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PSYKHE 2007. Vol,16. N" 1.3-14 Copyriglu 2007 by Psyklic ISSN 0717-0297 Mirando al Futuro: Desafios y Oportunidades Para el Desarrollo de los Adolescentes en Chile Towards the Future: Challenges and Opportunities for Adolescent Development in Chile M. Loreto Martinez Guzman Pontificia Universidad Catolica de Chile El dcsarrollo adolescentc depcnde de las fortalczas y vulncrabilidades de cada adolcsccntc, como tambicn dc los contcxtos dc vida en quc cllos sc dcscnvuclven. Estc articulo amplia cl foco dc analisis dcsdc lo individual a la comprension dc las caractcristicas de los eontextos dc vida de los adolescentes, y dc las oportunidades que estos ofreccn para dcsarrollar compctcncias y habilidadcs. Analiza dos desafios para la formulacion de politicas (incquidad social, fortalccimicnto del capital social) y propone rcemplazar cl enfasis en las conductas dc ricsgo por la promocion dc la competencia en ellos. Enfatiza la importancia dc gcncrar indicadorcs positivos del bienestar del adolescentc quc pcrmitan cvaluar la caiidad del desarrollo a futuro y discutc propucstas dc accion enmarcadas en un enfoque comunitario del desarrollo juvenil. Palabras Clave: adolescencia. desarrollo juvenil. compelencia, contexlo evohilivo. Adolescent development results not only from the strengths and vulnerabilities of the individual adolescent but from the opportunities available in the contexts where adolescents interact daily. This article broadens the understanding of adolescent development by focusing on the role and opportunities that daily life contexts afford to promote eompctcneics and skills in adolescents. The article addresses two challenges for social policy, namely social inequality and the enhancement of social eapital. It argues for a positive view of adoleseenee that focuses on the promotion of competence rather than at-risk behaviors. The need to develop positive indicators of adolescent development and well-being is stressed and guidelines for aetion are discussed. Keywords: adolescence, youth development, competence, developmental context. Como etapa vital, la adolescencia plantea nue- vos desafios para el desarrollo humano y la promo- cion del bienestar. Tanto las tareas evolutivas es- peradas, eomo el proeeso de apoyo para el desa- rrollo positivo de los adoleseentes deben eompren- derse en el eontexto soeioeultural en que estos se desarrollan. Importantes eambios sociales y eco- nomicos en el mundo han prolongado la adoles- ceneia (Amett, 2000) y cambiado el perfil de las tareas evolutivas de esta etapa, planteando desa- M. Loreto Martinez G, Eseuela de Psieologia, Pontificia Universidad Catolica dc Chile. La eorrespondencia relacionada con estc articulo dcbc scr cnviada a M. Loreto Martinez G, Eseuela de Psieologia, Pontifieia Universidad Catolica dc Chile, Avenida Vicufia Mackenna 4860, Maeul, Santiago, Chile. E-mail: [email protected] La prcparaeion de este artieulo fuc posible graeias al financiamicnto del Fondo Nacional de Desarrollo Cienti- fieo y Tecnologico (FONDECYT) a travcs del Proyeeto N° 1010934 "Mirando haeia el futuro: Un estudio longitudinal de los faetores que promucvcn cl dcsarrollo y bienestar en los jovenes". fios para la investigacion y el disefio de politieas dirigidas a los jovenes. Durante los ultimos arios ha aumentado el in- teres por identificar las condiciones que favore- een el desarrollo saludable de los adoleseentes (Carnegie Council on Adolescent Development, 1989; Moore & Halle, 2000; Roth & Brooks-Gunn, 2000) y eomo faeilitar este proeeso a traves de la formulacion de politieas soeiales y programas de interveneion. El enfasis en la promocion de eom- peteneias para la adaptaeion hace evidente que aiin los adoleseentes que crezean "sin problemas" pueden no estar bien preparados para enfrentar los desafios del futuro. Esto es, euando enfrenten las mtitltiples opeiones para la toma de deeisiones en ambitos de eleccion de carrera, transieion al trabajo, sustento eeonomico y formaeion de su familia, entre otras. En tiempos aetuales, la indivi- dualizaeion de la responsabilidad por el bienestar (Programa de las Naciones Unidas para el Desa- rrollo [PNUD], 2002,2003) aumenta las libertades para la toma de deeisiones, pero tambien aumenta los riesgos para el/la adolescente (Bendit, 2000).

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PSYKHE2007. Vol,16. N" 1.3-14

Copyriglu 2007 by PsyklicISSN 0717-0297

Mirando al Futuro: Desafios y Oportunidades Para el Desarrollode los Adolescentes en Chile

Towards the Future: Challenges and Opportunities for AdolescentDevelopment in Chile

M. Loreto Martinez GuzmanPontificia Universidad Catolica de Chile

El dcsarrollo adolescentc depcnde de las fortalczas y vulncrabilidades de cada adolcsccntc, como tambicn dc loscontcxtos dc vida en quc cllos sc dcscnvuclven. Estc articulo amplia cl foco dc analisis dcsdc lo individual a lacomprension dc las caractcristicas de los eontextos dc vida de los adolescentes, y dc las oportunidades que estosofreccn para dcsarrollar compctcncias y habilidadcs. Analiza dos desafios para la formulacion de politicas (incquidadsocial, fortalccimicnto del capital social) y propone rcemplazar cl enfasis en las conductas dc ricsgo por lapromocion dc la competencia en ellos. Enfatiza la importancia dc gcncrar indicadorcs positivos del bienestar deladolescentc quc pcrmitan cvaluar la caiidad del desarrollo a futuro y discutc propucstas dc accion enmarcadas enun enfoque comunitario del desarrollo juvenil.

Palabras Clave: adolescencia. desarrollo juvenil. compelencia, contexlo evohilivo.

Adolescent development results not only from the strengths and vulnerabilities of the individual adolescent butfrom the opportunities available in the contexts where adolescents interact daily. This article broadens theunderstanding of adolescent development by focusing on the role and opportunities that daily life contexts affordto promote eompctcneics and skills in adolescents. The article addresses two challenges for social policy, namelysocial inequality and the enhancement of social eapital. It argues for a positive view of adoleseenee that focuseson the promotion of competence rather than at-risk behaviors. The need to develop positive indicators ofadolescent development and well-being is stressed and guidelines for aetion are discussed.

Keywords: adolescence, youth development, competence, developmental context.

Como etapa vital, la adolescencia plantea nue-vos desafios para el desarrollo humano y la promo-cion del bienestar. Tanto las tareas evolutivas es-peradas, eomo el proeeso de apoyo para el desa-rrollo positivo de los adoleseentes deben eompren-derse en el eontexto soeioeultural en que estos sedesarrollan. Importantes eambios sociales y eco-nomicos en el mundo han prolongado la adoles-ceneia (Amett, 2000) y cambiado el perfil de lastareas evolutivas de esta etapa, planteando desa-

M. Loreto Martinez G, Eseuela de Psieologia, PontificiaUniversidad Catolica dc Chile.La eorrespondencia relacionada con estc articulo dcbc scrcnviada a M. Loreto Martinez G, Eseuela de Psieologia,Pontifieia Universidad Catolica dc Chile, Avenida VicufiaMackenna 4860, Maeul, Santiago, Chile. E-mail:[email protected] prcparaeion de este artieulo fuc posible graeias alfinanciamicnto del Fondo Nacional de Desarrollo Cienti-fieo y Tecnologico (FONDECYT) a travcs del ProyeetoN° 1010934 "Mirando haeia el futuro: Un estudiolongitudinal de los faetores que promucvcn cl dcsarrollo ybienestar en los jovenes".

fios para la investigacion y el disefio de politieasdirigidas a los jovenes.

Durante los ultimos arios ha aumentado el in-teres por identificar las condiciones que favore-een el desarrollo saludable de los adoleseentes(Carnegie Council on Adolescent Development,1989; Moore & Halle, 2000; Roth & Brooks-Gunn,2000) y eomo faeilitar este proeeso a traves de laformulacion de politieas soeiales y programas deinterveneion. El enfasis en la promocion de eom-peteneias para la adaptaeion hace evidente queaiin los adoleseentes que crezean "sin problemas"pueden no estar bien preparados para enfrentarlos desafios del futuro. Esto es, euando enfrentenlas mtitltiples opeiones para la toma de deeisionesen ambitos de eleccion de carrera, transieion altrabajo, sustento eeonomico y formaeion de sufamilia, entre otras. En tiempos aetuales, la indivi-dualizaeion de la responsabilidad por el bienestar(Programa de las Naciones Unidas para el Desa-rrollo [PNUD], 2002,2003) aumenta las libertadespara la toma de deeisiones, pero tambien aumentalos riesgos para el/la adolescente (Bendit, 2000).

MARTINEZ

El desarrollo positivo incluye la promocion decomportamientos adaptativos y competencias, eomotambien la reduccion de eomportamientos y actitu-des negativas. Este proeeso puede favoreeerse atraves de las oportunidades y los sistemas de apo-yo social que existen en las familias, colegios, gru-pos de pares, lugares de trabajo, organizaeionescomunitarias, y otros espacios de interaccion. Estearticulo presenta un mareo eoneeptual y empiricopara la comprension y promoeion del desarrollo po-sitivo de los adoleseentes, que enfatiza la importan-cia del contexto social e identifica faetores a niveldel individuo, de la familia, el colegio, la eomunidad,y la cultura. Esta diseusion puede estimular el desa-rrollo de investigacion, eomo tambien la formulacionde politicas y programas para promover el desarro-llo de los adolescentes.

^Por que Invertir en el Desarrollode los Adolescentes?

El paso de la ninez a la adolescencia es una delas transiciones evolutivas mas traseendentales deleielo vital (Petersen, Leffert, Graham, Alwin & Ding,1997). Los cambios evolutivos (e.g., cambios fisicosde la pubertad, expansion del pensamiento, crecien-te eapacidad de exploracion y de auto-deseubrimien-to, logro de la autonomia) eoneetan a los ninos eonsus si-mismos adultos transformados en el pianofisieo, cognitivo y social (Graber, Brooks-Gunn &Petersen, 1996). Socialmente, eada transicion requie-re un cierto cambio de rol, en como los adoleseentesse ven a si-mismos (e.g., su autoconcepto, su iden-tidad), como ven al mundo (e.g., sus actitudes, susvalores) y como son vistos por otras personas.

Por lo anterior, la adolescencia es una etapa dehacer opciones y de tomar decisiones (Erikson, 1968)y conlleva tanto oportunidades (e.g., aereeentamien-to de habilidades, asuncion de nuevos roles en eltrabajo, posicion de liderazgo en el liceo) eomo ries-gos (e.g., aeeidentes, embarazo no planificado, con-ductas antisociales, conflietos con la ley). Los ries-gos y oportunidades no surgen al azar, sino de lasexperiencias previas en la historia de vida de losadolescentes, y tambien del eielo evolutivo de susrespectivas familias. Los adoleseentes de seetoreseeonomicamente mas aventajados reciben mayorpatrocinio para su desarrollo y mas apoyo socialque sus pares de sectores mas pobres (Furstenberg,2001). Las ventajas y desventajas que los adoles-eentes y sus familias acumulan a traves del tiempoles aseguran un eierto grado de continuidad en su

desarrollo personal (Furstenberg, Cook, Eeeles, Elder&Sameroff,1999).

Muchos jovenes pueden mostrar indieadorestemporales de adaptacion pero, dependiendo de suscondiciones de vida, no podran mantener la adapta-cion en el tiempo, euando cambien las demandas am-bientales (e.g., egreso de ensenanza media, ingreso altrabajo). Dada la precariedad de las eireunstanciassociales y familiares de muehos preadolescentes desectores eeonomicamente desventajados, se haeeimpreseindible seguir sus pasos, conocer los riesgosque enfrentan y desarrollar programas que apoyen,desde la temprana hasta la tardia adolescencia, losmomentos eritieos en la toma de deeisiones (e.g., laeleccion de carrera, la mantencion de un estilo de vidasaludable, el ingreso al trabajo, formaeion de una fa-milia, todas tareas que los eoneetan con la adultez).Los estudios de diseno longitudinal permiten doeu-mentar el proceso de cambio a traves del tiempo tantoen los adolescentes como en sus eontextos de vida,identifiear condiciones protectoras del desarrollo, lasestrategias que padres y adoleseentes utilizan paramantener los resultados positivos, y ante que situa-eiones emergen.

Tareas yTrayectorias Evolutivas:Oportunidad y Riesgo

Las tareas evolutivas de la adoleseeneia, prinei-palmente la eonfiguracion de la identidad, el logro deautonomia, y la intimidad, incrementan los ambitos deeleccion y deeision de los adoleseentes. Asi apren-den a auto-dirigirse y a regular su comportamientohacia la eonseeueion de metas signifieativas.

A medida que crecen, los adoleseentes son masaetivos en seleccionar los ambientes en los quepartieipan, y las deeisiones que toman respeetode su comportamiento y sus metas a futuro. Laseleeeiones que haeen en estos ambitos tienen eon-secueneias para su vida posterior. Tales eleccio-nes o deeisiones los comprometen eon eiertoseursos de aecion y afectan los ambientes soeialesen los cuales los adolescentes se insertan (e.g., atraves de las interacciones que mantienen en es-tos eontextos), y las infiueneias que reeiben delos pares y adultos eon quienes interactuan enestos eontextos (Croekett & Crouter, 1995). Laselecciones o deeisiones a corto plazo de un ado-lescente pueden evolucionar hacia patrones masestables de eomportamiento o estilos de vida, losque a su vez, infiuiran en la caiidad de su desarro-llo futuro.

DESAFIOS Y OPORTUNIDADES PARA EL DESARROLLO ADOLESCENTE

Como periodo de eambio, la adoleseeneia ilustratanto procesos de plastieidad como de consolida-eion de ciertos patrones de comportamiento. Loscambios biologicos, cognitivos y sociales eonlle-van oportunidades para el erecimiento, tales comonuevas relaciones soeiales, nuevos intereses y nue-vos comportamientos. Al mismo tiempo, las disposi-ciones conductuales que el adoleseente trae desdela niiiez pueden eonsolidarse en patrones durade-ros de comportamiento a traves de dos procesosque favorecen la eontinuidad del desarrollo, la se-leceion de ambientes y la produccion de ambientes(Crockett & Crouter, 1995). En el primer caso, la ma-yor autonomia permite al adolescente seleccionarcompania, amistades y ambientes sociales compati-bles eon sus propios intereses e inclinaciones. En elsegundo, debido a su creeiente madurez fisica, so-cial y cognitiva, los adolescentes tienen mayor ca-pacidad de infiuir en los ambientes en los cualesinteracttian (e.g., su grupo de pares, su curso, susproyectos).

Las decisiones que toma el adolescente van amostrar eierta continuidad y van a fijar los parametrosde su desarrollo futuro. La aeumulaeion de ciertasdecisiones (e.g., practicar un deporte, aprender unahabilidad) hace que ciertos resultados evolutivossean menos probables (e.g., aburrimiento, subir depeso). Pero tambien, los adoleseentes pueden tomardecisiones que ponen en riesgo su vida. Este riesgoparece mayor en la aetualidad con la creeientecomplejizaeion de la vida y el aumento del rango deopciones de deeision (Bendit, 2000). Al mismo tiem-po, la desartieulaeion de los sistemas naturales deapoyo social (e.g., la familia, el barrio) ofi ece menorproteccion frente a las conseeueneias negativas dedecisiones.

Tanto los eambios normativos (e.g., pubertad),como los no-normativos (e.g., accidente, muerte deun progenitor), e incluso eventos de azar puedenprecipitar momentos de eambio en la adoleseeneia.Para muehos jovenes, la adoleseeneia ofreee la opor-tunidad de eneaminarse haeia una vida competentey productiva. Para otros, representa la ultima opor-tunidad de prevenir un futuro negativo (CamegieCouneil on Adoleseent Development, 1989). En am-bos casos, los programas de promoeion de la saludy bienestar que fortalecen las disposicionesconductuales positivas de los adoleseentes tienenbenefieios duraderos (Maddaleno, Morello & Infan-te-Espinola, 2003; Resniek, 2000).

La Importancia de los Contextos deDesarrollo

La adolescencia esta moldeada por el contextosociocultural en que se desarrollan los jovenes. Engran medida, las tareas y las experieneias refiejan laestructuracion cultural que haee la sociedad de laadolescencia como una etapa preparatoria de laadultez. Las habilidades que eomo sociedad espera-mos que los adolescentes dominen, las opciones odecisiones que esperamos que tomen y los entomosen que se socializan, estan preseritos por las institu-ciones soeiales y por las expectativas culturales com-partidas respecto de cuales son los requerimientosde exito en la edad adulta (Crockett & Crouter, 1995).Los adolescentes perciben las expeetativas socialesy se proponen metas y tareas basadas en estas; confrecuencia sus metas personales refiejan tareas evo-lutivas definidas culturalmente (Nurmi, 1989).

El bienestar de los adoleseentes no es resultadot tnicamente de las fortalezas y vulnerabilidades decada adolescente, sino tambien de las oportunida-des y la caiidad de las experieneias que tienen en losentomos (e.g., familia, colegio, barrio, programas ogrupos juveniles) en que interaetuan a diario. Estoscontextos ofreeen oportunidades y reeursos quecontribuyen al desarrollo. Por ejemplo, a traves de laparticipacion en el centro de alumnos un adolescen-te puede acceder a otras posiciones de liderazgo,que no solo fortaleeeran sus habilidades sociales sino que, en el contacto con otros grupos y personas,pueden abrir futuras oportunidades voeacionales olaborales.

Siguiendo los postulados de Bronfenbrenner, seha reeonocido que el desarrollo humano esta moldea-do por el eontexto (Bronfenbrenner & Morris, 1998;Lemer et al., 1996). El desarrollo oeurre a medida quelos adoleseentes interactuan en los diferentesentomos de su mundo social (e.g., pares, familias,eomunidad). El desarrollo se produee a traves de losproeesos proximos que ocurren dentro de los contex-tos sociales inmediatos (Bronfenbrenner & Morris,1998), procesos que tambien reeiben infiueneias deotros entomos mas distantes (e.g., trabajo de los pa-dres) de la vida eotidiana de los adoleseentes.

Si bien la importaneia de diferentes niveles de laecologia social para el desarrollo de los adoleseen-tes ha sido enfatizada por varios investigadores(Blyth & Leffert, 1995; Lemer & Galambos, 1998), surol en la promoeion del bienestar y la salud del ado-leseente aiJn no esta bien estudiado. Los roles yrelaciones que se establecen en estos entomos for-

MARTINEZ

man la base de las interacciones diarias del adoles-cente eon otros signifieativos en su ambiente so-cial. Posibles mecanismos, a traves de los cuales lasexperieneias en estos eontextos promueven el desa-rrollo, son infiuyendo en como los adolescentes sesienten respeeto de si mismos, afeetando las deci-siones que toman (lo que a su vez puede afectar susopciones a futuro); afectando la conducta de lospadres; y/o moldeando la estruetura de oportunida-des disponible para ellos y/o sus familias.

Se requieren estudios empirieos que examinen lasoportunidades que ofreeen los entomos y las institu-ciones, y las maneras en las euales los adolescentes seeoneetan a estos ambientes sociales para eomprenderde que manera influyen sobre sus competencias y ha-bilidades. Este conocimiento informara el diseiio depoliticas sociales y de intervenciones dirigidas a forta-lecer las oportunidades en entomos eotidianos (e.g.,eolegio) para que los jovenes eontribuyan a sus comu-nidades y al pais, particularmente en jovenes de seeto-res soeioeeonomicos menos aventajados.

Dos desafios que enfrenta la formulacion de po-litieas y el diseiio de programas para los adoleseen-tes son atender a la heterogeneidad de realidadesjuveniles (e.g., por eondiciones de genero, etnia ynivel socioeconomico), como tambien fortaleeer eleapital social para la integracion de diversos gruposde jovenes.

Inequidad de Oportunidades

Como resultado de politicas sociales dirigidasa superar la pobreza y reformar el sistema eduea-eional (Cox, 1998), ha aumentado el aeceso a la edu-cacion, los arios de permanencia en el sistema es-eolar, las tasas de matrieula y la asistencia a la es-cuela (Ministerio de Planifieacion y CooperaeionSocial [MIDEPLAN], 2003). La cobertura del siste-ma eseolar aumento un 12.3%entre 1990y2003enla ensefianza media aicanzando un 92.6% en el gru-po de 14-17 aiios (MIDEPLAN, 2003). El aeceso aeducaeion superior aleanzo a 33% de los jovenesentre 19 y 24 anos (Instituto Nacional de la Juven-tud [INJUV], 2004). El nivel edueacional de los ado-lescentes y adultos jovenes (15-24 aiios) aumentode 10.2 afios en 1990 a 11.2 afios en 2004, y estoslogros son mas signifieativos para los jovenes maspobres (en promedio tienen 1.5 afios de educacionmas que sus padres y 2.5 afios mas que sus abue-los) y de seetores rurales (en promedio tienen 1.6aiios de educacion mas que sus padres y 2.8 anosmas que sus abuelos) (MIDEPLAN, 2003).

Otros programas gubemamentales (e.g., ChileJoven, FOSIS, MECE) incluyeron entre sus metas lapartieipaeion eomo uno de los mecanismos para de-sarrollar habilidades y competencias, y asi fortale-eer la inelusion soeial de jovenes de sectoresdesventajados eeonomieamente. Los indicadores dedesarrollo humano en salud, edueacion y expectati-vas de vida se eneuentran dentro de los mejores deLatinoameriea (Raezynski, 2000), y los indicadoresmaeroeeonomicos del pais describen un eseenariooptimista para el futuro desarrollo de los joveneschilenos (MIDEPLAN, 1999).

Si bien los ideales demoeratieos promueven laigualdad de oportunidades, el 19% de la poblaeionadoleseente que vive en pobreza, y el 6.6% que viveen extrema pobreza (MIDEPLAN, 2003) enfrentanlimitantes -sociales, economicas y culturales, tantoa nivel individual como coleetivo- para su optimocrecimiento y desarrollo (INJUV, 1999). A nivelinstitueional, el progreso de los jovenes en el siste-ma educacional reproduee la inequidad del sistemasocial y las deficiencias en la ealidad de la educa-cion (Hopenhayn, 2004).

A medida que aumenta la edad los resultados edu-eaeionales decreeen (Mufioz, 2000). Los estudiantesno solo experimentan una alta tasa de repeticion decurso, sino que tambien arrastran deficieneias eriti-eas en su aprendizaje desde la ensefianza primariaque limitan las trayeetorias laborales y de vida de losjovenes (Hopenhayn, 2004). Adicionalmente, en elaeceso a teenologia y el dominio de habilidadescomputacionales basicas se observan ampiias dife-rencias por nivel socioeconomico (INJUV, 2003).

Tambien existen menos oportunidades para jo-venes de seetores pobres, rurales y de hogares cu-yos jefes de familia son mujeres. Coneordante con eleseenario anterior, los jovenes perciben que el siste-ma educacional es competitivo, poco facilitador desu desarrollo, y que les entrega una formacion queno les permite desenvoiverse adecuadamente en elmundo del trabajo (INJUV, 1999).

A nivel familiar, el bajo ingreso eeonomieo y laseondiciones asociadas a pobreza (e.g., mala ealidadde vivienda, haeinamiento, desempleo) eomo tam-bien faetores del contexto eseolar (e.g., baja caiidaddel estableeimiento edueacional) afectan negativa-mente los resultados educacionales de los jovenes(Mufioz, 2000). El nivel edueaeional de los padres, elvalor que estos asignan a la edueacion y las aspira-eiones y practicas parentales tambien infiuyen enlas deeisiones edueacionales de los hijos (Araneibia,1999; Mufioz, 2000). En este contexto, la percepcion

DESAFIOS Y OPORTUNIDADES PARA EL DESARROLLO ADOLESCENTE

de falta de posibilidades para desarrollar planes afuturo es real para ciertos grupos de jovenes, parti-cularmente aquellos con menos educaeion formal ycon responsabilidades familiares (INJUV, 1999).

En otra tarea evolutiva importante como es latransicion al trabajo operan fuertes procesos de se-leecion. El criterio de seleecion que impone la edu-cacion formal deja a muchos jovenes fuera de losmejores trabajos (e.g., con contrato indefinido), en-grosando las filas del trabajo desregulado o por cuen-ta propia (Femandez, 2004). Las eondiciones de ines-tabilidad por auseneia de contrato, trabajos infor-males e inestables afeetan primordialmente a los jo-venes menores de 20 afios (INJUV, 2004).

Se observa tambien una concentracion del em-pleo juvenil en seetores de baja productividad y lasmujeres muestran condiciones mas desfavorablesde insercion al trabajo que sus pares masculinos(Hopenhayn, 2004). Lo anterior contrasta con elmayor logro educacional y las crecientes aspiracio-nes de las jovenes. Un poreentaje mayor (65.9%) demujeres jovenes aspira a obtener un grado universi-tario comparado con sus pares hombres (56.9%), ci-fras que sefialan cambio en las expeetativas asocia-das al rol en relacion a generaciones anteriores (Ser-vicio Nacional de la Mujer [SERNAM], 2002) y crea-ran tensiones entre aspiraeiones y oportunidadesque afectaran las trayectorias de vida de estas jove-nes, no solo en el ambito edueacional y laboral, sinoen la entrada a otros roles soeiales (e.g., madre, es-posa).

Las difereneias por genero y nivel socioecono-mico requieren ser examinadas en detalle para gene-rar politieas sociales que respondan a las necesida-des reales de diferentes gmpos de jovenes. Por ejem-plo, el inicio de la patemidad antes de los 20 anos esun factor que atenta contra la educacion completade un porcentaje sustantivo de jovenes de nivelsoeioeconomico bajo. Altemativamente, la mayoriade los jovenes de nivel socioeconomico alto deeideinieiar la patemidad mas tarde (INJUV, 1999). Estasobservaciones muestran diferencias culturales pornivel socioeeonomieo, y su ingerencia en las deci-siones de los jovenes debe ser tomada en euenta almomento de planifiear programas de promocion deldesarrollo y/o politieas soeiales.

Al eomparar los resultados de eneuestas na-cionales de juventud, se observa que el poreentajeque abandona la ensefianza media para empezar atrabajar aumenta de 14.1% en 1994 a 25.45% en1997 (INJUV, 1999). El aumento del poreentaje dejovenes que decide comenzar a trabajar y desconti-

nuar su educacion puede refiejar la falta de pros-pectos de mejoria laboral como consecuencia desu permanencia en el sistema eseolar y/o lamaximizaeion del ingreso como via efectiva hacia laautonomia (Espinoza, 1999). Desafortunadamente,la naturaleza transversal de las eneuestas naeiona-les de juventud no permite analizar los procesos(e.g., a nivel personal, familiar y de la eomunidad)que inciden en las deeisiones de los jovenes y comoestas pueden moderar los efectos de barreras eeo-nomieas y soeiales en su desarrollo. Este conoci-miento es eentral para la formulacion de politicassociales efectivas que respondan a las necesida-des de jovenes de diferente genero y eondieionessoeioe-eonomicas y culturales.

Fortalecimiento del Capital Social

Ademas de los reeursos personales, otros estu-dios destaean la importancia de la cualidad de lainsercion de la familia en la eomunidad para el desa-rrollo de nifios (Martinez, 2000) y jovenes (Sampson,Raudenbusch & Earls, 1997). Algunos aspectos dela organizacion social de la comunidad, tales comoel grado en que otros adultos, ademas de los padres,intervienen en la supervision de los adoleseentes, yguian su eomportamiento hacia normas prosociales,la densidad de las redes sociales (Crittenden, 1985),y los niveles de participacion en organizaeiones eo-munitarias previenen la desviacion social en los jo-venes (Sampson & Groves, 1989).

Coleman (1988) usa el termino "eapital soeial"para referirse a los recursos comunitarios (e.g., nor-mas, obligaciones mutuas, sentido de eomunidad, yoportunidades para compartir informacion) que pro-mueven el desarrollo de nifios y adolescentes. Deacuerdo a esta perspeetiva, la comunidad puede serentendida como una reserva de capital social pues-to que sus redes de relaeiones y organizaciones so-ciales (tanto formales como informales) aportan re-eursos a los padres para lograr las metas de soeiali-zacion que se han propuesto con sus hijos.

Es responsabilidad piibliea crear y apoyar loscaminos para que los jovenes transiten haeia su in-tegracion social exitosa y generar las condicionespara que se eonviertan en ciudadanos productivosy creativos (INJUV, 1999). Los jovenes de sectoreseconomicos menos privilegiados (e.g., mapuehes,de nivel soeioeconomico bajo) estan expuestos adesventajas soeioculturales y economicas que de-bilitan la estructura de oportunidades para una tran-sicion favorable a la adultez, y/o pueden presentar

MARTINEZ

riesgos para una adaptacion efectiva. Ademas deinerementar la inversion en edueaeion, es neeesarioidentificar los recursos disponibles en la comunidadque puedan fortaleeer los esfuerzos inieiados en lafamilia y en el sector educacional para desarrollar elcapital humano de los jovenes.

La comprension de las infiueneias del nuevocontexto social y cultural es central para la fomiula-eion de politicas de desarrollo humano dirigidas ajovenes. En un mundo de economia globalizada, laeducacion y el fortaleeimiento del eapital humanoson requisitos indispensables para el desarrollo so-cial y economico de los paises. Los cambios tecno-logicos, organizativos y las presiones por lacompetitividad, demandan nuevas eapaeidades a lafuerza de trabajo. La formacion de los jovenes en eluso de nuevas teenologias debe considerar tambiennuevas habilidades personales, sociales, e intelec-tuales necesarias para su adaptabilidad efieiente alos cambios en el mundo laboral (Femandez, 2004).

Como eiudadanos, los jovenes proyectaran eldesarrollo que ha aleanzado el pais, y la inversion enellos ereara vias para la sustentacion de la democra-cia. A nivel nacional, existe mayor eoneiencia de laneeesidad de ineluir a amplios seetores de jovenespara que ejerzan plenamente su eiudadania y mejo-ren su ealidad de vida, ideal expresado en la misiondel Instituto Naeional de la Juventud, ereado en 1991.Si bien se ha avanzado en definir las bases para unapolitiea de juventud que mejore la gestion y ejeeu-eion de programas y el disefio de servieios, la formu-lacion de esta politiea -entendida eomo un conjun-to de principios, metas y recursos para implementarobjetivos de desarrollo- es una tarea pendiente, quenecesariamente requiere de conocimientos aeerea delas aspiraciones, neeesidades y competencias de losjovenes.

Capitaiizando en los resultados favorables depoliticas sociales para combatir la pobreza, la refor-ma edueacional y los programas de capacitacion ju-venil, el periodo aetual ofrece una oportunidad lini-ea de fortaleeer la investigaeion que pueda informarla formulacion eficiente de programas y politieassoeiales para fortaleeer el desarrollo de eompeten-cias y la integracion social de la juventud. La identi-ficacion de faetores protectores del desarrollo a ni-vel de la familia, la participacion eomunitaria, y laeomprension de los mecanismos a traves de los eua-les estos operan, eonstituyen los fundamentos so-bre los cuales se disefian, planifiean y evaluan poli-tieas soeiales dirigidas a jovenes, familias y eomuni-dades.

Vision Positiva de la Adolescencia

Como educadores, padres, profesionales odisefiadores de politicas sociales aspiramos a quelos adolescentes alcancen logros que van mas aliade la evitaeion de ciertos riesgos, pero disponemosde poea literatura sobre las eondiciones que pro-mueven el desarrollo positivo en los adoleseentes.Los temas de investigaeion, los programas de inter-veneion y las imagenes difundidas en medios deeomunieacion se centran frecuentemente en eom-portamientos "problema" de los jovenes. Altemati-vamente, se puede enfatizar el eonoeimiento de losaspectos positivos del desarrollo adolescente, ha-bilidades y competencias, y las maneras a traves delas euales los jovenes negoeian eonstructivamentelas transiciones evolutivas para eonvertirse en adul-tos competentes y productivos para el pais. Diver-sos estudios (Benson, Leffert, Seales & Blyth, 1998;Jessor, Turbin & Costa, 1998; Leffert et al., 1998;Scales, Benson, Leffert & Blyth, 2000) documentanla relacion entre los reeursos adaptativos y compor-tamientos de riesgo, como tambien los resultadospositivos.

Competencia Social

El eoneepto de eompeteneia soeial ha reeibidoateneion en el estudio del funcionamiento adoles-cente por su poteneial para expliear la adaptaeionpositiva (Cowen, 1994; Masten et al., 1995). Compe-tencia denota la capaeidad de la persona para en-frentar las demandas ambientales y aproveehar lasoportunidades de manera activa y efectiva. La eom-peteneia se constmye a traves de experieneias yoportunidades para involucrarse en aetividades, pro-yeetos de interes, y/o en la relacion con pares oadultos signifieativos eon los cuales los adoleseen-tes interactuan. Estos esfuerzos se earaeterizan porser mantenidos en el tiempo (Larson, 2000) y pue-den promoverse a traves de programas desarrolla-dos en eontextos formales (e.g., colegio) o informa-les (e.g., gmpos de juventud) (Larson & Verma, 1999/

Si bien se reconoce la importancia de estudiarlos recursos para la adaptacion y las competenciasde las personas (Larson, 2000; Masterpasqua, 1989),aiin existe muy poeo enfasis, tanto en la investiga-cion como en las politieas soeiales, en eomo promo-ver el desarrollo positivo en los adoleseentes. Conexcepeion de las encuestas nacionales (INJUV, 1999,2004) y algunos estudios empiricos (Maddaleno etal., 2003), el gmpo adolescente ha sido descuidado

DESAFIOS Y OPORTUNIDADES PARA EL DESARROLLO ADOLESCENTE

como objetivo de investigaeion y de politicas socia-les en nuestro pais.

La falta de evideneia de investigacion sobre losaspectos positivos del desarrollo se debe tambien afalta de eonsenso entre expertos aeerea de cualesson los resultados deseables para los adolescentes.Esta carencia impide dar una clara orientacion a pa-dres, edueadores, lideres juveniles y eomunitariossobre las metas a lograr eon los jovenes. Tanto in-vestigadores eomo expertos en politieas socialesrequieren eoneertar esfuerzos para desarrollarindicadores que refiejen la diversidad de competen-cias definidas de acuerdo a las normas culturales dediferentes grupos de juventud (Espinoza, 1999;Moore & Halle, 2000).

En respuesta a imagenes negativas de los jove-nes, los programas de promocion del bienestar amenudo se centran en prevenir eomportamientos deriesgo. La perspeetiva centrada en los riesgos eslimitada, puede sobreestimar la frecuencia de com-portamientos negativos y subestimar la partieipa-eion de los jovenes en actividades positivas y pro-duetivas que los eneamina en trayectorias de eom-peteneia. Por ejemplo, los hallazgos de una muestranacional de juventud (INJUV, 2004) indican que cer-ea del 48% de los jovenes (entre 15-29 afios) partici-pa en organizaciones, prineipalmente deportivas,religiosas y virtuales, siendo mayor este porcentajeen los adolescentes jovenes (entre 15-18 afios). Asi-mismo, las crecientes eifras de enrolamiento de jo-venes en programas de ayuda social y en iniciativasde emprendimiento soiidario tambien dan cuenta demotivaciones y compromisos de los jovenes eoncausas sociales.

La movilizacion estudiantil del 2006 en demandade una mejor caiidad de la edueaeion en Chile ilustramanifestaciones de ciudadania desde la perspectivade los jovenes y desafia la vision de una juventudapatiea. El apoyo que eoncito este movimiento enamplios seetores de juventud revela la importaneiade atender a los asuntos que definen las expresio-nes eiudadanas en los jovenes. Los jovenes valoranla demoeracia, afirman que esta debe ser perfeccio-nada y son criticos de la soeiedad chilena por suinequidad y falta de oportunidades (INJUV, 2002). El47% de ellos piensa que no hay igualdad en el acce-so a oportunidades; el 35% eree que debieran redu-cirse las diferencias de clase y la inequidad social, yel 29% demanda justieia soeial (INJUV, 2004). Ungrupo importante de jovenes refiere que se ha senti-do diseriminado por clase social, edad o por su con-dicion de estudiante (INJUV, 2004). En sintesis, los

jovenes poseen expectativas aeerea de sus dereehoscomo ciudadanos e identifiean barreras para el ejer-cicio de estos. Por tanto, es neeesario crear las opor-tunidades para que se involucren eomo actores desu desarrollo.

Otros indieadores positivos se encuentran en laconstruccion de la identidad personal, eonsideradaun importante medio para la consecucion de las me-tas de vida. Los adolescentes chilenos (15-18 afios)tienen autoeoneepto positivo y alta autoestima. Sedescriben a si mismos eon atributos positivos talescomo solidaridad (36.9%), sociabilidad (34.0%),orientados a la realidad (28.7%), fiexibles (28.6%) yoptimistas (25.4%) (INJUV, 2004).

Otros hallazgos de muestras naeionales (INJUV,1999, 2004; PNUD, 2003) sobre las aspiraciones ylos valores de la juventud chilena destacan los re-cursos y fortalezas que esta posee para enfrentar sudesarrollo futuro. Los jovenes muestran una alta dis-posieion a la integracion social, valoran la educa-cion formal y el trabajo como el camino para alcanzaresta integracion (Espinoza, 1999), y la fonnacion desus propias familias. En sintesis, se deseartan lasimagenes negativas de la juventud difundidasdurantes los afios 80, que enfatizaban la exelusion,la desintegraeion cultural, y las conductas confiicti-vas de la juventud (INJUV, 1999).

Los adolescentes chilenos refieren altas aspira-ciones y expectativas de logro educacional futuro(INJUV, 2002; Martinez, Cumsille & Rivera, 2004;PNUD, 2003), partieularmente en mujeres. Martinez,Cumsille y Rivera (2004) observaron que estas aspi-raciones y expectativas disminuyen a medida quelos adoleseentes crecen, hallazgo que probablementerefieja una autoevaluaeion mas realista de sus capa-cidades. Sin embargo, el nivel socioeconomico seasocia positivamente eon las aspiraciones y expee-tativas edueaeionales, probablemente asoeiado ainfiueneias de la familia y del sistema eseolar. Estaobservaeion destaca la importancia de acrecentarlas oportunidades y disminuir las barreras para ellogro de los adoleseentes de seetores eeonomica-mente desventajados, y de atender difereneialmentea las expeetativas de las adoleseentes (Martinez,Cumsille & Rivera, 2004), en eonsonaneia con cam-bios en las expectativas de rol para las mujeres enChile (PNUD, 2003).

Participacion Social y Desarrollo Civico

Diversos estudios (Flanagan, Bowes, Jonsson,Csapo & Sheblanova, 1998; Flanagan & Gill, 1999)

10 MARTINEZ

sugieren que las experieneias de perteneneia y laparticipacion en grupos e instituciones de la comu-nidad (e.g., organizaciones escolares o juveniles,culturales, eeologistas, politieas, eomunidades reli-giosas) promueve la integracion social y protege alos jovenes de conductas negativas. Paralelamente,la salud de los sistemas soeiales (e.g., fjunilias, cole-gios, eomunidades) depende de la partieipaeion ae-tiva y del eompromiso de sus miembros, proeesosque desarrollan confianza social y sentido del bieneomiin (Flanagan & Gill, 1999).

Los hallazgos de las eneuestas nacionales dejuventud sugieren que las tendeneias de participa-cion juvenil por estrato soeioeconomico han cam-biado desde 1994 a 1997. La participacion en organi-zaciones sociales y politicas de los jovenes ha dis-minuido, fenomeno deserito eomo "desapego politi-eo" (Espinoza, 1999), que tambien se ha observadoen otras soeiedades durante periodos de eambiosocial rapido (Flanagan et al., 1998). Estas conclu-siones deben interpretarse con cautela. La naturale-za transversal de los datos INJUV, eomo tambien laagregaeion de jovenes en un intervalo amplio deedad (e.g., 15 a 29 afios) impide analizar la evolucionde estos comportamientos en cohortes de jovenesdurante un periodo historico particular y se haeenecesario el disefio de estudios Iongitudinales.

Sabemos muy poeo acerca de los procesos a tra-ves de los cuales los jovenes se eonvierten en bue-nos eiudadanos (e.g., euales son las vias de inclu-sion), y mucho menos aeerea de eomo estos proce-sos ocurren en jovenes de grupos eeonomicamentedesventajados o historieamente marginalizados, ysi difieren de los procesos que experimentan jove-nes de sectores mas afiuentes. La eompeteneia eivi-ea supone el desarrollo de habilidades prosoeiales,el apego positivo a institueiones sociales (e.g., fami-lia, eolegio), y la adhesion a valores de responsabi-lidad soeial, respeto por la diversidad, los prineipiosdemoeratieos y los dereehos civiles.

Es eentral eonocer los faetores que contribuyena que los jovenes aprendan y se motiven por partici-par en la vida civica de sus comunidades, y de comoestas experieneias a nivel loeal pueden erear oportu-nidades para la partieipaeion fonnal de los jovenesen la vida eiviea del pais (Espinoza, 1999). En unamuestra de 1093 adoleseentes, Silva y Martinez (enprensa) eneontraron que la partieipaeion en aetivi-dades eseolares como debates, centro de alumnos,promueve la eficacia politica y la conciencia cdticade los jovenes.

Los colegios son contextos elaves para aprendery practicar la ciudadania y los principios democrati-cos, sin embargo, se requiere desarrollar y evaluarinieiativas para llevar a la praetica los principios deequidad, solidaridad y toleraneia a la diversidad. Al-gunas interveneiones han mostrado resultados favo-rables pero requieren ser replieadas y/o evaluadas enotros gmpos de jovenes. Por ejemplo, utilizando unametodologia de investigaeion participativa, Prieto(2003) eneontro que los jovenes no solo mejoraron sueonoeimiento acerca de la democracia, sino que au-mentaron el eonoeimiento de si mismos, aprendierona expresar sus opiniones, y a monitorear su compor-tamiento tomando en cuenta los sentimientos y lasaeeiones de otros.

Actividades Significativas y Uso del Tiempo Libre

Las actividades instrumentales son un componentediario de la vida de los adolescentes (Larson, 2000), yun medio para la exploraeion de la identidad. Las aetivi-dades incluyen pasar tiempo en otros contextos taleseomo el trabajo, los grupos de amigos, proyeetos juve-niles, y organizaciones eomunitarias. Estas activida-des impiican interacciones regulares con adultos (e.g.,entrenadores, mentores, lideres) y ayudan a formar elautoconcepto, desarrollan la inieiativa personal, inte-reses, y desalientan las eonduetas problema (Larson,2000). Ademas de erear lazos intergeneracionales, lasfiguras adultas pueden servir de modelos, dar apoyosoeial y canalizar el eomportamiento de los adolescen-tes hacia metas deseadas.

Los hallazgos de una muestra naeional de juven-tud (INJUV, 2004) indiean que los jovenes chilenos noestan partieipando en aetividades signifieativas parasu desarrollo. El fiitbol da euenta de la mayor partieipa-eion juvenil en aetividades organizadas, particularmenteen varones. Los benefieios de esta participacion noestan claros pues tambien se asocia con consumo dealeohol y drogas (INJUV, 1999). En una muestra dejovenes urbanos de nivel socioeconomico bajo,Martinez y Cumsille (1996) encontraron altos nivelesde sintomatologia depresiva, tales eomo aburrimientofreeuente, pesimismo y soledad. Estos indices de alie-naeion y falta de perspectiva a fiituro en una poblacionde jovenes que puede deseribirse eomo "normal", noeonstituye neeesariamente psieopatologia, y puedenrefiejar falta de proyeetos que los motiven intrinseea-mente o que los dirijan a la eonseeueion de metas im-portantes para ellos (Larson, 2000). Futuros estudiospodran investigar que earaeteristicas de las activida-des diarias -estmcturadas y no estmcturadas- y de

DESAFIOS Y OPORTUNIDADES PARA EL DESARROLLO ADOLESCENTE 11

los eontextos en que estas se realizan, eontribuyen aldesarrollo de iniciativas y proyeetos a futuro en losjovenes.

Sugerencias Para Futuros Estudios yPropuestas Para la accion

Necesidad de Estudios Longitudinales

Los hallazgos de las sueesivas eneuestas naeio-nales de juventud (INJUV, 1999,2002,2004) aportanimportantes deseripciones de la realidad juvenil. Sinembargo, para avanzar en el disefio de intervencio-nes de promocion o prevencion, necesitamos com-prender de que manera los faetores demograficos anivel familiar, escolar y de la eomunidad interaetuaneon procesos personales y familiares para producirresultados positivos en los adoleseentes. En Chile,la investigacion sobre los faetores que eontribuyenal desarrollo positivo de los jovenes earece de datoslongitudinales que permitan identificar los procesosy mecanismos que eontribuyen a que los jovenesmantengan trayeetorias positivas en su desarrollo,aun en preseneia de condiciones de riesgo ambien-tal o desventajas socioeeonomieas y eulturales.

Enfasis en las Competencias

La nocion de adolescencia de Stanley Hall comoun periodo necesariamente confiictivo llevo a pres-tar poea ateneion a las competencias, los recursos,y las actividades prosociales de los adoleseentes.Altemativamente, los modelos que se enfoean aldesarrollo positivo (e.g., enfatizan habilidades, eom-petencias, recursos) de los jovenes debieranser el objetivo de los esfuerzos eomunitarios(Bogenschneider, 1998; Villarmel, Perkins, Borden& Keith, 2003). Los adoleseentes que erecen en eo-munidades que promueven los aspectos positivosde su desarrollo tienen una mejor eomprension desus valores, son buenos aprendiees de por vida,participan activamente en sus eomunidades, y conmayor frecuencia, tambien promueven el bienestarde otros jovenes (McLaughlin, 2000).

Las caracteristicas, tanto individuaies como am-bientales, que facilitan la transicion positiva a laadultez, constituyen las piedras flindantes del desa-rrollo positivo y han sido denominados reeursos evo-lutivos (Benson et al., 1998), babilidades para la vida(Botvin et al., 2000) y faetores proteetores (Resnick,2000). Los recursos evolutivos pueden ser dimensio-nes extemas de los ambientes de vida (e.g., relaeio-

nes positivas eon su familia, apego a la escuela, amis-tades duraderas), o dimensiones intemas que refiejanvalores, aetitudes, y habilidades personales del/laadoleseente. Estos reeursos se relacionan negativa-mente con comportamientos de riesgo. Mientras masreeursos (e.g., competencias, habilidades) posea un/a adolescente, es menos probable que se involucreen eomportamientos de riesgo, y mas probable que seinvolucre en comportamientos positivos o saludables(Benson et al., 1998; Jessor et aL,1998; Leffert et al.,1998; Seales etal., 2000).

El desarrollo de programas para jovenes debeineorporar la creacion de recursos, fortaleciendo lascondiciones favorables existentes en los ambientesnaturales (Bogensehneider, 1998). Por ejemplo, a ni-vel de colegios se puede promover la participacioncomunitaria a traves del involucramiento de los jo-venes en programas de servicio voluntario (Reinders& Youniss, 2006). Estos programas pueden adoptarmetodologias partieipativas que posibilite a los ado-leseentes tomar roles activos en el diseno y evalua-cion de los mismos.

Los profesionales, investigadores y disefiadoresde politieas publicas pueden colaborar con los jove-nes en la planifieacion de programas y en la movili-zacion comunitaria para crear ambientes en que losjovenes establezean relaciones positivas con adul-tos, y desarrollen competencias y habilidades(Eccles & Gootman, 2001). Al mismo tiempo, debeninvestigar la medida en que estos programas sonefeetivos y eonstituyen buenos eontextos para eldesarrollo adolescente, vinculando sus caracteristi-cas y reeursos eon medidas de resultado en los par-tieipantes (Larson, 2000). Para avanzar en este obje-tivo se requiere generar indicadores que documen-ten resultados positivos en el desarrollo, tales comohabilidades sociales y cognitivas, autoconcepto,partieipaeion en aetividades signifieativas, pertenen-cia a gmpos positivos con pares, estrategias positi-vas de afrontamiento y estilos de vida saludables(Jessor etal., 1998; Lemer & Galambos, 1998).

Adolescentes Como Agentes de su Desarrollo

El desafio para los programas es eomprometer alos jovenes en proeesos que promuevan su propiodesarrollo (e.g., liderazgo, iniciativa, empren-dimiento), y capacitarlos para tomar las decisionesque les permitan lograr este objetivo. En otras pa-labras, tanto las politicas como los programas dejuventud debieran capitalizar en la capacidad deageneia y en la iniciativa de los jovenes, de manera

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de eomprometerlos a forjar su propio desarrollo(Pittman, 2000). La tarea pendiente es, sin embar-go, generar los espaeios y procesos, a nivel local ynacional, para incluir la voz y fortaiecer el liderazgojuvenil. La juventud de sectores historicamentemarginalizados puede requerir ateneion especial(e.g., a traves de programas y politieas) para in-eluirse en forma ereativa y competente, de maneraque se conviertan en aetores de su desarrollo per-sonal y del de sus comunidades.

Enfoque Comunitario del Desarrollo Adolescente

Un enfoque comunitario promueve el eompromi-so de los jovenes eon su propio desarrollo (Larson,2000) y el de sus comunidades dandoles multiplesoportunidades de aprender roles y eompetencias, yde establecer conexiones positivas con otros, y conla comunidad (Villarruel et al., 2003; Zeldin, Camino& Calvert, 2003). Actualmente, los entomos de mu-chas comunidades o barrios urbanos, no solamenteaquellos que eoncentran mayor pobreza o violencia,neeesitan rediseiiarse para dar oportunidades a jo-venes de involuerarse en comportamientos positi-vos, y prevenir eonduetas de riesgo.

La pregunta a responder es ^que earaeteristicasde las eomunidades erean ambientes saludables parala promocion del desarrollo y la salud de los adoles-eentes? A nivel local, es importante identificar y/ofortaleeer los sistemas de apoyo soeial, la estructurade oportunidades, y el rol de las institueiones (ofici-nas de juventud, eentros juveniles) comunitariaspara ampiiar la inclusion de los jovenes como agen-tes aetivos de sus comunidades. Lo anterior requie-re crear modelos de eolaboracion a diferentes nive-les entre organizaeiones formales e informales quedesarrollan politicas y programas para los jovenes.

Nuestro conocimiento acerca de euales eondi-eiones son importantes de gestar, como tambien delos proeesos a traves de los cuales las caracteristieascomunitarias fortaleeen aspeetos del desarrollo ado-lescente es muy limitado, particularmente de estudiosque informen acerca de la realidad de nuestro pais. Eleonoeimiento de estos faetores es indispensable paraguiar la oferta de programas. Los psieologos soeia-les, comunitarios, y otros profesionales neeesitangenerar eonoeimiento aeerea de las aeeiones y carac-teristieas de los programas institucionales e iniciati-vas de otras organizaeiones que efectivamente ereanel eseenario comunitario que proporciona las oportu-nidades optimas para el desarrollo saludable.

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Fecha de reccpcion: Mayo dc 2006,Feeha de aeeptaeion: Dieiembre de 2006,