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DIALECTICA VOLUNTAD-CIRCUNSTANCIAS Y

CRITICA DEL REDUCCIONISMO EN GRAMSCI. Aqui 1 es Chi hu Amparán.

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DIALECTICA VOLUNTAD-CIRCUNSTANCIAS y'

CRITICA DEL REDUCCIONISMO EN GRAHSCI.

Aquiles Chihu Amparan.

' I - . .acel~rar el porvenir." Gramsci, "Margenes", 1917.

"Si falta ese proceso de desarrollo que permite pasar de un momento a otra, y si es esencialmente un proceso que tiene por actores a los hombres y su voluntad y su capacidad, la situacidn permanece 5in cambios, y pueden darse conclusiones contradictorias, 'I

Gramsci, cuadernos de la carcel, 1932.

El periodo inicial (1916-1918) de la obra tebrica y politica

de Gramsci, comprende sus primeros contactos con el movimiento

obrero de Turin, su ingreso al Fartido Socialista Italiano y la

colaboracidn en Avanti! e 11 Grido del FORO~O. Esta &poca puede

denominarse el "periodo voluntarista" porque em 61 se esboza una

estrategia que prioriza la voluntad y la accidn de los

individuos, sin considerar las circunstancias estructurales

necesarias para un cambio social. Ello resulta evidente en la

estrategia planteada en 1917 en el. articulo "M&rgenes" antagbnica

a la de 1932, cuando en l o s Cuadernos de la cArcs1 analiza la

politica como relaciones de fuerza. En 1917 indica la necesidad

de "acelerar el porvenir", porque "esperar a convertirse en la

mi tad mas uno es el programa de las almas timidas q u e esperan el

socialismo como un decreto regio canfirmado por d o s rnini~tros".~

3 L

Quince años despubs, en 1932 151 mismo inval ida esta idea al

advertir: "Si falta ese proceso de desarrollo que permite pasar

de un momento a otro, y si es esencialmente un proceso que

tiene por actores a l o s hombres; )I' su voluntad y su capacidad, ia

situacidn permanece sin cambios, y pueden darse conclu~iones

contradictorias. La vieja saciedad resiste y se asegura un

per-lodo de 'respiro?, exterminando fisicamente a la &lite

adversaria y aterrorizando a las masas de r-eserva: o bien ocurre

la destruccibn reciproca de las fuerzas en conflicto con la

instauracian de la paz de los cementerios y, en el mejor de los

casos, bajo la vigilancia de un centinela extranjero".Z

Durante el segundo periodo (1919 - 19201, el periodo de 105

consejos de fabrica, Gramsci funda L'Ordine NUOVO, brgano

dirigente del movimiento de consejos de fabrica que culmina con

la huelga general y la ocupacidn de -Fabricas en Turin. El grupo

ordinovista supera a reformistas y ultraizquierdistas, quienes

ven al Estado en el gobierno y conciben la poli tica como una

actividad elitista. Esa concepcidn es cuestionada por este grupo

al afirmar que la participacian de las mayorias es posible desde

el interior de la fabrica 1ogr.hdose nuevas formas de Estado,

sociedad y 1 egal i dad . La encrucijada voluntarismo-circunstancias es analizada por

primera vez en el articulo "DOS revoluciones", en donde examina

los rasgos de una revolucidn comunista y concluye que las

experiencias en Memania, Au!stria, Baviera, Ucrania, Hunqria,

demostraron que una revolucihn dirigida hacia la destruccibn del

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aparato estatal burgubs y la construccihn de uno nuevo presenta

un caracter predominantemente anArquico y destructivo que impide

que la revolucidn como actct destructivo ceda 5u lugar a la

revolucitm como acto constructivo. Asimismo, afirma que la

presencia de un partido czomunista, fuertes organizaciones

sindicales, armamento del proletariado, no han sido suficientes

para compensar la ausencia de fuerzas praductivas tendientes al

desarrollo y expansih de un movimiento de masas proletarias

dirigido a transformar con el poder econdmico el poder politico.

Considera que las revoluciones en dos tiempos han fallado porque

la revolucibn es un proceso clialktico donde el poder politico

posibilita el poder industrial y viceversa. Desde este punto de

vista, no basta con liquidar las instituciones representativas y

la maquinaria administrativa con la que el gobierno central

ejerce el poder politico de la burguesia, ni es suficiente el

hecho de que la ola revolucionaria deposite el poder en hombres

sinceramente comunistas. Y concluye afirmando que la revolucibn

ser& proletaria y comunista 5blO cuando constituya la liberacibn

de fuerzas productivas proletarias y comunistas que se han venido

gestando en el seno de la sociedad dominada por la clase

capitalista.

El tercer periodo, el periodo de la derrota ante el fascismo,

abarca los años de 1921 a 1926, desde la fundacian del Partido

Comunista Italiano al encarcelamiento de Gramsci. Al interior

del PC1 se vive la rivalidad Gramsci-Eordiga expresada en las

disyuntivas: centralismo orgZtnico (democracia centralizada) o

4

centralismo burocrAtico. Partido de masas o partido de cuadros.

Supervivencia ante la reprl?si&n fascista a dictadura del

proletariado. Al haber fracasado ante el fascismo, en su articulo

"LQu& hacer3"de 1923, Gramsci !se interroga sobre la derrota de un

partido tradicional como el PSI, y por que el FCI no se

desarrolla rapidamente entre 1921 y 1922 y no agrupa a 5u

alrededor a la mayoria del proletariado y campesinado. Su

respuesta es un llamado a anal.izar las principales carencias: No

se tenia una ideologia ni se difundih una ideologia entre las

masas. No se estudia el marxismo. No se examina y critica el

pasado. No se conoce Italia y por lo tanto, no se conoce el

terreno de la batalla y es imposible hacer previsiones y

orientarse. No existen estudias serios sobre una historia de la

clases obrera y campesina, ni de la estructura econbmico-social,

o los partidos politicos, de 5us vlnculos de clase, de su

significado. No se conoce Italia, y por lo tanto -continad

Gramsci-, no se puede responder a fenamenos como el hecho de que

en el val le del Po el reformismo se halla arraigado

prof undamente; o a ¿ c6mo ha sido posible que el partido popular

cathlico tenga mas exito en la Italia septentrional y central que

en la Italia del sur, regian en donde la poblacian se encuentra

mas atrasada y por lo mismo ldeberia favorecer mayormente a un

partido confesional?; o al hechm de ¿ por quP en Sicilia los

grandes propietarios son autonomistas y no la son los campesinos,

mientras que en Cerdeña sucede lo contrario?; L par que en

Sici 1 id, y no en otro lugar st? ha desarrollado el reformismo de

5

los De Felice, Draga, Tasca de Cutd?; &por qu@ en la Italia del

sur se ha desarrollado una lucha armada entre fascistas y

nacionalistas que no 5e ha dada en otras partes?.4

Durante el cuarto periodo (192&-1937), el periodo de la

reflexidn sobre la derrota de la lrevolucibn en Occidente, en la

prisidn de Turln redacta de 1929 a 1935 los Cuadernos de la

cartel. Las dificultades con las que se topa al enunciar la

dialictica voluntad-circunstancias resultan evidentes cuando

analiza el "prdlogo de Marx a l.a Critica de la economia politica.

Aunque coincide con Marx al indicar dos premisas necesarias para

que se de un movimiento histdrico, Gramsci modifica los

enunciados de este autor: 1. "Ninguna sociedad se propone tareas

para cuya solucihn no existan ya l a s condiciones necesarias Y

suficientes, o por lo menos, ciertas condiciones que est9n en

vias de aparicibn y desarrcdlo; 2 ) ninquna sociedad cae, se

disuelve, ni puede ser reemplazada por otra, si antes no ha

desarrollado todas las +ormas de vida que estan contenidas

implicitamente en estas relaciones".= En el primero cambia

"condiciones materiales" por "condiciones necesarias y

suficientes". En el segundo utiliza "fuerzas productivas" en

lugar d e "formas de vida". Realizando de esta manera una

ampliacidn de los principios enunciados, e5 decir, una lectura

no exclusivamente ecdnomica quie parece confirmarse cuando señala

que "dichas premisas deben ser depuradas de todo fatalismo y

mecanicismo". Sin embargo, con ello, Gramsci permite el paso de

una metodologia que lleva a la sobrevaloracibn de la accian y la

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voluntad de los individuos.

Si entendemos por antinomia la contradiccibn entre dos

proposiciones, ambas igualmente demostrables, veremos que

Gramsci y el marxismo incurren en una antinomia cuando plantean

la5 siguientes proposiciones: La historia de la humanidad es

producto de la voluntad de los individuos. La historia de la

humartidad es producto del desarrollo de circunstancias

socioecondmicas. El reduccionismo s u r g e cuando un razonamiento no

dial clctico observa como dual ismos y polos inconexos a la pareja

voluntad-circunstancias, cuando en realidad esta relacion entre

superestructura y estructura debe observarse como un monism0

articulado.

Es posible aventurar como hiptkesis el hecho de que el

marxismo presenta a 5u interior, como tendencia de caracter

recurrente, la inclinacidn a oscilar en torno a. dualismos y a

incurrir en un reduccionismo (apriorismo, hipastatizacihn) que

opta por uno de los p0105, Ese reduccionismo observa como

dualismos sin relacian una serie de parejas o dobles perspectivas

que en realidad constituyen una d i d a d diferenciada:

Circunstancias / voluntad ;; estructura / superestructura ;

historia / sujeto; Ezconomia / politica ; proceso 1

coyuntura; mediato / inmedi.ato ; sincronia / diacronia;

espontanelsmo / consciencia; autoemancipacihn d e l proletariado /

organizacidn; masas / &lites; pluralismo / dictadura; consenso /

f uerra; forma / contenido; consciente / inconsciente,

7

Los Cuadernos de la carcel denotan un constante esfuerzo por

superar esos dualismos proponiendo monismos articulados. Ello se

puede deducir a partir de su proposicibn de desarrollar en la

accidn estatal la "doble per~p~ectiva" que se presenta en

distintos; grados Y niveles (f uerza/consenso,

violencia/civilizacibn? momento individual/momento universal,

Iglesia/Estado, agitacidn/propaganda, tActica/estrategia), que

van de lo mas simple a lo mA!s complejo y tearicamente pueden

reducirse a los dos fundamentales expresados en la naturaleza

del centauro Quiran.7 El concepto de bloque histhrico constituye

la sintesis unitaria de historia/sujeto, economia/politica,

estructura/superestructura~ unidad de naturaleza y espiritu,

constitucibn reciproca de opuestos diferentes.- La politica es

unidad de espontaneidad y direccidn consciente. La preocupacian

por el sentido camfin expresada en la frase "todos los hombres son

f i l b s ~ f o s " ~ constituye el nexo entre socialismo cientifico y

almas simples , entre previsibn cientifica, voluntad y pasittn. Se

trata de la unidad dialktica representada en el principio de

identidad tautoeteroli3gica analizado por Della Volpe. En donde la

tautoeterologia (tautan = id0ntico a si mismo, heterbn = diverso)

o monism0 articulado indica la indispensabilidad de la oposician-

relacian de las partes y la dlualidad es sustituida por una

relacibn de heterogeneidad-complementareidad , unidad y

exclusian de los opuestos.10 La tesis de l a autoemancipacian

del proletariado en M a r x constituye un rechazo al dualismo que

concibe como opuestos inconexos la pareja

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voluntad/circunstancias. Esta t e s i s expresa u n monismo articulado

en e l que la transicibn al socialismo significa condiciones que

encarnan en un sujeto histdricc~, una concepcibn donde l a h i s t o r i a

no e5 proceso que no involucre la actividad humana, n i voluntad

de sujetos que se impone por ertcima d e las circunstancias.

La concepcian unilateral y fragmentaria del reduccionismo l o

llevan a priorizar e l modelo de l a coercidn y a pasar por a l t o el

consenso y las funciones integradoras del sistema. Su estrategia

reduce e l Estado a instrumento de represibn, olvidando s u funcihn

de organizador en torno a una concepcidn del mundo que impregna y

da sentido a la vida cotidiana de todas las clases. El

reduccionismo como razonamiento apriorist ico, encuentra s u

principal exponente en e l reduccionismo economista que origina

varios reduccionismos en el campo de l a p o l i t i c a : La reduccibn de

la explotacian capital ista a l terreno de lo econbmico. La

reduccidn del socialismo a social izacibn de l a economia,

olvidando l a s o c i a l i z a c i d n de l a p o l i t i c a . La reduccibn del

sujeto revolucionario a aquel que ocupe un determinado lugar en

l a economia (generando l o que P ~ l l i c a n i llama l a e s t r a t e g i a de

l a s t r e s minorias: l a minorla de l a c l a s e obrera en el seno d e l a

sociedad, l a minoria del partido al interior de la clase obrera,

y l a minoria de los revolucionarios profesionales -el comite

central o el secretario general-- a l seno d e l partido).

Man habla reaccionado contra este reduccionismo al definir el

concepto d e modo d e produccian como forma de vida, es decir, en

terminos no exclusivamente econ6micos: "Este modo de produccibn

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no debe considerarse solamente en cuanto es la reproduccibn de la

existencia fisica de los individuos. Es ya, mas bien, un

.determinado modo de vida de 10s; mismo^".^" For su parte, Gramsci

reacciona ampliando la concepcian de la pol3tica y como

resultante 5e amplia toda la gama de conceptos vinculados

organicamente: Estado (sociedad politica + sociedad civil);

revolucibn (guerra de movimiento + guerra de posicihn). El

politico italiano reformula el paradigma existente, y de la misma

manera que lo hace Marx con Hegel y Feuerbach, en una labor

critica y apropiadora profundiza una serie de conceptos ya

presentes en otros autores dotAndolo5 de nuevo5 significados. A

tal punto, que el reducido concepto original pareciera no tener

lazo5 de parentesco can el concepto ampliado resultante.

La concepcibn de Gramsci solre el Estado como un todo social

(sociedad politica + sociedad civil), nos esta indicando que el

poder no esta instalado exclusivamente en el aparato

gubernamental, o en una sola insl:ituci&n, sino que se encuentra

diseminado en la sociedad. Que el poder es una re1 acian de

fuerzas sociales que debe ser modificada y no una institucian que

debe ser "tomada por asalto", es lo que parece sugerir Gramsci en

sus dos modelos: Oriente y Occidente. En el primero, la sociedad

politica es preponderante, la sociedad civil primitiva, la

estrategia de maniobra y el ritmo d e rapidez. En el segundo, la

sociedad politica se presenta equilibrada respecto a la sociedad

civil, la sociedad civil desarrollada, la estrategia es de

posicibn y el ritmo de demora.lS

10

al demostrar l a e x i s t e n c i a de antinomias en l a

obra de Gramsci, c l v i d a mencionar la existencia de antinomias e n

el marxismo y l a s causas que las originan. Pasa por a l t o e l hecho

de que la5 nociones distintas del c-zncepto d e Estado en l o s

Cuadernos denotan un deslizamiento tendiente a dila5ar el

reducido concepto de Estado en e l marxismo. Sin embargoy t iene

razhn al señalar la existencia de tres conceptos de Estado en

Gramsci :

1 ) El concepto que incluye, abarca, a l a sociedad c i v i l , es

decir, e l Estado no 5610 como gobierno sino como sociedad

p o l i t i c a + sociedad c i v i l : "La nocihn general del Estado incluye

elementos que necesitan ser r-ef eridos a l a nocibn de sociedad

c i v i l , en el sentida en que se puede decir que e l Estado es igual

a l a sociedad polftica + sociedad civi lyen otras palabras,

hegemonja acorazada de coercibn. ''is

2 ) El concepto de Estado opuesto, d i s t i n t o , a l concepto de

sociedad c i v i l , e s d e c i r , como gobierno, como sociedad p o l i t i c a

exclusivamente: "En Oriente el Estado 1 0 era todo, l a sociedad

c i v i l era primitiva y gelatinosa; en Occidente existla una

relacibn apropiada entre Estado y sociedad c i v i l , y cuando e l

Estado temblaba, l a robusta estructura d e l a sociedad c i v i l s e

manifestaba en el acto. E l Estado s a l o era una trinchera

avanzada, t r a s d e l a cual habfa un poderoso sistema d e fortalezas

y casamatas.

31 El concepto de Estado como identic0 al de sociedad c i v i l , o

como sociedad c i v i l exclusivamente: "Las ideas del movimiento de

11

libre comercio 5e basan en un error tedrico cuya origen practico

no es dificil de identificar; se basan en una diferenciacian

entre sociedad politica y sociedad civil, que es interpretada y

presentada como distincidn organica, cuando de hecho es

simplemente metodoldgica. Asi, 5e afirma que la actividad

,

econdmica pertenece a la sociedad civi 1, y que el Estada no debe

intervenir para regularla. Pero en la medida en que, en la

realidad actual, la sociedad civil y el estado son uno y lo

mismo, debe quedar claro que el laissez-faire tambien es una

forma de 'regulacidn' del estado, introducida y mantenida por

medios legislativos y coercitivoci."17

Sin embarga, Anderson no toma en cuenta los ajustes realizados

sobre un concepto en su primera versidn reducido, y en la

segunda, ampliado. Los tedricos innovadores han enfrentado la

dificultad de trabajar dentro de los margenes de un vocabulario

viejo en direccidn a nuevas ideas. Marx ided sus innovaciones en

el lenguaje de Hegel, y Gramsci. en el de Maquiavelo y Croce. De

ahi que, preso de la vieja terminologia, primero define el Estado

como gobierno exclusivamente y asi, paulatinamente, hasta

incorporar en esta definician el concepto d e sociedad civil.

En los Cuadernos de la carcel , el anal i 5 i 5 d e la dial Pctica

voluntad-circunstancias constituye una preocupacidn recurrente

vista a la luz de diferentes conceptos: lo organic0 y lo

ocasional, guerra de posiciones, hegemonia, bloque histbrico,

catarsis. Una vez que ha planteado como el problema fundamental

del materialismo histdrico l.a unidad de estructura y

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superestructura, Gramsci recomienda no confundir lo permanente (u

organic0 que permite enjuiciar las c l a s e s s o c i a l e s ) , con l o

ocasional (o coyuntural, que permite enjuiciar l o s grupos y

personalidades p o l l t i c a s y constituye el terreno de

enfrentamiento d e las fuerzas polfticas antagbnicas en lucha por

conservar o modificar las contradicciones insanables reveladas en

la estructura). De e s t a manera, e v i t a exponer l a s causas remotas

como s i fuesen las inmediatas o a+irmar que l a s causas inmediatas

son l a 5 finicas determinantes. E incurrir en un exceso de

economismo que sobrevalora las causas mec&nicas c3 en un exceso de

ideologismo que sobrevalora el elemento voluntario e

individua1.l- Dicho razonamiento involucra una c r i t i c a t a n t o a l a

estrategia que confila ciegamente en la virtud reyuladora de l a

-fuerza de l a s armas, como a l a e s t r a t e g i a que se funda en l a

conviccibn de la existencia d e h y e s o b j e t i v a s en e l proceso d e

desarrollo histdrico sirnilares a las leyes naturales (tendencia

que procrea la creencia de un ifinalismo f a t a l i s t a semejante al

r e l i g i o s o y concibe toda iniciativa voluntaria como perjudicia.1,

e l llamado miedo a l o s compromisos). Ambas e s t r a t e g i a s no toman

en cuenta que l o s hechos ideolbgicos siempre estan en retrasa en

relacidn a l o s fenbmenos econdmicos d e masa y que en c i e r t a s

coyunturas e l impulso automAtica debida al factor econbmico es

empantanado y despedazado tambiCn momentdneamente por elementos

ideo1 agicos tradicionales. x 7 De ahi que se afirme que es posible

excluir que l a s c r i s i s e c o n h t i c a s produzcan por si mismas

acontecimientos fundamentales,

13

Si Marx produce s u mayor obra tedrica reflexionando sobre

la derrota de l a revolucifin d e 1848 en Europa. Gramsci intenta

construir una teorla del cambio social aplicada a los paises de

capitalismo avanzado (Occidente) meditando sobre las causas del

fracaso de una revolucibn que parecfa inminente tanto en I t a l i a

como en otros paises europeos. Rmbos comparten l a concepcibn

ampliada de l a revolucibn como un proceso d i a l e c t i c 0 de

desarrollo histdrico y no como un acto taumatc2ryico.zo E l proceso

orgAnico precede al coyuntural y una guerra c i v i l c o n s t i t u y e tan

s a l o l a punta del "iceberg" cuya base oculta un largo per3odo de

transformacidn de la conciencia, una hegemonia ideoldgica fundada

en la direccibn moral e intelectual sobre la sociedad que

permita un gradual cambio en la relacidn de fuerzas. E l poder no

s e l o c a l i z a de manera exclusiva en una institucidn que deba ser

tomada por asalto, implica una relacidn de fuerzas que debe

modificarse erosionando la legitimidad del orden p o l l t i c o , s o c i a l

y moral que e l pueblo ha aceptado. La conquista del poder

pol 1 t i co es el resultado de una s e r i e de c r i s i s en 1 as esferas de

10 econdmico, lo ideolbgico, lo pol l t ico, que llevaron a l a

pirdida del consenso. La fortaleza de l a burguesla consiste en

que (a diferencia de l a s c l a s e s dominantes precedentes q u e eran

cerradas, y no permitlan un pasaje organic0 de otras c lases a l a

suya, que n o alargaban l a propia esfera de clase, tbcníca e

ideoldgicamente), se presenta cnmo "un organismo en continuo

movimiento, capaz de absorver a toda l a sociedad, asimi landola a

s u nivel cultural y econdmico"

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NOTAS 1.- Gramsci, A., Scritti Giovaniu, 1914-1918, (~89s. 86-87), Ed, Einaudi, Italia, 1975,

2.- Gramsci, A. , Quaderni del carcereL (1588), 4 vols. edicibn critica a cargo de Valentino Gerratana, Ed. Einaudi, Italia, 1977. En español: Notas sobre MaQuiavelo. sobre politica y sobre el Estado moderno, (751, Ed. Juan Fablos, Mexico, 1975.

3.- Gramsci. A . , L'Urdine NUOVO, 1919-1920, Ed Einaudi, Turln, Italia, 1975, (135-140). Articulo no firmado. atribuido a Gramsci por Riuniti. En torno a este articulo, BOCJJS desarro11 a 5u excelente libro: Carl Boggs, The two revolutions. Antonio Gramsci and the Dilemmas of Western Marxism, Soth and Press, Boston, Ma., 1984 . 4.- Gramsci. A-, Sobre el fascismo, ~116-119), Ed. Era, Mexico, 1979.

5.- Gramsci. A- , Quaderni del cal-cere (455-456) , subrayados m2os. El texto de Marx dice: "Ninguna -formacibn social desaparece antes de que se desarrollen todas las fuerzas productivas que caben dentro de ella y jamas aparecen nuevas y mAs altas relaciones de produccibn antes de que las condiciones materiales para su existencia hayan madurado en el seno de la propia sociedad antigua. Por esto, la humanidad se propone hnicamente los objetivos que puede alcanzar, PUES, bien miradas las cosas, vemos siempre que estos objetivos -410 nacen cuando ya 5e dan o, por 1 o menos, se estan gestando, la.; condiciones materiales para 5u realizacidn". Marx,"Fr&loqo a la Critica de la economia politica", Tomo 1, 13431, Obras escogidas de Marx y Engels en dos tomos, Ed, Progreso, Mosct~, 1971.

6.- En el mismo sentido empleada por Kant -en relacian a la astronornia-, cuando define como antinomias de la razbn pura a cuatro pares de proposiciones contradictorias entre si: 1 ) El mundo esta limitado en el tiempo y en el espacio - El mundo es ilimitado en el tiempo y en el espacio. 2 ) En e1 mundo tad0 es simple - En el mundo todo es compuesto. 3) El devenir es libre- El devenir es necesario. 4) Existe un ser necesario - No existe nada de necesario.

"Antinomia", Enciclopedia Garzanti di filosofia. Ed. Garzanti, Milan, 1981, Italia.

7.- Gramsci, Antonio. Q. (1576). Maq. (62-65).

8.-Gramsci, El. Maq. (34) .

9.- Gramsci. 62 (1063) .

15

10.- Volpe, Galvano della. “El principio di identita tautoeterologica e la dialettica scietifica”, en: “Logica come scienza positiva”, Opere, val. 4 , a cargo de Iynazio Ambrt>giog Ed. Riuniti, Roma, 1973.

11.- Fellicani, Michele. Della rivoluzione a1 riformismo, Ed. Sugar, Milan, Italia, 1972.

12.- Marx y Engels, La idealonla FLlemana, cap. I , Feuerbach, (191, Ed. Pueblos Unidos, Argentina, 1973.

13.- Gramsci, Q . (865-866) . 14. Anderson, Ferry. Las antinomias de Antonio Gramsci, ed. Fontamara, Barcelona, España, 19’81.

15.- Gramsci, G!. (762-7641, Maq. 11651, Cuaderno 6, 1930-1932.

16.- Gramsci, Q. (865-8661, Maq. (1651, Cuaderno 7 , 1930-1931.

17.- Gramsci , Q. (1589-1590), Maq. (541, Cuaderno 13, 1932-1934.

18.- Gramsci, G!. (456), Maq. (67-69) . 19. - Gramsci a Q. (1612-1613).

20.- Gramsci, “Lo svilupo della rivoluziane”, O.N. 13/IX, 1919, (pzlq. 301.

21.- Gramsci, (2. (9371.