..... '- L '

cieron durante las decadas de 1930 y 1940, Entonces el area principal deesru-

dio rue IvEchoacan can enfas i s en l OS [ ~ ?r as co s. L o s uwestigadores sobresalientes

de aquella epoca fueron .P-Jiqnso Caso,6 Jorge Acosta,' Wigberto Jimenez

~lorenD,s Daniel. Rubin de la Borboli2,9 y Eduardo Noguera10

Este, sdernas de

esr.idiar la culrura tarasca, irjcio las exploraciorres en Ei Opeflo, Duran te est?r T h 11 - '1 ' , - r Co. : r, 1" ' , ,. T l' TI' ne p o e a Is ao et ~ ,-e L ~,,- qy Jo se o ro n a l~ l :n eZ '- l .D :l C12 , r o nt ': -2 , o a Jo s en jZcl lSCO:r.euv

en el area de Audan-Tuxcacuesco yen hi cuenca de Savula; CO[011.2. I\(:nez, enr ~ rum b " , de 1 = " ! A renal ,..4p " " C ' r " - " ' l r ' A . , . . . . . v ~cp-cr l : .-L:~1 " I""[011;r,:-:.r-rir-

n

C \ : = . 1 Oer~; .~p-r " r · ' ".~ ,,,,.1"1 "" C _1 _~ L 1 '-_ LcL_. "._~ / a ,-1 ,,1. U", "" a. i" " '_~ '_"C L '- ' ,-"1'_"_11,'_,

?edro Arrnillas-' fue otro de los invesJ:igadores impOfC?,nCes de e n r o n c e s . Sus

trabaios pn aroueolozie ' = - l iP.-~n en or.ncroio sobre r"1"'-,"-0 1";'=>1"", L·""·~hl'·;''''10"..,i""j v ~U al'-j_ 'c.U t~"" L..~lU,,_, '" 1 .. 11. 'c" ,~ . '1'v 01...'_1-v1' J:-'-'~ ",_.l~' _••

aporto valiosos planteamientce sobre la cronolozia en general_ V v-

ii r ' - 1 1 1 1 / -I 1 1 c : 6 r la s i .'. . 1u.8.S t a r oe , cura ..n te t1Geea c . a Q < : " _7 u, a s l i1 V es Tlga C lo ne Sm a s relevantes p a r a

el e o n o cL r o i e n c o del Occiden[efu.eron las de Isabel Ke lly , qu ie n S e dedico en-

tonces a la arqueologia de Colima La cronologia propoesra por ella. basada

enla c e r a .mica de sus ,:ireas de esrudio, ha clJL-ninadocon 5U ultima publica-

cion en 1980 Durante es[osar"los se hicierorc iGDon"nIes trabajos en jalisco,

6 Case, "Inrcrme pre.iminar de las e~?loracicnes realizada,s, en Michoacan"

7ACOSI2, "Explcraciones a:q~eol6g;Cl3 realizadas ell el eSC<l,jD de !vlichoacil1 durante los anos 193-:- y

19~8" .8 j i m e n e z ? v 'l o r el 'J .o ,"H i s to r i a anrigua de 1 '1 zo n a ta r a s c a " .9R :. J. bi o . d e l a Bo r bo l ia . ' \A ._ ._ :. '1 t ro yo io g i: ': "zi nc zu nL Z2 n -Ih ua czi o- . T em p o ra ci :; ~s 1 Y II" ; "Explor;,c:or.es arquec-

logicas en - tv Ii c h o a c a .:1. Tzlntzun[z3.I1. Te~oor;lc.a Ill": "~<\rqueQloqi~ t a r a sca"WNoguera, "Exploraciones arqueoi6giC:J.S en las' regiones d~- ZaL10,, , y ' FiIZcuaro, esrado de Michoa,d.I1':

"las culruras de Occidente".nKelly, £"Ccavarionsa t C ha me rla S in alo a: The Archaeology oj the Auilan- T uxc ac ue sc o A re a o fJ alisc D J -

The A utian Zo ne; "Ceramic p ro vin C ES o f No([hwest l'viexico"; E'rcavmions at Aparzingwl., Michoacar:; TaeArcbaeology of the Autlan-Tuxcacuesco Area ofJa£i .sco II:The T ! ,t ; .' r; c acu e sc o-Zapo t it lan Zon e ; Ce ramic Sequ en c e

in . Colima. Capacba, emEarly Phase,12Corona Nunez, Tumba deE!Arenal, Etzat!an,jal.; "Exploraciones en el lxtepe'e".

13Armillas, "Arqueolcgia Central, Occidemal v de Guerrero". '



III

III

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R o d o l f o F e r n a n d e z . y D a ri a D e ra g a • L a z o n a o c c i d e n t a l en E 1 ( ~ c : ; 167

,

~ I

llevados a cabo por Stanley Long," sobre las tumbas de tiro de la cuenca de

Magdalena y en el Municipio de Zapopan. Clement Meighan 15 hizo importan-

tescomribuciones a la arqueologia del Occidente con sus trabajos en el sitio

de Morett, en Colima, el de Arnapa, en Nayarit, y en Tlzapan el Alto, en Jalis-.

co. Stuart Scott" fue otro que aporto valicsos estudios al Occidente sabre la

arqueologia de las Marismas Nacionales de Sinaloa y Nayarit. Durante estes

anos, Otto _Schond.\-lb,e17izo investigaciones en Michoacan, con aportaciones

generales sabre las culturas del Occideme.De la decada de 1970 destacan los trabajos de Joseph Mountjoy.P'con sus

exploraciones en San BIas, Nayarit; los de Schondube, en Tamazula, Tuxpan

y Zapotlan, en jalisco, los de Jose Arturo Oliveros"9 en El Openo, Michoacan;

los de Javier Galvan," en el Valle de Aternajac, Jalisco; los de Joseph 1 ' / 10un -tjoy y Phil C . \veigand sobre Teuchitlan; y los de Weigand21 sobre el sitio de

El Ahualulco y el complejo de rumbas de tiro en el area de Etzatlan, Jalisco,

De 1980 en adelante los trabajos mas destacados para el periodo compren-

dido por esta sintesis han side los siguientes: 13.exploraci6n de nuevas turn-

bas en El Opena, i)iIichoacan, realizadas per j\ITLlTO Ollveros;z2 los recorridos

de superflcie y excavaciones hechos en la cuenca de Sayula e n el sene del

proyecto llevado a cabo par ei O R S T O N I , el T h L c ' u ' - : !Y13.Universidad d e Guadalajara.Estos trabajos se desarrollaron sabre todo en 13.parle sur de la cuenca y las

principales excavaciones ruvieron lugar en Atoyac, el sitio de Case[a y Arna-

cueca. En la realizacicn de este proyec;o destacan las parllcipaciones de-Frerr-

cisco Valdez, Jean Pierre Emphoux, Otto Schondube, Catherine 110t, Smana -

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·1"Long, Arck aeolouv of the tltfunic!/)iO of Etzatlari, jahsco!5 :V[elghan, "Arcna~~i~gy of Sinaloa"; A Tc ba eo lo gy o f tb e M or ett S ite , C olim a; "Prelustory o f West Mexico";

Tbe Archaeology ofAmapa, Nayarit1 6 S c c c r , "Archaeoiogv and the Estuary: R e se "8 .! ch in g P re his tc rr y a nd P al eo ec olo gy in t he Y i G l r i s n 1 a s · Nacio-

n a le s , S l ;1 a io a ant: Navarir',1 ~5 c h6ndub e , Tama:::t!a. Tuxpan, Zapotld.n, pueblos de la/rontera septentrional de fa antigua Colima:

"EJ OCcidence de Mexico hasta la eooca toltec.i", "La evolucion cultural del. Occice~re de Mex iCO : Jaiisco, Coli-

r n a y Nayarit", "El Occidente d e l Y l ~x i cO I algunas de s u s c 3 .r a c :e r i3 T l c3 .s Y p r o b l e : : o . a s - " ,

! SMounqoy , Prebispanic cultural HistOTY and Cultural Comact in the Southern' Coast of Nayant Mexi-

co; "The Prerl lsoanicSettleme!1( Zone at Teuchit ian. jalisco": Proyecto Tomatlan desaivamento arqueciogico.

Fondo emchisr6-nco y a rou eo tc g ic o . Desarrol lo del proyecto. Estudics de s~perficie; Proyecto Tomtltidn de Salua-

menta arqueologico: el ane rupesire19o l iveros , "Nu ev a s e :c p l o r; :\ C 1 o n e s en El Operio, Michoacan" .

, :oGaivin, "Informe prelimmar de la s exp]oraciones efecruacas en el l'!;tepere, jalisco, durante el rnes de

mayo de 1973"; Rescate Aroueoioeico en elj'raccionamiento Tabacoines, Zapopan,Jai'!sCQ,2!Weigand, "The Ahualulco S i r e and Shafr -Tomb Complex of [he Etzatlan Area"; "The Formative-Classic

and ClasslC-Postclassic Transiuons in the Tellchirlan Etzatlan Zone of jansco".22 Oliveros, "Proyecto Iacona Michoac:1o", pp. 182-184 v 215-218; Oliveros y de lo s R io s Paredes, "L a cro-

nologia de El Openo, Michoacio: nuevcs fecham.entcs por radio carbone".

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1 6 8E I hor iz ont e C l as ic o

_Ramirez Urrea, Gabriela UruflUela, Jean Guffroy y Luis G6mez Gastelum."Igualrneme fueron importantes las exploraciones efecruadas por Joseph Mount-

joy en la Costa del norte de Jalisco y el sur de Nayarit, destacando las rumbas

de tiro de Las Palmas. Tambien es de trascendencia su sintesis arqueo16gica del

area en cuestion." Asirnisrno fueron importantes las excavaciones de Teresa

~3brero en la zona de Bolanos en el norte de Jalisco, entre las que destaca ef

hallazgo de rumbas grandes de tarnano poco usual." Igualmente importantes

fueron las exploraciones del area de Zacapu, Michoacan, entre las que des-

cuellan los trabajos de O_ominique Michelet," Patricia Caret? y Marie-France

.Fauvet-Bertheloc28 De estas exploraciones la que m a s res alta es el estableci-

rniento de una liga entre el horizonte de Chupicuaro y el de los tarascos, que

propone a1primero como antepasado arqueologico de los segundos. OtIOStrabajos importantes han sido los de arqueologia de paisaie de ";;(7eigandy su

equipo en el Valle de Arneca; como los de Eduardo \\,'illiams en etnoarqueo-

logia. Adernas, esLOSdo.s autores han desarrollado trabajos de sinresis sobre el

Oecide'1te de Mesoamerica de rnanera ge!".i.eralFa, si; parte, Jorge Ramos de

laVega y Lorenza Lopez !'vles1:7ts'2.n heche imco-tantes rracajos en los Altos

de Jalisco y en la zona de ~[agc:.alena del misrno estado. De esta ulurna des-

taca la excavacion de las ir.:!pO[~~::l~esumbas de tiro de Huitzilapa.

R e s t o e c u i t u r a i e s

En este apartado tratarerncs con brevedad 1 0 reference a los cornoleios de rna-lerial arq~eol6Qico mfiS remesencc.civos del Occideme. exceDrtla~d; a los o~-

'chtsicos.'pnme~o 1 :& refe~.remos 2 .1 honzcnre detlOpeno y : d e Capacha, cuya

2 3A c o st a. " L o s e r .r ie r rc s de, F r a c c :c n a f Il je :1 tO S a n } u n n . A t o y ac . jalisco" ~~ c - : s L a ,E m p n c u x v Ramirez. "E l su r

c e l a C : .. :e :- 'l C :J . e S ; ;: r: Tu i; l,Ialisco: e! s it io C a s .e C :.1 ,un eemt»c": Gufz!"')y y G6c_ ez GasreluIT, : 'Cer r i ros Co.oracos.

1 . . : . . ; 1 sitio d el C l aS lCO 'Cardiaen la cuenca de S s . y , _ ; _ l u . jaiisco"; ..JEl1 : lLel a J "El cuerpo humane Y su adaptccion 1 1 r n e c ic :

1 : . : 1 poblacicn prehispanlca de ACOYZlc jal.sco". Valdez, ~;TLelI l?O esoac.o y cultura en la cuenca de Sayula":Valdez, Liot, Acosta y Emphoux, "Th e Sayula Basi l" ' . Li.:~:ways and S2 J [ Flars of Central ]aiisco".

2 ~ lV l o un t j o y : · 'A . i gun a s obSef~l8.c:ones s o b r e el c e sa . ro i l o del Preclasico e n la llanura c o s t e r a del Occiden-re": "Caoacha: una cuirura enizmatica de! Occidenu: de lV Iex i . cJ : "Las [res t ransrorrnacioQes mas imcorranres

en la nabi tacion indigena de la-costa del ' Occicer~(e ce fViexicoJ

• '~~~'1a~i5isronologico ce la ceramics del Forma-nvo. excavada en el sitio de 1;:;.Pin..~aQa. jabsco": ':Calculo5 de la poblacicr; prehispanic3. del Rio Tornatlan":

"Arqueologia coste.a en el OccidenlG de Mexico: ~que, ~cuando?, ~c6mo? y c p o r que?'!jCabrera, "Lascosrurnbres funeranas de la culrura Bolanos". ":Lopez i/ Cabrero J "Hallazgos recienres

en ei canon de Bolanos. ..". . ' -,6Ylichele[, "E! centre-norte de Michoacan en e! Clasico ... " : "1:1centro-narc:: de Michoacan: caracteristi-

cas ": Caror, "Arqueologia de. las regtcnes lacusrres2'Carol,'La originalidad de Lorna Aha, .. " ; Lesite de Loma Aita, lac de Zacapu .; "Lorna Alta: anngua isla

,'I" funeraria. .,".:8Carot y Fauvel·Berthelot, "La manumemalidad del sitio Lorna Aim .. "

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1

1



Rodol fo Fernandez y Da ria De ra gat L a z o n a o c c id e n ta l e n . e l C i a s i c o 169

I. ,

distribucion consignada se extiende dispersa desde Sinaloa hasta GuerreropOTla costa, y asciende al altiplano por el sur, hasta la cuenca del lago de C h a -

pala." No darernos aqui cuenta del horizonte de Chupicuaro, del Preclasico

tardio; por haberse extendido por buena parte del Altiplano central, mas que'por el Occideme. Desde nuestra perspectiva, Chupicuaro y sus zonas de influen-

cia no eran del Occidente cuando el horizonte cultural de su nombre ocurrio

El complejo Openo del horizonte temprano fue descriro par Arturo OUve-

ros, y sus materiales m as significativcs son los siguierites: el tipo ceramico

mas diagnosrico es el Hamado Openo Rojo y Guinda Incise, semejante par su

decoraci6n zonal al Rojo Sabre Cafe, y al Cafe Oscuro y Claro de Tlatilco. Des-

taca tarnbien el tipo que llama Openo Negative, el cual consiste de ollas glo-

bulares de cuello corte y paredes gruesas, con un rango de espesor entre los8 y los 12 rnilimetros. Estan decorados con motives geornetricos en rojo

sobrecafe Las figurillas de II Openo las consigns Oliveros agrupadas .en tres

tipos, de los que destacan el 1 y el 2, EI primero, que pertenece al segundo

estrato de ocupacion, consta de f.gurillas sernejanres a los tipos C YD del

Altiplano central Las fizurillas del Gruoo? son rnodeladas v reoresentan ju-J. G -.i .. 1

gadores de pelcta.> Estas son las asociadas a la epoca mas ternprana del ho-

r izcnte .

Las rumbas de E1 Openo se pueden interpretar como el antecedente con-

cept-ual de las rumbas ce LITOdel pe:-:odo de los se:' lOrlOS complejos. Consisten

en UTIC . carnara de inhurnacion con 1':.:1 acceso per el costado, con escalones,

cuya protundidad depende de aqueila c _ c 1 subsuelo apto para scportarle. En

los enrierros primarios los individuos fueron colocados en posicion extendi-

da. Las rumbas suzieren cue sus constructores tenian una concepcion espacialv . .I , -"- -

bien definida y una orientacion que sorprende por su uniformidad-' (veasef nu--~ 6.) -.16 Let -~/.

Seg':ln descripcion de Kellv. el barro mas diagnostico de fa fase Caoacha es'- -.I,. I~ J.

el llarnado Capacha ~\![onocromo cuyo color va de crema a cafe Ligero;a- gris,

-. a cafe OSCUfO y a neg~o.-·;)U es pes or varia de cinco a ocho rn . ' 1 1 _ ; es de textura

gruesa, pero no excesivarnente. Las superficies exteriores se presenran gene-

ralmente bien alisadas. De las forrnas destacan los bules acinturados y las va-

sijas de asa de estribo, En Ia decoracion pre domina la incisicnde linea grue~a

y los puntos, con achurados en algunos cases. A veces se presenta con un

bane de pintura sobre todo rojiza. Tarnbien aparecen pequenas figurillas de

~:

'I : i :! i i l l! ~ i i-;1.;·

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290!iveros, "Nuevas exploraciones .. ": Kellv, Ceramic Sequence

30 0 liveros, "Nuevas exploraciones .:: 'pp. 1~7-189.31 Oliveros, "Nuevas exp.oraciones ,p. 184.



£ 1 h o r i z o n te C \ a s ic o

1 7 0

E L OPENO

PL'\ t ' - lTA

TUtv\SA 1

Fi;Jra .1.a.lu.:nba 1 de E l Openo, Micto3.c : in ;b. E : O~e:i'co, ?La2.ca de COr'lUnt:O IunerariO.

jVlocificado de Ollve::: ;s, · 'Nuevas ... ", p. 124

D',1 . [ [O,de burc '~s .~: 'Dr ic9 . .y cocirr.Jento escaso De 12.Iase Capacha no se cone-

cen tumbas, aur . oue t .cri r r :_ :o rmes de s 2 .o u e 2 ~ do r e s s e n a la n d o procedencia de..1,' .J, h

mace r i , l i e s Cz~p:,lchaen LUGlbas de !JfO. Los e.ncierrcs conocidos vacian en po -

s i e i6 r .: . e x te r :c i -i da .3'

A la rnanera lladicion2.l entre los expertos -mas alla de los arqueologos-

Octo Schondube33 s ir " te c :z a l as caracce(;s(lcas de los m a c e:- ia le s d e las rumbas

de (ira en func'on de los eSL:,tdosacmales desu procedenc·J.. Colima, Naya r :L

_5 jausco. Con ello se cubIe a 105 barros mas ca r ac t e r l s t i cOs del Occidence du-

ranre la epoeaC o l i m a se dl s t i ngue ocr la amelia rearesencaci6n de genre, f lora y' fZelma

I_).l c.. J. '

de 1a 'Zone.. e;eCUCao.2. por modelado; monocroma, con predomi.llio del rojo

sobre e! cafe v el nez:o. En ocasiones fue ointada. c o n amolios camDOS deu -,,""

un solo color y en 0([':15 decorada al negativO. Los rasgos " decoracione_s se

1 0 Q :r ab an p o r incision, modelado Y Da s ti ll a Je . las f lgur i l las por 1 0 ge n e ra l e ra n~., • • .1 ~ ~

vasijas con vertedera

3"Kel ly, Ce r am ' le S e qu e n ce ,pp.)'l Y ).

3 3Mu n a (did. H i st c ri a d e ja l- is e o, p . 1 81



R o d o lf o F e rn a n de z y a r i a O e ra g a • L a z o n a o c c i d e n t a l e n e ( C f a s i c o1 7 1

Hay dos complejos cerarnicos asociados a las rumbas colimotas de tiro; el

Ortices del f i n . del Preclasico y el Comala del Clasico, que acaba por 500 dC,34

Segun Kelly, Ortices es dorninado por un agregado de materiales cerarnicos

estrechameme relacionados entre 5 1 , usualmente con acabado pulido discre-

to, Una de1icada apiicacion de shadow striping (rayas sombreadas) 0 wiping

(esrriado) de color crema a gris, sobreyace al color base del fondo Este es a

menudo ahumado quiza de manera deliberada, para dar la apariencia de grisoscuro."

Otra loia colimota diagnostica de las tumbasde tiro es LaHamada Amoles

unped que continuo usandose en la fase Comala. Las flgurillas s6lidas van de

la Ease Ortices a la Cornala. Las grandes y huecas son rarisimas en la Orticesy diagn6stlc.as de 1 2 . Cornala. La forma cerarnica que caracreriza a la fase Co-

mala es el cantaro en ocasiones trfpode y con soportes efigie 36

Las esculturas nayaritas son ficas en color, pero carecen de modelado

R9.Sg0S prendas y adornos e5L:3.nnarcados con pintura en role, negro, anaran-

izdo v crerna amarillento 0 con decoracion al nezativo, L05 conunentes fueron, v

t:~"bapc~osc')n la rr.isma tecnica. En su iconografia predorninan los hurnanos

s;:)1050 ag~_lp2.dos, Los animales son poco frecuentes. Las piezas fitomorfas

se reducer, a calabazas. La decoracion es geomerrica Y simetnca, distribuida

"en Cl.~;:L~OS". En cier.os recipienres se pretender, disimularotros rnateriales-y

t e en . ca s ce fa c ru ra , como 1a cesteria. Los contmentes se distinguen por su base>~ -va-rr- ~- ,.,".-~ ; I'" -!;'; -;p - . _,'. S 37

COUC""";t . .tH L~dyclr:( ",L)llguli""a) no son '/a)l)a ,

Lstilo Jalisco cornbina la pinrura y el modelado para retratar a los per-

sonajes ..En 12.sesculruras se da la decoraci6n rojo sobre crema -0ba yo- para

las ripoArr.eca, y blanco sobre rojo para las Ilamadas "cara de cordero" _En

sus figLiri~las se recrean humanos casi exclusivamenre La cerarnica no aruro-

pornorfa es rosca en rex.ura y aplicacion de COIOf, aunque se dan casos de

alfareria fina. Los bules '/ las cajas de ceramics de esta epoca son exclusivesde J alisco. 38

j4Kclly, Cercim;cSequence", pp, 3.6.35 Ke l ly , Ceramic Sequence ... , p, 3 . '

36KelJy Ceramic Sequence .." pp. 3 v 1 0 1 .

ii' 37Mur i a (dir.) , Historia de, .., pp. 181 Y 134.

38Mufta (dir.), Histcria de. . , p. 185.



E I h o r i z o n te C i a s i c o -

1 7 2

S f n t e s ; s

Ano r a abordamos la sintesis de los procesos sociales del Occidence durante el

lapse de l.t'1teres, dividido en los dos periodos menC1onados con anterioridad:

el de los senorios incipientes y el de los sefiorios complejos. Partimos del de-

cimoqUlI1LO siglo a C cuando, segun nos sugiere el regiscfO arqueo16gieo, se

- r -v generaliz6 1avida aldeana en el Occidence y en el re s to de Mesoamerica. Te r -~ I

rninamos con el advenimiento del Posclasico por el siglo V II de y la aparente

rnnsformaCl6n ideo16gica de los grupos sociales del Occiden[e, que este trajo

consigo; aunque hacernos algunas reflexiones sabre la dinamica social ulte-

rior, El corte entre ambos periodos 1 0 situarnos por el siglo IV aC, cuando

ocurrio le i generalizaci6n de la llamada cultura de Turnbas de Tiro'Desde Dl..leStf;;l perspectiv'a~ en los pnme ro s siglos de su existencia seden-

L?ria:Corre5po~jientes ifperiodo de 1.05 senorios .ncioientes. los ~s~,l \ sociales del Occidence alcanzaron rirmos de cransformaci6n iQ:ualme::l~e dina-,I - '-i\L"lCOS que los pueblos del resto de Mesoamerica.~ La observaci6n de los mate-

r.a.es z,rc,ueo16gicos asociados a las tradiciones de El Opef.o v de Caoacha, asi~ . . _ _ ' 1 "

como S 1 . 1 arnpiia distribuci6n especial," nos perrnite conjeturas bastanre con-

:;ables acerca del grade de complejidad social que alcanzaron durante el primer

horizonte cerarnico conoeido. Se trata de materiales que sabre todo se rraslapan

con el horizoN,': olmeca, aunque presentan manifeslaciones de apariencia y

fecha:T.:J.erltos mas tempranos, asociables al horizome pre-olmeca represecc:::.-

do por fases como Tierras l.argas, ell el valle de Oaxaca, Cruz Temprana, e".1

la Mi.'..J:ecaAlta y Ojochi en el Valle de Tehuacin, a!'l~e:-iores ai 1150 a C 4 0

CCJ . ~ ~mirada cuidadosa a las r umb a s de II Openo o to rga una mayor s e -

gundad a nues tra conjerura L a madurez concept1Jal que implica la concreci6n

c , e S 1 . 1 espacio y el desarrollo tecrJ)16gico -notable para ese eI1(OnCeS- cuemanifiesta su ceramica, nos permite situarles en el contexte de procesos socia-

les relativarnence complejos Elio, por el nivel de jerarquizaci6n que implican

en los g::upos que los concibieron y produjeron. Las offend, ..s recuperadas,

j. r por su noueza relativa. suzieren que los difuntos a q>uienes oetenedan habisn"":'-' 1. ,,-, ~

}{' plcanzado cierto ~en sus aldeas y en sus LrKipientes senorios, p1le"S no

f { , I es i6g.ico que todos sus miembros difuntos ruvieser. como ofrenda objetos de

~l:i~ ! origen local de can buena fabrica: y otros ex6ticos de procedencia tan lejana

1 \como el Caribc." .

39 Oliveros, "Nuevas explcracicnes- .": Ke l lv , Ceramic Sequence. Mountjoy, Proyecto Tomar/tin",

4001iverosv Rios Paredesv'La cronologia de El openo "p, 47,"lCabe senalar que medirnos el grado de cornplejidad social de las entidades polit icas por la extrapcla-

cion social discernible de sus restos: entre la condicion igualicana del penodo aideano no bien identificado

f

_ . !- .[

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j.

I,I



R o d o l f o F e r n a n d e z y D a r i a O e ra g a • L a z o n a o c c id e n ta l. e n e / C l a s i c o1 7 3

En el Occidente, en este p r im e r periodo, 5610 se conocen tumbas y entierros

Poco sabemos de unidades domesticas completas y de los patrones de asen-

tarniento. Pero en virrud de los datos conocidos, podemos hablar de un Occi-

dente ala vez peculiar y mesoamericano. Si bien su vertiente cclirnota acusa

rasgos que le asernejan culturalmente con areas del norte de Sudamerica"

-como 12.presencia de vasijas de asa de estribo-, la de El Openo muestra

tarnbien ligas con el resto de Mesoamerica, El hallazgo en El Opei'io de fi -

gurillas de jugadores de pelota," sugiere que sus l1abirances cornpartian ~

,en buena medida las costurnbres y 1 8 . idemL~, de sus vecinos"'d:e·j-AIhplano, .. .~~ ~ .~. - .

~ai

Por no haber sido posible aislar y explorar unidades domesticas del periodo

de lo s sefiorios incipiences en el Occidente, recurrimos a la analogfa con losgrupos de Mesoamerica central y del SUf, donde en las ultimas cuatro decadas

se ha excavado una rnuestra bastante arnplia de unidades dornesticas del Pre-

clasico temprano y medic. La analogia supone una cornplejidad social seme-. . , 1 ' 'r- " . I d I . d i\r ~iL ' djante, ae os grupos cei \.)CcloenJ:ey ios cei reSLO e L resoamer.ca. --A partir e

ella sugerimos para las unidades dornesticas del Occidente fangos de varia-

cion upologica relanvarnente estrechos y el acceso de los gru:pos domesticos

a una garna de bienes izualmente reducida, tanto en 1 0 domesnco como en 1 0. '!Io. - .-. ..... ,.. I ' - " . . . , . I ,"

n[l.l2.L\proponemcs .entonces cue habia va zrupos al interior ce los linajes con~ __ ,.... ._ . - • ,_ .L

eceso dJEIeIldaL2.1rs recursos estrategiccs de 1 a sociedad, que ernpezaban

\ . 8 . aenerar relaciones de dominacionen el contexto de sefiorios incipientes. Al--, _

act.iar estes zruoos entre 5 1 y cor: el escacio cue habian heredado de gene·-• '- ' . . L , r- 1. • \ '

raciones previas., cefinian su capacidad de eJercer la dominacion. en Ia.akiea

yen 3U area de aprovisionarnientcbasico, primeroi Perc mas tarde, desde el

ounto de vista de su localizacion relativa -en funcion de sus reCUfSOS natu-,

rales y de su situacion respecto de-las [mas y los condicionantes fisicos-, el

s'al~an~e_de f ~ s ~~pos ~=-er,'/ ~pandir . l~s~h~-_ciQ.D.e£..4e.-.c '.o.mi.r~aci6.n,_, mas alla del arnruto de 1",orooia aldea." :~ ' !W-_~_.,~_,_,,_ '."'.-C"'~-'----' - ~~ .,-..,"",} ~_: ~

a un y la ierarcuica de lo s sencrics acui m a n ir ie sr o s. E l i ni ci o de l a e str ati fi ca cto n e n los o rc ce so s s cc ale s 1 0 s im a "

mas a ac ia e l momenta de 1 2 . r un ru ra d e l a a ds cr ip c io n rer r i ror iai c on ba se e n e l p ar en te sc o, 8..S 0 C :3 .d ol c or nie n-

zo de la vida urbana y el Estaco. Esta estrarificacice social) en terminos arcueologicos, .sesueie observar enlos ranges de Vanac!ontipol6gica ce las unidades dornesucas, en las areas habitacionales 7 de enterrarniento,COl1?-C d e los sitios en el patr6~ de asenraznienro.

4lKeUv, Ceramic :Sequence, pp. 3 1 , 3 7 y 38 ,

430!iveros, "Nuevas -exploraciones, i', pp, 1 89 Y 1 92 .

44 L a a n a lc g ia se ba sa e n la c om p ara cio n de los r e s to s r n a te r ia l e s de E I Op e n o 7 de Ca p a c h a , con r em a n e n-

res contemporancos y del sur de Mesomerica. Ambos conjuntos de restos materiales sugieren que sus faori-,;" .cantes r e m a n capacidad tecnologica y escuernas mentales de complejidad comparable, Esto nos permite '

proponer que unos y OITOS vivian en entidades poiiticas de cornplejidad social semejanre.



EI hori zon te C las ico

174

L o s patrones de asemamiento del Prec1asico L em p ra n o se pueden recon3-

truir par analogia 5610 a1 nivel de sitio. Se componen de varias unidades ha-

bitacionales, quiza docenas de elias, consti:tuidas por la casa en 5 1 y su area de

aC1:ividad domestica alrededor. Nues[ra expecBtiva de variantes con respec-,

to a1 resto de Mesoamerica reside e n que los sirios de enterramiento podrian

tender a estar separados de dichas areas deacriyidad Seguri el registro arqueo-

l6gico, los enterramientos suelen yacer en ambimsseparados de las zonas

residenciales.45El efecto mas evidence de la disociaci6n entre los enrerramientos y las uni-

dades domesncas es que se conoce rnocho de los UDOS y casi nada de las otras,

en cuyo contexte -y no fuera de el- podemos analizar a los prL.'11eros.Los obje-

LOSculh.lfales tienen semido en la medida que nos pe rm i t e n reconstruir las

0..1aneras de ver el mundo y organi.zar la realidad por sus fabrieantes.

En 10 que respects. G e l pa1:r6n de asernamief'lW durante el Preclisico tern-

prano y medic, en el OCci~enle pod:.'"ia eSpe~3.f'3euna menor densidad de po-

blaci6c en relacion COE el resto de M eso am e r tc ;}, s eg(li l n os sugie re la e s c a s e z

,.p~,p,..')1iznr\" ri P materiales de c:·'~e--Tl·cip(,0'0'~p . = 0 \ . ranzo de variacion tipolnci

C~"-'-~<'-~C\.~'' '' ' ~ __ c_.' L l'~.v) _ ~L.y l. _~..... !'- '-, l~LO • va . c \.." •• - ,U

c·-

.~ 1 . . d 1 .r1 d 1 t- 0' "1 ' .r -ca ce o s a s e n 'C arm enL OS . a pafClf e _0 c o nOC ldO ei re s to ie rv e s o a rn en c a .

creernos que en el Occidence debio ser estrecho, con un maximo de tres llpOS .

de 511:10de oc '-.:p::1ci6n perr~"tanenLe: 1 3 . :'."csider,cra aislada, 1a ranchceria y E ; _a1gea

Fasemos ahora al siguien(e periodo que Eil1:1aremos de los ~-~ en virtud de las forrnas domin:llites de orgacizaci6n social que recons-

([1,l\!.TIOSara la epoca (vease b:;ura 5). Concebimos su_inicio hacia el 5ig10 IV,. - ~

ae, fechado nOI 10,<;;m~;;rpmiJflnOS halia7'Zos de tumbas de tire" y por sur . - ..' .

complejo ceramico asoci::cdo. l\oobsi:ance 10 magrode 51 . . 1 registro arqueolo-

gico total, esre periodo de los senorios compleJOS e S L 1 meier documentado

c;ue el anrerior. sobre todo en 10 que se refiere a tiempos mas tardios. En s 1 . . 1

conreALo encontramos, par una parte, eiena Lnformaci6n sobre unidades do- .

rnesticas que nos perrnite estimaeiones ini.oales; par otra, tenernos una huella

mucho mas clara de 1 3 . manera en que se organizaba el esp8&O y de la mag-

nitud de las transformaClcnes que le irnprimian las reiaciones sociales peni-

centes. Se han neche es::uc.ios parciales, can eiena amplicudlde distribuci6n,

' '4 ; E1reglslio arcueologico eS rncy ciaro al reSpecco, para el periodo de los senorios compleios. L;8 rum-bas tienden a encontrarse agrupadas en ceme:c[(;rios v separ-adas de sus umeades domesricas. Per ejenpio,en El Moralece, sitio excavado por eSW5 autores en Colima. las rumbas se localizaban en un monnculo quecarecia de restos nabuacionales. Cfr . Deraga y Fermindez."Las mmbas de uro de £1Moraiete, Colima". OtlaS-rumbas colirnccas, las de El Manch6n, e S ta ba n a gr ll p ad a s de manera sernerante Cfr. Kelly citada en Muna

(did, Historia de.... p. 178.46M01 , lmjoy , Proyecto Tomatian. , p p . 55 -56 .



R o d o lf o F e rn a n d ez y D a r i a D e r a g a • La z on a o cc id en ta l e n e J Oils ic o

,...-..~!

17 5

,~~t,::~~~:~';~~ad~tua!~I~.~.::;:,-:;; u rno a s de a ro

Oceano

Pacifico

F igu ra 5. E~ OcCic.e-CIe hacia e l fin del P re c l a s i c o .

que sugieren para buena pane del area ceGra.l yel norte cierta unidad orga-'nizativa del espacio en los asentamientos, can edificios dispuestos siguiendo

una simerna radial en LOrna a plazas de planta anular." Aunque cabe sena-

lar que, en 1acuenca de Sayula y el vaile de Arernajac , esa rnanera de organi-

zar el espacio brilla por 3U ausencia, W[l modestas excepciones en el segundode estes arnbitos.

S610 conocemos una un.cad domestica de este periodo que luego dOCL1-

mentarernos, pero contarnos can informacion e r nog r a f i c a bastante rica, a tra-

ves de las rnaquetas de casas procedentes de rumbas de tiro -producw de

saqueo- de arnplia distribucion per Ja1isco, Colima y Nayarit, segun .la infor-

macion proporcionada por los saqueadores.v

47 Weigand, "The Ahualulco Sire ... ". pp. 120-131.

48Aunque cabe senalar que en la cuenca de Sayula, en el periodo pre-Vero.a de rumbas de tiro, nume-

II: . rosas unidaces resicenciales han s idc idenrificadas en la zona fen i J de! sur Vaidez, Liot, Acosta y Emphoux:

"The Sayula Basin ... ". p. 182.



E I h o r iz o n te C l a s ic o

1 7 6

Las rnaquetas son irnportantes fuentes de conocimiento sobre las unidadesdomesticas. porque las retratan en plena actividad cotidiana, Representan

casas de uno 0 mas aposentos, de las cuales las mayores tiepden a yacer 50-

bre plataformas que indican cierta jerarquia de sus habitantes. Las moradas mas

complejas rnuestran terrazas Y espacios vestibularesanexos a las habitacio-

nes, cuya distribucion a veces genera arnbitos que podrian i.nxerprerarse como

alcobas. En la mayoria de las casas, cada cuarto tiene su techurnbre lndepen-

diente. Las cubiertas son por 1 0 general de cuatroaguas, dos de las cuales for-

man aristas en su parte superior, que nenen prolongaciones sobre las aguas

menores. provevendo ala cubierta de los necesarios resuiraderos suoerioresi _, 1 J..J"

para su proteccion en el caso de una tormenta tropical. Las cubienas suelen

tener decoraci6n geomeLrica, posibiememe pmtada 0 lograda usando entrete-jidos de zacare 0 palma de diferente color. los muros Y platafermas tarnbien

1 t • '9se muescran decoracos con pinrura."

Algunas roaquetas recons::.rl~yen casas que yacen e1 1 torno a un mon r i cu i o

central.'? cue se nodria concebir como un ambiw sag:rado -un 2.1(2.r0 un tern-J,,' _- - ,_

~ ~_' r- _ ' _,.. ~ ~ . -, . - " ! I! •

pro, segull ei C: 1 5 0 - en nmcion ce 51..1tamanc . .tSle upo ce arregio eel espa-

co tiene su nombre local, cuyo origen y significado no conocer:::os, Y es el

de guachimont6n. Un guachimoct6n es un conjunw de eSlrucru.ras organi

-

zadas par simerria radiai,const:!'1lidas en torno a otras de range y tarnano ge-

neralrnente rnayores La e xp e ri eQ c h l a n tr o ro i6 gi ca nos perrnite proponer que

las m a a U e C 2 L S de zruoos de casas retratan el ambito d e resider.cia de u n l i1.1'3,-, v •. . " ' ' ' . - - 1 ,1 .le, COC'.10una pequena a ldea 0 como parte ce un COCj1. . ' . : :110 mayor, cornpues-

[Q de varies azrezados deumc,aces domescicas de su t.po.~ v -

Anora nos referiremos a 10cue concebunos como la unica unidac dornesu-. ~ - .

. 1 ..i ' , .' • 1 0 id "1ca aisraoa y excavaca Ce rnanera SIstematICa en e. CG tente para esta epoca."

51 .1inLeyrecaci6n-apoya la cenjev_Lra de que, a l menos en el V alle de A re rn aja c

1 1 P iod d 1 5'" ' .1 " " 'Gl'.ranIe Cl • eno 0 ie as enonos cornplejos, h ab r a ur; patron de a se :nca r r . l e : : l -

to r e l a c l ' v ' 2 .men t e discerso. 1 :1 c a s a (1-_981) del IXleoece. segLm n ue stra r e co ns -

irrucci6n., contaba c~n une;paciocechado de un ~ superiicie estirnaca en 24C)_

').lneuos cuadrados. Era de adobe, pero de fabrica cuidadosa. Sus espacios inte-

vriores eran sencillos: .solo tenia un recinto a rnanera de alcoba en una de sus

esqum3.s, un par de fegones y dos poyos. A 20 m de 1a aparente casa encon-

\ trarnos una rumba de tiro, que consideramos pane de la unidadhabilacional,

por su fabrica muy semejarne: a la de la residencia. Si suponemos que la tum-

4?\ 'vi ' l l .niJlg, "Keraraische Hausmode! au s Navarit, Mexiko·'.

50Wi nn i ng , "Keramische HausmodeL ..".51 Deraga y Fernandez, "Unid"des habilacionales ... ", pp. 378-381.

ij

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Ir,I

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R o d o lf o F e rn a n d e z y D aria Oerag a • L a z o n a o c c id e n ta l e n e l C i a s i c o

ba quedaba al extrema del area de actividad dornestica, podemos sugerir queesta tuvo una superficie del orden de los 1 500 metros cuadrados; es decir, de

dimensiones sensiblemenre mayores que las de 1a gran mayoria de las casas

mesoamericanas del Pr e c l a s i c o tardio, con excepci6n posible de los palacios

de las urbes ternpranas. Por 1aceramica delrelleno de 1arumba, esta y la casa

fueron fechadas hacia ~l fin del Periodo de los Sefiorios comp1ejos, alrededordel siglo vr dc.s 2

La unidad habitacional 1-1981 de EI Ixtepete debi6 ser 1 a morada de una

familia cormin, a juzgar par losmateriales recuperados, pero pensarnos que

esta casa queda hacia el limite superior del rango de variaci6n tipologica en

funci6n del tarnafio que tenia segun nuestra interpretacion.

Al analizar la informacion pertinence al patron de asentamiento, primero quenada reforzamos la conjerura de su dispersion, por laescasez relativa de rna-

teriales de superficie.v Pero sabre todo podemos observar que en buena pane

del Occidence se tendia a azrupar [as estructuras en conjuntos de olanta anu-G· l J,

h e r . E s decir, parece que lo s eel Occidente despreciabandurante eSC; : " epoca L l5

soluciones ortogonales de sus vecinos civilizados, no obstante que vivian en

entidades politicas mas sencillas yvulnerables ideologicarnente. Algunos

autores como Phil C Weigand Y Christopher Beekman consideran de mar.era

irnplicita que la traza concentrica de los asentarnienros era mas sofisticada y

desarrollada que la ortogcnal.>' Respetamos 5U opinion, pero no estamcs de

acuerdo con ella. Desde e! memento del Erazo, es mas facil hacerlo para en

edificio de planta circular que para una estructura ortogonal con angulos rec-[ ',)5 enrre S ' L 1 S Jades, porque este ultimo trazo .irnplica conocimientos de trigo-

.nometria ..55Par mil parre los conjuntos estrucrurales concentricos generan

5lDeraga v Fernandez, "Lnidades h2bi[3.cionales"'''J pp. 378-58l.53E! proc.o w eigand, defensor ace-r'rno ce [a cor.die.or: urbana de los principales sit ios del Vaile 'de Amec a

y de la presencia del Estado en S~;5oc.edades de la epoca, apova 10 disperse del patror; de asemarnrento.Esre autor sena.a que el mas grande de los :5i(i05 Gel area 'acarca de ..shualuico a San Juan de los L ! . 1 _ , j " : G S pasan-do par Teuchitlan cubnenco un area de 2}-000 hecrareas. Dice oue habra en e'la m as de '20,000 habitanrespor el ar'o 500dC, can UDa ccr.centracion demografica de 600 a 800 habitantes par kiiometro cuadrado. \'\7<:i-

gand, "Thesrchirecture of [he Teuchitlan Tradition ... ", p_ 93: De ser cierta su aflrmacion, eilo impiicaria un

asentamientc de 230 kilometres cuacrados con una densicad de pobiacion de unos 87 habitantes por kilorne-

(£0 cuadraco y no de 600 a 800 como e! senala, Ahora bien. si su estirnacion de poolacion es por kliometro cua-drado, el asentamiento rend-ria e n r r e 131800tOOO v-18'400.000 cobladores, suma de habi tanres i r.audita pa ra su

tiernpo en cualquier parte del rnundo. Reconie;r,os par ejernpio que la poblacion de Roma hacia elpnmercuartc de! 5 1g 1o n. durante su max im a expresion, se ha esumado en 1'000000 de habitantes, repartidos e n una

superf lce serneianre a la alcanzada por Teodhuacan, del' orden de los 20 kilornetros cuadrados , Cabe senaiar queen una oubiicacion anterior. las 23,DOOhectareas eran 32,000, 10que hace m as increiole su estimacion, aumentan-

do el tamanodelsmo a.320 kilcmetrcs cuadradcs, Weigar;d. Evotuci6n de una cwiiizacion premspanica, p. 92.54 WeIgand. "The Architecture of the Teuchitlan Tradition ... ". p . 91; Beekman, "Political Boundaries and

Polit ical Structure .. . " . p. 135.55 Laexcepcion ocurriria solo en el case de una estrucrura de planta semicircular, siruada ala orilla de un

barranco 0 farallon cuyo centro quedaseen el aire y fuera necesario trazaria a base de tangentes,

-,

1 77

I"

"



E I norizonte C i a s i c o

1 7 8

espacios secundarios problematic os, aunque en algunos casas hayan sidore-sueltos de manera ingeniosa con aparentes juegos de pelota.

5 6

los (rabalos.mas destacados sO~.E..~~tr6n de asentamiento en e~~i.o-;\p,99_.delo.ssenorios com~Qul~_de_~eigancLerJ. ? 'L.{(l l le d s - : b~a.57 Este

( autor, en 1974, publico la mas clara de sus descripciones del fango de varia-

cion tipoi6gica de los sitios, para momentos cercanos al fin del periodo En la

gradieme taxon6mica de Weigand, los sitios menores --del tipo 5 de su clasi-

ficac16n- e~an estaciones de caza. E S T . C l S se hallaban en el somonte del abrupto

enrorno del valle dominado pOTel majeswoso Cerro de Tequila. Se caracteri-

zan par la ausencia de arquitecmra y cerawjca. Se identifican s610 por restos

de obsidiana que aparecieron en concentraciones; la camidad y la variedad de

mareriales va desde puntas de proyectil aisladas h a s r a los talleres completosde su procesamiento. E n ellos no s e han consignado montlculos, r umb a s 0 en-

t,1,

\\

\!i, ; , . , terrc.mientos de otra indole £1 gran r:umero de sirios de eS~lioo ha sldo Inter-

\_precado par \Yeigand carro mcig~..g::~f'pQS (oda'l12.cies'er~dia0I . ,,',. r il ' 1 '. 'I ' ..l-en zran meoioa ae la ,"\iI1;: <;1Vec;, , ;r~g : 3 . l : " p. S_"lqpT""rn r.r ,'F c.rYrrcnD'(10(...LeS me . "i' C •. ' _-- . ."' ~ '. - . '., .- ... "

\:lores.Is r"oV"". .' ' " ~... / 1

El Sli2mente tioo del ranzo ascer:dence de vanaClODes el nurnero ' - ! : ce suv J,; ' -,

clasificacion. Los sitios que le per:enecen se drstribcver. en torno a Q[WS rna-

YaTeS, los de los tioos 2 \7 ), a los cu e desDues ncs referirernos Por lo gene-. ~ ,! .... J,

1 \

'1' i' ' . .' ,.. , , ; .-Irai, .05 de upos vacian estrateglCameme slm?~dc:"en runcion de la s zor.as ce

aprovisionaITJ.ientode los asenta:rrJ.ienmsm a yo re s. Q uiZ§. e n esIOSsitos residian

los cazadores cue ocuoaban temooralmeDIe los del trco 5 \'(/ei'2::mddescribe_:. .1 ,..._ :.. I..-

uno de estes como un grupo de pequenos mont:iculos situados en torno a otro

mayor que podria haber side un altar. El di-ffi.OelIO obsellado en estes con-

juntos f lucrua entre 40 y 60 m . Weiga,_d los c on s i d e r a como habitacion2Jes en

virtud del hallazgo en ellos de cerarnica unlrtana en proporci6n considerable

_En este grupo de conjuntos se ha documentado 1 ;" exis::e:--J.ciae rumbas de tiro

con ofrend a s m o d es ra s, codas excavadas par saqueaciores. Para 1974 , 'Vv-eigand

nabia regisuado entre 8 y 14 asentawjencos de esta naLLlralezc.

56Weiga.ndarzumenta que los jLegos de pelota servian de L.~~j[uci6na c r ave s de la cuallaje,aroc;ia 00-linea y econ6rmo ~e expresaba a SLm i ; m a . ranto entre ba r r i o s de ur, 2 .se l l c : n r i e nco como entre a s e n c a r i l i e n l o ~ ,

que la,c ompe t e n c i a ritualizada i . l ' i 1 pHcaGae n el [uego e n j er a rq ui a ascendente. p U G O haber serv.do c om e - m 2.f-

odor para la incegracicn publica que facilitaba el i.merca.rnbiode r e cu rSOS c;i[icameme necesario5 dentro de lazona nuclear del Occidente Lrl[egradoen estado que concibe: que las dispucas score asuntos como derechosde irrigacion y t i e r r a oudieron h a be r s id o m i [i g3 .d os a t r ave s del juego de pe iOIa . Weigand, "The Mc'ritecture

of th e Teuchidan Tradition ... ", p . 97 . /il} 57Weigand. "The Ahualulco Site ..", pp 121-124;La evoluci6n v el ocaso de un nucl~ de c iv il lZ ac i6 n. " .

"The Architecture of the Teuchidan Tradition ... ". . /c///

I

~ : ii

, •..1-ij;1

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: 1



R o d o lf o F e r n a n d ez y D a ri a D e r a g a • L a z o na o c c i c ie m a f , e n e l C i a s ic o 17 9

I",","

Los sirios del siguienterango, el tipo 3 , se asemejan a los del 4 en cuantoa su organizaci6n, pero son mayores. Los coniuntos arquitect6nicos miden .

entre 70 y 125 m de diametro: tienentalleres y ZQD35 habitacionales, pero

Weigand no cree que hayan side lugares de actividad ceremonial. Los del

t ipo 2 comparten con los del tipo 3 sus c a ra c te ris tic a s ba s ic a s, pero poseen un

rnonticulo central much.o mayor, que en su altura actual alcanza 3 0 '4 rn. \v-ei-

gand incluye en esta categoria a EI Arenal, tan conocido POf sus grandes tum-

bas que alcanzan los 16 m de profundidad.

Los sitios de los tipos 2 Y 3 se distribuyen por el sornonte bajo can dena

regularidad. Segun Weigand, las areas de influencia directs de estes asen-

tarnientos abarcaban zonas eco16gicas distin tasdel.valle, y ~nQ centro-

laba un recurso estrategico ciferente, como e~ la(6bsidiani'----._.. ..--Los sitios del tipo 1 , los mayores del range de var~sp.6n,Lo:o.'::L:1.n_~~asu-

cesion de conjuntos arquitectonicos concentricos.el esnloguachimonton, dis-

tribuidos con tine por el sornonte, en zonas muy alnphas. S;;'halla58:-1"r-~deados

de a r e a s habitacionales dispersas, a juzgar p a r los [ieSLOScan escasos de 5 1 . . 1 -

perficie. Se trata de asentarnientos muy grandes, pero en extreme sencillos en

SD edificacion. El Ahualulco, oar ejernplo, llezo a OCUDar2.5 krn', sezun esti-,; J. -, c _ . , l ' ._

macion del propio ' \ I7elg; ;mc, cornprendidos por unidades domesticas extendi-

das y con nurnerosa ocupaci6n humans."

En surna, hacia el extreme suoerior del ranzo de variacion tipologica de- ! U _

los asentamientos, tendriarnos a los sitios del tipo 1, que para 1974 aparenta-

ban ser cuatro en el Valle ce Ameca y para 1993 eran ya seis.> En torno aellos, can patron de distribucion no explicito, tenernos asentamientos meno-

res, de escasa ooblaci6n, oero de cierta irnoortancia cornunitaria, cue serianJ, J. 1; c.,

los de los tipos 2 Y 3 . En ellos parecen haberse concentrado las actividades

p ubl ic a s de los hab i r an t e s de la s rancherias de su entcrno. "~s1 . . 1 ez , como 1 0

sugiere \Yeigand, los rnoradores de las rancherias debieron ocupar los cam-1 -, , . 1 S 1, Ii 1 • ..

_pamentos Gel somonte ce manera estaClonaL"", , -e pueae naOl3.rae una ]erarqlil3.

Cdea_Q~:oramii0to con tres LiDOS de sit . io sedencario, d.clQs (uales. desde I1 ~

\ ~ra perspec~~a, los!p~Y.c:?E_~.~~g_£.~unlanas cara~rer1st ica~1I ivas. . . . .d. .~

rL. .££l l . \ : rO,S-k1-H;.2"Q,Qs.se (areda de e s c r i..tw .r a , Y d.smet_'2402.2~~

5J3Para1993) los sitios COlTIO Ei }~..ualuico y sus cinco congeneres tertian. segue las uitirnas estimaciones de

WeIgand. entre 3 000 Y 5 000 hectareas de zonas habtracionales ccn un nucleo interne de 300 a 500hectareas(Weigand, Euoluciori de l,m&i ciuiiizacion. ,pp. 91 y 92). Ella implicaria ciudades de tamano mucho mayoral de Teotihuacan en su maxima expresion, Sentimos por 10tanto que hay problemas de estirnacion, pues detener de 600 a 800 habitantes por kilornetro cuadrado ("The Architecture of [he Teuchitlan Tradition", p. 93),como el propane, estariamos ante aglomeraciones can poblacion de 180,000 a 400,000 habitantes, 10 que re-sulta .naudito para entonces en ;viesoamerica

59Weigand, Euoiucion de una cunlizacion. .., p. 9 1 .

1, 1

i,,I

IIII

1 : 1 1



E I .h o r iz o n te C l a s ic o - -

180

compute aparente.60 La poblacion era dispersa: no hay eVidencia clara de es-tratificacion social en sentido estricto, Yse depenQ1a.Jjemasiado de la caza.z;

E_recolecci6n para el S!J,S.tE'nio.La reconstruccion que hace Weigand del patron de asentamiento del Valle

de Arneca, nos refiere seguramente a1 ambito del Occideme donde los pro-

cesos sociales dejaron huella de mayor complejidad, en el lapso comprendi-

do por este trabajo. Ello, si aceptamos que los grupos humanos, conforrne

incrementan su complejidad, dejan mayor rastro de su existencia en el espa-

cio que oeuparon. Per ejemplo, para la Easearqueologica que corresponde al

periodo de los senorios cornpleios en la cuenca del RIo Tomadan, Joseph

. M O U D L J O Y consigna ocupacion en 40 de los 1 65 sitios locallzados -contra 4

sitios del Preclasico cemprano-; pero, aun as.Ias huellas de esa epoca ape-nas rebasan a 10S'_§; yen e l meier de los casos se trata de un grupo de

entierros, EUo nos da la idea del imoortsnte dce~encial de ramafio v cornple-. J i.

., , d enrre los zrand - / ., 'i- c , . . 1 . _ /j l C 1 c . . . entre io s gran ,e s se:WEOSeIe l I 2 .L e . . . . . .e _ A. cleG":. . y otros s e n o r i o s cosceI'OS/ ' . 1'· ,-1 i, I' 1 . . ,mas modestos, a ruzg?.f p o r 10 d . 1 3C r e [O ,-~esu UJe"l2.en e p a t r o n ce a s e n t a -

.miento. 6~. ,lun area que vale la pens dOC1..:.mentc,.:e manera especlllca,_por el nrvel de

: r ( sintesis a que se ha llegado en la reconsrrcccion de S l " iS sociedades p r e h l s p i -

-: \ nicas en el apso de interes. es la cuenca it:: S2"JlJla en Ialisco Y no solo p o r eso

j " " { I es inreresante, sino tarnoien p o r el '. = ' " ; . ' . ~ d i ) de C01 .1 [ ! ' a s [eQUe sus r esul tados c.re-

f}"t~:t sentan res1Je~to a sinresis p~evias .L. i . :K~U"ler_( : j .o las propias, O:ra r a z on ;ara

l\. dedicarle l~Despacio a esta zona, es c;ue,' 2 . 1 memento d e laLDvasi6n espano-A i -}i. 1 r b ., ' I· ... d 10 '-d . 'f' .\vt" I a, parece _12. er consriru.co .a cornarca mas nca 'e. eel rente de rv...exico, a

,,"0 r t . . / ' juzgar par, el rnonto de ~GS Lribi..:m~ que ?ag-::'~2~"'1 su~,habltant~s indigenas a la~\ Corona Y iOS encomenceros en el siglo 1.~iI6.Lsto umrno es irnportante por-'

, ~'1ueentre los especialistas eel Occidence hsv una tendencia a considerar al~ J. :

60\~eig2.r;~ sugiere l : J . po~i i: :le eI.s[e! ';c'a de codices en 1a5vasijas de seudocloisonne del penodo Pisico en

el OCC1CenC€ . i.cn ello trata ce suster.tar ia ~X1SL.e- [1Ga ce e sc ntu ra e :.'1 la epcca, que los espeGai2s!as nan ccnsi-

derado reouisieo de civilizacion '1 ex.stencia del Estado C \ f . / e.gand, ::Ehecat l: i.P:imer dies suprerno . .. " . p. 216.) .

. '0 estarnos de acuerdo: sentim;s cue los sistemas de calculc y r e gi s c: o de e:ier.ws dejan un a huel!a ~as clara

y gene:-alizad~ que Laque ·W"eig~nd?ropone_ veanse los cases de: .nicio ce la vida urbana en ei centre Y el S 1 2 f ,

de Mesoamerica, donde adernas ce 105 g :: .t "0 5 , 2 . bu r "c .a :: 1 ios numerales, que implican<:l calculo y registro de

eventos apenas referidos.61 )I Io-uncjoy_, P ro ve cto T om at lt r; n .. j p o . 3 25 -3 26 .6, Como senala Thomas Hillerkuss, "entre 1a5provtccias sin urbanizacion prehi.spanica del pOIlle :ue mexi-

cane n.nguna resulto can prospera como Avalos". EsT.;:autor seriaia. per ejernplo, que en 1 5 40 el rernate de sus

tributes en especie dio una gananoa de 3156 p e SOS y~os ' OC 1 . i " 1 e S , de eT O comun, para el fey, mienrras que Jiquil-

2an produjo [an soia 400 pesos. jacona 631, Ameca 2'- '!T'.!xpa:".la orra provincia rica 1346 pesos. En 1560

Avalos estaba tasado con 9000 anuales de rributo, los pueblos de Auc ian apenas con 550, Tan ,dc a ro , Michoa-

. can con 500 y Acambaro, una de las encomiendas Importances, can 3000. E! ano antericr, 1559, Tonala haoia

,I' sido [asado can 230 pesos, Analco con 179, Tlajomu[co can 215, Pcncitlan y Cuitzeo (00 207 YTequila con lIS

(Hillerkuss, "Tasaciones '! tr ibutes . .. " , pp 29 Y 30.



., . . .

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j

R o d o l f o F e r n a n d e z y D a r i a D e r a g a • L a z o n a o c c i d e n t a l e n e l C i a s i c o 1 8 1

_VaUede Ameca como S 1 . 1 centro de irradiacion cultural. La riqueza de la cuenca

de 5a1'11laal momenta de! contacto, pone un contrapeso a esa corriente de opi-

nion y nos perrnite ponderar su importancia, a (live! mas amplio, enla inter-

pretacion de los procesos sociales pertinentes. AS l nos presenta un registro

alterno del acontecer prehispanico en las cuencas centrales de jalisco, que

contribuiran a enriquecer nuestras posibilidades de generalizar sobre el. Ade-

mas, cabe senalar que se han realizado excavaciones sisternaticas en la cuen-

ca de Sayula a partir de los recorridos de superficie.

La evidencia reciente pone la ocupaci6n inicial de la cuenca de Savula en

el Preclasico tardio. Los rnateriales mas ternpranos encontrados son previos a

la llamada fase Ve r d i a y m as ligados a los c o r n p l e j o s de Ortlces y Comala de

Co l i r n a y Tuxcacuesco." Hasta 1996 , no se habian en con t r ado rnateriales asocia-dos a los horizonres de Capacha y Chupicuaro, aunque esperan encontrarlos.s'

\0Los .JT~Eer- i a J s s . - rnas -·~o .pr§: .Q.9 . : s_ ! :_nc?_r l [£cdos en la ~uencaJ?.!.q~_eg~.ILdeJ.._

1.f . l J i i t~?_? .~_ ,~~L?~g_y_g~l i~~:_~a~_~~de l~~o E 2nces de C!islo. _A_SOC~8_.S_2! : ,~_esIOsl f - ~ i 1 ae:jg.~:e.s..se,encu enU ':1ri ---La5,Lgur- ' l la:s_d.d.i i- .~... .l~1§~§._Q.@ s~_D:l~~ .e.:; lJ.es.co,. .. lgit,J

;'\J,~"\~le los rnouvos de co r g , ~ r : l o s ~e p a I1 ~ .i_Q cisD :-7 ~ JD a . L a superficie de a~LO.>\ r - lust re I' ~"!'I:-enTO de un e a fin a Y p in ru r a b ic ro rn a parece caractenzar e 1 ~I~v~ \ ~L.l,l }JU1.!. _l _,_.. .. !C J..Ll.;;'t l..~.u:.. .1 lJ.. ...~~l..:.a. J. 1-1...:, 1 > ; : . . . - a c.............. .. . c!_ _ 1_11

~ " de esta ternprana ocuoacion.v,

Mas de 100 sitios, ocupados en diferentes periodos, fueron localizados en

la porcion 51.:: de la cuenca de Savu l a , que fue la zona esrudiada oar el proyecto• .~ .I. J.

pertinente. A esta area de 800 km2 la consideraron de manera arbitraria como

una region. La region fue dividida en tres sectores en funcion de la altirud,correspondiendo estes a 105 principales elementos geornorfologicos . .£1sec-

tor I 10 constituyen las laderas superiores de las dos cordilleras que rodean la

cuenca. Se sinia entre los 2 7 0 0 y los 1800 msnm. E l sector II e s ta ocupado p a r

el sornonte y las terrazas lacusrres que circundan ellecho del lago, entre 1779

y 1 35 0 m s I'..1 Y 'J .l s ec to r III c o rr es po n de a l a s duna s , las r n a r g e n e s de lago y el

lago mismo, en t r e 1350 y 1335 r n s nm . La altirud y lo s elementos geo r no r f o l o -

g ic o s in te g r a n c a da secor como un eSlrato amblemal di s t i n t o , can rec_ursos

espedficos para cada zona.66 - -:

6 , Estes aurores consideran cue la E a s e Verdia debe pertenecer a 10.5tres primercs siglos de la era crisuana.

18s marena.es de Ia fase Sayula los consideran correspondientes al periodo Clasico de l Altiplano central . Pero

a':!n carecen de fechas confiables de radiocarbcnc. Para ellos la fase Arnacueca de. Kelly se relaciona con elPo sc la sic o, p ero es p ertin en te un a subdivision. NH eD [r Js l a p a rr e mas [ ;; [d 1 3. de l a f as e e sc conremporanea c o n

el pertodo t a r3 .SCOde los siglos xv 'i temprano XVI . una pane mas [emprana de la rnisma podria estar siruada

entre los sigios x Y xn de nuestra era. Valdez, Liot, Acosta y Ernphoux: "The Sayula Basin .. ". pp 172 Y 1i3.

64Valdez, Lim. Acosta y Ernphoux, "The Savula Basin ... ", p. 172.

if" 65Va[dez, Liot. Acosta.y Ernphoux, "The Sayula Basin, .. ". p. li3.

66Valdez, Liot, Acosta y Emphoux, "Th e Sayula Basin ... ", p. li4



1 8 2E l h o r i z o n te C l a s ic o

Por orra parte, los sitios fueron clasificados en tres tipos diferentes: 1r - S i : .tios habiracionales domescicos 0 primaIj_os;EJ.~=d~ ..a c i iY i d a9 (t ...j : . e . . , n . t r . 2 § S i -.::i£Q§•.9.sereID..Q..._~s.Los sirlos delpriroer ripo se YlCllenfrao eS12arcidossobre

~rodQPO e1 seewl)I, con algunas aglomeraciones evidentes en las-terrazas

lacustres. La densidad de restos domesticos sugiere tres drvisiones en esta ca-

tegoria:

@ unidad residencial. que comprende una a doshabitaclones con un

area hasra de 150 metros cuadrados de restos domesticos esparcidos:

~ rancheria detres a cinco unidades habicacionah~s;'

@aldeas, con mas de seis unidades habitacionales

Los sitios del segundo tipo ocurren en siruacion pr6xima 0 distance de los

principales recursos Lamayoria SQnestaClones de trabajo de extraccion sali-

na situadcs en las margenes dellago (sector III). Casi todos aparecen como

agrupam.enros clararnen:e definidos de montones de tierra bajos y cubiertos

de resros de ceramica burda Ocasior:almente estes rnontones se hailan aso-

ciados con una variedad de estrucruras medic enterradas que se detallan ade-

lante. 01 : : 0 5 upos idenuflcados de a r e a de actividad incluyen areas de excaccicn

de m i n e r a l . talleres liticos 0 e.etrabaio de concha marina, y posiblemence campos

levantados 0 sistemas de drenaie oara la acricultura. Los sitios del tercer ripo1 ,-' __.

se caracterizar; por la presencia de elementos arquitect6r.ticos los monticules,

pla..taforma ..s 0 plazas se han identificado en ocho lugares diferentes, en los

sectores I y II de 1 a cuenca. Su naruralezaDO

puede ser definida 5610 por ras-gos de superficie, pew es evidente que su construccion irnplico algun tipo de

[ r aba lO colectivo. Los au t o r e s consideran que siestos sitios son contempora-

neos, hJY una posible jerarquia que debe ser elucidada Si no, como es mas

plausible, las diferencias deben reflejar variances en estilo, funcion y orgaru-

zacion social."E1 p az r on de asentamientode Ia regi6n construida por estes autores, no

sigue una regia arbitraria En contraste, la distribucion de los sitios se basa en

la disponibilidad de tierra arable Los sitios habitacionales no son abundantes

en la porcion norte de la cuenca, donde los vases lacusrressecos conforrnan

la rnayoria del a r e a , S in embargo, en 1 a porcion sureste de.la cuenca hay nu-

rnerosos rnanantialesy

ocurre una imoortante concentraci6n derancherias.__ _ _ l, -

OtroS agrupamiemos habitacionales se encuentran en el area central y la no-

reste. En la mitad occidental de la cuenca los fiances de la sierra de Tapalpa

67Valdez, Lim, Acosta y Emphoux. "The Sayula Basin ... ",p 174

d

:. 1



R o d o l f o F e r n a n d e z y D a r i a D e r a g a • L a lona o cc id e n ta l e n e l C l a s i c o,

183

son abruptos. Sin embargo, hay una ocupaci6n bastante densa de las 1aderasv terrazas inferiores.f

/ r : Seg{m1ainterpretacion de estos autores, la agricu.ltuq era de seguro la acti-

.}. ~vidad principal, pero su Importancia mtre las'actividades econ6mic.a,s.de b . .~ < : L,s.uenca P~~ Q .§:Q l~1J) .S l11 ~,_vat16. E l aceeso a los suelos bien. irrigaaGSftle un factor clave. Sin embargo, este no era el unico elernento de-

terrr.J.nante de localization de las residencias. Las actividades relacionadas a

1aextraccion de sal alrededor de las rnargenes dellago fueron muy impor-

tantes y aparentan haber side una practica popular que ernpezo en la fase

Verdia. No obstante, senalan nuestros colegas, debe recordarse que 1aextrac-

cion de sal no .es una actrvidad permanente durante el ano. Su extraccion se

Iimita a la estacion seca. Sin embargo, se encuentra una impresionante canti-dad de estrucruras relacionadas a las diferentes fases de producci6n de sal,

incluyendo bancos.o plataformas de recoleccion, continentes de evaporacion

y pozos de aglomeracion."L'JS aurores acuJ}C : lf .:_QU'e Isabel Kellv oensaba que esos sit ios orientados

r a 1 ~ - - ; r o d = c c i ~ - : ; i i ; " ~ ; ' d £ E : 1 b ~ ;~ .la fase. Savula en el Ciasico, I 2 e r o ' c l U a s ; : r a'. \ !~~ ~: ;i i~~ ~~ l -e s_~a~ ~q~~ =~}g l,lD:Q ~~ ~t .~D_?:=Joschlsico t em1 ?~ ; L~:

.~~ ,L~~?easCO~l&n.~?_,)jJor~l&Jl~~a s o < : : i ~ c ! ? s ala agncuitura de subsiS(:nCla, se 1 0 - - = " - '

,- ,'' OS ",;..,' ,,' \ _ iGl~iz~ p;Jr3.od~2_~~::s_~_r~,~,§;~Hci...U~er~Ji~urf],~~~EffI~iPl:~U .as ES~:Jss.rlos correspor.den a todas las fases defmidas con un componente

principal en la SLlfe:-Eic:eorrespondiente al Posclasico tardio. Sin embargo, las

rancherias agricolascel Clasico temprano y el Preclasico tardio (fase Verdia),

son mas frecuentes en las prirneras terrazas de lazona sureste 70

Los sitios de la fase verdia son los menos cornunes y se manifiestan como

cornplejos residenciales de rnenos de cmco unidades habicacionales. Pero el

. recuento actual de estos sines se encuentra sesgado par la escasa visibilidad

de .sus rnateriales en la superficie los niveles de oCl::lpaC10ne estos sitios se

suelen encontrar bajo 0.50 metros de relleno que usualrnente incluven restos

habitacionales mas tardios. los sitios de la fase Sayula no se lnnnan a las es-

tructuras dedicadas a la extraccion de sal. Hay un nurnero moderado de asen-

tarnientos en las terrazas.y laderas superiores de ambas cordilleras. EDtonces,

1'1.5;l nAn" haias 'Ii alQunas terrazas inunda > i n > 1 rl'l"lau...b..al2E J::...

.sido l 1Wiz . a cWQJo para la agncnlnira y 561 0 algunos sitios habitacionales se

muestran evidentes. Sin embargo, debe enfatizarse que los tres principales si-.

68Va ldez , Lim. Acosta y Emphoux, "The Sayuia Basin. ..", p. 174.iI' 69Va l d e z , Lior,Acosta y Emphoux, "The S a y ul a B a s in " ." , p. 174.

7oVa l d e z , Lim, Acosta y Emphoux, "The Sayula Basm..;", p.174.

: 1 1 1 "



E i h o ri z o n te C l a s ic o

1 8 L 1 .

tios encontrados en la cuenca definitivamente son construcciones de la faseSay'Ul

a. Y estes estan definitivamente asociadas a los lugares de extracci6n de

sal. E1principal de esLOSultirnos sitios es Cerritos Colorados, que se discute

ade1ante.71Sin embargo, el mayor nurnero de sitios localizados data de la fase i~rna-

cueca. Estes sitios s e encuentran en todas las altirudes y probablemente ref le -

-an una larga y variada poblaci6n. los sitios son mucho mayores que los que

datan de las fases previas y parecen ser asentawjentos aldeanos con agrupa-

ciones de 30 a 50 unidades domesticas. Cierto nurnero de ellos coinciden con

los poblados modemos de Atoyac, Cuyacapin, Usmajac, Sayula,P....:.-nac\;lecaY

Tecualuta Conslderan pcsible los autores que tales aglomeraciones sean el

resultado de la conquista esparlola, a traves de las congregaciones que for-

ma-en pueblos de indios en vecindad de los asent;;uTuentos de espanoles"

En el periodo pre-Verdla de rumbas de tiro; numerosas unidades residen-

ciales han sido ideilCificadas en la zona fertil del sur. Al rnisrno tiernpo, una

e 0, ida d l rni .. d ." ' , ''"' r r 1 1ll n o r ie n s i ia o C L e lTI1 S 1TIOpo te 5 1 (1 0 a pa re c e e n am oa s ma:cgell

e;:; ue a

. parte superior del lago Los escasos materiales cerarnicos diagn6stlcos recu-

peraGes de la superficie, apuntan Z : un tipo de cerarnica estil1sticamence ho-

LcOgenec, -erniniscencia del complejo Onices-TuxC:lCl.leSco. La informacion, r- "1 1 I b d . r1 " i' csoore tlguLULS nuecas ce tum as e tiro saquea\.,,,as, sugiere que ei npo C8.:e

Arneca es COITlUn a la mayor paf1:e del centro de"Jalisco. lmportantes rumbas, . nan si . -1\' '~·hl \ .. , d ~de tiro ...all SlGOconsignaoas en e1 area oe 1ec a uta Anoca y el area .e ieo-

cuii:3.cl2.fl.Los rasgos asociados a ellas sonnonnalmente consideracios CO!IlO

d.srinrivos del complejo de tumbas de tiro y son generalmente comunes en

Jalisco central y del sur Con b§;.'3~~n~.?:les atributos no es posible identificar

a la cuenca de SaYl..llacorno un solo distri[Q en este periodo definido pobre-

mente en terrninos crono16glCos. Enconces la cuenca estaba ocupada par_ ... ,~ ....

_. gente que compartia algunos rasgos culrurales generales, pero que no rnos-

traba un sentido de unidadinlerna73

1_ ~ ev-i.dencia ~~e la fase Verdia SUOl -.,,;,urla lra.;1sici6:r,,'1Dlrp',..~,L~oj];, 1" b d l-~>'''''~ 1 id 1 c~l l1m as _e tilo y _9,_tas~~ a.Los a1.. .HnreS cQI1 i l,£ :! .~raT}a ; ; '~Sf ~a-

' C \ T u h l . . c . o . m .0

u , n uemp9 de crecirr..@,rp.de _S'loh1a[i6T l y . Q s : . . .E w l " m d~sc:n-()Il(...,e lF h

identidad reO'iOl al. 1 "" "1";0 S formas v f1l PI os 1

~~p~J1dieron rapidarnente por los [res ~~ TI

n Valdez" L i m , Acosta y Emphoux, "Th e Sayula BasiD .. ", p. 1 7 5T'Valdez, LIm, Acosta y Emphoux. "The Sayula Basin. ", p. 1757;\laldez, L im . A co s ta y EmphollX, " Th e S a 1'1 .l 1aB a sin .. " , p. 182.

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mailto:@,rp.de

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R o d o l to F e r n a n d e z y D a r i a D e ra g a • La zona occ iden ta l e " e f C l a s i c o

sion de los materiales de superficie en los sitios sugiere rancheria mas que

unidades residenciales aisladas. Talleres de trabajo especializado surgieron

rapidamente en ambas rnargenes dellago y hay un sentido de unidad en 1a

ocupaci6n del paisaje de la cuenca. Usos complementarios de rnateriales de

diferentes procedencias manifiestan la interaccion entre las diferentes altitudes

de la cuenca. La presencia y uso de diferentes materias.primas exogenas, como

la obsidiana y la concha marina, sugieren una integracion mas amplia y una

. red mayor de contactos variados con otras regiones."

Para estes autores, aparecieron grupos de poder i.nternamente organizados

".en la f8.se Savula, can los prilueros cen"ros civicos ceremoniales. La construe-

cion de monticules y plataformas arestigua el rnanejo de trabajo colectivo

tornado de una poblaci6n considerable que participaba de creencias y tradi-

Clones cornunes. La localizacion de estos.centros en las margenes inferiores del

lago, tambien es indicativa de integration regional. 'Los sitios principales no

estan siruados cerca de las areas residenciales, ni en vecindad de las terrazas

ag:-kolas Estes sitios fuercn construidos cerca 0 dentro de las areas a50C'.8.-

das con la orcduccion de sal. donee fueron construidastambien calzadas oara. . , . l

a s egura r e l acceso a e l ia s aun cuando e : a g 'J .3 : c ub ri a los l e c h o s lacustres. S i t i o s

representando nodes mer.ores en la jerarquia de asentarniento se distribuyen

sobre las terrazas y las laderas altas en torno a la cuenca E n c o nr ra ste c on los

sitios mayores, estes asentamientos contienen ceramica de Ia fase Sayula de

barros fines v ordinaries relacionados COf. las actividades dornesticas."

: JSegun Valdez y sus colegas, Ia impresion general es que la cuenca tenia -

~i (un arreglo ie1"~.f('_uicode lQ~asarlo F J : l ~1 man e iQ de las actlvidad?s rd£i-

" J s. ; ion'~d?~ enD 18 sal . F s ta s Z L c [l vi n ad p 's :wrhpf9f1 hClber ~;ciQ 13 n ! e " ro ,de; "lOin

i' y . f1 . L '. 1 1 e 7 a w . a .r c r .k J .en...qlle~e_f).l..fJ:L,;,ment6el 'Qod~f pollcico demro de ]a

) r~. E n una red regional de intercarnbio ,E -~a ls un recurso i lY tpOfmn te lli1e

!).',[Ruede s ~ r c a n a li za d o ,COII1C1 m~Q . .Q . s : I[l)eQ..u~_Qorp roduc t ,O~.~x6t i cos o,exter-

~ '7 J 'J ~ . La unportancia ce estes sruos pnr.cipales es por 10 tanto acenruada por

la facilidad de acceso a ellos durante todo el ano."

Alrededor del inicio del siglo xn, segun los autores, 1acuenca parece haber

experirnentado un carnbio mayor en los estilos cerarnicos. Durante la fase

Amacueca, subsecuente de la fase S ayu l a , la cuenca participo de r a s go s obser-

vades en vecindad de Autlan y Cojurnatian. Conciben dificil dilucidar donde

i4Valdez, Llot, ACQstJ y Ernphoux.r'The Sayula Basin. ", p, 182.

75Valdez, Liot, Acosta y Emphoux, "The Savula Basin .. " . p. 182.

76Valdez, Lior, Acosta y Emphoux, "The Savula Basin .. ", p. 182.

1 8 5

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iii



~ .. "

E l h o r i z o n te C l a s ic o

1 8 6

se inicio la tradici6n, pero varias de sus influencias se sintieron con arnplirud

en Jalisco.77

He aqui una panorarnica somera de los procesos sociaies pnstmos del

Occidente, que abarcan con su propia periodificacicn, primero al Preclasico

temprano y a1medio, en el periodo de los senorios incipientes. Despues, en

el periodo de los senorios cornpleios comprende a1Preclasico tardio y a1 C 1 ; 3 . -

sico. Asi, las sociedades que reconstruimos en e! Occidente contrastan clara-

mente con el resto de Mesoamerica, que en su Preclasico medio tenia senorios

muy bien formados y en el Preclasico tardio alojaba estados en sentido estric-

to, vida urbana y escrirllra.E I fin del periodo de los senorios complejos ocurrio en las drve r sa s panes

del Occidente en distinto tiempo yse nabla de fechas terminales desde d si-glo Pi hasta el vudC; pero 1 0 que es claro es que se transformaron los univer-

50S conceptuales de los grupos baio presion de la .deologia dommante, que

va era diferente de la que nabia orivado antes. En este cenodo se deiaror; d;~• " _ ) ' . J . J

construir rumbas de tiro, v 8.iJare::i6el panteon del _A.J.ei;::'hnoenL:-3.1C C J [~ S 1 .1,. . ~ ~

iconografia. Adernas, los patrones concentricos de asenramiento fueron imfui-'

dos por conjuntos arq1..l1r:ct6nicos trazados con la i6gica onogor~al del resto de

Mesoamerica.Cabe senalar que \~·eigand y un grupo de seguidores v correliglonarios no

estan de acuerdo con 1 . 8 . idea de queel estado, en rerrninos eSl:-iCi.OS,.unca

existio en e! Occidente, y en funcion de ello se ha desacado una gran polerni-

ca. ~(!1'1 y U " " i 71 ' 1d -en 5 U 8.[[1(1..110 intitulado "L a evoluci6n v ocaso de uni ~ ~ C 1 C k 9£_<jyjli~c.i611~.1l_[ra.;ii&1@ilm(;:J:~i)~;;::-; 1 , O J 2~fol9Q'§d~~J~.se desarrollo una tn.dici6n 2rnooo16gica acerca de las 'sociedades anilQuas de

~1~I§.~6:."Ccl1i~~u~~;~:rj"~~~Jtll~i;';'~-;;~clusioDes erroneas SOb~ la -n~[Urale-

) 01-;Z2;_Q~JO~.2istfl:..maSsociocultmales de e.s_" f~~ eJirma gue los a rgurne ; : 1WS

, .? ii- )histor\ograflco~ ac;;:cacre-es:~2&1}l~1~~e Q . . , s ; c i r Z ,r ~ lJ l_ tn~b: ; . r ;q~ ;~ -• ; ' ; \ < 1 « . {""La decir que "los oroyecTcs de ca~o rec;igJl?'~ r 1qn dpmoc;Tr"'QQ~g.~'J {,' . --"i \ Iconcluvente la exis[encia de una expresi6n (mica de aT(1";r~~"Wl . r;l,,-r'-,:,,-

'V "'i iE 1 gr3n(~e;;a"pnr3n:~pn(c;..5_~emas de ir'.igacion, alws perfiles demq_g0l1;;Ds,

./ ;£ W tu n OQsibk. s iS , t em" d.e..F'5c!tt:ula.id~Q££~£~ otros marc adores seguros de civi-

; : ! . t- \J.iz.ao.60.-en0 l r 1gu+"a , s - " 1~~k fb e ; ; ; . . . oo l -Q ,~c id fnfP. ~ltxIC:Q~fI\'5aTIte:.'icre"T5S-h;Tcios

..,'~ d e l , PQ&asiU/,.'8 - . .-.~

~TiValdez, Lim, Acosta y Ernphoux, "The Sayula Basin .. ", p. 182.

y. j8Weigand, "L a evolucion '! cease de un nucleo de civtlizacion: la rradicion Teuchiclan y Laarqueclogia

dejalisco", p. 185

I

I



Rodol fo Fernandez y D aria D erag a • La zona occiden t? ! en e f C i a s i c o 187

, Por otra parte,~~fid p roPQQ.S ; Jq oomeDc1a de 10 que l l ama una iu::~plo-\ , 1 , } ~6~~ca ,.que.no eXQlicamnciaridad, p l ! e~ 1 ( 1 m~tlllora deja imp lo s iOn

f' r ~_El,~:?_~_?ri_cjQn~p.QLJ.lll.jn.crf'rueDt~1.:xiOJn de._Q,ensidady IeqQarici6n~s_,". '~~.. ~. iY<;J~. Pareee que 1 0 que intent. declI ej.que la poblaci6nse

,J \ I concentr6~ILeJ._::ru:icl~~..fu:.e-:1de esn I d i Q . : :Y , ~ . e 5 1 7 0 ~ n a s - - '....' ' ~S a Ja~ 2 .. ' -

"S i . . ' 1 embargo, cabe senalar que! para nuestro autor, al avanzar la implosion,

la zona ernpezo a sentir la presion sobre sus recursos naturales. Dice que un

estudio palino16gico preliminarha demostrado la posibilidad de que hay-a

ocurrido un periodo de masjyadeforestacicn.asociada a Ia implosion demo-

graf ica , que cu lm ino en la.;.faseL"'lJChitlan (4QQ:_700 dQ;que en to n c e s e l c li rn a

se hizo un poco mas calido;t3l:vez refleiado en el descenso de los n.iveles deagua en los lagos y pantanos dentro de la zona nuclear; que las diferencias bo-

tanicas entre las comunidades de plantas de la margen superior y las de las

laderas des aparecieron, al ser reemplazada la cubierta cerrada de oino v roble... ~ .I. I

por l J119" cubierta abierta de huizache, rnezquite y acacia. Segun este autor, este

proceso botanico obviarnente se relaciona con Laintensificacion sociocultural"

dentro de Lamisma 8.rea80

En ese contexte, \)7eigand propene que la implosion derriografica y 5 1 1 re:.

sultante transforrnacion eC010R:1Caecuirieron el desarrollo de una esrrategiaG J '

que perrnitiese aumentar la produccion de alirnenros: que la respuesta fue,

intensificar Laproducci6n agricola construyendo 1 0 que parece ser unsiste-

ma integrado de terrazas y chinampas. Esrasultimas, dice, son bastante gee-metricas, por 10que se sugiere que fueron planeadasy elaboradas con la

participacion del estado." .

En 0([0 orden de ideas, Weigand propane que la sal del valle de Atoyac-Sa-

vuia oarece haber sido o c r o recurso escaso cue se estaba explotando a una es-. 1 ~ ~ .

tala masiva. a juzgar por las grandes canudaces de pozos paLl la elaboracion

.de sal en las panes suoeriores de la clava de A to v ac . A fi rm a que.I, ... ] f

... el proyecto actualrnente desarrollado por Francisco Valdez y OtfOS.

finalmente ha encontrado la fecha de estas obras .. "Anora se sabe que la

epoca de mayor intensidad en la produccion de sal fue durante el perio-

do ClaSKO. Sin embargo, no hav complejos arquitectonicos para el Siasi-

co en el area, y los niveles de produccion de sal indican que no estabanproduciendo solamente para el consume local. El (mica sistema SDClO-pO-

II'79We ig a n o , "Laevolucion y cease de un Micka de civilizacicn..", PI~'194,.195 Y198.2OW ei g :U10 , "Laevclucion y cease de un nucleo de civil izacion .. .", p. 198.81 We ig a nd , "Laevolucion y ocaso de un nucleo de civilizacion .", p , 198,



E I h o r i z o n t e C l i i 5 i c o

1 88

~n._Qrganiz.adO ..Ga~~:cte-G0nsumu:-ungrande.LCaD1i~_d~. . . e ! ; ; u ~ U e _ C l D . o _ y . a l . J & _ c ' ~ s : _ T . e u c . b i n a p . .De hecho p a r e c e que la region de A t o -

yae se habia convertico en parte de 1a periferia inmediata, prll11erameme

despoblada ... Y despues reorientada a1 servicio de l a zona nuclear de

Teuchitlan.

Exponemos a contmuaci6n ~i~~~.:}_la de otros autores acerca de

la reconstrucci6n de ·~'eig-:l.Dd,aurique-p~1'te""deella ha sido ya expresada en

e S 1 :e te x to ." .P a r 10 que se r e f i e r e a la supuesta "expresi6n un i c a de arquiteemra monu-

mental" que propene Welgand para el Occidence, he aqui nuestra opini6n.

Como ya 10 sena~amos) 1a..arquitectura del occidence es m as modesta en suo

fabrica y en su produccion de espacid que aquella de Mesoamenca central.Pa r 10 tanto 5610 implicapeculiaridad Y no una conceptualizaci6n mas sorisc:-

cada de los espacios y eciicios que se construian La referida traza ortogonal

de: urbanisrno "y la arq'>cecrura de [vlesoarrH~rica ulterior, aU;lada a la de las

[rad:Clones .romar.a y re::2tcenClSIa, heredada de los europeos, siguen sier.do

vizenres £1u rbanisrno de orrzanizaci6n concenldca se ha vueito obsolete 'Cor~ v "

iJ.-:lprac~:coB3 -Por 1 0 que concierne a los grandes asentamientos que prop one Weigand

para el v'"al le de Ameca, pens amos que estes existian de rnanera relauva, dad:?,

s u aparente dlspersi6n. L a ex?eriencia nos dice que las concenc[1ciones..cie

tiestos en los asentamler:cos mayores del Occideme tienden a ser .nucho IT_f,s

modestas que en Mesoarr~ericzc central y del 5ur.84En 10 concernieme a los grandes sisrernas de irrig::lci6n que Weipnd con-

signa para el valle d e A J n e c a,K : ;i ri B 1 - 1 t z e r losiC'Ucs[iOnajde rnanera comunden-

teo Isce autor dice que el pomposo [i[Ulo .de ~~~a;ndde "Large Scale Hidraulic

\\Torks ill\,\TeSlcn Nlez.lCo" enma5cara el heche de que los e·emplo.5.C;121.y.e5eeste autor son dudcsos: c;,ue sus 800 hectareas de chi.nafllpas en 1a 12.gUIlZ.

_ .sZCabe senalar que la eCL5,emo~cgla actual oermite cancas interpret3.ciones de un proceso social ccrno

modelos se utilicen para reCOCS[fuir 5u-acomecer' Yconstruir lOSdaco·, pertinentes en su o a:gl

,rnel'.lZ,d6n. S i la

realidad preterila fuera univoca y can clara como quisieoemos, no habrianecesidad de arque610gos er; es,ernundo. Y en el case del Occide"ce, la polernica entre los de,'ensores de la e:ns1:enciadel Estado :"sus 01)05,e0-

res ha sido uno de los principales aliclentes del avaDcedel conoci...-nientosabre ouestrc obieto de esrudio For10canto, los ultenores cuestionalT>.1emOSo deben tcmarse come ataoues eersonaleS. sino como una contnoucicnmas a~desarrollo del conocimienr.o sabre ese accidence de Mesoime~\ca que [aD[O nos lnceesa. .

S o Y estes no deben con.funciirse con los radiaies, como el Paris decimon6nico de Haussman v Napoleon

1lI, disefiado as! para controlar a las chusmas a canonazos. '84CuaiqUler-arque61ogo que haya excavadc algun sitio habitaCional en lugares como los centres urbanos

ii" de Oaxaca, aun los de tiernpos tempranos, entiende 10que decimos. L a diferencia de cantidad de c.ies[Csporvolumen de excavaci6n es enorme. Desde nuestra perspectiva, los arque610gos que nunca han excavado

s.tlos de un lado y otro suelen carecer de parametros para unacomparaCl6n adecuada



R o d o l f o F e rn a n d e z y D ar i a D e r a g a • La z ona occ id en ta l en e f C /a sic o 1 8 9

de Magdalena forman una reticula absolutamenre rectangular, que con base ensu experiencia de observacion 5610 pudo haber side excavada con rnaquina-

ria rnoderna. Segun Butzer esta excavaci6n debio ser un sistema de drenaje

para una planta de tratarniento de aguas negras de la localidad. Sefiala que los

tiestos .de.asociacion clasica no prueban la existencia de chinarnpas, que el

sistema hidraulico Teuchitlan-Ahualu1co-Tala es poco mas que una graodiosa

construccion teatral Segun Butzer, los observadores coloniales no hablan de

pantanos en el area. Dice, sin embargo, que hay trazas-de pequenas chinarnpas

de forma irregular y cortes de perfiles de canal que sugieren. bloques de chi-

nampas en tierras mas alms. En surna, en la concepci6n de Butzer, si de algo

sirve el articulo de W-eigand es para animar a los arqueologos a emprender

un programa geoarqueo16gico en que se estudien las chinampas y otras for-mas de aorovechamiento de tierras pantanosas de una rnanera mas resconsa-

" . !

ble: que se necesita una investigacion mucho mas lntens iva , si se quieten

fundamenrar arg~lmenros de alta densidad de poblaci6n e inferir acerca de 1 a

organizacion del trabajo."Por 10 que se ref.ere al s i s ~#1 ~ . c ~~_e~(h~rlr'1 i _ d s . ? _ . ~ X : ~ que reconstruve

Weigand oara el area de interes, hernos va suzerido cue los indicadores de 3 1 . . :L- _l. ,I"_"l,

aparente existencia ~9n.J1,.4_Q~-b~~,£Q.mQ jD.),.a.~.g.'J.m..~iQ.;;i,_CJl.~,.~£~~,,~l).;~~,~r-

£,a_c t~1~~.c .11inami<)as , CreE':210Sque n o e s prudence e:trwo!:a.r.JELPJs;,5J;;nc 1·.:;,£,c

. i l l . ~ e : a f T . ! i c : : } . _ g ~er:meDJ.:26-ic.D.I lQgr ;1 . f is : :os,,\ler e c ue r2 g~ ~ , p a ra proponer la

existencia y uso d e sistemas de escnrurs en una sociedad. Sabernos que 51

_ :5

ve c i n o s de M eso am ~ ric a c en tr a l y del sur contaban con sistemas de computey de registro de acontecimientos desde circa el Preclasico medic, peroIos occi-

dentales no parecen haberlos asimilado de rnanera clara. Dichos recursos, de

haber side usuales, se habrian rnanifestado en el Occidence de rnuchas mane-

ras en la iconografia pertinente.En 10 tocante a la cuenca de Sayula y la idea de '~veigand de que 10 que

llama la region de Atoyac, dados sus altos niveles de produccion de sal, se

habra incorporado a la periferia inmediata de la zona nuclear de Teuchitlan

{"n e l C la s t co ,bj}i:]5.CQ.~\.'aldt;z., __ a,1he.rffie..Liot"..RQ~Wst:a....y...Jea£~.,J!.i@fre

; ; + . f : m p . . h . o u x : } : l i c e r. . lo_5i~~iier:le.~=ei ,g.?J:l(~LsXgyms.Dl. ;J, .Ql le:..uu~~~\j.d~ [ ~ L ~ ~

..~. 1~.cla_tc :n~~L9. , .~,S.~?1? ; 'L .~g:dCl :e..1J..[l2,_y'..Q(r'l.JJlar.ke..r:.~a(~\.n-? ..u..I~lJ~Itl2n . ' ; £.~~ tIsh~c;.Q,.D.ccide.n,Ial. t.(:;IJj=llos.no....en.c:.1...lenu:aD...e:iJ.Q.e.~(i;-1l.g? erl-t.t:&;:,la~ Q.QS

~~ 'lr~gim~s. Mas bien sugieren 1 :1 ~ ~~ d~_\ll'~~..k~La.l~~~u~~-~lal1.?j l \ l .9.:gA.~I].J:.l~pgI\_;jQn.,~llLdeLqi5_tt.i~QJaCJ,:lli.~ik~~Q~ Para e l i a s

8;Butzer, "Irrigation, Raised Fields and State Management. .", pp. 202-203.

......A-. .. _. _



E l h o r i z o n t e (las leo .

190

~~~. ausencia de ~rifll~~~~~~P ~s;d..~Qf.~J:~~se exore-~ dis tiut.o .S .,.p .w .to s. .tJ o hay eJl.til~den~ ....§i~lsa!l~-~T1, ni traza de influencia ideologica de los materiales culturales

de Teuchitlan en las disnntas fases de su historia." Todo esto rebate la recon.>·

miccion de Weigand en el senudo de la existencia de una periferia en torno

al propue5W estado nuclear de la z o n a de Teuchicl8.n.E1mas solido soporte de Weigand en 1a discusion sobre la complejidad de

las entidades politicas del Occidente, precede de Beekman y 1 0 documemamos

con cierto detalle por ser la primera vez en que se emplea esta veruente teori-

ca en el area." A partir de las propuest8.s de un grupo de dentificos que estu-

dian las relaClones entre la esw.ucrura delas fromeras y.aquellas de las enudades

politicas que lirnitan, .-t:_steautor 9rnflone 1a ~tPocia del estaq_g_en el Occ;;.-

(

.Q .,e jlle . M as a un , sugiere la presencia a1".1de un par de tipo s de Estado en una

t a xono rn i a que en su a rticulo prooone. basada en la aoliC9.ci6n de un modele

~ que elabora a oartir de modelos ~e o~os eSl:eciais(a~ En ese contexte, rea-

) l' :.- 1- 11 1 I 1 r ..L.. d 1 l' d ~ :. 1 ....

120 un es tucno ae a estrucrura ce ra rrontera or.ernai e, vale ·e leuC[mla.n, coni' ~.. f· l' t •• , 1'..1

f el propoSliC oe inrenr score ia namr,u::z3. at SU org,UllZ2lClOn pO.l~~

\_., En 5 1 . . 1 t raba jo de campo. Be e k . r: 1 a n a p a ; :' :n t :eme n r . e localize un c ie r to mime-

ro de elemencosdefensivoS fOfmanac una frontera bien est::-ucr.urada, 1001 i -

zada en el corredor .de la Venta, que coneeta los valles de A~ema ja c :: T el ..,c h ic l· .? E .

Y azreza cue OL r3.Sfortificacionee l·Jca~izac.as en to rno a l va l l e de TeL ~ cf:.i:lf,f.'.,eL- w ~

s ugie re n fue rte m e nte que un a red de PU eS LOSde d efe n sa 1 :1 3 .0 1 3 .i< ..~ 0esrabieci-

da p a ra vigi la r los a c c e s o s al a re a de Teuchitlan Con base en elio, sigL'.ier:.colase labo ra cio ne s te or ic a s de SouthallS8 y Lu r rwak , " _£I .QP.PDP n n a .fo r o2 - u ni t:;u "; .2 i.e .:

36In este contexto, los materiales de Sayula estan tn r lu ido s par 0 relacionac..os a di£e:-ences regiones en

sus ~i3cin[8.S fas~sarql.:eol6~C:l:5. E n ~l Predisico. Colima aparenco. habe~ sido el centro ~e lII:.i.CC16~ Er. 7 : Ca·5 1C On ay un g iro n ac ia la r e gio n e el va ue de Arernajac. Q ue que c a a l c o r te c e l a eccc2- c e ~ a ~ "1 J 1aE n e . POSClZLSlCO,130ig a cultural cambia de n ue vo p am [roe r .acia las regicnes de Autlan y Arrneria de ] a.l is c o : ; C o l im a . Por estetiernoo se han notado rambien alzunss lnflu~r,cias de l n c o l e 'Zenerai del centro de :vlexico. oero eS ; : :E '~ l ' a . lme , , ·le senota la lnfiuer;cia de ma[erial~s de LaMix[e·:a ?uebla. Valdez. Let, AcoS,:1 y Ernphcux, "T;~eSayula .2:asiJl.'

pp. 171 '! 172.87B e e k .T ,a n , " P o li tic a l B o un da r ie s . ,38Bee i c . ' !1 an r .ace una d i s c i n c 1 6n encre enudaces polir .. lcas organiZaCas en torno a 130nfluencia p e r s o n a : de

un gcbernanre v orras t e r r i c o r i a L r n e n t e defi.clidas. cuva a u c o nd a d vace en una red admlflls.3.(iva mas fO(":!la1 e

impersonal. En ese contexte siguiendo a Southa.l, B ee kin dn e sz a ble ce u na diferencia e n t r e e$c2.COS s e g r n e n t a -rios y estados unitarios. El modele de Esrado s e gme n r a r i o 10 considera apropiado par3. "Laestrcctura pd i c i c 3 . delmundo maya clasico. En el, los gobe~:-'J.mes parecen h a b e r ejercidc una autoridad hegem6mo [!p'camence

ceremonial y simbolica, sobre senores subsidiarios de otrcs sitios. Este tipo de Esrado podria in'/oluc:-ar relacio-

nes tr.butar.as extractivas Uotras forrnas de dominio. Pero 1aabsorcion oolitica c abscrcicn econornica es ra-

r a rnenc e evidence en estas circunslalicia5. Estes estados pueden lograr mayor control de 105 asuntos locales canel tiernpo y desarrQilar una estructura estatal bu r o c r a c i c a y mas unitaria ( B e e km a n , "Political B o u .n d ar ie s .. . " ,

1-'·~'".p.• J)).89luego siguiendo a LUIT'""dak, quien hace una distmcion entre 1:15est rategias h e g em6n i c a s y las territoria-

les -que son las del Estado unitario-, senaia que la aucoodad hegern6nica depende de la percepci6n de poder



R o d o lf o F e rn a n d e z y D a r i a D e r a g a • L a z on a o c c id e n t; : ; . ! e n e l C / a s i c o 191

I

'.

adminiS1raci6n territar.i.aLpara 10 que pC2.driamos.1l2..trl"r region O l l . c l e a . f , - E f 1 : ± € - - a

-g£~DQ~,~<t~~g9...s~~d\;L~1al1s:,..Q.~ Para la periferia propone solamente

una forma hegem6nica de control a la manera de 1 0 que llama estado segmen-tario.'?

C on ese te n or, B ee km a n sef iala ~ e m ie n ~ ra s m!e las ent i<: l :a_de ;3po I i ti .c a ~

, (s e gm e n ~ r ia ~ ¥ heg.em~ca?_. rie~~ fr ?U l e ;a S jn d i? ~ jn ta s , las ent iq&. .d~s=uut tf l . : :_.

~ ~ la s y teIT1 !smales< ; ~z . a n l a . . d c l lQ lC10n , IDI.~~.90n y control d e s \ l.s .,fr _ o n te -

( '~~~. Aunque senalan que s610 en los cases de extrema centralizacion, como

.' oeurri6 en e l im p e rio romano, 1 0 p ue de n lo gra r de m an e ra c o rn p le ta . Pa r o t r a

parte, siguiendo a los ya citados autores, B e e km a n encuenrra que e n las for-

mas de dornmio indirecto. las relaciones ent re las entidades primarias v secun-• j_ ..

\ darias tienden a ser negociadas de rnanera individual en un tipode relacion de

, patron-cliente. For 10 t an to , ,.Q.WPQneque_wLQl ; i i . do . . ~emr&UJ;~n .Q i J1S ;g£w. .QI1 . f t . .Q

I . ' " rPQ~.g~,,§!~_(caraGtsF"zaB8-€0mQ..uw..s. .e r j . e_.de_e1l , t iQ&-~§.£.£Ii l l s~~IlgI~~.2-LJ .f1.C ; ; -

4 UbQJ...de~a..m<l.¥Qf,el1.r=Q,Q~J~~..,~oI'\ e J . . . Q . tg ~ : j Q l,!.uiI~lQ..Q,J,-;.m~QJi~.L~i.l:c;;;..rns:u~"~OGe . S J_~dQ . ~~ ' u r . lC i ~ l , 91 . . _

A p a r ti r de e s ta c o ns r ruc c io n te o ric a , B.eekman ! ra ta 2 f; ...:a rg JJ .,,~ ~ 1 2 .e xi0 -

j_~n~:jac!~Q: l j )o§JLDos_si e E ~Q e1l . . .~lOccidente de Mesoarr:e~ J~.f~I;~.9. ' !: l_~.:

~~sk....er:; ,u:o~.p.e.:r; iferia:.L1LJl igr~Qj~.J .e r r l . I .Qr ia. t~~,}2~nre a que cornprende 2 .1

} : J . l l r ; ; ~st2:,~: ; .~\:_' i~!.~",~LllClm?:. ,Qg".Ie.uc.hirlin, y una s ' i t : : ' l a c T 6 r 7 ' d e " t s ~ a d o 'heg~~'rnonico ejercido por dicho valle score una arnplia periferiz en derredor.s- Pero

su problema no yace tanto en el aparato teorico basta aqui ernpleado, comq

en el heche de no haber cuestionado la reconstruccion que -';(;eigandhace dela organizacion social del Occidente de entonces,

As!, B eekm an re to rn a la op in i on de\;::-eigand de que h C,11 l . t l 11" 2_ de 'Teuchl-

. t l a n h'£"~~12Qf,Sld,,_~~m9!il_~.([-{!Jit~t;)JnL£;~~~tl,£2.r~~~QQfLc!g__,c:orr1.Q"g,1,Jg!;b_b1K!Jl.1QU~S.A~f1,1g~C.QUc_i,b.,~Qm.Q.,ll~t~Q,~;:~"Q,~J.:;J, , . ,qJ~.QJ;:a~ci~J41_~~

. l ! . b " l . l b ; a , s , . . _ d e , . . t i . f B .Asume , a p a r t i r del m i s r n o a u t o r , 1a existencia de u n area de 240

km2de a se nta m ie nto c on tin uo co n varies recintos civicos cerernoniales situa-

dos e n to rn o a la c ie n ega de la V ega , a s i como c am p o s de chinarnpas, que

~.

para rnantener a otros centres como subsidiaries al principal, pero que el cerxro prirnario no esu involucra-do en la admuustracion de los centres subsidiaries. Desoues propane que ca l autoridad puede manifestarse

c e o varras maneras par 1a i nve s t idu ra ceremonial d e los senores locales gracias al poder hegemonico. y parla emulacion de la arquitecrura de los centres primanos en los secundarios. En cambia senala que los esta-des territoriales enfatizan la estraregia m a s ccstosa de la anexion, administracion e incorporacion directa delos nuevos dominios (Beekman, "Political Boundaries ... ", p. 136)

90Beekman, "Political Boundaries .. " p. 13591Beekman, "Political Boundaries ... ", p. 135.92Beekman, "Poliuca! Boundaries .", p. 144.



E I h o r iz o n te C l a s ic o

192

constiLUlan uri sistema eentrallocalizado en el valle de Teuchitlan durante elClasicc. Tambien asume, siguiendo a Weigand, que este ambito central 0

nuclear alcanz6 una poblaci6n estimada de manera eonservadora entre S D . . + -

6 0 mil ha~tes93Sin embargo, Beekman admire que casi no hay datos de excavaci6n "le-

gal", exceprua...T}dolas de Ramosy L6pez en Hurtzilapa; no obstante, senala que

los estudios de superficie y excavaciones en los sines de la zona central han

encontrado a los Q:uachimonwnes frecuememente asociados con ralleres de• ' c . , . : . , - '

obsidiana y sugieren cierto involucramienw en la disu±buci6n de estes mate-riales. Y propone que su cssi mon6cona repetici6n en otros suios es 1 0 que

suziere la redundancia funcional atribuida aDS estados se:2memarios 94 Beek-~ .

man tarnbien asurne la idea de Weigand de que ocurri6 una suerte de implo-si6n demogrifica h a c ia e l periodo Teuchiu :?"n 1.

Comohemos af9umentado, estas conceociones acunadas por Weigand pre-1 . ...,__,. -

sentan series problemas de i__tJ.te~?retaci6n Adernas, Beekrnan esrudia 10 que

concibe como .la frontera de una entidad oolitica m'e concibe como un Esta-, -~

do unitario, pew se olvida que.;;:~~<; 1 2 . y~~<;;:M,b,g,~~~ld.Q lu-

gar .~__g],.nS1tu..e;;1..DJl;,~,.Q1.lc~.tk,.Q.,.Q;JJ""~_~~;;"?t~~.ktY,~_~LPJj,fl,~c;,.de.,,\J.,U,,,.\\;~\;.~.F! valle de Ame c a r oo ~ " '' ' ' ' ' ' '- O\ ",'1 11h1T,0 -,=. ...ritorio i l l , a's a rnenos plano or el.. _" • _~~~ ,-"" '-_ h ..v,-"l_. '-_ c._L"~_> L.__ ll,._ _" _L,-,i ~ ~"'.- ,-_1 "

r e co r r ido entre lo s va lle s in.terr:::oncanos de l c en tro de NLexicD y L a vertiente

del Pacifico nOILe del cais Ir ..!T:.( ;diac?I:leme al no r t e del cocrec.or de la Venta.

11 " , / \, • t If' ;

se eneuentra a barranca del no SfilClago 0 Gr a r _ o e ; que marca ia : ronrera G e l

facil trans ito entre los referidos ;i:hbims ::erricoriales. Los siguiences pasos fa -des de la sierra Madre occide::l3.1 ~;$_encue:C[rafl en Nuevo Mexico. Ademas,

en un contexte como este no se neceslca todo un ambiw de orga.rizaei6n eSi:a-

tal para poseer Y operar puerws fortificados y controlar de rnanera eficiente la

circulaci6n de bienes v gn l oOS human os o a r un luzar Eiernplo de ello ocurrio"L- .. ..L v)..l.

con los ruaregs de las man; : : eEeS surenas de: desierto del Sahara. Que sin haber

"ienido jarnas un esrado, c ;~1c r: : :k l fon las L.llportantes rutas que pas~ban POf sus

dominies des de tiernpos inmemoriales, casi hasta el presenceNo nos toea abordar el posclasico, pero creemos per t i nence hacer el si-

guiente comentario, que se desprende de un ensayo historico sobre la zona

de ~,J%?;9) y 2C\_~~.R'::'::~~K.~JZ4~~,Els~d9.~et*s-

~;,iesbozaJ'llos elpanorama de los procesossocialesdel'ticcldeJi(e a l93 Beekrnan,"Politic:al Bound.aries ... " o, 13694 Beekman, "Political Boundaries. c" ' , p . 136.95Fernandez , "Ambnc regionaL ,11



J

R o d o lf o F e rn a n d ez y D a r i a O e r a g a • L a z o n a o c c id e n ta l e n 1 3 1 C i a s i c o 193

fin del periodo de los senorios complejos, en el extreme superior del rango

de variacion tipologica encontramos 10 siguien te . AlgllD8" de 1 ; ; 15are.~omQ__.

el Valle_d~.~r\m~'~~LE!Q.~?t.~~.::'-.r:!-lejose cQU_u:....rt.ir.s.~s. Parece que 561 0 .

les fa l taba una c oyun r u r a favorable. En el otro extreme se encuentra el caso

que reconstruimos de Mountjoy, sobre el area de Tomatlan, donde podriamos

propener que habra senorios bastante mas rnodestos, en razon de la igual-

mente drscreta huella que dejaron en el espacio que ocuparon.

De ser valida .nuestra reflexion, hacia el fin delPosclasico encontrarnos el

siguiente espectro en el centro-occideme de Mesoamerica, en funcion del gra-

do de complejidad social de los grupos que 1 0 habitaban ..Los mas cercanos

al Altiplano centrEl . . lo.s t : : 1 rascos ,_ .k .U. .d . t ranSQl rso dplsiglo.xvhabiao-mnsQ.U,, _

_dado un Estado,96 y por 10 tanto toman el extreme superior del rang a de va-

riac;6n:Co~lil estarus sernejante al del Estado azteca ..Bacia la parte media

del rango tenernos a los pueblos que estarian en la provincia de Avalos, do-

minados en el arnb.ro rezio n a l co r el s eno r i o de Sa ·yTUl a .9 7 que se debieron~ J __

, '1 1 " ', ,,' J I A l'sumar a algunos mas ce 'os valles oe Ameca y " ' o Aternajac en d 1 1 S S O ; _ Y _ ut 2 1 J . J .

e n C o l im a , del area de Tu xp an y Zap od a n , C0[;10 de Nayar i t , conligera v a n a -

bilidad mterna. En el extreme i nfer io r de 12.gradiente, situarnos a los pueblos

localizados al nor te del rio Lerma. que se habian cuedado 2.hLno obstante el" _., 1. ,

aoaren:e corrirniento hacia el 5U:- dela frontera agricola, causado por el rese-

carniento paulatino del c l im a a cart.r del o r in c io io de l segundo r n ile n io (ve a-_", .1 J: _ . I . .. . . . . .

se figura 6). Ism 10 reconstruve Pedro Arrnillas," quien sugiere dos tipos de

e nfre nta rn ie n ro a la p ro ble rn an ca dF 'i r ie _dc e n so de !a preQQ.i1;L\;i61U2l11Jli~1UL

{ ; ! ! imer . o fu . e . T T I . .IgcaI" .hi i~ iE!_~L~~£ '_~_?l ! l . sJ .21LIn~xi~~a 'y~~_g_e;_?er~ l J£§. . chic;bjm~

. 't \ .. ~gsd ~ X Q _ L Q . c l , y . . eLs .eg1_t r :d .Q. , - .~~(~ ·? I~Ia!_~~.g j~} l ' d s c ' § l_ !~ . tC2d§ .£ iQu . .LSQQX~JJ j . r g ;_ (~ IL_

!' 1~~"~ r : . t . lQ2. i l lS .gg~h .R? ' J : f?~u?L;Jas~c_areI}Q,@,~ , ,~e~ . 2 .Lg . S_~ l i l l LQ~ d s : _ J § l , C . ' ! I J ~ , O O . a c Lj ,,!~ \gg;L\:Dl~·

Si intentasernos esbozar un perfil oosclasico de los procesos sociales me-" " -

.' .' soamericanos, tendriarnos 1 0 siguienre. En piOccidente, no obstante que en

varias de sus areas ~'d~g?:Q..@.;_~~~c.i9~LamJ2iE.QJ£l.~ls?,~u~~,~arils-para..ak4ar

. § -< ; !f .L 2 i ~ 9 5 : . ? . ,S , Q J 2 .1 . p lg : jas, hLbo~q.lJ~~..s.P.e.rJ,Li i l~q~-Q.G:urri .e.r:aJa.Jiens.jd;.1>d...demo-

_ g r a . i 1 c a a d e c ua d a p ::l .r a q~ e 1 9 §~ g r up .Q ~ _ ; e .q 1 .,l ir ie .s e nn a YO:t:~~}?:~Y~l~ ,§ ," ,d&~OIga11 i :

- z a c i q ' i i . " r s I 6 s " ' 1 : : r i p o n e n 8 : (esoacio mas altos ritmcs de transforrnac)QD~v ti~nden

4 '<U r ." " " ~ ,,,- ... _ . ~ _ .. ~ ~ ,_~ _., ....j ,"_~"_••" ~.,.._.~,-,,,,-....... .....,-,-......___,..~.....,_,__" ,. . . _. ~~ .. _ .~ .> ~ .~ ,_ _ . . .. .. .. ,. __ _ __ ~. .. .. .. .. ." .~ .

9 6 Gonzalez, Pueblo en uilo, p, 45.

97Hay fuertes indicios de que, durante e! POScl2.5ko tardio, antes de !a invasion tarasca, haya habido crer ta

,.unidad politica bajo el dorninio de Savula. Ctr. Altala, La relacicn deMicboacan. p. 212; Gonzalez, Pueblo en

'. uilo, p 4 5; K e ll y, "A Surface Survey of. .. " , Munguia, La Provincia de Avalos, p 16.. 98 Ar rm i l a s , La aventuraintelec;tual de Pedro Armillas.

' 1 1 1 1

I :!Ii

: , . iI

;.·11 1 , 1 ''Iii.

; 11 ' ,



E I h o ri z o n te C l a s i c o

1 94

....J

II·

Golfo

de

iI-

II

\

I

Pt~ebicsd e Sa' lUi2 Oceano

Pacifico

Fig'~ra6. El.Occ:c.ence y sus vecmos por el oriente, en los albores

del sig'o ;('11.

a ejercer sobre el mayor capacidad ejecutiva de la exc1usividad de las.areas de

aprovisionarr::..Lenco.. 1 organizaci6n de los asemarnientos y de los arnbiros es-

trategicos -corno mercados y rutas-. Asi, y esto eS una conjerura final, es

\

comprensible que en M:choacan no haya sido sino hasta el siglo Y:'v que se

fo~6 un Esr.ad_?,e0-n [ermorio que ya tiempo atr~s era apto par~ dar Iugar

~Ita orgaruzaocn ce sus gmpos en procesos estatales. Antes, segun nuestra

conjetura, no se habian dado las condiciones demQg.raficas para que se cons-tiruyesen arnbitos de relaeion;s sociale; de complejidad suficiente para la

I' .consrroccicn del Esrado Este exisre en la medida en que es necesario, y par

ella debe tener en que fmcarse. Con esta misma logica, creernoS que hacia el

c o J iC "10('(:''':''

\

J( .-n c'1 '( c ( \ (C~--J '

. . . . .'__ 4!. r.r \n.(_"\O!'"lC)

I-I

Ic,



R o d o lf o F e r n a n d e z y D a r i a O e ra g a • L a z o n a o c c i d e n ta l e n e l C i a si c o 195

' "I b n del pe~odo de ~ossenorfos cO~Rleios no exi~t~an en el Occidente, inc1~t ..)-:;._yendo al valle de Arneca, las condICIones demograf1Cas adecuadasj2ara pe rn u , ,~

tir la consolidaci6n de enbdades ollticas de esa natu , ... .' : r : .

Algo mas que iustra nuestra conjetura es la observacion del avance del

poblamiento colonial, no tame de las extensioneslineales hacia los centres

rnineros, sino en torno a la metropoli, en primera instancia, ya las capitales

provinciales mas importantes, en segunda. Si esquernatizamos la situacion,

podemos decir que la densidad de poblaci6n, el valor de la tierra y la cantidad

de riqueza per capita de los hombres ricos, irradiaban de 1arnetropoli hacia

fuera, con excepci6n de los centros mineros y en menor medida quiza, de los

cornerciales y administrativos. ..

Esta perspectiva podria trasladarse a la epoca prel;jsp{§:nica, y se puede

proponer una irradiacion de densidad dernografica, ..que se combinaba con

otros factores de indole espacial, social y clima.~i(aJfparaavanzar desde el Alti-

F 1 2 . n : _ ) central hacia la periferia septentrionaly occidental, en el Clasico. Pero

aun entonces el Occideme se antoja poco poblado.

r Mis!~ ,-:1.e,._c.o,U):;1f:.9[Th.T..ienLoacia el sur de la Frontera ag~, se gcdria

\ .2E2J~,::I_:n.e:n c r .~S . i lT~ ' ;Qfo_g_~mQgr~£~r mig£~.~.Lc?p...).._~nJ;~LZ_Qn~_~~_q_1Jeci2--

~ ~Jl_l]_lf~i~~e·-1~j~9yet~2.~19~.ID..Q.J1JJ):l. "~; . .# t~1, iP i t .aCi6IJ_~1,q.ue,.tendla.~ga-~ l~),n [i+ q,rc:Q~~?:~-~1.~mas.o.m~;;1QsJt:;g)cl[?Les,_aJ.as,.p.oblaciOIl~S.~podria...e:xplicar

I~Q~~~X~~:':~~J"lJ},·_t~B.Q.52..Ja explosion demografica adicio-

\ j rial que conlleva lacforrnacion del Estado podria explicar la ampliaci6n del .area de irrluencia direct a y de aprovisionamientc de insumos de los tarascos,

que ya no era un conjunto de senonos, sino algo ma s . en ';s·~dG~~menca de lO~J l 2 I i 2 . s . _~qY~J l g1Q l p ; ! iLP-fQRi . ; l "S; ,X1taQ.Qla.~_.

~ca..su.~i.6n. l~...b_a~~e.l~qlt~.tir..~deJI).as,,.tecu!SQ.s.~~r~~~~§.J}~s:;esi". , bla '.

_·.Q.:,),C1sL~~S;J..,PD,~C:J.Dn.

He aqui la explicacion que nosotros proponemos para el avance tarasco

hacia el oeste, ya que hacia el este yacia el Estado azteca que no era suscepti-

ble de presion. Rumbo al nOILeestaba la frontera agricola y bacia el sur, sierras

y sierras que tambien eran tarascas. Bacia el poniente. los dominios de Sayu-

la quedaban inmediatos y , adernas, tenian sal, que era muy predada. Basta.

aqui nuestra sintesis de los procesos sociales del Occidente prehispanico.

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La Zona Occidental en el Clásico