17
CATECISMO CATOLICO DE LA CRISIS EN LA IGLESIA PARTE X MONSEÑOR LEFEBVRE Y LA FRATERNIDAD SACERDOTAL SAN PIO X ■92.- Qué es la Fraternidad Sacerdotal San Pío X? La Fraternidad Sacerdotal San Pío X es una Congregación de Sacerdotes fundada por Monseñor Lefebvre. Erigida oficialmente en la diócesis de Friburgo en Suiza el 1° de Noviembre de 1970 por el obispo diocesano, Monseñor Charrière, la Fraternidad recibió el 18 de febrero de 1971 una carta de alabanza del prefecto de la Congregación del Clero en Roma, el Cardenal Wright. La Fraternidad ha sido, pues, reconocida por las autoridades competentes; es una obra de la Iglesia. + ¿Cuál es la extensión actual de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X? La Fraternidad San Pío X cuenta actualmente (2007) con más de 450 Sacerdotes sirviendo regularmente en 55 países en todos los continentes, así como con hermanos y seminaristas; con la ayuda de dos congregaciones auxiliares de religiosas (hermanas de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X y Oblatas de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X); una veintena de congregaciones amigas trabajan con ella con el mismo fin. + ¿Cuáles son las Congregaciones amigas que trabajan con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X? Entre las congregaciones amigas que trabajan con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, se pueden citar, en Francia, a los benedictinos de Bellaigue, los capuchinos de Morgon, los dominicanos de Avrillé y los religiosos de la Fraternidad de la Transfiguración en Mérigny. Del lado femenino, se puede mencionar a las benedictinas de Lamairé, las clarisas de Morgon, las carmelitas de Eynesse, las monjas dominicas de Avrillé, las franciscanas de Lanorgard, las dominicas educadoras de las congregaciones de Fanjeaux y de Brignoles, las hermanas de la Transfiguración (Mérigny), las pequeñas siervas de San Juan Bautista (en Rafflay). -Numerosas comunidades tradicionales existen también fuera de Francia, especialmente los redentoristas (en la isla Papa Stronsay, en Escocia), etc. ■93.- ¿Qué fines persigue la Fraternidad Sacerdotal San Pío X? El fin primero y principal de la Fraternidad es la formación de buenos sacerdotes y la santidad de éstos. En virtud de la crisis actual de la fe, también tiene la misión de conservar íntegra la fe católica.

Catecismo católico de la crisis en la iglesia p. matthias gaudron - x

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

CATECISMO CATOLICO DE LA CRISIS EN LA IGLESIAPARTE X

MONSEÑOR LEFEBVRE Y LA FRATERNIDAD SACERDOTAL SAN PIO X

■92.- Qué es la Fraternidad Sacerdotal San Pío X?La Fraternidad Sacerdotal San Pío X es una Congregación de Sacerdotes fundada por Monseñor Lefebvre. Erigida oficialmente en la diócesis de Friburgo en Suiza el 1° de Noviembre de 1970 por el obispo diocesano, Monseñor Charrière, la Fraternidad recibió el 18 de febrero de 1971 una carta de alabanza del prefecto de la Congregación del Clero en Roma, el Cardenal Wright. La Fraternidad ha sido, pues, reconocida por las autoridades competentes; es una obra de la Iglesia.

+ ¿Cuál es la extensión actual de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X?La Fraternidad San Pío X cuenta actualmente (2007) con más de 450 Sacerdotes sirviendo regularmente en 55 países en todos los continentes, así como con hermanos y seminaristas; con la ayuda de dos congregaciones auxiliares de religiosas (hermanas de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X y Oblatas de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X); una veintena de congregaciones amigas trabajan con ella con el mismo fin.

+ ¿Cuáles son las Congregaciones amigas que trabajan con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X?Entre las congregaciones amigas que trabajan con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, se pueden citar, en Francia, a los benedictinos de Bellaigue, los capuchinos de Morgon, los dominicanos de Avrillé y los religiosos de la Fraternidad de la Transfiguración en Mérigny. Del lado femenino, se puede mencionar a las benedictinas de Lamairé, las clarisas de Morgon, las carmelitas de Eynesse, las monjas dominicas de Avrillé, las franciscanas de Lanorgard, las dominicas educadoras de las congregaciones de Fanjeaux y de Brignoles, las hermanas de la Transfiguración (Mérigny), las pequeñas siervas de San Juan Bautista (en Rafflay).-Numerosas comunidades tradicionales existen también fuera de Francia, especialmente los redentoristas (en la isla Papa Stronsay, en Escocia), etc.

■93.- ¿Qué fines persigue la Fraternidad Sacerdotal San Pío X?El fin primero y principal de la Fraternidad es la formación de buenos sacerdotes y la santidad de éstos. En virtud de la crisis actual de la fe, también tiene la misión de conservar íntegra la fe católica.

Page 2: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Existe un lazo entre éstos dos fines?Una verdadera reforma de la Iglesia no es posible sin una reforma del sacerdocio. Solamente los buenos y santos sacerdotes podrían encender en el corazón de los fieles el amor de Dios y el entusiasmo por la fe. Es el estado catastrófico de los seminarios oficiales el que ha empujado a Monseñor Lefebvre a fundar la Fraternidad. En casi todos los seminarios oficiales las verdades de la fe son negadas y la formación espiritual de los seminaristas es muy deficiente. En ocasiones incluso se enseña la rebelión contra las enseñanzas de la Iglesia y se incita al pecado.

■94.- ¿Fue válida la supresión de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X?Fue Monseñor Pierre Marie (sucesor de Monseñor Charrière como obispo de Friburgo) que firmó el 6 de mayo de 1975 el decreto de supresión de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, mientras que Monseñor Lefebvre acababa de tener, en Roma, discusiones con los cardenales Garrone, Wright y Tabera. Monseñor Lefebvre siempre ha impugnado esta supresión tanto por razones de procedencia jurídica como por razones de fondo (porque es una realidad que la Fraternidad fue suprimida debido a su fidelidad a la fe católica y a la misa tradicional).

+ ¿Por qué Monseñor Lefebvre siempre impugnó el procedimiento jurídico que desembocó en la supresión de la Fraternidad?El derecho canónico establece que un obispo no puede suprimir una congregación religiosa (o una sociedad clerical de vida en común), una vez que ha sido erigida oficialmente en su diócesis. Solamente Roma puede proceder a esta supresión1. Como la Fraternidad Sacerdotal San Pío X fue erigida oficialmente por Monseñor Charrière en 1970, Monseñor Lefebvre consideraba entonces que su sucesor no tenía el derecho de suprimirla. Solamente Roma –y no el obispo diocesano-, podía hacerlo.

+ ¿Este argumento jurídico es absolutamente decisivo?Monseñor Lefebvre siempre consideró este argumento jurídico como decisivo –con mayor razón ya que el Vaticano nunca respondió2. Sin embargo, la resistencia del obispo no su fundaba esencialmente en argumentos de procedencia jurídica sino en razones de fondo tocando a la fe y a la moral. Incluso si se admitiera a pesar de todo que la supresión de la Fraternidad San Pío X fue jurídicamente lícita, (actualmente algunos lo afirman3), estas razones permanecen y la supresión por lo tanto, no es justa. Porque un juicio puede respetar perfectamente las formas exteriores de derecho, siendo al mismo tiempo profundamente injusto e inmoral.__________________________________________________________________1.- El canon 493 del Código de 1917 estableció esta regla para las congregaciones religiosas (“suprimí nequit nisi a Sancta Sede”). El canon 674 extiende esta regla a las sociedades de vida común sin votos, en la cual queda comprendida la Fraternidad.2.-El Tribunal de la Signatura Apostólica rechazó examinar el recurso interpuesto por Monseñor Lefebvre.3.-El debate se basa en el estatuto preciso sobre el cual fue fundada la FSSPX en Friburgo (sociedad de vida en común o simple pia unio). Consultar al respecto la biografía de Monseñor Lefebvre por Monseñor TISSIER DE MALLERAIS (Marcel Lefebvre, une vie, Étampes, Clovis, 2002, p. 508) y por otra parte el artículo de CANONICUS en Le Courrier de Rome (Si Si No No) n° 286 [476], p. 3-6.

Page 3: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿La supresión de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X puede considerarse como injusta e inmoral?La supresión de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X es injusta e inmoral no solamente a causa de las injusticias y mentiras por las que fue obtenida (los obispos de Francia dirigieron toda una campaña contra el que llamaban “el seminario salvaje de Ecône”, ¡siendo que el seminario estaba perfectamente en regla!), sino sobre todo a causa del objetivo por la que fue pronunciada: Era necesario imponer la nueva misa (ecumenista) y los errores del Vaticano II. Debían impedir que los sacerdotes recibieran y transmitieran a su alrededor la misa y la teología católicas. Este objetivo era perfectamente ilegítimo –y contrario al bien común de la Iglesia- la supresión de Ecône también lo era.

■95.- ¿La suspensión que recayó sobre Monseñor Lefebvre, fue válida?Monseñor Lefebvre fue afectado, el 22 de julio de 1976 con una suspensión a divinis. Esta suspensión fue tan inválida como la supresión de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, porque Monseñor Lefebvre no fue nunca convocado delante de tribunal competente, y la sola razón de su suspensión fue su adhesión a la Tradición de la Iglesia. Sine culpa nulla poena –si no hay falta, la pena es nula.

+ ¿A que se le llama suspensión a divinis?La suspensión a divinis significa la prohibición de ejercer el poder del orden. Si la suspensión hubiera sido válida, Monseñor Lefebvre no hubiera tenido el derecho de celebrar la misa ni de administrar los sacramentos.

■96.- A pesar de todo, ¿No debería obedecer?El papa y los obispos han recibido su autoridad de Cristo para proteger y defender la fe. La regla general es, por supuesto, obedecerlos. Pero si utilizan su autoridad contra el objeto mismo por el cual su autoridad les ha sido conferida –es decir, queriendo imponer actos pecaminosos o peligrosos para la fe, no solamente se tiene el derecho sino el deber de resistirles: “Hay que obedecer a Dios antes que a los Hombres” (Hechos 5, 29).

+ ¿Está verdaderamente permitido desobedecer a las autoridades de la Iglesia por la sola razón que se estiman sus órdenes injustas?Una simple injusticia personal o una medida que estimemos imprudente no pueden justificar una negativa a la obediencia. Pero pasa todo lo contrario cuando la orden dada se enfrenta directamente contra la ley de Dios –es decir, cuando la fe y la moral están en peligro. En este caso la “obediencia” no sería virtuosa sino viciosa. Sería en realidad una desobediencia –Mientras que la “desobediencia” aparente es en realidad la verdadera obediencia (la obediencia a Dios antes que a los hombres).

Page 4: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Esta doctrina está conforme a la enseñanza de los papas? León XIII escribe en la encíclica Diuturnum illud:No existe mas que una sola razón válida para negarse a la obediencia debida a la autoridad: Es el caso de un precepto manifiestamente contrario al derecho natural o divino. Porque en donde se trate de transgredir, sea la moral natural, sea la voluntad de Dios, el mandato y la ejecución serían igualmente criminales. […] Y no sería justo acusar a aquellos que se resisten al deber de sumisión, porque los príncipes cuya voluntad está en oposición con la voluntad de Dios, sobrepasan en este punto los límites de su poder e invierten el orden de la justicia: desde entonces su autoridad pierde su fuerza, porque donde no hay justicia, ya no hay autoridad1.

+ ¿Estas palabras del papa, conciernen solamente a la autoridad civil?Estas palabras de León XIII son dichas a propósito de la autoridad civil, pero tienen el valor de principio. Valen de manera general para toda autoridad.

■97.- ¿Está permitido resistir al papa?Cuando el papa abusa de su cargo y ocasiona graves daños a la iglesia, no solamente tenemos el derecho sino el deber de resistirlo.

+ ¿Existen en la historia de la Iglesia ejemplos de resistencia al papa?Desde el origen de la Iglesia, san Pablo se opone a San Pedro quien, por temor de disgustar a los judeo-cristianos, ya no quería participar en las comidas de los paganos conversos. Esta decisión era grave, porque corría el riesgo de engendrar una ruptura y podía favorecer la falsa opinión según la cual la práctica de la ley judía debía ser impuesta a los cristianos. San Pablo declara entonces: “Cuando Céphas (Pedro) llegó de Antioquia, le hice resistencia cara a cara, porque era reprensible” (Gal. 2, 11).

+ ¿Qué dicen los doctores de la Iglesia de ésta resistencia al papa?Santo Tomás de Aquino, comenta así la resistencia de san Pablo:Cuando la fe está en peligro, los prelados deben ser acusados por sus inferiores, incluso en público. Es por eso que Pablo, aunque estaba sometido a Pedro, lo ha reprendido públicamente en razón del riesgo próximo de escándalo en una cuestión de fe. Y como dice el comentario de San Agustín: “Pedro ha dado un ejemplo a los que son constituidos en dignidad, pues si sucede que se aparten del buen camino, no se avergüenzan de hacerse corregir por inferiores”2.

__________________________________________________________________1.- LEON XIII, encíclica Diuturnum illud, 20 de junio de 1881, ediciones de “Questions actuelles”, París, I, 140.2.- Santo TOMAS DE AQUINO, Suma Teológica, II-II, q.33, a.4.

Page 5: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Hay otros teólogos que enseñan la misma cosa?Juan de Torquemada afirma explícitamente que no es imposible que un papa “ordene alguna cosa contraria a la ley natural o divina1”. Cita a su favor al papa Inocencio III (1198-1216), que afirmó que era necesario obedecer al papa en todo, siempre y cuando no vaya en contra de la disciplina general de la Iglesia, en cuyo caso no se debe seguirle, a menos de que se tenga un motivo válido de hacerlo. Dice entonces que habría que oponerse a un papa, si éste “quiere emprender cualquier cosa contra la constitución de la Iglesia universal, como por ejemplo, destituir a todos los obispos o alguna otra cosa de este género que introduzca desorden en la Iglesia2”.

+ ¿Podría citar otros ejemplos?-Thomas Cajetan- el gran comendador de Santo Tomás- escribió en una obra consagrada a la defensa del papado:Hay que tener en mente a un papa que ataque la Iglesia. […] Si no, ¿por qué decir que la autoridad ha sido dada para edificar y no para destruir (2 Cor 13, 10)? Contra un mal uso de la autoridad se emplearán los medios adecuados, no obedeciendo lo que está mal, no tratar de agradar, no callándose, reprendiendo e invitando a las autoridades a hacer los reproches necesarios, a ejemplo de San Pablo y según su precepto3.

+ ¿Esta enseñanza de la resistencia al papa es propia de los dominicos?-Francisco Suárez, que es considerado el más grande teólogo jesuita, enseña:Si el papa prescribe cualquier cosa que sea contra las buenas costumbres, no se debe obedecer. Si emprende cualquier cosa que se oponga con evidencia a la justicia y al bien común, está permitido resistirle4.El mismo Suárez enseña por otra parte que el papa se volvería cismático “si buscara transformar todas las ceremonias litúrgicas que reposan sobre las tradiciones apostólicas”5.

+ ¿San Roberto Bellarmino habló sobre la resistencia al papa?San Roberto Bellarmino permita también la resistencia a un papa que perjudique a la Iglesia:Del mismo modo que está permitido resistir a un papa que cometa una agresión corporal, está permitido resistirle si hace algún mal a las almas o confunda a la sociedad y, con mayor razón, si intenta destruir la Iglesia. Está permitido, digo yo, de oponérsele no cumpliendo sus órdenes e impidiendo que su voluntad sea realizada6.

1.- Juan DE TORQUEMADA O.P., Summa de Ecclesia, parte I, libro IV, capítulo 11.2.- Juan DE TORQUEMADA O.P., Summa de Ecclesia, libro II, capítulo 106.3.- Tomás CAJETAN O.P., De comparatione auctoritatis papae et concilii, Angelicum, 1936, n°412. Nosotros señalamos en itálicas las palabras no callándose.- Francisco de Vitoria enseña lo mismo: “Si el papa, por sus órdenes o por sus actos, destruye la Iglesia, puede resistírsele e impedir la ejecución de lo que ordena” (Francisco DE VITORIA O.P., Obras, BAC, 1960, Pág. 486-487).4.-Francisco SUAREZ, S.J., Opera Omnia, París, 1856, X, Pág. 321 (Tractatus de fide dogmatica, disp. 10, sect. 6, n. 16).5.- Francisco SUAREZ S.J. Tractatus de caritate, disk. 12, sect. 1, n° 2.6.- San ROBERTO BELARMINO, De romano pontifice, libro II, cap. 29.

Page 6: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿No está definido que es necesario para la salvación estar sometido al pontífice romano?Del mismo modo que la pertenencia a la Iglesia (al menos de deseo1) es condición necesaria para la salvación, igualmente la sumisión al papa (sumisión que es precisamente una de las condiciones de pertenencia a la Iglesia). Esta verdad fue definida por Bonifacio VIII en su bula Unam Sanctam2. Pero esta sumisión evidentemente no implica una obediencia sin límites. Cayetano explica en su comentario a la Suma Teológica:

Si alguno, por un motivo razonable, tiene por sospechosa la persona del papa y rechaza su presencia e incluso su jurisdicción, no comete el delito de cisma ni algún otro, ya que estaría presto a aceptar al papa si no fuera sospechoso. De aquí que se tiene el derecho de evitar lo que es dañino y de prevenir los peligros. De hecho, puede suceder que el papa gobierne de manera tiránica, y eso es tanto más fácil ya que es más poderoso y no teme en esta tierra ningún castigo por parte de los demás3.

+ ¿No han declarado ciertos santos que no puede haber santidad en donde hay disentimiento con el papa?Algunos santos han afirmado esta piadosa exageración, pero no deja de ser una opinión personal, la cual es contradecida –ya lo hemos visto- por muchos otros santos. Lo que es verdad, es que en materia de sumisión al papa, la obediencia confiada, entera y filial es la regla normal de las cosas. Pero el hecho de enunciar la norma no significa que jamás haya excepciones. Ahora bien, actualmente hay una crisis en la Iglesia, una crisis, de hecho, excepcional.

+ ¿Se pueden considerar a la Fraternidad Sacerdotal San Pío X y las congregaciones amigas como sumisas al papa?La virtud de la obediencia es un punto medio entre dos vicios opuestos: La insumisión y el servilismo. En la crisis actual, la verdadera obediencia no consiste ni en aceptar los errores reinantes bajo pretexto de que son favorecidos por los papas (lo que sería servilismo), ni a rechazar la autoridad de los papas, bajo pretexto de que son malos (ésta es la actitud de los llamados “sedevacantistas”). La verdadera obediencia consiste en aceptar la autoridad del papa en tanto que es papa, a rezar por él y respetar su persona, pero resistiendo activamente a las malas orientaciones que se quiere dar a la Iglesia. Esta es la actitud de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X y de las congregaciones amigas, de las cuales puede decirse: sí, están sumisas al papa.___________________________________________________________________________________________________1.- Tres condiciones son necesarias para ser realmente miembro de la Iglesia: el bautismo, la fe verdadera y la sumisión a la autoridad legítima. Pero los que no son realmente miembros de la Iglesia, pueden salvarse por un deseo sobrenatural de pertenecer a ella, se dice que éstos son miembros in voto (por el voto, por el deseo). Este deseo, suscitado en el alma por el Espíritu Santo, puede ser explícito (por ejemplo, en el caso de un catecúmeno que se prepara para el bautismo) o implícito (es el caso de alguna persona que no conozca la Iglesia Católica). Una persona que tiene lo que se llama “bautismo de deseo” (es decir, un deseo verdaderamente sobrenatural del bautismo) es también miembro de la Iglesia si bien no lo es de hecho (in re) sino por intención (in voto). A veces se dice (es una manera de hablar) que ésta persona pertenece al alma de la Iglesia, sin estar en su cuerpo.2.- “Declaramos, decimos y definimos que es absolutamente necesario para la salvación de toda criatura humana, estar sumisa al pontífice romano” DS 875.3.- Tomás CAJETAN O.P., Commentarium in II-II, 39,1.

Page 7: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

■98.- ¿Las ordenaciones episcopales de 1988 crearon un cisma?El cisma es un rechazo al principio de la autoridad del papa, y no un simple acto de desobediencia. Ahora bien, la Fraternidad San Pío X admite la autoridad del papa y sus sacerdotes piden por el en cada misa. Las ordenaciones episcopales que fueron exteriormente un acto de desobediencia, no ocasionaron ningún cisma. Además, las razones que dimos anteriormente justifican plenamente esta aparente desobediencia al papa.

+ ¿No es contradictorio pretender reconocer la autoridad del papa resistiéndose a él?Un hombre puede decir a su padre: “No estás obrando bien” sin decirle “tu no eres mi padre, ya no quiero tener nada que ver contigo”. Estas son dos actitudes completamente distintas. El cisma corresponde solamente a la segunda.

+ ¿El hecho de consagrar los obispos sin autorización del papa no implica automáticamente un cisma?Una ordenación episcopal sin autorización del papa no implica por sí mima un cisma. El cardenal Castillo Lara, doctor en derecho canónico y presidente de la Comisión pontifical para la interpretación auténtica de los textos legislativos explica de esta manera en 1988:El simple hecho de consagrar un obispo sin mandato pontifical no es de suyo una acción cismática1.

+ ¿Podría citar otra autoridad?El conde Neri Capponi, profesor emérito de derecho canónico de la Universidad de Florencia, declara también que una consagración episcopal contra la voluntad del Papa no constituye un cisma por sí misma.Hay que hacer más que eso. Si él hubiera establecido su propia jerarquía, entonces sí hubiera sido un acto cismático. El hecho es que Monseñor Lefebvre simplemente dijo: “Yo consagro obispos para que mi poder de ordenar sacerdotes continúe. Ellos no toman el lugar de otros obispos, yo no estoy fundando una Iglesia paralela”. Es por esto que el acto no fue cismático2.

+ ¿Incluso si no es en sí cismático, la consagración de Obispos sin la autorización de Roma no es siempre un delito que acarrea ipso facto la pena de excomunión?En la Iglesia latina, el papa se reserva la decisión de las consagraciones episcopales desde el siglo XI aproximadamente. Para luchar contra el cisma de la “Iglesia patriótica” china, Pió XII ha tomado en el siglo XX la decisión de castigar con la excomunión la ordenación de obispos sin la autorización del papa. Por importantes que sean estas leyes, son leyes eclesiásticas y no leyes de institución divina. Por lo tanto pueden conocer excepciones en el caso extraordinario de extrema necesidad espiritual. Porque la ley suprema en la Iglesia es la salvación de las almas3.

___________________________________________________________________________________________________1.- La República, 7 de octubre de 19882.-Latin Mass Magazine, mayo-junio de 19933.-Suprema lex, salus animarum. El nuevo código de derecho canónico hizo también su conclusión de este adagio tradicional (can. 1752).

Page 8: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Es verdad que en caso de necesidad puede suspenderse la aplicación de una ley?El principio según el cual la necesidad puede suspender la aplicación de una ley positiva concierne al sentido común. Cuando una casa se incendia en una calle de un solo sentido los salvadores no se preocupan en absoluto del sentido de la calle. Porque el fin es superior a los medios. Una ley deja de existir por lo tanto, cuando vaya directamente contra su fin (en este caso, la protección de vidas humanas).

+ ¿El principio de caso de necesidad vale también para las leyes religiosas?La ley natural no admite jamás una excepción (prohíbe cosas malas por naturaleza que no pueden en ningún caso resultar buenas); las leyes positivas –incluyendo las religiosas- pueden en cambio conocer excepciones, como lo muestra la Sagrada Escritura.

+ ¿Encontramos en la Sagrada Escritura casos de necesidad que dispensen el cumplimiento de la ley?El principio del caso de necesidad aparece varias veces en la Sagrada Escritura. Obligados por la necesidad, los Macabeos deciden utilizar su espada el sabbath, antes de que se dejen matar sin reaccionar (1 Mac 2, 23-41). Nuestro Señor recuerda también este principio de frente a los príncipes de los sacerdotes que buscaban sorprenderlo en una falta. El lo presenta incluso como una evidencia (Luc. 14, 5; Mar 2, 24-27):“¿Quién de vosotros, si su asno o su buey cae en un pozo, no lo saca enseguida, aunque sea el día sábado?

+ ¿El principio de caso de necesidad es afirmado por los teólogos?El principio de caso de necesidad es particularmente expuesto por Santo Tomás de Aquino, quien recuerda el adagio tradicional: La necesidad dispensa de la ley1.

+ ¿La crisis que actualmente hace estragos en la Iglesia necesita verdaderamente la consagración de obispos sin la autorización del papa?Todo miembro de la Iglesia tiene derecho de recibir la doctrina y los sacramentos de los cuales tiene necesidad para salvarse.En consecuencia, si la jerarquía normal (curas, obispos, etc.) no cumplen con su deber, el fiel se encuentra en un estado de necesidad que le permite dirigirse a no importa cual sacerdote católico (a causa de la necesidad, este sacerdote recibe entonces una jurisdicción supletoria). En la crisis actual, esta jurisdicción supletoria otorga a los sacerdotes tradicionales el poder de bautizar, confesar, casar, etc. A los fieles que normalmente no dependen de ellos. Pero como la crisis se prolonga, los obispos son necesarios para otorgar los sacramentos del orden sacerdotal y de la confirmación, Monseñor Lefebvre se vio en la necesidad de consagrar obispos católicos para responder a las necesidades de las almas.

1.- Necesitas legem non habet.- Santo TOMAS DE AQUINO, III, q.80, a.8.

Page 9: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Se libró Monseñor Lefebvre de la pena de excomunión consagrando estos obispos?El canon 1323 § 4 del nuevo Código de Derecho Canónico (el cual retoma en sustancia el canon 2205 § 2 del Código tradicional) dispone que “No es merecedor de pena alguna la persona que, habiendo violado la ley o un precepto […], actuó impulsado por la necesidad o para evitar un grave inconveniente”. Evidentemente, este es el caso de Monseñor Lefebvre.

+ ¿Si Monseñor Lefebvre se equivocó estimando que había necesidad, su excomunión sería válida?El nuevo Código de Derecho Canónico libera de la pena de excomunión no solamente al que se encuentra en un caso real de necesidad, sino también al que piensa estar en tal caso sin que esta convicción sea el resultado de una falta de su parte (canon 1323 § 7). En consecuencia, si se rehusara a admitir la existencia real de la necesidad, es indiscutible que Monseñor Lefebvre pensó estar en ese caso, y que, según el nuevo Código (en vigor en el momento de las consagraciones) no es merecedor de ninguna pena1.

+ ¿Las autoridades oficiales han admitido este argumento de la necesidad expuesto por Monseñor Lefebvre?Las autoridades actuales, evidentemente, no han reconocido públicamente el bien fundamentado argumento de Monseñor Lefebvre, ya que pretendieron excomulgarlo. Pero de hecho, parece que ellas mismas no creen en esta excomunión –o al menos están divididas al respecto.

■99.- ¿La Fraternidad Sacerdotal San Pío X tiene una falsa noción de la Tradición?Actualmente se le reprocha a la Fraternidad de tener una noción bastante estática de la Tradición. La Roma conciliar le opone la “Tradición viviente”2 –el adjetivo “viviente” quiere sugerir que la Tradición puede cambiarse, como todo ser animado. Pero éste es precisamente el error modernista del historicismo: la verdad doctrinal jamás podría ser considerada de manera definitiva, sino que sería percibida y expresada de manera definitiva en el curso de diferentes siglos. Este error fue condenado por los papas San Pío X y Pío XII.

1.- Para una discusión más amplia sobre este argumento, ver Le Sel de la terre 24, p. 50-67.- Sobre la legitimidad de las consagraciones de 1988 ver el estudio del padre MURA en los número 4, 5, 7 y 8 de Le Sel de la terre, así como el folleto del padre Francisco PIVERT, Des sacres par Mgr Lefebvre…un schisme?, Fideliter, 1988.2.- Así, por ejemplo, Juan Pablo II, en su motu proprio Ecclesia Dei del 2 de julio de 1988 (excomunión a Monseñor Lefebvre) denuncia “a la raíz” de la resistencia tradicionalista, “una noción incompleta y contradictoria de la Tradición”. El papa especifica que esta noción es incompleta porque no tiene en cuenta de manera suficiente el carácter vivo de la Tradición la cual, como lo enseña claramente el concilio Vaticano II “se obtiene en la Iglesia bajo la asistencia del Espíritu Santo” (DS 4822). Esta noción sería, por otra parte, contradictoria en lo que se oponga al magisterio universal de la Iglesia (sobre esto último, ver aquí mismo las preguntas 19 y 31.

Page 10: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Este error del historicismo está verdaderamente presente en Roma hoy en día?Monseñor Lefebvre relataba con frecuencia que cuando hablaba con el cardenal Ratzinger o con otras personalidades romanas invocando tal condenación realizada por Pío IX, o tal definición dogmática del concilio de Trento, escuchaba a su interlocutor responderle: “Pero Monseñor, ya no vivimos en tiempos de Pío IX, ya no estamos en la época del concilio de Trento…”

+ ¿No es normal que las tradiciones evolucione al compás de los tiempos?Hay que distinguir la Tradición (con T mayúscula) y las tradiciones. La primera es inmutable, mientras que las segundas pueden ser objeto de un cierto cambio.

+ ¿Qué es la Tradición?La Tradición (con T mayúscula), es la Tradición apostólica, es decir, el depósito de la fe que ha sido confiado de una vez por todas a los Apóstoles y que el magisterio debe transmitir y proteger hasta el fin del mundo1.

+ ¿La Tradición es absolutamente inmutable?El depósito revelado por Dios y transmitido por la Tradición es absolutamente inmutable toda vez que la revelación se cerró con la muerte del último de los Apóstoles2. Pero este depósito inmutable es expresado de manera cada vez más precisa por el magisterio, quien lo cataloga y clasifica al mismo tiempo que lo transmite y defiende.

+ ¿Hay pues una evolución en la enseñanza de la Iglesia?Más que de evolución (palabra más ambigua), hay que hablar de desarrollo. Y hay que precisar que este desarrollo es homogéneo, es decir, sin mutación: es solamente el despliegue de lo que estaba incluido desde el principio y que estaba de cierto modo comprimido, lo que le impedía ser plenamente visible3.

+ ¿Esto no permite decir que la Tradición está viva?La Tradición esta viva en el sentido de que el depósito revelado y dejado por los Apóstoles no se transmite solamente de manera muerta en los escritos, sino también por personas vivas que tienen la autoridad para defenderla, darle valor y hacer que viva por la fe (esta es la función del magisterio). Pero debe mantenerse que este depósito es inmutable, la verdad no cambia, y nada de lo que ha sido definido por el magisterio puede ser modificado. La expresión “Tradición viva” se entiende con frecuencia como una Tradición evolutiva y cambiante, lo que en estos días es particularmente peligroso.

1.- Ver la pregunta 8 de este mismo trabajo (p. 18-20).2.- Ver la proposición 21 condenada por el decreto Lamentabili de san Pío X (DS 3421).

Page 11: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

3.- Ver la pregunta 12 de este mismo trabajo (p. 25-26), así como el estudio de Monseñor Tissier de Mallerais: “La Tradición viviente y combatiente” (Le Sel de la terre 30, p. 16-32.

+ En la Iglesia, ¿Cuáles son las tradiciones que existen junto a la Tradición inmutable?Todas las prácticas de piedad, las reglas de los institutos de vida religiosa, métodos de apostolado, leyes y costumbres litúrgicas o jurídicas que son transmitidas en la Iglesia sin haber sido directamente instituidas por Dios en tiempo de los Apóstoles; son tradiciones eclesiásticas, distintas de la Tradición en sentido estricto.

+ ¿Entonces todas estas tradiciones eclesiásticas pueden cambiar?Las tradiciones eclesiásticas no son inmutables como la Tradición revelada, y de hecho, han evolucionado lentamente al pasar el tiempo. Pero ellas son herencia de santos y la expresión de la sabiduría de la Iglesia (guiada por el Espíritu Santo). Sería pues impío y muy imprudente transformarlas sin razón proporcionada.

+ Por lo tanto, ¿no hay en los “tradicionalistas” un apego excesivo y rígido a las tradiciones eclesiásticas que, después de todo, son humanas?Esa clase de “tradicionalismo” demasiado rígido y exagerado que pretendiera paralizar todas las formas exteriores rechazando toda adaptación a las necesidades contemporáneas puede, en efecto, existir (lo encontramos en ciertos cismáticos orientales llamados “ortodoxos”). Pero ésta no fue la actitud ni de san Pío X ni de Monseñor Lefebvre quienes supieron unir íntimamente la fidelidad al pasado de la Iglesia y la adaptación a las necesidades de la actualidad. El combate antimodernista que efectuaron uno y otro (y que continúan los llamados “tradicionalistas”) no se refiere esencialmente a las tradiciones humanas sino a la Tradición revelada, objeto de la virtud de la fe. La resistencia tradicionalista no es solamente una cuestión de latín, de sotana o de liturgia, es una cuestión de fe.

+ ¿De que manera concilió san Pío X la fidelidad al pasado y la adaptación a las necesidades actuales?San Pío X, que condenó tan severamente al modernismo, fue al mismo tiempo un gran papa reformador: reformó el breviario y la música de la Iglesia, fue el primero en preparar un código de Derecho Canónico claro y completo, y gracias a sus dos decretos sobre la comunión, eliminó las últimas influencias del jansenismo. Y estas no fueron más que sus principales reformas. ¡Desde el concilio de Trento ningún pontífice había promovido tal cantidad de reformas como lo hizo san Pío X! Pero fueron buenas reformas, animadas por un celo realmente sobrenatural, sin ningún desprecio del pasado, aspirando solamente a crear las mejores condiciones para la acción de la Iglesia en el mundo moderno buscando la salvación de las almas.

+ En este punto ¿se pueden comparar Monseñor Lefebvre y San Pío X?Monseñor Lefebvre actuó exactamente como san Pío X. Tan se apegó firmemente a la Tradición con T mayúscula (la que nos transmite el depósito de la fe) amando el pasado de la Iglesia, como sabía ser emprendedor e innovador en los métodos de apostolado. Su biografía nos proporciona múltiples ejemplos1.

Page 12: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

1.- Ver Marcel Lefebvre, une vie, por Monseñor TISSIER DE MALLERAI S , Étampes, Clovis, 2002, particularmente las páginas 199-202.

+ ¿De donde viene la expresión “Tradición viva” utilizada actualmente contra los “tradicionalistas?La expresión “Tradición viva” viene de un texto del Vaticano II (Dei Verbum 12) la cual evoca una tradición evolutiva1. En la perspectiva modernista, el papel del magisterio no es el de conservar el depósito de la Revelación, sino el de asegurar la “comunión” eclesial (tanto en el espacio como en el tiempo). La fidelidad a la Tradición ya no es la fidelidad a un depósito transmitido desde los Apóstoles, sino a lo que el papa, aval de la unidad, dice hoy.

+ ¿Se encuentra esta nueva noción de “Tradición viva” en las enseñanzas de Benedicto XVI?La enseñanza de la “Tradición viva” es omnipresente en la enseñanza de Benedicto XVI. En una alocución del 26 de abril del 2006, por ejemplo, presenta a la Tradición como “la actualización permanente, en la fuerza del espíritu, de la comunión [eclesial] original”, y explica:La Tradición es la comunión de los fieles en torno a los pastores legítimos en el curso de la historia, una comunión que alimenta el Espíritu Santo asegurando la conexión entre la experiencia de la fe apostólica vivida en la comunidad original de los discípulos y la experiencia actual de Cristo en su Iglesia2.

+ ¿Qué se destaca en esta definición de la Tradición?Bajo el pretexto de subrayar el carácter vivo de la Tradición (“la Tradición es el río vivo que nos une a nuestros orígenes, el río vivo en el cual los orígenes son siempre vivos” dice el papa), se deja de lado el contenido esencial de esta Tradición: la verdad revelada, que es inmutable.

+ ¿Qué hay que responder a este nueva noción de la “Tradición viva”?Es suficiente responder junto a San Pablo:Pero aún cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os prediquen un Evangelio distinto del que nosotros os hemos anunciado, sea anatema. [Gal. 1,8]

■100.- ¿No ha sido posible continuar caminando con Roma?El sentido común indica –y la experiencia lo confirma- que actualmente es imposible vivir plenamente y defender la fe católica siendo aprobados por la Roma conciliar. Luego de las consagraciones episcopales de 1988, Roma concedió la celebración de la antigua liturgia a algunas comunidades, pero en contraparte tuvieron que reconocer la nueva misa como un rito plenamente legítimo y abstenerse de cualquier crítica al Vaticano II. Particularmente han tenido que aceptar (o por lo menos, no criticar) la libertad religiosa y el ecumenismo. Un silencio tal constituye, por sí mismo, una complicidad culpable.

Page 13: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

1.- Sobre esta noción de “Tradición viviente” en Dei Verbum, ver Le Sel de la terre 55, p. 29-33. (Los editores).2.- ORLF N° 18 (2 DE MAYO DEL 2006) P. 12.

+ ¿Cuáles son las comunidades que han obtenido la liturgia tradicional a cambio de su silencio sobre los errores del Vaticano II?Las comunidades que obtuvieron la liturgia tradicional a cambio de su silencio sobre los errores del concilio Vaticano II son en particular la Fraternidad San Pedro (originada de una escisión de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X en 1988), el Instituto Cristo Rey (fundado por el padre Wach en Gricigliano, cerca de Florencia), la abadía benedictina de Barroux (reunida desde 1988), la Fraternidad San Vicente Ferrer en Chéméré (la cual cambió bruscamente del sedevacantismo a la adhesión conciliar en el momento en que Monseñor Lefebvre negociaba con Roma en 1987), el Instituto Opus Mariae (del padre Wladimir), los dominicanos educadores de la rama de Pontcallec (fundada por el padre Berto) y el más reciente, la Fraternidad San Juan María Vianney de Campos, Brasil (dirigida por Monseñor Rifan, adherida desde el año 2002). Estas comunidades son designadas bajo el nombre global de “comunidades Ecclesia Dei”.

+ ¿Por qué todas estas comunidades llevan el nombre general de “comunidades Ecclesia Dei”?Estas comunidades llevan el nombre genérico de “comunidades Ecclesia Dei” porque la mayoría de ellas dependen de la comisión del mismo nombre, fundada en Roma luego de las consagraciones episcopales de 1988 para recuperar a los desertores de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X.

+ ¿Qué manifiesta el nombre “Ecclesia Dei”?Las palabras “Ecclesia Dei”constituyen el título del documento que excomulgó a Monseñor Lefebvre: se puede decir que todas estas comunidades fueron establecidas sobre ésta excomunión, beneficiándose así, según ellas dicen, del acto heroico de Monseñor Lefebvre el 30 de junio de 1988. Si el fundador de Ecône no hubiera anunciado (el 29 de mayo de 1987) y luego efectuado (el 30 de junio de 1988) estas consagraciones episcopales, la Roma conciliar no hubiera acordado nunca la liturgia tradicional en todas estas comunidades.

+ ¿Por qué la Roma conciliar está tan molesta por estas consagraciones episcopales?La Roma conciliar está muy molesta por estas consagraciones episcopales porque garantizan la supervivencia de la Tradición. Se puede pensar que la reacción tradicionalista se apagaría por sí misma si no hubiera obispo para ordenar sus sacerdotes. Monseñor Lefebvre, siendo ya anciano, no sería más que cuestión de tiempo –y la estrategia de Roma conciliar consistía en ganar ese tiempo. Las consagraciones de 1988 invirtió la balanza de fuerzas. Aunque hayan abandonado a Monseñor Lefebvre, las comunidades Ecclesia Dei lo han aprovechado. Roma les otorgó la liturgia tradicional para desligarlos de Monseñor Lefebvre.

Page 14: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Las comunidades Ecclesia Dei reconocen que deben su prosperidad a las consagraciones de 1988?No siendo toleradas más que en la medida en que son ostensiblemente separadas de él, las comunidades Ecclesia Dei evitan generalmente reconocer que se deben a Monseñor Lefebvre. Ciertos laicos tienen, sin embargo, una mayor libertad de palabra. En el 2006, el director de Remnant periódico del movimiento Ecclesia Dei en los Estados Unidos- reconoció públicamente que la Fraternidad Sacerdotal San Pío X era como el contrapeso que permitía a las comunidades Ecclesia Dei existir y desarrollarse. En consecuencia, lógicamente declaró no desear en absoluto un acuerdo entre la Roma conciliar y la Fraternidad San Pío X, porque este desplazamiento de contrapesos podría debilitar a todo el movimiento tradicionalista.

+ Todas estas consideraciones tácticas ¿no son demasiado humanas?Es inherente al Vaticano II el reemplazo de la valiente afirmación de la fe católica por la táctica, la diplomacia y el diálogo (los textos sobre la libertad religiosa y el ecumenismo son su más clara manifestación). En cambio, Monseñor Lefebvre siempre se ha conducido por consideraciones de fe. No procedió a las consagraciones episcopales de 1988 más que para continuar transmitiendo la fe y los sacramentos católicos. Conservando siempre esta misma perspectiva, se puede constatar que la fe del fundador de Ecône –que nunca quiso hundirse en las astucias humanas- resultó finalmente mucho más hábil que todas las maniobras de los diplomáticos del Vaticano.

+ ¿Las consagraciones episcopales de 1988 pueden entonces ser consideradas como una gran victoria de la Tradición católica?Sí, las consagraciones episcopales de 1988 constituyen una gran victoria de la Iglesia. Salvaron la misa tradicional. La progresión lenta pero real de la misa en el seno de la Iglesia es un fruto irrebatible.

+ Entonces, si la victoria se ha conseguido ¿Qué impide actualmente la reconciliación con las autoridades romanas?Las consagraciones de 1988 contribuyeron a salvar la Tradición católica no solamente asegurando la transmisión del sacramento del orden –y por lo tanto de la misa y los sacramentos tradicionales- sino también protegiendo de los errores conciliares a una pequeña parte del rebaño de la Iglesia.Ahora bien, estos errores conciliares continúan asolando la Iglesia y reinan en la misma Roma. Para continuar protegiéndola eficazmente, es necesario guardar la distancia con las autoridades romanas. La victoria definitiva todavía está por venir.

+ ¿No se podría continuar resistiendo a los errores conciliares sin estar distanciados de las autoridades legítimas de la Iglesia?En tiempos de epidemia, la prudencia más elemental exige separar estrictamente los enfermos de los sanos. Una cierta comunicación es indispensable (para curar a los enfermos), pero se limita lo más posible y se rodea de grandes precauciones. Sucede lo mismo en la situación actual: No se puede frecuentar de manera

Page 15: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

habitual a las autoridades conciliares sin exponerse a contraer sus errores. El ejemplo de las comunidades Ecclesia Dei es la prueba manifiesta.

+ ¿Los miembros de las comunidades Ecclesia Dei han admitido los errores conciliares o solamente guardan silencio respecto a ellos?Sin pretender juzgar su fuero interno ni las excepciones posibles, parece que la mayoría de los miembros de las comunidades Ecclesia Dei han terminado, desgraciadamente, por adherirse a los errores conciliares. Empezaron por un silencio que juzgaron prudente. Luego tuvieron que dar concesiones poco a poco. Fueron sometidos sin darse cuenta a la presión psicológica del liberalismo –tanto más eficaz cuando parece menos apremiante. Al fin, terminaron por prohibirse pensar de manera diferente a como hablan y actúan. (“A fuerza de no vivir como se piensa, dijo Paul Bourger, se termina por pensar como se vive”). En poco tiempo, se metieron enteros por el engranaje en el cual imprudentemente pusieron el dedo.

+ ¿Esta aceptación de los errores conciliares es común a todas las comunidades Ecclesia Dei?Sin duda existen matices, pero en términos generales, todas las comunidades Ecclesia Dei están adheridas a los errores conciliares. Desde su adhesión de julio de 1988, la abadía de Barroux había públicamente puesto como condición: “Que ninguna rectificación doctrinal o litúrgica sea exigida de nosotros, que ningún silencio sea impuesto a nuestra “predicación antimodernista1”. Ahora bien, desde el mes de octubre siguiente, un monje constataba: “Una cierta relativización de la crítica de Dignitaits humanae y de Asís2” en el seno de la abadía. De hecho, Le Barroux llegará incluso a tratar de justificar públicamente los errores del Vaticano II3. -La Fraternidad San Pedro que pretendía, al principio, continuar exactamente lo que hacía la Fraternidad Sacerdotal San Pío X (excepto las consagraciones episcopales) ha sufrido la misma suerte.

1.- “Fuego verde para el monasterio de Barroux. Declaración de dom Gérard”, Présent, 18 de agosto de 1988.2.- Carta del padre Joseph Vannier (ex sub-prior de Barroux) a dom Gérard, prior actual, 25 de octubre de 1988, Fideliter 67, enero-febrero de 1989, p.14.3.- Desde 1993, Barroux trata de justificar el nuevo Catecismo de la Iglesia católica (sobre esta mala justificación, ver Le Sel de la terre 9, p. 175-188); el padre Basile (de la misma abadía) se ocupa en justificar la libertad religiosa del Vaticano II en una tesis “monumental” de 2960 páginas (ver Le Sel de la terre 30, p. 202-207); reconoce que los otros autores que hasta aquí han tratado de conciliar Dignitatis humanae con la Tradición (el padre Lucien, el padre Harrison, el padre de Marguerie, el padre de Saint-Laumer, etc.) no habían tenido éxito, pero el piensa haber encontrado la solución. Durante algunos años, la tesis del padre Basile será presentada en los medios de Ecclesia Dei como la prueba de que es posible conciliar el Vaticano II con la Tradición. Desgraciadamente, otro monje de Barroux, el padre Jehan, publicó en el 2004 una memoria en derecho canónico probando que la tesis del padre Basile sufre de un vicio “fatal”: falsea radicalmente la enseñanza de santo Tomás sobre la noción de “Derecho” (ver Le Sel de la terre 56, p. 180-187). En lugar de predicar a Cristo Rey, los “juntados” se dedican a defender al Vaticano II en trabajos que se contradicen unos a otros y que no hacen mas que aumentar la confusión general.

Page 16: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

+ ¿Las comunidades Ecclesia Dei continúan firmes al menos en la liturgia?-Lejos de resistir firmemente, todas las comunidades Ecclesia Dei han más o menos aceptado la nueva liturgia a la cual evitan de atacar con decisión: Dom Gérard (abad de Barroux) tuvo que concelebrar la misa nueva con el papa (el 27 de abril de 1995). El padre Wach (superior del Instituto Cristo Rey) ya había hecho lo mismo (el 21 de diciembre de 19911). Monseñor Rifan también tuvo que concelebrar la nueva misa (8 de septiembre del 2004). La Fraternidad San Pedro debió aceptar el principio de la concelebración de la misa de los crismas (del Jueves Santo) con el obispo de la diócesis donde está establecida (reunión de Rocca di Papa, 8 al 12 de febrero del 20002). La Fraternidad San Vicente Ferrer es un poco más reservada: predica “solamente” la asistencia en hábito de coro y la comunión en la misa de los crismas del Jueves Santo3 (pero aquí ya existe participación litúrgica y por lo tanto, una aceptación de la nueva misa).

+ ¿En compensación de este compromiso, las comunidades Ecclesia Dei obtienen al menos vastas posibilidades de apostolado?-La situación es diversa dependiendo el país (y en Francia, según la diócesis), pero la mayoría de los obispos continúan muy restrictivos con respecto a las comunidades Ecclesia Dei . Incluso los que no son muy hostiles dudan admitirlos por temor a las reacciones del clero y de laicos “comprometidos”. Roma teme por su parte las reacciones de los obispos. La situación de las comunidades Ecclesia Dei sería de suma fragilidad sin el contrapeso de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X.

+ ¿Qué manifiesta, en definitiva, esta situación?La situación de las comunidades Ecclesia Dei son obligadas de abandonar poco a poco la doctrina tradicional y que, sin embargo, no son aceptadas mas que con muchas restricciones en las diferentes diócesis confirma la evidencia de que realmente existe el “estado de necesidad” invocado por Monseñor Lefebvre para justificar las consagraciones episcopales de 1988. Hoy en día, como entonces, es imposible para los que quieren defender la fe católica hasta el final colaborar con Roma. Pero esta situación no durará indefinidamente. Nuestro Señor lo ha prometido: Las puertas del infierno no prevalecerán contra ella (Mat.16, 18).

1.- Fotografía en Le Sel de la terre 21, p. 182.

Page 17: Catecismo católico de la crisis en la iglesia   p. matthias gaudron - x

2.- Sobre esta importante reunión de Rocca di Papa, ver el testimonio de Jonathan WHITE en Le Sel de la terre 41, p. 226-233.3.- Sedes sapientiae 68, p. 3-30. Ver sobre esta materia Le Sel de la terre 32, p.217-219.