Upload
mauriciorzcr
View
243
Download
0
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Historia, datos y análisis sobre el Museo de Arte Costarricense
Citation preview
Universidad de Costa RicaCiudad Universitaria Rodrigo Facio
Escuela de Estudios Generales
Seminario de Realidad Nacional II
SR 0033
Patrimonio Cultural
Arq. Laura Chaverri Flores
Trabajo Final
Museo de Arte Costarricense
Elaborado:
Jeffrey Morales A74376
Mauricio Rojas A72968
Introducción:
Un patrimonio nacional guarda un importante significado histórico y emocional representativo de la sociedad costarricense de la época. Detalles de un estilo de vida pasado que ha conformado las bases para la identidad de los habitantes de ese país.
Decenas de patrimonios que pretenden preservar los orígenes de tales identidades. Aunque lastimosamente, las nuevas generaciones tienden a globalizarse e ignorar las bases autóctonas de la identidad costarricense.
El patrimonio histórico-arquitectónico refleja una edificación o construcción que en sus adentros y en cada uno de sus detalles han de exhibir rasgos históricos y sociales de Costa Rica.
El Museo de Arte Costarricense, ubicado en la entrada de San José ha de ser visto por cientos de personas todos los días. Sin embargo, igualmente parece ser ignorado y desconocido en cuanto a su funcionalidad y representatividad.
En este trabajo queremos encontrar y en lo posible rescatar la importancia que tiene este espacio ubicado a un costado del Parque Metropolitano La Sabana.
Esta antigua edificación que en sus exteriores refleja elegancia y magnificencia, aunque la población asuma tal como adorno decorativo. Profundizar la historia y relevancia de este patrimonio, nos permitirá apreciar la edificación como tal e interesarnos en la importancia de los demás patrimonios nacionales.
Resumen del proyecto:
El Museo de Arte Costarricense está localizado bajo el antiguo edificio del primer Aeropuerto Internacional de Costa Rica. Una rica edificación de los años cuarentas que guarda gran cantidad de acontecimientos históricos entre sus paredes.
En este reducido espacio, el gran Museo de Arte Costarricense exhibe miles de obras que se le han adjudicado por ley, diversas donaciones o adquisiciones propias.
El MAC cuenta acá con 15 salas que alcanzan a exhibir un aproximado de 125 obras, que representan menos del 10% del total, por lo que periódicamente va cambiando su exhibición incluyendo también obras ajenas al museo para completar alguna temática propuesta en la nueva exhibición.
El MAC se encarga de promover fuertemente el arte, así que aparte de su escogida y rotativa exhibición en el edificio actual, ha establecido varias sedes con distintos fines artísticos; así también promueve el arte educativo en distintas sedes como Guanacaste y Alajuela. Y en el edificio central ofrece con gran promoción talleres de verano.
Su colección actual de más de 6400 obras nacionales, refleja la importancia de esta entidad en cuanto la restauración, conservación y exhibición del arte nacional.
Ubicado en el Parque La Sabana, cuenta con una localización de gran visibilidad para los transeúntes. Otorga una gran belleza escénica, pues este antiguo edificio contrasta con la tranquila naturaleza que lo rodea.
En sus salas de exhibición, se respira aire boscoso, y una tranquilidad impresionante, a pesar de su cercanía con la ciudad capitalina. Un ambiente perfecto para recorrer la galería y descubrir el significado de las obras que allí se encuentran.
Tema General:
Patrimonio Histórico Arquitectónico:
Museo de Arte Costarricense
Objetivo General:
Descubrir la relevancia de este espacio museológico
Objetivos Específicos:
Investigar la historia correspondiente
La transformación a lo largo de los años
La consolidación como museo
Problemas y limitaciones actuales
Proyectos a futuro
Funcionamiento del museo
Historia:
El edificio que alberga el Museo de Arte Costarricense fue la terminal del primer Aeropuerto Internacional de Costa Rica, inaugurado en 1940.
El ingeniero encargado del diseño del aeropuerto José María Barrantes. La nivelación y drenaje del terreno, así como la pista de aterrizaje, tomando en cuenta que debía soportar el peso de los aviones, fue un proyecto de Max Efinger.
La construcción se encargó al ingeniero Luis Paulino Jiménez Montealegre. El edificio del aeropuerto fue construido en concreto armado de estilo neocolonial.
El diseño de Barrantes fue una fusión de un estilo colonial español con una nueva concepción arquitectónica modernista de gran pureza de líneas, con dinámicas curvaturas en los muros.
En esos años, el transporte aéreo estaba en sus inicios, pero tal comodidad y seguridad de tales servicios eran una conveniencia para la clase alta que preferiría este transporte.
El país en vías de ir a la vanguardia decide construir el primer aeropuerto internacional, bajo los lineamientos del gobierno de León Cortes Castro (1936-1940) otorgando mayor importancia a las obras públicas.
El arquitecto José María Barrantes (1890-1966) ya trabajaba en otros proyectos estatales en ese momento. Por lo que León Cortes le encargo el diseño del edificio aeroportuario que se asemeja a uno que el gobernante vio en Guatemala.
El aeropuerto fue inaugurado el 7 de abril de 1940, bajo la misma administración de León Cortés Castro, y fue terminal internacional hasta 1955. El costo aproximado del aeropuerto, incluyendo la ancha faja de cemento que lo circunda, se ha fijado hasta la fecha en ¢ 1.741.577.
Tal cifra corresponde en fuertes números a los trabajos de nivelación y drenaje del terreno, así como la carretera de circunvalación de “La Sabana”; la menor parte fue invertida en la construcción del edificio, un aproximado de ¢ 300.000 a ¢ 350.000.
Este lugar funcionó como terminal hasta 1955, pero fue en 1971 que se paralizaron hasta los vuelos locales. Y tras algunos momentos de incertidumbre y traspaso de oficinas y entidades por este edificio. Se logró idear consolidar este rico espacio histórico, como la anhelada galería de arte costarricense, tan solicitada desde 1888.
En la administración de Daniel Oduber Quirós (1974-1978), y por empeño del entonces Ministro de Cultura, Guido Sáenz González, se creó el Museo de Arte Costarricense el 7 de octubre de 1977, mediante la Ley # 6091, quedando adscrito al Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes.
Los trabajos de remodelación para convertir este edificio en Museo se iniciaron en noviembre de 1977 y concluyeron en abril de 1978. Estuvieron a cargo de los arquitectos Jorge Bertheau y Edgar Brenes. Inaugurando el Museo el 3 de mayo de 1978.
El edificio donde radica actualmente el Museo de Arte Costarricense fue declarado en 1986 patrimonio histórico-arquitectónico.
Características de diseño y estilo:
El edificio en el cual se ubica el Museo de Arte Costarricense mantiene las proporciones del original aeropuerto, mas algunas ampliaciones que se han dado con el paso del tiempo.
Actualmente el MAC se encuentra en una zona particularmente privilegiada, dado que su ubicación en la entrada a la cuidad de San José le facilita variados recursos otorgados por la municipalidad.
Teléfonos públicos, paradas de buses, puente peatonal, basureros, buenas calles y demás beneficios que disfruta por su ubicación en el corazón de la capital. Al mismo tiempo en un ambiente tranquilo, fresco y silencioso como lo es el parque La Sabana.
En sus alrededores predomina un desarrollo comercial y de servicios, también la presencia de fuertes instituciones nacionales como el ICE, la municipalidad de San José, ARESEP.
Igualmente se encuentran museos cercanos como el Museo del ICE, Museo La Salle y el Museo de la Comunidad Judía de Costa Rica. Podría considerarse un espacio con gran variedad de funciones, casi integral, o tal vez muy saturado.
Indiscutiblemente de la percepción de tal espacio, es innegable la alta cantidad de transito a la que se ve expuesto el MAC. Vehículos, escolares y demás peatones, que por alguna razón visitan el centro de San José y necesariamente deben pasar cerca de esta edificación imponente.
Otras perspectivas predicen que la exuberante vegetación que rodea el museo opaca su magnanimidad. Además de un abrupto desnivel de tres metros, se supone la otra negativa probabilidad, que este museo sea ignorado y pasado de largo, aún en contraste con el alto tráfico de la zona.
El diseño del aeropuerto del Arq. Barrantes guarda una similitud proporcional entre las distintas partes del edificio en relación con la extensión horizontal y vertical. Añadiendo dos torres secundarias.
Se expone una amplia ventanería y espacios abiertos como terrazas y corredores. La prolongación lineal de las grandes salas y las torres se complementan con las curvaturas en los muros que expresan el aire de modernismo y la sensación de movilidad y dinamismo.
Las recientes modificaciones a este patrimonio guardan en gran medida posible la armonía con el diseño original. Se han añadido varias salas al aeropuerto, además de dos grandes proyectos como son la plaza enfrente del museo, y el más reciente, jardín de esculturas construido en la parte posterior del museo; antigua entrada del aeropuerto.
“El estilo que define esta arquitectura, no es realmente el replanteamiento de la tipología colonial, sino que imita lo “mexicano” y lo “peruano” para definirse como un “neocolonial hispanoamericano”, que se caracteriza por una compleja volumetría, torres como núcleos de circulación o accesos, uso del color blanco, molduras de línea barroca, almohadillo en las esquinas, y el uso de la madera en columnas, soleras, ménsulas y aleros”1
La distribución de la planta baja originalmente fue estudiada para que el viajero que ingresaba al país pudiera ser clasificado al entrar al edificio, obligándolo a seguir un determinado trayecto para presentarse con los empleados de Aduana, de Inmigración y de Paquetes Postales.
La planta principal del aeropuerto contenía un hall para pasajeros, una sala de espera, un salón para la Aduana y empleados de Inmigración; una sala grande con acceso hacia un pórtico donde se instala un restaurante para más de 125 personas.
En la planta alta irían oficinas para radio telégrafo y radioteléfono; más el salón que se destinará para recepciones oficiales 1 Castro, Leñero y Mazza. TESIS El Vuelo del Arte, Intervención al MAC 2005
de huéspedes, conocido como el actual Salón Dorado. Cual explicaremos luego, y consta de la obra artística de más valor añadida al museo desde la inauguración del aeropuerto.
Hay un sótano de gran capacidad destinad al almacenamiento de varios transformadores eléctricos para el funcionamiento del edificio y el alumbrado del campo para los vuelos nocturnos. Se rumora que allí podría colocarse una aplanadora de diez toneladas que se utilizaba para la nivelación del terreno.
La parte ornamental ha sido especialmente cuidada. Su salón de espera y el restaurante llevarían azulejos mexicanos formando cuadros típicos, como una carreta campesina, la Iglesia de Orosí, una reproducción del Monumento Nacional, el escudo de Costa Rica, y los escudos de las siete provincias.
Según las restauraciones propuestas para el año 2009, se pretende quitar el azulejo puesto hace algunas décadas sobre el original, en velas de encontrar en el mejor de los casos y condiciones, el azulejo mexicano que poseía el aeropuerto en sus inicios.
A como se detalla ese original azulejo, contenía grandes detalles artísticos y simbólicos que serían de gran riqueza su recuperación. En cuanto a el escudo de Costa Rica y algunas provincias, si se presentan en la exposición actual, aunque son solo algunas provincias.
Ubicación y relación con el entorno:
El edificio se ubica al oeste de la ciudad de San José, en el
distrito de Mata Redonda: Ave 0, Calle 42. Específicamente en el
borde oriental del Parque Metropolitano La Sabana, y representa
menos del 1% del área total del parque. Colindando con el centro de la
ciudad por el Paseo Colón. A sus alrededores se encuentra el Liceo
Luis Dobles Segrega.
Incluso con su cercanía a la vía de alto transito, y la entrada de
la cuidad capital. La ubicación dentro del Parque La Sabana hace que
este edificio disfrute de unas sensaciones de frescura, silencio y
tranquilidad; el Jardín de Esculturas en la parte trasera del edificio
tiene una vista y ambiente extraordinario que provoca relajación en
medio de la gran metrópoli urbana.
Parque Metropolitano La Sabana:
Para conocer un más sobre el Parque La Sabana analizaremos a
continuación la historia del mismo:
A finales del siglo XVIII (1783), Manuel Antonio Chapuí donó los
terrenos ubicados en Mata Redonda, con el objetivo de ser utilizados
en el bienestar de los costarricenses, y en la actualidad una parte de
ellos, conforman el Parque Metropolitano La Sabana.
El espacio del Parque, por casi un siglo, ha contribuido al
esparcimiento, recreación y deporte, por lo cual los costarricenses le
confieren un valor cultural y social y lo consideran parte de su
patrimonio urbano.
En 1830 Juan Mora Fernández y el ayuntamiento josefino se
abocaron a crear una serie de disposiciones con la finalidad de
preservar un espacio del legado del padre Chapuí, y que así un
pedazo de tierra se convirtiera en un lugar libre y enzacatado, donde
los josefinos pudieran disfrutar de un sitio para el esparcimiento.
En el siglo XX, algunas áreas del Llano de La Sabana se
cubrieron de árboles y verdor, permitiéndole a los costarricenses
practicar fútbol, béisbol y polo, además se instaló un hipódromo.
En la década de 1930, se detuvo el desarrollo del parque, el
proyecto de sembrar árboles y de lograr un espacio de
entretenimiento, debido a que se creó el Aeropuerto Internacional de
La Sabana, que funcionó durante aproximadamente 44 años.
Bajo protestas de la gente e infinidad de reclamos contrarios a la
construcción del aeropuerto, este se inauguró en 1940.
Aunque su función aeroportuaria por requisitos internacionales
de seguridad cada año se deterioraba. Por lo que fue necesario
construir un nuevo y más moderno aeropuerto. Manteniendo pequeños
vuelos en el sitio.
A finales de 1960, el Gobierno de Costa Rica retoma la idea de
convertir el aeropuerto en el parque en que originalmente se había
pensado.
Por esta razón, se trasladaría todo el tránsito aéreo al aeropuerto
hacia Los Cocos, actual Aeropuerto Juan Santamaría en Alajuela.
Desde ese momento se inicia la siembra de árboles y zacate,
además se acondicionan sectores para la práctica de deportes,
convirtiendo a La Sabana en lugar de reunión de los habitantes.
En 1977, el Presidente de la República Daniel Oduber Quirós
(1974-1978), inaugura oficialmente el Parque Metropolitano de La
Sabana, con el objetivo de lograr el sano esparcimiento y el descanso
de sus visitantes.
El Parque La Sabana fue declarado e incorporado al Patrimonio
Histórico Arquitectónico de Costa Rica, según Decreto Ejecutivo Nº
29305-C, publicado en La Gaceta Nº 39 del 23 de febrero de 2001.
La Sabana cuenta con varios monumentos nacionales, creados
en homenaje a distinguidas personalidades, como Ex Presidentes de
la República: León Cortés Castro (1936-1940) y Otilio Ulate Blanco
(1949 -1953). Además, en el centro del parque se encuentra “La Cruz”
que conmemora el Año Eucarístico celebrado en 1955.
Actualmente, La Sabana es uno de los sitios más importantes
para la práctica del deporte en Costa Rica. Posee un lago artificial en
donde se puede realizar pesca, 12 canchas de fútbol, 8 canchas de
softball, 6 canchas multiuso, 6 canchas de tenis, canchas de
baloncesto, baseball y voleibol de arena, un circuito de patines y
patinetas y 2 piscinas.
A lo largo de muchos años, en el Parque La Sabana se han
realizado importantes eventos culturales y sociales del país. En marzo
de 1983 fue el escenario de la visita del Papa Juan Pablo II, ha sido
sede del Festival de las Artes y actualmente es el punto de partida del
Festival de la Luz.
Situación Actual:
MAC es una entidad adscrita al Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes encargada del fomento, conservación, divulgación y estímulo de las artes y la literatura costarricenses, mediante la reunión y exhibición de forma permanente las obras.
El patrimonio artístico coleccionado por el MAC hasta la fecha, tiene en sus fondos más de 6 400 obras de las cuales más de 4000 fueron realizadas por el artista costarricense Juan Manuel Sánchez y donadas por su familia. Cerca de 600 obras de la colección son de artistas internacionales.
En la actualidad, el MAC cuenta con la mayor colección de arte estatal de Costa Rica y está formada por obras artísticas nacionales e internacionales, las que representan técnicas plásticas diversas como pintura, grabado, dibujo, acuarela, escultura, instalación y fotografía.
Colección que incluye piezas desde finales del siglo XIX al presente, ofrecidas en un recorrido cronológico, por artistas, temas, tendencias y técnicas. Además de contar con El Jardín de Esculturas, diseñado por el artista Jorge Jiménez de Heredia, ubicado al costado oeste del edificio, así se completa la oferta patrimonial del MAC.
Existe un grupo muy importante en el funcionamiento del Museo, que es la Asociación de Amigos del Arte (AMARTE). Esta asociación fue creada en 1999 con el propósito de colaborar con el desarrollo del MAC y las artes plásticas, con el fin de hacerlos accesibles al público y dar a conocer la historia de Costa Rica por medio de sus artistas.
Otros objetivos de AMARTE son la adquisición de nuevas obras para el Museo y contribuir con su ampliación de infraestructura y restauración de planta física. Además promueve proyectos de investigación y varias publicaciones.
Por falta de espacio, el museo se ha conformado en otros espacios para promover el arte. Aunque positivamente des-localiza el arte, ubicándolo en distintos espacios nacionales. Como el Museo de Formas, Espacios y Sonidos en la Antigua Estación Ferroviaria al Atlántico.
La Escuela Casa del artista, con sede en Guanacaste y Alajuela, es la herramienta educativa de mayor impacto del MAC, más de 1500 estudiantes disfrutan en sus aulas de una amplia oferta de cursos libres.
La exposición permanente del Museo de Arte en su edificio central, tiende a cambiar cada tres o cuatro meses para exponer nuevas adquisiciones, temáticas, alquileres o actividades que surgan.
La colección de Miniaturas consta de diversas obras escultóricas y pinturas de pequeño tamaño, que por su fácil movilidad se han de llevar a diversos eventos y exposiciones del museo sin ningún problema.
Toda la colección del museo está constituida a base de donaciones por parte de los artistas e instituciones, las cuales contribuyen a engrandecer tal galería como un patrimonio cultural y artístico costarricense invaluable.
Continuando con el discurso de “la falta de espacio”, se conoce que las obras están almacenadas en un descuidado hacinamiento, dificultando la restauración de las mismas, así como la rápida disponibilidad de tales proyectos artísticos guardados.
En la segunda planta se alberga el Salón Dorado, cual se ha logrado mantener en muy buen estado, y prácticamente sin modificaciones.
Esta es la mayor obra artística permanentemente ligada al
museo; un salón construido en yeso y estuco que muestra los hechos
más relevantes de la historia de Costa Rica hasta 1940; que abarca
desde la época precolombina hasta la creación del Aeropuerto en La
Sabana.
Este Salón, se destinó a usos exclusivamente diplomáticos, y su
apariencia metálica casi dorada tiende a engañar a la vista dado que
se trata de estuco y yeso, con algunos matices de cobre.
Louis Ferón fue el escultor de esas vastas cuatro paredes
detalladas en estuco. Un total de 150 metros cuadrados que exhiben
la historia de Costa Rica desde antes de la llegada de Cristóbal Colón
hasta la creación misma del Aeropuerto.
Este artista gozaba de gran reconocimiento en Europa, y parece
que Costa Rica tuvo mucha suerte de encontrarlo por acá en uno de
esos momentos que él buscaba un ambiente más plácido y tranquilo,
en contraste con la agitada Europa de la época.
En cada una de las cuatro paredes se esculpió una etapa de la
historia nacional con lujo de detalles de flora, fauna y vestimenta. En la
primera pared (oeste) se retrata la época precolombina con
aborígenes en sus actividades cotidianas de caza y recolección,
además de verse rodeados de vegetación y animales nativos de Costa
Rica en ese momento.
En la segunda pared del norte se va describiendo el periodo de
descubrimiento de América, la llegada de Colón, y el intercambio de
artículos que se dio en la colonia. Así continua en la tercera con la
Pacificación y el Coloniaje; y en la cuarta se ve el proceso de
independencia hasta nuestros días.
En la tercera pared se representan los dos hechos principales de
la época colonial: lucha y victoria contra los piratas ingleses, más la
habilitación del puerto de Puntarenas.
En la cuarta pared, cual parece la más extensa, comienza con un
magnífico cuadro sobre la Revolución Francesa, después se reflejan
las caras de distinguidas personalidades gubernamentales de aquella
época como el primer presidente Juan Mora Fernández. Así como se
detalla el fomento a la agricultura y la industrialización.
Igualmente se observan los inicios de la codificación legal, la
consagración del primer obispo de Costa Rica, victoria de Juan
Santamaría, ferrocarril a Limón, Teatro Nacional, y así sucesivamente
como en las demás paredes del complejo se va describiendo con lujo
de detalles la historia de Costa Rica.
La obra es inmensa e impresionante, entonces otorgar esta
rápida síntesis que no pretende dar una idea generalizadora de la
obra, puesto que solo se trata de mencionar y destacar este arte.
Por otra parte, en cuanto a sus más de 6400 obras de arte en pinturas y esculturas. El museo cuenta con un taller encargado de la restauración de tales obras. Entre los más destacados trabajos están La Agricultura, de Francisco Amighetti y La Piedad de Luis Daell.
El museo es visitado como un atractivo lugar turístico para gran cantidad de europeos, adicionando visitas de americanos u otras nacionalidades. Aunque por iniciativa costarricense, exceptuando los colegiales, el libro de visitas parece un poco vacio.
Problemática:
Con el paso de los años la edificación del Museo ha venido en
deterioro, cual se puede observar en las paredes internas y el cielo-
raso del edificio, donde se aprecia fácilmente que ha habido
filtraciones de agua. Esto se debe a que el inmueble posee un techo
de teja muy antiguo, lo que facilita la filtración de aguas pluviales.
Otro importante problema es la ausencia de un fácil acceso para
personas discapacitadas, ya que para ingresar al Salón Dorado,
ubicado en el segundo piso del edificio, se debe pasar por una
escalera con forma de caracol, un poco estrecha.
El piso que se muestra actualmente no es el original del edificio,
se dice que el original podría encontrarse bajo el actual, además que
el piso actual no va de acorde con el resto del Museo.
La inseguridad y el vandalismo son preocupantes para el Museo,
debido a esto se vieron en la necesidad de cercar el Jardín de
Esculturas, lo que hizo que el Jardín se vea pequeño y marque su
división con el Parque La Sabana.
El vandalismo se observa en obras y monumentos que se
encuentran en las cercanías y alrededores del Museo, las cuales se
ven bastante rayadas. El Museo solo se ve afectado en su edificación
externa, como lo son sus paredes y su plazoleta.
Soluciones:
Con el cierre del Museo en Diciembre próximo se pretende
solucionar algunos de los problemas que enfrenta el Museo, como
arreglar las filtraciones de agua, colocando láminas de zinc debajo de
la teja. Además de mostrar el piso original que se encuentra debajo del
piso actual, dando la respectiva restauración al antiguo.
Dentro de las consideraciones que se tomarán para cumplir con
la Ley Nº 7600 se pretende mejorar la accesibilidad al museo
construyendo rampas de acceso y con la colocación de un elevador
para llegar al Salón Dorado en el segundo piso.
En condiciones de patrimonio, las remodelaciones se han
postergado para el año 2009, en velas de realizar un cierre completo
con varias restauraciones, que dicen los realizadores que ha sido
difícil conseguir los permisos. Aunque el año entrante el proyecto de
cambio ha logrado ser sumamente grande e importante.
El edificio permanecerá cerrado a partir del 8 de diciembre de
2008, esta restauración durará aproximadamente un año y medio. Que
incluye además de la sustitución de los antiguos sistemas eléctricos y
telefónicos que todavía prevalecen en el Museo.
La restauración tendrá un valor aproximado de ¢350 millones.
Parte de las obras pasarán a exhibirse en la Galería Enrique Echandi
ubicada en el Teatro Nacional. También se realizarán giras a distintos
lugares del país en donde también se exhibirán obras del Museo.
Se espera que el Museo reabra sus puertas en el 2010.
Conclusiones:
Grupal:
En el Museo de Arte Costarricense se puede observar en un área relativamente pequeña, gran cantidad de arte y sentimentalismo de la sociedad costarricense de la época.
A como se señala en uno de los objetivos principales de la Asociación Amigos del Museo de Arte, verdaderamente se lograr expresar la historia costarricense a través del arte, las esculturas, pinturas y sobre todo en el Salón Dorado; una manera diferente de conocer Costa Rica.
En un plano sentimental y emocional se adentra fácilmente en la historia del país, aprendiendo fácilmente un poco de las situaciones vividas durante cada específica década pasada de la historia. En el edificio mismo, en el decorado, las pinturas y las esculturas se exponen variadas ideologías y pensamientos de la gente de aquella época.
Además encontrar tanto arte reunido es un solo sitio dedicado a la exhibición y restauración representa un ícono del coleccionismo costarricense. Y se encuentra con las puertas abiertas para cualquier visitante que quiera apasionarse con Costa Rica mediante una creativa colección de arte.
En sus grandes salas se guarda mucha historia nacional
en variadas formas de arte y arquitectura.
Individual Jeffrey:
El Museo de Arte Costarricense además de mostrar las obras de
muchos artistas costarricenses, también contribuye a enseñar y
recordar parte de la historia de Costa Rica.
Con su Salón Dorado podemos apreciar los acontecimientos
más importantes desde la época precolombina hasta la creación del
Aeropuerto, edificio que actualmente alberga el Museo.
El Jardín de Esculturas presenta grandes obras elaboradas por
costarricenses, lo que nos hace ver que en Costa Rica sí hay arte,
pero muchas veces nos olvidamos de este y preferimos ir a otros
lugares como Centros Comerciales antes de visitar un Museo tan
interesante y completo como lo es el Museo de Arte Costarricense.
Individual Mauricio:
Creo que a nivel universitario pocos conocemos la historia de Costa Rica, por lo que estas edificaciones caen en el olvido por la simple ignorancia de las nuevas generaciones.
Una vez adentro del museo, hay algo que te humaniza, te hace ver mediante trazos, pinceladas y cinceles el pensamiento de personas ubicadas en el pasado histórico del país.
Poder tener una parte de la historia es un objetivo de los patrimonios, pero especialmente la función museológica de este, logra identificarnos, que nos ubiquemos y comprendamos cada periodo de la historia que se quiera retratar en las distintas obras.
Me pareció magnífico el Salón Dorado que posee el museo, pues tras visitar toda la galería de arte, ubicada mediante específicos años de gobernabilidad en el pasado; este salón tiende a resumir la historia de Costa Rica hasta los años 40, siendo el espacio máximo para culminar con el “tour histórico” del museo.
Imaginarse cuantas personalidades habrá pisado el salón, y cuantos eventos habrán sucedido en él, es tratar de recordar lo que no he visto, pero que supongo han de haber sido buenos momentos.
Si cada cierto tiempo han de cambiar la exposición, pues han de ser tantos cientos de obras, han de ser interesantísimo conocer la nueva temática o el nuevo proyecto que se quiera exponer.
Cualquier exhibición esta cuidadosamente diseñada para expresar “algo”, por lo que es de gran disfrute y aprendizaje visitar cada exposición, mas aún dada la cercanía y ubicación del museo.
Lastimosamente se cerrará el 2009, pero estoy seguro que la reinauguración del mismo habrá de ser excepcional, y una actividad que no se puede dejar pasar. La parte administrativa y organizativa está fuertemente consolidada, por lo que no espero menos en el 2010.
Bibliografía:
Peraza Barrientos, Ondina.
Arte Precolombino Para NiñosEditorial Universidad de Costa Rica, 1998
Rojas González, José Miguel.
Un recorrido por el Museo de Arte Costarricense Tesis - Universidad de Costa Rica, 1985
Rojas González, José Miguel.
Arquitectura de Museos: Museo de Arte Costarricense Tesis - Universidad de Costa Rica, 2007
Souvenir
Aeropuerto Internacional “La Sabana” San José, Costa Rica , 1940
Museo de Arte Costarricense.
Salones Nacionales de Artes Plásticas l 1972 - 1993 Gossestra S.A. - Costa Rica
Museo de Arte Costarricense.
Salones Nacionales de Artes Plásticas l 1972 - 1993 Gossestra S.A. - Costa Rica
Museo de Arte Costarricense.
Exposiciones Artes Plásticas l 1928 - 1937 Master Litho S.A. - Costa Rica
Internet
www.musarco.go.cr Museo de Arte Costarricense
Museo de Arte Costarricense.
Catálogos Varios
Agradecimientos:
Profundamente agradecidos con la gente a cargo del museo, por la apertura de comunicación con nosotros.
Gracias a Vivian Solano, por facilitarnos gran documentación del Museo de Arte Costarricense, varias de sus publicaciones y mucha información útil para este proyecto.
La dedicación de algunos minutos de su tiempo que fueron de gran ayuda en nuestra primera visita.
En la segunda visita, esta vez mejor documentados y preparados para tomar el tour artístico de nuevo, agradecemos a la recepcionista del MAC, quien literalmente se sentó a conversar con nosotros, explicándonos muchos aspectos detallados del museo.
Las publicaciones del MAC que nos donaron, igualmente queremos donarlas a las bibliotecas de la Universidad de Costa Rica.
Gracias por ayudarnos a completar este pequeño proyecto, y se valora abiertamente la apertura de información, carisma y recibimiento que pudimos gozar de parte del MAC.
Anexos:
Propuesta de Ampliación
Pág. 15 - 18
Planta y fachada antigua
Pág. 119 - 120
Planta y fachada actual
Pág. 122 - 123
Anexos pertenecientes a la tesis
Rojas González, José Miguel.
Arquitectura de Museos: Museo de Arte Costarricense Tesis - Universidad de Costa Rica, 2007
(en versión impresa)