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fotografia de guerra
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FOTOWAR
“He sido testigo, y son estas fotos
mi testimonio. Los acontecimientos que
han registrado debe no se olvide y no debe
repetirse. “
-James Nachtwey-
Diseño de la portada: Editorial SGI, S.A, sobre manchas de guerra de Valentina Ramírez.Fotografias del libro: Tomadas por James Nachtwey.De la presente edicíon EDITORIAL SGI, S.A. C/Panaderos,14 29005 - Málaga, Espáña.
www.editorialsgi.comE-mail: [email protected]: 978 - 84 - 7808 - 649 - 8Depóstio Legal: B- 19.383 - 2010
Impreso en talleres gráficos de Romanaya/VallsVerdaguer 1, 08786- Capellades (Baecelona)
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FOTOWAR
James Nachtwey
Testimonio
Afghanistan
South Africa
Hambre
Crimen & Castigo
PakistanHeroin
RwandaIndiaChechnya
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Kosovo
Diseñado por Valentina Ramírez, 2010(C)
Taller Editorial Diseño Gráfico, Duoc Uc. 2010
Todo el material publicado en este libro es de exclusiva propiedad de sus dueños, y fue recolectado bajo licencia abierta y dominio público.
Informacion obtenida de:“Inferno” - James Nachtwey (Publicado en 1999)“War Photographer” - Pelicula /Documental (Publicado en 2003)http://www.jamesnachtwey.com/ - Pagina Oficial de James Nachtwey
Papel utilizado: Cambric Silk de 104 gr.
Tipografías utiizadas:- A venir, 35 Light, 9 pt- Arial Bold, 10 pt y 6 pt- Briem Script, Light, 10 pt
TESTIMONIO
Fotografia autobiografica12
James Nachtwey nació en Syracuse, Nueva York.
Creció en Massachussets, se graduó en la Secondary High School de Leominster y fué a la Universidad de Darmouth entre 1966 y 1970 en donde jugó al rugbi y estudió historia del arte y ciencias políticas.
Fué un autodidacta en la fotografía y se introdujo en ella influenciado por las imágenes de la guerra del Vietnam y de los movimientos por los derechos civiles de America.
Nachtwey comenzó a trabajar como fo-toperiodista en 1976 en un periódico pequeño en New México. En el año 80 se trasladó a Nueva York y comenzó a trabajar como fotógrafo independiente.
En 1981, Nachtwey cubrió su primera
asignación de ultramar en Irlanda del
Norte.
Nachtwey ha documentado una gran
variedad de conflictos armados y de
ediciones sociales. Pasó un tiempo
considerable en los conflictos bélicos
de Suráfrica, América latina, el Ori-
ente Medio, Rusia, Europa Oriental,
Unión Soviética y retrató imágenes de
guerra, conflicto y hambre, y imágenes
sociopolíticas (contaminación, crimen
y castigo) en Europa occidental y los
Estados Unidos. Actualmente vive en
New York City.
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War Photographer es un documental de Christian Frei sobre el fotógrafo James Nachtwey. Además de contar la historia de un hombre emblemático en el campo de la fotografía de guer-ra, la película aborda el alcance más amplio de las ideas comunes a todos los involucrados en el periodismo de guerra, así como los temas que cu-bren.
El documental ganó el Premio Pea-body 2003, y fue nominado para un Oscar en 2002 y un premio Emmy en 2004. También ganó o fue nominado para 16 premios más a nivel interna-cional.
Las fotografías, tomadas entre 1981 y 1988, son de lugares cuyos nombres se han convertido en sinónimo de angustia, la violencia y la represión o la guerra civil, religioso, político o rebelde: Sri Lanka, Corea, Irlanda del Norte, Líbano, El Salvador, Nicaragua , Uganda, Sudán, Haití, y la Ribera Oc-cidental. fotografías implacable del libro del color, a menu-do se propagan a través de la página abierta, revelan la tortura, el hambre, falta de humanidad perversa, y el bom-bardeo y asesinato de niños inocentes, civiles, rebeldes y constabularies por igual. Propósito y la esperanza son tan palpable como el dolor en la oración antes de la contienda y en los rostros de los dolientes; celo y la disciplina son evidentes en la formación de los reclutas del Ejército de EE.UU., la guerrilla tamil y jóvenes guatemaltecos. Reco-mendaciones .-- Ann Copeland, ex Universidad de Drew. Lib. Madison, N.J.
Libros y peliculas de J.N14
Este libro de gran formato fue publi-
cado para acompañar una exposición
dedicada al trabajo del fotoperiodista
James Nachtwey que tuvo lugar en el
International Centre of Photography
de Nueva York.
Este volumen es un documento único
sobre los conflictos de guerra de los
años noventa, con imágenes dramáti-
cas e impactantes del sufrimiento hu-
mano que sacude Ruanda, Somalia,
Rumania, Bosnia, Chechenia e India
así como el conflicto de Kosovo.
El libro incluye un ensayo de Luc
Sante.
Libros y peliculas de J.N 15
Ha vivido de cerca, incluso a riesgo de su vida, las trágicas experiencias fratricidas y separatistas en Kosovo y Bosnia. Ha estado en Indonesia registrando los abismos espe-luznantes entre la riqueza arrogante de unos pocos y la po-breza infernal de miles de millones de habitantes.
Cómo Kapuscinski, vivió en África. Documentó la irracional matanza de millones de personas en Ruanda y el avance apocalíptico del Sida en las regiones más miserables del continente.
El periodista debe ser humano, con un sentido social pro-fundo, dice Natchwey. Y lo muestra en su práctica cotidi-ana. Revela al mundo que la realidad no es como la dis-frazan sino como lo es. Revela que muchos medios pasan de largo ante el dolor, el sufrimiento, el hambre, las epi-demias, la contaminación.
Revela que el periodismo debe situarse lejos del poder (político, económico, jurídico) y ejercer el rol de contradictor. Si a Vietnam no hubieran ido fotógrafos y periodistas honestos nunca se habría conocido el horror que se vivió allí, reflexiona Natchwey y hace la cita como el referente que lo llevó a deci-dirse por la fotografía documental.
Vivir, sentir, oler, escuchar. Acercarse con respeto a las personas, en especial a las que menos tienen, a las que nunca han tenido voz.
Natchwey enseña que el buen periodista no elude la realidad. La dice aunque duela: Hay otra sociedad paralela que vive, ama, sufre y lucha, pero no está en los medios. Critica que el periodismo no se empapa de vida y que se deja atrapar por la moda del jet set, los famosos, la farándula, el sexo.
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AFGHANISTAN
Afghanistan, 1996, Luto de un hermano muerto por un cohete talibán.18
Trabajó en varios empleos mientras aprendía fotografía y fue en 1976 cuando comenzó a trabajar como fotógrafo de prensa en Nuevo México para, en 1980, trasladarse a Nueva York como fotógrafo freelance. Su primer trabajo en el ex-tranjero consistió en cubrir la revuelta civil en Irlanda del Norte durante la huelga de hambre del IRA en 1981.
Desde entonces, se ha dedicado de pleno a documentar guerras, conflictos y crisis sociales en lugares tan diversos como El Salvador, Nicaragua, Guatemala, Líbano, la franja de Gaza, Israel, Indonesia, Tailandia, India, Sri Lanka, Afghani-stan, Filipinas, Corea del Sur, Somalia, Sudan, Ruanda, Sudafrica, Rusia, Bosnia, Chechenia, Kosovo, Rumanía, Brasil y los Estados Unidos.
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Asociado con Black Star de 1980 a 1985, desde 1984 James Nachtwey está en la nómina de Time Magazine. Fue miembro de la Agencia Magnum entre 1986 y 2001 y ha expuesto individualmente en el International Center of Photography de Nueva York, el Palazzo Esposizione de Roma, El Circulo de Bellas Artes de Madrid, el Carolinum en Praga, el Centro Hasselblad en Suecia, la Canon Gal-lery y el Nieuwe Kerk en Amsterdam, y el Hood Museum of Art del Dartmouth College, entre otros.
Afghanistan, 1996. Víctimas de minas terrestres aprendido a caminar sobre las piernas de prótesisen la clínica del CICR.20
Afghanistan, 1996. Las ruinas de Kabul de la guerra civil. 21
Afghanistan, 1996. El juego de Buzkashi fue traído al país por Genghis Khan.
James Nachtwey, vivió de cerca, incluso a riesgo de su vida, las trágicas experiencias fratricidas y separatistas en Kosovo y Bosnia. Estuvo en Indonesia registrando los abismos es-peluznantes entre la riqueza arrogante de unos pocos y la pobreza infernal de miles de millones de habitantes.
Solitario, vagabundo, con una altísima sensibilidad social y un elevado manejo de la ética.
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SOUTH AFRICA
"No es mi trabajo ir a un sitio y hacer fotografías malas, especialmente en un sitio donde hay tanta tragedia, donde hay tanto en juego. Mi trabajo es crear fotografías que lleg-uen a la gente de una manera impactante y elocuente.
Sudáfrica, 2000 - La abuela cuida niña afectada por el VIH.24
"
“Creo que las cosas hay que recordarlas, se deben reflexionar sobre ellas porque es la única manera con la que podemos aprender, la única forma de progresar. Nos suenan las fotos de lo que ocurrió en Europa en los años 40. Opino que esas imágenes de los campos de concentración nos recuerdan los eventos y son impor-tantes para ayudarnos a vigilar. Considero que la documentación se debe utili-zar para reflexionar sobre los eventos y ayudarnos a evitarlos en el futuro.
Zimbabwe, 2000. En una sala de la tuberculosis en la gran mayoría de los pacientes que sufren de SIDA. 25
"
Sudáfrica, 2000 - cuidador consoló un enfermo de sida.26
“Creo que la gente se debe ofender con el genocidio. Se debe ofender con la limpieza étnica. Se debe ofender con el hambre. Mi trabajo no es hacer que esas cosas sean cómodas o fácilmente digeribles. Mi trabajo no es hacer sentir cómoda a la gente con estas cosas, ni entretenerles. Mi trabajo es concienciar a la gente del hecho de que son crímenes contra la humanidad.
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"
“ El público y la opinión pública necesitaba el conocimiento de estos temas. Pensé que la fotografía era una herramienta muy útil para concienciar y cambiar y por eso quise involucrarme en ello.
Sudáfrica, 1992 - Los niños de Soweto se disparan en un trampolín.28
"
HAMBRE
Sudán, 1993 - víctima de la hambruna en un centro de alimentación.30
Actualmente el intrépido y prestigioso James Natchwey tiene dos exposiciones retro-spectivas bajo el título de “Testimonio”. Una se muestra en el ICP de Nueva York y la otra, que está de ruta por Europa, ha sido inaugurada en el Círculo de Bellas Artes de Madrid como parte de la tercera edición de PHotoEspaña.
Hambruna en Somalia y Sudán, hazañas bélicas en El Salvador, Haití, Uganda, Sinaí y Guatemala, degradación ambiental y pesadillas tóxicas en el este de Europa, genocidio en Ruanda, fraticidio en los Balcanes, asesinatos en Nueva York, represión en Sudáfrica, pobreza en Indonesia, aislamiento y abandono de los enfermos en Rumanía, las ruinas de la guerra civil en Afganistán y muerte en Chechenia.
Son acontecimientos terroríficos documentados por Natchwey como noticias, como documentos históricos y como mensajes para promover la conciencia con la intención de servir como medio para acabar con todo este sufrimiento humano.
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“Comprendí que la fotografía documen-tal tiene la capacidad de interpretar los eventos desde su punto de vista, le da voz a aquellos que de otro modo no la ten-drían y como consecuencia estimula a la opinion pública y le da ímpetu al debate político evitando así que las par-tes interesadas controlen la agenda por completo, por mucho que lo deseen.
Somalia, 1992 - El niño muerto de hambre por el hambre, un arma hecha por el hombre de exterminio en masa.32
"
Sudán, 1993 - víctima de la hambruna a punto de recibir el agua en un centro de alimentación.
James Natchwey ha publicado los libros “Deeds of War”, 1989 y “Inferno”, 1991. El primero es producto de su trabajo posterior al conflicto en el norte de Irlanda y contiene imágenes con temas que van desde el antagonismo religioso hasta los ataques a la inocencia de los niños. El Segundo contiene imágenes captu-radas durante las guerras en Centroamérica, el Líbano, Afganistán, Sri Lanka, Uganda y Sudán.
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Somalia, 1992 - El niño muerto de hambre por el hambre, un arma hecha por el hombre de exterminio en masa.34
“Los fotógrafos llegan al extremo de la experiencia humana para mostrarle a las personas lo que está sucediendo. A veces ponen sus propias vidas en riesgo porque creen que tus opiniones y tu influencia importan. Dirigen sus fotos a tus mejores instintos, generosidad, la noción de lo bueno y lo malo, la habilidad y la voluntad para indentificarse con los demas, la negativa a aceptar lo inaceptable.
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"
LA MUERTE
El ave de rapiña sobrevuelasin más.Sin más indiferenciaque la del mal.
No mira rostros,sólo ve objetosque quiere aniquilar .Son los muertosSon los otrosSin rostrosSin dignidad.
Cultura de odio,férula insaciable,inhumano trotar por el mundo.La animalidad rebulle yse jactade éxitos rotundos,sobre los bárbarossin nombre,sobre los hombressin rostros.
El dolor se expande como el polvoy se diluye sin más,con indiferencia animal,con la superioridad delos ojos cubiertos de nada.
La muerte triunfa en todas las batallas,se regocija y apoderade lo abyecto de quien toma su manopara ejecutar a un hermano.
De la insaciable ambicióntoma la crueldad su mejor tajaday los convierteen marionetas vacuas.
Adónde está lo humanocuando el dolor es insondable?Adónde,cuando la ambición inconmensu-rableMultiplica la rapiñaY nos pone garras en lugar de pal-mas?
En qué resquicio quedalo que de humano tenemoscuando la tragediasumerge a la humanidaden el sinsentido del hambre y de la guerra.Adónde?
Canción Cambiar el mundo del Grupo Ruah y palabras del Padre Ignacio Peries.
Somalia, 1992 - Levantar un hijo muerto para llevarlo a una fosa común durante la hambruna.36
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Los ensayos fotográficos de Nachtwey cuen-tan la historia de la dignidad humana y triun-fan cuando, como él mismo dice, "los débiles superan a los poderosos", y cuando el espíri-tu humano sobrevive en las más horrendas circunstancias. Su diplomacia le ha ayudado a acceder a lugares difíciles, y su paciencia y voluntad para esperar una buena fotografía, incluso poniendo en serio peligro su vida, han contribuido a la creación de iconos fotográ-ficos que se caracterizan por una rigurosa composición y un gran dramatismo. Presti-giosos medios internacionales como Time, Stern, Paris-Match, National Geographic o El Mundo han publicado los trabajos de Nach-twey, que ha recibido, entre otros premios y en repetidas ocasiones, la Medalla de Oro Robert Capa, el premio Magazine Photogra-pher of the Year, el ICP Infinity Awards en fo-toperiodismo, el World Press, y ha publicado los libros Deeds of war (1989) e Inferno (1999).
CRIMEN & CASTIGO
New York, 1994 - Prisionero en la banda de la cadena.40
El fotógrafo sólo mira el peligro y el sufrimiento. Nachtwey explica como toda esa tensión latente, la canaliza en sus fotos. Para él la guerra niega la humanidad, la foto la rescata, es una especie de negociación para la paz. Usa a la imagen como una forma de esperanza, crítica, denuncia y de hacer periodismo.
New York, 1994 - Prisionero en la banda de la cadena. 41
James Nachtwey fue tan influidos por las imágenes de Vietnam, y la American Civil movimiento de los derechos que le enseñó a sí mismo la fotografía, y se mudó a Nueva York para convertirse en un fotógrafo independiente en 1981. En su carrera ha cubierto conflictos en Irlanda del Norte, África del Sur, América Latina, Oriente Medio, Rusia, Europa del Este y la antigua Unión Soviética. Nachtwey ha documen-tado eventos como las elecciones en Sudáfrica (1994), la invasión de EE.UU. de Irak, el tsunami en el sudeste de Asia (2004), el conflicto de Sudán, y 9 / 11 (2001) por nombrar algunos.
Alemania, 1994 - un hombre colgando globos en la pared.
“ He sido un testigo, y estas imá-genes son mi testimonio. Los sucesos que he grabado no pueden olvidarse y no deberían repetirse. "
Actualmente el intrépido y prestigioso James Natchwey tiene dos exposiciones retrospectivas bajo el título de “Testimonio”. Una se muestra en el ICP de Nueva York y la otra, que está de ruta por Europa, ha sido inaugurada en el Círculo de Bellas Artes de Madrid como parte de la tercera edición de PHotoEspaña.
Hambruna en Somalia y Sudán, hazañas bélicas en El Salvador, Haití, Uganda, Sinaí y Guatemala, degradación ambiental y pesadillas tóxicas en el este de Europa, genocidio en Ruanda, fraticidio en los Balcanes, asesinatos en Nueva York, represión en Sudáfrica, pobreza en Indonesia, aislamiento y abandono de los enfermos en Rumanía, las ruinas de la guerra civil en Afganistán y muerte en Chechenia.
Son acontecimientos terroríficos documentados por Natchwey como noticias, como documentos históricos y como mensajes para promover la conciencia con la intención de servir como medio para acabar con todo este sufrimiento hu-mano.
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PAKISTANHEROÍNA
Pakistán, 2001 - Un centro de rehabilitación para adictos a la heroína.
Nachtwey rescata el valor más profundo de la fotografía documental, de la que tanto se descree en esta época. Y si algo sobresale en su magnífico trabajo es el respeto y la sensibilidad con los que se acerca al dolor ajeno para traducirlo en imágenes admirables.
Pakistán 2001 - los adictos a la heroína.48
RWANDAINDIACHECHNYA
Con una valentía que le permitió enfrentar no sólo el constante riesgo de muerte sino también la propia desintegración anímica, el fotorreportero cubrió los con-flictos bélicos de la útlima década y reveló al mundo -primero por medio de diversas revistas internacionales, luego con este libro- la miseria extrema que afecta a gran parte de la humanidad.
La situación de los Dalits (“intocables”) de la India, los genocidios de Ruanda, República Democrática del Congo, Chechenia, Bosnia y Kosovo, el hambre utilizada en Sudán y Somalia como arma de extermino masivo y las desastro-sas secuelas del régimen de Ceauscescu en Rumania son los nueve infiernos en la tierra que Nachtwey, como Dante, recorrió para aprender algo más de la condición humana y de sí mismo.
Ruanda, 1994 - superviviente del campo de exterminio hutu.50
Zaire, 1994 - los refugiados hutus fueron golpeados por el cólera y enterrado en la masa tumbas.
“Alli suspiros, lamentos y profundos gemidos resonaban a través del aire sin estrellas, de modo que desde el principio me hicieron llorar.
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La técnica usada para grabar su trayectoria en un periodo normal del trabajo consta de una cámara de foto que a su vez tiene insertada una cámara de vid-eo que graba todo lo que pasa mientras James Nachtwey obtiene las fotos. Durante sus jornadas de trabajo se distingue muy bien como el fotógrafo se vuelve solitario, como enfrenta el horror cara a cara sin intervenir en la situación, sólo siendo testigo externo de ella pero conectándose con las emociones de la gente, pues la gente que fotografía se vuelve más importante que él mismo.
Zaire, 1994 - los refugiados hutus fueron golpeados por el cólera y enterrado en la masa tumbas.52
Chechenia, 1996 - Las ruinas del centro de Grozni.
“Las fotografías de Nachtwey nos hacen capaces de imaginar que podría haber ocurrido a nosotros. Son difíciles de olvidar o perdonar. - Tim Appelo
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